Pan Diario de Julio 2020

“Bienaventurados ustedes, cuando por causa mía los insulten, los
persigan y les levanten toda clase de calumnias. Alégrense y

muéstrense contentos, porque será grande la recompensa
que recibirán en el cielo.” Mateo 5, 11-12
E n el sermón de la montaña Jesucristo nos enseña el camino hacia la felicidad:

las bienaventuranzas (5, 1-12). Ellas son el programa de vida del cristiano, con
ellas el Señor Jesús nos enseña cuáles son las características de los ciudadanos de su
Reino, son un espejo en el cual el hombre se puede ir a mirar y así pueda saber real-
mente quién es y a qué reino pertenece. En esta bienaventuranza que contemplamos
hoy, Jesús nos llama a seguirlo con fortaleza cristiana, a ser fieles a él, aunque nos
cueste. Si sufrimos por Él, seremos felices. ¡Ojo! No se trata de sufrir cualquier cosa,
sino por su causa, es decir, por Jesucristo. Se trata de seguirlo siempre, de portarnos
bien, aunque ello nos cause algún problema o se burlen de nosotros. Seremos felices
si damos la cara por Jesús, si lo preferimos en cualquier circunstancia, si somos fieles
a nuestra fe, si vivimos de acuerdo a la Palabra de Dios.
El camino del pecado es fácil, es ancho. El camino de la virtud es estrecho, es dif í-
cil. Pero es el camino de la felicidad, de la paz, del bien, de la fidelidad y la felicidad
conyugal, de la defensa de la vida, del rechazo al aborto y a la droga. Bien vale la pena
seguir este camino. Ser cristianos aun en un mundo hostil a la religión, en un me-
dio corrompido, ese es el camino seguro, el camino de la felicidad. La persona buena,
correcta, pacífica, fiel a su conyugue; que no sucumbe al soborno ni roba al prójimo
o a la Nación, esa será feliz. Jesús nos anima: “Felices los que escuchan la Palabra de
Dios y la cumplen” (Lc 11, 28). Queridos hermanos: ¡sigamos a Jesucristo! ¡Vivamos
las bienaventuranzas y seremos felices! Mons. Roberto Sipols
MISAL MENSUAL
PARA VIVIR LA LITURGIA DIARIA AÑO XXVII - Nº 320
SAN PABLO
El Misal mensual es editado por: San Pablo Ediciones de Venezuela
CON APROBACIÓN ECLESIÁSTICA Distribución:

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Pan Diario de la Palabra - Julio 2020
Ordinario de la Misa
RITOS INICIALES
S. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

R. Amén.
1.1 SALUDO
S. La gracia de nuestro Señor Jesucristo, el amor del Padre y la comunión
del Espíritu Santo estén con todos ustedes.
R. Y con tu espíritu.
1.2 ACTO PENITENCIAL

S. Hermanos, para celebrar dignamente estos sagrados misterios, reco-
nozcamos nuestros pecados. (o bien)
S. El Señor Jesús, que nos invita a la mesa de la Palabra y de la Eucaristía,
nos llama ahora a la conversión. Reconozcamos, pues, que somos pecadores
e invoquemos con esperanza la misericordia de Dios.
A. Yo confieso ante Dios todopoderoso y ante ustedes, hermanos,
que he pecado mucho de pensamiento, palabra, obra y omisión.
Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa. Por eso ruego a
santa María, siempre Virgen, a los ángeles, a los santos y a uste-
des, hermanos, que intercedan por mí ante Dios, nuestro Señor.
S. Dios todopoderoso tenga misericordia de nosotros, perdone nuestros pe-
cados y nos lleve a la vida eterna.
A. Amén.
S. Tú que eres la plenitud de la verdad y de la gracia: Señor, ten piedad.
R. Señor, ten piedad.
S. Tú que te has hecho pobre para enriquecernos: Cristo, ten piedad.
R. Cristo, ten piedad.
S. Tú que has venido para hacer de nosotros tu pueblo santo: Señor,
ten piedad.
R. Señor, ten piedad.
S. Dios todopoderoso…
1.3 HIMNO
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a los hombres que
ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos,
te adoramos, te glorificamos, te damos gracias, Señor Dios, Rey
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celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor, Hijo único, Jesucristo;

Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el
pecado del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pe-
cado del mundo, atiende nuestra súplica; tú que estás sentado a
la derecha del Padre, ten piedad de nosotros; porque sólo tú eres
Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo, Jesucristo, con el Espíritu
Santo en la gloria de Dios Padre. Amén.
1.4 ORACIÓN COLECTA propia del día
LITURGIA DE LA PALABRA
2.1 LECTURA(S) propia(s) del día

2.2 EVANGELIO propio del día
2.3 CREDO Símbolo niceno-constantinopolitano
Creo en un solo Dios, Padre todopoderoso, Creador del cielo
y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un solo
Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios, nacido del Padre antes de
todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios
verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del
Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres, y
por nuestra salvación bajó del cielo, y por obra del Espíritu Santo
se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra
causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato, padeció y fue
sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió
al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá
con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin.
Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede
del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma
adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia,
que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un solo
bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección
de los muertos y la vida del mundo futuro. Amén.
Credo de los Apóstoles
Creo en Dios, Padre todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra.
Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que fue concebido
por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de santa María Virgen,
padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y
sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de en-
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tre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de

Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos
y muertos. Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la
comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección
de la carne y la vida eterna. Amén.
LITURGIA EUCARÍSTICA
3.1 PREPARACIÓN DE LAS OFRENDAS

