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LA IMPORTANCIA QUE TIENEN LAS POLITICAS ECONOMICAS PARA EL

CRECIMIENTO DE UN PAIS.

Si nos referimos a la definición de políticas económicas encontramos en el


diccionario o en estudios realizados por eruditos del tema económico, que se
refiere a la estrategia que formulan los gobiernos para conducir la economía de los
países. Esta estrategia se apoya en ciertas herramientas para obtener unos fines
o resultados económicos específicos.

Las herramientas utilizadas se relacionan con las políticas fiscal, monetaria,


cambiaria, de precios, de sector externo, etc.

La política monetaria, por ejemplo, se aplica a través de las decisiones sobre la


emisión de dinero, puede generar efectos sobre la inflación o las tasas de interés;
la política fiscal  a través de las determinaciones de gasto público e impuestos,
puede tener efectos sobre la actividad productiva de las empresas y, en últimas,
sobre el crecimiento económico. La política comercial, o de comercio exterior,
tiene efectos sobre los ingresos del Estado y, de esta forma, sobre el gasto que
éste logre realizar.

En término general, la intervención del Estado a través de las políticas económicas


se puede dar de muchas formas, sin embargo, fundamentalmente, tiene el
propósito de modificar el comportamiento de los sujetos económicos a través de
incentivos, estímulos, beneficios tributarios, etc., o de prohibir o limitar las
acciones de estos sujetos. Aunque en algunas ocasiones los objetivos buscados,
al ser muchos, pueden ser contradictorios, debe existir una coordinación e
integración entre las diferentes políticas, de tal forma que se produzcan los
resultados esperados.

Los resultados buscados pueden ser a corto o largo plazo. Los fines de corto plazo
buscan enfrentar una situación actual; es decir, una coyuntura económica actual,
por lo tanto, las medidas son coyunturales. Las medidas de largo plazo buscan
otros tipos de finalidades, las cuales pueden afectar la estructura económica de un
país, por lo tanto, son medidas estructurales. Las medidas de corto plazo buscan
enfrentar temas como la disminución del desempleo la inflación  etc., mientras que
las medidas de largo plazo pueden ser, por ejemplo: incentivar el desarrollo de un
sector específico de la economía (agricultura, industria, etc.), buscar una mejor
distribución del ingreso, etc., todos esos procesos que llevan tiempo para
desarrollarse y que, en general, buscan el bienestar de los habitantes del país.

En Colombia, las autoridades encargadas de determinar la política económica son


el Banco de la República (a través de su Junta directiva) y el Consejo Nacional de
Política Económica y Social (CONPES), los cuales, toman determinaciones
relacionadas con política monetaria, fiscal y cambiaria, así como el Departamento
Nacional de Planeación, el cual desarrolla políticas económicas hacia el futuro
según el proyecto de país que se busque a través de los Planes de desarrollo.

Así las cosas en Colombia para el año 2017, la junta directiva del Banco de la
Republica estableció unas políticas que tienden a la recuperación del crecimiento
económico a través de la discusión y aprobación de la reforma tributaria que le
permita al gobierno la captación de recursos económicos en aras de impulsar los
diferentes sectores a económicos, a través del fomento de empleo que permita a
la población de los diferentes estratos mejor su capacidad de compra y por ende
su condición económica, además mediante la reducción de las tasas de interés
que llegaría al 5,5% el gobierno pretende la reactivación de la economía.

Otros factores a los antes señalados, están supeditados a los precios del petróleo
y el avance de las obras de infraestructura, como bien se sabe los precios del
petróleo tiene una gran incidencia en las finanzas de los países exportadores del
crudo, mientras las obras de infraestructura que se adelanten en los diferentes
frentes, es otra política que impulsa el desarrollo, además de la producción
agropecuaria y la dinámica de la actividad turística las cuales contribuyen a
reactivar la economía y a disminuir el desempleo tan reinante en los países en vía
de desarrollo.

Trazadas estas políticas, analistas económicos consideran que el crecimiento a


duras penas estaría por el orden del 2%, por cuanto la reforma tributaria aprobada
por el congreso, en nada favorece a la industria y estaría obstaculizando la
inversión.

