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Introducción
Este aporte viene a poner punto final a las diferentes versiones que,
sobre la fecha en cuestión, se han publicado en el correr de los años;
aunque es de justicia reconocer que quienes tomaron tal fecha de su
más temprano cronista e íntimo amigo Nicolás de Soraluce (Historia de
Guipuzcoa) recogida por Nicolás de Soraluce y Zubizarreta (Historia
General de Guipuzcoa, Madrid, 1869), han hecho lo correcto, tal como
es el caso de A. Delgado Castilla (Notable calígrafo donostiarra, Euskal
Erria, 1916) y, en años más recientes, la Gran Enciclopedia Vasca
Auñamendi, que a su vez lo ha tomado de este último.
Por cierto que este aporte es vital para conocer las razones de tal
transformación, aunque lamentablemente no hemos podido confirmarlo,
pues en el testamento considerado válido y por el cual se ejecutó la
testamentaría (Archivo General de la Nación, Archivo Judicial, Civil 1º,
A:3, L:I, 1866), iniciado el 1 de julio de 1855, y que recibiera el último
de numerosos agregados posteriores hasta fecha muy próxima a su
fallecimiento, nada dice al respecto. Concluyo entonces que Fernández
Saldaña tuvo a la vista el testamento original que fuera expresamente
anulado por Besnes porque, según expresó él mismo:
La Guerra de la Independencia
(1808-1814)
Y agregaba:
…de todos los títulos que he merecido, sólo podría decir que el que más
me enorgullece, es el ser uno de los fundadores de la nueva
construcción del Hospital de Caridad de Montevideo, hoy, quizá, uno de
los mejores de esta parte de la América del Sur, y que habiendo
trabajado por su engrandecimiento desde el año 1922, se me elevó a
"Hermano benemérito".
Aunque con un ligero error por parte del pintor, pues su ingreso a la
Hermandad con el cargo de secretario había sido un año más tarde de lo
que él recordaba, Besnes integró la Junta del hospital hasta 1825.
En los últimos años de su vida pintaría una serie de acuarelas del
antiguo edificio y de la ceremonia de colocación de la piedra
fundamental. Al pie de estos pequeños trabajos escribía:
En la Junta administrativa de
1824 del Hospital iniciamos un
hospital que admitiese 100
enfermos en lugar de 12 o 20
que era su dotación.
En la referida piedra se
introdujeron, en dos botellas de
cristal, numerosos documentos
entre los que se hallaban varias Principio de la demolición del Hospital
memorias suscritas en diferentes de Caridad y colocación de la piedra
fundamental ...
idiomas representativos de la
nacionalidad de la población, tales como portugués, francés, castellano,
gallego, mahonés, toscano y euskara (vasco); por supuesto, ésta última
escrita por él, según se desprende del Acta de la Junta de Gobierno de
la Hermandad de Caridad del 24 de abril de 1825:
Indudablemente este autor pasó por alto que tal insignia era el símbolo
de la Hermandad de San José y Caridad.En tal sentido resulta
esclarecedor el testimonio que sobre su visita a la iglesia del "Hospicio
de la Caridad" escribió José Sallusti cuando acompañó a Monseñor Juan
Muzi en su visita a Montevideo a fines de 1824 :
Indudablemente que el año 1839 fue pródigo para con Besnes, pues en
el artículo segundo del Decreto del 14 de enero de ese año, establecía
que los informes de la Comisión Topográfica deberían suscribirse por
tres vocales "Para que el Gobierno y los Tribunales de Justicia puedan
apoyar sus resoluciones en lo negocios en que son indispensables los
conocimiento facultativos de la Comisión Topográfica, y acrecentar las
garantías que este útil establecimiento promete a los intereses públicos
y particulares…", estableciendo en su artículo tercero que:
A partir del año 1843, inicio del largo Sitio de Montevideo que,
prolongado por casi nueve años, sería bautizado por Alejandro Dumas
como "La Nueva Troya", Besnes realizará una larga serie de acuarelas
en las que, una vez más, deja un fiel testimonio de la sangrienta
gestación de nuestra república . Domiciliado en la ciudad sitiada, dejará
testimonio de sus simpatías políticas no sólo en sus cuadros, sino en las
satíricas viñetas esbozadas en sus cuadernos, donde ridiculiza las
figuras de los generales Rosas y Oribe.
