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Presencia de la
muerte en poemas
iberoamericanos del
siglo XX
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Jorge Luis Borges, Bernardo Ortiz de Montellano los de alimentación o sus comportamientos con
y Jaime Sabines. el fin prolongar la sobrevida. En algunas ocasio-
nes, la persona se asigna fechas o metas como el
RESULTADOS nacimiento de un nieto o la jubilación, para de
Importancia psicológica de la muerte algún modo recibir o aceptar su muerte.
Para el adulto, el concepto de muerte incluye una • Depresión: al asimilar la idea de la muerte se
serie de sentimientos que varía para cada individuo produce tal impacto emocional que la persona
de acuerdo con sus creencias, pensamientos, estilo se vuelve disfuncional en sus quehaceres, en el
de vida, personalidad y experiencias. Se trata aquí trabajo y con su familia. Ahora se culpa incluso
de analizar a grandes rasgos el pensamiento psico- por los gastos de su muerte o, al contrario, por
lógico ante la muerte como parte integrante y fin las personas importantes que dejará desampara-
último de la vida. das o desprotegidas –en caso de que así lo sea–
Psicológicamente, la muerte se considera un es decir, hijos, esposa, o por no poder aportar
asunto emocional que se conoce como duelo (del económicamente a sus familiares. La depresión
latín dolus, doli, dolor). En la literatura médica se en estos pacientes requiere atención psicoterapéu-
encuentra referido el duelo en diversas situaciones, tica ya sea para aliviar los síntomas de la persona
ya sea del adulto, del niño, el anciano, el enfermo que la sufre o para evitar que se suicide.
o incluso el duelo relacionado con objetos. En este • Aceptación: se reconoce el final inevitable y en
caso, se describirá brevemente el duelo propio, el algunas ocasiones necesario. La persona se en-
de cada individuo ante su próxima muerte. cuentra en una actitud realista y decide hacer los
Para ello se considerarán los estudios de la doc- últimos planes, sobre todo con la familia, para
tora Elisabeth Kübler-Ross, que separan la reacción dejar tal vez algunos asuntos arreglados antes de
ante la muerte en cinco fases6: su forzada partida. De acuerdo con el carácter
de la persona, también puede haber desinterés
• Negación: es una reacción que se presenta como por ciertos objetos, personas o momentos. Al-
sorpresa y que normalmente hace que el individuo gunos prefieren la soledad sobre todo en casa,
haga exclamaciones como: ¡no puede ser! o ¡esto lugar donde pasó buena parte de su vida.
no me puede estar pasando a mi! Esta resistencia a
aceptar la realidad se presenta no sólo en cualquier Se reconoce que no todas las etapas están presentes
sujeto ante la noticia de una enfermedad hasta ese en todas las personas, dependerá del tiempo en el
momento desconocida, sino también en algunos que se haga consciente el evento fatal. El proceso de
adultos mayores. En ambos casos, estos indivi- duelo ante la muerte es importante, ya que se pre-
duos se muestran renuentes a la información de senta en todas las personas y en particular es un he-
profesionales e incluso de familiares. cho inherente en la vida del médico. Por otro lado,
• Enojo: en ésta etapa es característica la actitud entender esta realidad, ayuda a entender también
de culpa atribuida a los demás, sobre todo a fa- ciertos comportamientos y a veces algunas expresio-
miliares, y el individuo intenta acusarlos por la nes artísticas con respecto al tema.
enfermedad o por haberla dejado avanzar hasta
el punto del inminente y prematuro desenlace. Implicaciones filosóficas de la muerte en
En otras circunstancias, la persona se siente en ejemplos de poesía
una realidad injusta comparada con la de los De las distintas formas de pensamiento que los hom-
demás al darse cuenta de que pronto dejará de bres tienen a lo largo de su vida se conocen inquietu-
seguir con su vida habitual. des en común relacionadas con su existencia y que
• Negociación: cuando la persona se encuentra son estudiadas por la filosofía (jilo-sojia, amor a la
en esta etapa, se observan actitudes de regateo sabiduría, de jilew, amar y sojia, sabiduría)7. A lo
ya sea buscando tratamientos o mejorando esti- largo del tiempo, los pensadores se han encontrado
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con dificultades al tratar de considerar que una per- de aferrarse a la vida, dejándola expresada en esta
sona tiene algo más que un cuerpo. Esa otra parte forma artística. Escribe, entonces para defender su
humana aún no queda bien establecida pues para amor a la vida.
