1,/1 C E R c l M l C f l T E M P l Z d N A E N ,*IMKIZIC,4 lI1<1, S U R .
E l , Y A C I M I E N T O DE
l'r11.0 R1,:I Al('(> (1'.11Z'1'11)0 111; REIZISSO, 1'RO I'INCIA L)I< R I I E N O S 11I R E S ,
. 1 1<GF:"V771.V.1 ),
I N T R O T ~ I J C C-
I(~N .A . incdidn que estu-
diamos los nuevos y diferentes rasgos de la
;ictividad huninria prehistíxica en el conti-
iieiite americano, vanlos coiiil~rciidieiido 1:i
complejidrid de los mismos y la tieccsidacl de
realizar síntesis para poder ubicar, en el
tiempo y cii el espacio, la cantidad de datos
que nos 1,riiidaii las cscavacioiics y la apli-
cación de las nueras t6ciiicas de iiivcsti~n-
cií)ri.
E s cvidciite que los prohlciiias iiirís iiii-
p r t a n t e s coii que se cii frciita el iiivestigador
en América no so11 de ninguna nianera muy
distintos aa los que sc prcscritnii en el l'icjo
>Iurido, porque estAii relacionados con los
grandes cambios Iiabidos durante las distiri-
tas adaptaciones del Iiomhre a sus riiedios
sociales y tiaturnlcs» (Willcy, 1964, pAg. 52).
IJiio de cstos problemas es el de los orígenes,
desarrollo y difusi6ii de la ccrrímica eii el
Nuevo Mundo.
I,os vestigios culturales corresporidientcs
:i una ctapn. temprana para tradiciones alfa-
reras en A~néricadel S u r son ya bastante
si!:nificativos. 1,o interesante es que, liasta
riliora, los fechados radiocarbí>nicos para la
ccrhmica iiirís antigua no corresponden al
Arm del Períi j7 Alesoamérica ; en cambio
Iiay feclins antiguas para el área intermedia.
Eii ésta estarían los yacimientos de Panamh,
Colombia, Ecuaclor y Venezuela. Eti todos
cstos casos la cerhmica temprana fue liallnda
cii conchales, con uiia ~ r o b a b l e ecoiiornía
de recolectores de moluscos y pescadores y
con ciiltiro incipiente o sin 61.
1\11 la costa Pacífica de I'ananiA se halló,
cii el sitio de hfoiiagrillo (IVillcy aiid AIac
(;impse.v, 1954), iiii coiicliero conteniendo ce-
rhnica, 4sta con una dccorncií,ii compuesta
por incisiones irregulares, líneas espiraladas,
curvas, corresporidierido a forrii:is siriiples
seriiicsf6ricasJ con 1)ortlc recto. I<I fecliado
i.adiocarhí~iiicode cstri ;ilfnrcrín es de unos
2140 niíos antes de J . C.
Eii \'ciiczuel:i fiic tlcscu1)ierto un sitio,
llamado K;iriclio I'cludo (Iiousc :irid Crusciit,
1963 a, 1963 l)), ciij.;i ccr:íniica gruesa, coii
desgrasantcs arenosos, csth decorada coi1
imprcsioiics de tejidos, puntca(1osi y tanibiéri
«appliquí.n. S e aii;ilizA iin;i iiiuestra vegetal
que se liallí) asocirid;i ¿i la ccrArnicn, dando
una fcclia dc 2668 1.50 aíios antes (le Je-
sucristo.
Hacia cl iiortc de Coloriihiri se Iiaii ericori-
trado vestigios r~ulturalcscii coiiclialcs co-
rrcsporidieritcs n pcriotlos tcriiprnrios. 1,:is
cscavaciories de Iiciclicl-1)olrriatoff (1965)
nos dan a conocer uiia scric de complejos
arcaicos, etitrc los cuales Puerto Hormiga
presenta los fecliados mrís aritiguos. Sc reali-
zaron varios arirílisis de C I para ~ este sitio
dc Puerto Hormiga, uti1iz;íridose muestras de
carbón y valvas de tnoluscos extraídas a
diversas profundidadcs, llcgaiido algunas (Ic
ellas n los 3.000 níios a. de J. C.
