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MODULO 1
3. SOCIOLOGÍA DE LA EVOLUCIÓN1
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La composición de este y los demás documentos, son la transcripción y adecuaciones de forma, tomado tanto de los
Módulos del maestro como de los CDs que contienen los audios grabados en los cursos que dictaba. Para esta parte inicial
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del módulo 1, sobre la Sociología de la Evolución, páginas 2 a 5, y lo correspondiente al primer tema: páginas 6-10. En
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ambas partes se combina o se hace una configuración con los apuntes de los audios de estos contenidos: introducción: del 1
al 4, y el tema 1 tratado en los audios del 5 al 21 -minuto 13- del CD No. 2.
Miradas desde el Ser / Materiales de trabajo personal. Nº 179. Luis Hernando Mutis Ibarra
INTRODUCCION
Está dirigido a todas aquellas personas que piensan, que este mundo puede llegar
a ser mejor de lo que ha sido hasta ahora; a los que saben, que todas las cosas se
pueden hacer mejor de lo que hasta ahora se han hecho; a los que están seguros de que
el ser humano puede cambiar, y llegar a convivir en paz y armonía; a los que han
comprendido que el amor es universal; a los que persisten en la búsqueda de la felicidad;
a los que guardan la esperanza de una nueva vida; a los que piensan que toda situación
o estado de cosas siempre es susceptible de mejorarse; en fin, a todos aquellos que
siempre se han preguntado:
¿Por qué la ignorancia? ¿Por qué el odio? ¿Por qué las enfermedades?
¿Por qué la esclavitud? ¿Por qué la envidia? ¿Por qué las guerras?
¿Por qué la injusticia? ¿Por qué la maldad? ¿Por qué la desarmonía?
¿Por qué ricos y pobres? ¿Por qué la muerte? ¿Por qué el sufrimiento?
El estudio y comprensión del porqué de las cosas que existen y suceden, nos
puede llevar al reconocimiento de las leyes que permiten crear un futuro mejor para toda
la humanidad, y en especial, para todas aquellas personas que actualmente desean hacer
un cambio, para entrar en los verdaderos cauces de la paz, la armonía y la felicidad, a
través de comprender y trabajar con el principio de Evolución de la Conciencia.
Para sentar las bases de una nueva civilización, de mayor nivel de satisfacción
para todas las personas, es necesario comenzar por armonizarnos nosotros mismos, para
lo cual, es indispensable estudiar y practicar las leyes y principios que conducen a la
armonía, tomando en cuenta, que solamente por medio de la práctica constante, y
desechando las teorías y conceptos que están equivocados, es como realmente
llegaremos a la sabiduría, y así, podremos desarrollar la paz y la armonía directamente
sobre el terreno, con la enseñanza del diario vivir, puesto que, la vida es la mejor
escuela y la naturaleza la mejor maestra.
Las siguientes frases nos pueden ayudar a comprender mejor la finalidad de este
módulo:
¨ Quien vive, respira.
¨ Quien lee, aprende.
¨ Quien actúa, comprende.
¨ Quien practica, sabe.
¨ La perfección es Dios y la Naturaleza.
¨ La Naturaleza es la manifestación de Dios.
¨ El ser humano es la expresión de Dios.
¨ Quien comprende la Naturaleza, es un habitante armónico.
¨ Quien comprende al Ser Humano, es un ser evolucionado.
¨ Quien comprende a Dios, se diviniza.
De las anteriores frases se desprende, que nuestro cuerpo físico, como creación de
Dios, regido por la ley de la naturaleza, es perfecto, y además, indispensable para poder
vivir las experiencias que llevan a la comprensión mental, de la cual, se nutre la
Conciencia Permanente. El trabajo del ser humano, es un trabajo interno, para lograr
finalmente, comprender e identificarse con la perfección de la creación, y esto, sólo es
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posible a través del vivir, del hacer, del experimentar y del practicar diariamente en los
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sufrimiento. Mientras nos empeñamos en que no podemos hacer un cambio interno y que
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no podemos dejar de sufrir, así seguirá sucediendo; pero cuando comprendemos que el
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problema del sufrimiento no estaba fuera de nosotros, que no es lo que pasa fuera en el
mundo, sino nuestra experiencia interior frente al mundo, ahí ya podemos modificar eso.
A una persona que no está lista para dejar de sufrir no le llama para nada la atención
que le inviten a un proceso de desarrollo espiritual, lo rechazará totalmente.
Magia es lo mismo que Maestro y maestría lo mismo que escuela de magia. La
magia es aquella que puede utilizar una persona con una sabiduría superior para hacer
transformaciones y crear cosas que normalmente las otras personas no pueden hacer,
pero no es ningún ilusionismo, es algo real de las facultades del ser humano, que están
latentes y es como si despertaran.
En este proceso, que llamamos Escuela de Magia del amor, estamos trabajando la
Maestría humana en sabiduría y es la última etapa de evolución de la conciencia dentro
de la experiencia de las formas en el cuerpo humano. De eso se trata esta Escuela de
magia, del desarrollo espiritual, de cómo aprovechar la experiencia presente de cada uno
de nosotros para acelerar su evolución hacia Dios y tener una vida de mejor satisfacción
eliminando el sufrimiento y las limitaciones de la personalidad.
humano
vida a una capacidad de
aprovechar (valorar y disfrutar)
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lo que la vida enseña. No se
puede violar.
no intenta evitar que otros sufran, a menos que estén buscando cómo salir de aquello,
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porque entonces entorpece el proceso. No hay nada bueno ni malo, se trata de
comprender que cada uno hace su función2. No hay nada que discutir.
Postulados de la ley de la naturaleza:
Los postulados de las leyes son los principios que nos permiten reconocer su
existencia. Las leyes de la naturaleza tienen como principal función, generar y mantener
en perfecto estado de funcionamiento, todo lo relacionado con la materia y los
organismos vivos. Se mantiene en equilibrio y se renueva constantemente en sus tres
reinos principales: Vegetal, mineral y animal.
Es un proceso que nos lleva a comprender la existencia de las leyes de la
naturaleza: Primero descubrimos que podemos destruir, contaminar, deteriorar; después
descubrimos que podemos reparar lo que destruimos, y por último descubrimos que
tenemos la capacidad de mantener el equilibrio perfecto.
