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Estimado Gonzalo:

Confío en que te encuentres bien ¡Siempre a la vera de una buena mujer!


Es interesante el punto que me comentaste el pasado día. Si mal no entendí: Un
alimentante, que se encontraba en mora en el pago de su pensión alimenticia, por una
suma de dinero considerable, por cierto ya devengada, procedió a enajenar un inmueble,
mediante un contrato de venta por escritura pública. En dicho acto se pactó que el saldo
de precio se pagará en parcialidades bajo las modalidades pactadas en el contrato. No
recuerdo si se constituyó una hipoteca con carácter de primera hipoteca, para caucionar
el saldo de precio.
Sin perjuicio de ello, y luego de masticarlo he llegado a la siguiente
conclusión:
1.- El saldo de precio constituye para al vendedor acreedor un crédito y, por lo tanto es
un bien incorporal según lo dispone el artículo 576 del Código Civil; más
específicamente un crédito en los términos del artículo 578 del citado Código. En
consecuencia forma parte de su patrimonio y, por efecto de lo establecido en el artículo
2465 del Código Civil forma parte de la garantía general patrimonial del sujeto deudor.
Es evidente que se trata de un bien comerciable y el artículo 1460 del Código Civil
zanja cualquier duda al respecto; el artículo 1461 del Código de Bello exige que para
que una cosa se objeto de declaración de voluntan es preciso que sea comerciable y se
encuentre determinada, a lo menos, en cuanto a su género ( lo cual cumple a la
perfección, per se el dinero).
Si te quedaran dudas observada el artículo 445 del Código de
Procedimiento Civil en relación con lo dispuesto en el artículo 1618 del Código Civil, y
allí si que dejarás de dudar, por cuanto entre los bienes inembargables no se encuentran
los saldos de precio.
2.- Que, en este contexto, el artículo 443 Nº 3 del Código de Procedimiento Civil, al
tratar de los requisitos que debe cumplir el mandamiento de ejecución y embargo
dispuso que este mandamiento debe contener la de embargar bienes del deudor, en
cantidad suficientes.
3.- Entonces, teniendo presente que este saldo de precio constituye un bien mueble, y
que corresponde a una suma determinada de dinero, no existe duda alguna que se
encuentra contenido en la hipótesis legal del artículo 438 Nº 3º del Código de
Procedimiento Civil.
Es bueno tener presente el tema del reembargo (Yo defendería de
esta forma al deudor – Pobre Hombre, que se acordará hasta el día de su muerte del
infauto coito que lo ha colocado en dicha situación-) o sea, simularía otra deuda y la
ejecutaría sobre dicho patrimonio.
4.- Pero lo esencial es considerar lo siguiente, ya que todo este asunto gira en torno al
pago, aunque sea forzadamente, de una obligación dineraria.
El artículo 1578 del Código Civil en su numeral 2º disponer que
el pago hecho al deudor es nulo en los casos siguientes: 2º Si por el juez se ha
embargado la deuda o mandado retener lo pagado.
Entonces es esencial embarga la deuda, y notificar al acreedor del
saldo de precio (deudor de alimentos) así como al deudor comprador, para evitar la
nulidad del pago.
Además, yo instaría por conseguir que el Conservador competente
accediera a una nota marginal en el título de compra, con el objeto de publicitar la
existencia del embargo del saldo de precio, al respecto te recomiendo solicitarlo al señor
Juez y lee el Reglamento del Conservador; estimo que existe bastante mérito para
acceder a dicha anotación marginal.
Sin otro particular ¡Que te vaya bien!

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