Pocos son los libros de historia uruguaya que se han permitido ignorar
sus numerosos óleos y acuarelas. Cada vez que nos referimos a hechos
claves de nuestra vida institucional, su legado se nos presenta
recreando con luminosa claridad diversos episodios históricos que
cambiarían para siempre la vida de los países del Plata. Es además una
fuente ineludible para los historiadores a la hora de estudiar diversos
aspectos del Uruguay del siglo XIX, tales como la evolución edilicia, los
uniformes militares, los usos y costumbres ya sea de la campaña o de la
ciudad, el diseño de los navíos que fondeaban en el Puerto
montevideano, y acontecimientos históricos tan relevantes como la Jura
de la Constitución, la entrada de Rivera a Montevideo, y diversas
batallas, ya fueran estas en tierra o navales.
La carta decía:
Pero nada es, todo esto comparado con el movil del recuerdo, por que
viene del corazón de V., y todo lo demás, por brillante que sea, cede
ante la superioridad de ese afecto, de esos sentimientos, de ese
civismo, de esa sinceridad por el amor á la Patria. ¿Qué puede el
Ayuntamiento ofrecer a V. que sea digno de tan elevados títulos? Si
aprecia V. nuestra gratitud, cual no duda el Ayuntamiento, esa la tiene.
El cuadro que el afecto de V. nos envía, está colocado en el testero de la
pieza de Sesiones, y aquí le conservaremos siempre: Si algo recibe V.
de nuestra parte, será para poner ante sus ojos un objeto, que proceda
de este pueblo, y enviado por el mismo; pero el Ayuntamiento le
protesta, que su afecto no es inferior al de V.
Seis años más tarde, Besnes nuevamente atraía sobre sí la atención del
Consistorio donostiarra:
Homenajes póstumos
De la liquidación de la
testamentaría se desprende que
en su capilla ardiente el pintor
fue velado en un ataúd de caoba
al calor de cuatro velas de a
patacón la unidad.
Entierro.-
Una vez mas nos hemos convencido ayer de que tiene sobrada razón el
esclesiate (sic) cuando dice que "mas vale un buen nombre que los
Ungüentos mas preciosos".
No.
Ha muerto pobre, y jamás en su vida ha pretendido aspirar á las
posiciones oficiales; porque le bastaba su nombre para conquistar el
respeto y la admiración de todos los hombres honrados.
Este sólo título que lo hace rey de su arte, le conquista una corona
mucho más hermosa que la de los imperios de la tierra; porque esa
corona es la del genio, que en vez de piedras preciosas brilla con la luz
divinal, destello del mismo Dios, cuyo rayo sólo se fija en la frente de
los escogidos.
F. Ferreira y Artigas.
En ella dice:
Dedicado a mi hermano
Dn. Pedro María Besné é Irigoyen
natural de Sn. Sebn. en Guipuzcoa y
residente en la misma Ciudad
Monto. Octe. 2-1859
189 cuadros
25 vistas
2 lotes de buques
1 lote de dibujos
1 lote de varias figuras
1 lote de láminas
y varios planos, papeles de dibujo, caligrafías y vidrios de aumento.
De todas ellas, 139 cuadros y dos planos fueron adquiridas por un tal
Irigoyen, presumiblemente alguno de sus hijos adoptivos.
Particulares
Museos
2)
Archivo General de la Nación
Bibliografía
Archivos consultados:
Publicaciones periódicas