Está en la página 1de 76

UNIVERSIDAD NACIONAL DE PIURA

Facultad de Ingeniería de Minas


Escuela Profesional de Ingeniería Geológica

AUTOR:

FERNANDEZ ALBARADO MARCO ANTHONIO

MENDOZA CALLE DIEGO REINERY

CURSO:

GEOTECECNIA

Tema:

EROSION Y CONSERVACION DE LOS SUELOS


DOCENTE:

ING. JOSE COBEÑAS URBINA

Piura-2021
7

DEDICATORIA

Dedicamos este trabajo primeramente a DIOS, en segundo lugar, a nuestros

padres por el apoyo incondicional, fraterno y por sembrar en nosotros valores como la

responsabilidad, así mismo el deseo de triunfar y superación, finalmente a nuestros

docentes universitarios por todo su tiempo invertido para forjarnos como futuros

profesionales capacitados.
8

INDICE
1. CAPITULO I___________________________________________________14

EROSION DELOS SUELOS________________________________________________14

1.1. CONCEPTO_____________________________________________________14

1.2. AGENTES QUE INTERVIENEN EN LA EROSION_________________________16

1.2.1. LLUVIA____________________________________________________________16

1.2.2. Pendiente de terreno________________________________________________22

1.2.3. Material parental___________________________________________________24

1.2.4. Características internas de los suelos____________________________________26

1.2.5. Vegetación________________________________________________________27

1.3. TIPOS DE EROSIÒN______________________________________________30

1.3.1. Erosión hídrica______________________________________________________30

1.3.2. Erosión superficial del suelo___________________________________________31

1.3.3. Movimientos en masa________________________________________________37

1.3.4. Erosión eólica_______________________________________________________7

1.3.5. Erosión antrópica____________________________________________________9

1.3.6. Erosión glaciar______________________________________________________10

1.4. Causas de la erosión del suelo_____________________________________13

1.5. Consecuencias de la erosión del suelo______________________________14

2. CONSERVACION DE SUELOS_____________________________________15

2.1. CONCEPTO_____________________________________________________15

2.2. IMPORTANCIA__________________________________________________15
9

2.3. PRACTICAS DE CONSERVACION DE SUELOS__________________________16

2.3.1. Métodos naturales__________________________________________________16

2.3.2. Métodos artificiales__________________________________________________17

2.3.3. Métodos artificiales__________________________________________________21

2.3.4. Principales prácticas de conservación del suelo.___________________________22


10

ÍNDICE DE FIGURAS

Figura 1.................................................................................................................29

Figura 2.................................................................................................................30

Figura 3.................................................................................................................31

Figura 4.................................................................................................................32

Figura 5.................................................................................................................33

Figura 6 ................................................................................................................33

Figura 7.................................................................................................................34

Figura 8.................................................................................................................35

Figura 9.................................................................................................................36

Figura 10...............................................................................................................36

Figura 11...............................................................................................................37

Figura 12...............................................................................................................37
11

ÍNDICE DE TABLAS

Tabla 1..................................................................................................................19

Tabla 2..................................................................................................................29

Tabla 3..................................................................................................................30

Tabla 4..................................................................................................................32

Tabla 5..................................................................................................................32

Tabla 6..................................................................................................................40

Tabla 7....................................................................................................................7
12

INTRODUCCIÓN

La erosión es un proceso natural que conlleva la pérdida de suelo de un

determinado lugar y que afecta a todos los terrenos que se encuentran expuestos a la

acción de la lluvia o el viento. A una escala geológica, también se debe considerar la

erosión fluvial y la producida por los glaciares. Los procesos erosivos se contraponen a

los de formación de suelo por meteorización de las rocas o por acumulación de

sedimentos. El proceso natural de la erosión se ve fuertemente incrementado en aquellas

zonas donde las actividades humanas han modificado el equilibrio de los factores del

medio natural, dejando el suelo desprotegido de la cubierta vegetal, compactando la

superficie o alterando el flujo del agua de escorrentía. Las formas de erosión acelerada,

que tienen su origen en el uso inadecuado o demasiado intenso del suelo, son las que se

estudiaran en este capítulo, pues conllevan pérdidas sociales y económicas importantes en

Centroamérica.

El suelo es una fina capa superficial de la Biosfera, en la que tienen lugar muchos

procesos esenciales para el funcionamiento de los ecosistemas terrestres, por ejemplo, el

suministro de agua y de nutrientes para las plantas, la descomposición de los restos

orgánicos de los seres vivos, o la producción de fitomasa (tabla 4.1). Es un recurso

natural limitado en extensión y en productividad, dado que no toda la superficie terrestre

está cubierta de suelos, y que ni todos son aprovechables para las actividades humanas ni

tienen la misma fertilidad. Existe una gran diversidad de suelos que difieren en

composición y propiedades, por lo que la utilización correcta de este recurso debe atender

a sus aptitudes naturales para cada tipo de uso. Además, se debe tener en cuenta que el
13

tiempo de formación del suelo es muy superior al de los ciclos de las actividades

humanas que pueden degradarlo, por lo que su correcta gestión y explotación debe

hacerse considerando que es un recurso natural frágil y no renovable. El escenario del

cambio climático que se refleja en un aumento de las temperaturas medias (mayor

evapotranspiración) y un régimen de lluvias más irregular, pueden contribuir a

incrementar las pérdidas de suelo por erosión.


14

1. CAPITULO I

EROSION DELOS SUELOS

1.1. CONCEPTO

La erosión puede ser definida, de forma amplia, como un proceso de arrastre del

suelo por acción del agua o del viento; o como un proceso de desprendimiento y arrastre

acelerado de las partículas de suelo causado por el agua y el viento (Suárez, 1980). Esto

implica la existencia de dos elementos que participan en el proceso: uno pasivo que es el

suelo, y uno activo que es el agua, el viento, o su participación alterna; la vegetación por

su parte actúa como un regulador de las relaciones entre ambos elementos.

Por otra parte, desde la perspectiva geológica y de formación del paisaje, la

erosión es entendida como parte del proceso de morfogénesis a través del cual se alteran

y moldean las formas terrestres. Desde este punto de vista, la configuración que hoy se

tiene de la superficie de la tierra, se debe a los procesos continuos de agradación y

degradación que en tiempo geológico, han moldeado la superficie. Estos procesos

geomorfológicos están relacionados con factores internos (litología, estructura, tectónica,

volcanismo y topografía) y externos (clima: temperatura y precipitación; organismos; y

acción antrópica).

La división de la erosión bajo los puntos de vista planteados, surge de la escuela

conservacionista americana; sin embargo, es necesario revaluar tales conceptos

(Hermelín, 1967, citado por Gutiérrez, 1983), dado que el término erosión geológica

resulta muy vago y no concuerda con la compleja formación ecológica de ciertos países,
15

como es el caso de Colombia, en donde pueden existir ecosistemas muy diversos en áreas

poco extensas; además, se señala que la influencia del hombre sobre ambientes con

estabilidad morfogenética distinta, puede ser sustancialmente diferente en la respuesta.

A pesar de los planteamientos recién expuestos, podría aceptarse la consideración

de dos tipos básicos de erosión: la geológica o natural, y la antrópica o acelerada. La

primera se produce normalmente sin la acción del hombre, estando por tanto fuera de su

control; es tan lenta que pasa inadvertida y contribuye de cierto modo a la formación del

relieve mismo y a la meteorización de las rocas. En este tipo de erosión intervienen el

agua (ríos, mar, lluvia), el viento, la temperatura y la gravedad; es considerada benéfica,

pues busca la estabilidad de la superficie y un equilibrio entre el suelo, la vegetación, los

animales y el agua; se ha presentado durante millones de años y existe actualmente como

en el pasado, variando espacialmente dadas las diferencias en el carácter de las rocas y en

las condiciones climáticas y de vegetación. Ejemplo de la elevada erosión y depositación

que ha ocurrido durante el tiempo geológico, se tiene en la gran extensión y espesor de

las rocas sedimentarias encontradas en la corteza terrestre.

Por otra parte, en la erosión acelerada ha mediado el hombre, destruyendo la

vegetación protectora al introducir otros usos al suelo y con ello rompiendo el equilibrio

natural. Así, se ha favorecido la acción erosiva del agua y del viento, en especial en

terrenos inclinados, al usar sistemas de cultivos y herramientas inadecuadas, al talar los

bosques y/o quemar la vegetación, al construir obras de infraestructura, etc., conforme ha

sido ya indicado.
16

1.2. AGENTES QUE INTERVIENEN EN LA EROSION

De acuerdo con el agente físico causante, pueden definirse tres tipos de erosión:

hídrica, eólica y glacial. Es la primera de ellas la que mayor interés reviste en aquellos

espacios geográficos de los trópicos sujetos a condiciones climáticas en donde imperan

abundantes y frecuentes lluvias de alta intensidad, razón por la cual el desarrollo de este

apartado se ocupará de manera especial del agente activo en esencia de este tipo de

erosión, cual es el agua en forma de lluvia, y de sus interacciones con los restantes

agentes activos y pasivos. Así, el viento y el hielo que son importantes agentes activos de

la erosión eólica y glacial respectivamente, y cuya importancia es menor en los trópicos,

no se desarrollan en la discusión, así como tampoco las importantes interacciones de ellos

con parámetros topográficos, sin dejar de reconocerse así, por ejemplo, la importancia

que la erosión eólica tiene en países de clima mediterráneo o la inminente modelación de

paisajes tras los deshielos en Europa y muchos países del mundo. A continuación, se

describen algunos aspectos importantes relativos a los factores que o bien aceleran o bien

controlan y regulan la erosión hídrica, dentro de los cuales se tiene la precipitación, las

características topográficas, las características edáficas intrínsecas y la cubierta vegetal

1.2.1. LLUVIA

La lluvia o precipitación es considerada la principal fuente de agua sobre el

terreno; de su cantidad, intensidad y frecuencia depende el volúmen de flujo que se

desliza en capas uniformes. Con respecto a la primera, Morgan (1986) expone que a una

escala global la erosión alcanza sus máximos valores con precipitaciones de 300 mm año-

1; cuando la precipitación total es inferior a dicho valor, la erosión se incrementa

conforme la precipitación lo hace, sin embargo una vez este valor es superado el efecto
17

de protección ofrecido por la cubierta vegetal que se beneficia de una mayor

precipitación incidente, se traduce en menores pérdidas de suelo. De las características de

la lluvia -al parecer- la que menor peso tiene en la explicación de las pérdidas de suelo es

la cantidad, por ello el desarrollo de trabajos de investigación atiende en forma especial a

las otras dos: intensidad y frecuencia.

1.2.1.1. INTENSIDAD DE LLUVIA

Es el factor primordial del fenómeno, ya que la velocidad de penetración del agua en el

suelo es frecuentemente insuficiente cuando ésta cae con gran intensidad; la llegada al

suelo de una elevada cantidad de agua en un período corto de tiempo, produce

rápidamente escorrentía. No es entonces tan importante el total de la lluvia como la

intensidad misma.

