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Análisis Sismorresistente Elementos de Sismología y Terremotos

DERIVA CONTINENTAL: La teoría Wegener, denominada también de la teoría de la deriva


continental. En el siglo XX se desarrolló la técnica geofísica denominada paleomagnetismo.
Mediante esta técnica fue posible establecer la posición relativa de los polos a través del tiempo, y
en general se pudo demostrar que los polos han variado su posición con respecto al eje de
rotación de la tierra y además, que los continentes se han desplazado entre sí.
Con respecto a la deriva continental, el paleomagnetismo permitió comprobar lo siguiente:
* Pangea existió como una unidad desde el período Paleozoico hasta fines del Triásico. Durante
este intervalo de tiempo geológico, el cual comprende aproximadamente 300 millones de años, el
Polo Sur migró a través de África del Sur y la Antártida, por una distancia angular de 90°.
* Pangea comenzó a desintegrarse a finales del Triásico, cuando América del Norte se separó del
noroeste de África y la fase más intensa de dispersión de los continentes se efectuó durante el
Mesozoico y el Terciario.
ESTRUCTURA INTERNA DE LA TIERRA: La corteza y el manto superior constituyen la capa
externa de la Tierra y forman un nivel relativamente rígido y frío que exhibe un comportamiento
frágil. Recibe el nombre de litósfera. La corteza es la capa rígida de la Tierra, se divide en corteza
oceánica y corteza continental. Por debajo de la litósfera a una profundidad de unos 660 km se
observa una capa blanda, relativamente plástica situada en el manto superior y se conoce como
astenósfera, esta zona, bastante dúctil, permite el movimiento relativo de la litósfera con respecto
a la astenósfera. El manto, tiene un espesor de unos 2900 km constituye más del 80% del volumen
de la Tierra. Se divide en manto superior (e « 660 km) y en manto inferior o mesosfera (e « 2240
km). El núcleo está compuesto fundamentalmente de hierro. Se divide en dos: el núcleo interno
(roca) y el núcleo externo (liquido). La rotación de la Tierra origina dentro del núcleo externo una
circulación de fluido que genera el campo magnético en nuestro planeta.
TECTÓNICA DE PLACAS: Permite explicar el movimiento observado en la litósfera terrestre por
medio de los mecanismos de subducción y de expansión del fondo oceánico. Estos mecanismos
generan los continentes y las cuencas oceánicas.
Límites de Placas.- Existen 3 tipos de límites:
Limites Divergentes: Este tipo de borde se produce fundamentalmente en las dorsales oceánicas.
A medida que las placas se separan, fenómeno también conocido como expansión del fondo
oceánico, las fracturas creadas se rellenan con roca fundida que sube desde la astenósfera inferior
ocasionando el ascenso del fondo oceánico en estas zonas.
Límites de Fallas de Transformación: Este tipo de falla tiene lugar en el borde de dos placas que se
deslizan una con respecto a la otra sin destruir litosfera antigua ni crear litosfera nueva. La
dirección de estas fallas es paralela al movimiento de las placas.
Límites de Subducción: Llamado también borde convergente, es un borde en el cual dos placas se
juntan en forma tal que una de las placas de la litosfera se consume en el manto a medida que
desciende por debajo de la otra.

Ubicación de sismos superficiales (x)