Las consecuencias que se derivan de violar las leyes de la naturaleza, cuyos
resultados se aprecian principalmente en el mundo físico, con las siguientes
manifestaciones: Desnutrición, enfermedades, vicios, degeneración, miseria, hambre,
taras físicas y mentales, malformaciones físicas, desequilibrio ecológico, erosión, plagas,
acortamiento de la longevidad, etc. Lo fundamental es aprender a obedecer la ley de la
naturaleza.
- Todo lo que es complementario se atrae. Dentro de la misma especie, lo
masculino se atrae con lo femenino porque son complementarios en la creación. Cuando
sentimos atracción por una persona del sexo opuesto (y es mutua) es porque esa
persona es complementaria genéticamente con nosotros para la procreación armónica y
esto es instintivo. Aquí hacemos la primera violación porque empezamos a mezclarnos
con personas, que no son complementarias, para procrear y no hacemos caso a la pura
atracción física y nos dejamos llevar por las necesidades económicas, sociales, políticas,
etc. Empieza el proceso de la degradación de la estructura genética. La compatibilidad
genética indica una atracción mutua fuerte y esto es instintivo. En la naturaleza no hay
parejas, la pareja pertenece a la ley de la correspondencia.
- Todo ser viviente requiere del alimento específico para su especie.
Cualquier ser viviente que se salga de su alimento específico, va a enfermar y va a
deteriorar su estructura genética. Los animales carroñeros si comen carne fresca, se
enferman; ellos necesitan carne que esté en descomposición. A partir de la violación de
las leyes, se va degenerando la condición estructural de la genética y llegamos a los
estados de debilitamiento del sistema inmunológico y acortamiento de la longevidad;
para la ley de evolución esto es necesario y perfecto, pero para la ley de la naturaleza es
una total violación y tiende a destruir y a eliminar a los enfermos. “Dios siempre
perdona, el hombre algunas veces, pero la naturaleza nunca”.
Por lo común, nunca llegaríamos a descubrir que hay unas leyes que rigen la salud
y el cuerpo físico, a menos que nos saliéramos de ellas, entonces enfermamos y ahí -si
somos conscientes de ello- sabremos que la ley existe.
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Para dar un ejemplo, en cuanto a que todo en el Universo tiene su función, por lo que no hay que invalidar nada ni a nadie
le invito a mirar estas referencias sobre la función de los insectos, pues nada es inútil: videos claves: “Microcosmos”, de
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Las leyes de la armonía son las que permiten vivir en equilibrio, adaptándonos
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Esto es un ejemplo, de que, aunque no haya secuencia lógica, los resultados son
armónicos, positivos. De ahí que, muchas veces, aunque los resultados no creemos que
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sean lógicos, está más allá de la lógica mental. La lógica está para entender, más, sin
embargo, la vida no es lógica. Así, la armonía intermedie en el proceso de equilibrio.
A veces no nos parece lógico ceder ante una circunstancia, pero eso es lo que
produce la armonía. Si nos dicen que somos unos brutos y nosotros, en lugar de
defendernos, decimos “perdón, no quise equivocarme”, esa no es una respuesta lógica
pero sí produce armonía.
La ley de la naturaleza no admite ningún tipo de deficiencia, ni de debilidad, ni
enfermedad… no admite nada que se salga de la perfección porque inmediatamente lo
destruye. ¿Entonces porqué existen los enfermos? Porque existen las leyes superiores,
como la ley de la armonía y la ley de evolución.
Estamos buscando un aprendizaje, pero no una destrucción, pero si la fuerza que
genera el aprendizaje es demasiado grande, es decir, si llega a ser más grande que lo que
la persona sometida al aprendizaje pudiera resistir, entonces se produce destrucción, en
lugar de aprendizaje. La ley de la armonía es la que dice, por ejemplo: “Haga presión,
pero no tanta”, “si, caliéntelo, pero no demasiado”, “si, póngale un reto, pero no más del
que pueda manejar”. La ley de la armonía intermedia en la búsqueda del equilibrio.
La armonía se da en el momento en que hacemos una transformación (que nos
viene desde la ley del amor), que nos lleva al nivel humano y entonces entramos en
armonía con lo humano y con lo natural.
Podemos anular (o neutralizar) una fuerza oponiéndole una fuerza equivalente:
Las dos fuerzas son iguales y quedan anuladas. O podemos anular una fuerza si no le
ponemos ninguna resistencia; no hay forma de medirla si no hay resistencia. Desde el
amor entramos en armonía cuando hacemos cero resistencia y todo queda en equilibrio.
Pero desde ignorancia, entramos en armonía cuando ponemos fuerzas equivalentes, pero
entonces hay una tensión que mantiene el equilibrio y en el momento en que la tensión
baje de algún lado, esto entra en desarmonía.
La ley de AMOR no le hace resistencia a nada ni a nadie. Es la ley de origen del
universo. Respetar la ley de la naturaleza significa respetar todos los reinos.
Postulados de la ley de armonía:
- Todo lo que se emite, acciona, reacciona y vuelve. Si emitimos agresión,
descalificación, rencores, etc., vuelve a nosotros algo de las mismas características y eso
nos produce una armonía, pero negativa. Nos vuelve la misma característica de lo que
decimos, hacemos o pensamos. Si somos violentos, vuelve violencia, si somos pacíficos,
vuelve paz, si respetamos, vuelve respeto. Filosóficamente se ha expresado como: No
hagas a otro lo que no quieres para ti.
- Todo lo que se ataca se defiende. independientemente de la razón por la
cual nosotros ataquemos, genera barreras y escudos que dañan las relaciones, pero
producirá un equilibrio de fuerzas. En la ciudad hay armonía cuando hay suficientes
policías para evitar la delincuencia.
- Todo lo que agrada se acepta. Se utiliza en la publicidad, que a veces nos
presentan cosas que no son muy saludables para la naturaleza, de una manera muy
agradable, lo que hace que se vuelvan atractivas para nosotros y las aceptamos. Al
contrario, muchas veces, cosas que pueden ser valores importantes, los presentamos de
maneras agresivas o impositivas, entonces lo que se ataca se defiende y es rechazado.
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hacer esto o aquello, entonces, “te va a doler para que aprendas a no hacerlo”. Y lo que
aprende no es a no hacerlo, sino que lo que aprende es a esconderse, a mentir y a huir.
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culparnos por sus propias experiencias. Nuestros errores necesitamos asumirlos, como
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parte de nuestro aprendizaje, pero jamás nos culpemos de ellos; aprendamos lo que nos
enseñan.
