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APARATO REPRODUCTOR

MASCULINO

ESCUELA. PREPARATORIA. JOSÉ MA. MORELOS

MATERIA: TEMAS SELECTOS DE BIOLOGÍA OP

DOCENTE: IGNACIO MEDINA SÁNCHEZ

ALUMNO: DAVID MALDONADO MONDRAGÓN

NL: 16

BACHILLERATO: QUIMICOS-BIOLOGICAS

SECCIÓN: 02
H. ZITÁCUARO A 15 DE FEBRERO DEL 2021
APARATO REPRODUCTOR MASCULINO
Cuando se habla del aparato reproductor masculino, se hace alusión al conjunto
de órganos internos y externos, así como conductos entre ellos, que le
permiten al hombre tener relaciones sexuales y eventualmente reproducirse con
una mujer.

A diferencia del aparato reproductor femenino, el masculino se encuentra


mayormente a la vista, por fuera del cuerpo, y dispone de los mecanismos
para producir e introducir en el útero una carga de espermatozoides (la
eyaculación) y así fecundar el óvulo, dando lugar a un cigoto que, con el tiempo,
devendrá en un nuevo individuo. Este método de reproducción es compartido por
el ser humano con la mayoría de los animales vertebrados.

El aparato reproductor masculino nace junto al individuo pero inicia sus


funciones hormonales y mecánicas a partir de la pubertad, etapa de
la adolescencia en que el ser humano madura sexualmente y su cuerpo se dispone
para la reproducción. Los hombres fértiles lo serán durante toda su vida, pero su
capacidad de interacción sexual está limitada a la posibilidad de la erección, la cual
disminuye o se pierde durante la llamada tercera edad (vejez).

Función del aparato reproductor masculino

Como hemos dicho, la función biológica primordial del aparato reproductor


masculino es la reproducción. Esto pasa por diversas etapas que involucran a
distintos órganos, en la medida en que se segregan las hormonas sexuales que
activan el proceso y predisponen el organismo para la reproducción.

Se produce el semen y los espermatozoides en los testículos y la


próstata (10 a 14 días); se da la erección a través del llenado de sangre del
cuerpo del pene y, finalmente, luego del éxtasis durante el coito, se vacía a través
de la uretra el contenido seminal (eyaculación).

Partes y órganos del aparato reproductor masculino


Los testículos son el principal órgano del sistema reproductor masculino.

El aparato reproductor masculino involucra los siguientes órganos y conductos:

Órganos externos (por fuera del cuerpo):

 Testículos. El principal órgano del sistema, se encarga de producir tanto


las hormonas sexuales masculinas (testosterona, principalmente) como los
espermatozoides (células reproductivas). Se encuentra alojado en el
escroto, una envoltura de tejidos y de piel que los recubre y protege.
 Pene. Es el órgano copulador del sistema, formado por tres instancias: el
glande, que es la punta y la región más sensible; el cuerpo esponjoso,
tejido del que forma parte el glande y que sostiene la uretra durante la
erección para permitir el paso del semen; y los cuerpos cavernosos,
ubicados en la parte superior del pene, los cuales se llenan de sangre y
proveen de dureza y firmeza al pene erecto. Está normalmente cubierto por
el prepucio, una capa de piel que forma parte del escroto. También sirve al
aparato excretor para expulsar la orina del cuerpo.
 Raíz del pene: es la parte superior, de sujeción del pene y contiene los
dos pilares que se insertan a cada lado del arco púbico. Cada pilar del pene
está rodeado por el músculo isquiocavernoso. El bulbo del pene es la
porción ensanchada de la base del cuerpo esponjoso por donde penetra la
uretra esponjosa en el cuerpo esponjoso, y está unido a los músculos
profundos del periné. La contracción de todos estos músculos esqueléticos
permite la eyaculación. El peso del cuerpo del pene está sostenido por dos
ligamentos que lo sujetan a la superficie anterior de la sínfisis del pubis.
 Epidídimo. Se encuentra en la reunión de los conductos seminíferos, y se
encarga de la maduración y activación de los espermatozoides.
 Conductos deferentes. Conectan el epidídimo con los conductos
eyaculatorios, permitiendo la salida del semen.

En la punta del pene, el cuerpo esponjoso forma el glande que cubre los
extremos libres de los cuerpos cavernosos.

El semen es una mezcla de espermatozoides y líquido seminal, el cual está


formado por las secreciones de los túbulos seminíferos, las vesículas
seminales, la próstata y las glándulas bulbouretrales. Es decir, es una
suspensión de espermatozoides en los líquidos segregados por dichas
estructuras. El volumen de semen de una eyaculación normal es de unos
2,5-5 ml y contiene unos 50-150 millones de espermatozoides por cada ml.
Tiene un pH ligeramente alcalino. Las secreciones de la próstata le dan una
apariencia lechosa y los líquidos de las vesículas seminales y las glándulas
bulbouretrales le dan una consistencia pegajosa. El líquido seminal
proporciona a los espermatozoides un medio de transporte, nutrientes y
protección frente al medio ácido hostil que representan la uretra masculina
y la vagina femenina.

