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26 de Febrero de 1968
"Las visiones de Isaías, hijo de Amós. Oíd, cielos y escucha tú, tierra; porque el
Señor ha hablado" y el libro de Abdías dice lo siguiente: “Las visiones de Abdías.
Así dice el Señor Dios" Aquí vemos que las visiones son de oído; pero las
Escrituras registran visiones de vista, oído, olfato, gusto y tacto. El último capítulo
del libro de Job dice:
“He sabido de ti sólo de oídas, pero ahora mis ojos te ven. "
Esta no es la historia de un hombre ciego, o de los dos hijos que salieron del
vientre de una mujer. Este drama se desarrolla desde dentro. Esaú es el mundo
que conoces por tus sentidos y la razón. La sala en la que ahora estás es tu
Esaú, mientras que tu deseo subjetivo es tu Jacob. Usando prendas de pelaje,
Esaú es el mundo exterior, objetivo, el cual Jacob, tu deseo, está tratando de
reemplazar. Como Isaac - el padre – tú tienes el poder de dar realidad a tu estado
deseado, estado subjetivo, Invítalo a acercarse, para que puedas sentirlo, para
saber si es tan real como el mundo exterior lo es.
Isaac eligió el sentido del tacto en lugar del oído, añadiendo el sentido del olfato, y
diciendo: "Hueles a Esaú" Usando estos dos sentidos, Isaac concede a Jacob el
derecho a convertirse en un hecho objetivo. Por eso, cuando Blake nos dice que si
eleváramos la imaginación al estado de visualización, lo que deseamos estaría
hecho, él está hablando de la visualización en cualquier persona, o una
combinación de los cinco sentidos.
Tal vez el sentido del oído es el que más has desarrollado en ti. Si es así, puedes
escoger una voz y escucharla con tal claridad que puedas auto-persuadirte que
sus palabras son verdaderas. Tu sentido del oído se puede desarrollar en tal
medida que puedas excluir a todos los demás sentidos y creer en lo que estás
escuchando. Cuando las palabras adquieren los tonos de la realidad y te auto-
convences de que es así, el evento se ha impregnado sobre ti; y ¿qué hacer
después de la impregnación? ¡Nada! Sólo tienes que estar seguro de que lo que
oíste tan claramente, en su tiempo normal, natural, se materializará. No hay dos
huevos que tengan el mismo intervalo de tiempo entre la fertilización y el
nacimiento. No sé cuánto tiempo tomará para que tu deseo se convierta en un
hecho objetivo. Sólo sé que cuando la imaginación se eleva al estado de
visualización - ya sea usando la vista, el oído, el olfato, el gusto o el tacto –
¡Hecho está!
Ahora bien, aunque esta señora tenía una cocina en su apartamento, no tenía
comida en ella, por lo que cuando su amiga fue a la tienda, no pudo comprar solo
una taza de harina o azúcar, por lo que compro en mayores cantidades y la
abasteció con todos los elementos básicos y necesarios para preparar una
comida. En el plazo de una hora, ella estaba en la casa de la artista con la comida,
y poco tiempo después se sentaron a disfrutar una deliciosa cena y cuando se
terminó la cena - habían sobrado suficientes alimentos como para al menos dos
comidas más.
Como esta señora es una gran artista, ha desarrollado el sentido del tacto. Se
durmió tocando los platos y los cubiertos, y se despertó tocando la tapa de una
fuente de comida. Su experiencia se dramatiza en las Escrituras como la historia
de Isaac. Con el fin de entender las Escrituras, es necesario verlas con los ojos del
místico. Blake preguntó: "¿Por qué es la Biblia más entretenida y más instructiva
que cualquier otro libro? Debido a que está dirigida a la imaginación, lo cual es
sensación espiritual, e inmediatamente después, a la comprensión, o la razón.