S. Bendito seas, Señor, Dios del universo, por este pan, fruto de la tierra
y del trabajo del hombre, que recibimos de tu generosidad y ahora te
presentamos; él será para nosotros pan de vida.
R. Bendito seas por siempre, Señor.
S. Bendito seas, Señor, Dios del universo, por este vino, fruto de la vid
y del trabajo del hombre, que recibimos de tu generosidad y ahora te
presentamos; él será para nosotros bebida de salvación.
R. Bendito seas por siempre, Señor.
S. Oren, hermanos, para que este sacrificio, mío y de ustedes, sea agra-
dable a Dios, Padre todopoderoso.
R. El Señor reciba de tus manos este sacrificio, para alabanza y gloria de
su nombre, para nuestro bien y el de toda su santa Iglesia.
3.2 ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS propia del día
3.3 PLEGARIA EUCARÍSTICA

Prefacio: X para los Domingos del Tiempo Ordinario
S. El Señor esté con ustedes.
S. Levantemos el corazón.
R. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
S. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
R. Es justo y necesario.
S. En verdad es justo bendecirte y darte gracias, Padre santo, fuente de la
verdad y de la vida, porque nos has convocado en tu casa en este día de
fiesta. Hoy, tu familia, reunida en la escucha de tu Palabra, y en la comu-
nión del pan único y partido, celebra el memorial del Señor resucitado,
anhelando el domingo sin ocaso en el que la humanidad entera entrará en
tu descanso. Entonces podremos contemplar tu rostro y alabaremos por
4
siempre tu misericordia. Con esta gozosa esperanza, y unidos a los ángeles

y a los santos, cantamos unánimes el himno de tu gloria:
A. Santo, Santo, Santo…
Prefacio: II DE SANTA MARÍA VIRGEN

S. En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación proclamar
que eres admirable en la perfección de todos tus santos, y de modo singu-
lar en la perfección de la Virgen María. Por eso, al celebrar hoy, queremos
exaltar tu benevolencia inspirados en su propio cántico. Pues en verdad,
has hecho maravillas por toda la tierra, y prolongaste tu misericordia de
generación en generación, cuando, complacido en la humildad de tu sierva,
nos diste por su medio al autor de la salvación, Jesucristo, Hijo yuto y
Señor nuestro. Por él, los ángeles y los arcángeles te adoran eternamente,
gozosos en tu presencia. Permítenos unirnos a sus voces cantando jubi-
losos tu alabanza.
Prefacio: I DE LOS SANTOS

S. En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias
siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno,
por Cristo, Señor nuestro. Porque tu gloria resplandece en la asamblea
de los santos, ya que, al coronar sus méritos, coronas tus propios dones.
Con su vida, nos proporcionas ejemplo; ayuda, con su intercesión, y por
la comunión con ellos, nos haces participar de sus bienes, para que, alen-
tados por testigos tan insignes, lleguemos victoriosos al fin de la carrera
y alcancemos con ellos la corona inmortal de la gloria. Por Cristo, Señor
nuestro. Por eso, con los ángeles y los arcángeles, y con la multitud de los
santos, te cantamos un himno de alabanza diciendo sin cesar.
5
3.4 PLEGARIA EUCARÍSTICA II

S. En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias,
Padre santo, siempre y en todo lugar, por Jesucristo, tu Hijo amado. Por
él, que es tu Palabra, hiciste todas las cosas; tú nos lo enviaste para que,
hecho hombre por obra del Espíritu Santo y nacido de María, la Virgen,
fuera nuestro Salvador y Redentor. Él, en cumplimiento de tu voluntad,
para destruir la muerte y manifestar la resurrección, extendió sus brazos
en la cruz, y así adquirió para ti un pueblo santo. Por eso, con los ángeles
y los santos, proclamamos tu gloria, diciendo:
S. Santo eres en verdad, Señor, fuente de toda santidad; por eso te
pedimos que santifiques estos dones con la efusión de tu Espíritu, de
manera que se conviertan para nosotros en el Cuerpo y  la Sangre de
Jesucristo, nuestro Señor. El cual, cuando iba a ser entregado a su Pasión,
voluntariamente aceptada, tomó pan, dándote gracias, lo partió y lo dio
a sus discípulos, diciendo: Tomen y coman todos de él, porque esto
es mi Cuerpo, que será entregado por ustedes.
Del mismo modo, acabada la cena, tomó el cáliz, y, dándote gracias de
nuevo, lo pasó a sus discípulos, diciendo: Tomen y beban todos de él,
porque éste es el cáliz de mi Sangre, Sangre de la alianza nueva
y eterna, que será derramada por ustedes y por muchos para el
perdón de los pecados. Hagan esto en conmemoración mía.
R. Éste es el Misterio de la fe. / Éste es el Sacramento de nuestra fe.
R. Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección. ¡Ven,
Señor Jesús!
R. Éste es el Misterio de la fe. Cristo nos redimió.
R. Cada vez que comemos de este pan y bebemos de este cáliz,
anunciamos tu muerte, Señor, hasta que vuelvas.
R. Éste es el Misterio de la fe. Cristo se entregó por nosotros.
R. Salvador del mundo, sálvanos, tú que nos has liberado por
tu cruz y resurrección.
CC Así, pues, Padre, al celebrar ahora el memorial de la muerte y resu-
rrección de tu Hijo, te ofrecemos el pan de vida y el cáliz de salvación,
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y te damos gracias porque nos haces dignos de servirte en tu presencia.