A este respecto, Hudson (1982) expone que los intensos aguaceros típicos de los trópicos

tienen un efecto mucho más catastrófico que las suaves lluvias de los climas templados,

localizándose el área de lluvias destructoras entre los 40º de latitud Norte y los 40º de

latitud Sur. Excepciones a esta regla se tienen en zonas semiáridas donde la mayor

erosión por lluvia ocurre a menudo cuando ésta se produce en tormentas violentas,

aunque la cantidad de agua sea poca. En los climas templados, los valores de intensidad

rara vez superan 75 mm h-1, lo cual se dá en el caso de tormentas estivales; entre tanto,

en climas tropicales se alcanzan con frecuencia intensidades de 150 mm h-1. La relación

más importante entre las características de la precipitación y de los suelos que

condicionan la aparición de escurrimiento, es aquella existente entre la intensidad de la

lluvia y la rapidez de infiltración del suelo, tal que:


18

Escurrimiento = Intensidad lluvia-Velocidad Infiltración

Así, conforme lo describe Horton (1945), si la intensidad de la precipitación es inferior a

la capacidad de infiltración, no tendrá lugar la escorrentía, y la tasa de infiltración será

igual a la intensidad de la lluvia; por otra parte, si la intensidad de la precipitación excede

la capacidad de infiltración, la tasa de infiltración igualará la capacidad de infiltración y

el excedente de la precipitación formará escurrimiento superficial (Figura 2a). Sin

embargo, no siempre las relaciones entre la intensidad y la infiltración como mecanismos

generadores de escurrimiento en superficie son claras; al respecto, Morgan (1986)

menciona resultados de investigaciones adelantadas por él en Bedfordshire, Inglaterra, en

donde sobre suelos arenosos con capacidades de infiltración de 400 mm h-1, eran otras

variables las responsables del control de la escorrentía. El autor plantea que es un

contenido de humedad edáfico limitante, que una vez superado, produce una reducción de

la presión de agua de los poros en la superficie del suelo hasta un valor 0 (cero),

permitiéndose la formación de charcos. Esto explica porqué las arenas, que tienen bajos

niveles de almacenamiento capilar, producen rápidamente escorrentía aun cuando su

capacidad de infiltración no haya sido excedida por la intensidad de la precipitación.

En general puede afirmarse que mientras Velocidad Infiltración > Intensidad lluvia, no

habrá escurrimiento que produzca erosión, observándose que lluvias de intensidad

moderada producen erosión cuando el suelo ya se encuentra saturado. Fournier (1972)

citado por Morgan (1986) reporta para un período de 8 años de registro de la intensidad

de lluvia en Ohio, EUA, valores de pérdida de suelo claramente relacionados con

incrementos de aquella (Tabla 1).


19

De acuerdo con Hudson (1982), la importancia de esta característica de la lluvia en el

estudio del fenómeno erosivo radica en que, además de ser clave en su entendimiento

como se explicó, es una de las variables junto con la cantidad total de agua llovida, que

suele registrarse en las estaciones meteorológicas. Sus mediciones suelen obtenerse

mediante pluviógrafos, en los que los incrementos sucesivos de lluvia se registran como

total acumulado en un gráfico de diferente periodicidad. La Intensidad es calculada a

partir de la variación en la cantidad de lluvia registrada, es decir, a partir de la pendiente

de la gráfica resultante. Para promediar la Intensidad durante períodos más bien largos,

este método de medición indirecto es apropiado, sin embargo, para un intervalo de

tiempo corto, el método

resulta impreciso y muy laborioso. La medición puede ser entonces tanto directa como

indirecta, siendo el primer caso representado por instrumentos que registran directamente

la intensidad de la lluvia y no la simple cantidad, produciendo gráficos en los cuales la

cantidad de lluvia viene dada por el área localizada por debajo de la curva.

Tabla 1

Relación entre intensidad de la precipitación y pérdidas de suelo

Intensidad máxima Número de Erosión promedio por


en 5 minutos eventos de lluvia (kg m –2)
(mm h-1) lluvia

0-25,4 40 0,37
25,5-50,8 61 0,60
50,9-76,2 40 1,18
76,3-101,6 19 1,14
101,7-127 13 3,42
127,1-152,4 4 3,63
152,5-177,8 4 3,87
177,9-254 1 4,79
20

1.2.1.2. FRECUENCIA DE LUVIA

La respuesta del suelo en términos de erosión a la recepción de la lluvia, podría estar

determinada por las condiciones meteorológicas previas (Morgan, 1986); de tal forma,

dos eventos de lluvia que se sucedan sin haberse alcanzado a secar el suelo puede llevar a

que la segunda lluvia no se infiltre, o lo haga mínimamente, y gran parte de ella escurra.

El fenómeno es análogo al que se produce cuando una lluvia de larga duración satura el

suelo: la desaparición de la infiltración genera escorrentía. Así, precipitaciones aisladas

registradas en Tanzania, Africa (Temple, 1972), muestran cómo aquellas de alta

intensidad (76 mm h-1) producían una escasa escorrentía superficial, que en promedio

alcanzaba un 14% en parcelas de experimentación de café liberado de malezas como

práctica de conservación, en tanto que un evento tormentoso de 20 mm h-1 ocurrido un

día después de un fuerte aguacero, generaba en promedio una escorrentía del 73%. A este

respecto, Suárez (1980) expone que la frecuencia de las lluvias es crítica de acuerdo a las

condiciones de los terrenos, así cuando los intervalos entre lluvias son cortos, el

contenido de humedad del suelo es alto al comenzar aquellas, y por tanto, aumenta la

posibilidad de que se origine la escorrentía aún con eventos de baja intensidad; lo

contrario ocurrirá en caso de tenerse períodos largos. Un ejemplo de lo anotado se tiene

en la Tabla 2, cuyos registros fueron obtenidos de parcelas dispuestas sobre suelos

desnudos en Chinchiná, Colombia; se aprecia allí cómo, aún para intensidades menores,

los valores de escorrentía son sustancialmente superiores al tenerse intervalos de tiempo

más cortos entre los eventos de precipitación.


21

Intervalo Cantidad Intensidad en Escorren Erosió


entre lluvias de lluvia cinco minutos tía n (ton
(días) (mm) (mm) (mm) ha-1)

17 17,8 3 0,09 0,002


,
0
2 12,6 2 2,36 0,395
,
2

Podría asimismo dejarse aquí indicada la importancia que tienen en la generación de

pérdidas de suelo eventos de características poco frecuentes; al respecto Hudson (1981)

citado por Morgan (1986) enfatiza el papel de estos dramáticos eventos de lluvia,

reportando la ocurrencia del 50% de las pérdidas anuales de suelo en sólo dos tormentas,

y en un año, un 75% de la erosión ocurriendo en tan sólo 10 minutos.

Suárez (1980) expone que unos pocos aguaceros son los causantes de la casi totalidad de

las pérdidas de suelo que ocurren por erosión en una región; en Chinchiná, Colombia, se

encontró que en un período de tiempo de ocho años, el 9,9% de los aguaceros eran

responsables del 88,7% de las pérdidas de suelo, aguaceros que aportaban el 35% del

agua caída durante el período, caracterizados por una larga duración y alta intensidad, y

ocurriendo en momentos en los cuales el suelo se encontraba con una buena carga de

humedad. Sin embargo, a pesar del importante lugar que merecen estos copiosos eventos,

la teoría más aceptada (Morgan, 1986) es aquella que señala la asociación de la mayor
22

parte de la erosión con eventos de frecuencia y magnitud moderados, dado que los

eventos extremos son menos frecuentes para contribuir de manera apreciable en las

cantidades de suelo erosionado por un largo período de tiempo.

1.2.2. Pendiente de terreno

En condiciones normales, sería de esperar que la erosión se incrementara

conforme lo hicieran el grado y la longitud de la pendiente, como resultado de los

respectivos incrementos en velocidad y volumen de la escorrentía superficial. Además,

mientras en una superficie plana el golpeteo de las gotas de lluvia arroja las partículas de

suelo al azar en todas las direcciones, en condiciones de pendiente inclinada más suelo es

salpicado hacia abajo de ella que hacia arriba incrementándose la proporción conforme lo

hace el grado (Morgan, 1986).

En teoría -ley de caída de los cuerpos- la velocidad del agua varía con la raíz

cuadrada de la distancia vertical que ella recorre; y su capacidad erosiva con el cuadrado

de la velocidad; esto es, si la pendiente del terreno se aumenta cuatro veces, la velocidad

del agua que fluye sobre él se duplica, y su capacidad erosiva se cuadruplica.

Por otra parte, se dice que la cantidad de material de determinado tamaño que

puede transportarse, varía de acuerdo con la quinta potencia de la velocidad de flujo, lo

que en otras palabras significa que si la velocidad de escorrentía se duplica, la cantidad de

material de determinado tamaño que puede ser transportado se aumenta en 32 veces.

Asimismo, ya que el tamaño de las partículas que puede ser transportado por rodamiento

varía con la sexta potencia de la velocidad del agua, en el caso de duplicarse la velocidad

de escorrentía, aquel aumentaría 64 veces. Tales planteamientos sugieren que tanto la


23

inclinación como la longitud de la pendiente son factores que influyen de manera

importante en la erosión del suelo (Maene y Sulaiman, 1980); sus efectos en la erosión

hídrica son tratados a continuación.

1.2.2.1. Grado de pendiente

Regula la velocidad de circulación del agua sobre la superficie de forma casi exclusiva.

En los trópicos húmedos el efecto de la pendiente en combinación con las copiosas

tormentas tropicales es decisivo en la generación de pérdidas de suelo (Zingg, 1940). Así,

aun para bajos valores de pendiente, las pérdidas de suelo resultan significativas,

conforme lo ilustran reportes de erosión de suelos (Hudson y Jackson, 1959, citados por

Morgan, 1986) en parcelas de experimentación cultivadas con maíz en Rhodesia, Africa,

según los cuales se registraban pérdidas de 10.05, 5.55 y 4.65 ton ha-1 a escasos valores

de pendiente de 6.11, 4.37 y 2.62% respectivamente. Por otra parte, en suelos de Malasia

peninsular, Maene et al (1975) citados por Maene y Sulaiman (1980) reportan

incrementos en las pérdidas de suelo de 43,5 ton ha-1 en pendientes del 17% a 63,5 ton

ha-1 en pendientes del 34%, pérdidas que fueron encontradas en parcelas experimentales

sembradas de pasto (Pennisetum purpureum) tras 60 días de su establecimiento. Suárez

(1980) relaciona algunos de los experimentos efectuados en la Estación experimental de

Kansas y en el Instituto Politécnico de Alabama, EUA, para determinar relaciones

existentes entre el grado de la pendiente y las pérdidas de suelo; en ellos se encontró que

dicha relación podría ser expresada por la ecuación:

Xc = 0,065 S 1,49

Xc representa la pérdida total de suelo en unidades de peso y S la pendiente del

terreno en porcentaje; tales resultados fueron obtenidos en parcelas experimentales bajo


24

condiciones de saturación, y se consideran cercanos a aquellos encontrados bajo

condiciones naturales. Otras investigaciones han atendido la teoría de un supuesto

incremento de tipo exponencial conforme se tienen más acusadas inclinaciones del

terreno; así, son reportados para suelos tropicales (Maene y Sulaiman, 1980) exponentes

que se mueven entre 1,3 y 2,1.