unos es espíritu o alma; para los filósofos podría
ser razón; para los psicólogos y psiquiatras, psique; DISCUSIÓN
y los científicos tal vez la definirían como mente. El morir es una realidad que cada individuo reflexio-
Si consideramos estas dos partes humanas, el hom- na de distinto modo. El reconocimiento del suceso
bre ya no es sólo un cuerpo formado por elementos inevitable mantiene a la persona en incertidumbre,
biológicos, también es un ser pensante, y con esta sobre todo cuando es testigo de la muerte de otras
concepción, cada individuo razona con respecto a las personas cercanas a él. Ante estos acontecimientos
capacidades y necesidades de su cuerpo, así también cercanos, es característico en algunos individuos el
medita sobre el cese del funcionamiento del mismo, sentimiento peculiar de soledad. Este efecto psico-
es decir, medita acerca de su muerte. lógico que invade a la persona, se manifestará de
En cambio, en la poesía no se acepta la razón nuevo en pensamientos existenciales con respecto
para morir, sino la razón como aquello que vence a al legado, herencia o recuerdo que dejará como tras-
la muerte8. Así, el hombre que escribe poesía refle- cendencia para después de su muerte. Así, teniendo
ja con libre escritura la manera en cómo ve el mun- en cuenta los comportamientos de cada persona, se
do, que es distinta a la del filósofo; sin embargo, no sabe, a lo largo de la historia de expresiones artísti-
por eso el poeta deja de cuestionarse respecto a la cas sobre el tema de la muerte, que de lo que aquí
vida. Claramente, sabe que –por ser su naturaleza– se trata específicamente es de la poesía.
el morir conforma parte de su realidad, sólo que Vale la pena relacionar el pensamiento con la
lo manifiesta de manera distinta –con incertidum- poesía, a pesar de que la filosofía en general se in-
bre, negación, angustia y tristeza–, como tratando cline hacia la razón, a diferencia de la poesía que
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también es común al pensamiento, así se ve refleja- fecto,/me relajaría más./Sería más tonto de lo que he
do en un párrafo del poema Elegía interrumpida: sido,/de hecho tomaría muy pocas cosas con serie-
dad./Sería menos higiénico./Correría más riesgos,/
Pero no hay agua ya, todo está seco,/no sabe el pan, haría más viajes,/contemplaría más atardeceres,/
la fruta amarga,/amor domesticado, masticado,/en subiría más montañas,/nadaría más ríos. /Iría a más
jaulas de barrotes invisibles/mono onanista y pe- lugares adonde nunca he ido,/comería más helados
rra amaestrada,/lo que devoras te devora,/tu víctima y menos habas,/tendía más problemas reales/y me-
también es tu verdugo./Montón de días muertos, nos imaginarios.14
arrugados/periódicos, y noches descorchadas/y en
el amanecer de párpados hinchados/el gesto con que En este otro, se aprecia el mismo sentido de incon-
deshacemos/el nudo corredizo, la corbata,/y ya apa- formidad con el tiempo de la vida en Vida entrevis-
gan las luces en la calle/¿saluda al sol, araña, no seas ta de Octavio Paz:
rencorosa?/y más muertos que vivos entramos en
la cama.13 Los huesos son relámpagos/en la noche del cuerpo./
Oh mundo, todo es noche/y la vida es relámpago.15
En esto último, se observa la aceptación del dete-
rioro de la funcionalidad del cuerpo: “Pero no hay El pasar del tiempo en la biología del cuerpo hu-
agua ya, todo está seco, no sabe el pan, la fruta amar- mano es una constante lucha y contradicción en-
ga”. Esto indica, para el pensamiento de Paz, que se tre el cuerpo y la mente, pues mientras la persona
llega a un momento en la vida de todo hombre en adquiera mayor experiencia y cultura, al pasar del
el que la muerte es, por así decirlo, necesaria, pues tiempo se hace más sabia, es decir, crece mientras
ahora el vivir no se disfruta igual que en las prime- que el cuerpo, por el contrario, se lesiona y va per-
ras décadas de la existencia. La cotidianeidad de la diendo capacidades cada día que pasa, se deteriora.
