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TEMA 5: SUJETOS DEL DERECHO

Sujeto: es un concepto que puede emplearse de diferentes


formas. Puede tratarse de un individuo que, en un
determinado contexto, carece de identificación o de
denominación. También puede referirse a una categoría
filosófica.

Derecho: por su parte, puede ser aquello que guía el


accionar correcto, legítimo o adecuado de las personas. La
noción también se asocia a las normas que expresan un
ideal de justicia y que permiten regular la conducta y los
vínculos humanos.

Con estos conceptos podemos conciderar a sujeto de


derecho a un centro de imputación ideal de deberes y
derechos; esto es, aquella unidad sobre la que la ley
efectúa imputaciones directas, arrojándole derechos y
obligaciones. Para el derecho, los únicos sujetos de
derecho son las personas.

Es importante conocer que los sujetos de derecho pueden


ser de dos tipos:

-Sujetos de derechos individuales, que son los ciudadanos


individuales que son capaces de adquirir derechos y
obligaciones. También son conocidos como personas
naturales o físicas.

-Sujetos de derechos colectivos, que son los que se vienen


a constituir como personas jurídicas.

La Persona Fisica

Su origen etimológico viene de persona-ae, que era


aquella máscara (per sonare, es decir, para hacerse oír)
que llevaban los actores en la Antigüedad y que ocultaba
su rostro al tiempo que hacía sonar su voz. Esto es, una
ficción que se sobrepone al ser que la porta. Ello es así
porque no todos los seres humanos -especialmente en
otros tiempos- podían ser considerados personas.
Actualmente, y dependiendo del sistema legal que se
considere, el nasciturus o "que está por nacer" disfruta de
una consideración jurídica propia distinta de la de persona
física, y por tanto sometido a un régimen distinto de
derechos.

Las personas físicas o personas naturales son todos los


integrantes de la especie humana, hace referencia a un ser
humano concreto y real. Cada persona, por el hecho de
nacer, es un sujeto de derecho.

El derecho nos otorga al nacer una serie de características


o atributos que concluyen tras el fallecimiento. Por tanto, el
mero hecho de nacer y tener una existencia nos hace
poseedores de derechos, y nos protege a través de la ley
en los estados de derecho.

La persona física se caracteriza por una serie de atributos:


la nacionalidad, patrimonio, estado civil, domicilio, nombre,
capacidad y personalidad jurídica.Una persona física es
aquella que va a encontrarse habilitada para la oferta de
servicios profesionales, también para realizar actividades
comerciales, poseer bienes, contraer matrimonio, cobrar un
sueldo a cambio de un trabajo. Una persona física va a
poder actuar en nombre propio o en representación de otra
persona física o de una persona jurídica.

Los derechos y obligaciones más reseñables en la persona


física arrancarían con la habilitación para realizar
actividades que le reporten una contraprestación
económica. También derechos como el de voto, el
sanitario, etc. La habilitación para asumir créditos y
préstamos, o adquirir títulos de deuda. Y la obligación de la
declaración fiscal de sus rentas como persona física, todos
estos derechos y obligaciones, junto a otros más, son los
que se adquieren en el momento del nacimiento. Esto es
algo aplicable en cualquier estado de derecho, y en la
totalidad de los sistemas jurídicos a nivel mundial.

Personalidad Judirica

Se entiende por personalidad jurídica a la potestad por la


que el Derecho reconoce a una persona, entidad,
asociación o empresa, capacidad suficiente para contraer
obligaciones y realizar actividades que generan plena
responsabilidad jurídica, frente a sí mismos y frente a
terceros, no coincide necesariamente con el espacio de la
persona física, sino que es más amplio y permite
actuaciones con plena validez jurídica a las entidades
formadas por conjuntos de personas o empresas.la
personalidad es también una creación del Derecho y se
manifiesta en la capacidad para ser titular del conjunto de
derechos y obligaciones atribuidos a un mismo ente y
determina su capacidad para relacionarse jurídicamente.
De ahí que dentro de la personalidad podamos diferenciar
dos tipos de capacidades, la capacidad jurídica y la
capacidad de obrar.La capacidad jurídica consiste en una
atribución genérica que el ordenamiento jurídico hace a las
personas físicas o naturales y jurídicas de la condición de
sujeto de derecho, ya que atribuye la titularidad de
derechos y obligaciones, la capacidad de obrar supone la
atribución por el ordenamiento a las personas físicas o
naturales y jurídicas de la capacidad de actuar
jurídicamente, cuáles son las acciones jurídicas que los
sujetos pueden realizar.

En consecuencia, la capacidad jurídica se refiere a la


titularidad, mientras que la capacidad de obrar se refiere al
“ejercicio” de derechos y deberes, por lo que puede
producirse la situación de que una persona sea titular de
un derecho, pero sea incapaz para ejercitarlo, tanto en el
caso de las personas físicas como en el caso de las
personas jurídicas.

En el caso de las personas físicas hay que distinguir entre


la falta de capacidad (que tiene su fundamento en la
inmadurez psíquica del sujeto, por lo que los
ordenamientos establecen una determinada edad a partir
de la cual el sujeto adquiere la plena autonomía para
actuar jurídicamente) y las causas de incapacidad (que
tienen su fundamento en circunstancias subjetivas que
afectan a la razón o voluntad del sujeto). Para suplir la
imposibilidad del sujeto de actuar jurídicamente por sí
mismo, el derecho ha previsto la institución de la
representación.

En el caso de las personas jurídicas, la imposibilidad para


obrar deriva de su propia naturaleza como colectividades
de personas o de bienes, que impide que se manifieste
ninguna voluntad a no ser por medio de una persona física.
Según algunos autores, las personas jurídicas son
consideradas como sujetos incapaces y por eso su
voluntad debe ser suplida por medio de la institución de la
representación. Según una teoría más reciente, las
personas físicas que suplen la voluntad de las personas
jurídicas no lo hacen en virtud de la institución de la
representación, sino en virtud de la relación orgánica que
se establece entre las distintas partes de una organización,
se convierten en “órganos” de la persona jurídica y actúan
como tales.