1.2.2.2. Longitud de la pendiente

Influye en la velocidad por las alturas de agua acumuladas en la parte baja de las

pendientes; tales alturas son mayores cuanto más extensas son las vertientes en la parte

superior. Suárez (1980) expone y agrupa los resultados de diferentes experimentaciones

tendientes a correlacionar las pérdidas de suelo con la longitud de la pendiente, a través

del modelo:

X = 0,0025 L 1,53

En esta expresión X representa la pérdida total de suelo en unidades convencionales y L

la longitud horizontal del terreno medida en pies. El autor expone que el grado y la

longitud de la pendiente actúan en forma independiente con relación a las pérdidas de

suelo; al estudiar el efecto combinado de ambas características topográficas en parcelas

de 42 pulg de ancho y con una aplicación artificial de lluvia de 3,15 pulg h-1 durante 45

min sobre un suelo franco, se obtuvieron los resultados promedios presentados en la

Tabla 3.

1.2.3. Material parental

La importancia del material parental en el análisis del fenómeno erosivo estriba en

los rasgos hereditarios que de él se derivan en los suelos conforme avanza el proceso de
25

meteorización. Una clasificación primaria de las rocas es aquella establecida basándose

en su origen; así, se diferencian tres tipos de ellas: ígneas, metamórficas y sedimentarias.

De acuerdo a su dureza relativa, éstas pueden agruparse en blandas (sedimentarias) y

duras (metamórficas e ígneas). Esta clasificación plantea que las rocas ígneas y

metamórficas son más resistentes, lo cual se da en razón de ser más compactas por

presentar un mayor empaquetamiento entre sus minerales constituyentes. Por otro lado,

las rocas sedimentarias presentan una mayor porosidad, la cual permite el ingreso del

agua al interior de la roca, favoreciendo el proceso de meteorización, que resulta en un

efectivo ablandamiento del material y de allí una mayor susceptibilidad a la erosión.

La presencia de discontinuidades -fallas, diaclasas, planos de debilidad- también

favorece el ingreso de agua al interior de las rocas, no sólo sedimentarias sino también en

las ígneas y metamórficas; la presencia de tales discontinuidades puede facilitar

fenómenos como el desprendimiento de bloques. Este es el caso particular de las rocas

metamórficas denominadas esquistos, cuya característica textural de foliación

-disposición paralela de una serie de láminas- puede favorecer la ocurrencia de

deslizamientos o desprendimientos de la masa rocosa cuando aquella está a favor de la

pendiente de una ladera o de un talud.

Un caso similar al recién anotado puede asimismo ocurrir en los planos de

estratificación de las formaciones sedimentarias; en tal situación pueden ocurrir

deslizamientos de los suelos y las rocas que yacen sobre estratos de rocas finogranulares

como arcillolitas y limolitas, especialmente cuando existe infiltración de aguas

subsuperficiales que llegan hasta la superficie del estrato inferior, y donde dada la baja

permeabilidad de las rocas sedimentarias de grano fino, la película de agua actúa como
26

lubricante entre ambos materiales, facilitándose el deslizamiento del superyacente cuando

la estratificación se encuentra buzando a favor de la pendiente de la ladera.

1.2.4. Características internas de los suelos

Si bien han sido mencionados algunos de los factores de primera importancia en

la explicación del fenómeno erosivo, es indudable el papel que cumplen algunas

propiedades de los suelos -principalmente físicas- como coactores en tal fenomenología.

Debe destacarse entonces el efecto que tienen sobre el proceso de infiltración la textura,

el contenido de materia orgánica y la estructura del suelo,al imprimirle diferentes

características de permeabilidad y erodabilidad. Ejemplo de su importancia se refleja en

la consideración expresa de que son objeto en modelos paramétricos a efectos de estimar

las pérdidas de suelo; este es el caso de la Ecuación Universal de Pérdidas de Suelo

(EUPS) de Wischmeier y Smith, en la cual el factor K o de erodabilidad del suelo se

determina a través de nomogramas que consideran las características textura, contenido

de materia orgánica, estructura y permeabilidad.

La textura y la estructura del suelo han sido usualmente consideradas las

características físicas más relevantes, dado que son a su vez las que condicionan otras

características del suelo inherentes a la erosión. La estructura condiciona en gran medida

la velocidad y el tipo de movimiento vertical del agua en el perfil edáfico, así, estructuras

laminares propician movimientos de agua muy lentos, en tanto que estructuras de tipo

columnar favorecen el rápido tránsito de ella, aún cuando se tengan texturas arcillosas

(Henao, 1988). La importancia de esta característica radica además en que condiciona el


27

desarrollo de las raíces, así, suelos con estructura granular favorecen su crecimiento y

desarrollo, contrario a lo que ocurre bajo condiciones de estructura laminar.

La textura por su parte condiciona la infilitración en los terrenos, así, las

capacidades de infiltración pueden variar desde más de 200 mm h-1 para arenas hasta

menos de 5 mm h-1 para arcillas (Withers y Vipond, 1974). En términos generales se

acepta que la velocidad de infiltración en suelos arenosos es bastante superior a la que se

tiene en suelos arcillosos, retardándose por tanto el punto de saturación, y con ello la

aparición de escurrimiento superficial. Sin embargo, al irse inclinando el terreno, suelos

sueltos y ligeros son más propensos a la separación o desplazamiento del lugar que

ocupan por efecto del golpeteo y posteriormente de la gravedad.

En condiciones experimentales, se ha encontrado que los suelos más erosionables

corresponden a texturas intermedias, siendo considerados los suelos con contenidos de

arcilla superiores al 30% poco susceptibles a la erosión, basándose tal información en los

efectos que tiene la fracción arcilla en el favorecimiento de la cohesión de partículas, y la

fracción arena en el mejoramiento de las condiciones de infiltración.

1.2.5. Vegetación

La cubierta vegetal se desempeña como agente regulador en los fenómenos

erosivos, controlando los excesos de agua en el perfil del suelo, disminuyendo las

velocidades del flujo de escurrimiento e integrando el suelo como masa unitaria, entre

otros beneficios. Sin embargo, su papel es variable de acuerdo a las características de

porte, enraizamiento, hábito y velocidad de crecimiento, etc.; incluso en ocasiones puede

favorecer las condiciones de inestabilidad de las laderas, como más adelante se anotará.
28

En términos generales, las formas o mecanismos a través de los cuales las plantas

defienden el suelo son los siguientes (Suárez, 1980):

 Dispersión directa: intercepción por el follaje y evaporación de gotas de agua

lluvia.

 Transpiración: humedad que pasa de estratos profundos al aire.

 Protección directa: contra el impacto de las gotas de lluvia.

 Efecto sujetador: del sistema radicular sobre las partículas de suelo.

 Penetración de raíces a través del perfil: al morir dejan espacios que favorecen los

procesos de infiltración y de aireación.

 Mejoramiento de estructura del suelo: principalmente por aporte de materia

orgánica, y con ello la infiltración.

 Aumento del coeficiente de rugosidad y dispersión lateral de la escorrentía:

reduciéndose con ello el volúmen y la velocidad del flujo.

Además del efecto amortiguador que tienen las coberturas vegetales contra el

impacto directo de las gotas de lluvia, y los demás recién listados, es de gran interés el

efecto relacionado con el mejoramiento del proceso de infiltración. En tal sentido, este

proceso es favorecido por el crecimiento y desarrollo de las raíces a través del perfil del

suelo, incrementando su porosidad y con ello la infiltración. Asimismo, el paso del

material muerto al suelo incrementando el contenido de materia orgánica y humus,

favorece a su vez la porosidad y la capacidad de retención de agua de los terrenos,

retardando con ello la aparición de la escorrentía superficial.


29

En general, se ha encontrado que coberturas vegetales consistentes de varios

estratos favorecen en mayor medida el proceso de infiltración del agua en los terrenos, a

diferencia de las monas estratificadas -pastos o suelos desnudos- en las cuales la

infiltración del agua es sustancialmente menor.

Tabla 2

Infiltración del agua (cm 3) en terrenos con diferentes coberturas vegetales

Tiempo Tipo de cobertura


(min) Bosque Pastos Suelo desnudo

5 6 21,0 5,
0, 3
0
1 119,0 45,8 1
0 1,
0
3 360,0 127,0 3
Este 0 5, enfoque que
5
considera la 60 715,0 250,0 63,0 percolación

como un índice de un tratamiento superficial, ha sido acogido por diferentes

investigadores dada la dependencia existente entre la escorrentía y la intensidad de la

lluvia. Así, Temple (1972) expone que en experimentaciones realizadas en Uganda,

Africa (Hutchinson et al, 1958), las tasas de percolación mostraban mayor consistencia

que las variaciones de la escorrentía, y podrían por tanto ser un mejor índice de

conservación de la humedad, aunque no necesariamente de la susceptibilidad del suelo a

la erosión; además tales tasas no están en función de la escala de la parcela, como si lo

está la escorrentía. Los valores medios encontrados en el estudio para escorrentía y tasa

de percolación variaron desde 474 mm h-1 y 25 mm h-1 en parcelas de suelo desnudo,

hasta 65 mm h-1 y 70 mm h-1 en parcelas con mantillo de pasto, respectivamente,

registrándose allí una precipitación media de 1.410 mm.


30

De regreso a los reportes más usuales en la literatura, pérdidas de suelo del orden

de 0,001 ton ha-1 año-1 bajo cobertura boscosa, frente a 36 ton ha-1 año-1 en parcelas

cultivadas con algodón, en condiciones de precipitación de 1.300 mm año-1 y 10-12 % de

pendiente, fueron encontradas tras experimentaciones desarrolladas en Sao Paulo, Brasil,

durante dos años de registro (Suárez, 1980)

Tabla 3

Valores de pérdida de suelo y escorrentía bajo diferentes coberturas vegetales

Cobertura Pérdida de Escorrentía


suelo (ton promedio (% de
ha-1) la lluvia)

Bosque 0,0 1
01 ,
1
Pasto 1,0 1
,
6
Cafetal sin sombrío 1,4 1
,
6
Algodón 36, 8
0 ,
2

1.3. TIPOS DE EROSIÒN

Si bien hasta ahora se ha dibujado la existencia de diferentes tipos de erosión

según el agente activo -hídrica, eólica, glacial- o el carácter de la intervención -humana o

natural-, es la combinación de la erosión hídrica acentuada con la participación del

hombre la que aquí ocupa dada su importancia en el contexto geográfico de las latitudes

tropicales, conforme ha sido previamente indicado.


31

1.3.1. Erosión hídrica

En términos generales, la erosión hídrica es aquella producida por el agua lluvia a

través del golpeteo de sus gotas sobre la superficie del terreno y cambios en regímenes de

humedad, generando desprendimiento y arrastre de partículas y masas de suelo; se refiere

básicamente a dos aspectos:

 Erosión por movimientos en masa: suelos y rocas más o menos saturados

de agua, hasta diversas profundidades y con velocidades muy variables.

 Erosión superficial del suelo: causada por el impacto de gotas de lluvia y

por la corriente que se forma sobre la superficie, conocida como

escorrentía. Esta última toma las formas de erosión laminar, en surcos o en

cárcavas.

