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01-La Estructura socio económica Dominicana.

En la Republica Dominicana todas las economías se caracterizan por los grupos


socioeconómicos en los que se agrupa la población. Estos grupos surgen debido a
la especialización requerida para producir un producto y/o servicio con la mayor
eficiencia posible. Cada etapa en la creación de un producto y/o servicio debe
especializarse con cada persona enfocándose en una o dos funciones. También la
oferta y la demanda juegan su rol en dictar el precio, en este caso los ingresos,
que podrán percibir las personas en las distintas ramas de la economía.
Según un estudio del Gobierno de los Estados Unidos; en 2008, la República
Dominicana la población se divide en los siguientes grupos socioeconómicos:

 Alto: 6% de la población (570,000 personas / 142,500 hogares).

 Medio-alto: 17% de la población (1.6 millones de personas / 400,000


hogares).

 Medio-bajo: 20% de la población (1.9 millones de personas / 475,000


hogares).

 Bajo: 47% de la población (4.5 millones de personas / 1, 125,000 hogares).

 Muy bajo: 10% de la población (950,000 personas / 237,500 hogares).

El sector socioeconómico alto percibe un nivel de ingresos que les permite


acceder cualquier servicio o producto sin restricciones significantes y por tanto, los
conlleva a ejercer un patrón de consumo conspicuo.
El sector medio-alto percibe ingresos suficientes para disfrutar de un estilo de vida
acomodado.
Los ingresos del sector medio-bajo suelen ser moderados y requieren una
constante vigilancia a sus gastos.
El sector bajo se destaca por vivir al nivel de subsistencia, mientras los hogares
que pertenecen al sector muy bajo sufren limitaciones y precariedades además de
desempleo crónico, subempleo, empleos de muy baja remuneración, capital
humano muy pobre e informalidad.
El caso dominicano es paradójico cuando se compara con el resto de las islas
antillanas. Con ello descubrimos lo siguiente:

 República dominicana es el país antillano con el mayor número de


personas en los sectores alto, medio-alto y medio-bajo.

 República dominicana es el segundo país con la mayor cantidad de


personas en los sectores bajo y muy bajo. Inclusive, el único país antillano
con más personas en ese nivel es Haití.

Es por ello que consideramos que el caso dominicano es paradójico, pues se sitúa
en las primera y segunda posiciones dentro del área del Caribe insular tanto por el
tamaño de los sectores acomodados al igual que de los sectores desfavorecidos.
La tendencia a futuro es la reducción de las personas que pertenecen a los
sectores bajo y muy bajo, y el crecimiento de los que pertenecen a los sectores
alto, medio-alto y medio-bajo.

02-Participación del sector privado en la economía nacional e


Interrelación entre el sector Público y el privado.

2.1 Participación del sector privado en la economía nacional


Al sector privado le está permitido constituir y desarrollar cualquier tipo de
actividad excepto algún sector público. Del sector privado se espera que
diversifique la producción industrial y que haga grandes inversiones, su papel
también es atraer la inversión y la tecnología procedente del exterior. Su papel
también es contribuir al desarrollo, a la creación de empleo y a la gestión medio-
ambiental sostenible.
Pero lo pueden conformar también empresas pequeñas, tanto puede ser como un
puesto ambulante o una empresa pequeña porque allí trabajan para sí mismos y
solos por su propia cuenta. Todos los ingresos son personales y para su ganancia,
manejan mejor la parte administrativa y saben con claridad en donde quieren
nuevamente invertir.
2.2 Interrelación entre el sector Público y el privado
La interrelación entre el sector público y privado ha sido una gran ventaja para el
desarrollo del sistema de zonas francas de República Dominicana y es uno de los
temas claves que le han permitido el liderazgo que hoy disfruta, afirmó el
representante regional para América Latina de la Organización Mundial de Zonas
Francas (WFZO), Jorge Alberto Díaz Rivera.
“Aquí el esquema es amigable con las empresas, y sin eso las zonas francas no
hubieran sido tan exitosas. Hay un entendimiento de parte del sector público de la
importancia y la realidad del sector.
A pesar de que en cualquier sector puede haber roce con el Gobierno, aquí hemos
visto que se ha creado una estructura que facilita la inversión”, destacó.
Resaltó que República Dominicana es líder en el sistema de zonas francas en la
región y esto es gracias a que tiene una ubicación estratégica clave, así como
mano de obra muy buena y un régimen franco muy competitivo en la región, a
nivel de impuestos.
Dijo también que hay una buena política migratoria y además una estructura legal
dentro del país que permite solucionar los problemas que surgen en las empresas.
Díaz Rivera visitó el país para invitar al Gobierno y a los representantes de los
parques de zonas francas para que asistan a la Primera Conferencia Mundial de
Zonas Francas, a realizarse del 10 al 14 de mayo próximo en la ciudad de Dubái.
Afirmó que República Dominicana es un ejemplo a seguir en el modelo de zona
franca, lo cual debe mostrarle al mundo como se ha convertido en un líder en
atraer inversión extranjera gracias al mismo.
Díaz Rivera explicó que en esta conferencia participarán las principales zonas
francas del mundo, así como 800 empresas transnacionales, además de
representantes gubernamentales de los países invitados. En el encuentro se
espera participen más de 100 países, tanto de América, Europa, Asia y África,
quienes trabajarán en la búsqueda de soluciones a problemas comunes y
expectativas del sector.
Durante su estadía en el país visitó los diferentes parques industriales de zona
franca, donde dijo hay una gran variedad de empresas de diferentes sectores.
La WFZO tiene el objetivo de proteger los intereses de las zonas económicas
especiales de todo el mundo y estandarizar las prácticas dentro de la industria.

03-Estrategia para una mejor cooperación entre el Estado y el


sector privado.
La Estrategia Nacional de Desarrollo y el Plan Nacional Plurianual para el Sector
Público establecen los principios de uso eficiente y sostenible de los recursos del
Estado. El Sistema Nacional de Planificación e Inversión Pública, del Ministerio de
Economía, Planificación y Desarrollo, es el marco de referencia y evaluación de
políticas, objetivos y prioridades del desarrollo. El Sistema Nacional de Monitoreo
y Evaluación mide la eficiencia, calidad, sostenibilidad e impacto de las acciones
del Gobierno para cumplir con metas y prioridades. El proceso de formular
presupuestos según los planes está cada vez más integrado. La definición de
prioridades y metas de desarrollo incluye consultas con actores no
gubernamentales. El Consejo Social y Económico, compuesto por representantes
del Gobierno, la sociedad civil y el sector privado, coordinaron las consultas para
diseñar la Estrategia Nacional de Desarrollo. El Consejo Consultivo sobre
Sociedad Civil del Gabinete de Coordinación de Políticas Sociales constituye una
plataforma para el diálogo sobre la formulación, la ejecución y el seguimiento de
programas sociales. Los proveedores de cooperación formulan sus estrategias de
desarrollo plurianuales de acuerdo con la Estrategia Nacional de Desarrollo en un
proceso conjunto y participativo entre el Gobierno y otros socios. El Ministerio de
Economía, Planificación y Desarrollo y la Oficina Nacional de Estadísticas
coordinan la elaboración de metodologías para integrar los ODS en la Estrategia
Nacional de Desarrollo 2030. El Sistema de Información sobre Cooperación
Internacional, que aún se está elaborando, cuenta hoy con una Matriz Única de
Cooperación Internacional (MUCI) y un registro con datos sobre Cooperación Sur-
Sur. Durante 2015, se llevaron a cabo 510 programas, proyectos y acciones de
cooperación internacional, 80 de los cuales fueron en el marco de la cooperación
Sur Sur. Las acciones en este régimen se acordaron en adecuación con los cuatro
Principios de la Estrategia Nacional de Desarrollo 2030: Estado Social y
Democrático y Estado de Derecho (10 proyectos), Sociedad con Igualdad de
Derechos y Oportunidades (35 proyectos), Economía Sostenible, Integradora y
Competitiva (26 proyectos) y Consumo Sostenible y Producción Adaptada al
Cambio Climático (9 proyectos).