Para designar la capacidad de obrar de la Administración


pública y de sus órganos se utiliza el término competencia.

En el ámbito del Derecho penal la capacidad se designa


con el término imputabilidad o responsabilidad penal y en
este sentido sólo se considera imputable o penalmente
responsable al sujeto capaz y sólo a éste se le pueden
aplicar las penas previstas para la comisión de delitos.

Capacidad De Goce

La capacidad de goce es la aptitud del sujeto para ser


titular de derechos y obligaciones. Ésta la tiene el ser
humano desde su concepción por el mero hecho de serlo,
es decir, es consubstancial al hombre; no puede
concebirse la personalidad jurídica sin la capacidad de
goce.

Artículo 44. La capacidad de goce, consistente en la


aptitud para ser titular de derechos u obligaciones, se
adquiere por el nacimiento en lo que se refiere a las
personas jurídicas individuales, o por disposición de la ley
respecto a las personas jurídicas colectivas; pero desde
que el ser es concebido, tratándose de personas
individuales, se estará, además, a lo dispuesto en el
artículo 117.

Artículo 117. La capacidad de goce de las personas


jurídicas individuales se adquiere por el nacimiento y se
pierde por la muerte; pero entran bajo la protección de la
ley desde el momento en que los individuos son
concebidos, y si nacen viables, también desde ese
momento se les tiene por nacidos para los efectos
declarados en el presente Código.

El concepto de personalidad se confunde con el de


capacidad de goce. Ser persona, en realidad, es tener
capacidad de goce; todo individuo susceptible de ser sujeto
de derecho, es persona. Privar a un ser humano de la
capacidad para adquirir todo derecho, sería dejar de
considerarlo persona. Se trata de un atributo de la
personalidad fundamental para la persona natural o
jurídica.

En consecuencia, no existen seres humanos que, de


manera absoluta, estén desprovistos de la capacidad de
goce. En tal sentido, nuestro legislador sólo contempla
casos de incapacidades de goce especiales o particulares,
esto es, referentes al impedimento para adquirir uno o más
derechos determinados.

Capacidad De Obrar

Para entender correctamente este concepto es importante,


en primer lugar, hacer una diferenciación entre lacapacidad
jurídica y la capacidad de obrar. La capacidad jurídica es la
aptitud para ser titular de derechos subjetivos y deberes
jurídicos, aptitud que se posee por el mero hecho del
nacimiento.

En cambio, la capacidad de obrar hace referencia a la


aptitud que tiene cada persona para el ejercicio de los
derechos que posee, lo que quiere decir que no todo el
mundo la posee, sino que dependerá de la situación
personal de cada uno. De esta forma, se busca proteger a
las personas que no son legalmente capaces de
perjudicarse a sí mismas financieramente. En este sentido,
se pueden distinguir diversos grados de capacidad de
obrar que dependerán de la edad, la incapacitación y la
nacionalidad o vecindad civil.

La capacidad de obrar es la que nos habilita para llevar a


cabo cualquier clase de acto que deseemos realizar —
siempre que la ley lo permita, claro está—. De dichos
acciones podrán surgir tanto una serie de derechos como
de obligaciones que tendremos que asumir
consecuentemente.

La capacidad de obrar de manera independiente está


sujeta a unos requisitos mínimos, en función de los cuales
puede verse limitada de manera parcial o total y se
adquiere con la mayoría de edad en la mayoría de los
casos.

Por su lado, la capacidad jurídica es la que recibimos


desde el nacimiento y la conservamos en todo momento
durante nuestra vida como un derecho universal ligado al
hecho de ser humano, esta capacidad nos permite tener
derechos y obligaciones de manera similar a la capacidad
de obrar, pero solo esta última nos permite realizar ciertas
acciones que de otro modo están fuera de nuestro alcance
si tenemos una capacidad de obrar limitada por razones
legalmente aceptadas

Requisitos mínimos para obrar de manera libre

Hay dos únicos requisitos para disfrutar de la capacidad de


obra y se encuentran indicados dentro del art. 322 del
Código Civil: la edad y la consciencia y comprensión de los
actos realizados.

· Requisito de edad: con carácter general,


necesitamos ser mayores de edad para disfrutar de
capacidad de obrar en relación con nuestro criterio
personal. Ahora bien, existen ocasiones en las que
un menor de edad puede contar también con
capacidad de obrar. Por ejemplo, en el caso de un
menor de edad emancipado con 16 años o más.
Ahora bien, su capacidad de obra se encontrará
limitada hasta que cumpla la mayoría de edad.
· Requisito de consciencia, madurez o capacidad de
comprensión: contar con la suficiente comprensión
de nuestros propios actos como para entender las
implicaciones que tienen tanto en obligaciones como
en derechos asociados a las mismas. El objetivo de
este requisito es protegernos de nosotros mismos y
evitar que nos pongamos en riesgo legal o
financieramente sin ser conscientes de ello.

Teniendo esto en cuenta, se pueden producir distintos


grados de capacidad o incapacidad, pudiendo ser tanto
plena, como parcial o nula.

Por ejemplo, si padecemos Alzheimer, podría solicitarse a


un juez nuestra capacidad de obra nula, al no ser posible
garantizar que seamos conscientes de nuestras acciones o
sus consecuencias legales o económicas. De la misma
manera, un menor de edad no estaría capacitado para
solicitar un préstamo bancario debido a su edad y escasa
valoración del riesgo que en potencia pueda tener su
decisión.

La Persona Judirica

Las personas jurídicas, también denominadas personas


morales, no son individuos, sino entidades creadas por
personas físicas. Más allá de su naturaleza abstracta o
ideal, también son sujetos de derecho.

Esto quiere decir que los seres humanos, las empresas,


las cooperativas, las asociaciones civiles y las
organizaciones no gubernamentales (ONG), por citar
algunos ejemplos de personas físicas y jurídicas, cuentan
con derechos que están protegidos por la ley. Estos sujetos
de derecho también tienen obligaciones que no pueden
evadir: de lo contrario, son castigados de acuerdo a lo
estipulado por la legislación en vigencia.