y profundos (círculos) en zonas de
subducción, (tornado de Bolt, B.A. ;
fuente: Press y Sievers ).
FALLAS Y REBOTE ELASTICO: Una falla se define como el plano de rotura en una masa rocosa a
lo largo de la cual se produce movimiento, la longitud de las fallas puede variar desde unos pocos
metros hasta varios cientos de kilómetros que se extienden a lo largo de la superficie de la Tierra
hasta profundidades que pueden alcanzar decenas de kilómetros. El ancho en las zonas de falla
puede tener varios kilómetros, siendo a menudo más fáciles de identificar a partir de fotografías
aéreas que a nivel del suelo. Su presencia en algunas ocasiones puede detectarse a simple vista y
se refleja fácilmente en la topografía superficial, en otras ocasiones, su presencia es muy difícil de
detectar. La presencia de una falla no necesariamente implica que la misma sea sísmicamente
activa. Es decir, la falla puede tener lugar por infinidad de causas y ser sísmicamente inactiva.
Clasificación de las fallas: fallas normales, fallas inversas y fallas de desplazamiento horizontal.
Falla normal: en la cual la roca ubicada por encima del plano de falla inclinado se desliza hacia
abajo en relación a la roca situada por debajo, que le sirve de soporte.
Falla inversa: en la cual el material situado encima del plano de falla o bloque de techo asciende
con respecto al material situado debajo o bloque de muro.
Falla de desplazamiento horizontal o falla transcurrente: involucra desplazamientos laterales de
roca en la dirección paralela a su rumbo. Las fallas transcurrentes pueden tener un rumbo lateral
izquierdo, o tener un rumbo lateral derecho.
El deslizamiento repentino de los bloques de falla permite que la roca deformada vuelva a su
forma original. La teoría del rebote elástico describe este proceso sucesivo de creación y
liberación de energía de deformación en la roca adyacente a las fallas. El desplazamiento relativo
total de las placas es igual a la suma de los desplazamientos parciales observados según el rumbo
de la falla, más la de los desplazamientos ocasionados por el alabeo o comba producidos por la
distorsión de las márgenes de las placas en las proximidades a la falla. La gran mayoría de los
terremotos se produce por la liberación repentina de energía elástica de deformación acumulada
en la roca que ha sido sometida a grandes esfuerzos. Las fallas no son uniformes geométricamente
así como tampoco lo son las propiedades de los materiales que las conforman, pudiendo existir
zonas fuertes y zonas débiles en la superficie de la falla. No todo el movimiento que se produce a
lo largo de las fallas es horizontal. También es común la presencia de desplazamientos verticales
conocidos como escarpes. En algunas ocasiones los sismos tienen lugar a grandes profundidades,
no observándose desplazamiento alguno en la superficie.
FOCO Y EPICENTRO, ONDAS SÍSMICAS: El punto en el plano de falla donde se origina la
ruptura y se da inicio a la liberación de energía mediante la propagación de ondas sísmicas recibe
el nombre de foco o hipocentro. Su ubicación se define mediante las coordenadas de longitud,
latitud y profundidad focal. El epicentro es el punto sobre la superficie terrestre ubicado
directamente sobre el foco o hipocentro.
También se le define como la proyección vertical del foco sobre la superficie terrestre claramente
ilustra la ubicación del foco, del epicentro y la dirección de las ondas sísmicas resultantes.
Cuando ocurre un terremoto se generan dos tipos de ondas: ondas corpóreas y ondas
superficiales. Las ondas corpóreas, que son las que pueden viajar a través del interior de la Tierra,
son de dos tipos: ondas P y ondas S.

Ubicación del foco, del epicentro y


distribución de las ondas sísmicas
generadas durante un terremoto (tornado de Deformaciones producidas por ondas
Keller, E.A.). corpóreas: (a) Ondas P, y (b) Ondas S. (tornado
de Bolt, 1999).
SISMOGRAMAS: Los terremotos causan movimiento horizontal y vertical del terreno, es preciso
utilizar sismógrafos de componente horizontal según dos direcciones ortogonales (Norte y Sur), y
sismógrafos diseñados para medir el movimiento vertical. Los registros así obtenidos reciben el
nombre de sismogramas.
Resulta importante señalar que la velocidad de las ondas S a través de material rocoso como por
ejemplo el granito, es aproximadamente de 3 kilómetros por segundo. En general, en cualquier
material solido las ondas P viajan 1,7 veces más de prisa que las ondas S, mientras que las ondas
superficiales viajan al 90 por ciento de la velocidad de las ondas S. Ya que las ondas superficiales
están confinadas a una zona estrecha de la corteza terrestre, no se propagan por el interior de la
Tierra como las ondas S y P, conservando su máxima amplitud durante más tiempo. Además en las
ondas superficiales el intervalo de tiempo entre las crestas (periodo) es más largo, razón por la
cual se las conoce también como ondas largas u ondas L.

Sismograma (componente vertical)


correspondiente a un terremoto de
magnitud 5 .3 a 8 8 km, (tornado de
Bolt B.A., 19999).

UBICACION DEL EPICENTRO:


Con el auxilio del grafico distancia-tiempo mostrado en la figura es posible determinar la distancia
al epicentro. Para ello, basta con medir directamente en el sismograma la diferencia entre el
tiempo de llegada de la primera onda P y de la primera onda S.

Posición del epicentro


en la intersección de
las cuervas.

