Está en la página 1de 7

CARTA NOTARIAL

Lima, 14 de setiembre de 2020.

Señores
JORGE MARTÍN TORRES GARCIA Y CECILIA GISELLE GARCIA CORTEZ
Calle Ángel Valenzuela 704 - Cercado de Lima
Presente. -

Asunto: Suspensión de obligaciones.

Por medio de la presente, HORTENCIA ENRIQUETA GARCIA CORTEZ,


identificada con DNI Nº 09676631, y JULIO NESTOR MORI ORTEGA, identificado
con DNI Nº 45372688, ambos domiciliados en Calle Ángel Valenzuela 704 - 710,
piso 3, distrito de Cercado de Lima, quienes en calidad de COMPRADORES del
presente inmueble (tercer piso), manifestamos lo siguiente:

Que, como es de su conocimiento ustedes y los recurrentes desde el año 2016,


celebramos el contrato de compra venta del bien inmueble ubicado en la Calle
Ángel Valenzuela 704 - 710 piso 3, del distrito de Cercado de Lima, el mismo que se
encuentra inscrito en la partida registral N°4061295 de los Registros Públicos de
Lima, en virtud a dicha adquisición, y debido al acuerdo de voluntades de ambas
partes, los recurrentes el día 27 agosto del año 2016, en adelante los
COMPRADORES, efectuamos a favor de ustedes en adelante los VENDEDORES,
el primer abono por concepto de la cuota inicial del bien inmueble descrito, esto es,
por la suma de $5294.12 (Cinco Mil Doscientos Noventa y Cuatro con 12/100
Dólares Americanos).

Que, el monto total del precio pactado por los VENDEDORES por la compra venta
del bien inmueble referido, asciende a la suma de $77,500.00 (Setenta y siete Mil
Quinientos Con 00/100 Dólares Americanos), estableciéndose que dicho monto
será cancelado en cuotas mensuales de $653.00 (Seiscientos Cincuenta y Tres
con 00/100 Dólares Americanos), por el periodo de 20 años, monto y oportunidad
que fue aceptado por los COMPRADORES.
Que, resulta de su conocimiento que a la fecha, los COMPRADORES venimos
cumpliendo solemnemente con el trato comercial sostenido con ustedes por la
compra del bien inmueble descrito, cuya obligación de pago se viene realizando de
manera puntual a favor de ustedes en la cuenta bancaria en dólares, que nos
proporcionaron, signada con el número 0011-0156-71-0200155075 del Banco BBVA
Continental, a nombre del señor JORGE MARTIN TORRES GARCIA, conforme se
acredita en los vouchers de pago que les fueron alcanzados en su oportunidad.

Que, debido a los acuerdos sostenidos entre las partes, en enero del presente año
nos manifestaron que el monto mensual a pagar por la compra venta del bien
inmueble descrito sería en la suma de $614.00 (Seiscientos Catorce con 00/100
Dólares Americanos), en razón que el monto por el seguro desgravamen había
sido ajustada a su seguro de vida, cuotas que hasta la fecha hemos cumplido
íntegramente.

Que, motivo de la presente misiva, es para manifestarles nuestra preocupación por


las actitudes que están teniendo ustedes en perjuicio de los COMPRADORES, y
esto es a raíz de las discrepancias, acciones e incidentes de índole familiar que se
han venido suscitando de manera continua, y que se ha confundido con el trato
comercial que mantenemos con ustedes, estas situaciones transgreden nuestro
derecho como COMPRADORES, toda vez que en dos oportunidades de manera
inapropiada cada uno de ustedes le increparon a la compradora se retirara de este
inmueble, sin importarles el acuerdo comercial que mantenemos, dejándonos en
estado de inseguridad que vulnera nuestro derecho como COMPRADORES, a
pesar que a la actualidad venimos cumpliendo los acuerdos comerciales
establecidos.

Que, debido a los incidentes suscitados por parte de ustedes que pone en riesgo
nuestra calidad de compradores sobre el bien inmueble descrito, y en aras de
preservar el acuerdo consensuado, un trato justo y equitativo entre las partes,
solicitamos a ustedes suscribir el contrato de compra venta del bien inmueble
señalado, que se adjunta, ello para garantizar y formalizar el acuerdo comercial
sostenido de manera verbal con ustedes, en razón que nuestros derechos como
COMPRADORES se están viendo desprotegidos.
Es menester enfatizar que dicho requerimiento, se realiza en virtud que se han
suscitado diversos impases, esto es en razón, que, el día 06 de febrero del
presente, la vendedora de forma prepotente en una reunión familiar, le manifestó a
la compradora su incomodidad de que habite el inmueble materia de compraventa,
proliferando en presencia de sus otros hermanos de manera despectiva que le haría
un beneficio si se retiraba de la casa donde viene habitando. Seguido de ello, el día
sábado 22 de febrero del presente, nuevamente le increpó a la compradora con
participación de su cónyuge (los vendedores), de forma irrespetuosa e insistente
que se retirara de su domicilio, abriéndole la puerta para que lo haga de forma
inmediata, pese que el motivo de su presencia era para asistir a su madre en sus
cuidados cotidianos en la cual ese día estaba encargada de hacerlo, con su actitud
ustedes pretendían postergar sus actividades, aduciendo que se había presentado
con una actitud prepotente, hecho que no fue así; con dichas actitudes se
demuestra que ambos están de acuerdo que su presencia no es grata en dichos
inmuebles, pretendiéndose con ello desconocer la relación comercial que
mantenemos con ustedes, lo cual vulnera y ponen en riesgo nuestros derechos
como compradores.