I<ri Valdivia, eii la. cost;i del Iicuador, los
Evaiis (Mciggcrs, I<v;ins aiid Estrada, 1965)
ciicotitraroii una ccrrímica dcsarrollada, iii-
troducidn por pescadores que llegaron dcl
Japón liacc ;iprosimadamentc 4.500 años.
Ida decoraci01i es variada : grabado, aro- conio depósitos de playas, Icritcs y cordoiics
ckcr-tampiiig~,escisi611, raspado, aplic:ido~. de coiicliillas, iii:ís o nienos paralelas a la
Estos soii los elcniciitos cn.racterísticos de la :ictunl ribera» (op cit., pAg. 90). Scxíiii T e -
ccrAiiiica de 17altli\.ia; qiie juiit:iiric.iitc con ruggi, «la antigiiedad de la sediiiie~itaciOri
las fornins siiiiplcs de las piezas se ciicucii- q~irra~ldi?tcnsc pucdc asignarse a un período
traii eii los iiivclcs profundos de los coiiclia- que 1.3 destlc hace unos 30.000 niios hasta
les costeros dc cs:i zona (le1 Ecuatlor. uiios 5.000 años» (op cit., pág. 90).
E s cvidctitc qiic, a pesar de esistir entre Los depósitos de playa, sobre todo los
los com~)lejos;irqucológicos mcricionndos aii- cordones de coiicliillas, del niar qiro-o,ndntc)l-
terior~nentcuna siinilitud cn la siriiplicidad sc', co~nicrizaiia formnrsc en el riiorncnto en
dc las fornias de las Ijiczas de ccrrítiiica, en que el niar rctroccde por cfcctos dcl asceiiso
las esc;isas tí-criicas dc decornciGii y cii la dcl coiitiiierite.
gran antigiicdad d e los inatcrialcs, resultan Estos cordones ~ o n ~ l i i l c naturales,
s, que
todaví:i, a iiucstro tiiodo de ver, niuy cscasos se encueiitrnii cubiertos por una dcnsa y
los clenicntos par:i cfectiiar cornp:iraciones compacta capa de humus, forman suaves
cntrc cstos cornplcjos taii cercanos. clcvacioiics, sobre las que sc coristruycn
1.k todas iiiaricr:is es iinportriritc dar n las vivieiidas actuales o donde se realizan las
conocer cl coiitciii(1o de cstos sitios, y:i que esplotacioiics para obtener inatcrial para 1%
de esta foriii:i se podr;íii iiitegr:ir estas cultu- clabor:ici6n derivadas tIc las coiichil1:is.
r:is iiidígcrias dcritro dc iiii Iiorizontc arcaico. I,:i p:u-tc del cordóii coricliil estudiado co-
rrcspondc :I esos dc.pósitos de playas que ha
1 , ~ C E I < ~ > I I C A A H Q T ~ I < O I , ~ ( ; I C A I)E P~\I,o dejado el niar al retirarse.