04-La Reforma básica del Estado Dominicano y Reforma


presupuestaria y política de costo Público y Concepto e
Importancia de la política económica.

4.1 La Reforma básica del Estado Dominicano.

LAS REFORMAS POLÍTICAS


a) La Reforma Constitucional.
b) La Reforma en los Partidos y Agrupaciones.
c) Las Reformas Político-Electorales.
d) Las Reformas Legislativas.
e) Las Reformas en el Congreso Nacional.
f) Las Reformas en la Justicia.
g) La Reforma y Modernización Policial.
h) Las Reformas en las Relaciones Exteriores.

LA DESCENTRALIZACIÓN DEL ESTADO

LAS REFORMAS DE LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA

LAS REFORMAS ECONÓMICAS


a) La Reforma Financiera.
b) La Reforma en la Agropecuaria.
c) La Reformulación de la Política Minera.

LAS REFORMAS SOCIALES


a) Las Reformas en la Salud.
b) Las Reformas en el Sistema de Seguridad Social.
c) Las Reformas en la Educación.
d) Las Reformas del Sector Cultural.
e) El Desarrollo de la Protección de los Recursos Naturales y Medio Ambiente.
f) Las Reformas en el Régimen de Agua.
g) La Reforma en la Política hacia la Comunidad.
h) Estrategias de Desarrollo Urbano.
i) La Reforma en el Sector Transporte.

LAS REFORMAS INSTITUCIONALES.

De todos los componentes de reforma del Estado las reformas institucionales son
el más importante y apremiante para el ulterior desarrollo institucional del país. De
ahí que es necesario llevar adelante aquellas que se consideran prioritarias a la
hora actual.

Entre esas reformas se destacan la reforma de la actual Constitución de la


República, que es la base obligada, no solo de todo el sistema político, sino de la
organización económica y social de la nación dominicana.
Por lo demás, la reforma del Estado debe seguir evolucionando en el sistema de
partidos y agrupaciones políticas, en el sistema electoral, en la organización y
financiamiento del Congreso Nacional, en la administración de la Justicia, de la
Policía Nacional, las relaciones exteriores, la modernización y reordenamiento de
la administración pública en general y la descentralización político-administrativa
del gobierno.

LA REFORMA CONSTITUCIONAL.

La reforma que requiere la República Dominicana, debe incluir, ineludiblemente,


una nueva Carta Sustantiva para la Nación. Una Constitución que sustituya la que
tenemos, escrita en pleno siglo veinte; en 1966, dentro del espíritu del liberalismo
centralista del siglo diecinueve. Pero esa Constitución fue en la práctica lo que
calificó un destacado precursor del socialismo europeo: Ferdinard Lasalle, sólo un
pedazo de papel, y el principal mentor de dicho texto, el Dr. Joaquín Balaguer, se
encargó de calificarlo de esa manera y gobernó como un déspota ilustrado del
Siglo XVIII, particularmente durante su período de gobierno de los doce años
(1966-1978).

En esencia, la Constitución o Ley Sustantiva de una nación es un pacto político


que distribuye competencias, derechos y deberes entre los diferentes poderes del
Estado y los distintos sectores de la sociedad.

Para alcanzar tal objetivo el CONARE convocó a una gran asamblea de dirigentes
políticos, juristas, intelectuales y representantes de organizaciones cívicas y
culturales, quienes se organizaron en diez Comisiones y en tres meses de
discusiones y estudios prolongados y sesiones celebradas en distintos lugares del
país, presentaron un Anteproyecto con más de cien propuestas para la renovación
institucional del país.

A su vez el Presidente Hipólito Mejía remitió ese Anteproyecto y una Comisión


Especial, de unas 55 personas creada por Decreto ampliamente representativa de
los distintos sectores de la sociedad dominicana, avaló gran parte de esas
recomendaciones e hizo otras, al tiempo que consideró que el mecanismo más
idóneo para introducirlas en el de la convocatoria a una asamblea constituyente
elegida directamente por el pueblo, donde haya representación de la sociedad
civil.

Infortunadamente, estas reformas, con los que se espera que se desaten buena
parte de los nudos institucionales ya citados, deberá esperar por un próximo turno
en vista de que el suyo ha sido tomado en el debate recién pasado como resultado
del cual se aprobó la eliminación de los colegios cerrados y la posibilidad de una
única reelección presidencial consecutiva.

LAS REFORMAS EN LOS PARTIDOS POLÍTICOS Y EL SISTEMA


ELECTORAL.

En el orden político, es urgente dotar al país de una Ley de Partidos y


Agrupaciones Políticas independientes, que garantice la democracia, la eficacia y
transparencia de esas organizaciones que son claves para el desenvolvimiento de
la democracia representativa en el país.

A ese respecto, nos proponemos impulsar un Proyecto de Ley redactado, a partir


de una serie de consultas con las organizaciones políticas y técnicas en la
materia, con vistas a someterlas al Congreso Nacional en un futuro cercano.

Del mismo, modo se requiere de un ulterior perfeccionamiento del Sistema


Electoral, como un recurso fundamental para fortalecer nuestra democracia.

En ese orden de ideas, es importante que en los cambios institucionales por venir
se establezca que la elección de la Junta Central Electoral, sea realizada con una
mayoría de al menos las dos terceras partes de por lo menos una en la cámaras
legislativas para, así garantizar que sus integrantes sean el resultado de un amplio
consenso de la sociedad dominicana. También que los regidores sean electos
mediante el voto preferencial con listas no bloqueadas, las elecciones se realicen
independizando la votación de los senadores de las de diputados; y de las de
síndicos con respecto a la de regidores; así como estableciendo el reconocimiento
de candidaturas por circunscripciones electorales.