La erosión hídrica a partir de este enfoque del impacto en superficie no incluye

una de las más importantes manifestaciones de la erosión, cual es la erosión lineal, cuyo

tratamiento se ha dejado para el Capítulo 4. A continuación se exponen algunos

conceptos básicos de los movimientos masales y de la erosión superficial del suelo,

comenzando por esta última.

1.3.2. Erosión superficial del suelo

Agrupa las formas de erosión que tienen lugar sobre las superficies de terrenos,

cuya manifestación responde a una gradualidad en su manifestación: erosión por

salpicadura, erosión laminar, erosión en surcos y en cárcavas.

1.3.2.1. Erosión por salpicadura

Es originada por la caída de las gotas de lluvia sobre el suelo; su impacto está en función

de la forma y tamaño de las gotas (erosividad), y de la resistencia del suelo a su poder


32

erosivo (erodabilidad). La energía cinética de las gotas (1/2 m v2) depende de las

propiedades para ellas citadas; el efecto de la salpicadura es especialmente dramático en

condiciones climáticas tropicales donde se combinan fuertes precipitaciones y

desfavorable protección del suelo; así, Soyer (1987) encontró mínimas pérdidas de suelo

por salpicadura en parcelas localizadas en Zaire, Africa, cuando la cubierta forestal estaba

presente, alcanzándose valores de 3,1 a 7,2 ton ha-1 año-1, en tanto que bajo cubierta

vegetal de maíz los valores medios de pérdidas eran de 188 ton ha-1 año-1.

Las velocidades terminales para diferentes diámetros y alturas de caída de las gotas de

lluvia pueden ser apreciadas en la Tabla 6, de donde se intuye el efecto que puede tener la

caída de una gota de lluvia desde el dosel de un bosque (8 m) en caso de encontrar un

suelo con el horizonte de hojarasca pobremente desarrollado como ya se había anotado.

Tabla 4

Velocidades terminales (m seg--1) de caída de las gotas de lluvia

Diámetro gotas Altura de caída de las gotas (m)


(mm)
2,0 4,0 8
,
0

1 4,50 5,25
,
5
3 5,37 6,68 7,75
,
0
5,0 5,79 7,50 8,86

Asimismo, el diámetro y por tanto la velocidad de las gotas se encuentran estrechamente

correlacionados con la intensidad de la precipitación, correspondiendo mayores diámetros

y velocidades a mayores intensidades.


33

Tabla 5

Valores de diámetro y velocidad de las gotas para diferentes intensidades de lluvia.

Forma de Intensidad (mm Diámetro Velocidad (m


lluvia h-1) (mm) seg-1)

Niebla 0,13 0,055 0,1


Llovizna 0,25 0,5 4,0
Lluvia ligera 0,75 1,0 5,5
Lluvia 18,0 2,0 6,5
Chubasco 100 4,0 9,0

El fenómeno de la erosión por salpicadura puede describirse de la siguiente forma

(Correa, 1980): la lluvia al caer sobre el terreno sin vegetación, mueve el suelo no

protegido; durante eventos fuertes, capas de agua enturbiada por material terroso

suspendido, corren a través de esas superficies desnudas. El suelo al no presentar una

adecuada cobertura protectora, es dividido y soltado por el impacto de las gotas de lluvia,

para luego ser arrastrado hacia partes más bajas, dejando pequeños pilares, comúnmente

llamados castillos de bruja o estoraques, por lo general de varios centímetros de altura,

retenidos o cubiertos en su parte superior por pequeños guijarros, hojas o raíces; Morgan

(1978) reporta la formación de estructuras de este tipo a una tasa de 20 mm año–1 en

Bedfordshire, Inglaterra.

Debe anotarse que no sólo es importante el efecto del golpeteo directo, sino además la

existencia de una película de agua que al ser golpeada produzca la desintegración de las

gotas que caen, con el consiguiente arrastre de las partículas disgregadas, las cuales se

proyectan a distancias hasta de 1,5 m en la horizontal y 1 m en la vertical; este fenómeno

produce la destrucción del agregado y la formación de una costra que reduce la

infiltración y aumenta la escorrentía (Moreno y Porras, 1979, citados por Gutiérrez,

1983).
34

Ambos fenómenos así descritos indican la importancia de las gotas de lluvia como

agentes de dispersión y consolidación; el efecto de consolidación corresponde entonces a

la formación de la costra superficial mencionada, la cual alcanza usualmente unos pocos

milímetros de espesor y que es el resultado de la obstrucción de los poros por

compactación del suelo. Young (1972), citado por Morgan (1986) ha sugerido que esto se

encuentra asociado a la dispersión de finas partículas de los agregados del suelo, las

cuales son translocadas para rellenar los poros. No cabe duda que el principal efecto que

tiene la formación de esta costra superficial es la reducción de la capacidad de infiltración

mencionada, y por tanto, la generación de escorrentía superficial a ella asociada. Así,

Morin et al (1981) mostraron cómo la capacidad de infiltración se reducía de 100 mm h-1

hasta 8 mm h-1 en suelos arenosos conforme se desarrollaba la costra superficial.

Asimismo, Hoogmoed y Stroosnijder (1984) citados por Morgan (1986), reportaban de

estudios en Mali, Africa Occidental, una reducción de la capacidad de infiltración de los

suelos desde sus valores naturales de 100-200 mm h–1, hasta 10 mm h–1, una vez se

desarrollaba la costra superficial; esta situación se hace aún más dramática si se toma en

consideración que sólo unas pocas tormentas eran necesarias para provocar tal cambio,

pudiendo ocurrir un 50% de tal reducción en un único evento. Se destaca entonces

nuevamente la importancia que pueden tener eventos aislados en la generación de

pérdidas de suelo, conforme era señalado en páginas precedentes.

El fenómeno que se ha descrito ocurre siempre y cuando el suelo no cuente con una

apropiada protección en la superficie (vegetación rastrera o mantillo), ya que los árboles


35

interceptan cierta cantidad de la lluvia hasta un límite a partir del cual no pueden

almacenar más agua, produciéndose un reagrupamiento de las gotas y generándose unas

nuevas de mayor tamaño que las originales, con mayor poder erosivo al caer al suelo; se

estima que el 70% del total de suelo removido se debe a la acción del golpeteo o

salpicadura

1.3.2.2. Erosión laminar

Consiste en la remoción de delgadas capas de suelo extendidas en forma más o menos

uniforme en toda la superficie del suelo; es poco apreciable ya que la cantidad total de

suelo removido en un aguacero es generalmente pequeña, y ya cuando se detecta sólo

queda una delgada capa de suelo. La erosión laminar es el efecto combinado de la acción

del golpeteo que desprende las partículas de suelo y la escorrentía; Su acción selectiva

sobre las partículas genera “pavimentos de erosión” (Suárez, 1980), los cuales se

producen por la remoción y arrastre de las partículas más livianas -arcilla y materia

orgánica- quedando sobre la superficie suelos gravillosos o pedregosos. De aquí se

desprende su efecto también sobre la fertilidad de los suelos y su productividad; este tipo

de erosión arrastra únicamente la capa superior del suelo, y se propicia en suelos

localizados en condiciones de fuerte pendiente, sin vegetación adecuada y con bajo

contenido de materia orgánica.

1.3.2.3. Erosión en surcos

El flujo laminar sobre la superficie del suelo ocurre principalmente cuando la superficie

es lisa y de pendiente uniforme; sin embargo, en los cultivos esto no se da, ya que las

superficies presentan depresiones, elevaciones, o irregularidades que concentran los


36

flujos de agua en corrientes con capacidad erosiva en función de la velocidad del agua. El

desprendimiento y transporte de partículas son mayores en ésta que en la laminar.

1.3.2.4. Erosión en cárcavas

Surge generalmente luego de la erosión laminar y la erosión en surcos, al aumentar el

volúmen de escorrentía o su velocidad; suele ser producto del descuido en la aplicación

de medidas protectoras cuando se tienen formas incipientes de erosión, pudiéndose

alcanzar estados de gran avance y desarrollo de difícil control posterior (Figura 3). En

ocasiones se hace referencia a cárcavas en su fase inicial como surcos profundizados.

Una vez se inicia la formación de la cárcava, ésta evoluciona según la consistencia

relativa que presenten los diferentes horizontes del suelo; cuando la consistencia del

material es relativamente uniforme, las paredes de la cárcava son más o menos verticales,

en tanto que cuando se presenta un aumento en la resistencia de las capas inferiores, se

desarrollan en forma de “V”. FAO (1967) describe el crecimiento de las cárcavas como el

resultado de diferentes procesos, los cuales actúan o bien aislados, o bien en

combinación, así:

1.3.2.4.1. Tipos de cárcavas

De acuerdo a su forma las cárcavas pueden ser clasificadas en seis categorías diferentes:

 Lineal: de forma larga y con cabeza angosta, de pocos tributarios en sus

costados; puede ensancharse y dar origen a los tipos restantes.

 Bulbosa: ancha y espatulada en el extremo superior, pudiendo ser lineal en su

parte baja; a menudo sigue el curso de un drenaje viejo. Tiene pequeños


37

tributarios en todos los costados; al irse desarrollando dá origen a la cárcava de

tipo dendrítico.

 Dendrítica: formada por muchos tributarios en forma ramificada; puede originarse

siguiendo las líneas de un drenaje natural; su cabeza puede tener forma de

semicírculo.

 Enrejada: los tributarios entran al canal formando aproximadamente un ángulo de

90; se desarrolla principalmente en zonas planas.

 Paralela: compuesta por una o más cárcavas que desaguan en una sola.

 Compuesta: combinaciones de dos o más formas, dándose especialmente en zonas

con problemas avanzados de erosión.

Por otra parte, aunque incorpore subjetividad tal definición, las cárcavas pueden ser

clasificadas de acuerdo a su tamaño tomando como parámetros la profundidad y el área

de drenaje, así (Moder, 1983a):

Tamaño Profundidad (m) Area de drenaje (ha)

Pequeña  2

1
Mediana 1 - 4,5 2–
20
Grande  4,5  20

Las cárcavas pueden además ser clasificadas conforme estén presentes o ausentes algunos

rasgos característicos; considerando el escarpe vertical, éstas pueden ser de dos tipos:

 Cárcava continua o sin escarpe vertical: su cabeza no tiene escarpe vertical

importante; ocurre en suelos granulares cohesivos al deteriorarse la cobertura


38

vegetal por acción de los surcos de erosión. Aumenta en ancho y profundidad

talud abajo y puede presentar sedimentación en sectores de menores pendientes.

 Cárcava con escarpe vertical superior: ocurre en suelos cohesivos o con

coberturas de raíces; es retrogresiva, profundizándose inicialmente e iniciando un

proceso de avance lateral y hacia arriba mediante la ocurrencia de deslizamientos

sucesivos.