I~I.?\NCO. --- I<l sitio :irqiicol6gico por iioso- Cuando sc ohscrva cl perfil del cor(1óii
tros iiivestig:ido se ciicuc!iitra ubicado eii 1;i vcinos las capas ohliciins, con su iriclinaciOn
fiiica aL:l I:lori(l:iu, a I .ooo nietros (lc la costa Iiacia la costa, ofrcciciido de esta forma el
actual del río, eii el 1iig:ir dcrioriiinado Palo caso típico de csl.rcitificaci61~de viarca. Estos
I3lniico, n 34" 52' 0,s" Int. sur, 5 7 O 50' 56" cordones est:íri foriiindos por diferentes capas
lorigitud este. I,ri zorin prcseiit:~caracterís- dc restos dc valvas de rnoluscos ; algunas de
ticas riiuy p:irticulares, y;i quc cii ella se las capas cstrín fornindns por valras frag-
distiiigueii cordoiies de coiicliillas qiic o;upaii inciitndas mezc1ad:is con :irciia, y otras capas
uiia fr:irija costera J. quc corrcsporitleii a dc- csthii coristituidas por valvas enteras, de
pOsitos post-pampeanos, producto de uiia iri- gastcrópoclos y laii~elibraiiquios.
grcsióii iiiariria. I'stns forinacioiies post- I.:n 1;i zona de la quirita nT,a Florida» es
panipe:iiias «correslmiitlcii n lo que eii tcrriii- doiidc efectuamos nuestras iiivcstigncioiics,
rioloxía geolOgica rniiiitlial sc dcsigna coi1 que fucron patrociiiailas por la CoiiiisiOri de
cl iiornhre de Holoceiio» ('l'cru~gi, 1961, Irivcstigación Cieiitífica dc In Provincia de
p;igiiia 90). Rucnos Aires.
De estos ~Ic~iósitos post-pnri~pcaiiosel que I<ti ninguna parte del cordhii conchil sc
m;ís nos interesa, por estar relacionado coi1 ohservaron los efectos de crosióii o de otros
los cor(1orics tlc coiicliill:~~, es e1 Ilntnndo Qrr<.- agcritcs físicos 3, ii:itiirnlcs qiic piidicran
~ u n t l i u c v ~ s c Este
p. Qiie,-(irzdi~irnsccst5 coiisti- Iiahcr alterado la dcpositaciOn natural (le Inc:
tuido I,or dep6sitos riiarinos, que cii su fasc valvns de moliiscos. Por siis características
filial y aeii las partes 1115s ccrcaiins a la ari- gcncr;iles cl c.ord6ii se ha conservado intacto
tigu:i rosta, cl mar c1.1 retroceso acumiilí), :i lo largo del tiempo, qi~edaridociibierto por
la capa de Iiiiinus y la vegetaciGii típica de 1;i
zona.
Durante nuestras iiivcstigacioncs se rea-
lizaron cscavacioiies de uii,z scrie de soiideos
y pozos estratigrlíficos que nos permitieron
poder estudiar las características naturales y
ciilturales. I)c csta fornia pudiiiios eshumar
gran caiitidad de fragmeiitos de cerámica cii
las diferentes capas de coricliillns y tanihií-ri
cii la zoiia Iiuinífcra.
L a casi totalidad de los fragnientos de
ccrlímica quc se Iiallaron dcritro del sordúii
concliil se eiicontraroii en las capas donde
las valvas de nioluscos cst,'iii ciitcras, com-
pletas y además depositados los fragiiieiitos
en la misma forma que las valvas, es decir,
horizoiitalcs.
~;x~Av;\~IosI.:s. -- - Sc rc a 1'izaron uriíi sc-
rie de cortcs, forni~iiidocuatlrículas de 2 me-
tros cuadrados cada uii:~dc ellas. De esta
riiaiicra obtuvimos el material cer:íinico y
trmhiéii pudimos observar la estratificación
(le1 cordóii concliil. Además de los cortes, Fe
efcctuaroii pozos dc soiidco en distintas zonas
del cord0ii para poder comprobar la dcposi-
tación de la coiicliilla y hasta dónde sc en-
contraba la nlf:ircrín dentro de esa formación
gcolí~gica.
I,a cstructiira dcl cord0n de coiichillas
pcririitií) re:iliznr, en todo nionietito, ohscrvn-
cioiics prceisas cii los dos ti1)o.s de cscn-
vncioiics que re;tlizamos, por tiivcles iiatu-
ralcs y por niveles artificiales.
