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Corporación Universitaria Minuto de Dios -UNIMINUTO

ASIGNATURA: Problemáticas Ambientales

ECONOMÍA SOLIDARIA- CONSUMO RESPONSABLE

Nombre: Fredy torres mesa ID: 641051

Introducción

Nuestra cultura consumista soporta y justifica en buena parte nuestro


actual modelo de sociedad. Así, en este modelo social se considera que una
mayor oferta de bienes de consumo puestos al alcance de la ciudadanía es fundamental para
lograr un mayor bienestar, y que un nivel de consumo más elevado nos reporta, a su vez, un
grado superior de felicidad individual y colectiva. La condición que se antoja necesaria para
conseguir satisfacer nuestras ingentes necesidades de consumo es el crecimiento
económico.

Sólo una actividad económica en continua expansión será capaz de satisfacer esa ilusión de
conseguir el bienestar a base de consumir cada vez más. Estas creencias y valores están
muy arraigados entre nosotros, hasta tal punto que uno de los indicadores clave para medir
nuestro estado de bienestar suele ser el incremento del consumo.

Pues otro factor principal que haya incrementado el consumo es que por los grandes
avances a lo largo de la historia, gran parte de esa prosperidad se ha conseguido a base del
uso intensivo de la naturaleza, que ve sobrepasada su capacidad de regenerarse: destrucción
de bosques, extinción de especie ,causando el deterioro del planeta, el agotamiento de
los recursos, o la realidad de un porcentaje alto de la población mundial (especialmente
población infantil) que vive y trabaja en condiciones de esclavitud. Situación aceptada
como única salida a la pobreza o miseria en la que se encuentran.

Pues, cada vez son más las voces de expertos, de científicos y de políticos que demandan la
necesidad de replantearse seriamente nuestro modelo de consumo porque se considera
insostenible desde el punto de vista ambiental, económico y social. Con
nuestras acciones personales y muy poco esfuerzo, cada uno de nosotros podemos hacer
mucho para contribuir a frenar el deterioro ambiental y que no se vulneren los derechos de
las personas, ya que aunque a veces parezca que la solución no está en nuestra mano,
tenemos la oportunidad de actuar, modificando las pautas de comportamiento y buscando
un consumo más responsable (que respete al planeta y sus habitantes).

Desarrollo

El estilo de vida y la personalidad del consumidor definirá que productos compra y donde,
al pasar de los años nos vamos sumergiendo cada vez más en el mundo del consumismo, un
mundo en el que las compras compulsivas e innecesarias se vuelven el pan de cada día,
siendo estas compras provocadas principalmente por la publicidad que nos agobia y que
desde el siglo pasado se ha convertido en un imán de compradores. Lamentablemente,
estamos dejando de lado la verdadera esencia del consumo que es satisfacer necesidades
presentes o futuras mediante un gasto racionalizado de bienes y, nos estamos volcando por
el lado del consumismo al dejarnos seducir por la acción compulsiva del gasto desmedido;
y es que, cada año se producen más y más bienes y servicios que pretenden facilitar la vida
del hombre, pero estos nuevos productos que salen al mercado están pensados para que
atraigan el interés del cliente a tal punto de crear una nueva necesidad, la cual no es una
necesidad sino un deseo producido por el producto y la publicidad que emplean a la hora de
venderlo, esto con el fin de estimular el consumo y como consecuencia alimentar más las
arcas del capitalista. Pero la publicidad no es la única que provoca el deseo de compra en el
vendedor sino también el diseño del producto en sí, ya que entre más atractivo sea este a la
vista, más fácil es que genera esa necesidad de adquirirlo en el comprador.

Además, se ha venido instaurando un nuevo mecanismo para impulsar el consumismo y


este es la Obsolescencia Programada de los diversos artículos que se producen, esta
consiste en darle un lapso de vida útil a los bienes con el fin de que el consumidor se vea
obligado a comprar nuevamente el mismo producto o alguno similar. A través de la historia
se han visto casos donde las grandes empresas hacen lo posible por reducir la vida útil de
sus productos, como lo fue con el caso de Phoebus, un monopolio de empresas que se
aliaron para reducir la calidad de las bombillas, las cuales llegaron a durar 2.500 horas y
terminaron produciendo unas con una vida útil más reducida, de 1.000 horas; esto dio el
primer paso para que las empresas dejarán de producir productos de alta calidad y
durabilidad y empezaran a producir bienes más frágiles que dejaran de funcionar a corto y
mediano plazo. La Obsolescencia Programada sigue vigente hoy en día, y es que las
corporaciones con fines de no estancar sus ventas, producen bienes que tienen un “reloj”
que determina en qué momento deja de funcionar para que el consumidor se vea obligado a
hacer una nueva compra.

La Obsolescencia Programada junto con la publicidad y la alta producción de bienes de


diversos tipos, colores y diseños; son los que influyen en la construcción de una sociedad
consumista, que en busca tener los ultimo y estar a la moda se vuelven compradores
compulsivos y ayudándole el hecho de estar sumergido en un mundo capitalista que lo
único que busca es obtener un beneficio, aunque este tenga que pasar por encima de lo
ético, lo ecológico y lo social.

Por eso, la sociedad debe de transformar su pensamiento a la hora de consumir; ahí es


donde entra en juego el Consumo Responsable, el hombre debe de tomar decisiones a la
hora de comprar, pensando en que es lo que realmente necesita, dejando a un lado los
deseos; debe tener buenos hábitos de consumo que se adapten a sus necesidades reales. El
consumo Responsable está ligado a diversos aspectos como el impacto que pueda tener
cierto producto sobre el medio ambiente y la sociedad y si este producto cuenta con una
buena relación calidad-precio; son diversos los aspectos que influyen en la toma de una
decisión de compra en un consumidor responsable, pero estos aspectos siempre van ligados
a los ámbito ético, ecológico y solidario.
Conclusión

Seguir excediéndose en el uso de los medios que ofrece la Tierra no es una opción viable de
largo plazo. La cuestión es cómo cambiar los modelos de consumo y producción con
suficiente rapidez como para seguir el ritmo del crecimiento económico, lo que no puede
lograrse simplemente mediante cambios tecnológicos. Es poco probable que las empresas
adopten voluntariamente iniciativas costosas para cuidar el medio ambiente. Es necesario
que más personas abandonen la idea de que consumir más es sinónimo de progreso o de
éxito. Con una utilización más justa y equitativa de los recursos también se reducirán
los conflictos sociales.

Por ende el ser humano debe tomar conciencia del daño que hace a diario tanto a sí mismo
como a la sociedad, al mundo a la naturaleza para ello debemos cambiar nuestra forma de
pensar de actuar frente a los recursos ya que somos desmedidos con los que consumimos a
diario generando así un impacto más adelante que nos puede llevar a nuestra propia
extinción.

Anexos

• http://www.oei.es/decada/accion.php?accion=9

• http://www.generandociudadania.org/wp-
content/blogs.dir/1/files_mf/1328113584carpeta01.pdf

• http://www.vivosano.org/es_ES/Informaci%C3%B3n-para-tu-salud/Sociedad-
sana/Consumo-responsable/Qu%C3%A9-es-el-consumo-responsable.aspx

• https://giselleland.wordpress.com/2012/06/12/es-el-consumo-social/

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