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primero tiene que cesar la lucha interna y para ello necesitamos haber aceptado que todo
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valorar lo que tenemos. Cada vez que nos quejamos de lo que tenemos o de lo que
sucede, es evidente que no estamos valorándolo y por eso nos lo quitan porque parece
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que no lo queremos.
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Ejemplo del edificio de 30 plantas (como si fuera el Universo) en el que somos las
personas que puede elegir vivir en el sótano o pasar a vivir en otra planta más
satisfactoria, sin salirnos del edificio.
¿Cómo obtener un resultado voluntariamente (no automáticos)? Necesitamos
aprender que: El Universo tiene un orden, ese orden está regido por leyes
matemáticamente exactas, inexorables e inmutables, que esas leyes se pueden
reconocer en la realidad de nuestra cotidianidad, decidir obedecer esas leyes para
liberarse de las limitaciones que se originan en violarlas. Así nos hacemos
correspondientes con resultados satisfactorios, desarrollando sabiduría.
El desarrollo espiritual se hace a través de acciones, no de oraciones. A través de
oraciones sólo se hace acumulación de energía y es conveniente acumular los dos
(acciones y oraciones).
Entonces, valorar está dirigido a lo que tenemos a nuestra disposición, a lo que
estamos usando. Y, agradecer va dirigido hacia el pasado, agradecer lo que aprendimos;
aprendimos de las dificultades; de las situaciones que no ofrecen ningún reto (ni físico, ni
mental, ni espiritual) no aprendemos nada.
Disfrutar de lo que ya sabemos hacer no tiene nada que ver con aprender, sino
más bien tiene que ver con enseñar. Pero cualquier cosa que no sabemos hacer,
necesitamos aprenderla enfrentándonos a una dificultad. Nadie aprendió nada sin
afrontar dificultades. Por lo tanto, si agradecemos lo que aprendimos, también
agradecemos a las personas y las circunstancias involucradas dentro del aprendizaje, que
es casualmente a las personas que odiamos.
El propósito de Dios es el propósito de sabiduría: Que sus hijos se llenen de amor;
pero para que puedan hacer eso tendrán que enfrentar el reto de la ley. Y el reto de la
ley es que nos enfrentemos a todas las cosas que no queremos, porque el universo no
funciona como nosotros queremos, jamás, ni siquiera la vida de ningún ser humano por
simple que sea, funciona como nosotros queremos, todo funciona como es, no como
nosotros queremos. Y si no nos adaptamos a lo que es y fluimos con lo que es, no
solamente somos ineficientes, sino que nuestro conflicto cada día es más grande.
Todo lo que tenemos a nuestra disposición es el resultado exacto del desarrollo
interno para aprovechar lo que está dispuesto en su totalidad y como eso es tan valioso,
lo que podemos hacer es disfrutarlo intensamente, aprovecharlo profundamente, eso es
lo que podemos hacer con lo que tenemos.
- Sólo sucede lo que tiene que suceder. Y es imposible que suceda algo que
no tiene que suceder. Esto nos libera de todos los miedos. Esto va para lo global y para
lo individual. No hay nadie que le pueda suceder nada a menos que le corresponda y
todos los sucesos que afecten la vida de cualquier ser humano, son sucesos que
matemáticamente corresponden con la experiencia de quien los vive. Por eso no existe la
buena y la mala suerte.
Para acercarnos a la paz interior podemos decir que: Si nuestros pensamientos son
de amor, si aceptamos la realidad, si aceptamos el orden del Universo, si no invalidamos
a nada ni a nadie, posiblemente nos correspondan experiencias muy pacíficas, porque las
generamos de esa manera; pero si vivimos llenos de resentimientos, de odio, de deseo
de venganza o de hacer justicia, posiblemente las experiencias que nos correspondan
puedan ser parecidas a eso. La correspondencia la construye cada persona y por eso hay
que aprender a pensar y a actuar con sabiduría.
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Si comprendemos esto nos quitamos todos los miedos porque a nadie le puede
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suceder nada que no le corresponda. Cuando aprendemos a manejar esta ley, podemos
cambiar nuestra propia correspondencia: Si nos estaba correspondiendo una situación
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muy desagradable, nosotros podemos cambiarla. Podemos evitar eventos futuros
desagradables si dejamos de hacernos correspondientes con ellos, y lo logramos con el
desarrollo espiritual. El ego es el que nos hace correspondientes con toda clase de
dificultades: Mientras menos ego tengamos, menos correspondencia de sufrimiento
vamos a tener. Un maestro no tiene ego, ya lo disolvió todo, por eso tiene una
experiencia total de paz y armonía, porque no genera correspondencias negativas,
porque el maestro ya no tiene nada que aprender de eso. Hay una parte en la filosofía
que dice: “Lo que más tememos caerá sobre nosotros” y es precisamente este punto de
la ley de correspondencia. El que tiene miedo es el ego, la sabiduría y la comprensión no
tienen miedo porque comprenden de qué se trata la vida. Cuando no sabemos de qué se
trata la vida nos llenamos de miedo y esos miedos nos hacen correspondientes con
experiencias para salir de ellos, para comprender de qué se trata.
- Sólo se da o se tiene lo necesario. Es imposible conseguir algo que no
necesitemos. Todo lo que conseguimos es porque lo necesitamos y es imposible perder
algo que necesitemos, si perdemos algo es porque dejamos de necesitarlo. El secreto de
vivir más en paz se llama valoración. ¿En qué momento una persona deja de necesitar
algo que tiene? cuando comienza a quejarse de lo que tiene. ¿De qué se puede quejar
una persona? de algo que, según él, no le sirve, aunque no sea cierto; entonces vienen
los amigos de lo ajeno y se lo quitan y entonces se queja más; con lo cual, la próxima
vez, lo que aprendemos es a valorar lo que tenemos; claro, eso si lo percibimos.
Si venimos como propósito de evolución a aprender a aceptar ciertas cosas, puede
ser que tengamos taras de nacimiento, que tengamos muchos conflictos de relaciones,
que vivamos en lugares de mucha violencia o por el contrario que vivamos en otras
partes donde puede haber mayor satisfacción, pero hay otras dificultades por aprender.
Siempre tenemos lo necesario para nuestra experiencia.
Por ahora, esto, en nuestra mente entra en conflicto con algunos conceptos
aprendidos, pero poco a poco vamos a ir comprendiendo la realidad de la Ley de
Correspondencia y dejaremos de sufrir, de culpar, de somatizar enfermedades y de
agredir a los demás.
