República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria

Universidad Nacional Experimental ‘Simón Rodríguez’

Área de no sé, la carrera que estudies

Núcleo Maturín — Monagas

CONOCIMIENTO EN
PANDEMIA. ANALISIS
CRITICO DE AYUDA Y
AUTOREALIZACION

Docentes: Alumnado:
No sé, No sé x2 Domínguez, Valentina C.I.: ¿?.???.???

Pon la fecha aquí, 2020.

 Hay confrontaciones que a los que ponemos por delante la
racionalidad y no las tradiciones y la inercia social nos
apasionan, aquellas en las que la lógica, la sensatez y, en
definitiva, la pura verdad chocan con la obstinación absurda, la
visceralidad y los intereses que se verían perjudicados si la
mayoría de la población estuviese al tanto de hechos innegables.

Es un hecho que males tan agudos como el cambio climático, la

deforestación, y el romper estigmas respecto a prejuicios
sociales han sido y son, comunes en nuestro día a día. Es algo
con lo que se suele vivir, es algo con lo que solemos convivir
diariamente, sin embargo, como el conocimiento en sí, son cosas
que pasamos bajo la mesa.

A lo largo de la historia de la humanidad, el conocimiento ha

ido expandiéndose, fruto de la curiosidad innata del ser humano
para la diversidad de temas que lo rodean. Pero a su vez, en un
año tan complicado como el actual, podemos confirmar una teoría.

En un mundo interconectado ahora más que nunca, el

conocimiento sólo está para los ojos de quien quiere verlo, y
aprovecharlo. ¿En qué sentido afirmo esto? Básicamente hay gente
que no se diversifica, que no avanza, y que no se cuestiona a sí
misma en la cotidianidad, para ser una mejor persona, o a
palabras de Albert Einstein “No ser una persona reconocida, sino
útil”

El mundo hoy avanza a un ritmo distinto, pero avanza. Las

herramientas tecnológicas están a la orden de día y se erigen
como soporte y aliadas de las economías globales para su pronta
recuperación debido a la pandemia que nos achaca a todos por
igual. La tecnología ha creado decenas de nuevas profesiones y
en ellas las instituciones tradicionales no han logrado
responder a las exigencias del mercado. Pero, ¿Acaso hemos
avanzado nosotros como sociedad? La respuesta es sí y no. Me
explico, sigue habiendo, al menos en mí país, un alto
conformismo, una gigante pasividad a la hora de cuestionar las
cosas, y una nulidad para ser parte de un verdadero cambio. Para
esto debemos leer, aprender, conocer; porque quien no, siempre
estará condenado a repetir errores pasados.

Esta pandemia me ha ayudado enormemente a cuestionarme a mí

misma, a planificar, observar, y a pesar de la contingencia
mundial, la educación sigue siendo la herramienta principal para
cambiar y mejorar el mundo. ¿Qué mejor manera de aprovechar el
tiempo que adquiriendo conocimientos que impacten el quehacer
diario y el futuro de la sociedad mundial? Finalmente, la
pandemia llegará a su fin y los conocimientos y habilidades
duras se requerirán más que nunca.