Los fragineiitos (le cerámica se eiicoii-
traron desde la basc del cordón conclzil, ya-
cierido dircctarnente sobre la parte supcrior
de los linios arcillosos de color gris oscuro
y cii los difereiitcs cstratos gruesos de valvas
de iiioluscos. I,a estratificación de las val-
vas de moluscos es muy clara, y a que en la
base Iiay valvas enteras, luego una capa con
vnlvas fragnieiit:idas, superponiéndose des-
pués valvas triturndas. Esta secuencia sc
rcpite varias vcccs, ya quc cs uri rasgo típico
de los depósitos naturales que sc registran
cii estas zonas costcras.
E l cordóii estA foriiiado, fundamental-
mente, por Erodotlu mact roidcs (Daud.),
Mact ra isnbcllcn?tn (d'Orb.), [1rasalpi?t~
rtrslii (Pils.) y tanihi6ii liemos eiicoiitrado
C'?wihioln t t r i~crctrlolo.
I..i . A I , I : A R I . : R ~ \-
. Ilcntro del cordbii coii-
cliil d e la zona de la quinta n1,a 1:loridan se
liallaron solamente fragmentos de alfarería.
Estos fraginentos prescntari la particularidad
dc ser de regular taniaiio, siii niiigíiii tipo de
detoracióii. 1% característico el alisaiiiicnto
eii los bordes d e fractura, como cotisccueiicia
(le Iiabcr rodado, de Iiabcr estado iiicluido
cii el mar, previo ri la dcl~ositacibiiy forma-
cibii del corc1í)ri coiicliil (lhiii. r).
L a cerámica es cii geiicr;il burda, no ])u-
diéndose observar unioiies de espiralcs de
manufactura, pensAiidosc ciitoiices en el mo-
delado directo de las piezas. 1,:i pasta cst;
formada por un desgrasante con alto por-
centaje de granos de arena fina (de 96 por 48
microncs promedio), iinidos por una arcilla
que corresponde a un limo arcilloso pam-
peano, con gran cantidad dc células d e p a -
niírieas y fragmentos de espículas de esponja.
Adcinás, I>or el anhlisis rnicroscOpico de In
ceramica sc pudo <leterminar que la pasta
preseiita un aspecto de corrieiite fluida1 y
que recibió un mayor tratamieiito de alisado
eii la parte iriteriia que cii la parte esteriia.
Hasta aliorn, y por los fraginentos que
se csliuniaron, iio es posible poder detcrmi-
liar fornia y tamafio dc 1:)s picbins.
OTROSTIPOS I)I< c ~ ~ r í ~ - ~ ~ Ilurante
~ . i .
iiuestras cscavacioiies liallamos, además de
la eerrímica asociada con la conchilla, ma-
teriales cii la capa dc Iiiirnus que pucdeii
rc1acioii:írsclos con la cerAmica Iiallada por
\'ignati (1931) cii Punta Piedras (I3uenos
Aires), y por nosotros cri I'iiiita Indio, Puiita
I,ara y otros yaciinicntos del litoral boiiac-
rcrise (Ciglinrio, 1963). 1,os frngmciitos de
:ilf;irerín que encoiitraiiios cii la cnp,i dc liu-
iiius (de :iprosiriiadniiieiitc qo cni. de espesor)
ticiicri una decoración (Ic guardas iiicisas,
forniadas por comhiiiacioiies de puri/ricioiics
y Iíiicns quebradas or(lciiric1as cri scries Iiori-
ioiitrilcs y qucbratlas tlniido origen a regis-
tros escnloiiados y figiirns gcoriiétric:is. Tani-
t)ií.ri Ii;ill:~~iios,aunque eii riicnor proporcióii,
frngniciitt~sde ccrríriiica guaraní, tanto piii-
tad:~ coiiio cori-ii!:;idri y iiiiguicular ; consi-
dcraiitlo n esta íiltiriin ;ilfnrerín coiiip de valor
dingiií)stico para itleiitificrir a csta cultura.