La persona jurídica hace referencia a lo que un ser


humano es en relación con el conjunto de los demás seres
humanos desde el punto de vista del derecho y la
legalidad. Es el principio básico sobre el que descansan los
modelos de relación social tal y como los conocemos hoy
en día, y sobre el que reposa buena parte de los conceptos
básicos en lo que se refiere a los derechos humanos. Por
tanto una figura imprescindible en el derecho y en el
ámbito de las leyes.

Clasificacion De Las Personas Judiricas

Personas jurídicas de Derecho Público: Aquellas que


representan a las entidades del Estado y que velan por sus
intereses, teniendo aplicación dentro del territorio del país y
para los ciudadanos que en él habitan, divididos a su vez
en Personas Jurídicas de Derecho Público Interno (acción
dentro del país) y Personas Jurídicas de Derecho Público
Externo (acción fuera del país)

· .La Nación y las Entidades políticas que la


componen: cuando se hace referencia a la Nación
se habla en sentido de Estado, ya que este posee
derechos y obligaciones. Cuando se habla de las
Entidades políticas que la componen se refiere a los
Estados y los Municipios, ya que estos cuentan
también con personalidad jurídica.

· Las iglesias, de cualquier credo que sean, las


universidades y, en general, todos los seres o
cuerpos morales de carácter público: En cuanto a la
iglesia, la legalidad de su personalidad jurídica
cambiará según la iglesia de que se trate. El Estado
venezolano reconoce la personalidad jurídica de la
Iglesia Católica dentro del territorio de la República
debido a el Convenio entre la Santa Sede y al
República de Venezuela. Otros cultos deberán
solicitar el reconocimiento como persona jurídica
ante el Ejecutivo Nacional. Las universidades se
encuentran como personas jurídicas de Derecho
Público debido a que el Código Civil de Venezuela
data de 1942 y las universidades privadas no
existieron en Venezuela sino hasta el año 1953.
Estas adquieren su personalidad jurídica de
Derecho Privado de acuerdo con las formalidades
requeridas por la Ley de Universidades, a diferencia
de las universidades públicas las cuales reciben su
personalidad a través de este artículo.

Personas jurídicas de Derecho Privado: Aquellas que


representan intereses particulares, regulados por códigos
de comercios específicos: asociaciones, empresas,
cooperativas, sociedades civiles mercantiles, etc. Sea que
estas tengan fines de lucro, o no.

· Las asociaciones: persona jurídica que no persigue


un fin de lucro para ellos mismos, aunque estos sí
pueden realizar actividades lucrativas. Aguilar
Gorrondona menciona como ejemplos, los club de
ajedrez o una agrupación de investigadores
cientificos.

· Las corporaciones: personas jurídicas mandadas a


crear por una ley especial y para las cuales
predomina un interés colectivo. Por ejemplo, los
colegios profesionales.

· Las sociedades: personas jurídicas que persiguen


un fin de lucro para sí mismos.

Asociaciones

Una asociación es una persona jurídica que se constituye


mediante acuerdo de tres o más personas físicas o
jurídicas legalmente constituidas, que se comprometen a
poner en común conocimientos, medios y actividades para
conseguir unas finalidades lícitas, comunes, de interés
general o particular, y que se dotan de los estatutos que
rigen su funcionamiento.

La asociación en participación se caracteriza por ser un


contrato en el cual una persona se une con otra que
coopere con los bienes o servicios a cambio de obtener
ganancias o pérdidas de la actividad.

El funcionamiento de una asociación debe ser


democrático. Esto se traduce, en términos generales, en
un funcionamiento asambleario, aunque con multitud de
características distintivas en diferentes asociaciones,
determinadas en parte por el tamaño de su asamblea de
socios, el tipo de personas que la forman, los fines de la
entidad y –en realidad– su propia historia, que va
motivando que la asociación se ajuste a las necesidades
que se le van creando.

Las asociaciones pueden ser SFL (sin fines de lucro) o


CFL (con fines de lucro). Existen diferentes tipos de
asociaciones, todo depende de lo que deseen las personas
interesadas

Una asociación sin ánimo de lucro es una agrupación de


personas que se organizan para realizar una actividad
colectiva. A diferencia de otras formas de organizarse y
actuar, la asociación goza de personalidad jurídica, lo que
la hace capaz de adquirir derechos y contraer obligaciones.
Se establece así una diferenciación entre el patrimonio de
la asociación y el de las personas asociadas.

Otras características son:

· Funcionamiento democrático.

· Estabilida.

· Independencia de otras organizaciones.

Existen diferentes tipos de asociaciones, algunas de las


cuales cuentan con normas específicas, pero todas estas
normas se ajustan a una única ley orgánica que regula el
derecho fundamental de asociación. Además, esta ley
orgánica tiene carácter supletorio, de forma que aquellos
aspectos que no estén regulados en normas específicas y
sí en la ley orgánica se regirán por lo dispuesto en ésta.

Así pues, las características fundamentales serían las


siguientes:

· Grupo de personas, físicas o jurídicas (mínimo de


3).

· Objetivos y/o actividades comunes.

· Funcionamiento democrático.
· Ausencia de ánimo de lucro.

· Independencia.

No tener ánimo de lucro significa que no se pueden repartir


los beneficios o excedentes económicos anuales entre los
socios. Por tanto, sí se puede:

Tener excedentes económicos al finalizar el año


(generalmente es deseable, para no comprometer la
sostenibilidad de la entidad)

Tener contratados laborales en la Asociación, incluso de


entre los socios y miembros de la junta directiva, salvo que
los estatutos dispongan lo contrario.

Realizar actividades económicas que puedan generar


excedentes económicos.

Los posibles excedentes deberán reinvertirse en el


cumplimiento de los fines de la entidad.

Los socios deben tener capacidad de obrar y no tener


limitada su capacidad de pertenencia a una asociación en
virtud de una sentencia judicial o alguna norma (les sucede
a los jueces y a los militares, por ejemplo). Los menores de
edad pueden ser socios de asociaciones, pero al no tener
capacidad de obligarse jurídicamente, esta capacidad
viene suplida por sus padres o representantes legales.

