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Unidad 5.

Análisis de liquidez

Introducción

Capital corriente

Indicadores de liquidez

Indicadores de antigüedad

Indicadores de rotación
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Introducción

Abordaremos la capacidad de pago como la aptitud de un ente de cumplir con sus


compromisos en tiempo y forma. Pues bien, el análisis de liquidez se re ere al cumplimiento
de las obligaciones asumidas, en tiempo y forma, en el corto plazo, de acuerdo a las
categorizaciones contables revisadas anteriormente.

El análisis de la situación nanciera de corto plazo busca analizar la capacidad de una empresa
para atender sus compromisos de pago más próximos. Las cifras del estado de situación
patrimonial permiten realizar un análisis estático, a una fecha determinada (la de cierre de
ejercicio), a partir de la información sobre los recursos nancieros disponibles, los activos
que se convertirán rápidamente en nuevos recursos nancieros y los compromisos de corto
plazo existentes.

Combinando las cifras del estado patrimonial con las del estado de resultado, se puede realizar
un análisis dinámico en el que se tienen en cuenta los plazos de cobro, los de pago y las
necesidades de capital de trabajo que requieren un determinado nivel de actividad.

Los índices de liquidez corriente aportan elementos para evaluar la capacidad de la empresa,
para cumplir en término sus compromisos a corto plazo.

Su análisis implica la capacidad de la empresa para proveer los recursos necesarios para el
funcionamiento del ente en adecuadas condiciones, como así también para afrontar las
obligaciones que surgen de los compromisos asumidos por la realización de su actividad.
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Capital corriente

El capital corriente es aquel que es necesario para cumplimentar el funcionamiento normal del
ciclo operativo, es decir que es el capital de trabajo que está dado por la diferencia entre activo
corriente y pasivo corriente.

El capital corriente es de nido también, en algunas ocasiones, como aquella parte del activo
corriente que es nanciada con fondos de largo plazo. Claro que esto supone que el capital
corriente es positivo.

Si el capital corriente es positivo, signi ca que el activo corriente es mayor al pasivo corriente;
a esto se lo denomina margen de cobertura. Si el capital corriente es negativo (menor a cero),
quiere decir que el activo corriente es menor al pasivo corriente; a esto se lo denomina deuda
sin consolidar. Es decir que el activo corriente no es su ciente para que se cobren todos los
acreedores de corto plazo.

Para ver la situación nanciera de la empresa en el corto plazo, es necesario determinar los
fondos que una empresa tiene disponibles a corto plazo, luego de pagar sus obligaciones. El
capital corriente re eja la medida en que la empresa tiene una mejor o peor capacidad de pago
a corto plazo. Se busca relacionar el plazo de realización del activo corriente con el de
exigibilidad del pasivo corriente.

Componentes del capital corriente


Los dos grandes componentes del capital corriente son el activo corriente y el pasivo
corriente.

Dentro del activo corriente, las categorías más comunes son el disponible, el realizable y las
existencias.

El activo disponible está constituido por partidas que son líquidas en el instante, como el
efectivo en caja, el efectivo en el banco (saldos en cuenta corriente o en caja de ahorro) y las
inversiones a corto plazo. El administrador nanciero deberá vigilar que se mantengan
niveles aceptables de disponibilidad en proporción a las necesidades de la empresa y prever
futuros requerimientos, ya que este es el rubro del balance que mejor debe ser aprovechado a
n de que genere una administración oportuna y utilidades sanas a la empresa y, a su vez, que
no nos encontremos con cuellos de botella nancieros, situación en la que no contamos con
los fondos necesarios para pagar las deudas que vencen. 

El activo realizable se encuentra formado por los derechos (créditos o cuentas por cobrar).
Este tema ya lo hemos abordado acabadamente con anterioridad.