1,o iiitcrcsriiitc de los frngtiiciitos de cer:iinic;i
que ;il)nrccc u1 1;i capa de Iiiiiiius es quc las
fr:icturns soii frescas y no presciit.~iiel nli-
snriiiciito que es c'iractcrístico eii los frdg-
iiiciitos tlc la cer:iiiiic:i :ilisatln que ap;irccie-
roii eii Ins c;ip:is de coiicliilln. ,4(Iciii:ís, cii
riirigíiri ~iiorriciitose c~sliiirnócstos tipos (le
frrigniciitos de ccr;íniic:i decorada asociada
con lri coiicliillri. Por lo t;iiito, los fr;igiiieiitos
de nlfarcrín de los tipos grabada, iiicisa y
piiitatln pcrtcricccri n críodo dos postcriorcs a1
de la ccr;íiniri;i alisndri, sin decor;iciOn, qiic
fuc coiitciiipor;íriea a 1,1 forninci6ii del cortl0ii
coiicliil cii esa zoiin de I'alo I{larico (1:íni. 11).
I<ii irivcstigacioiics :iiitcriores considcra-
nios que la ccr:íriiicri iiicisa o grn11:lcln corrcs-
1)oiitlín :I uii iiivcl rricdio que dcrioiiiitianios
aI,i tornl t>oiincreiisecl:ísico» (Cigli:iiio, 1963)
I'sta fasc crccrnos qiic es suce~)til)lcdc poder
su1)divitlirse cii v;iri<)s niveles, 1)ues juiita-
niciitc con los fr:igriieiitos griil)a(los c iiicisoi,
apareccri asoci;itlos otro!; fragiiieritos coii piii-
tur;i, s o l ~ r ctodo de color rojo, que podrí:iii
corrcsporidcr :i otrri frisc dciitro tlcl riiisiiio
iiivcl. Ilstc iiivel iiiedio, que tlcrioiiiiii;íraiiio:;
1,itor:il l)oiiacrciisc cl:ísico, crccinos que c i
e! qric iii1.o ti ri riinJ.or dcsnrrollo c.11 el ticiiil)o
Y cii c.1 csp;icio, 11or ciicoritrrirsc cstos tipos
ccrAniicos ;i lo largo dcl 1,itor;il nordeste dc
la Provincia de 13ueiios Aires y eii las orillas
dc las lagunas de esta Arca.
Por último, idciitificnmos conio otra co-
rrieiite cultural eii csta Arca, la deiioiiii~indn
Litor~ilhoiiaereiisc tardía, que corres~ioiidc
n la ccr,'iniicn guarniií, cnr,ictcrizada por
fragniciitos policromos asocirida coii alfarcrin
tlc. tipo ct)rriigntla y uriguiculnr. 1I:n íiltiiiias
iiivcstigncioncs Iiciilos detcrniiiindo iiii sitio
tipo cii 1:i Isla Xi:irtíii (;arcín, doiidc la cc-
rC'iniicn uiiguiciil:ir, corrugndn y piiit;id;i se
ciicuciitra nsocindri eii fogoiics y I~risur:iles
de ciertri iritciisid:itl.
CI<R.(-
~:ECII:\DOS K : \ I ) I ( ~ ) C A K ~ ~ ~ S I C 1)1.
O S I,A
MIC.\ A ~ O C I : ~ I I . LY)X
\ I,A CONCIlII,I,.\. - I k s -
grnciatlnriic.iitc Iris posibilidrides (Ic poder
ohtciier, prirn iiucstrris iiivcstigncioncs, uii
tiiaterial csccleiitc ])ara realizrir nri:ílisis (le
Cr4 fiicrori reducidas. I)e ;11ií que el ari:ílisis
efectuado sc Iiayn ohteiiido eii h;isc n niues-
tras de v;il~.as de inoliiscos c«iiiplctas, c;uc
fueroii recogidris tlc riqiiellns c:il)as tloiidc es-
tabari asociadas coi1 fr;igiiiciitos de ccr:íiiiica.