Constitucion de una asocion

Las asociaciones se constituyen mediante acuerdo de tres


o más personas físicas o jurídicas legalmente constituidas,
que se comprometen a poner en común conocimientos,
medios y actividades para conseguir unas finalidades
lícitas, comunes, de interés general o particular, y que se
dotan de los estatutos que rigen el funcionamiento de la
asociación.

El acuerdo de constitución ha de formalizarse mediante


acta fundacional, en documento público o privado. Con el
otorgamiento por los promotores del acta, la asociación
adquiere personalidad jurídica y plena capacidad de obrar,
si bien aquéllos deben solicitar la inscripción de la
constitución de la asociación en el Registro de
Asociaciones de Castilla-La Mancha a los solos efectos de
publicidad o, en su defecto, los promotores deben
responder personal y solidariamente de las obligaciones
que contraigan con terceros.

El acta fundacional debe contener:

a) El nombre y apellidos de los promotores de la


asociación si son personas físicas, la denominación o
razón social si son personas jurídicas, y, en ambos casos,
la nacionalidad y el domicilio.

b) La voluntad de los promotores de constituir una


asociación, los pactos que, en su caso, hubiesen
establecido y la denominación de ésta.

c) Los estatutos aprobados que regirán el funcionamiento


de la asociación, cuyo contenido se ha de ajustar a las
previsiones del artículo 7 de la Ley Orgánica 1/2002, de 22
de marzo, reguladora del Derecho de Asociación.

d) Lugar y fecha de otorgamiento del acta y firma de los


promotores, o de sus representantes en el caso de
personas jurídicas.

e) La designación de los integrantes de los órganos


provisionales de gobierno.

Finalmente, en la inscripción registral de la constitución de


federaciones, confederaciones y uniones de asociaciones
se aplican las mismas determinaciones que a las
asociaciones.

Estatutos de una Asociación

Los estatutos regulan la organización y el funcionamiento


de la asociación a lo largo de su vida y durante el
desarrollo de su actividad, tanto a nivel interno y como
externo. Formando parte inherente del acta fundacional, en
ellos debe hacerse constar, como mínimo, los extremos
previstos en el artículo 7 de la Ley Orgánica 1/2002, de 22
de marzo, reguladora del Derecho de Asociación, que, a su
vez, prescribe que contendrán:

a) La denominación de la asociación.

b) El domicilio, así como el ámbito territorial en que haya


de realizar principalmente sus actividades.

c) La duración, cuando la asociación no se constituya por


tiempo indefinido.

d) Los fines y actividades de la asociación, descritos de


forma precisa.

e) Los requisitos y modalidades de admisión y baja,


sanción y separación de los asociados y, en su caso, las
clases de éstos. Podrán incluir también las consecuencias
del impago de las cuotas por parte de los asociados.

f) Los derechos y obligaciones de los asociados y, en su


caso, de cada una de sus distintas modalidades.

g) Los criterios que garanticen el funcionamiento


democrático de la asociación.

h) Los órganos de gobierno y representación, su


composición, reglas y procedimientos para la elección y
sustitución de sus miembros, sus atribuciones, duración de
los cargos, causas de su cese, la forma de deliberar,
adoptar y ejecutar sus acuerdos y las personas o cargos
con facultad para certificarlos y requisitos para que los
citados órganos queden válidamente constituidos, así
como la cantidad de asociados necesaria para poder
convocar sesiones de los órganos de gobierno o de
proponer asuntos en el orden del día

i) El régimen de administración, contabilidad y


documentación, así como la fecha de cierre del ejercicio
asociativo.

j) El patrimonio inicial y los recursos económicos de los que


se podrá hacer uso.

k) Causas de disolución y destino del patrimonio en tal


supuesto, que no podrá desvirtuar el carácter no lucrativo
de la entidad.
La modificación de estatutos que afecte al contenido de los
extremos indicados requiere del acuerdo de la asamblea
general, que solamente surte efectos, tanto para asociados
como para los terceros, desde el momento de su
inscripción en el Registro de Asociaciones

Como excepción, no es necesario acordar una


modificación de estatutos cuando el cambio consiste en un
traslado del domicilio dentro del ámbito territorial de
actuación de la propia asociación. Al objeto de lograr la
constancia registral de tal hecho, bastará con la aportación
de acta o certificación emitida por la persona titular de la
secretaría, con el visto bueno de la persona titular de la
presidencia.

Órganos de la Asociación

Las asociaciones deben de ajustar su organización y


funcionamiento interno a lo establecido en sus propios
estatutos, siempre que no estén en contradicción con las
normas de la Ley Orgánica 1/2002, de 22 de marzo,
reguladora del Derecho de Asociación, y con las
disposiciones reglamentarias que se dicten para la
aplicación de la misma. En todo caso, como órganos
necesarios de la asociación, los estatutos deben prever la
existencia de una asamblea general como órgano supremo
de gobierno; integrada por todos los asociados, la
asamblea general adopta sus acuerdos por el principio
mayoritario o de democracia interna y deberá reunirse, al
menos, una vez al año.

Asimismo, en el seno de la asociación debe existir un


órgano de representación, al que comúnmente suele
denominarse junta directiva, que gestione y represente los
intereses de la asociación, de acuerdo con las
disposiciones y directivas de la asamblea general. Para ser
miembro del órgano de representación, sin perjuicio de lo
que puedan establecer los respectivos estatutos, son
requisitos indispensables: ser mayor de edad, estar en
pleno uso de los derechos civiles y no estar incurso en los
motivos de incompatibilidad establecidos en la legislación
vigente. En el caso de que los miembros de los órganos de
representación puedan recibir retribuciones en función del
cargo, deberán constar en los estatutos y en las cuentas
anuales aprobadas en asamblea.

