Está en la página 1de 3

INSTRUCTIVO

FUNDAMENTOS PARA RESOLUCION DE CONFLICTOS

Jolmar Yesid Gaitán Fernández


AGOSTO de 2020

SENA – Centro Minero


Boyacá
Tecnólogo en Topografía
De acuerdo a Rusell J.A, (Journal of Personality and Social Psychology, 76 p805-
819) el ser humano actúa de acuerdo a emociones siendo la más poderosa el
miedo; como puedes imaginar el miedo a perder las posesiones, a perder la
seguridad o la vida son de forma obvia los motivadores de actuación inmediata y
más fuerte, sin embargo ¿de dónde proviene el miedo de las personas, y que
pasaría si fuera infundado?, en nuestros estudios realizados en áreas de conflicto
encontramos que las experiencias personales nos han generado formas de actuar
porque nos creamos modelos de pensamiento para evitar el dolor, frustración o
desgaste, así también encontramos que algunos grupos con intenciones muy
particulares infunden un temor a los miembros de las comunidades para que
actúen a su favor, esto promueve presión sobre empresas, personas y gobiernos
para lograr objetivos que no tienen nada que ver el miedo infundado.

En nuestra experiencia y como resultado de nuestras investigaciones se puede


reprogramar nuestro cerebro para tener una percepción diferente de las
experiencias y tomar mejores decisiones liberando del miedo a través de tres
factores:

Reconociendo el miedo
El ser humano posee la capacidad de adaptarse y de alguna manera
acostumbrarse a vivir con dolor y con el paso del tiempo adoptamos el sentimiento
como parte de nosotros, es importante reconocer que el dolor es un síntoma y no
parte de nosotros.

Identificando las causas


¿Cuál es el origen de tu miedo?, regularmente nuestras experiencias traumáticas
se encuentran en la niñez, sin embargo en toda nuestra vida podemos tener
experiencias tan intensas que nos generan una impronta, es decir una marca
emocional tan profunda que no sabemos como cerrarla y muchas veces
preferimos no afrontarla para evitar dolor.

Reestructurando nuestro modo de pensar


Existen muchos métodos psicológicos que pueden ayudar a afrontar los
acontecimientos pasados pero todos ellos se basan finalmente en tomar el
momento o experiencia desagradable y “congelarla” en un crisol en donde
podamos observarla de todos los ángulos siendo conscientes de ello y
perdonando la situación. Ésta es la parte más delicada y que en lo general
siempre regresa por lo que es un trabajo constante para reprogramar nuestra
mente.

Respecto a las negociaciones con grupos, hemos observando las causas para
eliminar el miedo con los representantes de las comunidades y las bases lógicas
pocas veces dan resultado, porque la negociación regularmente se centra sobre
las demandas de los líderes ocultos y no en lo que genera el miedo a los pueblos,
al ceder sobre demandas de los líderes ocultos la emoción del miedo no termina y
puede ser utilizada nuevamente.

¿Qué hacer al respecto?

Identificar las emociones que mueven a los individuos y a los pueblos a actuar y la
manera en la que se generan es el primer paso para establecer una estrategia de
acción, recordemos que las personas no decimos lo que realmente queremos por
influencia de otras personas o circunstancias por lo que encuestas directas no
ofrecerán una respuesta satisfactoria, sin embargo un grupo interdisciplinario de
investigadores científicos, entre ellos sociólogos, neurocientíficos, psicólogos y
comunicadores trabajando bajo un sistema que permita identificar las emociones
que se encuentran en el inconsciente y que mueven a las personas a actuar de
determinada manera es una manera más adecuada de trabajar.

El identificar los sentimientos individuales y en grupos para definir el código común


del problema puede generar un gran esfuerzo, sin embargo el reto principal se
encuentra en generar una estrategia que conecte con las emociones en las
personas para influir en un cambio en la conducta con lo cual puede ayudar en
procesos de paz, acuerdos mineros, gubernamentales y personales de gran
importancia.

La ciencia y diferentes especialidades han tomado un gran empuje cuando se


reúnen para entender el comportamiento humano y lograr acciones que lleven a
influir profundamente en él, me parece que aún tenemos mucho camino para que
la neurociencia pueda generar datos más exactos sobre la toma de decisiones, sin
embargo realizar una estrategia con las bases que la ciencia nos ofrece en estos
momentos es mejor que tomar decisiones por interpretación personal.

También podría gustarte