Las existencias son el valor de los inventarios que posee la empresa y que son de su
propiedad. La empresa debe contar con un inventario de mercaderías que pueda satisfacer la
demanda de ventas a medida que se presentan, pero, a su vez, se debe tener presente el costo
del stock, ya sea la inmovilización de fondos por tener bienes de cambio sin vender, el alquiler
y demás costos jos del depósito, seguridad, deterioro de la mercadería, entre otros. Todo
esto lleva al estudio del inventario óptimo, tema que excede la presente materia.

El pasivo corriente también ha sido abordado en profundidad con anterioridad.

 Para profundizar este tema deberá dirigirse a los puntos 4.3 y 4.4 del capítulo 4 de Ortega
Martinez, José Antonio (2010) haciendo clic aquí.
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Indicadores de liquidez

Existen relaciones básicas o clásicas que se transforman en indicadores, con los que es
habitual intentar una medición de la capacidad de pago en el corto plazo de una empresa.

Índice de liquidez corriente

Consiste en relacionar los activos corrientes y los pasivos corrientes de una empresa, de
manera de determinar cuántos pesos de activo corriente poseen, a una determinada fecha, por
cada peso de deuda de corto plazo. Su resultado nos indica cuántos pesos de activo corriente
hay por cada peso del pasivo corriente.

Los resultados posibles de este ratio nos indican lo siguiente:

Si el índice es > 1, el activo corriente es mayor al pasivo corriente (AC > PC). Existe un
margen de cobertura para los acreedores, equivalente al excedente de 1.

Si el índice es < 1, entonces, el activo más liquido es menor al pasivo más exigible (AC <
PC). Indica en qué medida el activo corriente es insu ciente para hacer frente a las
obligaciones corrientes. Se denomina a esta situación deuda sin consolidar, ya que no es
posible cubrir todo lo adeudado a los acreedores de corto plazo, con el activo corriente.

Si el índice es = 1, representa que el activo corriente cubre exactamente al pasivo


corriente (AC = PC). En este caso, habría que realizar un análisis posterior sobre los
plazos de realización del activo y los plazos de cancelación de las obligaciones.
Deténgase un minuto en este punto, analice los distintos resultados que se pueden obtener de
capital corriente, con los resultados obtenibles en el índice de liquidez corriente; vincule
ambos resultados.

Si el cálculo del capital corriente asume un valor positivo, entonces, el índice de liquidez
corriente será superior a 1 (uno), ya que el activo corriente sería superior al pasivo corriente.
Ahora, si el capital corriente fuese negativo, entonces, el índice de liquidez corriente sería
inferior a 1 (uno). Dado que en este caso el activo corriente sería inferior al pasivo corriente,
tendríamos deuda sin consolidar.

Índice de liquidez seca o prueba ácida

Este índice nace con la necesidad de considerar a los bienes de cambio como un activo menos
líquido que las cuentas por cobrar, por ejemplo, y que las empresas puede tener exceso de
stock, situación que no es deseable. Este índice es totalmente necesario en el caso de que nos
genere dudas la velocidad y rapidez con la que se pueden realizar los inventarios de bienes de
cambio. A este resultado de descontarle los bienes de cambio al activo corriente se lo conoce
como activo rápido.

El resultado de este índice expresa la cantidad de pesos de activos corrientes, excluidos los
bienes de cambio que tiene una empresa por cada peso de deuda a corto plazo.

Ejemplo: si el resultado es 1,10, signi ca que por cada peso de pasivo corriente hay $ 1,10 de
activo corriente, sin considerar los bienes de cambio.

 Es necesario profundizar este tema en los puntos 4.8 y 4.9 de Ortega Martinez, José
Antonio (2010) haciendo clic aquí.
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Indicadores de antigüedad

Figura 1. Ciclo de operación

Fuente: [Imagen intitulada sobre ciclo de operación] 2018, recuperado de


https://aso co.wordpress.com/2018/01/11/ciclo-normal-de-operacion/

Los indicadores de antigüedad y rotación están íntimamente vinculados, ya que los elementos
con los que estos se calculan son los mismos, solo varía la forma en la que se combinan y
arrojan resultados que deben interpretarse de forma diferente.