Te pedimos humildemente que el Espíritu Santo congregue en la unidad a
cuantos participamos del Cuerpo y la Sangre de Cristo.
C1 Acuérdate, Señor, de tu Iglesia extendida por toda la tierra;
En los domingos
Acuérdate, Señor, de tu Iglesia extendida por toda la tierra y reunida
aquí en el domingo, día en que Cristo ha vencido a la muerte y nos ha
hecho partícipes de su vida inmortal;
y con el papa Francisco, con nuestro Obispo N., y todos los pastores que
cuidan de tu pueblo, llévala a su perfección por la caridad.
En las Misas por los difuntos se puede añadir

Recuerda a tu hijo (hija) N., a quien llamaste (hoy) de este mundo a
tu presencia; concédele que, así como ha compartido ya la muerte de
Jesucristo, comparta también con él la gloria de la resurrección.
C2 Acuérdate también de nuestros hermanos que se durmieron en la

esperanza de la resurrección, y de todos los que han muerto en tu mi-
sericordia; admítelos a contemplar la luz de tu rostro. Ten misericordia
de todos nosotros, y así, con María, la Virgen Madre de Dios, su esposo
san José, los apóstoles y cuantos vivieron en tu amistad a través de los
tiempos, merezcamos, por tu Hijo Jesucristo, compartir la vida eterna y
cantar tus alabanzas.
CP o CC Por Cristo, con él y en él, a ti, Dios Padre omnipotente, en la
unidad del Espíritu Santo, todo honor y toda gloria por los siglos de los
siglos.
A. Amén.
RITO DE COMUNIÓN
S. Fieles a la recomendación del Salvador y siguiendo su divina enseñanza,

nos atrevemos a decir:
A. Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu nombre;
venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad en la tierra como
7
en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras

ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal.
S. Líbranos de todos los males, Señor, y concédenos la paz en nuestros
días, para que, ayudados por tu misericordia, vivamos siempre libres de
pecado y protegidos de toda perturbación, mientras esperamos la gloriosa
venida de nuestro Salvador Jesucristo.
R. Tuyo es el reino, tuyo el poder y la gloria, por siempre, Señor.
S. Señor Jesucristo, que dijiste a tus apóstoles: “La paz les dejo, mi paz
les doy”, no tengas en cuenta nuestros pecados, sino la fe de tu Iglesia y,
conforme a tu palabra, concédele la paz y la unidad. Tú que vives y reinas
por los siglos de los siglos.
R. Amén.
S. La paz del Señor esté siempre con ustedes.
S. Dense fraternalmente la paz.
Según la costumbre del lugar, se dan la paz.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, danos la paz.
S. Éste es el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo. Dichosos
los invitados a la cena del Señor.
A. Señor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya
bastará para sanarme.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN propia del día
RITOS DE CONCLUSIÓN


La bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo, des-
cienda sobre ustedes.
R. Amén.
S. Pueden ir en paz. / La alegría del Señor sea nuestra fuerza. Pueden ir en paz.
R. Demos gracias a Dios.
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Miércoles 1
XIII SEMANA DEL TO

FERIA - VE MIÉRCOLES 1
DIOS LLAMA A LA VIDA Y LA JUSTICIA

E n la sociedad del siglo VIII a.C. del pueblo judío, la vida se gastaba entre
el ruido festivo que dispersa, aturde y tapa toda maldad organizada y
legalmente garantizada, y la injusticia que ya no congrega a todos por igual,
sino que justifica las malas acciones de la clase gobernante. El profeta Amós
desenmascara el falso culto que se da en el templo, denunciando que las so-
lemnidades, que los gobernantes con la complicidad de la clase sacerdotal,
creen son verdaderas fiestas en honor del Señor, son solemnidades bañadas
de maldad, injusticia y opresión en contra de los pobres y campesinos del
entorno. Frente a esta aberración, el Señor lanza su pliego de peticiones y
reclamos: buscar y amar el bien, aborrecer el mal, que se implante y fluya la
justicia como torrente inagotable.
Así como Amós no tolera la injusticia, Jesús no tolera la maldad que se po-
sesiona de las personas, llamadas a la libertad desde el día de la creación. Con
la presencia de Jesús el mal reconoce que “su tiempo” está llegando a su final,
que será enfrentado y finalmente destruido. Mateo indica que el mal que se
apodera de las personas lo conduce inevitablemente a la muerte, pero tam-
bién deja claro que Jesús tiene poder sobre el mal, y libera al ser humano de
su dominio, devolviéndole la capacidad y dignidad de hijo de Dios. Lo que se
interpone entre Dios y el ser humano: la injusticia, la mentira, la maldad, la
muerte… es destruido por Jesús con la fuerza del Espíritu divino. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA SAL 46, 2 PRIMERA LECTURA

Pueblos todos, aplaudan y aclamen Aleja de mí el ruido de tus
canciones y que tu justicia fluya
a Dios con gritos de júbilo. como un torrente inagotable.
ORACIÓN COLECTA Libro del profeta Amós
5, 14-15. 21-24
Señor Dios, que mediante la gra-
cia de la adopción filial quisiste Esto dice el Señor: “Busquen el bien,
no el mal, y vivirán, y así estará con
que fuéramos hijos de la luz, con-
ustedes, como ustedes mismos di-
cédenos que no nos dejemos en- cen, el Señor, Dios de los ejércitos.
volver en las tinieblas del error, Aborrezcan el mal y amen el bien,
sino que permanezcamos siem- implanten la justicia en los tribuna-
pre vigilantes en el esplendor de les; quizá entonces el Señor, Dios
la verdad. Por Jesucristo nuestro de los ejércitos, tenga piedad de los
Señor. sobrevivientes de José.
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Yo desprecio y detesto las fiestas de • Pues todas las fieras de la selva

