MARLIS DANIELA OSORIO RAMIREZ

JHEYMI FARRATD MONCADA GOMEZ

NELLY STEFFANY MORENO BALLESTEROS

DAVID FERNANDO DELGADO MARTINEZ

INVESTIGACIÓN I

LEONARDO LUNA

CORPORACIÓN UNIVERSITARIA IBEROAMERICANA

SEPTIEMBRE, 2020
Actualmente los influenciadores en Colombia, llámense youtubers, blogueros,
instragramers y demás realizadores de contenidos digitales, tienen como vitrina las
redes sociales sin ningún tipo de regularidad o control, haciendo que las gigantescas
audiencias que los siguen, empiecen a consumir lo que ellos promocionan, aconsejan o
usan, permitiendo indirectamente el cruzar esa delgada línea que separa el consejo de
la publicidad, y más cuando hay una retribución económica o en especie de por medio.
Estos influenciadores promocionan o aconsejan el uso desde “como es la manera
correcta de lavarse el cabello” hasta “donde es conveniente invertir su dinero” o
sencillamente “como organizar su casa”. Al manejarse temas tan familiares y que tienen
que ver con el día a día de manera tan actual, la emergencia sanitaria que se vive
actualmente a nivel mundial, no podía quedarse atrás, “la modelo e influenciadora
Elizabeth Loaiza está respondiendo por presunta publicidad engañosa al ofrecer en sus
redes sociales pruebas rápidas para detectar el coronavirus. La Superintendencia de
Industria y Comercio (SIC) le formuló cargos porque estos productos no tenían
aprobación sanitaria en Colombia. Si la encuentra culpable, podría tener que pagar una
sanción de hasta 1.750 millones de pesos. Y mandaría una señal de que en ese mundo no
todo vale. “ (Revista Semana, 26,09,2020. formato digital)
La gran cantidad de publicaciones que se realizan a diario por los influenciadores
en las plataformas digitales, permiten que no exista un control de lo que se informa
en redes, haciendo prácticamente imposible el detectar quienes están cruzando la
línea roja. Para ello el gobierno lanzara la próxima semana una “guía de buenas
practicas” y así evitar la existencia de ese tipo de “información no verídica” por
parte de ellos. Esta guía tiene por objetivo dos cosas, la primera es orientar a los
realizadores y anunciantes al cumplimiento de normas a las que se deben regir
antes de emitir cualquier tipo de mensaje publicitario y la segunda brinda
herramientas a los seguidores quienes en este caso son también consumidores, de
identificar cuando hay un negocio detrás de las recomendaciones o concejos que se
hacen. Así los influenciadores se verán obligados a informar a sus seguidores
cuando están recomendando un producto a cambio de dinero o de manera gratuita.