En interés de preservar la institucionalidad de los partidos políticos, estamos


proponiendo así mismo que la administración de las elecciones primarias de los
partidos sea responsabilidad de la Junta Central Electoral.

Esta participación garantizará la aceptación de los resultados de las elecciones


internas, eliminando las luchas internas post-primarias, con su secuela de chantaje
político y fraccionamientos de los partidos.
LAS REFORMAS LEGISLATIVAS.

El Congreso Nacional requiere desarrollar acciones de reforzamiento institucional


y convertirse en un poder legislativo capaz de ejercer a plenitud las funciones de
legislar, fiscalizar y representar a los ciudadanos y ciudadanas. Es necesario,
además, que el Congreso Nacional sirva de sustento al desarrollo y consolidación
del sistema democrático representativo y al balance del poder público en la
República Dominicana.

El cumplimiento de estos objetivos demanda esfuerzos reales dirigidos a mejorar y


modernizar la función legislativa, fortalecer y desarrollar la función fiscalizadora y
de la función de representatividad y la autonomía del Poder Legislativo, para lo
cual cuenta con el financiamiento de los préstamos del Banco Interamericano de
Desarrollo y la existencia de una Comisión Bicameral para el desarrollo
institucional del Congreso.

Con el desarrollo de este programa se busca dentro de un conjunto de actividades


enmarcadas en varios componentes y sub-componentes, conseguir los siguientes
objetivos específicos:
Mejora y modernización de la función legislativa del Congreso Nacional

 Proveer de la asesoría técnica que requieran los legisladores para cumplir a


cabalidad con sus funciones.
 Desarrollo de la función fiscalizadora del Congreso Nacional.
 Fortalecer la función de representatividad del Congreso Nacional.
 Fortalecer su autonomía con respecto al Poder Legislativo.

LA REFORMA DE LA JUSTICIA.

Desde inicios de la década de los noventa, organizaciones empresariales e


instituciones de la sociedad propugnaban por la necesidad de eliminar la
corrupción judicial y hacer más eficiente el sistema de administración de justicia.

Con la reforma constitucional de 1994, se impulsa el proceso de transformación


del sector justicia del país, pues la misma consagró la aut9onomía administrativa y
presupuestaria del poder judicial, la inmovilidad de los jueces, establecimiento de
un régimen de la carrera judicial, y se modificó el sistema de designación de
jueces para que en lo adelante la Suprema Corte de Justicia fuera electa por el
Consejo Nacional de la Magistratura y este alto tribunal escogiera los jueces de los
demás tribunales inferiores.
Sin embargo, es partir de 1996 cuando se inicia verdaderamente el proceso de
transformación de este sector con la aplicación de estas conquistas por lo que el
Poder Ejecutivo creó, mediante Decreto No. 460-96, de fecha 19 de septiembre
del referido año, la Comisión Nacional para la Reforma Judicial (CONARJ), con el
propósito de impulsar el proceso de reforma judicial en nuestro país.
La CONARJ, desde agosto de 1997, dio inicio a un proceso de renovación
institucional, que incluyó un diagnóstico de la situación externa e interna al sector
justicia. Posteriormente, y como resultado de este diagnóstico se consideró
necesario redefinir el rol que hasta el momento había jugado el CONAR, por lo
cual el Poder Ejecutivo dictó el Decreto No. 22-98, dando paso al Comisionado de
Apoyo a la Reforma y Modernización de la Justicia (CARMJ). Esta supuso el inicio
de una reorientación en la gestión de la estrecha coordinación con la Suprema
Corte de Justicia y la Procuraduría General de la República a partir de la
administración iniciada en el año 2000.

Fruto de esas sinergias y con el apoyo irrestricto del Presidente de la República,


se ha podido lograr en poco tiempo el desarrollo de la carrera judicial en virtud de
un proceso de cuidadoso reclutamiento, el establecimiento de la Escuela de la
Magistratura, la estricta supervisión y actuación disciplinaria de los miembros de la
judicatura bajo la dirección de la Suprema Corte de Justicia.
La CARMJ está laborando así mismo en iniciativas para la modernización del
sistema de administración de la justicia y cursan en el Congreso Nacional y en
proceso de redacción final los proyecto de nuevos Códigos Civil Penal, y Procesal,
así como un mecanismo de asistencia jurídica a los sujetos más vulnerables y en
la protección y justicia de los niños, niñas y adolescentes.

Otro objetivo a alcanzar es la promoción de mecanismos de asistencia jurídicas a


los más vulnerables, para asegurar respeto de sus derechos y de sus garantías
procesales y el apoyo al sistema de protección y justicia de niños, niñas y
adolescentes.

Hasta el presente, es posible afirmar que se ha podido avanzar en la reforma de


diversos aspectos importantes de la administración judicial, entre las que pueden
ser mencionadas la autonomía administrativa y presupuestaria del Poder Judicial,
la inamovilidad de los jueces, y el régimen de carrera judicial, así como la
modificación constitucional del 1994 del sistema de designación de jueces, para
que, a partir de la misma, la Suprema Corte de Justicia fuera electa por un
Consejo Nacional de la Magistratura y que aquélla, después, escogiera los jueces
de los demás tribunales inferiores.
Sin embargo, la verdadera renovación institucional y la transformación del sistema
de justicia dominicano en una auténtica función independiente y garantizadora de
los derechos de los ciudadanos y ciudadanas es todavía una tarea por realizar.

Entre los objetivos inmediatos que esta reforma debía proponerse alcanzar están:
fortalecer la profesionalización y autonomía del ministerio público, promover
mecanismos de asistencia jurídica a los ciudadanos más vulnerables, para así
asegurarles el respeto de sus derechos y de sus garantías procesales; apoyar al
sistema de protección y justicia de niños, niñas y adolescentes; y crear un sistema
penitenciario, con el propósito de contribuir a la rehabilitación y reincorporación a
la sociedad de las personas que han tenido que cumplir con alguna sanción
judicial.

LA REFORMA EN LAS RELACIONES EXTERIORES.

La reforma institucional y la modernización de la Sede de la Cancillería y del


Servicio Exterior que se ha emprendido, están dirigidos a desarrollar un proceso
de fortalecimiento institucional y de adecuación operativa, con la finalidad de
ampliar la capacidad analítica y de programación de la Cancillería, para establecer
las diferentes políticas que debería seguir la República Dominicana con el resto
del mundo, e integrar las propuestas provenientes del servicio exterior a los planes
de trabajo definidos a partir de los lineamientos de la política exterior dominicana.

Un resultado de indiscutible importancia en este campo de la actividad pública es


contribuir a desarrollar una mayor y eficaz participación del país en las cumbres
regionales e internacionales, así como en el mejoramiento del desempeño de la
política bilateral.

Para llevar a cabo estos propósitos esta incrementando la profesionalización de


los recursos humanos, con el restablecimiento de la escala Diplomática, el
fortalecimiento de la capacidad técnica y coordinadora de las instancias
responsables de la programación estratégica y de control de la gestión, para
diseñar y conducir satisfactoriamente las selecciones bilaterales y multilaterales
que exigen los tiempos que vivimos, con el ALCA, CARICOM, Centroamérica, la
Unión europea, Cuba, etc.