ustedes, no me agradan sus solem- son mías y hay miles de bestias en
nidades. Aunque me ofrezcan holo- mis montes. Conozco todos los
caustos, no aceptaré sus ofrendas ni pájaros del cielo y es mío cuanto
miraré con agrado sus sacrificios de se mueve en los campos. /R.
novillos gordos. • Si yo estuviera hambriento,
Alejen de mí el ruido de sus cancio- nunca iría a decírtelo a ti, pues
nes; no quiero escuchar la música todo es mío. ¿O acaso yo como
de sus arpas. Que fluya la justicia carne de toros y bebo sangre de
como el agua y la bondad como un cabritos? /R
torrente inagotable”. • ¿Por qué citas mis preceptos y
Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor. hablas a toda hora de mi pac-
SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 49 to, tú, que detestas la obedien-
R. Dios salva al que cumple su
cia y echas en saco roto mis
voluntad. mandatos?”/R.
• Israel, pueblo mío, escucha aten- ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO SANT 1, 18
to; en contra tuya, yo, tu Dios, R. Aleluya, aleluya.
declaro: “No voy a reclamarte sa-
crificios, pues siempre están ante Por su propia voluntad el Padre nos
mí tus holocaustos. Pero ya no engendró por medio del Evangelio,
aceptaré becerros de tu casa ni para que fuéramos, en cierto modo,
cabritos de tus rebaños. /R. primicias de sus creaturas. /R.
X
E
EVANGELIO (Mt 8, 28-34)
Del santo Evangelio según san Mateo
A. Gloria a ti, Señor.
n aquel tiempo, cuando Jesús desembarcó en la otra orilla del
lago, en tierra de los gadarenos, dos endemoniados salieron de
entre los sepulcros y fueron a su encuentro. Eran tan feroces, que na-
die se atrevía a pasar por aquel camino. Los endemoniados le gritaron
a Jesús: “¿Qué quieres de nosotros, Hijo de Dios? ¿Acaso has venido
hasta aquí para atormentarnos antes del tiempo señalado?”
No lejos de ahí había una numerosa piara de cerdos que estaban co-
miendo. Los demonios le suplicaron a Jesús: “Si vienes a echarnos fue-
ra, mándanos entrar en esos cerdos”. Él les respondió: “Está bien”.
Entonces los demonios salieron de los hombres, se metieron en los
cerdos y toda la piara se precipitó en el lago por un despeñadero y los
cerdos se ahogaron.
Los que cuidaban los cerdos huyeron hacia la ciudad a dar parte de
todos aquellos acontecimientos y de lo sucedido a los endemoniados.
10
Jueves 2
Entonces salió toda la gente de la ciudad al encuentro de Jesús, y al

verlo, le suplicaron que se fuera de su territorio.
Palabra del Señor. A. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Señor Dios, que bondadosamente Que la víctima divina que te hemos
realizas el fruto de tus sacramen- ofrecido y que acabamos de recibir,
tos, concédenos que seamos capa- nos vivifique, Señor, para que, uni-
ces de servirte como corresponde a dos a ti con perpetuo amor, demos
tan santos misterios. Por Jesucristo, frutos que permanezcan para siem-
nuestro Señor. pre. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN CFR. SAL 102, 1 PALABRA de Vida

Bendice, alma mía, al Señor; que todo “¿Qué quieres de nosotros, Hijo de Dios?"
mi ser bendiga su santo nombre.
Mateo 8, 29
XIII SEMANA DEL TO

FERIA - VE JUEVES 2
VE Y PROFETIZA
H oy la liturgia nos recuerda una de nuestra responsabilidad que adqui-
rimos con nuestro bautismo. Se hace referencia al ejercicio de nuestro
profetismo. En la primera lectura vemos como Amos, el profeta, no titubea ante
la presión de la autoridad de su tiempo, pues es consciente que está cumpliendo
la voluntad de Dios. Por eso, ante la amenaza del rey responde con firmeza “…
el Señor me sacó de junto al rebaño y me dijo: ve y profetiza a mi pueblo Israel”.
En Jesús vemos como ejerce a la perfección esta responsabilidad, pues Él, con
palabras y obras, releva el rostro misericordioso del Padre. Como se puede ver
en este breve pasaje del Evangelio. Jesús llega a su ciudad, Cafarnaúm y le pre-
sentan a un paralítico, sin duda, al verlo y ver la fe de aquellos hombres se com-
padece de él y lo cura.
Jesús pasó haciendo el bien, curando toda enfermedad y dolencia. Se compa-
deció de los pobres y oprimidos, les dio esperanza y nueva vida. Los reintegró a
la sociedad y a su vida ordinaria. A la luz de este fragmento evangélico se puede
analizar nuestra vida y descubrir qué nos paraliza, qué impide realizarnos como
personas y alcanzar la felicidad ,y una vez que lo descubramos, pedirle a Jesús
que se compadezca de nosotros y nos cure de esa parálisis. Él amorosamente
nos dirá “No temas, ten confianza… tus pecados te son perdonados, toma tu
camilla y vete a tu casa. P. Miguel Moreno, ssp
11
ANTÍFONA DE ENTRADA SAL 46, 2 contra la casa de Israel. No vatici-