Finalmente, para el caso de que los estatutos no lo


dispongan de otro modo, la Ley Orgánica establece que el
régimen interno de las asociaciones debe adecuarse a las
siguientes determinaciones:

a) Las facultades del órgano de representación se


extenderán, con carácter general, a todos los actos propios
de las finalidades de la asociación, siempre que no
requieran, conforme a los estatutos, autorización expresa
de la asamblea general.

b) La asamblea general se convocará por el órgano de


representación, con carácter extraordinario, cuando lo
solicite un número de asociados no inferior al 10 por 100.

c) La asamblea general se considerará constituida


válidamente, previa convocatoria efectuada quince días
antes de la reunión, cuando concurran a ella, presentes o
representados, un tercio de los asociados, y su presidente
y su secretario serán designados al inicio de la reunión.

d) Los acuerdos de la asamblea general se adoptarán por


mayoría simple de las personas presentes o
representadas, cuando los votos afirmativos superen a los
negativos. No obstante, requerirán mayoría cualificada de
las personas presentes o representadas, que resultará
cuando los votos afirmativos superen la mitad, los
acuerdos relativos a disolución de la asociación,
modificación de los estatutos, disposición o enajenación de
bienes y remuneración de los miembros del órgano de
representación.

Disolución de una Asociación

Las asociaciones se disuelven por las causas previstas en


los estatutos y, en su defecto, por la voluntad de los
asociados expresada en asamblea general convocada al
efecto, así como por las causas determinadas en el artículo
39 del Código Civil y por sentencia judicial firme. En todos
los supuestos de disolución, al patrimonio de la asociación
se le debe dar el destino previsto en los estatutos. La
disolución de la asociación abre el período de liquidación,
hasta el fin del cual la entidad conservará su personalidad
jurídica. En el momento de la disolución, los miembros del
órgano de representación se convierten en liquidadores,
salvo que los estatutos establezcan otra cosa o los designe
la asamblea general o el juez que, en su caso, acuerde la
disolución. Corresponde a los liquidadores:

a) Velar por la integridad del patrimonio de la asociación.

b) Concluir las operaciones pendientes y efectuar las


nuevas, que sean precisas para la liquidación.

c) Cobrar los créditos de la asociación.

d) Liquidar el patrimonio y pagar a los acreedores.

e) Aplicar los bienes sobrantes de la asociación a los fines


previstos por los Estatutos.

f) Solicitar la cancelación de los asientos en el Registro.

Finalmente, la disolución de la asociación debe inscribirse


en el Registro de Asociaciones, expresando la causa y el
destino dado al patrimonio remanente de la disolución.

Fundaciones

Las fundaciones son organizaciones constituidas sin fin de


lucro que, por voluntad de sus creadores, tienen afectado
de modo duradero su patrimonio a la realización de fines
de interés general. Nacen en virtud de un negocio jurídico
fundacional, que implica la concurrencia de dos elementos:
la declaración de voluntad de querer constituir una
fundación y la atribución patrimonial o dotación, que,
pudiendo consistir en dinero u otras clases de bienes, ha
de ser adecuada y suficiente para el cumplimiento de los
fines fundacionales.

Es decir, toda fundación tiene tres elementos estructurales:

a) La dotación; en este sentido, la Ley de Fundaciones


considera suficiente la dotación cuyo valor económico
ascienda a 30.000 euros.

b) El fin de interés general al que se haya afecto la


dotación. Como fines de interés general que puede
perseguir una fundación se hallan, entre otros, la defensa
de los derechos humanos, de las víctimas del terrorismo y
actos violentos, asistencia social e inclusión social, cívicos,
educativos, culturales, científicos, deportivos, sanitarios,
laborales, de fortalecimiento institucional, de cooperación
para el desarrollo, de promoción del voluntariado, de
promoción de la acción social, de defensa del medio
ambiente, de fomento de la economía social, de promoción
y atención a las personas en riesgo de exclusión social, de
promoción y atención a las personas en riesgo de
exclusión por razones físicas, sociales o culturales, de
promoción de los valores constitucionales y defensa de los
principios democráticos, de fomento de la tolerancia, de
desarrollo de la sociedad de la información, o de
investigación científica y desarrollo tecnológico.

c) La inscripción en el registro de fundaciones, como


requisito indispensable para que las fundaciones adquieran
personalidad jurídica y poder utilizar el término “fundación”
en su denominación.

Constitución de una Fundación

Las fundaciones pueden ser constituidas por personas


físicas o jurídicas, sean éstas públicas o privadas, y por
actos inter vivos o mortis causa. La constitución de una
fundación por actos "inter vivos" se realiza mediante
escritura pública y, para el caso de la constitución por actos
"mortis causa”, mediante el otorgamiento de testamento.
Las personas físicas que pretendan constituir una
fundación deben contar con capacidad suficiente para
disponer gratuitamente de los bienes y derechos en que
consista la dotación. Las jurídicas, por su parte, han de
disponer del acuerdo expreso del órgano competente para
disponer gratuitamente de sus bienes.

La escritura de constitución debe contener, al menos:

a) El nombre, apellidos, edad y estado civil del fundador o


fundadores, si son personas físicas, y su denominación o
razón social, si son personas jurídicas, y, en ambos casos,
su nacionalidad y domicilio y número de identificación
fiscal.

b) La voluntad de constituir una fundación.

c) La dotación, su valoración y la forma y realidad de su


aportación.

d) Los estatutos de la fundación y la identificación de las


personas que integran el Patronato, así como su
aceptación si se efectúa en el momento fundacional.

Quienes pretendan constituir una fundación han de solicitar


del correspondiente Registro de Fundaciones una
certificación acreditativa de que la denominación que se
pretende utilizar para la fundación que no coincide o se
asemeja con otra previamente inscrita y, una vez otorgada
la escritura pública de constitución ante el Notario, el
correspondiente Protectorado de Fundaciones deberá
emitir un informe, preceptivo y vinculante, sobre la
idoneidad de los fines de la fundación y la suficiencia de la
dotación. En el plazo máximo de seis meses desde el
otorgamiento de la escritura pública, los patronos de la
fundación deben solicitar la inscripción de la fundación en
el Registro de Fundaciones. Tras practicarse la inscripción,
la fundación adquiere personalidad jurídica.

