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Eduardo Lopez Molina Introduccién Los enfoques de la Psicologia Evolutiva clisica y su transmisién al campo educativo enfatizaron la idea de una evolucién natural, universal y deslocalizada, sin tomar en cuenta que los procesos de subjetivacién de nifios, adolescentes y jévenes no pueden estudiarse prescindiendo de los pprocesos historicos, culturales, econdmicos y politicos, ni de sus posiciones y trayectorias en el ‘espacio social, ni de las estrategias de crianza y de los ideales de la época, ni tampoco por cierto, por fuera de las instituciones por las que pasaron. La expresidn “el aprendizaje tira del desarrollo” en la obra de Vigotsky expresa que desarrollo y aprendizaje son procesos estrechamente relacionados y ello porque la adquisicién de cualquier habilidad infantil involucra la instruceién por parte de los adultos. En las versiones vinculadas a los programas neuro-psicoldgicos, entre tanto, el nifio, el joven, el sujeto son reducidos a su condicién de organismo que habita en un medio o en un ambiente, ‘expuesto a estimulaciones senso-perceptivas que lo relacionan, sin mediaciones, con el mundo fisico, natural y social. Un organismo que no actiia per se sino que es pasivo y reactivo. Discurso representantes del sector docent sr La psicofarmacologiay el adiestramiento programado son presentadios como los antidetos mas eficaces contra el sufrimiento humano, contra las figuras contemporaneas del malestar (depresién, anorexia, bulimia, trastornos de ansiedad, etc.) 0 un freno quimico para la movilidad desconcertante y desbordante de los neo-nifios. La abulia, el oposicionismo desafiante, el trastorno por separacién 0 por nacimiento de un hermano y el mutismo selectivo serian ya otros nuevos flagelos que arreciarian al heterogéneo universo de las infancias y las adolescencias de esta época. Los adultos, entre tanto, nada tendrian que ver con todo ello. Se trataria de un tema ‘que s6lo puede investigar un estudioso del cerebro que sabe dénde localizar precisamente cada rmanifestacién humana. Dice Pammier (2002): “...un organismo no crece si nadie le habla..”, si nadie lo nombra, sino es incluido en una cierta filiacién paren- tal simbélica. Eki sujeto no es un mero organismo, sino que vive en lo social Por otro lado, Ia formacién dacente —tan preocupada por la evolucién del sujeto que aprende y por los contenidos de ensefianza— nunca tuvo en cuenta el andlisis psicélégico del sujeto que ensefia y la decisiva influencia que tienen su propia personalidad, las huellas de su propio proceso de escolarizacién sobre el adolescente, el joven, la ensefianza y el aprendizaje. Es recién a partir de la década del 60 cuando con mas fuerza empiezan a ser reconocidos los valiosos aportes de los estudios histdricos, socialégicos y antropolégicas. Estas nuevas miradas, muchisimo més complejas, permitirdn entender que las categarias adolescencia y Juventud son socio-histérico culturales ademds de psicoldgicas; que cada cultura, cada sociedad, cada época construye de un modo particular lo que entiende por ellas, y segtin tal concepcién, se definen circuitos, tiempos y procesos de institucionalizacion. Adolescentes y jévenes no son independientes del complejo entramado de instituciones (funcién paterna y materna, escuela, mundo del trabajo, mass media, industria cultural) que los atraviesan, que dejan sus huellas en ellos y que también imponen sus propias representaciones. Son categorias arbitrarias y relacionales en tanto dependen del universo simbélico instituide en un contexto histérico social, y decisivamente del mundo de los adultos significativos. Hay instituciones camo el Estado, la escuela que enfrentan problemas inéditos y solo cuentan con, un reservorio de soluciones viejas. Han perdido el monopolio de la transmisién cultural y el poder de “formatear” subjetividades. Pero las nuevas condiciones de época son al mismo tiempo desafios a asumir por el mundo adulto de modo de legar horizontes mas prometedores para los que vienen detrds, para los recién llegados. Cambios producidos en las tltimas décadas impactaron en la institucién familiar, escolar y en el “undo del trabaio: $i en tiempos de solidez se sufria por sujecién, encierro y vigilancia, en la era de la “Modernidad liquida” se sufre por la dispersién, el empobrecimiento simbélico y por desamparo. Tanto el exceso de Institucién como su ausencia son