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Como alguna vez me vi enfrentado por mi vacío ser, por los fantasmas que en mi pecho no me

dejan dormir, por la culpa que me empuja con una fuerza constante pero débil, y por la
mediocridad que me hunde en el piso hasta sofocarme en ella. Me siento una vez más para
escribir, para dejar fluir mi oscuro ser, mis deseos más profundos de papel, y mis lágrimas
románticas de un futuro más brillante del que no puedo verme participe, ni en mi mejor estado.

Este es el tercer intento de una bitácora/experiencia/diario/bestiario lo que sea esta espesa


maraña que envuelve mi cerebro cuando este divaga y está libre del entretenimiento que me
permite gastar mi existencia rápidamente. No poseo conocimiento o intuición de estos textos, más
que lamentar aún más mi existencia mental y física, pues ambos, en la enfermedad me acosan y
gritan sin parar. Silenciados por mi Ego irracional, por esa persona con la que comparto pieza en
mi mente, esa que prefiere jugar antes que leer, que sueña con jugar profesionalmente, y que su
más profunda tentación es una muerte sin dolor. Aquí estoy pues, después de reflexiones tan
simples y con el egoísmo de insultarme lo suficiente para dejar atrás mi ego de intelectual, y de
desatarme la venda de la ignorancia y comodidad que amarraba mis ojos hasta casi extirparlos.

Hace unos años comencé a reflexionar sobre la persona que soy yo, sí es que hay un yo, ese que
en el rincón se esconde detrás de otra realidad y se condena en la oscuridad hasta desaparecer en
las sombras, yo. Sin embargo ¿Quién soy? Para responder esto podría sumergirme en mi mente y
raspar aquellas nociones que, como única cosa en mí, no me han defraudado, a lo que llamo:
razón. Y afirmar mi existencia como átomos dentro del espacio, que por alguna razón o otra son
conscientes de si mismos y pueden observar la o una realidad. O, por el otro lado, afirmar mi yo
como las cosas que me componen, a las que hacen parte de mis pasiones, de mis estudios y
experiencias. ¿Pero, podría alguna de las dos siquiera acercarse a la respuesta que busco? Incluso
ahora, realizando esta catarsis dentro de mi mente, tengo sueño y busco el descanso de mi mente
y cuerpo. ¿Por qué soy tan débil y mediocre?

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