"Cuando tocas algo espiritual, estás recibiendo una sensación que tus sentidos
exteriores niegan. Y cuando usas tu imaginación, estas tocando con las manos de
Jacob, viendo con los ojos de Jacob, y escuchando con los oídos de Jacob.
En el Salmo 115, el salmista nos dice nuestro Señor hace todo lo que nosotros
hacemos. Luego compara al Señor con los dioses del mundo, diciendo: "Sus
dioses son de oro y plata. Tienen boca pero no hablan, ojos, pero no ven, oídos,
pero no oyen, pies, pero no caminan, manos, pero no sienten. Quienes los
hacen son como ellos, y también lo es cualquiera que confía en ellos. "Todo aquel
que confía en cualquier cosa que el hombre haga con las manos, que no pueda
hablar, oír, caminar o sentir, tiene un Dios falso y un falso Jesucristo. Hecho con
manos humanas, no puede emitir un sonido o escuchar tu petición. No te puede
contestar, ver, oír, o caminar. Se trata simplemente de algo hecho con manos de
hombre; y los que confían en “eso” son como ello, porque no están dispuestos a
ejercitar al hombre interior - llamado Jacob en el Antiguo Testamento y Cristo
Jesús en el Nuevo.
Debido a que Blake hizo estas audaces afirmaciones, la gente pregunta por qué
no era rico; pero Blake no tenía ningún deseo de fama o de enormes sumas de
dinero. En ese momento, el rey de Inglaterra era Jorge III. Estaba loco y era
conocido sólo por el hecho de que era el rey durante el tiempo de nuestra
revolución contra Inglaterra. Personas de gran riqueza y fama vivieron en la época
de Blake, pero ahora están olvidadas, mientras que Blake crece en estatura y
simplemente empequeñece a todos sus contemporáneos.
Blake no tenía dinero. No fue educado bajo los estándares humanos. Aprendió
latín, francés, e italiano por sí mismo, Blake era un maestro en el uso de la lengua
Inglesa. Este gran hombre no tenía lujos humanos, pero no los necesitaba pues
estaba muy ocupado haciendo la obra de Dios. Blake afirmó que el mundo era
visualización, confesando que su mayor obra, "Jerusalén", le fue dictada. No
conoció Jerusalén, lo oyó. Las palabras fueron dictadas por el Espíritu de Dios,
sin embargo, Blake lo llamo su mayor visualización.
Tal vez el sentido del tacto es fácil para ti. Si es así, sé cómo Isaac y toca a tu
deseo para ver si es Esaú (verdadero) o no. Cuando tocó la realidad, Isaac dijo:
"Hueles a Esaú; Por lo tanto, la bendición es tuya " ¿Por qué? Porque parecía
real para él.
El dinero tiene un olor muy particular. Véndate los ojos y huele una docena de
diferentes pedazos de papel. Haz que uno de ellos sea un billete de uno, cinco, o
diez dólares, y en el momento en que llegue a tu nariz sabrás que es dinero,
pues hay algo diferente en él.
Escoge el medio que sea mejor para ti y úsalo. El sonido parece ser el más fácil
para muchos, sin embargo, si amas a alguien, reconocerás la textura de su piel y
su olor. Si el hombre no tuviese un olor distintivo, ¿cómo podría encontrarlo un
sabueso? No hay voz dudosa. Una voz puede ser imitada; pero si es grabada, su
gráfica no sería igual que la original. Eres único, y cuando amas profundamente a
alguien conoces su voz y la sientes, y si estás cerca de ellos, reconoces su olor.
Compartes la noticia de tu buena fortuna con ellos. Escúchalos identificarse
contigo. Escuchar su voz cuidadosamente y disfruta de lo que estás escuchando.
Cree en lo que has oído, y te habrás impregnado a ti mismo con el mensaje.