francamente des-subjetivantes una, coarta todo deseo, |a otra, lo torna obligatorio; una, genera obediencia ciega y alienacion (soy aquello que el otro quiere que sea], |a otra, deja con la crueldad de la intemperie, Bauman, la “fluidez” o la “liquidez” son metaforas adecuadas con las cuales puede explicarse la nueva historia de la madernidad. Intenta explicar el estado cambiante de la condicién humana en la actual sociedad capitalista en la que los s6lidos conservan su forma y duran, mientras que los liquidos son informes y constantemente fluyen, como la desregulacién, la flexibilizacién o la liberalizacién de los mercados. Cambios en !a Institucién escolar La escuela de estos tiempos perdié centralidad, al igual que la institucién familiar y hasta la meta- institucién Estado. El ritmo y el tiempo escolar no son naturales sino producto de una operacion social, con el fin de que la transmisién del acervo cultural acumulado pueda resultar a la vez masiva, econémica y homogénea, Desde esa perspectiva, es obvio que el desajuste al formato escolar ser visualizado en términos de anormalidad o deficiencia, recponsabilizando de su fracaso a los sujetos, sus familias y/o sus condiciones de existencla, La uniformidad con la que se pensé la escuela en épocas de consolidacién de las Estados nacionales, con un curriculum tnico y un espacio dulico diagramado cuidadosamente en funcién. de espacios, tiempos y actividades fuertemente regulados, no tiene en cuenta las diferentes identidades culturales ni los ostensibles efectos de la desigualdad socioeconémica en la nueva sociedad globalizada en la que al interior de las nuevas formaciones sociales hallamos diferencias que antes s6lo eran perceptibles “entre” culturas. Asistimas a una época en la que la Funcién Adulto, que es la de hacer un lugar a los recién llegados, esta en crisis. Adultos juvenilizados, nifios y adolescentes precozmente adultizados, no Jévenes juveniles, partidarios del dejar hacer, cada vez mas des-responsabilizados, preocupados Por si mismos, “en otra cosa”, resistiendo (inutilmente) el impacto del paso del tiempo en su cuerpo. Pasan més tiempo en I compaiiia de los pares que de los adultos y consideran tales momentos como los mas gratificantes. Ejercen una gran influencia sobre la autoimagen. Espectadores de un mundo donde hasta el acontecimiento escasea y que no ven lo que sus hijos hacen —una practica deportiva, un acto escolar, danza jazz, u otras—, sino que filman lo que sus hijos hacen, desplazando asi la representacién al acontecimiento7. Eladulto de hoy, permisivo, claudicante, juvenilizado, neutro, light, pone en riesgo los procesos de subjetivacién, su funcién es deficitaria y deja a nifios y j6venes en la intemperie del sinsentido Cambios en el mundo del trabajo El trabajo ha sido cardinal en el mundo moderno contribuyendo fuertemente a la Construccién de Identidades, y en conjunto con la institucién estatal, familiar y escolar tuvo una gran Importancia para la modelacién de subjetividades: un trabajador de un banco estatal, otro del ferrocarril o de! correo se definen no por trabajar en... sino come bancario,ferroviario 0 telepostal. Hoy, los escenarios urbanos muestran nifios trabajando (en las esquinas, en los cortaderos de ladrillos, en talleres clandestinos) y adultos que no trabajan, y si se tiene en cuenta que el acceso al mundo laboral constitula una diferenclacién neta entre un grupo etano y el otro, Zen cuanto contribuye esto al borramiento de tales diferencias que otrora garantizaban cuidado y proteccién para los mas pequefios? Todo ello ocurre en un mundo en el que el trabajo ha perdido centralidad y en el que cada vez se requieren mayores calificaciones para acceder a puestos mejor ponderados socialmente y con remuneraciones mas altas. La operatoria del mercado, la prevalencia del discurso ecanémico desplazando a la politica y el triunfo del capital financiero privilegiaron las relaciones con los objefos mas que con los sujetos, Poniendo al otro a distancia, ni tan cerca, ni tan lejos. No es casual en tal contexto que el diagnéstica psicolégico y psiquistrico mas prevalente en estos tiempos sea el de Trastorna de ansiedad. La escuela secundaria, ha cumplido una funcién de seleccién contribuyendo fuertemente a la reproduccién del orden social y a la consolidacién de las clases medias urbanas. Ha sido exclusora para amplios segmentos de Ia poblacién, y debido a esto, se ha