Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
CATEQUESIS 14ª
JESÚS NOS TRAE EL REINO DE DIOS
MENSAJE QUE SE DESEA LLEGAR A TRAVÉS DE LA CATEQUESIS DE
HOY:
El cumplimiento en Jesucristo de las promesas de Salvación y liberación es el
comienzo del Reino de Dios en la tierra. Jesús lo anuncia con las parábolas del Reino.
3. Hay lugares donde estamos muy a gusto, pasamos aquí largo tiempo con nuestros
amigos, disfrutamos con lo que hacemos, nos sentimos bien porque jugamos y nos
contamos muchas cosas que haríamos si fuésemos mayores.
5. Jesús nos habló de un Reino donde se vivía en autentica felicidad. Él nos enseñó la
manera de llegar a ese lugar extraordinario. Nos contó parábolas (como cuentos) para
explicarnos cómo era ese Reino: el sembrador, el grano de mostaza, el tesoro
escondido y el banquete de bodas. A ese lugar le llamamos el Reino de Dios. Con
Jesús presente se ha llegado a nosotros el Reino de Dios.
6. Se lee el tema por turnos y se va explicando. Hay dos conceptos muy importantes por
aclarar: Reino de Dios y Parábola.
Reino de Dios es la salvación de Dios que Jesús trae al mundo: Él es el Rey, y los que
le siguen entran a formar parte de su Reino, el Reino de Dios Padre. Aquí en la tierra
los hombres trabajamos para hacerlo crecer.
Jesús es consciente de que este Reino de Dios es difícil de comprender por eso lo
explica a través de parábolas.
La Parábola es una breve comparación basada en algo de la vida cotidiana, cuyo fin es
enseñar una verdad espiritual. No son fábulas ni alegorías porque se basan en un
hecho o una observación real o por lo menos verosímil.
En el tema se hace referencia a cuatro parábolas del Reino, pero hay muchas más.
A partir de la PARÁBOLA DEL BANQUETE, dialogamos sobre las veces en las que
también nosotros ponemos excusas para no estar con Jesús, para no ir a Misa el
domingo o a Catequesis. Pero ante la llamada de Jesús no hay que excusarse.
Jesús volvió a Galilea animado por el Espíritu Santo, y su fama se extendió por
toda la región. Él iba enseñando en las sinagogas, y todos estaban contentos con lo que
decía y hacía.
Vino a Nazaret, donde se había criado y, según su costumbre, entró en la
sinagoga el día de sábado, y se levantó para hacer la lectura.
Le entregaron el libro del profeta Isaías y leyó el pasaje donde estaba escrito:
“El Espíritu del Señor sobre mí, porque me ha ungido para anunciar a los pobres la
Buena Noticia, me ha enviado a proclamar la liberación a los que están en la cárcel
injustamente y la vista a los ciegos, para ayudar a todas las personas que lo pasan
mal y proclamar un año de gracia del Señor”.
Devolvió el libro al encargado, y se sentó. En la sinagoga todos los ojos estaban
fijos en él. Comenzó, pues, a decirles: "Esta Escritura, que acabáis de oír, se ha
4
CATEQUISTA: Gracias, Padre bueno, porque Jesús nos ha enseñado que eres un
Padre lleno de ternura.
CATEQUISTA: Gracias, Padre bueno, porque Jesús nos ha dado la Buena Noticia del
Reino de Dios.
CATEQUISTA: Jesús, ven con nosotros. Nos gusta conocer la Buena Noticia.
Enséñanos la manera de vivirla.