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Nombre: José Rodrigo Quisbert Plata

Carrera: Ingeniería en Sistemas

PRÓLOGO

El prólogo nos habla de tres momentos principales dentro de la lectura de libro, el primero
se resume en que los papas dan mucha lata, el segundo que no se debe confiar en los
adultos que intentan tener un lazo cercano con los jóvenes, sobre todo en aquellos que
aparentan ser más amigables y el tercer momento que nos habla de la confianza que
debemos tener a nosotros mismos.

Pienso que este primer panorama del texto es bastante llamativo, personalmente creo que la
mayoría de las personas a una edad determinada cree que los padres son muy fastidiosos
con sus reglas e imposiciones, sin embrago, con el pasar del tiempo poco a poco llegamos a
entender todo aquello que pretendían nuestros padres.

Es cierto que los roles de un adulto son muy diferentes a los de un joven, muchas personas
con el pasar de los años tienen miedo a ser adultos y entran en una crisis profunda, el ser
adulto implica tener varias responsabilidades, sin embargo, el ser joven implica
experimentar nuevas facetas en el diario vivir y aprender de todas esas experiencias. Creo
que esta parte del texto nos trata de hacer entender que existe una desventaja de los jóvenes
con respecto a los adultos y por eso es que nos advierte que no se confié en aquellos que
intentan ser muy amigables.

La confianza en uno mismo es fundamental en todo momento, ya que nos ayuda a tomar
decisiones importantes en nuestra vida y es un pilar importante de nuestra autoestima, en
fin, es el mejor concejo que se puede dar hasta el día de hoy “tener confianza en uno
mismo”.
CAPÍTULO PRIMERO
DE QUÉ VA LA ÉTICA

En resumen, este capítulo nos habla sobre la libertad que tenemos las personas en
comparación a otros seres vivos que están programados para un objetivo específico, dentro
de esta libertad nos aclara que no somos libres de elegir ciertas cosas que nos pasa y que ser
libres para intentar algo no implica que se logre completamente lo que deseamos.

En un criterio personal creo que todos somos libres de hacer lo que queramos, sin embargo,
nuestro entorno social y la sociedad nos limita ciertas actitudes, ese es el punto de partida
de las cosas que son bien y mal vistas por unos y por otros. Nuestras acciones frente a la
vida deben ser bastante prudentes si queremos equivocarnos lo menos posible, pero si
llegamos a equivocarnos será nuestra decisión el aprender de esos errores y salir adelante o
quedarnos estancados culpando a otros de nuestros fallos.

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