Insto a todos a probarlo. No cuesta nada. Blake tenía un amigo llamado Samuel
Farmer, sobre quien hizo esta fantástica afirmación: Eleva la imaginación al
estado de visualización y estará hecho" Puedes hacerlo usando cualquier
sentido, ya sea individual o colectivamente. Puedes imaginar ver y oír al mismo
tiempo. Puedes mirar como si estuvieses viendo, y escuchar como si oyeras; pero
tú determinas lo que quieres ver y oír. Reúnelos. Ve y escucha solo tu deseo
cumplido, y observa su desenvolvimiento en tu mundo.
Cuando la Escritura nos dice que Dios ve el corazón, no está hablando del
corazón físico, sino de la identidad del individuo. El Salmo 4 dice: "Comulga con
tu propio corazón en tu cama y permanece en silencio." En otras palabras,
¡háblate a ti mismo! Esta naturaleza es una totalidad, pues tus sentimientos,
pensamientos, deseos y motivaciones siempre están expuestos a ti mismo, quien
es Dios el Padre. Podrías ocultar los pensamientos de los que están atrapados
en prendas de carne y hueso, pero no los de la profundidad de tu propio ser. La
Escritura nos dice que el Señor rechazó a todos los hermanos y eligió a David,
diciendo: "Es un hombre conforme a mi corazón y quien hará toda mi voluntad"
David es el que cumple todos tus pensamientos, sentimientos, deseos y motivos -
siempre haciendo tu voluntad.
La Escritura sólo se entenderá cuando se vea través del ojo del místico. Tomemos
la afirmación: "Airaos pero no pequéis; no se ponga el Sol sobre vuestro
enojo.”. Comulga con tu propio corazón y quédate en silencio. Si tienes algo en
contra de alguien, explota y sácalo de tu pecho. A continuación, comulga contigo
mismo calmándote y construyendo una escena que implique que todo está
perfecto en tu vida. Entra en la profundidad de tu ser, usando tantos de tus
sentidos como te sea posible para lograr visualizar lo que deseas que aparezca
en tu vida.
Se eleva cualquier sentido - ya sea oído, vista, oído, el tacto u olfato - al estado de
visualización. Fui reclutado en el ejército durante la Segunda Guerra Mundial, pero
yo no quería estar ahí, nada de eso. Cuando mi solicitud de baja fue rechazada,
no me enfade ni trate de pasar por encima del coronel. En cambio, me tumbé en
mi cama de campaña, cerré los ojos a los otros cincuenta hombres en la
habitación, e imaginé que estaba a dos mil millas de distancia, en mi apartamento
sobre el Washington Square, en la ciudad de Nueva York. Ubicándome en mi
cama, vi a mi esposa durmiendo en la suya. Entonces me levanté, y mirando por
la ventana, vi los apartamentos de los alrededores a través de la calle y el
Washington Square abajo del mío. Volteé, entré en la sala de estar, en el
comedor, y la cocina. Sentí objetos familiares y traje a la vida a tantos de mis
sentidos como me fue posible. A las 4:00 de la mañana me desperté oyendo una
voz que decía: "Lo que yo he hecho, lo he hecho. No hagas nada. "¿Quién dijo
esas palabras? Yo lo hice, pero las oí como si viniesen del exterior.
Sabiendo lo que había hecho y lo que había dicho, caminé por la fe durante
nueve días, sin hacer nada en el exterior. En el décimo día, el coronel que había
rechazado mi solicitud me llamó a su oficina y me dio una baja honorable.
Comienza ahora a ejercer los talentos que te fueron dados por Dios: vista, oído,
tacto, gusto y olfato - en conjunto o por separado. El sentido del tacto es el más
fuerte en mí. Si alguien me expresa su deseo en una carta, toco el papel en que
escribió, creyendo que me están contando la realización de su deseo. Sé que sólo
uno de cada diez responde después de haberle concedido su petición, pero está
bien. Después de haber sentido su carta y visto su contenido, sé que me he
impregnado con la buena fortuna que ellos desean, y al hacerlo, mi propio
cautiverio está siendo liberado.