Pero lo más importante de todo es el papel de creciente presencia y liderazgo que


ha ido adoptando el gobierno dominicano tanto en los foros y organismos
multilaterales como en relaciones bilaterales a través de una participación
dinámica y presencial tanto del presidente de la República como de la cancillería y
los principales funcionarios públicos en sus respectivos escenarios de todos los
continentes, y particularmente en toda América y Europa.

REFORMA Y MODERNIZACIÓN POLICIAL.

No cabe ninguna clase de duda que la República Dominicana está urgida de una
transformación de su institución policial. De este proceso debe surgir una Policía
Nacional proactiva, dinámica y competente; de tal manera, que sea eficaz en su
función fundamental de mantenimiento de niveles apropiados de seguridad interna
del país, en el entendido de que este factor es de apreciable importancia para
continuar incrementando el desarrollo económico, la gobernabilidad democrática, y
enfatizar el respeto a la dignidad humana.

Dicho proceso es impulsado por el Gobierno Nacional a través de la Comisión de


Reforma de la Policía Nacional.

Esta reforma de la Policía Nacional será orientada a través de los objetivos


siguientes: reafirmar su carácter civil con el establecimiento de un Consejo
Superior Policial prestado por el Secretario de Estado de Interior y Policía y
desarrollo de un nuevo concepto de los aspectos comunitarios relacionados con
esta materia; orientación de la conducta de sus miembros basada en valores
centrales propios de una institución civil de su clase; asimismo debe instalar una
capacidad de resolución efectiva de los problemas propios de asuntos internos y
un sistema de inspección general que sea capaz de detectar con tiempo e
independencia de funcionamiento de ese cuerpo que puedan presentarse.

Otros objetivos se refieren a la adopción de medidas que permitan un mejor


aprovechamiento de la tecnología informática y de comunicaciones; redefinir el
perfil y el proceso de reclutamiento y selección; reformulación del reclutamiento,
de su sistema educativo y de capacitación; y hacer más atractiva la labor policial,
garantizándoles mejor seguridad social al agente policial y a sus familiares.

Como resultado de esta reforma la Policía Nacional deberá convertirse en un


instrumento fundamental para la vigencia del Estado de Derecho, y en una
institución de servicio, confiable, respetada y comprometida en la protección de los
derechos humanos, la tranquilidad y la paz, sustentada en principios éticos y
talento humano motivado, y enfocar sus procesos en función del servicio a la
ciudadanía. Otro de los resultados de esta reforma será la creación de un nuevo
modelo de policía, con una visión diferente a la policía tradicional, que involucre a
la comunidad en la identificación y solución de sus problemas, a fin de suplir
adecuadamente las necesidades de patrullaje y protección de la ciudadanía, así
como el nuevo rol del aspecto comunitario en la prevención y control de la
delincuencia, contando con una red de solidaridad ciudadana contra el flajelo.

REFORMAS EN LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA.

Un objetivo de la reforma del Estado que requiere una atención prioritaria del
gobierno, es la reducción de la macrocefalia y la dispersión existente en el
gobierno central, ya que la anterior administración lo dejó con más de cincuenta
organismos con rango de Secretaría de Estado y más de ciento sesenta
organismos descentralizados dependientes directamente del Poder Ejecutivo. La
propia creación de la Comisión Presidencial para la Reforma y Modernización del
Estado fue seguida del establecimiento de una decena de otros organismos
totalmente descentralizados de reforma para diferentes sectores de la vida pública
(Justicia, Salud, Relaciones Exteriores, Policía Nacional, Congreso, Gestión
Barrial, Gestión Provincial y Municipal, Agricultura, Agua Potable, etc.).

Como parte de una política orientada en ese sentido, el Presidente Hipólito Mejía
eliminó por decreto la categoría de Secretaría de Estado a numerosos organismos
y cargos que la ostentaban, se establecieron por ley las Secretarias de Estado de
Cultura y Medio Ambiente, que concentraron diversos organismos
descentralizados y pertenecientes a otras Secretarías de Estado dedicadas a esos
asuntos; se creó por el decreto No. 928-00 el Consejo Nacional de Lucha Contra
la Pobreza, con atribuciones para organizar todo lo referente a la Asistencia
Social.

También se establecieron mediante el Decreto 27-01 los Gabinetes Operativos por


Áreas, lo cual induce a los organismos relacionados con las políticas de
fortalecimiento institucional, económico o social a reunirse para establecer
objetivos y estrategias comunes en las áreas de su competencia; y en virtud del
Decreto No. 28-01 que convierte la Comisión Presidencial para la Reforma y
Modernización del Estado en el Consejo Nacional para la Reforma del Estado
(CONARE), se crean las condiciones para la definición de políticas claras y
globales en torno a la reforma del Estado en todos los sectores y niveles de la
acción pública.
El paso que sigue en este proceso, consistirá en revisar a fondo las funciones y
composición humana de todos los organismos descentralizados dependientes del
Poder Ejecutivo y de las secretarías de Estado, con vistas a producir una
adecuada coordinación de todos en las tareas comunes de construir un Estado
más eficiente y racionalizado, lo que implicará la elevación o establecimiento de
unas ocho Secretarias de Estado a la categoría de Ministerios y que las demás se
reduzcan, o aumenten y tengan solo autonomía operativa.

El gobierno dominicano está desplegando así mismo esfuerzos extraordinarios


para crear mecanismos de coordinación operativa, particularmente en los sectores
agrícola, económico y financiero, así como en la política social, y en particular se
trabaja en un proyecto de Ley General de Administración Pública, en la reforma
macro estructural y en nuevos procedimientos administrativos para varias
Secretarías de Estado y otras dependencias importantes, haciendo uso creciente
de recursos electrónicos y normas de calidad en los servicios que se prestan,
como son los casos de las que dirigen la minería, el transporte y la ciencia y
tecnología en los cuales es necesario ordenar su marco legal para hacerlo más
accesibles a la función pública y privada.

Dentro de las reformas pendientes en la Administración Pública están las que


permiten la incorporación sistemática de los recursos de las nuevas tecnologías y
mecanismos y normas de calidad en la gestión pública que generen eficacia y
eficiencia en las acciones gubernamentales, en la organización fiscal, en la
gerencia financiera y en la administración de las obras y servicios públicos.

En el campo del personal administrativo se está haciendo esfuerzos


extraordinarios por que se establezca en la mayor parte de las dependencias del
gobierno central la carrera administrativa que prevé la Ley 14-01 sobre Servicio
Civil y Carrera Administrativa.

LAS REFORMAS ECONÓMICAS.