Modificación de Estatutos de una Fundación

Los estatutos regulan la organización y el funcionamiento


de la fundación a lo largo de su vida y durante el desarrollo
de su actividad, tanto a nivel interno y como externo,
articulan la aplicación de los medios dotacionales a la
realización de los fines fundacionales, y en ellos deben
hacerse constar:

a) La denominación de la entidad.

b) Los fines fundacionales.

c) El domicilio de la fundación y el ámbito territorial en que


haya de desarrollar principalmente sus actividades.
d) Las reglas básicas para la aplicación de los recursos al
cumplimiento de los fines fundacionales y para la
determinación de los beneficiarios.

e) La composición del Patronato, las reglas para la


designación y sustitución de sus miembros, las causas de
su cese, sus atribuciones y la forma de deliberar y adoptar
acuerdos.

f) Cualesquiera otras disposiciones y condiciones lícitas


que el fundador o los fundadores tengan a bien establecer.

La modificación de los estatutos de la fundación puede


acordarse por el patronato siempre que resulte
conveniente en interés de la misma, se respete el fin
fundacional y que no exista prohibición del fundador. La
inscripción en el Registro de Fundaciones de la nueva
redacción de los estatutos o de sus ulteriores
modificaciones debe practicarse mediante escritura
pública, previa autorización del protectorado.

Patronato de Fundaciones

En toda fundación deberá existir un órgano de gobierno y


representación, denominado Patronato, al que corresponde
cumplir los fines fundacionales y administrar con diligencia
los bienes y derechos que integran el patrimonio de la
fundación.

a) Composición: El Patronato estará constituido por un


mínimo de 3 miembros, que elegirán entre ellos un
Presidente, siempre que no estuviera prevista la
designación del mismo en la escritura de constitución o en
los estatutos. El Patronato deberá nombrar un Secretario,
cargo que podrá recaer en una persona ajena a aquél, en
cuyo caso tendrá voz pero no voto, y a quien
corresponderá la certificación de los acuerdos del
Patronato.

Podrán ser miembros del Patronato las personas físicas


que tengan plena capacidad de obrar y no estén
inhabilitadas para el ejercicio de cargos públicos. Las
personas jurídicas podrán formar parte del Patronato, y
deberán designar a la persona o personas físicas que las
representen en los términos establecidos en los estatutos.

b) Aceptación del cargo: Los patronos entrarán a ejercer


sus funciones después de haber aceptado expresamente
el cargo por cualquiera de los siguientes medios:

1º. Documento público.

2º. Documento privado con firma legitimada por notario.

3º. Mediante comparecencia realizada al efecto en el


Registro de Fundaciones.

4º. Ante el Patronato, acreditándose a través de


certificación expedida por el Secretario, con el visto bueno
del Presidente, con firma legitimada notarialmente.

En todo caso, la aceptación se notificará formalmente y se


inscribirá en el Registro de Fundaciones.

c) Delegación y apoderamientos: Si los estatutos no lo


prohibieran, el Patronato podrá delegar sus facultades en
uno o más de sus miembros, sin que resulten delegables la
aprobación de las cuentas y del plan de actuación, la
modificación de los estatutos, la fusión y la liquidación de la
fundación ni aquellos actos que requieran la autorización
del Protectorado. Asimismo, el Patronato podrá otorgar y
revocar poderes generales y especiales, salvo que los
estatutos dispongan lo contrario. Las delegaciones, los
apoderamientos generales y su revocación deberán
inscribirse en el Registro de Fundaciones.

d) Sustitución, cese y suspensión de patronos: La


sustitución de los patronos se producirá en la forma
prevista en los estatutos; por su parte, el cese de los
miembros del Patronato tendrá lugar en los supuestos
siguientes:

1º. Por muerte o declaración de fallecimiento, así como por


extinción de la persona jurídica.

2º. Por incapacidad, inhabilitación o incompatibilidad de


acuerdo con lo establecido en la Ley.
3º. Por cese en el cargo por razón del cual fueron
nombrados miembros del Patronato.

4º. Por no desempeñar el cargo con la diligencia de un


representante leal, si así se declara en resolución judicial.

5º. Por resolución judicial que acoja la acción de


responsabilidad por los daños y perjuicios que se causen a
la fundación como consecuencia de actos de los patronos
contrarios a la Ley o a los estatutos.

6º. Por el transcurso del plazo de 6 meses desde el


otorgamiento de la escritura fundacional sin haber instado
la inscripción en el Registro de Fundaciones

7º. Por el transcurso del período de su mandato, si fueron


nombrados por tiempo determinado

8º. Por renuncia, que podrá llevarse a cabo por cualquiera


de los medios y mediante los trámites previstos para la
aceptación

9º. Por las causas establecidas válidamente para el cese


en los Estatutos

e) Suspensión: La suspensión de los patronos podrá ser


acordada cautelarmente por el juez cuando se entable
contra ellos la acción de responsabilidad.

La sustitución, el cese y la suspensión de los patronos se


inscribirán en el Registro de Fundaciones.

Extinción y Liquidación de Fundaciones

Las fundaciones desaparecen como persona jurídica en


dos pasos: primero se extinguen, es decir, dejan de tener
actividad, y luego se liquida su haber patrimonial.

La extinción se produce por causas tasadas legalmente:

a) Cuando expire el plazo por el que fue constituida.

b) Cuando se hubiese realizado íntegramente el fin


fundacional.

c) Cuando sea imposible la realización del fin fundacional.


d) Cuando así resulte de la fusión de fundaciones.

e) Cuando concurra cualquier otra causa prevista en el


acto constitutivo o en los estatutos.

f) Cuando concurra cualquier otra causa establecida en las


leyes.

En el supuesto de expiración del plazo para el que fue


constituida, la fundación se extinguirá de pleno derecho, en
el resto de supuestos, la extinción de la fundación requerirá
de previo acuerdo del Patronato ratificado por el
Protectorado. Si no hubiese acuerdo del Patronato, o éste
no fuese ratificado por el Protectorado, la extinción de la
fundación requerirá resolución judicial motivada, que podrá
ser instada por el Protectorado o por el Patronato, según
los casos. En el caso de que concurra cualquier otra causa
de extinción establecida en las leyes la declaración de
extinción requerirá de resolución judicial motivada. El
acuerdo de extinción, o en su caso, la resolución judicial,
se inscribirán en el Registro de Fundaciones.