Asimismo, el 25 de abril del año en curso el señor Jorge Torres García envía a la
compradora un mensaje vía Whats App, increpándole que nos hemos retrasado del
pago de la cuota del mes de marzo y abril por la compra venta de la casa, y que se
regularice ese tema, en respuesta de ello, y por la misma vía se le explicó que nos
aplazaron nuestras remuneraciones debido que se suspendió toda actividad laboral
en el país debido a la pandemia y del aislamiento social que el gobierno ha
decretado, y como fue el caso del sector donde laboramos, es por ello que recién
los días 24 de marzo y 27 abril del presente, recién se pudo cumplir con abonar las
cuotas descritas, pero estas explicaciones no bastaron, toda vez que el vendedor
adujo a la recurrente ‘que nada me costaba explicar las razones antes que tener
que recordarme lo que debo pagar, que la coyuntura es difícil para todos, y
que eso no me exonera de mis obligaciones, y que lo que indico parece una
excusa’, ello demuestra la falta de consideración que tienen con nosotros porque en
ningún momento nos preguntaron el motivo del retraso, denotando un desinterés
respecto de la coyuntura y situación económica que está atravesando el país, y que
viene perjudicando no solo a nosotros sino a todos los ciudadanos por esta
cuarentena, en ningún momento hemos querido eludir nuestra responsabilidad, muy
por el contrario, siempre hemos cumplido fielmente y en el plazo señalado con las
cuotas que corresponde al pago por la compraventa de este inmueble en la cual
habitamos, conforme pueden corroborarlo en los vouchers que a mes a mes les
alcanzamos vía Whats App como constancia de los abonos que realizamos en la
cuenta bancaria referida a nombre del vendedor.

Seguido de ello, el 26 de abril del presente, la vendedora (Cecilia García Cortez),


mediante mensaje de WhatsApp, increpó también a la recurrente de manera
ofensiva sobre el retraso del pago por la compra del inmueble, utilizando en sus
comentarios adjetivos de grueso calibre, donde nos exigía de manera imperativa
que se le pagara una deuda por concepto de arbitrios e impuesto predial que
corresponde a la casa, para ello, le manifestamos que si desea que le cancelemos,
conseguiríamos el dinero, pero como constancia se les solicitó nos giren un recibo o
documento donde se acredite el pago que realizaremos, pero pese a nuestra
voluntad de pago a la fecha no hemos tenido respuesta alguna por parte de
ustedes, muy por el contrario, en dicho mensaje solo se avocó a propalar ofensas
en contra de la suscrita, y de manera indirecta al comprador, haciendo caso omiso
de nuestra intención de pagar nuestras obligaciones; con dicha actitud pretenden
obviar la formalidad que debe tenerse en una relación comercial que es la
exigibilidad de emitir un comprobante de pago como contraprestación a una
obligación adquirida, y que además corresponde a un derecho que nos asiste como
COMPRADORES de este inmueble, y que ustedes pretenden desconocer.

Asimismo, y en represalia a nuestra exigencia y con el ánimo de agravar más la


situación, ustedes nos restringieron de manera arbitraria el acceso a la azotea, pese
a que también existe un acuerdo consensuado de usarlo como área común para uso
exclusivo del cordel, y a futuro lavandería toda vez que hemos pagado para que se
acondicione dicho espacio para el uso y comodidad de ambas partes, pero a pesar
de ello ustedes nos restringen, refiriéndonos que no tendremos acceso a la azotea,
sin interesarles que no contamos con el espacio adecuado en nuestra propiedad
para colgar nuestras ropas de vestir u otros, y además sin importarles la crisis
sanitaria (pandemia por el COVID-19) que se vive en el país donde se requiere
mucho más higiene y cuidado en las vestimentas que usamos para no estar
propensos a contagiarnos.

