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Señor Juez:
Objeto
amparo, que prevé la ley 16.986, como así el art. 43 de la Constitución Nacional, en
seriamente lesionado mi derecho a participar del mismo, bajo las condiciones que
continuación se expone:
II
Hechos
3º se le concede “ por única vez, a los docentes que en el Anexo 1 figuren con
carácter interino en su cargo, la bonificación de (5) cinco puntos por cada cuatro años o
llame con el objeto de cubrir los cargos titulares en los que se desempeñen”. (sic). Se
ut supra indicada, por medio del recurso pertinente, con fecha , se dicta la
Resolución Nº , por la cual se resuelve que: “Art. 1º.- Amplíese el Anexo I de la
existencia de una convocatoria para el , en las que se explicitarían las condiciones
dirijo a la Junta de Clasificación Docente del Area de Educación Especial, con el fin de
no se ha expedido.
Aires me asigna.
Administrativa Docente en dicho decisorio, que todos estos años que estuve
aspecto personal y profesional, se han visto seriamente lesionados por el concepto que
función de los diez años transcurridos, fueron quemadas actas, listados por lo que no
problema acaecido, por ante el Sr. Secretario de Educación, Lic. , cuya
III
La reclamación administrativa
del Gob. de la Ciudad de Buenos Aires, otra vía no resulta procedente, y ello me obliga
organismo que tiene poder de decisión .” (Derecho Práctico, p. 451, Ed. La Ley, 9ª
ed.)
intentada.
IV
La vía intentada
(Doctrina de Fallos, T. 238, p. 550, To 247, 176, 286, 272 (Excma. Corte), La Ley, t.
89, p. 412.
Petición
bajo las condiciones que legalmente me corresponden y hasta que ello suceda, y se
resuelva sobre el fondo de la cuestión, se decrete la medida de no innovar
VI
dure este proceso, por lo que deberán abstenerse de desarrollar en acto Concursal
para los referidos cargos Docentes Psicopedagogos siendo que su fecha de inicio
VII
Prueba
recursos interpuestos.
de la Secretaría de Educación del Gob. de la Ciudad de Buenos Aires, a fin que remitan
por esa vía o la telegráfica en su caso, la medida de no innovar que se peticiona a V.S.
VIII
Derecho
otro recurso más idóneo para la reparación del caso y en la debida urgencia de la
situación. Lo fundo asimismo en la ley 23.034 (Pacto de San José de Costa Rica) art. 25
—“Toda persona tiene derecho a un recurso sencillo y rápido o a cualquier otro recurso
efectivo ante los Jueces que la ampare contra actos que violen sus derechos
IX
Petitorio
constituido el real.
resolución de V.S. que así lo disponga, con costas. En su caso la suspensión del acto
Será Justicia.
El supuesto ha sido expresamente contemplado por la ley procesal local. En efecto, el artículo 189
CCAyT regula la suspensión de la ejecución o del cumplimiento de hechos, actos o contratos
administrativos, y el art. 178 del mismo cuerpo normativo establece que —salvo disposición legal en
contrario— las medidas cautelares pueden ser solicitadas antes, simultáneamente o después de interpuesta
la demanda.
Las medidas cautelares han sido concebidas como un medio tendiente a impedir que el tiempo que
insume el proceso ilusorio el eventual reconocimiento del derecho cuya protección jurisdiccional se
pretende (arg. art. 177 CCAyT; esta sala, “in re” “Rubiolo Adriana Delia y otros c. G.C.B.A. s/ Amparo”,
expte. nº 7, resolución del 28/12/00; íd., “Yosifides, Ileana c. G.C.B.A s/ Amparo s/ Incid. art. 226
CCAyT —recurso deducido por las codemandadas—”, Expte. nº 45/00).
Para su procedencia, la doctrina procesalista ha exigido tradicionalmente la concurrencia de tres
recaudos, a saber, la verosimilitud del derecho, el peligro en la demora y la contracautela.
Con relación al primero, cabe recordar que la protección cautelar obedece a la necesidad de amparar
un derecho que todavía no es cierto, líquido o consolidado, sino tan solo probable. Es por ello que, por su
naturaleza, las medidas cautelares no requieren la prueba terminante del derecho invocado. Basta su
acreditación “prima facie”, y por ello para disponerlas los magistrados no necesitan fundarse en la
certeza, resultando suficiente que lo hagan en base a la apariencia que presentan los hechos de la causa.
(Chiovenda, Giusepe, “Ensayos de Derecho Procesal Civil”, t. I, p. 54/5; C.S.J.N., Fallos: 250:154;
251:33; 307:1702).
Según se ha señalado con especial referencia a supuestos como el presente, “ no resulta
necesario para disponerlas un conocimiento exhaustivo y profundo de la materia objeto del proceso
principal que a veces ni siquiera puede todavía iniciarse por no estar agotada la vía administrativa, sino
sólo un análisis de mera probabilidad acerca de la existencia del derecho discutido” (Rejtman Farah,
Mario, “impugnación judicial de la actividad administrativa”, p. 167, Ed. La Ley, 2000).