Si comprendemos estos postulados de la ley de correspondencia, empezamos a
liberarnos intensamente de muchas cosas. No se nos olvide que las demás personas,
cuando no conocen esta información, no pueden entenderla; entonces, empecemos a
tener paz y a ser felices, pero tengamos cuidado, que no se note mucho, porque las
demás personas entran en conflicto cuando no entienden que podamos estar en paz
frente a una situación que para ellos sea dramática; no pueden entender eso, aún no
saben cómo. Entonces a veces tenemos que decirles: “Estoy sufriendo mucho, mi
procesión va por dentro”. No son mentiras, simplemente son técnicas de maestría porque
tienen un propósito de no causar impactos negativos en las demás personas.
La función principal de las leyes de la evolución, al actuar sobre las tres leyes
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universo todo responde a un propósito perfecto y para el universo no hay error; para
nosotros si lo hay. El universo lo aprovecha todo y en él caben: Los violentos, los
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de cada ser humano como resultado de su propia experiencia. Por eso nosotros nos
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equivocamos tan fácilmente cuando, queremos evitar el sufrimiento a las demás
personas, cuando en realidad lo que hacemos es evitarles vivir la experiencia, el
aprendizaje, el descubrimiento de la verdad. La experiencia es indispensable y, además,
es inevitable. Necesitamos mucha claridad para no dejar de hacer lo que nos corresponde
hacer y para no hacer lo que no nos corresponde hacer. Si no tenemos una comprensión
es fácil confundirse. No tenemos que tratar de sacar de la experiencia a otra persona,
con nuestros sentimientos de bondad, porque esto es falta de sabiduría y además la ley
de evolución no lo permite, sino que tenemos que mostrarle cómo aprovechar la
experiencia que la vida le ha puesto ahí. Usualmente, nosotros intentamos evitar la
experiencia, para evitarle el sufrimiento, pero esto es lo mismo que evitarle el
aprendizaje. Lo que sí permite la ley es que le enseñemos a las personas cómo
aprovechar la experiencia, siempre que estén preparados para recibir la enseñanza.
Jamás nos neguemos a sentir lo que sentimos porque tenemos capacidad de
percepción, a través de los cinco sentidos y no es sano anular esa capacidad. El
problema del ser humano no está en lo que siente, sino en lo que hace con lo que siente.
Ejemplo de percepción: Podemos respetar a los demás, tener un nivel alto de paz. Si
estamos delante de una persona agresiva, percibimos que está en desarmonía y que nos
produce una sensación desagradable, pero decidimos no alterar nuestra paz porque no
culpamos al otro por ser así. Aprovechamos la experiencia como oportunidad para saber
que somos los dueños de nosotros mismos y no lo que ocurre fuera de nosotros.
La sensibilidad se puede disminuir después de haber aprendido lo que ella nos
enseña. Si nos ofendemos fácilmente con lo que los demás hacen, el primer ejercicio que
necesitamos hacer es comprender que los demás no tienen la culpa de lo que nosotros
sentimos. Una vez que lo comprendemos entonces podemos hacer el ejercicio
siguiente: Buscar y aceptar la información apropiada, con ella hacemos nuestra
reprogramación mental, y la aplicamos constantemente con el ejercicio de enfrentarnos
al evento ante el cual nos ofendemos, hasta que desaparezca la sensibilidad.
Nuestra ignorancia intenta evitar la experiencia. La sabiduría no intenta evitar las
experiencias, hace otra cosa: Busca cómo aprovecharlas.
- Solo los opuestos inducen el desarrollo de la conciencia. Inicialmente los
opuestos son para nosotros confrontarlos; entonces, para inducir un desarrollo de
conciencia necesitamos tener una experiencia confrontante, porque nos permite
descubrir la ley.
Desarrollo de conciencia es el descubrimiento de la ley, la comprensión de la ley y
la decisión de obedecer la ley; estas tres cosas no pueden lograrse sino a través de
enfrentar los opuestos. A esta ley de los opuestos la llamamos la ley del flujo inverso, es
decir para medir la corriente del río tenemos que navegar en contra de ella, para medir
una fuerza tenemos necesidad de hacerle resistencia, para tener una experiencia
tenemos necesidad de salirnos del equilibrio. Por eso, la ley de evolución permite la
violencia, las guerras, la destrucción, los desastres naturales, las enfermedades, los
contrastes y todo aquello que confronta nuestros conceptos de personalidad, porque son
experiencias necesarias para el desarrollo de la conciencia humana y son el resultado de
la violación de otras leyes para poderlas descubrir.
Cuando queremos saber si tenemos paz en nuestro interior, hay una forma de
saberlo: Estar con personas que no tienen paz y que nos confrontan. Si nos alteramos
entonces significa que no tenemos la paz que creíamos. Sólo seremos pacíficos cuando
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tan dramáticas como las del primer nivel. En la medida en que la conciencia sigue
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creciendo, entonces llega la experiencia del tercer nivel, que es donde está ahora la
mayor parte de la humanidad. Sus conciencias, sus experiencias físicas tienen un
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contacto directo con las personas que están en el segundo nivel de evolución y con el
cuarto nivel de evolución. Esto ayuda a la transformación: Aceptando a los que están en
segundo nivel (aprendiendo a amarlos y servirlos), estando dispuesto a aprender de los
que están en el cuarto nivel.
Cada vez que la conciencia toma un cuerpo físico y desarrolla una nueva
personalidad, esa nueva personalidad va a ser matemáticamente correspondiente con la
necesidad de la conciencia en lo que le falte de desarrollo; el aprovechamiento de la
experiencia y la transformación interior, consiste en la habilidad del individuo para
transformar ese sistema de creencias. Al desarrollar esta habilidad, la conciencia se
desarrolla cada vez más deprisa ¿porqué? porque la comprensión no se hace en la
conciencia, la comprensión se hace en la personalidad. En la medida en que nosotros
vamos haciendo el ejercicio de cambiar los comportamientos que no dan resultados
satisfactorios para nuestra vida, estamos transformando el campo mental (desde la
sabiduría) y por lo tanto va aumentando la comprensión mental. El nutriente de la
conciencia es la comprensión que se desarrolla en la mente. La comprensión,
posteriormente, va a ser asimilada por la conciencia, lo cual permitirá el ascenso de un
nivel a otro nivel y nuevas experiencias en niveles cada vez superiores. Mientras no
hagamos una transformación de nuestro campo mental, no es posible ascender de un
piso a otro del edificio porque eso significaría que no hemos terminado de aprender lo
que ese piso nos enseña. En cuanto al universo, tiene una diferencia y una analogía. La
diferencia es que el universo no permite el paso de un nivel a otro hasta que no
completemos la experiencia al 100%; Para ello el universo nos da todo el tiempo que
necesitemos, (si necesito 100 años o mil, no hay problema) no hay límite; mientras que
en la estructura humana es al revés, nos ponen tiempos límites; nos ponen varios años
para primaria, luego secundaria, aunque no completemos la formación o no vaya a la
universidad.