Pero a pesar de la buenas intenciones del gobierno nacional no se puede


desconocer el ámbito internacional, que no hace prever un mayor crecimiento de
los países europeos; además el alza de tasas en EE. UU., la incertidumbre ante
las políticas del presidente Donald Trump, la debilidad económica de la mayoría
de naciones latinoamericanas, determinan un panorama nada halagador para el
crecimiento de la economía Colombiana.

A las previsiones de crecimiento de la economía nacional del 2%, habrá que


sumar los efectos negativos de corto plazo de la reforma tributaria, que al bajar los
ingresos reales de las familias empujará a parte de sus miembros a dejar la
inactividad y buscar empleo. Esto, frente a una demanda de trabajo estancada por
el bajo crecimiento, conllevando necesariamente un aumento del desempleo que
es el escenario más ajustado a la realidad por la que atraviesa actualmente la
economía Colombiana.

En consecuencias las tendencias de la economía en nuestro país no generan


mayor optimismo en cuanto al crecimiento del empleo, aunada esta situación a los
problemas en el ámbito internacional que pueden limitar nuestra capacidad
exportadora. Es muy posible que el desempleo esté en niveles superiores al 10
por ciento, pero no llegará a superar el 11%.
En cuanto a la inflación, las apuestas indican que esté muy cerca del rango meta
del Banco de la República (entre el 2 y 4 por ciento anual), pero más próxima al
límite superior que al 3%, que es la meta del Emisor, a pesar del comportamiento
a la baja que hoy presenta este indicador.

El Gobierno insiste en que el PIB aumentará 3%, mientras que otros sectores
creen que será muy similar al del 2016, es decir que posiblemente se ubique por
debajo del 2%. Las apreciaciones de quienes apuestan por una cifra inferior a la
oficial están soportadas en la tendencia que mostró la actividad productiva el año
pasado.
Además, factores como el incremento del salario mínimo del 7% y la reforma
tributaria, son los argumentos de quienes hablan de un PIB moderado para el
2017.
Por su parte, el Gobierno confía que se puede alcanzar el 3% debido a la
expectativa de la paz, la menor inflación, el descenso en las tasas de interés y el
ajuste fiscal, que le permitirán mantener el grado de inversión.
Sin embargo, no está claro cómo despejar nubarrones liderados por el menor
ritmo de crecimiento del Producto Interno Bruto, los altibajos en la producción
industrial, el estancamiento de las ventas del comercio, la incertidumbre generada
en la actividad edificadora debido a la reducción de las licencias de construcción, y
el impacto que podría tener en la demanda interna la entrada en vigor de la
reforma tributaria, especialmente en lo que se refiere al aumento del IVA del 16 al
19%.

Como se ha planteado las políticas que establezca el gobierno nacional


contribuyen de una u otra manera a alcanzar el crecimiento económico a tal punto
que para el año 2017, el gobierno tenía fincadas las esperanzas que a través de la
reforma tributaria, las bajas tasas de interés, y el impulso con las obras de
infraestructura se alcanzaría la meta del 3% en el PIB, sin embargo como lo han
manifestados muchas entidades del orden nacional encargadas del seguimiento y
evaluación de la economía, todos estos factores aunque apuntan a la reactivación
y al desarrollo de la economía asociado a los factores externos de incertidumbre
internacional, generará algunas dudas para alcanzar la tan anhelada meta, no
obstante, algunos expertos consideran que Colombia va a ser capaz de
responder, y alcanzar ese indicador gracias a la fortaleza de sus instituciones.

En el fondo el gobierno pretende que con las políticas económicas establecidas se


logre alcanzar el crecimiento de la economía, trayendo como consecuencias la
reactivación del campo, de la industria, y demás sectores que apuntan al
desarrollo del país, para de esa manera se pueda crecer de manera "extensiva"
utilizando más recursos como el capital físico, humano o natural, o bien de manera
"intensiva", usando la misma cantidad de recursos con mayor eficiencia o sea en
forma más productiva. Cuando el crecimiento económico se produce utilizando
más mano de obra, no trae como resultado el aumento del ingreso por habitante;
cuando se logra mediante un uso más productivo de todos los recursos, incluida la
mano de obra, trae un incremento del ingreso por habitante y por ende la mejora
en calidad de vida de la población. Por lo tanto el crecimiento económico intensivo
es condición del desarrollo económico.

Juan Pablo Escobar Romero.

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