UNIVERSIDAD ICESI

ECONOMÍA Y NEGOCIOS INTERNACIONALES

ÉTICA Y ORGANIZACIONES
NICOLÁS CAMPO RAMÍREZ - A00333128
INFORME DE LECTURA [ESTRUCTURA DEL ACTO MORAL]

1. ESQUEMA DE LA LECTURA
 2.

CASO RELACIONADO CON LA LECTURA

El caso corresponde a un artículo publicado el 31 de agosto de este año por el periódico El

Tiempo. La noticia titula “Reclaman legítima defensa en caso de militar al que iban a
atracar”:

Como un acto de legítima defensa calificó el abogado William Naranjo el episodio en el

que su cliente, un militar en retiro, le disparó y causó la muerte a un hombre que
supuestamente intentó asaltarlo a él y a un taxista que lo transportaba.
El hecho ocurrió hacia las 5 de la tarde del miércoles, cuando el hombre, según su versión y
la de la Policía, fue amenazado por al menos tres delincuentes cuando se desplazaba por
la calle 37 sur con carrera 10.ª, en el barrio Pijaos, de la localidad Rafael Uribe Uribe.

Según la versión que entregaron las víctimas (taxista y pasajero) a las autoridades, en el
intento de asalto los supuestos delincuentes rompieron uno de los vidrios laterales del taxi
y fue en ese momento en el que el militar en retiro accionó un arma de fuego contra uno
de ellos. Él dijo que vio a tres personas.

El abogado Naranjo aseguró que después de disparar su cliente se bajó del vehículo, pero
varias personas intentaron agredirlo y tuvo que volver a subirse al taxi, al que, entonces, le
rompieron el vidrio trasero.

La información de la Policía indica que el hombre que murió en el intento de asalto tenía
antecedentes, había estado detenido recientemente y tenía prontuario por varios delitos,
entre ellos hurto agravado. La Policía hizo pública la foto de la persona fallecida, pero no
suministró su nombre.

El sargento retirado contaba con salvoconducto y permiso para portar el arma, y por
ahora ha hablado a través de su abogado por temor a represalias.

Naranjo dijo que solicitarán a las autoridades que califiquen el caso como legítima defensa
y se tengan en cuenta los antecedentes de la persona fallecida, que, según la información
preliminar, no era la primera vez que abordaba a sus víctimas para despojarlas de sus
pertenencias, como ocurrió el miércoles con su cliente.1

1
Disponible en: https://www.eltiempo.com/bogota/reclaman-legitima-defensa-en-caso-de-asalto-a-militar-
que-mato-al-ladron-262502
 3. Relación caso – teoría

En Colombia el tema de la legitima defensa sigue siendo muy discutido, pues es necesario
que se cumplan ciertos requerimientos para que la acción sea clasificada, efectivamente,
como legítima defensa. Sin embargo, no es de nuestro interés profundizar en la discusión
de catalogar como legal o no el asesinato del ladrón por parte del ex militar, para nosotros
es mucho más importante adentrar en el tema ético, pues, como objetivo general me
propongo, con este contra ejemplo, evidenciar las razones por las cuales el acto de
defender al taxista no se puede describir como un acto moral.

De este modo, como argumento base, el autor Alfonso Sánchez Vásquez en su obra
describe claramente los requisitos que deben cumplirse para que una acción sea capaz de
clasificarse como un acto moral. Exigencias que dentro de las cuales se encuentra que
dicho acto concreto no debe ir en contra de las normas comúnmente aceptadas, y
obviamente el asesinato de una persona justificado en la legitima defensa aun es un tema
polémico en Colombia, y no es amparado en su totalidad por la norma.

Adicionalmente un acto moral es impulsado con el objetivo de alcanzar un fin, aparte

debe ser un acto consciente, requerimiento que no cumple la acción del policía, ya que se
entiende el accionar del arma como un acto reflejo al sentirse amenazado por los tres
ladrones. Siguiendo la teoría de Sánchez, la acción del individuo se cataloga como instinto,
por tanto, aunque las personas del común vean como un acto moral y heroico lo sucedido,
la teoría nos dice que no es posible identificar un acto moral aquí.

Por otra parte, la acción se realizó sin ser consciente de un fin, es decir, no se planeaba
alcanzar un resultado concreto, no fue un acto voluntario y mucho menos tuvo
alternativas para escoger en esa situación. No fue conciente de los medios y mucho
menos de como emplearlos. Así entonces no dimensionó las consecuencias que ello le
traería. Por tanto, no se cumple ningún requerimiento para que sea un acto
moral.Entonces, con este contra ejemplo se han evidenciado las diferentes características
que debe cumplir una acción para que sea clasificada como acto moral y la complejidad
que ello implica.