Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Introducción
Desde sus inicios, ya hace más de dos décadas, la
Inteligencia Emocional ha despertado un gran interés tanto
entre el público general como entre investigadores y
profesionales de todo el mundo. A lo largo de estos años, las
aportaciones científicas han ido demostrando y confirmando
que se trata de una habilidad básica para el desarrollo de las
competencias que aumentan nuestro bienestar y ajuste
psicológico, y que influye en aspectos tan diversos y
trascendentes como las relaciones interpersonales, el
rendimiento académico, laboral y deportivo, o la salud mental
y física. Es por ello por lo que resulta importante conocer los
ámbitos de aplicación y como aplicar la inteligencia emocional
en cada uno de ellos, también es importante conocer los
orígenes de la IE, las investigaciones realizadas y las mejoras
a que se obtienen través de su aplicación.
1.Mayor productividad
El mismo estudio revelo que el 10% de los sujetos de la investigación con mayor
nivel de inteligencia emocional rendian más en sus labores que aquellos con un
nivel más bajo de IE.
Otro estudio llevado a cabo por una empresa de Dallas, y que evaluó la
inteligencia emocional de todos sus trabadores, concluyo que aquellos con
puntuaciones mas altas de IE eran hasta un 25% mas productivos que aquellos
con puntuaciones bajas.
2.Mas ventas
Dos investigaciones, en una empresa de retail y otra en una empresa del sector de
la construcción, demostraron que los trabadores con puntuaciones altas en IE
manejaban mejor las situaciones difíciles y sufrían menos accidentes de trabajo.
Los humanos somos seres sociales y no podemos evitar las relaciones con los
demás, la interacción es necesaria y no solo eso, sino que además nos permite
desarrollarnos, enriquecernos y conocernos mejor a nosotros mismos por esto las
relaciones sociales son de gran importancia para todos nosotros. Se trata así de
una fuerte imprescindible para nuestro bienestar y nuestra felicidad. Pero ¿todas
las relaciones sociales son buenas ¿gracias a la inteligencia emocional
aprendemos a decidir con que tipo de personas queremos estar, para que haya
una reciprocidad en cuanto al respeto y la valoración personal.
Los menores que trabajan su desarrollo emocional, social y creativo son más
generosos, sociales y felices y optimistas. Un ejemplo de ellos son los resultados
obtenidos por mas de 250 centros de España, chile y Uruguay que llevan
implementando desde 2006 técnicas de inteligencia emocional en el aula a través
del programa Educación Responsable de la Fundación Botín.
Los datos demuestran que cuanto mas pequeños son los menores, mejores
resultados se observan. De hecho, en los menores de nueve años se observa un
23% menos de agresividad, un 20% de mejora en el manejo del estrés, un 15%
mas de creatividad y un 6% de mejora en el estado de ánimo. En cuanto a los
mayores de 12 años, hay un 19.8% menos de retraimiento, controlan un 3%más
sus impulsos y estrés y desarrollan su inteligencia emocional un 11.65% más.
LA EMPATIA ES LA CLAVE
Esto hace que sean capaces de orientar sus propias emociones y las de otros
hacia el logro de objetivos positivos, con un correcto autocontrol de los
sentimientos y emociones. Lo que consigue reducir de manera considerable la
violencia en los centros escolares, mejorando por lo tanto la convivencia y el
desarrollo de los menores.
Además de estos ejemplos, existen otras muchas más actividades que se pueden
implementar y que también incluyen juegos de mesa, libros y videos. Los cuales,
acompañados por formación en los peligros de internet y programas, ayudaran a
crear entornos libres de acoso escolar y de otro tipo de conflictos que cobran
fuerza gracias a internet.
IE EN PSICOLOGIA CLINICA
En las medidas de inteligencia emocional que existen los datos normativos siguen
una distribución normal. Por lo que podemos hablar de personas con inteligencia
“normal”,” alta “y “baja” con sus diferentes graduaciones, así como una IE
“anormalmente baja “. Y si constructo de IE tiene alguna correspondencia con la
realidad psicológica del individuo, podemos suponer que la IE anormalmente baja
puede producir efectos negativos en su vivencia emocional, es decir trastornos
psicológicos relacionados con uno o varios componentes de la IE. En este caso
hablaríamos de una inteligencia emocional patológicamente baja (Matthews,
Zeidner y Roberts,2002) como trastorno mental en si mismo o como factor que
predispone al trastorno mental. Esto se puede manifestar en un trastorno de
personalidad (Eje II del DSM-IV) o en un proceso patológico (Eje I del DSM-IV).
Aunque es muy poco probable que la inteligencia emocional patológicamente baja
constituya una entidad nosológicamente nueva, existen argumentos a favor de que
la falta de competencias emocionales juegue un papel en el desarrollo y
mantenimiento de trastornos psicológicos.