En este punto, se abordará la metodología de cálculo de los indicadores de antigüedad y en el


próximo, los de rotación.
 Para profundizar este tema deberá dirigirse al punto 4.6 de de Ortega Martinez, José
Antonio (2010) haciendo clic aquí.

Antes de abordar estos índices, es necesario que primero conozcamos el concepto de ciclo
operativo. Este es el tiempo que demora el dinero en volver a ser dinero. De esta forma, en
una empresa comercial, tendremos comprar-vender-cobrar, y en una empresa industrial, será
comprar-producir-vender-cobrar. Es decir que el dinero se transforma en mercadería, para
después venderla y que vuelva a ser dinero una vez que se han cobrado estas ventas.

Obviamente que, en este caso, nos estamos re riendo a una empresa comercial, la cual vende
la mercadería en el mismo estado en que la adquiere. Si habláramos de una empresa
industrial, deberíamos reemplazar el eslabón mercaderías y agregarle los eslabones
correspondientes a materia prima, productos en proceso y productos terminados (que son los
que se terminan vendiendo en el mercado).

Como se puede imaginar, la duración del ciclo operativo depende de la actividad de la empresa;
sin dudas, el ciclo operativo de un astillero es totalmente diferente al de un autopartista. 

Ahora, si tenemos dos empresas que desarrollan actividades en el mismo sector económico,
las diferencias de su ciclo operativo estarán dadas por la tecnología con la que se disponga y
también por las decisiones internas que se tomen en cada una de ellas, para su operatoria
(como por ejemplo, el plazo de nanciación para los clientes, la proporción de ventas
realizadas a crédito por sobre las de contado, entre otras). 

Sintetizando, mientras mayor sea el ciclo operativo, mayor será la necesidad de capital
corriente de la empresa.

Es posible analizar la dinámica interna del capital corriente a través de sus indicadores de
antigüedad y rotación.

Antigüedad de stock
Es el tiempo que transcurre entre que se efectúa una compra y se perfecciona o realiza la
venta, es decir, el tiempo promedio de almacenamiento.

La importancia del análisis y seguimiento de este indicador radica en que:

El inventario de bienes de cambio comprende generalmente una importante porción de


los activos totales.

Los bienes de cambio son el activo menos líquido dentro de los activos corrientes, por lo
tanto, los errores en su administración no se pueden solucionar con rapidez. 

Tenemos que tener en cuenta, como ya lo hemos mencionado, los costos de administrar un
inventario demasiado elevado y, por otro lado, si bien un nivel de inventario bajo reduce los
costos de mantenimiento, puede dar como resultado la pérdida de ventas por no contar con la
mercadería su ciente, y costos más elevados en los pedidos de compras.

El índice se obtiene calculando los bienes de cambio promedio (bienes de cambio al inicio del
ejercicio más los bienes de cambio al nal del ejercicio, dividido por 2), dividido el costo de
ventas del ejercicio y multiplicado por 365, a n de que el resultado nos quede expresado en
días. 

Se toman los bienes de cambio promedio para no dejar la información sesgada solamente por
los bienes de cambio al cierre, ya que el costo de ventas corresponde a todo el ejercicio
económico y no solamente a la existencia al cierre.

A este índice también se lo conoce como antigüedad media de los inventarios o ciclo de stock.
El resultado del indicador quedará expresado en días, y representa la cantidad de días
promedio que los bienes de cambio permanecen en stock, desde que se compran hasta que se
venden. 

Si se desea un plazo medio de conversión a un rubro más líquido, al resultado del cálculo
anterior se le suma y uno y se divide en dos para obtener un valor que permita comparaciones.

Antigüedad de créditos

Este índice mide el tiempo promedio entre que se realiza la venta y esta se cobra. El resultado
también queda expresado en días. 