No es el cuerpo lo que hay que transformar, sino la mente. La estructura del
campo mental es donde se procesa la experiencia del ser humano. El archivo mental es
temporal, mientras que el archivo de conciencia es permanente. El aprovechamiento de
la experiencia y la transformación interior, consiste en la habilidad del individuo para
transformar su sistema de creencias. La comprensión no se hace en la conciencia, la
comprensión se hace en la mente (en la personalidad). La comprensión, posteriormente,
va a ser asimilada por la conciencia, lo cual permitirá el ascenso de un nivel a otro y
nuevas experiencias en niveles cada vez superiores.
Mientras no hayamos completado un nivel en el Universo, no podemos ascender.
La única forma de completar un nivel es transformando el campo mental y el campo
mental lo transformamos con unas herramientas: 1º) Nueva información para
aprovechar la experiencia que vivimos y 2º) evaluación de resultados que nosotros
obtenemos. La evaluación de resultados para la transformación mental se hace a través
de siete puntos (3 internos y 4 externos): Los Internos: evaluamos nuestro nivel de
felicidad, nuestro nivel de paz interior y nuestra capacidad de servicio (amor al prójimo).
Los Externos: Evaluamos los resultados en nuestro nivel de: Relaciones humanas, salud,
recursos materiales y económicos, y adaptación al medio donde estamos. Cuando se
manejan los 3 internos, los 4 externos cambian inmediatamente.
Esto da un diagnóstico exacto de nosotros mismos. Sólo lo podemos hacer
nosotros mismos, no lo puede hacer ninguna otra persona por nosotros. Si los resultados
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hacemos en este caso? Necesitamos cambiar el esquema mental para obtener otros
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resultados. En ese momento en que decidimos cambiar el esquema mental, trabajamos
por la transformación correspondiente y ahí es donde tenemos la opción de acceder a
otro nivel superior. Vamos a aclararlo cómo se hace el ejercicio.
El primer nivel es de evaluación interna: Nuestra felicidad. ¿Qué es felicidad?
Felicidad es ausencia de sufrimientos. ¿Cómo hacemos para no sufrir ante la vida? Sólo
hay una forma de hacerlo: Necesitamos ACEPTAR todo lo que sucede y a todas las
personas como están. Donde tratemos de cambiar algo o a alguien, ya tenemos
sufrimiento porque no lo estamos aceptando. Hay una sola cosa por cambiar, y no está
fuera sino dentro de nosotros: Renunciemos a cambiar a las personas, renunciemos a
cambiar lo externo, cambiemos lo que pasa en nuestro interior, y así haremos la
transformación.
La segunda evaluación interna es nuestra paz interior. Si nos alteramos con
facilidad ante las circunstancias externas o lo que las personas hacen o dejan de hacer, si
este es el resultado, entonces está mostrando que todavía, no solamente no aceptamos a
las personas, sino que somos dependientes de ellas; es decir, que somos ofendibles,
afectables, no somos nosotros mismos, dependemos del comportamiento de los demás
para nuestros estados internos, no los manejamos, ellos nos manejan. Si esta es la
evaluación, entonces necesitamos hacer el ejercicio de la independencia espiritual: “Mi
paz y mi armonía es mía, no dependen de nada ni de nadie externo a mi y yo decido
mantener mi paz; a mi nadie me hace beneficio ni nadie me hace perjuicio de ninguna
naturaleza; soy yo el que hago eso por mi mismo y, de hoy en adelante, me voy a dar lo
mejor para mi, no me vuelvo a perjudicar a mi, me voy a beneficiar a mi; eso no lo hace
nadie, lo hago yo”.
La tercera evaluación interna es sobre nuestro servicio al prójimo. Si yo estoy
poniendo limitaciones a mi servicio, estoy luchando contra lo que hago, contra mi
profesión, contra el trabajo, contra el lugar donde estoy, me estoy negando a prestarle a
alguien un servicio de calidad, simplemente porque la persona no me cayó bien, estoy
limitando el servicio. Si esto me está pasando, el resultado me muestra que necesito
trabajar en potencializar esta parte interna.
Cuando se manejan los tres estados internos, los 4 externos -relaciones, salud,
recursos, adaptación- cambian inmediatamente. Entonces empezamos a observar que las
relaciones humanas empiezan a mejorar fundamentalmente, tenemos muchos menos
conflicto con la gente, mucha más armonía, más aceptación, mejores opciones. La salud
se estabiliza si le ponemos atención, cuando amamos nuestro cuerpo, cuando cuidamos
nuestra alimentación, cuando tenemos pensamientos puros, cuando descansamos bien.
Los resultados de recursos (los resultados económicos), se potencializan inmensamente.
Y cuando empezamos a disfrutar lo que hacemos, donde estamos: Nos estamos
adaptando al medio. Esta es la evaluación de resultados para la transformación interior,
para el acceso de un nivel a otro superior y ese es el reto de cada uno de nosotros.
La tercera virtud (del servicio) es un proceso que corresponde al quinto nivel de
conciencia, pero no se aprende en este nivel, se aprende en el tercero. Cuando la
persona ha desarrollado las dos primeras virtudes, puede ir al quinto nivel, porque una
persona llena de felicidad, llena de paz, es un ser de convivencia armónica, pacífica y
respetuosa. Esto no significa que para él los demás son lo suficientemente importantes,
como para acercarse a aquellos que tienen muchas dificultades y son poco pacíficos, para
servirles si lo necesitan, sino que mas bien él quisiera apartarse. Entonces el servicio, es
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cuando yo no quiero huir de las personas, sino que estoy dispuesto a servirles y eso es lo
que permite el paso al sexto nivel.
