En aquellas bases con fractura total se procede a fijar las partes involucradas con compuesto de modelar en toda la extensión de la fractura y para mantener estable la unión se asegura con 2 vástagos de madera o metálicos sobre las caras oclusales de los dientes posteriores de ambos segmentos fracturados. Se procede a aislar la base acrílica y se confecciona una llave de yeso con el fin de tener un modelo de trabajo. Una vez fraguado se retiran las partes y se pincela con aislante. Se desgasta en profundidad la zona del rasgo de fractura terminando en bisel para tener así una mayor área de contacto con el acrílico, sin comprender el fondo de la base del acrílico para evitar desajustes posteriores de la prótesis. Se ubican las partes sobre el modelo aislado y se aplica acrílico de autopolimerización fluido sobre la zona desgastada en cantidad suficiente para que los excesos sean eliminados fácilmente. Una vez fraguado el acrílico se lleva a una olla a presión, se hierve por media hora para eliminar el monómero residual, se afina y se pule adecuadamente la zona externa. En prótesis mandibulares se recomienda efectuar un canal en la base acrílica para ubicar un refuerzo (alambre), el cual dará mayor resistencia.
2. REPARACIÓN PERDIDA DE UN DIENTE DE UNA PROTESIS TOTAL O REMOVIBLE
Cuando existe un desprendimiento de uno o más dientes, en los cuales existe un óptimo ajuste con la base protésica, se debe realizar un desgaste retentivo en la pieza artificial y en la base acrílica correspondiente, agregando una vía de escape que permita el escurrimiento del acrílico en su etapa plástica. En estos casos se debe preparar acrílico de autopolimerización. Se coloca acrílico en ambas superficies y se ubica el diente presionando en la misma posición que tenía previo a la fractura, eliminando los restos de acrílico antes de su polimerización. La fractura parcial de una pieza artificial se produce cuando se rompe un fragmento del diente de acrílico dejando el otro unido con la base de la prótesis. En este caso se debe efectuar el desgaste del diente fracturado unido a la base de la prótesis, acomodando así una nueva pieza artificial en posición correcta. 3. REPARACIÓN DE UNA CORONA CERÁMICA Intraoralmente las restauraciones dentales de recubrimientos cerámicos están sometidas además de las fuerzas masticatorias, cambios de temperatura, saliva y variaciones del pH, a posibles traumatismos directos o, sobre todo considerando que las cerámicas son materiales friables, de muy poca resistencia tensil y de elevado módulo de elasticidad. Las reparaciones directas con resinas compuestas de estas desafortunadas eventualidades son una alternativa factible y se contrapone con ventajas a comparación del reemplazo de la restauración en casos específicos. Las resinas compuestas se indican frecuentemente para adhesiones, relleno de cavidades, reparar fracturas en coronas, onlays, puentes y carillas de porcelana fracturada. Es importante, en la región anterior, homologar la dentición natural en color y forma anatómica, algo que la resina compuesta logra fácilmente. Esto se debe a que los materiales de las resinas compuestas disponibles ofrecen una variedad de tonalidades opacas y translúcidas, a que son muy maleables, muy resilientes y capaces de ser modeladas o adelgazadas utilizando tan sólo un chorro de aire. La resina compuesta posee también propiedades beneficiosas que inhiben la caries e incrementan la duración general de las restauraciones. En el pasado el problema fue cómo proporcionar una unión adhesiva adecuada entre la porcelana existente y la nueva resina compuesta. El método preferido para crear esta unión fue macromecánico (por ej. puliendo con chorro de arena con 5mm de dióxido de aluminio), micromecánico (por ej. grabando la porcelana con ácido fluorhídrico al 9%) y aplicando agentes de unión y resinas para una mejor retención química que se traduce químicamente a un sistema de adhesión a porcelana más predecible. Silanizar las restauraciones de porcelana antes de unir los materiales de resina compuesta en forma adhesiva es extremadamente importante debido a la naturaleza de la unión que se crea entre la porcelana y el material reparador de resina compuesta. Esta unión es tanto mecánica como química. Los agentes de unión de silano funcionan parcialmente formando “puentes químicos” entre dos materiales (por ejemplo composite y porcelana) y parcialmente alterando la superficie de la porcelana con la formación de microporosidades. Las microporosidades permiten que los agentes adhesivos se infiltren en la estructura interna de las restauraciones de porcelana para proporcionar adhesión máxima. La longevidad y la fuerza de las uniones creadas dependen del tipo de silano aplicado como agente de unión y del método de aplicación. Bibliografia
- Lostaunau, R. C. H. (2010). Reparación intraoral de restauración cerámica: reporte de