Presentado por: Mery Lizeth Trilleras Juanias Cod:507274

Abel y Caín se encontraron después de la muerte de Abel. Caminaban por el desierto y se

reconocieron desde lejos, porque los dos eran muy altos. Los hermanos se sentaron en la tierra,
hicieron un fuego y comieron. Guardaban silencio, a la manera de la gente cansada cuando declina
el día. En el cielo asomaba alguna estrella, que aún no había recibido su nombre. A la luz de las
llamas, Caín advirtió en la frente de Abel la marca de la piedra y dejó caer el pan que estaba por
llevarse a la boca y pidió que le fuera perdonado su crimen.

Abel contestó:

—¿Tú me has matado o yo te he matado? Ya no recuerdo; aquí estamos juntos como antes.

—Ahora sé que en verdad me has perdonado —dijo Caín—, porque olvidar es perdonar. Yo trataré
también de olvidar.

Abel dijo despacio:

—Así es. Mientras dura el remordimiento dura la culpa.

Abel y Caín. Jorge Luis Borges.

1. Detalles

Metáfora sobre Caín y Abel personajes bíblicos, hermanos; Caín asesino Abel, el escenario muestra
un rencuentro posterior a sus muertes y una conversación sobre el perdón y su relación con el
olvido

2. Idea principal

Perdón y como esta quita el remordimiento y la culpa, muestra una postura en la cual hace énfasis a
que cuando en verdad se perdona se tiene que olvidar por que o si no siempre existirá
remordimiento y culpa

3. Secuencias
 Rencuentro entre hermanos
 Recuerdos
 Conclusión perdón y olvido
4. Causa – efecto
Ejemplo de lo que el autor considera como verdadero acto de perdón argumentación del por que es
necesario olvidar

5. Lexical
 Declina: es lo que hace algo cuando se acerca a su término o a su final

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