Órganos internos (por dentro del cuerpo):

 Vesículas seminales. Producen un líquido alcalino y viscoso cuyo


cometido es neutralizar la acidez de la uretra (producto de la orina) y
salvaguardar a los espermatozoides. Este líquido forma parte del 40% del
semen. Las vesículas se hallan junto a la próstata, detrás de la vejiga
urinaria.
 Próstata. Este órgano glandular es exclusivo del género masculino y se
ubica detrás del recto, justo en la base de la vejiga urinaria. Produce mucho
del contenido seminal que nutre a los espermatozoides en su viaje hacia el
útero y además bloquea la salida de la orina durante el coito, para que no
se mezclen las funciones excretora y reproductora.
 Uretra. El conducto que lleva la orina de la vejiga hasta afuera del cuerpo,
también sirve en el caso del hombre para llevar el semen hasta afuera.
 Glándulas bulboretrales. Llamadas también glándulas de Cowper, se
ubican bajo la próstata y segregan el líquido preseminal, que limpia el ducto
de la uretra y neutraliza su acidez, allanando el camino para la eyaculación.

Enfermedades del aparato reproductor masculino


El aparato reproductor del hombre puede sufrir enfermedades como:

 Fimosis. Se trata de una estrechez congénita del prepucio, que no permite


al pene emerger libremente y suele ocasionar dolor e incomodidad durante
las relaciones sexuales. Suele subsanarse mediante la circuncisión.
 Cáncer. Las malformaciones tumorosas suelen aquejar particularmente a la
próstata y a los testículos.
 Infecciones venéreas. Tales como el herpes, virus del papiloma humano,
la sífilis, gonorrea, SIDA y otras más, algunas de las cuales producen
síntomas locales reconocibles, como pústulas, supuración purulenta o
dificultades para orinar.
 Prostatitis. El agrandamiento de la próstata suele ser producto de
infecciones bacterianas, pero también un indicador de dolencias más
profundas como la Hiperplasia Prostática Benigna o cáncer.

ESPERMATOGÉNESIS

En la pubertad, las células germinales masculinas situadas en los testículos o


gónadas masculinas, se activan y dan lugar al comienzo de la espermatogénesis o
formación de los espermatozoides, que son los gametos masculinos. Los gametos
son células sexuales especializadas (espermatozoides y ovocitos) producidas por
las gónadas (masculinas y femeninas, respectivamente) que transmiten la
información genética entre generaciones. La espermatogénesis o formación de los
espermatozoides, tiene lugar en los túbulos seminíferos de los testículos en donde
se encuentran las células germinales en diversas fases de desarrollo. Las células
germinales son células indiferenciadas llamadas espermatogonias que se
multiplican por mitosis y contienen 46 cromosomas. Cada espermatogonia
aumenta de tamaño y se convierte en un espermatocito primario que sigue
teniendo 46 cromosomas. Al dividirse el espermatocito primario da lugar a dos
espermatocitos secundarios cada uno de los cuales tiene ya 23 cromosomas, es
decir, la mitad de la dotación genética de una célula normal. De cada
espermatocito secundario se originan dos células hijas llamadas espermátides que
también contienen 23 cromosomas. Por último, se produce la transformación de
cada una de las espermátides en un espermatozoide. Se necesitan unos dos meses
para formar un espermatozoide a partir de un espermatocito primario y este
proceso solo ocurre a temperaturas inferiores a la del cuerpo humano. Por esta
razón los testículos están alojados en el escroto, fuera de la cavidad abdominal.
Cada día, alrededor de 300 millones de espermatozoides completan el proceso de
espermatogénesis.

ESPERMATOZOIDE. ESTRUCTURA
El espermatozoide humano maduro es una célula alargada (de unas 60 micras de
largo) y delgada y consiste en una cabeza y una cola. En la cabeza se encuentra el
núcleo, que contiene 23 cromosomas, es decir la mitad de la dotación
cromosómica completa de una célula normal, con un citoplasma y una membrana
citoplasmática muy delgada a su alrededor. Sobre el exterior de los 2/3 anteriores
de la cabeza se encuentra un capuchón grueso, el acrosoma, que contiene
numerosos enzimas que ayudan al espermatozoide a penetrar en el ovocito
secundario y así conseguir la fecundación. La cola es móvil con una gran cantidad
de mitocondrias en la parte proximal, y la parte restante es, en realidad, un largo
flagelo que contiene microtúbulos con una estructura similar a la de los cilios, que
sirven para que el espermatozoide pueda avanzar, lo que realiza por medio de un
movimiento flagelar de la cola a una velocidad de 1-4 mm/min. Una vez producida
la eyaculación, la mayoría de espermatozoides no sobreviven más de 48 horas
dentro del sistema reproductor femenino.

BIBLIOGRAFÍA

https://concepto.de/aparato-reproductor-masculino/#ixzz6maEw7LTP
https://www.infermeravirtual.com/files/media/file/104/Sistema%20reproductor
%20masculino.pdf?1358606138

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