La extinción de la fundación, salvo en el supuesto de fusión


de fundaciones, determinará la apertura del procedimiento
de liquidación, que se realizará por el Patronato de la
fundación bajo el control del Protectorado. Los bienes y
derechos resultantes de la liquidación se destinarán a las
fundaciones o a las entidades no lucrativas privadas que
persigan fines de interés general y que tengan afectados
sus bienes a la consecución de aquéllos, y que hayan sido
designados en el negocio fundacional o en los estatutos de
la fundación extinguida. En su defecto, el Patronato podrá
acordar dicho destino a favor de las mismas fundaciones y
entidades mencionadas, cuando tenga reconocida dicha
facultad por el fundador, y en caso de que no estuviese
facultado, corresponderá al Protectorado cumplir dicho
cometido. Las fundaciones también podrán establecer en
sus estatutos o cláusulas fundacionales que los bienes y
derechos resultantes de la liquidación sean destinados a
entidades públicas, de naturaleza no fundacional, que
persigan fines de interés general.
Obligaciones contables y Planes de actuación de una
Fundación

Las fundaciones deberán llevar una contabilidad ordenada


y adecuada a su actividad que permita un seguimiento
cronológico de las operaciones realizadas. Siendo
necesario para las fundaciones un Libro Diario y un Libro
de Inventarios y Cuentas Anuales. Las cuentas anuales de
las fundaciones comprenden el balance, la cuenta de
resultados y la memoria, forman una unidad y deben de
mostrar la imagen fiel del patrimonio, de la situación
financiera y de los resultados de la entidad.

El Presidente o la persona que, conforme a los estatutos


de la fundación, o al acuerdo adoptado por sus órganos de
gobierno corresponda, formulará las cuentas anuales, que
deberán ser aprobadas por el Patronato de la Fundación
en el plazo máximo de seis meses desde el cierre del
ejercicio económico, siendo el ejercicio económico
coincidente con el año natural, salvo que en los estatutos
se establezca otro período anual distinto.

Existe la obligación de someter a auditoría externa las


cuentas anuales de todas aquellas fundaciones en las que
concurran al menos dos de las siguientes circunstancias:

a) Que el total de las partidas del activo supere


2.400.000,00 euros.

b) Que el importe neto de su volumen anual de ingresos


por la actividad propia más, en su caso, el de la cifra de
negocios de su actividad mercantil sea superior al menos
2.400.000,00 euros.

c) Que el número medio de trabajadores empleados


durante el ejercicio sea superior a 50.

Cuando las cuentas anuales vayan a ser sometidas a


auditoría externas, deberán de formularse dentro de los
tres meses posteriores al cierre del ejercicio.

Las cuentas anuales se aprobarán por el Patronato de la


fundación y se presentarán ante éste protectorado dentro
de los diez días hábiles siguientes a su aprobación.

Las fundaciones deben de elaborar un plan de actuación


en el queden reflejados los objetivos y las actividades que
se prevea desarrollar durante el ejercicio siguiente. El plan
de actuación contendrá información de cada una de las
actividades propias y de las mercantiles, de los gastos
estimados para cada una de ellas y de los ingresos y otros
recursos previstos así como cualquier otro indicador que
permita comprobar en la memoria el grado de realización
de cada actividad o el grado de cumplimiento de los
objetivos.

Corporaciones

La corporación es una persona jurídica, que está sujeta a


obligaciones ante la ley, y que es creada por una o más
personas físicas para un determinado fin. Aunque las
corporaciones no necesariamente tiene ánimo lucro,
suelen estar más asociadas a las entidadesRequisitos para
registrar o crear una empresa en Venezuela:

· Nombre o denominación social de la empresa.

· Cédulas de Identidad de los socios.

· Proporcionar documentos de acreditación de la


empresa.

· Cálculo del precio que se tendrá que pagar por la


inscripción y pago al fisco nacional.

· Cancelación del pago por derechos de registro,


firma y recepción de los documentos de registro de
la empresa.

· Difusión del registro mercantil en los periódicos de


mercantiles.

· Registro único de información fiscal.

· Libros de contabilidad para sellar y foliar en el


registro: diario, mayor, inventario, compras y ventas.
· Constancia de inscripción en el INCES. (Requisito
para el funcionamiento de la empresa)

· Acreditación de la inscripción en el Seguro Social


(IVSS). (Requisito para el funcionamiento de la
empresa)

· Solicitar conformidad de uso en ingeniería municipal


y cuerpo de bomberos. (Requisito para el
funcionamiento de la empresa)

· Obtener patente de industria y comercio en la


Alcaldía. (Requisito para el funcionamiento de la
empresa)

· lista requisitos

Pasos

REGISTRO MERCANTIL. Lo primero que deberás conocer


es la dirección de las oficinas de Registro Mercantil que
corresponda con tu domicilio o jurisdicción donde se
desenvolverá la empresa. Para ello debes ingresar a la
página oficial del SAREN. Puedes hacerlo desde aquí
mismo: SAREN OFICIAL. Una vez allí ubicarás la parte
donde dice “servicios” y le darás clic a “oficinas a nivel
nacional”. Allí se te indicará la dirección de la oficina de
Registro Mercantil perteneciente a tu Estado.

Es importante conocer que en Venezuela existen diferentes


tipos de Registros Mercantiles y cada una tiene autonomía
en cuanto los requisitos y en los tiempos de respuesta.
Esto significa que cada una puede pedir la documentación
que considere pertinente y con los tiempos de respuesta
que deseen.

RESERVA DE NOMBRE O RAZÓN SOCIAL. Este es el


primer paso en cuanto a requisitos y diligencias que debes
hacer. La intención de este paso es verificar que el nombre
que deseas ponerle a tu empresa esté disponible.

Para ello deberás dirigirte al Registro Mercantil de tu


jurisdicción y solicitar una planilla que ellos te
proporcionarán para la reserva de nombre. Luego deberás
escribir de manera legible el nombre que pretende
reservar. Una vez realizado dicho trámite te darán una
planilla con la cual deberás dirigirte a uno de los bancos
acreditados para realizar el pago correspondiente a 0.5 U.T
(media unidad tributaria)para verificar la disponibilidad del
nombre.