Pueblos todos, aplaudan y aclamen nes contra la casa de Isaac’. Pues
a Dios con gritos de júbilo. bien, esto dice el Señor: ‘Tu mujer
será deshonrada en plena calle;
ORACIÓN COLECTA
tus hijos e hijas morirán a espada;
Señor Dios, que mediante la gracia tu tierra se la repartirán los ven-
de la adopción filial quisiste que cedores; tú mismo morirás en tie-
fuéramos hijos de la luz, concéde-
rra pagana e Israel será desterrado
nos que no nos dejemos envolver
lejos de su país’”.
en las tinieblas del error, sino que
Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.
permanezcamos siempre vigilantes
en el esplendor de la verdad. Por Je- SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 18
sucristo, nuestro Señor.
R. La voluntad de Dios es santa.
PRIMERA LECTURA • La ley del Señor es perfecta del
Ve y profetiza a mi pueblo. todo y reconforta el alma; inmu-
Del libro del profeta Amós 7, 10-17 tables son las palabras del Señor
En aquel tiempo, Amasías, sacer- y hacen sabio al sencillo. /R.
dote de Betel, le envió este men- • En los mandamientos de Dios
saje a Jeroboam, rey de Israel: hay rectitud y alegría para el
“Amós está conspirando contra corazón; son luz los preceptos
ti en Israel y el país ya no puede del Señor para alumbrar el ca-
soportar sus palabras, pues anda mino. /R.
diciendo que Jeroboam morirá a • La voluntad de Dios es santa y
espada e Israel saldrá de su país al para siempre estable; los man-
destierro”. damientos del Señor son verda-
Amasías le dijo a Amós: “Vete de deros y enteramente justos. /R.
aquí, visionario, y huye al país de • Más deseables que el oro y las
Judá; gánate allá el pan, profeti- piedras preciosas las normas
zando; pero no vuelvas a profeti- del Señor, y más dulces que la
zar en Betel, porque es santuario miel de un panal que gotea. /R.
del rey y templo del reino”.
Respondió Amós: “Yo no soy pro- ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO 2CO 5, 19
feta ni hijo de profeta, sino pastor
R. Aleluya, aleluya.
y cultivador de higos. El Señor me
sacó de junto al rebaño y me dijo: Dios ha reconciliado consigo al
‘Ve y profetiza a mi pueblo, Israel’. mundo, por medio de Cristo, y nos
Y ahora escucha tú la palabra del ha encomendado a nosotros el men-
Señor. Tú me dices: 'No profetices saje de la reconciliación. /R.
12
Jueves 2
X
E
n aquel tiempo, Jesús subió de nuevo a la barca, pasó a la otra
orilla del lago y llegó a Cafarnaúm, su ciudad.
En esto, trajeron a donde él estaba a un paralítico postrado en una
camilla. Viendo Jesús la fe de aquellos hombres, le dijo al paralítico:
“Ten confianza, hijo. Se te perdonan tus pecados”.
Al oír esto, algunos escribas pensaron: “Este hombre está blasfe-
mando”. Pero Jesús, conociendo sus pensamientos, les dijo: “¿Por
qué piensan mal en sus corazones? ¿Qué es más fácil: decir ‘Se te
perdonan tus pecados’, o decir ‘Levántate y anda’? Pues para que
sepan que el Hijo del hombre tiene poder en la tierra para perdonar
los pecados, —le dijo entonces al paralítico—: Levántate, toma tu
camilla y vete a tu casa”.
Él se levantó y se fue a su casa. Al ver esto, la gente se llenó de
temor y glorificó a Dios, que había dado tanto poder a los hombres.

Señor, Dios, que bondadosamente Que la víctima divina que te hemos
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN CFR. SAL 102, 1 El profeta es un regalo de Dios a su pue-

Bendice, alma mía, al Señor; que todo blo. Él es el instrumento por medio del cual
Dios se comunica con su pueblo.
mi ser bendiga su santo nombre.
Con frecuencia los
? profetas son incom-
prendidos y sufren
persecución porque
su palabra es moles-
Es el que habla en voz de Dios, es decir, el
ta, ya que denun-
cian el pecado y
que comunica el mensaje de Dios. Lo que cons-
motivan a la
tituye al profeta es su vocación (Is 6; Jr 1; Am
conversión.
7). Dios toma la iniciativa y lo llena con su Es-
píritu, convirtiéndose en un hombre diferente,
capaz de cumplir su misión.
13
3 VIERNES SANTO TOMÁS, APÓSTOL

FIESTA - RO
FIRMEMENTE CIMENTADOS EN LOS APÓSTOLES

H oy es un gran día, volvemos a los orígenes de la fe que profesa con glo-
ria la Iglesia en su Credo, la fe apostólica. El autor de Efesios usa una palabra
que nos ayuda a comprender que significa ser edificados sobre el “cimiento”
de los apóstoles. Cimiento es la piedra de base de una casa, torre o ciudad,
y, además, indica, en sentido figurado, el fundamento de la Iglesia, de su
doctrina, que es Cristo (1Co 3, 11), los apóstoles y sus sucesores. Es decir,
tenemos una base firme, sólida, que es Cristo, y que se extiende a los após-
toles. Pero, ¿qué se espera de un cimiento? Que sea resistente a la presión a
la que va a ser sometido, que se acomode a posibles movimientos de tierra,
que soporte la presión del terreno mismo y del agua en caso de que los haya.
Ahora bien, Pablo asegura que hemos sido edificados sobre el sólido ci-
miento de los apóstoles que, como Tomás en el Evangelio según san Juan,
hacen profesión de fe en la persona de Jesús, reconociéndolo como “Señor
y Dios”. La apostolicidad, según el Catecismo de la Iglesia, se entiende como
la “acción” que, edificada sobre el fundamento de los apóstoles, permanece,
guarda y transmite la enseñanza y las sanas palabras oídas por ellos, y que
sigue siendo enseñada, santificada y dirigida por la Iglesia hasta la vuelta de
Cristo, gracias a la sucesión apostólica (Cfr. CEC 857). Ellos recibieron el
encargo de comunicar el Evangelio, el mismo que se nos ha confiado a todos
desde el día de nuestro bautismo. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. SAL 117, 28. 21 quien él mismo reconoció como
Tú eres mi Dios, y yo confiaré en ti, Señor, Jesucristo, tu Hijo. Él, que
tú eres mi Dios, te alabaré y te daré vive y reina contigo en la unidad del
gracias; pondré en ti mi confianza, Espíritu Santo y es Dios por los si-
porque tú eres mi salvador. glos de los siglos.
Se dice Gloria. PRIMERA LECTURA