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Es común que se malinterprete a las personas que son felices y están en paz, por
eso el consejo es: “Sé feliz, vive en paz, ten éxito, pero por favor, que no se note”,
porque las personas, como no tienen información suficiente para entender lo que
significa el estado de paz, el estado de felicidad y la trascendencia y no lo van a
comprender y van a decir: “No tienes personalidad, no reaccionas, te volviste pasivo,
bobo, no te importa nada…”
- Solo se es el resultado de uno mismo. No existe ninguna posibilidad de que
otra persona pueda evolucionar por nosotros. Nadie nos perjudica y nadie nos beneficia;
eso es lo que hacemos con nosotros y necesitamos aprender a hacerlo mejor.
No podemos culpar a nadie por el resultado que nosotros tengamos, puesto que,
somos el resultado de nosotros mismos, de nuestros pensamientos, de nuestras
actitudes, de nuestros comportamientos, de nuestro destino que nosotros mismos
diseñamos, y no somos nada diferentes a lo que nosotros mismos hacemos con nosotros.
Por eso la auto transformación es un principio de la ley de evolución: Cuando tratamos
de transformar a otro en lugar de transformarnos a sí mismos, vamos en contra de la
Ley de Correspondencia y el resultado es que nos cae encima el peso de la Ley de
Evolución. A esto lo llamamos el principio del espejo y el principio de la fruta.
El principio del espejo. Es una analogía para entender esta ley: Por la mañana nos
miramos en el espejo y vemos una imagen despeinada y desarreglada. Para solucionar
esa situación, afeito el espejo, baño el espejo y lo
peino, con lo cual no hice nada. Este principio de “solo
somos es el resultado de sí mismos” significa que
cuando nos sentimos mal con algo que hacen los
demás, tratamos de modificar nuestro malestar
cambiando al otro, es igual que tratar de cambiar al
espejo, pero el problema del malestar no está en el
otro sino en nosotros, en nuestro interior. No podemos
cambiar a los demás por lo que estamos sintiendo,
necesitamos cambiarnos y transformarnos a sí mismos
y así es como ascendemos en niveles de evolución de conciencia.
El principio de la fruta: En la mañana para desayunar, tomamos una hermosa
papaya, pero cuando vamos a partirla para consumirla vemos que tiene una parte
dañada, entonces cortamos el pedazo dañado y nos lo
comemos, y como nos supo tan mal cogemos toda la
papaya y la tiramos como desperdicio. Lo lógico sería
lo contrario: Cortar el pedazo dañado, tirarlo y
consumir el resto de la fruta que esté en buenas
condiciones. Este principio es para comprender
correspondencia, armonía y evolución, porque eso es
lo que prácticamente hacemos con los seres humanos.
Vemos a una persona que está llena de cualidades,
virtudes, que es una esencia divina de Dios, pero le
vemos un defecto en su personalidad y es en lo único
que nos enfocamos de él, nos relacionamos y nos
comemos el pedazo dañado y como nos sabe horrible, se asume que el resto de la
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persona no nos sirve para nada y la “desechamos”. Así, siempre vamos a estar en esa
experiencia porque el problema es nuestro y siempre estamos tratando de corregir en
Página
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otro el problema que es nuestro, ese es el ego y lo que la ley de evolución busca
destruir. Si me libero del ego encontramos el amor.
No existe ninguna posibilidad de que otra persona pueda evolucionar por nosotros.
Una persona no puede evolucionar por otro, no puede aprender por otro, no puede vivir
experiencias por otro. Hay personas que creen que otras personas le pueden quitar el
karma (las experiencias por vivir para aprender lo que falta en la conciencia = el destino).
La persona cree algo que no es cierto: Creen que alguien puede aprender por él lo que a
él le falta. Por eso los maestros de sabiduría dicen: Usted solamente es el resultado de
usted mismo; no se le vaya a ocurrir culpar a nadie porque usted solo es el resultado de
lo que usted ha ido construyendo y puede mejorarlo. No se le vaya a ocurrir intentar que
alguien haga la evolución por usted, porque eso no será posible, porque sería lo mismo
que intentar que alguien estudie por otro, coma por otro o haga ejercicio por otro, y esto
no es posible hacerlo. Lo que sí puede hacerse es enseñarle a la persona a comer, a
estudiar o enseñarle cómo hacer ejercicio, pero hacerlo por él no es posible. Cada uno de
nosotros somos el resultado de nosotros mismos y no hay porqué culpar ni juzgar a
nadie ni a ninguna circunstancia, gobierno, persona o divinidad, porque nosotros hemos
construido nuestra propia experiencia; igual podremos reconstruirla para que sea más
satisfactoria, pero eso es lo que cada uno de nosotros hace consigo mismo. Vamos a
recordar que nadie nos perjudica y nadie nos beneficia; eso es lo que yo hago conmigo y
necesito aprender a hacerlo mejor.
La conciencia permanente solamente se desarrolla a través de la experiencia en la
personalidad. Cuando no hay personalidad por alguna razón, la conciencia no puede
desarrollarse y está en un estado de “suspensión”, está estática hasta que vuelva a
haber una nueva personalidad o se recupere la que tenga. Entonces, en un estado de
coma, una persona no está haciendo evolución alguna, pero las personas a su alrededor
sí lo están haciendo, porque ellos sí que están muy confrontados.
La personalidad se llena de creencias (lo llamamos información desorganizada).
Cuando yo aplico mis creencias en mi vida cotidiana, dan un resultado. El resultado
obtenido a través de una creencia falsa es un resultado insatisfactorio para el ser
humano. En la medida en que hacemos ese ejercicio en la personalidad, comparándolo
con resultados de nuestra vida, entonces en la mente empieza a haber un cambio, que
se llama la transmutación o la transformación mental. Esta transformación interna va
cambiando esta estructura del sistema de creencias por otra estructura mental diferente,
que es la estructura que llamamos de comprensión o sabiduría, que es de la misma
estructura de la conciencia, entonces va generando en el interior del individuo una
ampliación de su comprensión, de la verdad. La comprensión que la persona desarrolla,
cuando la utiliza para sus comportamientos y para sus relaciones, da otro resultado que
es 100% satisfactorio. Esto le muestran a la persona dos cosas: 1) Que ya sabe cómo
obtener un resultado satisfactorio de una forma voluntaria y 2) que esa información, es
la información de la verdad, porque la verdad siempre va a conducir a un resultado
satisfactorio, interna y externamente en el individuo.
Ese ejercicio del procesamiento de información en el campo mental, a través de la
experiencia física, es donde se desarrolla el nutriente para la conciencia, porque la
comprensión de la verdad es exactamente lo que la conciencia va a asimilar; de esa
manera la conciencia se va desarrollando, a través de las experiencias de personalidad.
