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La vida artificial está un paso más cerca tras el anuncio de que un equipo de investigadores
estadounidenses, entre los que se encuentra el padre del genoma humano Craig Venter, ha logrado
reconstruir por primera vez el genoma completo de un ser vivo en el laboratorio.
Modificación genética de embriones humanos: ¿hasta dónde se podría llegar? ¿Crees que es
algo moralmente aceptable?
Si se demuestra que es posible corregir con seguridad ciertas enfermedades genéticas en los
embriones humanos, es inevitable que algunos padres quieran también alterar el genoma de recién
nacidos sanos. La inmensa mayoría de los científicos se ha manifestado en contra de cualquier avance
en ese sentido, con una notable excepción: George Church, profesor de Genética en la Universidad de
Harvard.
Church lo ve casi como un imperativo moral. “¿Y si fuera posible hacer seres humanos inmunes a todos
los virus, conocidos o desconocidos, naturales o artificiales?”, se pregunta en el libro Regenesis: How
Synthetic Biology Will Reinvent Nature and Ourselves, publicado en 2012. Con el argumento de que “las
versiones más comunes de los genes no son necesariamente las mejores”, defiende que debemos
retocar nuestro genoma. Veamos una decena de cambios que, en su opinión, deberíamos incorporar.
1) Una mutación que, al aumentar la actividad del gen LRP, da origen a unos huesos
superfuertes. Ni siquiera los taladros quirúrgicos serían capaces de perforarlos.
2) Una variante del gen MSTN produce músculos delgados.
3) Común en las poblaciones del sudeste asiático, una versión del gen ABCC11 hace
que el olor corporal sea casi inexistente.
4) Alteraciones en los genes CCR5 y FUT2 aumentan la resistencia a los virus.
5) Una variante del gen PCSK9 disminuye el riesgo de enfermedad coronaria en un 88 %.
6) Una mutación en el gen APP protege contra el alzhéimer.
7) Algunas versiones del gen GHR de la hormona del crecimiento son anticancerígenas.
8) Silenciar o ralentizar el gen SLC30A8 disminuye el riesgo de contraer diabetes tipo 2.
9) Variantes raras del gen IFIH1, implicado en la respuesta antiviral, protegen contra la diabetes tipo
1.
10) Mutaciones en el gen SCN9A reducen la sensibilidad al dolor.