1.3.3. Movimientos en masa

Estos movimientos han sido ampliamente desatendidos en el contexto del estudio

de la erosión de suelos (Morgan, 1986), sin embargo, en muchos casos son ellos la forma

dominante de los procesos de erosión. Su importancia, realzada en ciertas condiciones

climáticas de los trópicos, es aun más clara si se entienden estos movimientos como

precursores de otros procesos erosivos, dado que los agentes erosivos se benefician de

la generación de superficies altamente susceptibles a su intervención. Las masas de suelo

desplazadas pierden usualmente la cubierta vegetal protectora así como su carácter

cohesivo como masa unitaria, viéndose alteradas las condiciones que le permiten al suelo

contrarrestar el impacto derivado de la energía cinética de las gotas de lluvia que

alcanzan su superficie, y aquellas que favorecen el proceso de infiltración; de esta forma

alcanzan plena expresión la separación-disgregación de partículas y el escurrimiento

superficial, este último variable en función de las condiciones micro y macro topográficas

Los movimientos en masa son procesos esencialmente gravitatorios por los cuales

una parte de la masa del terreno se destaca del conjunto y se desplaza a una cota inferior a

la original, sin contarse con la intervención de agente de transporte alguno, siendo tan
39

sólo necesario que las fuerzas desestabilizadoras superen las estabilizadoras (Tragsa-

Tragsatec, 1998); sin embargo, el agua es el agente desencadenante al afectar tales

fuerzas.

Estos movimientos pueden ser asimismo definidos (CORNARE, 1995) como

desplazamientos del suelo por acción de la gravedad sin la ayuda de ningún medio de

transporte como agua y viento; sin embargo se destaca conforme recién se indicó, la

importancia del papel del agua, ya que con la saturación del suelo se reduce la fricción

entre las partículas de roca, facilitándose por tanto su movimiento; esto explica porqué

estos movimientos son comunes luego de lluvias largas e intensas. Al mismo respecto,

Varnes (1978) afirma que el inicio de los movimientos está sujeto a aquellos factores que

incrementan los esfuerzos de corte y los que reducen la resistencia del suelo a éste; estos

factores pueden actuar simultáneamente como es el caso del agua que se infiltra en el

terreno y llena los espacios porosos; este agua en los poros se encuentra bajo presión y

tiende a separar las partículas individuales e incluso las unidades de roca, disminuyendo

la fricción interna o la resistencia del material al desplazamiento.

Los movimientos en masa están interrelacionados con la fenomenología de

cuencas torrenciales, de forma que la fuerza torrencial puede ser precursora de los

movimientos en masa a través de socavamientos basales y posteriores derrumbamientos;

o por otra parte, aportarse desde las masas de terreno desplazadas carga sólida hacia los

cauces, incrementándose los efectos de la dinámica torrencial.


40

Sus efectos negativos van desde reducir la capacidad productiva del terreno

afectado, hasta ocasionar daños catastróficos, tanto económicos como cobrando en

ocasiones vidas humanas.

1.3.3.1. Partes de un movimiento en masa

La morfología de un movimiento en masa permite obtener valiosa información tanto del

tipo de movimiento como de su génesis. Hanves (1984) citado por Tragsa-Tragsatec

(1998)Elemento
Númer propone su caracterización aDescripción
partir de los elementos que los componen (Figura 8)
o
cuya correspondencia numérica se consigna en la Tabla 8. La presencia o ausencia de
1 Superficie de rotura Superficie a través de la cual tiene lugar el movimiento
2 Escarpe Parte de la superficie de rotura que coincide con la superficie
tales elementos y sus relaciones dimensionales
del
y espaciales, permiten definir su tipología;
terreno, constituyendo un resalte geomorfológico
3 en el Anexo
Material 3 se tiene una guía Masa
desplazado para de
la material
identificación de los
movida hacia movimientos
afuera activos
de la ladera desde su o
posición
recientemente activos, basada en original en la misma
las características de algunos de los elementos en
4 Zona de deflación Área dentro de la cual el material desplazado se encuentra por debajo
de
cuestión. la superficie original del terreno
5 Zona de acumulación Área en la que el material desplazado se dispone por encima de
la
1.3.3.2. Clasificación y tipología
superficie original del terreno
6 Cabeza Parte superior del material desplazado
Tragsa-Tragsatec (1998) propone una clasificación acorde con la problemática de
7 Cuerpo principal Porción del material desplazado apoyado sobre la superficie de rotura
8 restauraciones
Pie hidrológico-forestales y dedelas
Porción ordenaciones
material desplazadohidro-agrológicas; en ellaoriginal
que se apoya sobre el terreno se
9 Flancos Límites laterales del desplazamiento
10
identifican
Borde
tres tipos de movimientos –derrumbes, deslizamientos y flujos- los cuales a su
Límite del material desplazado que se apoya sobre el terreno original
11 Punta Punto del Borde más alejado del Escarpe
12 vez agrupan genéricamente otrosContacto
Coronación que responden en desplazado
entre el Material forma similar al principio de
y el Escarpe
13 Cabecera Ladera no movilizada o escasamente movilizada, adyacente a la
clasificación inicialmente planteadoparte
superior del Escarpe
14 Superficie original del terreno La existente antes del movimiento
15 Superficie de separación La que limita el Material desplazado de la Superficie original
16 Profundidad del movimiento Distancia entre la Superficie de rotura y la Superficie original,
medida
perpendicularmente
17 Longitud máxima d Distancia entre la Punta y la Cabecera, medida en el plano de la ladera
movimiento el
18 Altura del movimiento Distancia vertical entre la Cabecera y el pie de la Superficie de
rotura,
en una misma sección
19 Longitud horizontal Distancia horizontal entre el pie de la Superficie de rotura y la
Cabecera,
medida en sección longitudinal
20 Grietas transversales y Aberturas del material desplazado, transversales o radiales a la
radiales dirección
del desplazamiento
21 Crestas y Abombamientos en la Superficie del terre desplazado,
acumulación relativa del material no por
transversales movilizado
longitudinales
41

Tabla 6

Elementos de un movimiento en masa

Númer Elemento Descripción


o

1 Superficie de rotura Superficie a través de la cual tiene lugar el movimiento


2 Escarpe Parte de la superficie de rotura que coincide con la superficie
del
terreno, constituyendo un resalte geomorfológico
3 Material desplazado Masa de material movida hacia afuera de la ladera desde su
posición
original en la misma
4 Zona de deflación Área dentro de la cual el material desplazado se encuentra por debajo
de
la superficie original del terreno
5 Zona de acumulación Área en la que el material desplazado se dispone por encima de
la
superficie original del terreno
6 Cabeza Parte superior del material desplazado

7 Cuerpo principal Porción del material desplazado apoyado sobre la superficie de rotura
8 Pie Porción de material desplazado que se apoya sobre el terreno original

9 Flancos Límites laterales del desplazamiento


10 Borde Límite del material desplazado que se apoya sobre el terreno original
11 Punta Punto del Borde más alejado del Escarpe
12 Coronación Contacto entre el Material desplazado y el Escarpe
13 Cabecera Ladera no movilizada o escasamente movilizada, adyacente a la
parte
superior del Escarpe
14 Superficie original del terreno La existente antes del movimiento
15 Superficie de separación La que limita el Material desplazado de la Superficie original
16 Profundidad del movimiento Distancia entre la Superficie de rotura y la Superficie original,
medida
perpendicularmente
17 Longitud máxima d Distancia entre la Punta y la Cabecera, medida en el plano de la ladera
movimiento el
18 Altura del movimiento Distancia vertical entre la Cabecera y el pie de la Superficie de
rotura,
en una misma sección
19 Longitud horizontal Distancia horizontal entre el pie de la Superficie de rotura y la
Cabecera,
medida en sección longitudinal
20 Grietas transversales y Aberturas del material desplazado, transversales o radiales a la
radiales dirección
del desplazamiento
21 Crestas y Abombamientos en la Superficie del terre desplazado,
acumulación relativa del material no por
transversales movilizado
longitudinales
42

1.3.3.2.1. Derrumbes

Se caracterizan por presentar discontinuidades subverticales bien desarrolladas

-estratificación, esquistosidad, fracturación- y darse a velocidades altas; pueden ser de

dos tipos: desprendimientos y vuelcos.

- Desprendimientos: trayectoria aérea vertical por descalce basal y con giro hacia

el exterior; se conocen también como caídas. Varnes (1978) los describe como caídas de

masas de cualquier tamaño, provenientes de una pendiente muy escarpada o acantilado, a

lo largo de una superficie sobre la cual poco o ningún desplazamiento cortante se lleva a

cabo, y desciende principalmente a través del aire por caída libre, rebotando o rodando,

siendo su velocidad de rápida a muy rápida.

- Vuelcos: se presentan por descalce lateral; Varnes (1978) los define como

movimientos debidos a fuerzas que producen un momento tensor alrededor de un punto

de pivote, que se encuentra por debajo del centro de gravedad de la unidad; por la acción

de la gravedad y fuerzas ejercidas por unidades adyacentes; o por fluídos en grietas. Este

movimiento puede o no culminar en caída o deslizamiento, dependiendo ello de la

geometría de la masa en la falla y de la orientación y extensión de las discontinuidades.


43

1.3.3.2.2. Deslizamientos

Se tienen velocidades de lentas a rápidas; la masa desplazada siempre mantiene contacto

con la superficie del terreno. Pueden ser de tipo rotacional y translacional, así:

 Rotacionales: se dan a lo largo de una superficie de rotura

aproximadamente circular y cóncava, inexistente antes del

desplazamiento. Ocurren principalmente en rocas blandas y suelos

profundos, caso de suelos sedimentarios.

 Translacionales: se dan a lo largo de superficies de rotura planas o

suavemente onduladas; se generan a favor de superficies preexistentes, al

menos potencialmente. Si la superficie de rotura está constituída por la

intersección de dos o más planos, se habla de un deslizamiento

translacional de tipo cuña, en tanto que si éste es formado por un sólo

plano, se tiene un deslizamiento translacional de tipo planar.

Este tipo de deslizamientos ocurre principalmente sobre rocas y suelos someros, caso de

la interfase coluvio-esquisto

1.3.3.2.3. Flujos

Se componen de rocas, tierra y agua bien mezcladas que fluyen pendiente abajo en la

ladera; los flujos típicos se originan en un pequeño cañón o quebrada de paredes

abruptas, donde las laderas y el suelo se hallan cubiertos por material inestable sin

consolidar. Existen tres tipos de flujos (Tragsa-Tragsatec, 1998): reptaciones, flujos

plásticos y flujos viscosos, así:


44

 Reptaciones: flujos lentos a muy lentos, sin superficie de rotura nítida y sin una

deformación interna acusada; se pueden diferenciar tres tipos de reptaciones:

a) Masivas: movimientos profundos hacia el valle, de grandes laderas

constituídas por formaciones geológicas amplias y profundas; son de muy

difícil detección, permaneciendo durante décadas e incluso siglos.

b) Superficiales: movimiento de formaciones edáficas o de depósitos

superficiales, cuyo límite en profundidad está marcado por un horizonte

edáfico, la roca madre u otro horizonte más resistente. Su detección en

ocasiones se facilita por la presencia de árboles encorvados con su parte

cóncava mirando ladera arriba, así como por la morfología superficial o

microrrelieve: pequeñas depresiones, protuberancias y ondulaciones.