vida llega a cansar, a tal punto que el final de un Este problema se ve inferido en el poema Los viejos
día es más bien el pesar de ya muchos años auna- de Octavio Paz:
do al sentimiento de fastidio y de no haber vivido
al máximo algunos otros momentos, hecho que se Los hombres con su tos, sus venenos lentísimos/y
expresa en el último de los dos párrafos anterio- su sangre en el destierro/de ese lugar de pinos, agua
res. Éste mismo tedio e inconformidad de la vida se y rocas/desde su nacimiento señalado/como sepul-
plasma más marcadamente en Instantes, escrito por cro suyo por la muerte.16
Jorge Luis Borges:
Consciente de la pérdida de la vitalidad del cuerpo
Si pudiera vivir nuevamente mi vida,/en la próxi- y en espera de la muerte en Muerte de cielo azul de
ma cometía más errores./No intentaría ser tan per- Bernardo Ortiz de Montellano:
Este cuerpo mi cuerpo sometido/a la niebla más Jaime Sabines, en Pensándolo bien, denota ese in-
niebla de mi muerta/soledad sin presencia ni desti- evitable destino mortal de los seres humanos y su
no,/perdido el aire sin saber la esencia./Este cuerpo intento por refrenarlo:
sin voz, metal sin fuego/mano sin despedida que
no muevo/brazo lirio de lava y de ceniza./Aire sin Expertos bien intencionados y médicos amigos/
soplo de ternura verde/este cuerpo sin voz ya no es me recomiendan dietas y sistemas/para prolongar
la vida/pero tampoco el sueño ni la muerte.17 la vida unos años más./Lo agradezco de todo cora-
zón, pero me río/de tan vanas recetas y tan escaso
Es un hecho que el hombre escribe poesía sobre el afán./(la muerte también ríe de todas esas cosas.)22
tema de la muerte y lo hace desde distintos puntos
de vista, por ejemplo, cuando está conciente de ella, Y también, cuando el ser humano expresa su depre-
tal y como se ve en fragmentos de El mismo tiempo, sión ante su próxima llegada, el poema Tengo miedo
de Octavio Paz: de Pablo Neruda es insignia:
Todos vamos a morir/¿sabemos algo más?/[…] ¡que Tengo miedo. La tarde es gris y la tristeza/del cielo
extraño es saberse vivo!/[…] conmigo no empezó se abre como una boca de muerto./Tiene mi cora-
el mundo/no ha de acabar conmigo/soy un latido zón un llanto de princesa/olvidada en el fondo de
en el río de latidos/18 un palacio desierto./[…] Y la muerte del mundo
cae sobre mi vida.23
De que no se sabe el día ni la hora, en El Pájaro de
Octavio Paz: De acuerdo con María Zambrano, el poeta se man-
tiene alerta hasta desvivirse, ante los cambios, los
Y sentí que la muerte era una flecha/que no se sabe menudos y tremendos cambios en que nace y muere,
quién dispara/y en un abrir los ojos nos morimos.19 se consumen las cosas;24 así escribe acerca de su exis-
tencia, necesidades y miedos, también de sus tiem-
Siguiendo con esta misma línea, Octavio Paz en su pos terrenales, de sus etapas de la vida y de todo lo
poema Espiración infiere que otros serán testigos de que lo rodea. Y siendo la muerte un pensamiento
nuestra muerte como mexicanos: necesario, es también una opción de tema para el
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poeta. El poeta que es ser humano, comprende por Leer poesía con la temática de la muerte genera
sí mismo su porvenir y se apoya en la realidad del alivio, invita a la reflexión individual, a disfrutar y
tiempo, las experiencias, los miedos y su imagi- a apreciar los pensamientos melancólicos de quie-
nación atreviéndose a escribir en el modo en que nes dejaron plasmado su sufrimiento como un le-
sabe hacerlo, con versos, sus argumentos de muerte, gado hermoso que trasciende a través de la historia
como se ha visto en ejemplos anteriores. y en la conciencia de cada individuo.