El epicentro del sismo se localiza


utilizando las distancias obtenidas a
Gráfico distancia-tiempo utilizado para calcular la partir de 3 o más estaciones
distancia epicentral a partir de un sismograma sismológicas.
conocido, (adaptado de Tarbuck y Lutgens).

MAGNITUD E INTENSIDAD: El término intensidad es comúnmente empleado para denotar la


severidad de un terremoto en un área determinada. El termino magnitud es una medida de la
cantidad de energía liberada. La magnitud se calcula directamente a partir del registro obtenido
durante un terremoto en un sismómetro torsional calibrado. La intensidad se determina a partir
de observaciones personales de los daños causados por un terremoto a personas, construcciones
y a la topografía del terreno.
PREDICCION DE TERREMOTOS:
Predicción a Corto Plazo: Se basa en la observación de ciertas anomalías precursoras que ocurren
en las proximidades de las fallas activas, tales como posibles levantamientos, subsidencia y
deformación de las rocas, y en algunos casos cambios bruscos en el magnetismo de las rocas.
Para ello se utilizan medidores de deslizamiento, inclinómetros y perforaciones. Esta predicción es
una misión difícil y a veces imposible de lograr, ya que resulta bastante complicado estudiar y
supervisar el comportamiento de los focos o hipocentros potenciales de sismos debido a su gran
profundidad. Hasta hoy no existe ningún método fiable que permita la predicción de sismos a
corto plazo.
Predicciones a Largo Plazo: proporcionan información probabilística que intenta pronosticar la
ocurrencia de un sismo con una magnitud o intensidad determinada en intervalos de tiempo
variables de 30 ,50 o más años, denominados períodos de retorno. Estos pronósticos se basan en
la suposición de que los terremotos son repetitivos o cíclicos. Con la ayuda de la información
sísmica histórica e instrumental, se han establecido patrones probabilísticos de recurrencia de los
sismos.
Los geólogos y sismólogos están orientando sus esfuerzos hacia la predicción de terremotos con
un enfoque más modesto, pero más realista. De hecho el objetivo se centra en anticipar cuales son
las áreas más susceptibles a la ocurrencia de grandes sismos. Se han realizado estudios que
explican los patrones de ocurrencia y distribución de sismos poco profundos (h < 70 km) con
magnitudes elevadas (Mw > 8) y rupturas de falla considerables, del orden de varios centenares
de 30, 31, 32 kilómetros, que han ocurrido en las regiones sísmicamente activas de la cuenca del
Pacifico.
Los vacíos sísmicos se identifican como zonas en las que la ocurrencia de sismos importantes (Ms >
7) tiene lugar durante muchas décadas antes de la ocurrencia de un sismo realmente grande, (Ms>
8.5).
EVALUACION DE LA AMENAZA Y DEL RIESGO: A pesar de que estos términos son a menudo
utilizados indistintamente, no son términos sinónimos.
Evaluación de la Amenaza:
La evaluación de la amenaza envuelve las siguientes interrogantes: ¿Que tan a menudo se espera
que ocurra el evento o la amenaza?, y si ocurre, ¿Cuáles serán sus efectos? Los resultados son, o
deberían ser, utilizados por las autoridades municipales, urbanistas e ingenieros con el fin de
planificar en forma segura el uso de la tierra y de incorporar los resultados en códigos y
ordenanzas.
Evaluación del Riesgo: Puede definirse como la probabilidad de que en un determinado sitio y
durante la acción de alguna amenaza natural se produzcan pérdidas de vidas, económicas y
sociales que excedan ciertos valores o niveles prefijados de daño. La evaluación del riesgo
depende de: la amenaza sísmica, la vulnerabilidad estructural y el nivel de daño aceptado.
VULNERABILIDAD ESTRUCTURAL: La vulnerabilidad sísmica de una estructura puede definirse
como el límite en el que se sobrepasa el grado de reserva o el nivel de capacidad de respuesta
previsto disponible ante una amenaza sísmica conocida.
El proceso de evaluación incluye dos aspectos fundamentales: la tipificación y evaluación de los
daños potenciales, y la determinación de sus causas. Los daños ocasionados en edificaciones
durante la acción de terremotos se dividen en daños a elementos estructurales y daños a
elementos no estructurales.
Factores que influyen en la vulnerabilidad sísmica de edificaciones: Factores Geológicos, Factores
Estructurales, Factores Arquitectónicos, Factores Constructivos, Factores Socio-económicos.

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