Analizar la política de ventas a plazo de la empresa implica un equilibrio entre el riesgo de no


cobrarlas y la rentabilidad potencial de estas ventas. Es decir, hasta qué punto la extensión de
condiciones de crédito a clientes compromete fondos de la empresa y pone en peligro la
propia capacidad de pagar sus cuentas y en qué medida facilita más la venta de productos y
mejora los resultados.

Igual que en el caso anterior, el resultado brindará un promedio, que, en este caso, será de la
velocidad con que se hacen efectivos los créditos originados en ventas. Se dice en promedio ya
que, obviamente, no todas tardarán exactamente el mismo período, sino que habrá ventas que
se cobran más rápido que otras.

Un tema que le generará duda de acuerdo a la bibliografía que consulte, es si se deben tomar
solo las ventas a crédito en el denominador, o bien si se debe tomar el total de ventas del
ejercicio. La diferencia está en la interpretación del resultado:
Si se toman solo las ventas a crédito o en cuenta corriente, se determina el plazo de
cobranza promedio de estas ventas especí cas.

Si tomamos las ventas totales (incluyendo las de contado), se determina el plazo


promedio de cobranza de todas las ventas. En este caso, las de contado harán descender
el promedio, porque se cobran sin demora alguna.

En el caso del análisis que estamos realizando, resulta preferible tomar las ventas totales, ya
que de esta forma, tendremos como resultado el promedio de cobranza de todas las ventas, es
decir, los días promedio que transcurren entre que se efectúa una venta y esta se cobra. 

Otra cuestión a considerar es que, de acuerdo a la registración y valuación según las normas
contables, los créditos por ventas tienen incluido en su saldo el impuesto al valor agregado
(IVA) y no así las ventas del ejercicio, ya que estas últimas se registran netas de componente
nanciero o impositivo. Por lo tanto, para no desvirtuar el resultado del índice, a las ventas las
debemos multiplicar por 1,21 y de esta forma, tanto el numerador como el denominador
tienen incluido este concepto. 

El plazo medio de conversión a efectivo se obtiene sumando uno (1) y dividiendo en dos al
valor obtenido anteriormente.

Antigüedad de cuentas a pagar

Es el tiempo promedio que se tarde entre que se efectúa una compra y esta es abonada.

Estimo que a esta altura ya habrá pensado en que el plazo medio de pagos debería ser mayor al
ciclo operativo (la suma de duración de stock y plazo medio de cobranzas), a n de contar con
liquidez su ciente para hacer frente a los vencimientos de las deudas.
Para este índice, también son válidas todas las aclaraciones realizadas en los anteriores sobre
el porqué de tomar las deudas promedio, y el resultado también nos dirá los días promedio
que pasan entre la realización de la compra y su pago.

Con respecto a si corresponde tomar las compras de bienes y servicios realizadas a plazo, o
bien tomar el total de las compras del ejercicio, sirve la misma aclaración realizada con
respecto a las ventas para el caso del plazo medio de cobranzas.

Es muy útil comparar los plazos medios de cobranza con los plazos medios de pago, para
formarse una idea sobre la dinámica del ujo de efectivo.
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Indicadores de rotación

El estudio de rotación consiste en el análisis de la velocidad de los ujos de ingresos de


fondos (circulación del activo corriente) y la velocidad de circulación de los ujos de egresos
de fondos (circulación del pasivo corriente). Este estudio se realiza mediante un conjunto de
índices que se denominan índices de rotación, que tienen un vínculo absoluto con los de
antigüedad, ya que las variables que intervienen son las mismas, pero se invierten en el
cálculo.

Por ejemplo, la rotación de los bienes de cambio será la siguiente.

Como se podrá apreciar, numerador y denominador son iguales, pero el signi cado del
indicador señala algo diferente. En este caso, cuantas veces rota (o se vende) un stock
promedio en un ejercicio contable. Se supone que a mayor cantidad de veces que rote por
ejercicio un mismo stock, la utilidad será mayor.

 Para profundizar este tema deberá dirigirse al punto 4.9.3 de Ortega Martinez, José
Antonio (2010) haciendo clic aquí.

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