I,as iiiucstrns iiivcstigadas fiicroii dc I<I,O-
c l a l n ~~incroitlcs, que procedíati de los riivelcs
profuiiclos del cordíni, situados cri el pozo
cstrntigr:ífico 11." 10, :i I - 1,2o 111. dc pro-
fiiii(1idad (Cigliniio, 1963). Idas iri~.cstigaci(i-
iics fucroii realizadas por el Iiistitiito 17ciic-
eolnno de Iri\~estigncioiics Ciciitíficas, qur
Ilcvn. el 11." ISS ; dniido una edad n11solut:i
(le 4,760 -+ I 2 0 alios.
Con riiotivo dc ese primer feelirido, ol~tc-
nidc por 13 coiicliillai que se Iiallahri nsoci;ida
con 1:i cerríinicri, rcalizariios portcrioriiiciitc
iiiin serie de ol~scrvacioiiesy cscriv:icioiics cii
zoiias cercanas al yaciiiiiciito (le Palo 13l:irico.
E11 1;i zona coiiocida por 1,os l'nlris, taiiil~i4ii
sobre el íiltirrio cordí,ii coiicliil corrc.spoii-
dicntc n la iiiistiiri foriii:icióii gcolOgi~:i, fiic
doiide iriterisific:iiiios iiucstros tr;ihrijos.
c5tc sitio cstrajirnos dos muestras de valv:is
de moluscos ciitcras, n r,go n r,So in. de
profundidad, respectivamente. Ambas mues-
tras estaban separadas por un nivel estéril
compuesto por arena. Los análisis d e C I ~ ,
que fueron efectuados por el Laboratorio
anteriormente mencionado (I.V.I.C.), dieron
fechados con diferencia de 300 años ; alcan-
zando las fechas d e 3.990 +
70 (2.040 años
antes de J. C.) la primera (1~50m. de profun-
didad) y 4.250 f 70 (2.300 años a. de J. C . )
la segunda (r,80 m. de profundidad).
Hasta el momento contamos con tres fe-
chados radiocarbónicos para el último cordón
conchil del Querandinetise, forniación post-
pampeana, dentro d e la cual y en la zona de
Palo Blanco se hall0 cerhmica fragmentada
sin decoración.
S e han enviado muestras adicioiiales a
otros laboratorios para nuevas determinacio-
nes, pero por ahora iio disponemos de los
resultados. Una de ellas corresponde a dis-
tintas piezas óseas de un Stmodelpllis blaiut-
villei que se halló completo dentro del cordóii
conchil. Las fechas de radiocarbono que po-
seemos se basan en anrílisis realizados sobre
valvas de moluscos enteras de E r o d ~ n a
mactroides.
Debemos mencionar algunas observacio-
nes con respecto a las fechas obtenidas. L a
primera de ellas, F.R.A. n." 38 (I.V.I.C. -
ISS), procedente de Palo Blanco, tiene como
fecha 4760f 1 2 0 (2810 a. de J. C.). Las dos
siguientes son de la zona de Los Talas (Sitio
María Andrea) y corresponden a las mues-
tras F.R.A. n." 39 (I.V.I.C. - 268), con un
fechado de 3ggo+ 70 (2040 a. de J. C.), y a la
muestra F.R.A. n.' 4.0 (T.V.T.C. - 269), con
fechado de 4250 +
70 (2300 a. de J. C.).