Ustedes han sido edificados sobre
ORACIÓN COLECTA el cimiento de los apóstoles.
Concédenos, Dios todopodero- De la Carta del apóstol san
so, alegrarnos por la festividad Pablo a los efesios 2, 19-22
del apóstol santo Tomás, para que Hermanos: Ya no son ustedes
siempre nos ayude con su protec- extranjeros ni advenedizos; son
ción y para que, creyendo, tenga- conciudadanos de los santos y per-
mos vida en el nombre de aquel a tenecen a la familia de Dios, porque
14
Viernes 3
han sido edificados sobre el cimien- • Que alaben al Señor todas las na-
to de los apóstoles y de los profetas, ciones, que lo aclamen todos los
siendo Cristo Jesús la piedra angular. pueblos. /R.
Sobre Cristo, todo el edificio se va • Porque grande es su amor hacia
levantando bien estructurado, para nosotros y su fidelidad dura por
formar el templo santo en el Señor, siempre. /R.
y unidos a él también ustedes se van ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO CFR. JN 20, 29
incorporando al edificio, por medio R. Aleluya, aleluya.
del Espíritu Santo, para ser morada
de Dios. Tomás, tú crees porque me has vis-
to, dice el Señor; dichosos los que
creen sin haberme visto. /R.
SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 116
Mi Reflexión:
R. Vayan por todo el mundo y
prediquen el Evangelio.
X
T
EVANGELIO (Jn 20, 24-29)
Del santo Evangelio según san Juan
omás, uno de los Doce, a quien llamaban el Gemelo, no esta-
ba con ellos cuando vino Jesús, y los otros discípulos le decían:
“Hemos visto al Señor”. Pero él les contestó: “Si no veo en sus manos la
señal de los clavos y si no meto mi dedo en los agujeros de los clavos y
no meto mi mano en su costado, no creeré”.
Ocho días después, estaban reunidos los discípulos a puerta cerrada
y Tomás estaba con ellos. Jesús se presentó de nuevo en medio de ellos
y les dijo: “La paz esté con ustedes”. Luego le dijo a Tomás: “Aquí están
mis manos; acerca tu dedo. Trae acá tu mano; métela en mi costado y
no sigas dudando, sino cree”. Tomás le respondió: “¡Señor mío y Dios
mío!” Jesús añadió: “Tú crees porque me has visto; dichosos los que
creen sin haber visto”. // Palabra del Señor. A. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS dones que de ti hemos recibido. Por

Al conmemorar la confesión de fe Jesucristo, nuestro Señor.
del apóstol santo Tomás, te ofrece-
mos, Señor, este sacrificio de ala- ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN CFR. JN 20, 27
banza, para darte así el culto que Acerca tu mano, toca los agujeros
mereces, y te pedimos humilde- que dejaron los clavos y no seas in-
mente que cuides en nosotros los crédulo, sino creyente.
15
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Dios nuestro, en este sacramento PALABRA de Vida
hemos recibido verdaderamente el
Cuerpo de tu Unigénito; concédenos “Tomás le respondió: “¡Señor mío y
que lo reconozcamos por la fe como Dios mío!” Jesús añadió: “Tú crees
Dios y Señor nuestro, y también lo porque me has visto; dichosos los
confesemos con las obras y con la que creen sin haber visto”.
vida, a ejemplo del apóstol Tomás.
Por Jesucristo, nuestro Señor. Juan 20, 28-29
4 SÁBADO FERIA o bien SANTA MARÍA

EN SÁBADO, ML - VE o BL
DIOS ACTÚA RENOVÁNDOLO TODO
L os textos de Amós y de Mateo anuncian buenas noticias, las situacio-

nes han cambiado o van a cambiar radicalmente, aun cuando falte algo
de tiempo. Detengámonos en la expresión-respuesta de Jesús a los discípu-
los de Juan que le cuestionan sobre el ayuno: ¿cómo pueden llevar luto los
amigos del esposo, mientras él está con ellos? En el texto griego de Mateo
9, 15 habría que leer así: “¿Acaso pueden los hijos del tálamo nupcial estar
de duelo durante el tiempo que el novio está con ellos?” ¿Qué significa esa
frase? Se trata de los asistentes del novio durante el tiempo de las nupcias,
que por lo general tardaba cerca de una semana. Son amigos del novio, cu-
ya responsabilidad era asegurar que no faltara nada durante el tiempo que
dure la celebración nupcial. Ellos durante ese tiempo no podían estar sino
alegres, festivos, el novio estaba con ellos.
Con esta metáfora, Jesús quiere dar a entender que el ayuno, la privación
de la comida y de la fiesta, está fuera de lugar ahora que en Él, la salvación
se ha hecho presente en medio de sus discípulos. Ha pasado el tiempo de
la espera mesiánica, Él es el Mesías y está en medio de su comunidad. Las
cosas han cambiado, ya no hay que hacer remiendos, ni echar vino nuevo en
odres viejos, la novedad se respira por doquier. Es la misma idea que trans-
mite Amós, pues la situación cambiará y todo será abundante, también la
Palabra de Dios, que ayer escuchábamos, iba a desaparecer. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA SAL 46, 2 ORACIÓN COLECTA

Pueblos todos, aplaudan y aclamen Señor Dios, que mediante la gracia
a Dios con gritos de júbilo de la adopción filial quisiste que
16
Sábado 4
fuéramos hijos de la luz, concéde- y beberán de su vino, cultivarán

nos que no nos dejemos envolver huertos y comerán de sus frutos.
en las tinieblas del error, sino que Los plantaré en su suelo y ya no se-
permanezcamos siempre vigilantes rán arrancados de la tierra que yo
en el esplendor de la verdad. Por les di”, dice el Señor, tu Dios.
nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, … Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.
PRIMERA LECTURA SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 84

Haré volver a los cautivos de R. Escucharé las palabras del Señor.
Israel y los plantaré en su suelo.
• Escucharé las palabras del Señor,
Del libro del profeta Amós 9, 11-15 palabras de paz para su pueblo
Esto dice el Señor: “Aquel día reno- santo y para los que se convier-
varé la casa de David convertida en ten de corazón. /R.
ruinas, taparé sus brechas, levantaré • La misericordia y la verdad se en-
sus muros y la reconstruiré como contraron, la justicia y la paz se be-
era en otros tiempos, para que en- saron, la fidelidad brotó en la tierra
tre en posesión de lo que queda de y la justicia vino del cielo. /R.
Edom y de todas las naciones donde • Cuando el Señor nos muestre su
se invocó mi nombre”. Esto dice el bondad, nuestra tierra producirá
Señor y él se encargará de cumplirlo. su fruto. La justicia le abrirá ca-
“Días vendrán, dice el Señor, cuan- mino al Señor e irá siguiendo sus
do el que ara alcanzará al segador pisadas. /R.
y el que pisa las uvas, al sembra-
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO JN 10, 27
dor; de los montes brotará vino y
correrá por las colinas. Entonces R. Aleluya, aleluya.
haré volver a los cautivos de Israel: Mis ovejas escuchan mi voz, dice
reconstruirán las ciudades destrui- el Señor; yo las conozco y ellas me
das y las habitarán, plantarán viñas siguen. /R.
X
E
n aquel tiempo, los discípulos de Juan fueron a ver a Jesús y le
preguntaron: “¿Por qué tus discípulos no ayunan, mientras noso-
tros y los fariseos sí ayunamos?” Jesús les respondió: “¿Cómo pueden
llevar luto los amigos del esposo, mientras él está con ellos? Pero ya
vendrán días en que les quitarán al esposo, y entonces sí ayunarán.
Nadie remienda un vestido viejo con un parche de tela nueva, porque
el remiendo nuevo encoge, rompe la tela vieja y así se hace luego más
17
grande la rotura. Nadie echa el vino nuevo en odres viejos, porque los
odres se rasgan, se tira el vino y se echan a perder los odres. El vino
nuevo se echa en odres nuevos y así las dos cosas se conservan”.

