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La luz en la mirada, I

(Recorrido por las librerías de Medellín)

El encuentro se dio a las 9:30 a. m. Ana Piedad, Sebastián, Alejandro, Valentina, Diana y

quien narra, nos sentamos en el bulevar del pasaje La Bastilla y entre desayuno y café dimos

comienzo a nuestra jornada. Poco después se nos unieron Kelly y Dayana, luego José, nuestro

camarógrafo, y ya con el equipo completo decidimos comenzar nuestra visita al Centro

Comercial del Libro, saludar a los libreros, ver cómo inauguran su día a día, contarles un poco

acerca de la campaña para que nuestros ciudadanos se motiven a regalar un libro en diciembre

próximo, recorrer cada uno de los puestos, preguntar por algunos títulos y comprar uno que otro

antojo. Todo esto hizo parte de este primer recorrido del equipo de Eventos del Libro, no había

imaginado cómo sería este día pero siento que quedará para siempre en mi memoria.

Cada pequeña librería del Centro Comercial del Libro se convierte en un mundo lleno de

sorpresas, el universo del libro lo permite: miles de títulos impresos en todos los tiempos hacen

esto posible pues la diversidad de temas y autores es algo que va pegado al libro como el tallo a

la flor; y si bien vemos libros de aquellos autores que no pierden su vigencia, de otra parte

tropezamos con aquellos autores de los cuales desconocemos su origen. También es fácil

encontrar extraños textos que nos remontan a otras épocas, esto sumado a la oportunidad de

dialogar al paso con los libreros.

Departimos al azar con las personas que laboran allí. Son varias las ideas que queríamos

expresar: en primer lugar los invitamos para que unan esfuerzos y logren consolidarse como

gremio; hablamos sobre el proyecto de Vitrina Virtual del Libro, una posibilidad de apertura

hacia lo digital y que actualmente está en desarrollo; vemos el brillo en los ojos de nuevas

generaciones de muchachos que ven en el arte de ser librero una oportunidad laboral, eso nos

motiva para avanzar y poder aportar en apoyo al sector, un sector que, como otros tantos, vive

los difíciles momentos provocados por la pandemia. Alguna vez disertaba con un viejo amigo
sobre cómo mejorar las condiciones sociales, culturales y económicas de las personas. Lo más

importante es que exista voluntad política, decía. En el actual momento, y pensando en el

sector librero y editorial de Medellín, esta voluntad se está manifestando.

Durante el recorrido, los libros van aflorando. Iniciamos, sin pensar, las primeras

adquisiciones. Después de hacer algunas entrevistas y grabar el material que nos ha de servir

para promocionar a las librerías, decidimos darnos un breve descanso, pues, de antemano,

habíamos concertado visitar otras librerías en el centro de la ciudad. A punto de partir, aparece

Gustavo Zuluaga, uno de esos libreros tradicionales, que debido a la actual crisis sanitaria tuvo

que cerrar su librería Este lugar de la noche, situada frente a la Universidad de Antioquia. Un

emotivo encuentro con Ana Piedad hace que volvamos atrás, esta vez hasta el nuevo puesto de

trabajo de Gustavo en el segundo piso del Centro Comercial del Libro, las anécdotas entre Ana

Piedad y Gustavo completan el ambiente, más libros llegan al bolso de Ana Piedad y, finalmente,

la despedida nos ubica esta vez en Junín con La Playa buscando la librería Librópolis.

En la mitad del pasaje del Centro Comercial Orquídea Plaza, en el local 118, se

encuentra Librópolis. Preguntamos por José Aníbal, su propietario, y no está. Sin embargo nos

atiende Judy, quien desempeña desde hace ya varios años su labor como administradora, nos

habla sobre el proceso adelantado por la librería durante los 9 años de funcionamiento en este

lugar. En este recorrido nos acompaña Alejandro, quien se ha integrado al equipo de Eventos

del Libro para apoyar la labor de los libreros, brindando asesoría en temas de mercadeo. Le

comento un poco acerca de José Aníbal, un librero formado en la histórica Librería Continental,

un gran conocedor del oficio a quien esperamos encontrar en una próxima visita. En Librópolis,