Las muestras guardan cierta relación, y
CIGI.IANO,
Eduardo hlario (1963): Arqiteologla
del N E . de la provincia de Buenos A i r e s , en
Anales d e la Com. I n v . C i e n t . P r o c . Bs. A s . ,
vol. IV, La Plata.
en general podemos decir que hay una uni-
formidad y que pueden contar con muclio
apoyo si pensamos que la cerrímica sin deco-
ración fue hallada en una formación gco-
lógica natural, como soii los cordones coii-
chiles que se encuentran en esta zona de la
Provincia de Buenos Aires y que en toda
la bibliografía geolbgica son considerados
como correspondientes a la formación post-
pampeana denominada qucrarldincnsc.
Por lo tanto, corisidcramos que si estos
fechados radiocarbGnicos pueden considerarse
como provisioriales, no ocurre lo tnismo coti
la secuencia estratigráfiea que se presenta
muy claramente ; ya que cn el cordón de
coticliilla apareció cerhmica sin decoración
jr en la capa humífera ccrArnica decorada
que, evidentemente, corresponde a otra fase
cultural.
Por cotisiguierite, crccmos quc lo que debe
confirmarse o sustituirse, en investigaciones
ulteriores, soti los fechados radiocarbónicos,
ya que las secuencias culturales y las rela-
ciones de éstas con la estratigrafía geolhgica
confirman una cierta antigiiedad para la ce-
rámica sin decoración que descubritnos en
la zona de Palo Blanco.
Los estudios que se vienen rcalizaiido cn
distintas escavaciones en Sudamérica certi-
ficati una gran antigiiedad para yacimientos
costeros con cerámica correspondictites a pe-
ríodos arcaicos.
Estos sitios pareceti demostrar que por
ahora no se hallan en zonas de Pcr{i y Meso-
amí.rica, y que cs niuy probable que los orí-
genes de la cerhmica cri América puedan
remontarse al cuarto milenio antes de tiues-
trh E r a . - EDUARI)O MARIOCIGI,IANO.
nIs(;~sns,ncttg 1. ; E ~ A NCliffor,
S, .iiitl E ~ T R A I ) ~ ,
Rriiilio (1cfi.5): E a r l y I;or~natl:~c' I't,riod of L'oa3-
tcil Ecitndor: 7'he I'c11dr:'icr and ,~l~ich<ililn l'hfl-
sus, cri Sniitlisoniati I ~ i s t i t l t t i o n , ii'nshington.
~ < I ~ I C I ~ ~ ~ ~ , - ~ ) ~ ~ , ~ I (':~l.n~<1o : Excavacio-
A ~ I ' C ) F I (l('5)
:, sarr. de la ciitdcid y fiartido de Berisso, Libro
rrc9s arel rci'ol~!yicns rti l'ritvrto Ilorniijia (Depar- scgiiiido, Primcrn p;irte, cnps. I a VII, Rlirni-
t a t n ( ' ~ i t od e Ilolivar), cri :i~itropologia, 2 , Etl. cipalidnd clc 13crisso.
tlc la I:iiiv. de 1,os Aritlcs, nogotli. \.I(:NA,~I,3lilcíadcs A . (1931) : L)utos yef('rc'~itcs
Rvusic, I . , y C ' I < I ! S H N T , J . A l . (1<)03 a ) : K e c i ~ ? i - 11 l n arqicco10,~lade Putita Piedra (provi?tcia
les datos sobre fechas íirqt~eoldgicas por el de Rue?ios A i r e s ) , cn Notas prelimi?iorcs del
,nitodo tie C ' I ~e n el O C C ~ ~ PdeI IV~o iCe z u e l n , !llicseo de L a I'lnta, t . I, I3iiciios Aires.
en A c t a Cietiiffica I'e~ierolntia, Siipleriiento 1, \ V I I . I ~(:orden
, R. [-+4) : Prehistoria del N u e v o
C':irnc;is. Mit?ido, en Cic~rcia e Investigacidti, t . 20,
- - (1963 1)) : 1*(,11rz1iela11 ~ I r c h a ~ o l o g ycii
, Cari- 11." 2, fcl)rcro, Riiciios Aircs.