A diferencia de lo que aconteció durante la década anterior la economía


dominicana ha experimentado un proceso de crecimiento y estabilidad
macroeconómica en tanto se consolidaba un nuevo esquema productivo tomado
en otros renglones no tradicionales como el turismo, las industrias de zonas
francas, las remesas de los dominicanos en el exterior y otros servicios. Pero sin
duda los factores más directos dentro de este proceso en el orden económico son
las inversiones extranjeras en virtud de una política agresiva en la promoción de
estas unidas a la expansión de las comunicaciones y de la construcción.
La inversión económica del país en el orden internacional incluye además un
proceso de integración regional a nivel continental, el ALCA, y subregional, en el
CARICOM y Centroamérica, así como su creciente vinculación a Europa y a los
mercados financieros con la cotización en las bolsas de valores de composiciones
y el propio gobierno nacional con los “bonos soberanos”.

Muy vinculados con esta tendencia es la legislación ya aprobada de


reordenamiento del mercado, y las leyes complementarias sobre la propiedad
industrial y la propiedad intelectual. También se inscriben en estas reformas
económicas los esfuerzos que se han estado realizando para hacer rentables y
rehabilitar las antiguas empresas del Estado tales como el antiguo Consejo Estatal
del Azúcar, hoy en día traspasada al sector privado, gran parte de las unidades
generadoras y distribuidoras de electricidad antes integradas a la C.D.E. como en
el proceso de estabilización y las distintas empresas que estaban ligadas a la
Corporación de Empresas del Estado (CORDE).

Esta tendencia se ha visto acompañado de un proceso de integración a la


economía mundial caracterizado por la reducción progresiva de los aranceles, la
aplicación de la cobertura y mejor eficiencia en el cobro de tributos, la eliminación
de los subsidios, y la automatización de la gestión.

Otro aspecto fundamental en las reformas económicas en curso son las que tienen
que ver con el gesto público que incluye modificación a la reducción del
presupuesto, para orientarla a los programas y los resultados, y a las inversiones
por regiones, la programación y ejecución trimestral, focalización hacia los
sectores más vulnerables y al fortalecimiento de la equidad en las redistribución de
las inversiones y servicios a todo el territorio nacional.

Finalmente, el gobierno ha puesto en vigencia el gabinete de política Económica


que reúne a los altos funcionarios del gobierno para el desarrollo y ejecución de
los planes que se plantea el gobierno, para estimular el desarrollo económico del
país y la defensa de los interese económicos de la nación dominicana.

LA REFORMA FINANCIERA.

Al momento de asumir el poder las nuevas autoridades, se había creado por


Decreto NO.581- 96, la Comisión Técnica Interinstitucional, con el mandato
expreso de diseñar y elaborar, un programa de reforma de la administración
financiera pública con la asistencia técnica del Banco Interamericano de
Desarrollo, BID. Dicha Comisión, está integrada por el Secretario de Estado de
Finanzas, quien la preside, el Secretario Técnico de la Presidencia y el Contralor
General de la República.

El modelo conceptual adoptado es el desarrollado bajo el Proyecto Regional para


el Mejoramiento de la Administración Financiera en Latinoamérica y el Caribe,
realizado con asistencia financiera de la Agencia Internacional para el Desarrollo
(AID), de los Estados Unidos y conocido bajo el nombre de Sistema Integrado
Modelo de Administración Financiera, Control y Auditoría para América Latina
(SIMAFAL). Este modelo ha sido utilizado en varios países, tales como
Guatemala, Nicaragua, El Salvador, Honduras, Panamá, Bolivia, Paraguay y
Argentina.

La ejecución de este programa persigue implantar un Sistema Integrado de


Gestión Financiera (SIGEF) y Control del Sector Público, que permita mejorar la
calidad del gasto.

Esto ha de lograrse mediante la identificación precisa de las necesidades sociales,


la manera de satisfacerlas y la instalación de una gestión más orientada a
conseguir resultados tangibles.

 Generar una mayor consistencia entre las decisiones sobre gastos,


inversiones y las políticas macroeconómicas tomadas por el gobierno.
 Mejorar la gestión en la captación, manejo y asignación de los recursos
públicos.
 Producir información oportuna y confiable para la toma de decisiones
 Gestionar los recursos públicos en forma transparente.
 Incrementar la eficacia del control interno y externo, así como permitir
realizar una evaluación por resultados.
 Rediseñar los procesos de recaudación y de pagos del gobierno para hacer
más eficientes y transparentes, mediante el uso intensivo de los servicios
que hoy está en condiciones de prestar una Banca Nacional cada vez más
diversa y tecnificada.
 Esto, a fin de brindar facilidades para recepcionar declaraciones y pagos de
impuestos; efectuar pagos ágilmente vía transferencia electrónica de
fondos; transmitir información oportuna y confiablemente; manejar la
liquidez del tesoro nacional según decisiones de inversión; y obtener fondos
a través de la gestión del crédito público.
 Liberar al Banco Central del manejo del crédito público, a fin de que
dedique todo su accionar a la defensa y protección de la estabilidad del
signo monetario.
 Lograr transferencia en la gestión y eficientizar la prestación de los servicios
que brinda el Estado al ciudadano.
 Permitir asimismo, el control en la ejecución de las políticas del gobierno, al
captar, además de la formación financiera, datos para evaluar el
cumplimiento de las metas físicas programadas.
 Implantar los principios básicos centralización normativa y descentralización
operativa.

La puesta en operación del SIGEF, ha sido prevista a alcanzarse por etapas y a lo


interno de estas, por módulos y actividades principales dentro del programa
completo.

Durante esta misma etapa se ha previsto lograr avances conceptuales y


operacionales, dentro del margen permitido por las leyes actuales, que posibiliten
crear las condiciones para el cambio y la internalización de los nuevos criterios y
procesos propios del Sistema a implantar.

Esta maniobra obliga a priorizar y consensuar las distintas actividades con los
principales órganos rectores (Oficina Nacional de Planificación-ONAPLAN-,
Oficina Nacional de PresupuestoONAPRE-, Dirección General de Contabilidad
Gubernamental, Tesorería Nacional, Dirección General de Crédito Público-
actualmente departamento adscrito a la Secretaría de Estado de Finanzas-,
Oficina Nacional de Administración de Personal-ONAP-, Dirección General de
Aprovisionamiento del Gobierno, Dirección General de Administración de Bienes
Nacionales y la Contraloría General de la República).

Los productos a desarrollar son los siguientes: Manual para la Elaboración del
Presupuesto preliminar, basado en la Metodología de Planeamiento Estratégico
Situacional, así como su vinculación con el Presupuesto Anual; Manual de
Presupuesto por Resultados; Manual de Clasificadores Presupuestarios; Manual
de Formulación Presupuestaria; Manual de Modificaciones Presupuestarias y
diseño de una nueva estructura de la Ley de Gastos Públicos.