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y son las tareas de aprendizaje para nuestra conciencia y precisamente las que
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necesitamos aprender y comprender para que dejen de ser repetitivas. Nadie se enfrenta
a ningún tipo de situación a menos que le corresponda aprender algo de ella. Una vez
aprendemos lo que algo nos enseña no vuelve a repetirse en nuestra vida. Esto nos
ayuda a quitarnos ese miedo a que se vuelvan a repetir situaciones difíciles. La evolución
nunca va hacia atrás, siempre va hacia delante. La conciencia regresará a una forma
física igual o mejor. Si nos apartamos de una situación porque no queremos volver a
vivirla y huimos de ella, sólo la estamos aplazando y volveremos a vivirla para aprender
lo que nos corresponda.
Necesitamos aprender a vivir y saber que nuestros problemas son internos, no
externos. Vinimos a adquirir tres virtudes (que son las características de los maestros):
Vinimos a aprender a ser felices por nosotros mismos sin depender de nada ni de nadie
(ausencia total de sufrimiento), vinimos a lograr una paz interna invulnerable y vinimos a
aprender el principio de amor, que es el principio del servicio y de amor incondicional.
Toda dificultad nos enseña esto, porque ante cualquier dificultad ¿cuál es la
sensación interna de un ser humano cualquiera?: 1º El sufrimiento y la resistencia, 2º
pérdida de la paz interior y 3º querer huir de allí, quererse quitar la situación de encima.
Y precisamente, es exactamente lo contrario lo que hay que aprender. Entonces, cuando
estemos frente a un problema, vamos a preguntarnos, observando nuestro interior:
¿Perdí la paz ante esto? ¿estoy sufriendo por esta situación? ¿intento modificar la
situación? Si la respuesta es afirmativa, eso es lo que necesitamos aprender. ¿Y cuando
va a desaparecer el problema de nuestra vida? pues el día que aprendamos estas tres
cosas: El día que ya no perdamos la paz, el día que no suframos por eso, el día que no
queramos huir de donde estamos, el problema habrá desaparecido de nuestra vida
mágicamente.
Las dificultades son oportunidades de aprender. Aprender a vivir, a relacionarnos,
aprovechar todo lo que existe en el universo. Este es el propósito amoroso de la ley de
evolución. Los procesos en los que se desenvuelven son para nosotros un gran reto que
es el que nos dará el desarrollo espiritual. Se trata de: 1º Reconocerlo, 2º aprovecharlo y
3º disfrutarlo. El sufrimiento no es útil para cambiar nada.
Todas las situaciones humanas que tienen dificultad o conflicto, nos están
mostrando lo que aún no sabemos cómo manejar y por lo tanto se convierten en la
oportunidad de aprender. Si no reconocemos lo que tenemos que aprender es lo que nos
hace ineficientes.
Estamos dentro de un proceso de evolución y aprendizaje. El proceso no es un
problema. El proceso tiene un inicio y una terminación, nunca tendrán una solución. El
problema es cuando una persona se hace ineficiente dentro del proceso y eso si tiene
solución.
El problema de ineficiencia se produce cuando, en lugar de aprovechar el proceso,
luchamos contra el proceso mismo, tratando de modificarlo; por ejemplo, cuando yo
quiero cambiar las estructuras sociales, cuando quiero cambiar a las demás personas,
cuando quiero reorganizar la pedagogía del universo sin saber de qué se trata; esa lucha
me hace ineficiente dentro del proceso, con un desgaste energético impresionante. Pero
esta lucha, sin embargo, es necesaria para que descubramos que luchar contra el orden
del Universo es inútil porque las leyes son inmutables y no habrá posibilidad de
cambiarlas. La única posibilidad es reconocerlas y adaptarnos a ellas. Una vez que lo
reconocemos tenemos una liberación interior y empezamos a aprovechar el proceso
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como tal.
La pregunta entonces, ante una dificultad o conflicto, sería: ¿Qué tengo yo que
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tenemos conflicto alguno. Valoramos la salud cuando la perdemos, valoramos las cosas
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cuando no están, valoramos la armonía cuando existe la guerra. Esos desequilibrios son
los que nos permiten valorar y aprender cómo regresar a ese equilibrio y esa es la
necesidad de la evolución.
Detrás de todo proceso, por dramático que nos parezca, está un propósito de amor
del Padre como parte de lo que llamamos la pedagogía del Universo, todo es perfecto. Un
Maestro de sabiduría diría esta frase con total comprensión: “Yo soy creación perfecta de
Dios y todo lo que sucede a mi alrededor tiene un propósito perfecto de amor, por lo
tanto, yo soy feliz, lleno de paz, y soy capaz de respetar toda experiencia a mi alrededor
sin interferir con ella”.
por compromiso de amor, por confianza, ya no estamos bajo un control, ni bajo presión,
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ni bajo una confrontación. Adquirimos el compromiso con un desarrollo espiritual. Aquí la
ley de evolución no tiene nada más que hacer con nosotros, ya cumplió su función.
Todos los procesos que vivimos dentro del triángulo inferior del infierno, son
confrontantes, para poder descubrir la ley.
En la Ley de evolución, es la ley del cambio interior, la que permite, a través de la
pedagogía del universo, que cada uno de nosotros haga el cambio interno que lo lleva, de
una lucha contra la vida a una capacidad de aprovechar lo que la vida enseña. Mientras
luchamos contra cualquier cosa somos seres ineficientes e ignorantes, pero eso es parte
del proceso indispensable para el descubrimiento de la ley.
Aquel que disfruta intensamente de lo que hace y de lo que tiene y aprovecha todo
lo que existe, es inconmensurablemente rico. Valoro todo lo que tengo, disfruto todo lo
que hago y aprovecho todo lo que existe: Esto requiere sabiduría. Estas tres cosas son la
trascendencia total del individuo humano, es lo que logra un Maestro total de sabiduría.
Para comprender la simpleza, lo elemental, necesitamos sacar de nuestra mente
muchas cosas. Así que, la ley de correspondencia ha dicho: El lugar perfecto para
aprenderlo es el planeta tierra, y dentro del planeta a cada uno le corresponde un país
determinado, un lugar, una situación. Y la Ley de armonía dijo: Por favor no se me vaya
a volver ineficiente dentro del proceso. El proceso es la forma de aprender. Los procesos
nunca se solucionan porque no son un problema. El problema es la ineficiencia (cuando
los procesos no se cumplen). Manejar las situaciones es lo que nos hace eficientes dentro
de nuestro proceso de evolución porque si luchamos contra la vida, somos ineficientes en
nuestro desarrollo espiritual, pero si fluimos con la vida, nos hacemos eficientes en
nuestro desarrollo espiritual. La única forma de que fluyamos con la vida es que podamos
aceptar lo de afuera y no que lo de afuera maneje nuestra condición interna mental.