Ocurren en pendientes empinadas y muy empinadas (55-80% y mayores),

por el efecto combinado de la gravedad, agua del suelo y pisoteo del

ganado, y afecta materiales homogéneos, poco plásticos, que yacen sobre

sustratos arcillosos, plásticos. En condiciones naturales el fenómeno poco

marcado se caracteriza por unos rellenos transversales a la pendiente

general del terreno, separados por pequeños taludes que no muestran

ruptura entre los peldaños; en este caso han recibido la denominación de

“patas de vaca”.

c) Corrientes de reptación: movimientos profundos delimitados por

accidentes tectomorfológicos subyacentes; la deformación plástica interna

es mayor que en los anteriores tipos de reptación, presentando


45

ahoyamientos cóncavos, receptáculos de agua, abultamientos y árboles

encorvados.

 Flujos plásticos: el material acusa intensa deformación interna, sin alcanzar a

producirse roturas dentro de la masa desplazada, aunque la superficie de

deslizamiento es de rotura; alcanzan velocidades de lentas a moderadas.

a) Solifluxión: movimiento del suelo empapado en agua de fusión,

produciéndose el movimiento aún a bajos valores de pendiente; la

profundidad media del movimiento puede ser de 75 cm, y puede alcanzar

velocidades hasta de 150 mm año-1.

b) Flujos de tierra: movimiento de profundidad media, de suelos y coluvios

saturados que se encauzan y adaptan a los cortes y hondonadas del terreno;

son flujos densos de velocidades moderadas que pueden transportar

bloques de rocas y árboles.

 Flujos viscosos: son movimientos de tierra en los cuales el material desplazado se

encuentra sobresaturado y totalmente deformado; se desplaza con el agua a

grandes velocidades.
46
7

Tabla 7

Factores que producen los deslizamientos

Agente Proceso que pone Medio por el cual Materiales más Naturaleza física de Efectos sobre la
al agente en actúa el sensibles a la acción la acción del estabilidad
acción agente del agente
agente
Erosión y transporte. Procesos 1. Aumenta la altura o Todos los materiales Cambios en el estado Aumento de los
constructivos o la inclinación del de esfuerzos. esfuerzos cortantes
erosiones. talud.
Arcillas rígidas Cambios en el estado Aumento de los esfuerzos
o fisuradas. de esfuerzos y cortantes. Se desencadena
Lutitas. abertura de el
fisuras. proceso 8.
Esfuerzos tectónicos Movimientos tectónicos 2. Deformaciones Todos los materiales Aumento en el ángulo Aumento de los
grandes de la de talud. esfuerzos cortantes.
corteza terrestre.
Esfuerzos Temblores o 3. Vibraciones de Todos los materiales Cambios de Aumento de los
tectónicos o uso de explotaciones alta frecuencia. esfuerzos esfuerzos cortantes.
explosivos. con transitorios.
explosivos.
Loess, arenal Alteración de los Disminución de la
ligeramente nexos cohesión y aumento de los
cementadas y gravas. interparticulares. esfuerzos
cortantes.
Arena fina o media, Reacomodo de granos. Licuación
suelta y saturada.
Poro del material Construcción del talud. 4. Arcilla dura o fisurada. Apertura de fisuras Disminución de la
que forma el talud Deslizamiento Lutita. Remanentes de cerradas y producción cohesión. Se acelera el
superficial. viejos deslizamientos. de nuevas fisuras. proceso 8.
5. Deslizamientos en Materiales duros
los estratos débiles al sobre estratos
pie del blandos.
talud.
Agua Lluvias o fusión de 6. Desplazamiento de Arena húmeda. Aumento de presión de Disminución de la
nieve. aire en los vacíos. poro en el agua. resistencia.
8

7. Desplazamiento de Roca junteada. Lutitas.


aire en juntas abiertas.
8. Reducción de Arcilla dura y Expansión Disminución de la cohesión
presiones capilares fisurada. Algunas
asociada con Lutitas.
expansión.
9. Descomposición Cualquier roca. Debilitamiento de los
7

1.3.4. Erosión eólica

La erosión eólica está provocada por el viento y tiene gran importancia en zonas

en las que hay fuertes vientos y suelos de textura fina (como suelos arenosos), afectados

por pastoreo intensivo durante épocas de sequía. La erosión eólica, además, contribuye a

la exposición de la superficie del suelo, generando áreas expuestas y lisas sobre suelos

impermeables, las cuales, debido a la ausencia de una superficie de suelo, a su baja

permeabilidad y a su concentración de sales generalmente alta, es difícil llevar a cabo una

revegetación del área.

Además, la erosión eólica suele ser más acusada en áreas más arenosas (que no

retienen bien la humedad y son poco fértiles) y menos importantes en zonas de cultivo de

texturas gruesas en las que se forman agregados más o menos grandes que son demasiado

gruesos y pesados como para ser transportados por el viento, aunque este sea fuerte.

1.3.4.1. Tipos de erosión eólica

a) Erosión eólica por abrasión: el viento transporta elementos como la

arena, que corta y pule la superficie rocosa que se encuentra expuesta,

generándose modelos eólicos en la superficie. Este proceso genera algunas

formas características en las rocas las cuales se conocen como ventifactos,

yardangs, taffonis y rocas fungiformes.

b) Erosión eólica por deflación: el aire sopla y barre, arrastra o levanta las

partículas que se encuentran en el suelo. Así, hay tres tipos de deflación o

transporte (que explicamos más abajo): saltación, suspensión y rodamiento

o arrastre. Con este tipo de erosión eólica, al final se da el pavimento


8

desértico y se pueden formar tres tipos de desierto: Reg o pedregoso, erg o

arenoso y, por último, rocoso o montañoso.

1.3.4.2. Ejemplos de erosión eólica

La formación de una duna depende de la energía del viento, de la cantidad de arena, de la

presencia o ausencia de vegetación y de la dirección en la que se dirige el viento. Así que

se pueden identificar como ejemplos de erosión eólica los siguientes tipos de dunas:

 Dunas transversales: las zonas donde se forman este tipo de duna presentan gran

cantidad de arena y el suelo está ausente de vegetación

 Dunas longitudinales: este tipo de duna se forma paralela al viento. Suelen ser

dunas de grandes dimensiones. Podemos encontrarlas en Australia, en África y en

los Estados Unidos en Arizona y California.

 Dunas parabólicas: se caracterizan por formarse repentinamente, si las miramos

este desde arriba veremos que tienen forma de “U” invertida, formada por dos

brazos que se unen formando una cima. Presenta dos pendientes, una interna en la

dirección que va el viento, y una externa en dirección contraria al viento.

 Barjanes: en la formación de este tipo de duna el viento se dirige en una sola

dirección y la cantidad de arena es limitada. Tiene forma de media luna,

pareciéndose a las parabólicas, aunque en los barjanes la cima avanza más lenta

que los brazos. Se pueden encontrar en Baja California y Sonora.

 Dunas en estrella: como su nombre indica se les llama duna en estrella ya que

esta se caracteriza por tener varios brazos radiales y el viento que las forma está

constantemente cambiando. Se encuentran en zonas con bastante cantidad de

arena y permanecen fijas.


9

1.3.5. Erosión antrópica

La erosión antrópica es aquella causada por actividades humanas tales como la

agricultura, la industria, la construcción de infraestructuras, el sobrepastoreo, la

deforestación, el transporte de personas y mercancías, etcétera. Como consecuencia de

estas acciones, se produce la pérdida de la capa superficial del suelo, de manera que se

crea un suelo artificial que se encuentra altamente influido por esta actividad humana.

1.3.5.1. Ejemplos de la erosión antrópica y sus efectos

Podemos clasificar de forma básica dos tipos principales mediante los cuales llegamos a

producir la erosión antrópica. Estos son los ejemplos de erosión antrópica según su

tipo.Por un lado, aparece la erosión de construcción (de ciudades, vías de comunicación,

infraestructuras industriales, etc). Por otro lado, la erosión antrópica de explotación,

mediante la deforestación, diferentes técnicas de agricultura intensiva, el pastoreo

excesivo y las minas.

Estas prácticas humanas exponen el suelo a la erosión en mayor o menor medida,

teniendo como factor detonante de dicha erosión la pérdida de la cobertura vegetal

natural y de las capas altas de los suelos. Veamos con más detalle algunos ejemplos de

estas prácticas antrópicas para entender mejor cómo se produce dicha erosión.

1.3.5.2. Ejemplos sobre la sobreexplotación de recursos naturales

 Sobreexplotación de los suelos.

 La minería a gran escala.

 La tala indiscriminada de árboles que produce la deforestación.


10

 La sobrepesca o pesca excesiva que arrasa con el fondo marino y destruye

hábitats y especies.

 La extracción de cantidades inmensas de combustibles fósiles como

petróleo, gas natural y carbón. Estos recursos naturales, al no ser

renovables, tienen un problema mayor con la explotación desmesurada,

puesto que se agotarán mucho antes de lo previsto.

 El recurso del agua cada vez está más sobreexplotado y esto es un gran

riesgo porque, a pesar de ser un recurso renovable, ahora debido a la alta

contaminación que sufre ya no lo podemos usar igual ni se regenera de

igual forma.

 Los animales y las plantas están cada vez más explotados, tanto para

tenerlos en casa o en zoológicos, como para comerciar con ellos para

alimento, medicina, tejidos, etcétera.

1.3.6. Erosión glaciar

La erosión glaciar es la erosión del suelo causada por el movimiento de grandes

masas de hielo.

Los glaciares son considerados agentes naturales erosivos de gran importancia. Se

forman en áreas en las que la cantidad de nieve que se acumula durante el invierno es

siempre superior a la nieve que llega a fundirse durante el verano. La nieve acumulada se

va compactando y recristalizando, dando lugar finalmente a una gruesa masa de hielo. El

proceso de crecimiento y establecimiento del glaciar se conoce como glaciación.


11

Una de las principales características de un glaciar es su movimiento. El hielo del

glaciar se va acumulando hasta alcanzar los 50 metros de espesor. Una vez sobrepasado

ese límite, el hielo empieza a fluir de forma uniforme, condicionado por la fricción, la

velocidad de desplazamiento según la pendiente y la fuerza de la gravedad. Durante el

avance del glaciar, este va modelando el terreno y desplazando todo tipo de rocas que

encuentre a su paso. A su vez, las rocas que ya se encuentran inmersas en el fondo del

glaciar actúan como partículas abrasivas, es decir, actúan lijando y puliendo la superficie

del terreno sobre el que se desplaza. Este proceso de abrasión puede darse mediante la

acción de arrancar, desgastar o pulir el terreno por rozamiento o fricción.

Durante el proceso de erosión glaciar, es común que el hielo provoque la rotura de

las rocas y se infiltre entre las grietas resultantes, dando lugar a fragmentos de roca muy

angulosos. Hablamos entonces del proceso de gelifracción. Además, el flujo constante del

hielo sobre las rocas va produciendo estriaciones características en el terreno, formando

así suelos estriados o pulimentados.

Finalmente, al llegar al final de su recorrido, el glaciar va perdiendo capacidad de

transporte al ir derritiéndose y convirtiéndose en agua (proceso de ablación). En esta

última etapa, del proceso de erosión glaciar se sedimentan los diferentes materiales que

fueron transportándose mezclados y con formas angulosas, unos más grandes que otros.

La velocidad a la que un terreno es erosionado a causa de un glaciar es variable,

dependiendo de 4 factores principales:

a) La velocidad de desplazamiento del glaciar.

b) El espesor del hielo.


