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La mujer rural y la agricultura familiar en Colombia

Autores: Minsalud, FAO.

Año de publicación: 2015

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Resumen:

DETRÁS DE LA ECONOMÍA DEL CUIDADO ESTÁ UNA MUJER QUE LE

APORTA AL PAÍS.

El documento inicialmente aborda los estereotipos de genero asociados al

cuidado y al trabajado domestico no remunerado, evidenciando que en lo que
respecta a lugares rurales se siente con mayor intensidad la asociación del
trabajo doméstico y cuidado no remunerado como una tarea “natural” de las
mujeres, tan es así que aborda al género como una categoría de análisis
bidimensional (reconocimiento de la subvaloración femenina y división sexual
del trabajo) se analizan los resultados de la información producida en la primera
Encuesta Nacional de Uso del Tiempo (entre 2012 y 2013 y la participación de
las mujeres rurales colombianas en la producción de alimentos y su distribución
al interior de sus hogares.

Este estudio plantea que el concepto de agricultura familiar en Colombia

comprende la economía campesina, la producción campesina, las unidades
agrícolas familiares, los pequeños productores agrícolas, los productores
agrícolas asociados a cultivos tradicionales, los productores minifundistas y la
producción campesina parcelaria, entre otras.

Así como también aborda a la economía del cuidado como un campo que
estudia la producción de bienes, servicios y actividades realizadas en los
hogares indispensables para la reproducción biológica y el bienestar de las
personas y las familias, también se debe incluye la provisión de cuidados que se
realiza en la esfera pública y mercantil, entre los que se resalta como tipos de
trabajo: el de subsistencia (actividad de los hogares campesinos), trabajo
doméstico (foco de inequidad), trabajo de cuidados familiares, y trabajo
voluntario o de servicio a la comunidad (Villamizar en CEPAL, 2011); mismo que
son abordados dentro de las encuestas de uso del tiempo

Según la Gran Encuesta Integrada de Hogares de marzo de 2013, en Colombia

la población rural representa el 23,4 % del total del país. Está conformada en un
52.86 % por hombres y en un 47.14 % por mujeres, el 88,47 % de los hombres
rurales están afiliados al sistema de seguridad social, presentando las mujeres
un porcentaje mayor de afiliación con un 92,57 %.

La Encuesta Nacional de Uso del Tiempo evidencio las brechas evidencia las
brechas en la participación y tiempo de dedicación de hombres y mujeres
rurales colombianos de 10 años y más a las actividades relacionadas con el
cuidado. Entre las cuales se encuentran la agricultura familiar y están
relacionadas con la producción de alimentos.

En el trabajo no remunerado tanto al interior de los hogares la participación de

las mujeres rurales mayores de 10 años en Colombia es del 93 % en un día
promedio y la participación de los hombres es del 60,6 %. Frente a la dedicación
en tiempo, los hombres ocupan en promedio 3 horas 6 minutos, mientras que
las mujeres 8 horas 12 minutos, esto permite evidenciar que las mujeres ocupan
5 horas 6 minutos día promedio más que los hombres en este tipo de ac-
tividades.

Estas cifras evidencian la división sexual del trabajo, las mujeres rurales
desarrollan actividades de trabajo no remunerado mientas que lo hombres
rurales desarrollan principalmente actividades remuneradas, por ejemplo, la
encuesta permitió evidenciar que las mujeres rurales mayores de 10 años son
las responsables del suministro de los alimentos en sus hogares, donde en un
día promedio las mujeres una participación de 81,1 %, frente a un 18,1 % de
participación masculina.
Todas estas cifras evidencian las desigualdades y la sobrecarga laboral a la que
se enfrentan las mujeres rurales colombianas, donde existe inequidad en la
distribución de las labores y por ello se hace indispensable tanto el
reconociendo como la distribución.