Conclusiones Agradecimientos
Consciente de que el género humano se sabe mor- A la Dra. Andrea Dávila Cervantes, Departamento
tal debido a un proceso biológico propio de su na- Integración de Ciencias Médicas, Facultad de Me-
turaleza, el individuo reflexiona necesariamente sobre dicina, UNAM.
el funcionamiento, envejecimiento y muerte de su
ser. Puede verse que la muerte en la poesía refleja Referencias bibliográficas
el pensamiento humano de forma artística, y en al- 1. Rodríguez S. Diccionario etimológico griego-latín del espa-
gunas ocasiones melancólica, sobre esa realidad que ñol. Octava edición. México: Esfinge .p. 176.
2. Laín Entralgo P. Historia universal de la medicina. Tomo 1.
nos concierne a todos. Así, la muerte como deter- España: Masson, Medicina pretécnica; 2006. p.62.
minación de todo ser humano es lo que le da sen- 3. Ibid. p. 62.
tido a su vida. El quehacer de cada individuo, sus 4. Rodríguez, op. cit. p. 171.
triunfos, miedos, fracasos, y todo lo que conoce, 5. Zambrano M. Filosofía y poesía. Cuarta edición. México:
las cosas, los lugares y las personas que lo rodean FCE; 1996. p. 13.
6. De la Fuente R. Psicología médica. Segunda edición. México:
son las cosas de la vida que lo mueven a seguir bus-
FCE; 2000. p. 210.
cando, amando, soñando, viviendo. Gracias a la 7. Rodríguez Castro, op. cit. p. 52.
lectura de la poesía se comprende que el hombre 8. Zambrano, op. cit. p. 34.
iberoamericano tiene una conciencia del final de su 9. Zambrano, op. cit. p.21.
vida. Entonces, cuando se habla de vida, también 10. Palabra virtual: http://www.palabravirtual.com/index.php?
se incluye la muerte como parte de la existencia. ir=ver_poema1.php&pid=8599
11. Neruda P. Antología poética 2 (1957-1973). España: Alianza;
El hombre iberoamericano del siglo XX, cuyo 2000. p. 366.
pasado histórico está asociado a un culto de la muer- 12. Zambrano, op. cit. p. 56-57.
te, continúa teniendo la misma angustia y sigue sin- 13. Paz O. Libertad bajo palabra. Obra poética (1935-1957),
tiendo el mismo respeto hacia la muerte como sus p. 211.
antepasados, a pesar de conocer aún más los por- 14. Poemas del alma: http://www.poemas-del-alma.com/instan-
tes.htm
qués científicos del proceso de la muerte. Este he-
15. Paz O. Obra poética (1935-1988). España: Seix Barral; 1990.
cho hace que se siga cuestionando y manifestando p. 421.
literariamente sobre este evento natural. La muerte, 16. Paz O. Obra poética (1935-1957). p. 149.
como fenómeno natural, seguirá causando la fasci- 17. Dauster F. Antología de la poesía Mexicana. Segunda edi-
nación del ser humano que seguirá preguntándose ción. España: Ebro; 1980. p. 222.
por su porvenir y, para el hombre iberoamericano 18. http://www.palabravirtual.com/index.php?ir=ver_poe-
ma1.php&pid=8599
contemporáneo, continuará siendo materia de es- 19. Paz O. Obra poética (1935-1957), p. 151.
critura y culto. 20. Ibid p. 214.
Reflejada como una situación de interés univer- 21. Paz O. Libertad bajo palabra. Obra poética (1935-1957),
sal, la muerte impacta a la humanidad por ser el México; FCE, 1990.p. 211.
único evento del que nadie escapa. En la búsqueda 22. Sabines J. Yuria. Poemas sueltos. Ed. Joaquin Mortiz; 1967.
p. 32.
de liberar esta angustia existencial, el ser humano
23. Neruda P. Obras completas. De crepusculario a Las uvas y el
encuentra en el arte el medio para pensar la muerte, viento 1923-1954. España: Galaxia; 2002. p. 372.
hacerle frente y soportarla, llevándola a su máximo 24. Zambrano, op. cit. p. 36-37.
esplendor que es la poesía.25 25. Jodorowsky A. Yo, el Tarot. Madrid, España: DeBolsillo; 2006.