50.832 — CNCiv., sala L, marzo 20-2001. — E., C. M. y otros c. Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires
s/amparo. E.D., 11/6/2001.
Ley 24.568
Art. 8º: “La justicia nacional ordinaria de la Ciudad de Buenos Aires, mantendrá su actual
jurisdicción y competencia continuando a cargo del Poder Judicial de la Nación.
En la órbita de la competencia local, deberá tenerse en cuenta la ley 189, cual es el código
contencioso administrativo y tributario de la C.A.B.A. (Ciudad de Bs.As.) Como así ley nº 402 que trata
del procedimiento ante el Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de Bs. As.
LEY 24.290 — Ley orgánica de la justicia nacional — Incorporación del art. 43.
(Adla, LIV-A)
Citas legales: D.-ley 1285/58 (t.a. al 1/8/93): LIII-C, 2543; ley 14.467: XVIII-A, 94.
Artículo 1º — Incorpórase al dec.-ley 1285/58, ratificado por la ley 14.467 y sus modificatorias, bajo
el número 43, el siguiente artículo:
Art. 43. — Los juzgados nacionales de primera instancia en lo civil de la Capital Federal, conocerán
en todas las cuestiones regidas por las leyes civiles cuyo conocimiento no haya sido expresamente
atribuido a los jueces de otro fuero.
a) En las que sea parte la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires, excepto en las de naturaleza
penal;
b) En las que se reclame indemnización por daños y perjuicios provocados por hechos ilícitos, sin
perjuicio de lo dispuesto en el art. 29 del Código Penal;
c) En las relativas a las relaciones contractuales entre los profesionales y sus clientes o a la responsa -
bilidad civil de aquéllos. A los efectos de esta ley, sólo se considerarán profesionales las actividades
reglamentadas por el Estado.
2.- Es constitucional el art. 8º de la ley 24.588 (Adla, LV-E, 5921) en cuanto reglamenta el
art. 129 de la Constitución Nacional disponiendo que la Justicia Ordinaria de la Ciudad de Buenos Aires
conservaría su jurisdicción y competencia, mientras que a la justicia de la Ciudad Autónoma se le
asignaría las facultades propias de jurisdicción en materia de vecindad, contravencional y de faltas,
contencioso administrativa y tributario local, toda vez que la normativa cuestionada no conculca el
principio de razonabilidad ni evidencia una clara trasgresión al orden constitucional.
El presente juicio versa sobre una materia típicamente civil. Trátase de los supuestos daños y
perjuicios derivados de un hipotético desperfecto de una acera de esta Ciudad, con el cual habrían
tropezado los accionantes en ocasión de cruzar una bocacalle, ocasionándoles las lesiones que invocan
como presupuesto de la acción.
En este sentido y toda vez que el presente juicio versa sobre materia claramente ajena a la
referenciada, cabe concluir que la justicia Nacional Ordinaria mantiene su jurisdicción y competencia
(conf. arts. 2º y 8º, ley cit.; CNCiv., esta sala, r. nº 317.706, del 19/3/2001, con Cita Jurisprudencias; íd.
id., r. nº 317.706 del 19/3/01; id. id., r. nº 321.553 del 14/5/01; id. id., r. nº 322.078, del 18/9/01; íd. id., r.
nº 334.913, de 21/11/01 entre otros precedentes).
Esta solución se corresponde con los lineamientos de la reforma introducida a nuestra Carta Magna
en el año 1994, en resguardo no sólo de la autonomía reservada al Gobierno Comunal, sino, además, a
sostener la vigencia de las facultades no delegadas que por tanto, conserva la Nación.
La Corte Suprema de Justicia de la Nación en autos “Gauna, Juan O.,1997/05/07, La Ley, 1997-C,
517 - La ley, 1997-E, 714- DJ, 1997-2-509, sostuvo que si bien las leyes son inconstitucionales si se
apartan manifiestamente del texto de la Constitución o si consagran una inequidad o irrazonabilidad
manifiesta, tal situación no ocurre con las leyes 24.588 y 24.620 (Adla, LV-E, 5921; LVI-A, 56) toda vez
que, en el marco de lo dispuesto en el art. 129 de la Ley Fundamental, procuran conjurar una situación
excepcional y transitoria, y dar otra solución acorde a las exigencias del proceso de transición iniciado
con la reforma de 1994.
En igual sentido. Entre otros: CNCiv., sala C, “Adobe Systems Inc. y otros c. Comisión Municipal
de la Vivienda”, 2002/05/30, DJ, 2002-3-95, CNCiv., sala C, L. A., L. c. G.C.B.A., 2001/11/08, DJ,
2002-1990.
En sentido contrario. Entre otros: CNCiv., sala B, “Corradini, Raúl A. y otros c. G.C.B.A.”,
2002/07/03, DJ, 2001-3-25 - La Ley, 2002/09/18, p. 13. Doctrina Judicial, año XVIII, Nº 44, 30/10/12.