Asimismo y a solicitud de ustedes, el día 25 y el 28 de agosto del año 2020,


sostuvimos una reunión, y en el desarrollo de la misma, el vendedor de manera
prepotente y poco cordial nos conminó de forma arbitraria que desocupemos el
inmueble adquirido, sin existir motivo y causa alguna para hacerlo, precisándonos
que su decisión ya está tomada, y solo queda el retirarnos; a lo que le manifestamos
que en ningún momento tenemos la intención de hacerlo toda vez que nuestras
expectativas como compradores de este inmueble la hemos depositado desde el
primer momento en que se celebró el acuerdo comercial entre las partes que data
desde el 27 de agosto de 2016, obligaciones que hemos cumplido de manera
puntual, pero pese a nuestra negativa ustedes nos exigieron que planteemos una
propuesta económica para negociar nuestra salida, y de no darle una respuesta nos
indicó el vendedor de manera abusiva que él ya sabía que hacer.

Del mismo modo, y luego de haber expuesto todos los atropellos, arbitrariedades,
ofensas, abusos y actitudes de poca calidad humana que realizaron ustedes en
perjuicio de los COMPRADORES, conforme se ha descrito, denota que han
confundido la relación comercial que mantenemos con ustedes, toda vez que dichos
impases que existen entre la vendedora y a la compradora en calidad de hermanas,
solo atañe a ambas por ser desavenencias de índole familiar que pudo haberse
solucionado de manera consensuada entre ambas, sin embargo, esta relación
comercial se encuentra vigente en virtud que venimos pagando desde hace 4 años
el monto de $35,673.12 (Treinta Cinco Mil Seiscientos Setenta Y Tres con
12/100 Dólares Americanos) de manera ininterrumpida y puntual de forma
responsable, conforme a las cuotas establecidas por ustedes por la compraventa de
este inmueble, esto lo recalcamos porque ustedes pretenden desconocer nuestra
condición de COMPRADORES, poniendo en riesgo nuestro dinero, nuestro
proyecto de vida y sobre todo nos coloca en una situación vulnerable e incierta en la
cual es preocupante debido que no tenemos las garantías a futuro de que el
inmueble que estamos comprando será parte de nuestra propiedad, y que si
ocurriera algún incidente que perjudique nuestra vida a raíz de esta pandemia, entre
otros eventos que afecten nuestra integridad, no habría garantía que ustedes
transfieran este inmueble a nuestros descendientes.

Estos hechos nos perjudica enormemente toda vez que desde que asumimos esta
relación contractual, ustedes tenían pleno conocimiento que nuestras expectativas
estaba dirigido a una propiedad distinta a la que actualmente estamos habitando a
pesar que se nos había aprobado el crédito hipotecario para su adquisición, y que
de acuerdo a su propuesta los recurrentes renunciamos en comprarla, ello por
aceptar su oferta de compraventa de este inmueble, que era en su momento
beneficiosa para los COMPRADORES, y que a lo largo desde este tiempo ustedes
lo están desestimando, imponiéndonos su actitud prepotente y abusiva conforme se
ha descrito, sin respetar nuestra condición de propietarios, a pesar de que hemos
cumplido puntualmente con los pagos del inmueble adquirido con absoluta
responsabilidad, conforme puede verificarse en los depósitos efectuados a la fecha;
con dicha actitud ustedes pretenden de manera unilateral resolver el contrato verbal
de compraventa que mantenemos con ustedes ello sin mediar causal que pueda
extinguir dicha relación comercial.

Por consiguiente, estas acciones que se han venido presentando con nosotros,
demuestran su intención de no respetar la relación comercial que mantenemos con
ustedes, debido que han confundido los impases familiares que son totalmente
ajenos con la relación comercial que existe con nosotros, y para efectos de
garantizar nuestro patrimonio, en virtud a los hechos suscitados, suspendemos el
cumplimiento de las obligaciones contraídas con ustedes en vista que no se
garantiza la legalidad de esta compraventa, amparando nuestro pedido conforme se
prescribe a continuación:

Artículo 1426 del Código Civil que señala lo siguiente:

“En los contratos con prestaciones reciprocas en que estas deben cumplirse
simultáneamente, cada parte tiene derecho de suspender el cumplimiento de
la prestación a su cargo, hasta que se satisfaga la contraprestación o se
garantice su cumplimiento”.

Por lo que, en aras de un acuerdo armonioso, y recíproco entre las partes, y de


acuerdo a la transparencia y la seguridad jurídica que por ley nos asiste, los
COMPRADORES otorgan a LOS VENDEDORES, UN PLAZO NO MAYOR A 15
DIAS, después de haber recibido la presente, y por la misma vía den respuesta a la
presente misiva y nos adjunten debidamente suscrito, el contrato de compra venta
de este inmueble (cesión de derechos y acciones) que se adjunta, para efecto de
formalizar el acuerdo comercial sostenido entre ustedes.

Asimismo, y habiendo expuesto todo lo concerniente en el presente documento, y


de existir otra alternativa consensuada en beneficio de las partes hacerla extensiva
por la misma vía; de lo contrario de no llegarse a un acuerdo armonioso,
recurriremos a otros fueros a ejercer nuestro derecho que nos asiste.

Sin otro particular.

También podría gustarte