I ~ o e a i Seric's,
~ 1i.O (1, Y;ilc 1Jiiivcrsity I'ress, \Vrr.r,1cu, (>or(lon,nrid Rlc GIMI'SEY, Ch. 1,. (1964)':
Ncw IIavcii. ?'he Mo~iagrillo Ciiltrire oj Panamá, en Pofier
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SITUACI(\N Y CIRSCIJNS'I'ASCI:\S I)I,I, 1)1is-
c : r ~ ~ r n ~ a l i r <-
~ ' rE1
o . abrigo C;irriiclo se 1i;ill:i
ciiclnvado cii 1:i cara riordcstc del I'cíi6ri (1c.
I'cííarroyn, iiiuiiicipio de Peííarroy:i-l'uchlo-
iiiievo, provincia cle Córdoba.
1% f6cil localizarlo s i nos sitii:iiiios cii cl
cíirnirio qiic lleva al I'clióri J. qiic sale de
I'cííarroyn 1i:icia la verticiitc cstc dcl ~nistiio.
Sigiiictido cstc caniirio por espacio de unos
30 metros y bordeando una cas:i, se Ilcgn
:i otro nihs :iiiclio, pero muy esc:ibroso. Hay
qiic coritiiiuar iiiios 50 í)60 ni. 1iast;i llegar
:i una vcrcda Iatcral derccha, quc seguimos,
:il,aridonaiido cl camino iiiayor, para I l c g ; ~
;i un olivar. Cruzando í.stc, vnriios :i dar n
iiii espacio siti camino, cii la niisiiia ladc~ra
iioriiordcstc del Pcfií)ti (IArii. 1). 1Jii;i vez cri
cstc lugar, del>cnios 1)ordc:ir el I'eñOii liacia
1;i parte riordcstc. Allí encoiitramos uii abrigo
l~njoroca, 1)nstnritc grande y qiic se acusa
iiiiiclio cn el T'ciíhri : cstc es cl ;il,riqo C:ir-
iiicl0.
a: :!: * tocla Espaíía por 1;i prensa y radio iiacio-
1'1 1iall:izgo tlc 1;is pintiiras rupestres del
;il)rigo Carniclo se cfcctuó (le un:i forma coin-
plctnrnciitc~ fortiiitn, :i finales d c julio del
año 1965, por cnatro personas : la scíiorita
Carrncn liuiz, don C'arniclo Ituiz, doii Mn-
riucl Sierra y don Javier Riiiz, este íiltinio
inieuibro del Scmiiiario Sautiiola, de Saii-
tander. 1'1 grupo principal del panel, riiotivo
de cstc estudio, fue descubierto por Javier
IRuiz, y otros grupos y figuras seciiridarias,
por Carrnelo Ruiz y Manuel Sierra (1:íin. ir).
I .
1 ras esta pririicra salida sc cfectuaroii otras
cu:itro, en las cuales visitaron cl abrigo, adc-
inrís de los descubridores, las scííoritas Mary
Ituiz v Aiitoriia Sierra, doii Rafael Hernari-
do, don Francisco Sinchcz, los licrmarios
'Horrillo y los lierinririos Campos, 1)udiciido
comprobar la esistciicia dc niicvns piiitiiras,
,iuiique dc nienor importancia.
I k s d c e1 primer dcscuhrirnieiito se iiiaii-
tuvo informada a la señorita Viceiit, direc-
tora dcl hluseo (1c COrdoba, así como al sciíor
Afoure, secretario de Arqueología del Semi-
nario Sautuola, (Ic Santaridcr. El dcscubri-
iiiicnto fue dado ;i conocer anipliameiitc cii
tialcs.
D~:,sc.r<~r~citix
1)): I,\S I>INTURAS. -- El
abrigo Carrnclo es h;istaiite profundo, cii rc-