12

c) La forma y abundancia de los fragmentos de roca contenidos en el hielo.

d) La erosionabilidad de la superficie por debajo del glaciar.

1.3.6.1. Tipos de erosión glaciar

a) Glaciar de montaña: glaciares de menor tamaño rodeados de relieve

montañoso. Presentan tres partes: circo glaciar (zona de acumulación de

hielo), lengua del glaciar y valle en forma de U.

b) Casquete glaciar: enormes capas de hielo que pueden cubrir una cadena

montañosa o un volcán.

c) Glaciar continental de casquete: son los glaciares de mayor tamaño,

constituidos por inmensas masas de hielo que cubren grandes superficies,

teniendo un espesor más delgado en sus márgenes

1.3.6.2. Ejemplos de erosión glaciar

 La Antártida y Groenlandia son los únicos glaciares de tipo continental de

casquete que podemos encontrar en la actualidad.

 En cuanto a los glaciares de montaña, destaca el Glaciar Perito Moreno

situado en la Cordillera de los Andes Patagónicos, cuyo constante avance

provoca el aumento del nivel de las aguas del lago Argentino al que

desciende.

 Como ejemplo de casquete glaciar, encontramos las masas de hielo que

cubren gran parte del archipiélago de las islas noruegas de Svalbard.

 Por otro lado, la erosión glaciar es también la responsable de la formación

de los fiordos. Aparecen en zonas en las que el mar entra en un valle


13

glaciar. En la ciudad noruega de Bergen, podemos encontrar

impresionantes fiordos que hace años, algún glaciar se dedicó a esculpir.

2. Causas de la erosión del suelo

Las causas de la erosión del suelo pueden ser diversas y entre las

principales se destacan:

 El movimiento del agua. En forma de lluvias, de ríos o de corrientes

marinas, el agua golpea contra el suelo y desprende parte de la superficie,

que es arrastrada por la corriente.

 El movimiento del viento. El golpe de los fuertes vientos contra el suelo,

desprende partículas y restos de la superficie (en forma de polvo, de arena

o de rocas) y los traslada.

 El movimiento de rocas y glaciares. El desprendimiento de hielo en los

glaciares o de rocas que descienden desde lo alto de una ladera, provoca

desgaste o grietas a su paso.

 La exposición a temperaturas extremas. Las condiciones climáticas de

extremo calor o frío que se manifiestan durante un tiempo prolongado,

alteran la superficie del suelo y provocan grietas o rupturas que facilitan su

desgaste.

 El uso y abuso de la tierra por parte del humano. La actividad humana

desmedida, como la agricultura intensiva o la construcción de zonas

urbanas, provoca el deterioro del suelo, en muchos casos, con daños

irreversibles.
14

3. Consecuencias de la erosión del suelo

Las principales consecuencias de la erosión del suelo a causa del accionar

humano, implican:

 La pérdida de rendimiento de la tierra fértil para la sostenibilidad de

los ecosistemas agrícolas y para la productividad de la tierra.

 El aumento de la contaminación y la sedimentación de arroyos y de ríos,

provoca la disminución de las especies que viven allí.

 La desertificación del suelo convierte al terreno en una zona árida o no

apta para la vida (por la falta de agua, de vegetación y de alimento).

 La reducción de la capacidad de filtrado en los suelos desertificados puede

generar inundaciones en la zona.

 El desequilibro del ecosistema genera pérdida de la biodiversidad, es

decir, de las poblaciones animales y vegetales.

 El clima global es alterado, en gran medida, por la reducción de

los bosques que tienen la capacidad de absorber el dióxido de carbono.


15

CAPITULO III

4. CONSERVACION DE SUELOS

5. CONCEPTO

La conservación del suelo incluye todas aquellas técnicas y prácticas enfocadas en

el uso y mantenimiento sustentable de los suelos que son utilizados como recurso natural,

tanto en la agricultura como en la silvicultura y la ganadería.

Debido a que actualmente se trata de un recurso no renovable y que la pérdida de

los suelos constituye una de los principales problemas ambientales a nivel mundial, la

conservación de los suelos es considerada de vital importancia para garantizar que los

diversos factores ecológicos, climatológicos, hidrológicos, sociales, económicos y

culturales interaccionen entre sí, usando de forma sustentable los suelos. También puede

interesarte profundizar en conocer los suelos con la lectura de este otro artículo de

EcologíaVerde sobre los distintos Tipos de suelos y sus principales características.

En el siguiente apartado podremos conocer con más detalle por qué es tan

importante la conservación de los suelos, dentro de la conservación global de la

naturaleza.

6. IMPORTANCIA

Promover el uso sustentable del suelo ha surgido como respuesta a los múltiples y

diversos problemas a los que se ha enfrentado la calidad y la cantidad de los suelos aptos

para el cultivo de alimentos y árboles de todo el mundo.

Diversos estudios han estimado que la naturaleza por sí sola puede tardar unos

200 años en lograr producir 1 cm de suelo fértil, por ello es realmente importante
16

protegerlos y cuidarlos para garantizar su conservación, ya que, de lo contrario, son

capaces de empobrecerse fácilmente y en muy poco tiempo.

7. PRACTICAS DE CONSERVACION DE SUELOS

La protección del suelo contra la erosión requiere compatibilizar su uso con

medidas que eviten o limiten su degradación. Existen numerosos procedimientos que

actúan sobre la cubierta vegetal, el control de la escorrentía, o sobre los factores

topográficos, sea de forma única o combinada. Los más simples consisten en seleccionar

el tipo de vegetación más efectiva para la fijación del suelo, combinar cultivos, la

rotación de cultivos, cultivo en fajas en una ladera, establecimiento de barreras vivas

entre cultivos, etc. Cuando estas medidas no son suficientes, se pueden construir terrazas

con los correspondientes canales de drenaje que permitan la evacuación del agua de

escorrentía de forma controlada. Cuando se trata de paisajes montañosos con laderas

pronunciadas se pueden construir bancales, como los que construyeron los pueblos incas

o mayas en América para poder establecer sus cultivos y viviendas y que tienen un valor

histórico y paisajístico indudable.

A continuación, se explican las características principales de las terrazas y

bancales si bien se remite al lector a las obras más especializadas citadas.

7.1.1. Métodos naturales

a. Mantener la cobertura Vegetal (Bosques, Pastos y Matorrales) en las

orillas de los ríos y en las Laderas. Esto implica el evitar la quema de

la Vegetación de cualquier tipo en laderas. El incendiar la vegetación es

un acto criminal, que va en contra de la fertilidad del Suelo; deteriora el


17

hábitat de la Fauna, y deteriora la disponibilidad del recurso Agua.

Reforestar las laderas empinadas y las Orillas de ríos y quebradas.

b. Cultivar en surcos de contorno en las laderas y no en favor de la

pendiente, porque favorece la Erosión.

c. Combinar las actividades agrícolas, pecuarias y forestales (agroforestería),

y sembrar árboles como cercos, en laderas, como rompevientos, etc.

d. Rotar Cultivos, leguminosas con otros, para no empobrecer el suelo.

Integrar Materia orgánica al suelo, como los residuos de las Cosechas.

7.1.2. Métodos artificiales

a) Construir andenes o terrazas con plantas en los bordes.

Son obras que limitan el recorrido del agua de escorrentía o modifican el perfil

topográfico de una zona, de manera que disminuyan los procesos erosivos sin impedir el

uso agrícola o forestal del suelo. En la figura 4.4 se muestra un esquema de una terraza

agrícola en la que se indican los elementos básicos que la componen: canal, lomo y talud.

Este tipo de terrazas no modifica la pendiente general de la ladera, sino que tan solo

acorta la distancia que recorrería la escorrentía en la ladera, desviándola lateralmente

hacia los cauces naturales. Los bancales, en cambio, tienen un perfil en escalera, por lo

que alteran la topografía natural al nivelar el terreno.

Las principales funciones que realizan las terrazas son: reducir la erosión laminar

y/o en regueros (factores LS de la USLE), nivelar el terreno para facilitar la mecanización

agrícola (solo los bancales), retener agua y mantener la humedad del suelo y evacuar el

exceso de agua de escorrentía sin erosión.

Estas obras de conservación del suelo se pueden clasificar como sigue:


18

 Según el perfil

— Bancales (estrechos y altos), normalmente nivelados

— Terrazas: plataformas de base ancha (anchas, poco desnivel, ligera

pendiente). Existen muchas variantes y formas de construcción.

 Según el control del agua

 Absorción

 Desagüe o drenaje

El diseño de las terrazas debe dificultar lo mínimo posible el uso del suelo. La

decisión de construir terrazas de drenaje o absorción se debe tomar en función del clima

de la zona y de la capacidad de infiltración de los suelos. Es muy arriesgado construir

terrazas de absorción en climas con precipitaciones intensas, aunque sean ocasionales, ya

que, si se sobrepasa la capacidad de retención de estas, se pueden producir cárcavas.

También es importante hacer un mantenimiento periódico de los bancales y terrazas,

retirando sedimentos que puedan obstruir los canales y reparando los lomos y taludes.

En zonas de pendientes suaves, se pueden cultivar la plataforma, el lomo y el

canal, siempre que se pueda garantizar que no se erosionarán. En caso contrario, se debe

mantener el talud con vegetación permanente (barreras vivas) o, si es muy vertical, se

puede construir con muros de piedra seca (barrera muerta de piedras) u otras técnicas.

7.1.2.1. Cálculo del espaciamiento de las terrazas

Cuando se planifica la construcción de terrazas en una zona, hay que determinar la altura

o separación vertical y la anchura o intervalo horizontal, además de la forma del perfil y

del sistema de construcción. El diseño de las terrazas debe ir acompañado de una red de
19

drenaje bien organizada y dimensionada. Para una determinada pendiente del terreno, el

intervalo vertical y el horizontal están relacionados. El intervalo horizontal está muy

condicionado por el uso del suelo (por ejemplo, por el tipo de cultivo que se quiera

implantar). Se pueden calcular atendiendo a la modificación del factor topográfico de la

USLE.

Cálculo de la anchura de las terrazas (intervalo horizontal):

Anchura (m) =(100 LS / 0,75 +0,53p + 0,076 p2)2

donde:

LS = factor USLE

p = pendiente (%)

Cálculo del intervalo vertical (altura) según el Ministerio de Agricultura español:

donde:

h = altura en m

p = pendiente (%)

En la tabla 4.6 se proponen unas longitudes máximas de las terrazas en función de

la pendiente que se pueda dar al canal construido sobre suelos poco o muy

erosionables. Si la situación de las quebradas o torrentes naturales no permite un

desagüe directo, se deberán construir canales protegidos con bloques de piedra u

hormigón para bajar las aguas hasta el fondo del valle.

En la tabla 4.7 se comparan las dimensiones verticales y horizontales de bancales

diseñados atendiendo a diferentes criterios, según países. Se debe buscar una


20

solución de compromiso entre la mínima altura posible de talud y la máxima

anchura (es decir, superficie cultivable) atendiendo al tipo de cultivo que se quiere

instalar, sus requerimientos de mecanización, estabilidad de los taludes y coste de

construcción.