capllarizado al interior del sistema educative en su conjunto. Para los adolescentes la escuela es una institucién que no influye decisivamente sobre su cotidianeidad ni en sus proyectos vitales, incluso a medida que desciende el estrato socio-econémico, aumenta la propensién ano asistir al secundario, Qué ocurre cuando estos jévenes se presentifican en el escenario escolar tan distantes de las representaciones construidas por sus profesores en su trayectoria vital, social y educativa? Algunos docentes presentan severas resistencias para trabajar con ellos; las intervenciones de otros son francamente descalificadoras o discriminatorias... y no se puede ensefiar si no se confia en el sujeto que aprende. Los estudiantes, por su lado, expresan su rechazo por aquellos que faltan recurrentemente, son autoritarios, no los saludan o se mimetizan como pares. €n cambio, rescatan muchisimo a aquellos que son “enseitadores’, que explican muchas veces hasta que se entiende, que no les hablan sélo a los que se sientan adelante, que los escuchan y hasta que, en ‘ocasiones, los aconsejan, No olvidemos que para los estudiantes la significatividad del vinculo que entablan con los saberes esté fuertemente asociado a las caracteristicas mismas de las précticas de transmisién y al vinculo transferencial que se establece con el profesor,’ en primer término, y con el saber, a través 0 a pesar de él eCémo hacer para que estos nuevos estudiantes (tiltimos en llegar en el plano socio-politico, primeros en llegardesde el punto de vista de sus familias de referencia, recién llegados, en tanto aparicién de lo extrafio, del joven no juvenil, en el espacio de lo préximo, en la escuela, en el aula, en el vinculo en relacién con las representaciones de sus profesores, llegados a destiempo cuando la distancia entre la titulacién del Nivel Secundario y el mundo del trabajo se ha alejado) no se transformen en los primeros irse? El trabajo de acompaiamiento con las instituciones educativas y con los docentes aparece ali como prioritario en una sociedad en la que se ha producido una fuerte ruptura en. la proyeccién de las trayectorias, Esa es hoy la cuesti6n principal que se pone en juego en la escuela secundaria, esto es que para muchos [évenes de sectores populares la educacién es la unica apuesta posible y «a mano» de poder ir mds alld de lo que sus condiciones objetivas de existencia le permitirian. Sin la oftrta de sentidos que el mundo adulto debe ofrecer, sentidos que anclen, que anuden y cohesionen en una operacién subjetivante, se ‘verdn compelidos a repetir las condiciones de existencia de sus progenitores. Gonsideracionesfinales Es necesario que el Estado recupere centralidad estratégica o genere un “pensamiento estatal” que |o posicione en el centro mismo en tanto garante del ejercicio de los derechos de nifios y Jévenes. Sdlo de ese modo, promoviendo politicas ptiblicas sustentables, promoverd la construccién de nuevos sentidos y podran tenderse puentes entre las inscripclones —sociales, familiares, subjetivas— que estos sujetos portan, sus experiencias cotidianas y los procesos de transmision puestos en juego por la institucién escolar, ero también de de-construccién de los estereotipas fomentados por los medias de comunicacién ‘yla industria cultural, lugar de resistencia a los embates de la sociedad medicalizada ya la cultura del consumismo desenfrenado, Lugar donde se pueda contar con dispositivos de escucha, para directivos, docentes, preceptores, estudiantes y familias, y donde cuidar al otro implique estar dispuesto a hacerle el bien en cuanto sujeto singular, atendiendo a lo que tiene de unico e irrepetible y brindandole posibilidades de simbolizacién frente a las duras condiciones de vida. Es imprescindible recuperar la dimensién deseante del rol porque ello es decisivo para la ensefianza, porque un docente desapasionado presenta contenidos, pero transmite, quiera 0 no, su desilusién, su malestar, su des- apasionamiento. Asi podrd brindarseles a los tltimos en llegar mejores posibilidades para poder culminar su trayecto educativo, abriéndoles mejores perspectivas de acceso a los bienes materiales, culturales y simbélicos, y permitiéndoles incrementar su volumen y estructura de capital a través dela continuidad de su formacién en otros niveles, o inserténdose en el mundo laboral de un modo més tardio y ventajoso.

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