Señor Dios, que bondadosamente Que la víctima divina que te hemos
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN CFR. SAL 102, 1
Es importante recordar
Bendice, alma mía, al Señor; que todo 1. ¿Quién es la Virgen María?
mi ser bendiga su santo nombre. La Virgen María es la Doncella escogida por
Dios para ser Madre de Nuestro Señor Jesu-
cristo y Madre nuestra.
2. ¿Qué significa su nombre?
El nombre de María, significa "La elegida por Dios" provie-
ne del hebreo (Miryam) que significa "Excelsa".
Hay dos razones por las que con-

sagramos el sábado a María:
1. Estrella de la mañana: Cristo es llamado el Sol de Justicia (Cfr. Lc 1, 78) o Lucero de

la mañana (Ap 22, 16). Por eso, a María, poéticamente se le ha llamado “La estrella de
la mañana”. Esto porque María anuncia a Cristo con su Encarnación, lo mismo que la
estrella de la mañana anuncia la llegada del Sol. Dicho esto, dado que el domingo es el
día consagrado al Señor (dies domini), el sábado se convierte en el día que prepara la
llegada del domingo, así como María prepara la llegada de Jesús.
2. La piedad: Así se conoce a una famosa obra del artista italiano Miguel Ángel, en donde
vemos a María con su Hijo Jesús en sus piernas, muerto. Le contempla, sufre ese dolor.
Dicha obra nos quiere transportar a aquel sábado santo, en donde, un día después de
que crucificaron a Cristo, María está en silencio, contemplando la muerte de su Hijo.
Cristo fue crucificado un viernes, María sufre en silencio un sábado, ese día, todos los
cristianos le acompañamos en su dolor, nos unimos a su sufrimiento.
Estos son los dos argumentos por los que a María le dedicamos el sábado, porque que-
remos acompañarle en su dolor (La Piedad), y además queremos que nos prepare a la
llegada de su Hijo. De hecho, eso es lo que siempre hace María: llevarnos a Jesús (Cfr.
Jn 2, 5).
18
Domingo 5
SALTERIO:
SEMANA II - VE XIV DOMINGO DEL TO /A 5
INSTAURAR EL REINO DE DIOS