Las nuevas metodologías permitirán definir, como un primer punto crítico del
proceso, la elaboración del presupuesto para el año 2003. Un segundo punto
decisivo, será la comprensión de dichas metodologías por los operadores de la
gestión presupuestaria. El tercer punto a resolver, es la transferencia,
automatizada y en línea de la información de carácter económico y financiero
contenida en los registros, desde las diferentes instituciones a los órganos
rectores.
LAS REFORMAS SOCIALES.

Las reformas sociales en la República Dominicana son fundamentalmente el


producto del programa del actual impulsado por la orientación “primero la gente”.

Difícilmente pueda encontrarse un paquete de reformas sociales tan significativos


con los que se están produciendo en la República Dominicana.

Dentro de ese paquete extraordinario de reformas se inscribe la nueva Ley de


Código del Trabajo y el organismo rector de niños, niñas y adolescentes, las leyes
que establecieron las secretaría de Estado de la Juventud, y de la Mujer; la nueva
Ley General de Educación, la Ley General sobre Medio Ambiente y Recursos
Naturales, la nueva Ley que establece la secretaría de Estado de Cultura, y la Ley
General de Salud y la que crea el Sistema Dominicano de Seguridad Social.
La culminación de esta trayectoria ha producido con el establecimiento del
Consejo Nacional de Lucha contra la Pobreza y el gabinete de Política Social, aún
en proceso de organización cuya política debe estar dirigida fundamentalmente a
procurar una mejor distribución del ingreso y a fortalecer las condiciones de vida
en las comunidades dominicanas a través de una gestión participativa.

LA REFORMA DE LOS SECTORES SALUD Y SEGURIDAD SOCIAL.

La reforma de los sectores salud y seguridad como resultado de su incuestionable


avance, conducir a que la población dominicana deje de percibirla como una de
las áreas de gestión más negativas, por la ineficiencia que históricamente ha
caracterizado a este sistema que no ha garantizado acceso a la salud a la mayoría
de la población ni adecuada calidad en los servicios que ha ofertado, y que
tampoco ha asegurado aceptables niveles de vida y de realización al personal que
mantiene operando este servicio.

En ese sentido cabe consignar como logros ya alcanzados la aprobación de las


Leyes Generales de Salud y de Seguridad Social respectivamente, el objetivo
principal de estas reformas es contribuir a mejorar el estado de salud de los
dominicanos de ingresos bajos y medianos, con énfasis en las madres solteras y
en período de lactancia, así como de los niños y niñas menores de 5 años de
edad, y de los envejecientes en las áreas urbanas y rurales, también, lograr una
cobertura universal de salud.
De aquí que sea ineludible que el sector, por medio de la reforma que tiene como
reto y demanda, expanda la cobertura de los servicios de salud y de pensiones
más pobres de la población, mediante la implementación de nuevos modelos de
organización financiamiento y gerenciamiento de los servicios de salud, haciendo
énfasis en la medicina preventiva; que mejore la calidad de programación y de
gerencia regional y local, y fomente la participación social y comunitaria en los
asuntos relacionados con su propia salud.

Se precisa la desconcentración y descentralización de la gerencia del sistema de


salud, muy especialmente, del mantenimiento de la planta física, y los recursos
humanos, acercando las soluciones a los problemas a través de los gobiernos
locales.

LA REFORMA DE LA EDUCACIÓN.

El Gobierno Nacional ha convertido la educación a todos los niveles en su


prioridad fundamental y en esa dirección ha desarrollado una dinámica
extraordinaria de construcción y rehabilitación de aulas con particular énfasis en el
nivel primario al mismo tiempo que ha iniciado la formulación de un nuevo Plan
Decenal de Educación, entrega gratuitamente los libros escolares, está
diversificando la enseñanza vocacional y creó la Secretaría de Estado de
Educación Superior, Ciencia y Tecnología.

El gobierno nacional ha señalado a la educación como su prioridad fundamental


para el despegue económico y la lucha contra la pobreza.

Para esos fines a seguido impulsando la aplicación de la Ley Orgánica de


Educación aprobada en 1998 y ha iniciado la formulación de un plan decenal de
educación para sustituir al vencido. En esa dirección se ha desarrollado una
dinámica extraordinaria de construcción y rehabilitación de aulas, de entrega de
libros y almuerzo a los escolares, de expansión de la enseñanza vocacional y un
basto programa de informática educativa.
Al mismo tiempo, ha tenido lugar un programa de reconocimiento a estudiantes
sobresalientes y de equipamiento de bibliotecas y centros para los liceos
secundarios.

De igual manera, con la aprobación de una Ley sobre Educación Superior, Ciencia
y Tecnología, se dio término a un período de virtual “laissez faire” en la creación y
desarrollo de universidades y otros centros de estudios superiores. Así como de
total indiferencia en materia de investigación científica y tecnológica, para dar
lugar a un proceso de organización y sistematización de todo el sistema de
educación superior, tanto pública como privada. De igual manera, el Estado ha
iniciado durante el presenta año la financiación de la investigación científica y
tecnológica a través de la Academia de Ciencias y como próximo paso en virtud
del financiamiento especializado a la investigación en las universidades, así como
la definición de un plan desarrollo científico y tecnológico que deberá definirse en
los próximos meses.

REFORMA DEL SECTOR CULTURAL.

Los esfuerzos por tener en nuestro país una política cultural acorde con los
nuevos tiempos, para beneficio real de nuestro pueblo, se remontan al 1961,
cuando a la caída del régimen trujillista se propuso la creación de un Instituto
Nacional de Cultura utilizando para éste los edificios que alojaban al oficialista
Partido Dominicano en todo el país. Pero fue en 1979 cuando una misión de la
UNESCO emprendió el primer diagnóstico sobre nuestras instituciones culturales
estatales, concluyendo en que se caracterizaban por la dispersión, duplicidad, el
elitismo y la concentración de recursos en la capital del país; recomendando la
creación de un instrumento cohesionador de las mismas. La realización por parte
del Consejo Presidencial de Cultura de un diagnóstico participativo sobre el sector
cultural en la República, en los meses de octubre del 1997 a enero del 1998,
constituyó un notable esfuerzo a favor de la sistematización y consolidación de la
acción cultural desarrollada por los sectores tanto público como privado.

La creación de la Secretaría de Estado de Cultura constituyó en su momento, la


culminación de un largo proceso de propuestas y debates encabezado por
artistas, intelectuales y trabajadores de la cultura, durante un período que abarcó
cuatro largas décadas. No obstante la enorme significación que para el sector
cultural tenía la constitución del nuevo instrumento, existía plena conciencia de
que se iniciaba una nueva aventura cuyo objetivo era arribar al establecimiento de
un Sistema Nacional de Cultura, entendido este último como “el conjunto de
instancias y procesos de desarrollo institucional, planificación e información
articulados entre sí, que posibilitan el desarrollo cultural y el acceso de la
comunidad a los bienes y servicios culturales, según los principios de
descentralización, participación y autonomía”.

