Está en la página 1de 5

Las 200 multinacionales más poderosas dictan la política mundial: Según

Clairmont y Cavanagh, la cifra de negocio anual de las 200 mayores multinacionales supone,
aproximadamente, la cuarta parte (26,3%) de la producción mundial. Entre esas empresas transnacionales
están: Shell, General Motors, Ford, Exxon, IBM, Mitsubishi, Toyota. Philip Morris, General Electric.
Así, las sedes de estas 200 empresas se hallan en tan solo 17 países. Más de una tercera parte (74) son
estadounidenses. Después de Estados Unidos, destaca Japón, seguido por Reino Unido, Francia, Alemania,
Canadá e Italia, por lo que el Grupo de los Siete (el G-7) aglutina el 80% de las multinacionales. Fuera de este
grupo, solo Suiza, Corea del Sur, Suecia, Australia y Países Bajos pasan de la docena.

Origen y evolución de las multinacionales

Las empresas multinacionales son sociedades ¡industriales, comerciales o


financieras que están presentes en distintos países del mundo. Las multinacionales
modernas surgieron con las inversiones directas de Estados Unidos en Europa en
los años cincuenta y sesenta del siglo XX. Este fenómeno se hizo mundial cuando se
sumaron a él las empresas europeas y japonesas. En la actualidad, en países
emergentes como China. India, México, Brasil y los del sudeste asiático también
han surgido distintas multinacionales.

En los orígenes, se utilizaban tres formas de organización para estructurar esta


concentración empresarial:

• El trust reunía empresas de un mismo sector controladas por una o dos grandes
firmas para monopolizar la explotación de un producto y poder regular su precio.

• El cártel reunía a empresas que no se fundían, pero que se asociaban para llegar
a acuerdos comunes sobre abastecimientos, procesos y precios, y así evitar la
competencia entre ellas.

• El holding, en cambio, era una sociedad financiera o bancaria que controlaba la


mayoría de las acciones de diversas empresas industriales y comerciales.

La globalización de la economía y el desarrollo del capitalismo financiero en los


últimos años del siglo XX hicieron que friera esta última la modalidad que más se
extendiera. Para evitar competencias molestas, controlar los mercados e imponer
los precios a su conveniencia, las grandes multinacionales potencian todo lo que
pueden el proceso de concentración y acumulación de empresas diversas. Así unas
pocas firmas, ya sea directamente o a través de sus filiales, han conseguido
dominar la producción a escala mundial en algunos sectores formando auténticos
oligopolios.

Localización de las multinacionales


mayoría de las multinacionales pertenecen a países liados, donde
cuentan con un número importante filiales y concentran la mayor
parte de las inversiones.

Sin embargo, en los últimos años han crecido vertiginosamente sus inversiones en
los países menos desarrollados, atraídas por una mano de obra abundante y
barata, un trato fiscal muy favorable y una legislación permisiva o inexistente en
materia de salud y seguridad o protección del medio ambiente.

Los países menos desarrollados donde se instalan las multinacionales se benefician


de sus inversiones y del empleo que crean. En estos espacios, sus trabajadores
perciben unos salarios más bajos que los que cobrarían si desempeñaran esa
misma tarea en un país desarrollado, pero más elevados que los de las empresas
de la zona. Por estos motivos, estos países a menudo compiten entre ellos para ser
los que acojan las fábricas de estas empresas, ofreciéndoles fundamentalmente
ventajas fiscales.

El Primer Productor Mundial de Acero

El mercado siderúrgico mundial se ha visto convulsionado en marzo de 2005 por la


aparición de un nuevo grupo empresarial, Mittal Steel Company, que se ha
convertid ni el primer productor mundial de acero. El citado grupo se ha formado
tras la fusión de la compañía estadounidense International Steel Group (ISG) con
las firmas holandesas Ispat International Group yLNM Holdings, dos grupos
siderúrgicos, que ya eran propiedad de la familia Mittal. La formación de este nuevo
gigante del acero supone una facturación superior a
los 24.000 millones de euros, con una plantilla de
165.000 trabajadores y operaciones en 14 países
diferentes jara lograr una producción en torno al
6% mundial.

La operación ha estado dirigida por el magnate


indio Lakshmi Mittal (foto derecha) , perteneciente
a una familia de Calcuta que comenzó controlando dos de las principales
siderúrgicas de la India. Posteriormente, Mittal se introdujo en Indonesia y. sobre
todo, en países del este europeo como Polonia y Rumania, donde aprovechó la
situación de crisis que atravesaba el sector en esa región para adquirir empresas a
costes moderados. La actual compra de un grupo estadounidense, aunque puede
tomarse como una pequeña sorpresa, no es más que la manifestación de un
proceso económico que se avecina imparable: la incorporación de las grandes
fortunas de los países emergentes al proceso de globalización y a las estrategias de
las grandes multinacionales.

