Está en la página 1de 2

ENCUENTRA A “LA NEGRITA” INSTAGRAM

Un emprendimiento con mucho cariño de repostería y pastelería de Luciana Gutiérrez que nace en su
familia.

El 17 de noviembre del 2018, Luciana Gutiérrez una joven universitaria, empezó a crear su
propio emprendimiento de repostería y pastelería en su casa, inicio tomando pedidos en su
familia, quienes desde un principio la apoyaron, sus padres y su abuelita la motivaban todos
los días.

Hoy en día ella cuenta con su página en Instagram, donde muestra toda la dedicación, esfuerzo
y amor que le pone a cada una de sus creaciones, la podemos encontrar con el nombre “La
Negrita, de esa manera haciendo honor a lo que me dice mi abuelita de cariño cada vez que
me ayuda a realizar un pedido”, señaló.

Nos comenta que comenzó sin saber nada, con la ayuda de tutoriales, recetas, conocimientos
de su abuela sobre repostería, de esa manera fue aprendiendo realizando sus primeros
pedidos, poco a poco le gusto a muchas personas. “Me animé por que me di cuenta que era lo
que me apasiona, es simple seguir una receta, pero que te salga tal como te la pide el cliente,
es el resultado de que cada vez lo estas haciendo mejor y te motiva a seguir adelante”, declaró
Luciana.

Entre algunas de las dificultades más frecuentes que enfrento, fueron las cancelaciones en los
pedidos, llamadas que le hacían el mismo día, mencionando que ya no se realizaría el
cumpleaños o evento, quedando Luciana con todas las cosas que preparaba para dichos
eventos, estas situaciones la deprimían mucho y en ocasiones la dejaban sin ganas de seguir
adelante, por suerte cuenta con su familia maravillosa, que le compraba lo que se había
quedado y le daban ánimos de no dejarlo.

Cuenta que al ir teniendo más pedidos, una de las cosas que le costó, fue aprender a trabajar
con otra persona, porque aunque ella quisiera, no podría hacerlo sola, tuvo que enseñarle la
manera de realizar sus trabajos ya que se considera una persona perfeccionista y detallista al
momento de hacer sus entregas.

Con la ayuda de sus ahorros, también de sus padres se fue capacitando realizando cursos en el
Instituto de Gastronomía IGA durante un año, también en la escuela El Maná estuvo tres
meses en repostería y seis meses en gastronomía. Logrando mejorar sus habilidades, que se
reflejan en sus trabajos de hoy en día.

Luciana declaró, “Amaría verme con mi local tengo ese sueño de tener mi propio lugar donde
pueda recibir a los clientes, de esa manera disfruten de todo lo que sé hacer y puedan saborear
a detalle los secretos de mi cocina y se sientan muy satisfechos”.

También podría gustarte