En la concreción de un sistema nacional de cultura, al término del primer año de


vida institucional de la Secretaría de Estado de Cultura, se señala como un
importante paso de avance, la instalación del Consejo Nacional de Cultura,
máximo organismo de decisión en materia de política cultural, donde están
representados todos los sectores del país, garantizando que las grandes
decisiones sobre política cultural tengan el más amplio consenso.

La constitución de Consejos Provinciales de Desarrollo Cultural en toda la


geografía nacional es otra acción fundamental en el proceso de creación del
sistema nacional de cultura. Estos organismos garantizan que la acción cultural
del Estado se expanda hacia todos los rincones del territorio nacional, haciendo
que los beneficios del desarrollo intelectual, técnico y moral, alcancen a todos los
miembros de la sociedad dominicana.
La propuesta de un plan decenal de cultura apunta a la necesidad de formular
programas que sean asumidos por la sociedad dominicana en su conjunto. La falta
de continuidad en el desarrollo de los planes que se impulsan desde la esfera
estatal, ha sido señalada durante años como una de las trabas que impiden la
solución de los grandes problemas que nos aquejan. El avance logrado por el
sector educativo a partir de la implementación de su plan decenal, es otra de las
razones que nos permiten presentar esta tarea ante el país cultural como factible.

LA REFORMA EN LA POLÍTICA HACIA LA COMUNIDAD.

La participación activa de la ciudadanía en los asuntos públicos que le conciernen;


y en particular de las que tienen que ver con sus comunidades urbanas y rurales,
es un aspecto fundamental en la reforma del Estado.

En este sentido, las iniciativas más relevantes son las que tienen los objetivos
siguientes:

 Contribuir al desarrollo sustentable de la población urbana y suburbana y


mejorar a corto y mediano plazo las condiciones y calidad de vida de los
habitantes de los barrios de mayores índices de pobreza.
 Mejorar las condiciones habitacionales de las familias de bajos ingresos,
así como la situación sanitaria, vial y ambiental de los barrios pobres.
 Promover la participación comunitaria de los habitantes de los barrios en el
desarrollo local, a través de ejercicio democrático en la identificación,
priorización, formulación, ejecución y evaluación de acciones y proyectos
sociales.
 Fomentar la organización barrial y el fortalecimiento institucional de las
organizaciones de base.
 Promover los valores culturales de orgullo nacional, y propiciar acciones
recreativas para el esparcimiento espiritual de las familias en situaciones de
exclusión social.

Del conjunto de resultados que es posible esperar la Comisión de Apoyo Barrial


pueden señalarse: mejorar las condiciones habitacionales de las familias de bajos
ingresos, así como su situación sanitaria; conseguir condiciones viales y
ambientales de mejor calidad para los barrios pobres; promover la participación
comunitaria de sus habitantes en el desarrollo local; fomentar la organización
barrial y el fortalecimiento institucional de las organizaciones de base en la
implementación de Delegaciones Barriales; promover los valores culturales y
nacionales, y propiciar acciones recreativas para el esparcimiento espiritual de las
familias.

4.2 Reforma presupuestaria.

El debate público presupuestario oscila siempre entre la esperanza y la decepción.


El país espera que el presupuesto responda con creatividad a la jerarquía de
prioridades de los ciudadanos, pero siempre se aprueba un presupuesto que
responde a la tradición de copiar y pegar. El presupuesto se convierte cada año en
una oportunidad perdida.

El presupuesto clásico o administrativo es una previsión de aquellos gastos e


ingresos públicos que los órganos del Estado y los servicios de su administración
precisan para funcionar, para continuar subsistiendo o ampliar el área de su
quehacer.
Por ello, el presupuesto convencional toma como referencia las unidades
administrativas existentes, que pasan a integrarse en el plan contable del
presupuesto que detalla la manera en la que la organización estatal se propone
gastar los fondos públicos correspondientes.

Los servicios de la administración no son solo el origen del presupuesto


convencional, constituyen también su destino, en cuanto que el presupuesto
aprobado ofrece los medios la información del presupuesto clásico, puesto que,
respondiendo a su carácter de presupuesto de medios, muestra cómo el Estado
gasta (es decir, cómo gastan los servicios públicos en distintos objetos materiales
para asegurar su continuidad), pero no para qué ni por qué lo hace.

El presupuesto administrativo nos indica gracias a qué gastos podrá sostenerse la


existencia de unos servicios públicos, pero ni nos informa sobre las funciones que
estos gastos públicos permiten desempeñar, ni nos garantiza que los bienes y
servicios producidos cubran realmente las necesidades sociales.

Otras insuficiencias informativas, con respecto a las variables del análisis


económico de una sociedad, son: su falta de idoneidad para comprobar y analizar
los efectos de los ingresos y gastos públicos sobre la liquidez del sistema
económico, así como su imposible utilización para apreciar los efectos económicos
ocasionados por los programas de ingresos y gastos públicos sobre las distintas
partidas que integran la contabilidad nacional de un país y el nivel de su actividad
económica. Este hermetismo informativo es el que ha impulsado la búsqueda de
nuevos tipos presupuestarios.

4.3 política de costo Público.

Es un Agregado de orientaciones, lineamientos y criterios normativos que emite el


Ejecutivo Federal, a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, en
materia de Gasto público.

El objetivo de la Política de Gasto Público es canalizar


los Recursos presupuestarios, inducir la Demanda interna, redistribuir el Ingreso,
propiciar niveles de Desarrollo sectoriales y regionales, y vincular en mejores
condiciones la economía con el exterior, con el propósito de contribuir al logro de
los objetivos nacionales.