los libros se amontonan en los pasillos: los hay de todos los tipos, libros hermosos, autores y

ediciones bien cuidadas, gran variedad de temas. Veo a mis compañeras de jornada vivir cada

instante en medio del fascinación y el gozo. Ante mí, una colección de libros de Kawabata, en

una hermosa edición…


Durante un rato conversamos con Judy, le contamos lo que estamos haciendo, le

invitamos a participar de las capacitaciones que actualmente se están dictando, direccionadas

exclusivamente al sector y pensadas para poder reacomodar a las librerías en lo que se

denomina el entorno digital, programas que han de permitir un mejor acercamiento hacia los

lectores. Veo en sus ojos el brillo del interés en el tema, anotamos sus datos para ofrecerle más

información. Ese es el comienzo de nuestra partida pues vamos hacia Entrelineas, una librería

ubicada en un pequeño rincón sobre la playa arriba de la Avenida Oriental.

Entrelíneas es una librería recientemente inaugurada, además de estar muy bien ubicada

–Avenida Oriental con La Playa, en la Plazoleta del edificio Búcaros–, evidencia algo que nos

sucede a quienes visitamos librerías: tiene alma, ese espíritu que surge quizá del encuentro

entre la tinta y el papel, aquello que hace de los libros objetos únicos sobre la reproducción

técnica de su origen. Encontramos allí a dos personas; Tatiana, encargada en este momento de

la administración, y Gustavo Adolfo, quien adelanta el trabajo en redes sociales, situación nueva

y hacia la cual apuntan las librerías de la ciudad.

Removimos durante un buen rato este remanso, de nuevo en búsqueda de títulos y el

diálogo con los libreros. Al rato llega Lina Marcela, una de las propietarias de la librería.

Inmediatamente le reconozco desde ese compromiso y amor por el libro ya que son varios los

años ejerciendo su labor. Amablemente nos concede una entrevista más, para aportar a la

campaña que invita a visitar a las librerías de nuestra ciudad. En ocasiones me pregunto ¿Es

posible ser librero en Medellín? La respuesta inmediata es ¡Sí es posible! Posible a partir de la

motivación y de ciertos rituales, y qué mejor ritual que visitar periódicamente las librerías de

una ciudad, esos pequeños refugios de paz que cautivan con sus portadas de colores e invitan al

asombro.

El tiempo avanza. Cerca de la 1:00 p. m. decidimos almorzar y qué mejor lugar para

hacerlo que el restaurante que aloja a otra de las librerías que hace parte de nuestro recorrido,
El Acontista, palabra que de inmediato trae a la mente la música entregada por nuestro gran

poeta León de Greiff ….

¡Azores y neblíes, gerifaltes, tagres, sacres, alcotanes, halcones


acudid a la voz del acontista!
y enderecemos nuestras garras a la conquista
de las nubes, volubles como los corazones…
y —cual los corazones— inmutables.

Con los años la librería El Acontista se ha posicionado como una de esas librerías clásicas

de la ciudad, la manera como están dispuestos los libros la hace aprehensible, pues su

disposición permite llegar a los temas ubicándolos fácilmente. Comienza nuestro diálogo con los

libreros a cargo, quienes nos comentan que actualmente adelantan el inventario detallado de su

fondo con el fin de subirlo a la web, sin dudas un arduo trabajo de categorización. Si algo nos

queda de las actuales circunstancias por todos vividas es la necesidad de implementar y

automatizar procesos al interior de las librerías pues el trabajo del librero requiere de un

constante monitoreo de existencias, devoluciones y nuevas adquisiciones. La labor emprendida

en cuanto a capacitaciones para el sector ofrece las herramientas para simplificar estos procesos

y hacer que el librero pueda centrarse en la asesoría a los lectores, en la elección de títulos, y en

las nuevas labores que las librerías proponen como centros culturales de promoción del libro y

la lectura. Esta visita nos permite completar el video de la campaña que pretendemos realizar

con el fin de animar a nuestros ciudadanos para que se apropien de estos espacios que nos

ofrece la ciudad y hacer de Medellín la ciudad de los libros.

Después de esta visita nos dirigimos a otro sector de la ciudad, se trata del sector estadio

allí nos esperan tres importantes librerías…

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