Está en la página 1de 4

Cómo optimizar tu flujo de caja durante

una crisis de liquidez


Financiación19 de Marzo de 2020 por Paco Foret

El Coronavirus, conocido como Covid-19, ha llegado por sorpresa en este 2020.


Categorizado por los expertos como el “Cisne negro” de 2020, es decir, un evento que
nadie esperaba y con grandes consecuencias negativas para la economía global.

A día de hoy, el Covid-19, originado en China en la provincia de Wuhan ya ha tenido un


impacto devastador para empresas, personas y países enteros. En estos momentos hay más
de 180.000 infectados en todo el mundo y más de 7.400 muertos, habiéndose movido el
foco de la pandemia al corazón de Europa, donde países como Italia o España están
sufriendo los efectos en mayor medida.

Para la mayoría de empresas la prioridad ahora mismo está enfocada a proteger a sus
empleados y empezar a ver qué impacto puede tener en su negocio a la vez que intentan
solucionar los efectos que el Covid-19 puede haber tenido en su cadena de suministro,
especialmente para empresas que dependen de suministros que provienen de China. El
impacto real de esta pandemia aún es imposible de prever, puesto que los expertos han
afirmado en más de una ocasión que nos encontramos en una fase inicial de la crisis, sobre
todo en Europa.

Del mismo modo, es extremadamente complicado poder analizar con certeza el impacto
completo que este evento va a tener en las empresas, países y personas puesto que tiene
implicaciones que van más allá de supuestos que pudieran haberse previsto.

Uno de los puntos que creemos que va a ser determinante para las empresas españolas es
cómo gestionan su tesorería de aquí en adelante. La afectación a la cadena de suministro
tiene un efecto directo en el flujo de caja y por este motivo las empresas deben tomar
medidas específicas al respecto para paliar sus efectos negativos. En este informe
realizamos una serie de recomendaciones a empresas para que puedan tomar acciones
concretas para minimizar los daños que pueden sufrir por problemas derivados del flujo de
caja.

Dar respuesta al impacto inminente del Covid-19


El flujo de caja se ha convertido, en momentos como este, en un elemento crucial para
poder navegar esta crisis. Todas las empresas deberían desarrollar inmediatamente un plan
de tesorería para la gestión del efectivo como parte esencial de sus planes generales de
riesgos y viabilidad del negocio en tiempos de crisis.

Al hacer este análisis es importante tener en cuenta no sólo tu propia cadena de suministro
sino también la de tus clientes y proveedores puesto que esta puede tener efectos colaterales
en tu propio negocio. Teniendo en cuenta eventos similares del pasado como el brote de
SARS de 2003, la recesión de 2008 o el terremoto que azotó Japón en 2011, a continuación
te proponemos las siguientes medidas para optimizar el flujo de caja de tu empresa en
tiempos de crisis.

1. Asegúrate que tu cadena de suministro no está en riesgo

La gestión de la cadena de suministro de por sí es un tema complejo y cuando se le añaden


problemas relacionados con la financiación se incrementa el riesgo. Dentro de la cadena de
suministro es muy importante saber el estado de tus clientes y proveedores. Con clientes
que operan fuera del territorio nacional, es habitual el pago a través de letras de cambio, y
en estos momentos es de especial relevancia analizar el riesgo de impago de tu cliente para
evitar problemas en el futuro.

Es muy importante analizar detenidamente cada uno de los componentes y “engranajes” de


tu cadena de suministro. Asegúrate de analizar y comprender los riesgos financieros que
pueden derivarse de tu relación con tus colaboradores, proveedores y clientes y actúa
acorde. En esta situación es importante obtener el asesoramiento financiero adecuado para
poder tomar decisiones específicas en cuanto a la situación de riesgos que está sufriendo
cambios constantes.

2. Revisa tus fuentes de financiación

Dadas las circunstancias actuales de extrema incertidumbre, nada se debe dar por sentado.
Fuentes de financiación (incluso bancarias) que tenías disponible antes de del estallido de la
crisis pueden ya no ser viables por diversos motivos. Analiza cada uno de tus proveedores
de financiación y establece un plan de acción para confirmar que estos siguen estando
disponibles.

Es importante entender cuánto efectivo necesitará tu empresa y por cuánto tiempo. Intenta
realizar este análisis y compáralo con tus fuentes de financiación para ver si son suficiente
para superar el periodo de crisis. Explora nuevas vías de financiación si ves que con tus
proveedores actuales no llegas a cubrir tus necesidades de liquidez.

3. Piensa como un CFO en todas las áreas de tu empresa

La persona responsable de tu cadena de suministro muy probablemente está focalizada en


los retos que se le plantean con la disminución de inventario y materia prima para poder
seguir produciendo. Rara vez estos responsables tienen en cuenta el impacto financiero o de
tesorería que pueden tener estos cambios drásticos.