En caso de que el nombre esté disponible tendrás tres (03)


días hábiles para realizar un nuevo pago para la reserva de
nombre. Para esto te dirigirás al Registro Mercantil y allí te
proporcionarán una planilla con la que pagarás la reserva
de nombre. Luego del pago en cualquiera de los bancos
autorizados te trasladarás a las oficinas del Registro
Mercantil de nuevo con el voucher, la planilla y dos copias
de las mismas.

Importante:

Si no realizas dicho pago en estos tres (03) días hábiles, el


nombre quedará liberado para que otra persona lo tome.

CONSTITUCIÓN DE LA EMPRESA.

Ya con el nombre previamente reservado deberás proceder


a hacer el acta constitutiva (redacción del documento).
Entre algunas cosas que necesitarás, está:

· Copia de la Cédula de identidad de los socios.

· Razón social de la empresa.

· Domicilio de la empresa.

Capital inicial de la empresa. En dinero, con una cuenta de


apertura parcial que refleje el monto declarado. Para ello
debes proceder ir al banco de tu preferencia y hacer las
diligencias respectivas. Si el capital es en inventario de
bienes debes presentar un balance especificando los
equipos, los materiales y sus costos; todo esto debe estar
avalado por un contador colegiado.

Debes presentar una constancia (Carta de aceptación de


comisario de la empresa) que efectúa un contador público
colegiado.
La participación de cada socio en termino de porcentajes.

Importante:

Debes contar con la asesoría de un abogado para la


redacción del acta constitutiva y el visado de la misma.

FIRMA. Después de haber cumplido con todos los


requisitos, ser aprobado el documento constitutivo y
efectuar los pagos de los aranceles correspondientes, se le
dictara una fecha en la cual se firmará y entregará el
documento, este acto tendrá que ser en presencia de todos
los socios que integren la empresa. No olvides llevar los
timbres fiscales exigidos y las respectivas cédulas de
identidades. con fines comerciales, es decir, empresas.

En todo caso, una corporación es una entidad conformada


por personas , compañías u otras personas jurídicas,
pudiendo tomar la forma de empresa, organización no
gubernamental, sindicato, gremio u otra asociación.

Los propietarios de la corporación, que son los accionistas,


suelen delegar la gestión a otras personas que conforman
un directorio. Así, quienes toman las decisiones sobre las
corporación no son sus dueños, sino los gerentes. Cuanto
más grande es la sociedad, más común es esta figura.

Cabe señalar además que una corporación puede


disolverse por decisión de los accionistas o por orden legal.
Esto último sucede, por ejemplo, cuando una entidad
financiera no cumple con los niveles de solvencia
requeridos para seguir operando. Entonces, se procede
con su liquidación.También se considera como corporación
a conjuntos de personas que se reúnen con el objetivo de
compartir asuntos de tipo económico, científico,
medioambiental, etc.

Tipos de corporación

Podemos referirnos a distintos tipos de corporación, por


ejemplo, de acuerdo al sector al que pertenecen: primario,
secundario, terciario, cuaternario o quinario.

Asimismo, podemos catalogar a las corporaciones por su


tamaño. Cada país suele definir los criterios para distinguir
entre micro, pequeña, mediana y gran empresa, en función
a la facturación y al número de trabajadores.

Igualmente, según su constitución puede tratarse de una


sociedad anónima o de responsabilidad limitada. La
principal diferencia es que en el primer caso los accionistas
puede negociar en el mercado su participación en la firma.

Sin embargo, en una sociedad de responsabilidad limitada,


las participaciones no son comercializables, por ejemplo,
en la bolsa de valores.

Sin embargo, lo que sí tienen en común las sociedades


anónimas y las sociedades de responsabilidad limitada es
que en ambas la responsabilidad de los accionistas se
limita a lo que han aportado a la organización.

Sociedad Civil Y Mercantil

Sociedad Civil:

Lo primero que debemos saber es qué es una sociedad


civil; es un contrato privado entre dos o más personas, que
normalmente serán los socios de la empresa. Los
integrantes de dicho contrato deciden empezar una
actividad económica con la cual ganar dinero, pero sin
realizar actos comerciales. Los socios estarán obligados a
aportar recursos según lo convenido en el contrato. Las
ganancias obtenidas se reparten entre los participantes de
la sociedad civil. Esta sociedad tiene carácter privado y
estaría regulada por el código civil, con lo cual no hay una
figura jurídica.

Hay varios tipos de sociedades civiles, entre ellas las que


se forman entre particulares, las sociedades universales de
todos los bienes existentes dentro de la sociedad o las
universales de absolutamente las ganancias; también
pueden darse sociedades civiles públicas o privadas.

Sociedad mercantil:

La sociedad mercantil se compone de una personalidad


jurídica que se crea para emprender acciones económicas
con carácter lucrativo, y para ello se necesitan un mínimo
de 2 personas, a los que nos referiremos como socios, y
ellos habrán de repartir por partes iguales las pérdidas y
ganancias de la empresa, ya que la relación que se
establece entre los socios es la conseguir un objetivo
común.

Una sociedad mercantil es una sociedad jurídica en si


misma, es una de las diferencias que hay entre las
sociedades mercantiles y las civiles.

Igual que en la sociedad civil, en la mercantil también hay


varios tipos, que vendrán marcados principalmente por la
relación que se establezca entre los socios, según las
responsabilidades y lo que aporten cada uno. Estos rasgos
determinaran si se ha de crear una sociedad limitada,
anónima, laboral, cooperativa, o comanditaria. No
obstante, aunque estas son las más frecuentes, podemos
encontrar otros tipos de sociedad mercantil muy
específicas a situaciones concretas.

Aunque con este artículo puedas tener más claro cuáles


son las diferencias entre ambas sociedades, lo idóneo es
que si te estas planteando crear una sociedad tengas una
reunión con un abogado especialista que escuche tu caso
y te recomiende la mejor opción. Los temas legales
siempre es conveniente dejarlos en manos de abogados
con experiencia que te asesoren y se encarguen de
garantizarte la mejor opción.

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