Está en la página 1de 1

Oración a la propaganda de María Elena Walsh (1967)

Me dijeron señora caballero Quiero vestirme de papel de luna


usted se lo merece desconfíe y pasear con un río de la mano.
estimada mamá fume perfume Quiero comer tormenta,
para el bebé automático repare beber las plumas de la primavera,
brillantina a botón no se equivoque navegar tristemente
es mejor una lata que sus párpados por un océano de bellas artes,
asómbrese de frío radioescucha vivir entre laderas que convengan
venga mañana mismo pura seda para guardar el humo envuelto en fuego.
tiene la obligación para la barba
pintando yerba mate con camiones. Quiero desbaratar, equivocar,
llorarme, cometer escalofrío.
Yo me di por unánime aludida,
reina en mi condición de Amada Inmóvil, Quiero un poco de pasto sin consejos.
y a la vida salí sumisamente Luz desinteresada, alguna vez.
para ser caballero-bebé-niña- Oscuridad sin recomendaciones.
tímpano-multitud-hermafrodita- La noche con sus lujos naturales.
fantasma de trajín, suma de nadie. Días sin aspavientos oficiados
pobre basura humana con bolsillos. por raudos sacerdotes de etiqueta.
Caminos sin sermones de madera.
No quiero que me broten cuatro ruedas Silencio sin imperativos, aire
ni dar a luz relámpago envasado desnudo, sumergido
ni ser ociosa cabellera en la piedad de las constelaciones.
ni que mi soledad se planche sola.
No quiero que por arte de aspirina Quiero no querer nada y un buen día
mi alma desaparezca. (“¿cómo era, Dios mío, cómo era?”)
No quiero que voraces vestimentas
sean protagonistas de mi cuerpo. Sobre todas las cosas, ¡quiero basta!
No quiero hacerme cómplice
de máquinas, docenas, precios, tubos
que me doten para siempre
de una felicidad de cartulina.
No quiero verme más fotografiada
en colores mundiales, absorbiendo
jugo de miedo de una botellita.
No quiero que usen mi inmortalidad
junto a dentífricos interminables.
No me quiero mirar petrificada
al lado de jabones eminentes.
No quiero que eternicen mi impudor
ni haga espuma con mi sufrimiento.

También podría gustarte