Normalmente los niveles de inventario vienen definidos por el nivel de demanda o por otros
parámetros no financieros. En el escenario actual puede que el circulante sea el indicador
que más impacto puede tener en el inventario. Tener unos niveles de efectivo óptimos para
superar la crisis pasa a ser la prioridad número uno de todos los miembros de la
organización, sean o no el CFO.
Con nuestra guía de financiación alternativa podrás aprender todo lo que debes saber acerca
de cómo conseguir financiación más allá del banco.

4. Revisa tus costes variables

En muchas ocasiones, reducir tus costes variables puede suponer un ejercicio de


saneamiento de tu flujo de caja que puede tener mejores resultados que revisar tus costes
fijos. Todo coste que no sea indispensable para la empresa y su actividad enfocada a la
“subsistencia” debe ser revisado y potencialmente minimizado.

Evita despidos siempre que sea posible y explora opciones como la baja voluntaria sin
salario, pues puede ser una alternativa que alguno de tus empleados vea con buenos ojos a
la vez que eliminas una partida de tus costes para preservar liquidez.

5. Revisa tus inversiones de capital

Teniendo en cuenta tu análisis de necesidad de liquidez, deberás considerar qué es


realmente necesario a corto y medio plazo. ¿Qué inversiones pueden ser suspendidas o
realizadas más adelante? ¿Qué inversiones directamente deben ser canceladas y descartadas
por el momento? En la situación actual, todas aquellas partidas que puedan ser convertidas
en liquidez y no sean indispensables deben ser reconsideradas.

6. Prolonga el pago a tus proveedores

Una de las formas de preservar tu circulante es incrementando el periodo en el que pagas a


tus proveedores. Algunas empresas optarán por unilateralmente tomar esta decisión y por lo
tanto repercutir dicha demora en sus proveedores, especialmente cuando cuentan con
inventario inmovilizado.

Esta posición sin duda afectará negativamente la relación con tus proveedores o incluso
peor, pondrá en riesgo la solvencia de tus proveedores. Esto puede llevar a problemas de
calidad o demoras en la entrega de los productos fruto del deterioro de la relación con tus
proveedores.

Nuestra recomendación es la de aproximarse a tus proveedores con el fin de ver si existe


una posibilidad de llegar a un acuerdo que sea beneficioso para ambas partes, o como
mínimo que no sea perjudicial para nadie.

Puede incluso darse la situación en que un proveedor requiera de un adelanto en el pago


para asegurar su subsistencia. En estos casos se debe valorar un escenario en el que ese
proveedor deja de participar en tu cadena de suministro y los efectos que ello puede tener.

7. Controla y ejecuta tus facturas pendientes de pago


Cuando las cosas van bien las empresas tienden a no perder tiempo y dinero en anticipar el
cobro de sus facturas pendientes de pago debido a los bajos tipos de interés y al hecho que
el flujo de caja no es el “protagonista” de la actividad diaria.

En la situación de crisis actual, los problemas de suministro y ventas afectan directamente


al flujo de caja y hacen que aquellas facturas pendientes de cobro sean una fuente de
liquidez que se debe explotar. Además, es posible que algunos de tus clientes se vean
obligados a establecer unas condiciones de pago menos favorables debido a la situación
actual y se demoren en el mismo. Debes ser riguroso con tus procesos de cobro de las
facturas y  asegurarte que tus procesos de facturación no tienen fisuras para no tener
problemas a la hora de cobrar.

En este ebook gratuito ponemos a tu disposición las mejores plantillas de finanzas,


contabilidad y más para Microsoft Excel.

8. Considera otras alternativas de financiación

En función de las necesidades de efectivo que hayas detectado en tu plan de crisis es


posible que sea una buena idea explorar otras vías alternativas para obtener liquidez.
Factorizar tus facturas pendientes de cobro puede ser una vía excelente para obtener
liquidez en un corto periodo de tiempo.

También puedes valorar trabajar con tus clientes para ofrecerles unas condiciones
preferentes a aquellos que son capaces de pagar más pronto a través de herramientas como
el Dynamic Discounting. Con esta modalidad, básicamente estás pagando a tus clientes para
que te otorguen financiación a corto plazo.

9. Explora nuevos canales alternativos de generación de ingresos

Si después de analizar tu situación y elaborar el plan de crisis descubres que tus fuentes de
generación de ingresos se han visto muy impactadas, una opción que no deberías descartar
es la de explorar vías alternativas para generar ingresos.

Por ejemplo, mirar a otro mercado para vender tus productos o servicios puede ser algo que
puede canalizar parte del inventario que tienes y que no puedes vaciar en tus mercados
habituales.

10. Mira más allá de tus cuatro paredes

Para maximizar tu circulante no sólo debes revisar tus operaciones y procesos. Debes ir
más allá y analizar todo el ecosistema de tu cadena de suministro. Todos los componentes
de tu cadena de suministro pueden tener efectos relevantes unos con otros y por ello has de
intentar minimizar los riesgos de cada uno de ellos. Un pequeño cambio en el flujo de la
cadena de suministro puede ser desastroso no solo para ti sino para todo el ecosistema.

También podría gustarte