Papel de las multinacionales

La extensión de la globalización de la
economía internacional desde finales del
siglo XX ha permitido la consolidación de las
empresas multinacionales. A comienzos del
siglo XX, en el mundo hay unas 85.000
empresas multinacionales con más de
900.000 empresas filiales y 54 millones de
empleados directos. Unas cifras que no
paran de crecer. Desde 1983, el crecimiento económico de estas empresas ha sido
el mayor de su historia, ya que se han beneficiado de la caída de las prohibiciones
al comercio y a la inversión extranjera, y del abaratamiento de los costes de
transporte y comunicaciones.

Las ventajas de estas organizaciones empresariales son: el provecho que obtienen


de las diferencias de precios y de salarios entre los países en que se encuentran
instaladas y los países a los que se dirigen los productos; el ahorro de impuestos
por medio de complicadas estrategias de mercado; la proximidad a los potenciales
clientes; y la obtención de información de primera mano sobre las actividades de
sus más directos competidores. Aunque en los últimos años también han surgido
empresas multinacionales en países emergentes, aun así las más grandes siguen
perteneciendo esencialmente a Estados Unidos, Reino Unido, Japón, Alemania y
Francia El poder económico de estas multinacionales está muy concentrado. Las
100 firmas más importantes de entre las aproximadamente 85.000 multinacionales
suponen el 13 % de los trabajadores y el 14% de las ventas mundiales. Una
multinacional como la General Motors tiene unos ingresos similares a la producción
de Dinamarca Además, las multinacionales son las responsables de la mayoría de
las inversiones que se realizan en el extranjero y, por tanto, del crecimiento de la
economía mundial.

Zara, de taller a multinacional

En 1975, en Galicia (España) aparecía la primera


tienda Zara. Veintisiete años después, Zara poseía
más de 500 tiendas en todo el mundo, como las que existen en Nueva York,
Tokio, Bruselas, París, Milán o Dubai.

La mayor parte de las prendas se venden en todo el mundo, pero un pequeño


porcentaje de la producción se adapta a los gustos particulares de la cultura de los
países de destino, lo mismo que el funcionamiento de la tienda. Así, por ejemplo,
en Arabia Saudí este comercio cierra cinco veces al día, coincidiendo con el número
de oraciones diarias que prescribe el islam.

El éxito de Zara radica en una ropa actual y de precio asequible. Se trata de unas
prendas que se diseñan y confeccionan sobre la marcha, según las tendencias del
momento. Desde el punto de vista empresarial, la clave radica en una perfecta
organización que permite esa respuesta rápida que exige la moda. El rápido y
continuo abastecimiento de las tiendas, que reciben mercancía nueva dos veces por
semana, supone un ahorro en gastos de almacenaje.

Zara no realiza campañas publicitarias; por este motivo, sus escaparates, pero
sobre todo la ubicación de sus tiendas, son factores determinantes para las ventas.
El 80% de sus prendas se confeccionan en Europa, pero, como casi todas ¡as
grandes empresas, ha desplazado el 20% restante a países menos desarrollados
(Marruecos, Tailandia, Perú).

Expansión de la Multinacional Nike

• En 2003, Nike vendía productos por valor de 10.700 nilones de dólares. El 51 %


de estas ventas se realizaron fuera de Estados Unidos.

• Su logo y el eslogan que lo caracteriza son reconocibles en todo el mundo.

• Solo un 1 % de sus artículos se fabrica en Estados Unidos. El 99% se produce en


35 países, la mayoría asiáticos, donde la mano de obra es barata.

• La firma deportiva ha creado cadenas de tiendas a nivel internacional que están


más cercanas a los parques temáticos que al concepto tradicional de tienda de
ropa.

• Anualmente, Nike gasta más de 500 millones de dólares en publicidad. La


multinacional paga sumas millonarias a destacados deportistas, a equipos y a
selecciones de fútbol por llevar su marca.

Poder de las multinacionales


Desde los años 80 del siglo XX, el crecimiento de estas empresas ha sido el mayor
de su historia. En la actualidad, las grandes multinacionales tienen un peso similar
de algunos Estados y superior al de la mayoría. Este poder va en aumento, ¡que ha
generado preocupación y desconfianza en muchos sectores de la sociedad.

En las democracias occidentales han aparecido unos grupos de poder (lobbies) que
representan a las multinacionales y que, a través de mecanismos tales como la
financiación de las campañas de los partidos políticos, tratan de influir en los
gobiernos de las naciones.

En ocasiones, personas que antes ocupaban puestos directivos en una gran


empresa pasan a formar parte del gobierno. Esto provoca sospechas de que las
medidas que proponen (como la concesión de subvenciones) se tomen
exclusivamente para favorecer a sus antiguas empresas.

En los países pobres, las multinacionales influyen también sobre los gobiernos para
que sus intereses económicos no se vean afectados por medidas relativas a la
legislación laboral, fiscal o medioambiental.

En todo caso, una parte importante de la actividad económica de un país está


todavía, controlada en alguna medida por su gobierno, lo que contrarresta el poder
de las multinacionales. Y algunas ONG realizan campañas de información sobre los
abusos que detectan con el fin de que una mala publicidad dañe la imagen de la
empresa, que esto provoque un descenso de las ventas y, con ello, de los
beneficios.

También podría gustarte