En República Dominicana, en términos de gasto público, en 1996 representaba un


24.2%; para 2000 había pasado a ser 37.6% y para este año es de 31.3%. Una de
las causas de la grave crisis económica es la ausencia de una disciplina fiscal que
permita no sólo mejorar la capacidad de recaudación sino redistribuir el gasto
público para beneficio de la población que más lo necesita. Sin embargo, se cita
mucho más la existencia de una nómina pública supernumeraria y se hacen
esfuerzos como el de febrero del año pasado cuando el gobierno dispuso la
creación de una comisión para revisar la nómina y hacer propuestas específicas
para su reducción.
Las cifras indican que en mayo del 2003 se dedicaron unos RD$2,014 millones al
pago de servicios personales, mientras que en noviembre esa cifra se redujo a
RD$1,841 millones.
Según la composición del Proyecto para el 2004, los gastos corrientes totales
ascenderán hasta los RD$82 mil 162.58 millones, igual al 13.24% por Producto
Bruto Interno calculado para el país en el transcurso de todo el año que viene. A
su vez, los gastos de capital se reportan un nivel mucho más moderado, al
situarse en RD$14 mil 613.82 millones, igual al 2.35% del PBI nacional. Se estima
que el país recibirá unos RD$12 mil 396 millones que llegarán desde el exterior
para reforzar los fondos que localmente recaudarán las instituciones encargadas.
Igualmente hay que tomar en cuenta que aun cuando el pago total del servicio de
la deuda pública ascenderá a unos RD$39 mil 085 millones, el servicio de la
deuda externa significará desembolsos para el país por RD$24 mil millones. De
hecho, unas ocho instituciones que agrupan los sectores de concentración social
recibirán la mayor carga específica del Presupuesto y Ley de Gastos el año
venidero, al disponer de un total de RD$44 mil 959.58 millones para cumplir con
sus programas.
Tales programas incluyen gastos de consumo o corrientes en estas instituciones
sociales por RD$20 mil 297.81 millones, prestaciones por RD$4 mil 230.61
millones, inversión real directa del orden de los RD$2 mil 636.31 millones, así
como otras partidas menos significativas.
Entre las instituciones calificadas de carácter social figuran en el Proyecto de
Presupuesto y Ley de Gastos, las Secretarías de Educación y de Salud Pública, la
de Deportes y Recreación, los sectores de asistencia social, los sectores de
vivienda y urbanismo, agua potable y alcantarillado, servicios municipales y la
seguridad social.
La nómina pública para 2003 se incrementó en 61,228 empleados, un 18.5% con
relación al 2000 y su costo en el presupuesto nacional ha pasado de RD$18,132.7
millones a RD$26,286.8 en 2003 con una proyección de RD$30,288 millones para
2004, lo que indica que el costo de la nómina crecerá un 67% en cuatro años y se
reducirá en términos de su proporción del gasto público total de 37.6% en 2000 a
31.3%.
Mientras que el pago de la deuda se llevará en el presupuesto de 2004 un 40% del
gasto público, mientras que en 2002 sólo significó un 16.5%. El impacto del
incremento del gasto para el pago de la deuda pública es evidente en la reducción
del gasto de capital (inversión real directa) ha sido el más afectado, pasando de
28% en 2002 a 15% proyectado en el presupuesto de 2004. El gasto social se ha
reducido de un 45.7% en el 2002 a 37.2% en el 2004.
El costo de la deuda es excesivo para las finanzas públicas y limita las
posibilidades de desarrollo porque los recursos que podrían destinarse a la
inversión pública y al gasto social en renglones prioritarios como la educación, la
salud y la seguridad social entre otros, se utilizan para honrar los servicios de la
deuda.
Para el 2004 el gasto público se duplicó debido a la inflación generada por la
devaluación monetaria y el salvamento de los bancos quebrados.
Según Andrés Dauhajre hijo, el incremento de este gasto sería financiado con
nuevos impuestos que “no van a mejorar el nivel de vida de la población por medio
a una mejor educación, servicio a la salud y alimentación”. Los recursos
adicionales se destinarían a “cubrir los problemas generados por la quiebra de
más de tres bancos comerciales”.

4.4 Concepto de la política económica.

La política económica es la estrategia que formulan los gobiernos para conducir la


economía de los países. Esta estrategia utiliza la manipulación de ciertas
herramientas para obtener unos fines o resultados económicos específicos.

Estas políticas son a menudo influidas por las instituciones internacionales como
el Fondo Monetario Internacional o el Banco Mundial, así como las creencias
políticas y las consiguientes políticas de los partidos .

4.5 Importancia de la política económica.

Es importante ya que la acción de la política económica burguesa sobre la


producción y se circunscribe a medidas aisladas y, no puede asegurar el
desarrollo planificado de la economía en escala de toda la sociedad. Como quiera
que en los países capitalistas la economía está sujeta a un régimen de propiedad
privada, las medidas indicadas se llevan a cabo sólo en lo que favorece a los
intereses ante todo de la burguesía monopolista. Las relaciones socialistas de
producción confieren a la política económica del Estado socialista un contenido
distinto, por principio del que poseen en el régimen capitalista. En la sociedad
socialista, la política económica se basa en la utilización consciente de las leyes
económicas del socialismo y se orienta hacia la creación de las condiciones
necesarias para que se incremente rápidamente y sin obstáculos la producción
social con el fin de satisfacer las crecientes necesidades de toda la sociedad y de
cada uno de sus miembros.
05- Las atribuciones de los poderes públicos en el proceso
presupuestal y La reforma de la Seguridad social.

5.1 Las atribuciones de los poderes públicos en el proceso


presupuestal.

Los Poderes del Estado Dominicano lo conforman:


El Poder Ejecutivo:
Es aquel que lo ejecuta el Estado y el que promueve las leyes. El Poder
Ejecutivo lo ejerce el Presidente de la República, quien es elegido cada
cuatro años por voto directo. Hay un Vicepresidente de la República,
que es elegido en la misma forma y por igual período que el Presidente
y conjuntamente con éste.

El Poder Legislativo:
Es aquel poder que hace las leyes. Está compuesto por la Cámara Baja
y la Cámara Alta. La cámara baja la conforma el senado, y la cámara
alta los diputados. Ambas cámaras forman el Congreso Nacional.
Actualmente (período 2006-2010) existen 32 Senadores, uno por cada
provincia del país y uno por el Distrito Nacional, en la actualidad
(período 2006-2010) hay 178 Diputados.
El Poder Judicial:
Es aquel poder que hace cumplir las leyes. Lo compone la Suprema
Corte de Justicia, que a la vez está compuesta por 16 jueces.

5.2 La reforma de la Seguridad social.

La Reforma de los Sectores Salud y Seguridad Social.

La reforma de los sectores salud y seguridad como resultado de su incuestionable


avance, conducir a que la población dominicana deje de percibirla como una de
las áreas de gestión más negativas, por la ineficiencia que históricamente ha
caracterizado a este sistema que no ha garantizado acceso a la salud a la mayoría
de la población ni adecuada calidad en los servicios que ha ofertado, y que
tampoco ha asegurado aceptables niveles de vida y de realización al personal que
mantiene operando este servicio.

En ese sentido cabe consignar como logros ya alcanzados la aprobación de las


Leyes Generales de Salud y de Seguridad Social respectivamente, el objetivo
principal de estas reformas es contribuir a mejorar el estado de salud de los
dominicanos de ingresos bajos y medianos, con énfasis en las madres solteras y
en período de lactancia, así como de los niños y niñas menores de 5 años de
edad, y de los envejecientes en las áreas urbanas y rurales, también, lograr una
cobertura universal de salud.

De aquí que sea ineludible que el sector, por medio de la reforma que tiene como
reto y demanda, expanda la cobertura de los servicios de salud y de pensiones
más pobres de la población, mediante la implementación de nuevos modelos de
organización financiamiento y gerenciamiento de los servicios de salud, haciendo
énfasis en la medicina preventiva; que mejore la calidad de programación y de
gerencia regional y local, y fomente la participación social y comunitaria en los
asuntos relacionados con su propia salud.

Se precisa la desconcentración y descentralización de la gerencia del sistema de


salud, muy especialmente, del mantenimiento de la planta física, y los recursos
humanos, acercando las soluciones a los problemas a través de los gobiernos
locales.

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