En el universo no existe la casualidad, no existe la suerte, no existe nada que esté
suelto, no hay nada al azar; todo lo que sucede está regido por leyes matemáticamente
exactas. Cuando no conocemos la existencia de estas leyes, pensamos que algo anda mal
en el Universo, a veces pensamos o que Dios se equivoca o que es incapaz o que no
existe, pero no es nada de esto. Mientras no hemos hecho suficiente desarrollo interno no
acertamos a comprender la razón de nuestras dificultades humanas. En la medida en
que vamos comprendiendo que esto sólo es parte de un proceso y empezamos a
hacernos eficientes dentro del proceso, realmente nuestros problemas humanos llegan a
desaparecer, es decir, a trascenderse completamente. Esto no va a suceder a nivel
colectivo o simultáneo, esto va sucediendo individuo a individuo.
La idea es comprender que el planeta tierra no tiene el más mínimo problema.
Todo lo que sucede en el planeta es perfecto, no hay nada que cambiarle. Sólo una cosa
es necesaria cambiar: Nuestra relación con el mundo y nuestra concepción del orden de
lo que sucede. Todo el planeta está dentro de un proceso de evolución de la conciencia,
no es un problema, es un proceso.
Los problemas sí tienen solución. Un problema es lo que hace que seamos
ineficientes dentro del proceso. Si no les damos solución, entonces el problema se vuelve
eterno, un círculo vicioso. El proceso de los seres humanos en el planeta tierra, se llama
proceso de evolución de la conciencia a través de la experiencia en el cuerpo físico. El
problema es cuando le hacemos resistencia al proceso y nos estancamos en nuestro
desarrollo espiritual.
El único problema es luchar contra la vida: Cuando queremos cambiar las cosas
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Para Resaltar.
Þ El trabajo del ser humano, es un trabajo interno.
Þ El aprendizaje, sólo se vuelve comprensión a través de la práctica constante y de
la verificación de resultados. La sabiduría es el resultado de verificar una
información.
Þ Sabiduría también es expresar aquello con lo que los demás se puedan sentir muy
bien, aunque pensemos lo contrario.
Þ Para hacernos eficientes lo único que hace falta es dejar de luchar contra el orden
del Universo.
Þ Los cambios se producen en los caminantes, no en el camino.
Þ Nada ni nadie nos hace daño, ni nos perjudica, ni nos beneficia. Los perjuicios y
los beneficios que recibimos son exclusivamente, generados por nosotros.
Þ Todo lo que existe y todo lo que sucede es perfecto y necesario, porque tiene un
propósito de amor.
Þ No hay nada bueno ni malo, solo es necesario el proceso, se trata de comprender
que cada uno hace su función, por eso no debemos invalidar nada ni a nadie.
Þ Sería mucho más apropiado presentar las cosas nocivas de una manera agresiva y
las positivas de una manera totalmente agradable.
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Para lograr un propósito más eficiente vamos a utiliza y decir “qué rico imitarlo”.
Esta es la enseñanza de amor, no es una enseñanza de imposición (porque la
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imposición, la obligación o la prohibición no tienen nada que ver con el amor sino
con la ignorancia). La enseñanza del amor, es sutil, se muestra a los demás cómo
se puede hacer y cuál es el resultado que se puede obtener; es satisfactorio.
Þ Aceptemos que todo proceso tiene un propósito perfecto.
Þ Toda situación es un aprendizaje. Al mundo vinimos a aprender. Eso nos libera
de la lucha.
Þ Toda circunstancia es generada por uno mismo. Este postulado nos libera de la
culpa.
Þ Nadie puede quejarse de que le falte lo necesario porque lo necesario es para la
experiencia evolutiva, no es para la satisfacción del ego. Para el ego nunca jamás
nada será suficiente. Lo necesario es lo que es exacta y matemáticamente preciso
para la experiencia de cada uno de nosotros, no tenemos ni más ni menos de lo
necesario. Ni al millonario le sobra ni al que vive en la miseria le falta nada.
Þ El agradecimiento es sentirnos felices, dichosos y expresárselo a las personas y a
las situaciones que nos dieron la oportunidad de aprender lo que vinimos a
aprender al mundo.
Þ Valorar está dirigido a lo que tenemos a nuestra disposición, a lo que estamos
usando. Y, agradecer va dirigido hacia el pasado, agradecer lo que aprendimos;
aprendimos de las dificultades.
Þ Sólo sucede lo que tiene que suceder. Y es imposible que suceda algo que no
tiene que suceder. Esto nos libera de todos los miedos.
Þ Solo la experiencia permite comprender la verdad. La experiencia es inevitable. El
destino le da a cada persona la experiencia que le corresponde, sin tratar de
evadirla ni de buscarla.
Þ Hay que comprender que los demás no tienen la culpa de lo que nosotros
sentimos.
Þ Hay una sólo cosa por cambiar, y no está fuera sino dentro de mí: renunciemos a
cambiar a las personas, renunciemos a cambiar lo externo, cambiemos lo que pasa
en nuestro interior, y así haremos la transformación.
Þ No existe ninguna posibilidad de que otra persona pueda evolucionar por nosotros,
aunque tampoco podemos hacerlo sin los otros. solo somos es el resultado de sí
mismos.
Þ Solo enfrentamos las situaciones que no hemos comprendido, no hemos aprendido
sus enseñanzas y son las tareas de aprendizaje para nuestra conciencia y
precisamente las que necesitamos aprender y comprender para que dejen de ser
repetitivas.
Þ Aquel que disfruta intensamente de lo que hace y de lo que tiene y aprovecha todo
lo que existe, es inconmensurablemente rico. Valoro todo lo que tengo, disfruto
todo lo que hago y aprovecho todo lo que existe: esto requiere sabiduría.
Þ Es mucho más sabio decirnos a sí mismos: cualquier experiencia que me presente
la vida la aprovecharé como una oportunidad y para mí no habrá nada inaceptable.
Dios obra de dentro hacia fuera. El mundo obra de fuera hacia dentro.
Comprender la razón de la
existencia humana y el para
qué de su evolución
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