Longitud lateral Pendiente lateral máxima del bancal


(m) (%)
erosionables poco erosionables
< 30 2,00 2,50
31-60 1,00 1,50
61-150 0,50 0,65
151-365 0,35 0,50

7.1.2.2. Movimiento de tierras para la construcción de bancales

La construcción de bancales supone excavar suelo de unos puntos para terraplenar

en otros. Estas operaciones se deben realizar teniendo en cuenta que el suelo está

formado por distintas capas u horizontes que no tienen las mismas propiedades ni

fertilidad, por lo que si no se realiza correctamente, el resultado final puede ser peor que

la situación de partida si se entierran las capas más productivas. Dentro de lo posible, se

debe separar previamente la capa superficial (horizonte A) para reponerlo una vez

nivelado el terreno. Los rellenos de terraplenes se pueden construir con los materiales

más pedregosos y estériles, colocando en superficie los horizontes B y A del suelo

original.

b) Construir Zanjas de infiltración en las laderas para evitar la erosión en

zonas con alta pendiente. Construir defensas en las orillas de ríos y


21

quebradas para evitar la erosión. Abonar el suelo adecuadamente para

restituir los nutrientes extraídos por las cosechas.

c) El abonamiento debe evitar el uso exagerado de Fertilizantes químicos, de

lo contrario se mermará la Microflora y Microfauna del suelo y se pueden

producir procesos de intoxicación de los suelos. Antes es conveniente

hacer un análisis para determinar las deficiencias y según ello aplicar un

programa de fertilización

7.1.3. Métodos artificiales

a) Construir andenes o terrazas con plantas en los bordes.

b) Construir Zanjas de infiltración en las laderas para evitar la erosión en

zonas con alta pendiente. Construir defensas en las orillas de ríos y

quebradas para evitar la erosión. Abonar el suelo adecuadamente para

restituir los nutrientes extraídos por las cosechas.

c) El abonamiento debe evitar el uso exagerado de Fertilizantes químicos, de

lo contrario se mermará la Microflora y Microfauna del suelo y se pueden

producir procesos de intoxicación de los suelos. Antes es conveniente

hacer un análisis para determinar las deficiencias y según ello aplicar un

programa de fertilización.
22

7.1.4. Principales prácticas de conservación del suelo.

7.1.4.1. Análisis del suelo

La agricultura dio un salto cuando se descubrieron y aplicaron los abonos químicos, pero

hoy se confronta el problema del aumento de la salinidad de los suelos, provocado por el

exceso de abonos. Un análisis previo, en laboratorios especializados, de las características

físico-químicas del suelo en función de cada cultivo, permite la aplicación de los

fertilizantes adecuados en las cantidades óptimas, evitando los excesos. El movimiento

de agricultura orgánica ha avanzado en encontrar y difundir tecnologías que contrarresten

las negativas secuelas sobre el suelo de la llamada revolución verde y los agroquímicos.

7.1.4.2. Conservación de los organismos del suelo

Promover el equilibrio de los organismos beneficiosos del suelo es un elemento clave de

su conservación. El suelo es un ecosistema que incluye desde los microorganismos,

bacterias y virus, hasta las especies macroscópicas, como la lombriz de tierra.

Los efectos positivos de la lombriz son bien conocidos, al airear, al crear drenajes y al

promover la disponibilidad macronutrientes. Cuando excretan fertilizan el suelo con

fosfatos y potasio. Cada lombriz puede excretar 4,5 kg por año.También los

microorganismos cumplen un papel vital para la obtención de macronutrientes. Por

ejemplo, la fijación de nitrógeno es realizada por bacterias simbióticas. Estas bacterias

tienen la enzima denominada nitrogenasa, que combina el nitrógeno gaseoso con

hidrógeno, para producir amoníaco, que es convertido por las bacterias en otros

compuestos orgánicos. Algunas bacterias nitrificantes tales como Rhizobia, viven en los
23

nódulos de las raíces de las legumbres. Establecen una relación mutualística con la

planta, produciendo el amoníaco a cambio de los carbohidratos. Varios hongos

desarrollan micorrizas o asociaciones simbióticas con las raíces de plantas vasculares.

Estos hongos aumentan la disponibilidad de minerales, del agua, y de alimentos

orgánicos a la planta, mientras que extraen a los azúcares y a los aminoácidos de la

planta.

A menudo hay consecuencias imprevistas e involuntarias del uso de químicos sobre los

organismos del suelo. Así cualquier uso de pesticidas se debe emprender solamente

después del análisis cuidadoso de las toxicidades residuales sobre los organismos del

suelo, así como de los componentes ecológicos terrestres.

La erosión hídrica reduce significativamente el potencial de producción en los campos. El

agua que escurre decapita el horizonte superior del suelo (el más fértil). En terrenos con

pendiente, este problema se evita si se reduce la velocidad del agua con la utilización de

canales de evacuación de excedentes hídricos, denominados "terrazas". Las terrazas

constan de un canal de intercepción y un lomo de tierra, cruzan la pendiente de tal

manera, que el agua que captan es ordenada y encausada hacia un canal de desagüe que

deposita los excedentes fuera del lote con una velocidad no erosiva, pero además de

frenar un escurrimiento excesivo estas obras fomentan la infiltración del agua, es decir

que aseguran que la mayoría de las gotas de agua que entran a el campo se queden allí,

almacenando mas agua para el cultivo. La medición de estas obras hidráulicas es llevada

a cabo por ingenieros agrónomos y se utilizan para su construcción implementos tales

como arados, rastras de discos, palas de arrastres, terraceadores y motoniveladoras. Estas


24

obras previenen la formación de surcos y zanjas, algunos de estos con un ancho de 20 m

y una profundidad de 4 m dependiendo de la intensidad y longitud de la pendiente.

7.1.4.3. Rotación de cultivos

Cada tipo de cultivo tiene sus necesidades y muchas veces lo que falta para uno sobra

para el otro. Así, un manejo adecuado de los cultivos resulta en menor necesidad de

abonos y de protecciones. Como regla general, es muy beneficioso intercalar leguminosas

y gramíneas en un ciclo productivo.

7.1.4.4. Abono verde

Consiste básicamente en sembrar un [cultivo]], sin el objetivo de aprovechamiento

económico y única o principalmente para mantener el suelo cubierto y disminuir la

erosión entre los períodos de cultivos comerciales, o entre las filas de los cultivos

permanentes. Como normalmente se plantan especies que aumentan la fertilidad del

suelo, como las leguminosas, que fijan el nitrógeno directamente o con la ayuda de

bacterias, el resultado es una mayor productividad en el siguiente período. Existen

también plantas que reducen la compactación del suelo con sus raíces profundas.

7.1.4.5. Siembra directa

Es probado que es una de las mejores técnicas de conservación de suelos. Se entiende por

Siembra Directa a la siembra del cultivo sobre los restos del cultivo anterior, sin laborear

el suelo, de manera que por ejemplo, se abre apenas haciendo una microlabranza en un

surco para la semilla y el fertilizante. Se usan sembradoras especiales (de directa) con una

batería de discos y cuchillas que realizan la operación en el suelo. Con esta técnica se

promueve la conservación del suelo y de su actividad biológica. Una de las principales

ventajas es la presencia de cobertura sobre el terreno y la reducción significativa de la


25

compactación de las capas más profundas del suelo, es decir que evita los pisos de arado.

Su principal desventaja es un aumento inicial del uso de herbicidas para controlar

malezas. Por ello la asesoría de un agrónomo o técnico especializado es fundamental en

el proceso. Sin embargo, las ventajas se incrementan cosecha a cosecha, son

acumulativas y se trata de un proceso virtuoso.

7.1.4.6. Explorar sinergias

Varias actividades agrícolas son complementarias, pudiendo generar economía de

recursos si son bien exploradas. Asociar cultivos anuales con ganadería o la avicultura

puede ahorrar energía y abonos y generar beneficios para el agricultor y el medio

ambiente.
26

CONCLUSIONES

 Finalmente, vamos a concluir recordando nuevamente que uno de los retos más

importantes con que se enfrenta la humanidad, es la degradación del medio

ambiente en general y concretamente la degradación del suelo. La deforestación

masiva que han sufrido los suelos en todo el mundo como resultado de una

presión socioeconómica cada vez más asfixiante, unida a un desconocimiento

absoluto de los gravísimos problemas que conlleva la utilización indiscriminada

del suelo ha desembocado en la dramática situación actual.

 Lo que podemos concluir es que hay muchos factores de erosión del suelo,

algunos de ellos son naturales, pero también hay unos que son por intervención

del hombre que se pueden prevenir no así como la erosión hídrica, eólica entre

otras ya que son producto de la naturaleza.

 La conservación del suelo para las generaciones futuras es un deber moral

irrenunciable, su realización práctica está todavía a nuestro alcance y constituye

una línea de conducta que puede ser llevada a cabo de manera individual sin

esperar a que nos sea impuesta por la Administración la cual va siendo lentamente

sensibilizada sobre los gravísimos problemas medioambientales.

 Todo tipo de vida depende de la calidad del suelo para su supervivencia. Por ende,

la protección de este recurso natural debe ser una política nacional e internacional.
27

 Para lograr lo anterior y, al mismo tiempo, un manejo adecuado del suelo, es

necesario contar con indicadores que permitan evaluar su calidad.

 El desarrollo de tales indicadores debe hacerse con base en las funciones del suelo

que se evalúan; considerando aquellas propiedades edáficas sensibles a los

cambios de uso del suelo.


28

LINKOGRAFÍAS

 http://www.fao.org/fao-stories/article/es/c/1193735/

 https://www.ecured.cu/Conservaci%C3%B3n_de_los_suelos

 https://es.wikipedia.org/wiki/Conservaci%C3%B3n_del_suelo

 https://www.un-spider.org/es/enlaces-y-recursos/fuentos-de-datos/daotm-

erosion-suelo

 https://www.iaea.org/es/temas/control-de-la-erosion-del-suelo

 https://www.ecologiaverde.com/tipos-de-erosion-2418.html

 https://www.ecologiaverde.com/que-es-la-erosion-del-suelo-causas-y-

consecuencias-1500.html

 https://concepto.de/erosion-del-suelo/

 https://infoagro.com.ar/que-es-la-erosion-del-suelo-sus-causas-y-

consecuencias/

 https://www.un-spider.org/es/enlaces-y-recursos/fuentos-de-datos/daotm-

erosion-suelo
29

ANEXOS

Figura 1
(a) Relaciones Precipitación-Escorrentía; (b) Tipos de mediciones de la Intensidad de la
lluvia
30

Figura 2
Cárcavas
31

Figura 3

Modelos de formación de cárcavas


32

Figura 4

Erosión regresiva o remontante


33

Figura 5
Proceso de formación de cárcavas

Figura 6 .
tipos de cárcavas
34
35
Figura 7

Tipos y partes de movimientos en masa


36

Figura 8

Clasificación de los movimientos en masa


37

Figura 9

Esquema de una terraza de cultivo

Figura 10
Esquema de terrazas diseñadas para la evacuación de la escorrentía (drenaje
o desagüe) y las que su función es almacenar el agua en el suelo (absorción).
38

Figura 11

Ejemplo de erosión eólica – Dunas

Figura 12

Ejemplo de erosión glaciar


39

También podría gustarte