ES TAREA DE TODOS LOS CRISTIANOS
L a primera lectura nos expone un fragmento que contiene la respuesta
de Dios a la situación de angustia que afecta a su pueblo por el some-
timiento de una potencia extranjera. Llama la atención el contraste entre
la modestia y hasta fragilidad que muestra la presentación del Salvador de
Dios y las imágenes con las que describe a los poderes y las fuerzas que se le
oponen, por lo demás muy superiores. Aun así, el Salvador de Dios vencerá
al mal y sus manifestaciones.
La contraposición "carne – espíritu" requiere por si sola una catequesis.
Nos limitamos a decir que en la teología paulina la "carne" representa la
condición del hombre que no ha sido redimido por la sangre de Cristo, el
Cordero que quita el pecado del mundo, por lo tanto, la carne se entiende
como aquel en quien el espíritu del mal y del pecado lo tienen esclavizado.
Por su parte, el "espíritu" hace alusión a la condición humana del que ha sido
alcanzado por la gracia de Dios. Éste, conducido por el Espíritu Santo, está
capacitado para vencer las obras del mal, primero en sí mismo y luego en la
sociedad. Así pues, el que nace del Espíritu, vive según este mismo Espíritu.
En el Evangelio encontramos otro contraste: el que tiene lugar entre los
"pequeños y sencillos" que acogen el Reino de Dios y los de "corazón sober-
bio" que lo rechazan. Jesús irrumpe en júbilo porque sus discípulos, aco-
giendo el reino, podrán pasar de las "obras muertas" a las "obras de la luz".
Los corazones soberbios, en cambio, se encierran en sí mismos y esto les
impide descubrir la presencia del reino que está actuando en el mundo a
través de las obras modestas de los discípulos y servidores de Jesucristo.
Son los explotadores de este mundo, incapaces de solidaridad y auténtica
fraternidad.
La comunidad cristiana debe permanecer atenta a la lucha que se está con-
tinuamente librando entre las "obras de la carne" y las del "espíritu", tanto
en la sociedad como en el seno de las comunidades eclesiales y en cada
cristiano, y aprender del Señor que es "manso y humilde". En este sentido,
es tarea nuestra la continua vigilancia sobre nuestro proceder y la forma
en que vivimos la Palabra de Dios, pues como vemos, ser constructores del
reino de Dios implica todo un estilo de vida
P. Yorban Figueroa, Operario Diocesano
19
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. SAL 47, 10-11 • Dios y rey mío, yo te alabaré,
Meditamos, Señor, los dones de tu bendeciré tu nombre siempre y
amor, en medio de tu templo. Tu para siempre. Un día tras otro
alabanza llega hasta los confines de bendeciré tu nombre y no cesará
la tierra como tu fama. Tu diestra mi boca de alabarte. /R.
está llena de justicia. • El Señor es compasivo y mise-
ricordioso, lento para enojarse
ORACIÓN COLECTA
y generoso para perdonar. Bue-
Señor Dios, que por medio de la hu- no es el Señor para con todos y
millación de tu Hijo reconstruiste el su amor se extiende a todas sus
mundo derrumbado, concede a tus creaturas. /R.
fieles una santa alegría para que, a
• El Señor es siempre fiel a sus pa-
quienes rescataste de la esclavitud
labras, y lleno de bondad en sus
del pecado, nos hagas disfrutar del
acciones. Da su apoyo el Señor al
gozo que no tiene fin. Por Jesucris-
to, nuestro Señor. que tropieza y al agobiado alivia. /R
• Que te alaben, Señor, todas tus
PRIMERA LECTURA obras, y que todos tus fieles te
Mira a tu rey que viene bendigan. Que proclamen la glo-
humilde hacia ti. ria de tu reino y den a conocer
Del libro del profeta Zacarías 9, 9-10 tus maravillas. /R.
Esto dice el Señor: “Alégrate so-
bremanera, hija de Sión; da gritos SEGUNDA LECTURA
de júbilo, hija de Jerusalén; mira a Si con la ayuda del Espíritu
dan muerte a los bajos deseos
tu rey que viene a ti, justo y vic- del cuerpo, vivirán.
torioso, humilde y montado en un
De la Carta del apóstol san Pablo
burrito. a los romanos 8, 9. 11-13
Él hará desaparecer de la tierra de
Efraín los carros de guerra y de Hermanos: Ustedes no viven con-
Jerusalén, los caballos de comba- forme al desorden egoísta del
te. Romperá el arco del guerrero y hombre, sino conforme al Espíri-
anunciará la paz a las naciones. Su tu, puesto que el Espíritu de Dios
poder se extenderá de mar a mar y habita verdaderamente en ustedes.
desde el gran río hasta los últimos Quien no tiene el Espíritu de Cris-
rincones de la tierra”. to, no es de Cristo. Si el Espíritu del
Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor. Padre, que resucitó a Jesús de entre
los muertos, habita en ustedes, en-
SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 144 tonces el Padre, que resucitó a Jesús
R. Acuérdate, Señor, de tu de entre los muertos, también les
misericordia. dará vida a sus cuerpos mortales,
20
Domingo 5
por obra de su Espíritu, que habita ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO MT 11, 25
en ustedes. R. Aleluya, aleluya.
Por lo tanto, hermanos, no esta- Te doy gracias, Padre, Señor del
mos sujetos al desorden egoísta cielo y de la tierra, porque has re-
del hombre, para hacer de ese des- velado los misterios del Reino a la
orden nuestra regla de conducta. gente sencilla. /R.
Pues si ustedes viven de ese modo,
ciertamente serán destruidos. Por PALABRA de Vida
el contrario, si con la ayuda del Es-
píritu destruyen sus malas accio- "Gracias, Padre, porque así
nes, entonces vivirán. te ha parecido bien"
Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor. Mateo 11, 26
X
E
n aquel tiempo, Jesús exclamó: “¡Te doy gracias, Padre, Señor del
cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios
y entendidos, y las has revelado a la gente sencilla! Gracias, Padre, por-
que así te ha parecido bien.
El Padre ha puesto todas las cosas en mis manos. Nadie conoce al
Hijo sino el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien
el Hijo se lo quiera revelar.
Vengan a mí, todos los que están fatigados y agobiados por la carga,
y yo los aliviaré. Tomen mi yugo sobre ustedes y aprendan de mí, que
soy manso y humilde de corazón, y encontrarán descanso, porque mi
yugo es suave y mi carga ligera”.
ORACIÓN DE LOS FIELES alegría y esperanza. Roguemos al

S. Hermanos, acojamos la invita- Señor. /R
ción de ir a Él para ser aliviados y L. Oremos por los países que viven
unámonos en oración por todas los rigores de la violencia, para
nuestras necesidades. Digamos: que todos comprendan el verda-
dero precio de la paz y se abran
Todos: Te lo pedimos, Señor.
caminos de reconciliación. Ro-
L. Oremos por todos nuestros pasto- guemos al Señor. /R
res y líderes de comunidad, para L. Oremos por todos los cristianos
que el Espíritu fecunde sus ac- que viven conforme al desorden
ciones y hagan nacer en nosotros egoísta de la carne, para que, con
21
la ayuda del Espíritu, destruyan que sabes acoger con misericordia.

sus malas acciones. Roguemos al Tú que vives y reinas.
Señor. /R
L. Oremos por los humildes y sen- ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
cillos que exalta hoy Jesús en el La oblación que te ofrecemos, Señor,
Evangelio, para que nos dejemos nos purifique, y nos haga participar,
aleccionar con su ejemplo de de día en día, de la vida del reino glo-
vida. Roguemos al Señor. /R rioso. Por Jesucristo, nuestro Señor.
L. Oremos por los teólogos y los
buscadores de Dios, para que ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN SAL 33, 9
puedan conocer al Padre y al Prueben y vean qué bueno es el Se-
Hijo y sean merecedores de las ñor; dichoso quien se acoge a él.
revelaciones divinas. Roguemos
al Señor. /R ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
(Intenciones libres) Señor, que nos has colmado con
tantas gracias, concédenos alcan-
S. Oh, Jesús, manso y humilde de zar los dones de la salvación y que
corazón, danos todos los días la nunca dejemos de alabarte. Por Je-
confianza de dirigirte una oración sucristo, nuestro Señor.
?
El Reino de Dios
está en medio de ustedes
Lc 17, 21
El Nuevo Testamento no nos da una respuesta directa sobre qué es el Reino de Dios. En nin-
gún momento da una definición del mismo. Jesús habla de él como de una realidad conocida,
proclamando su proximidad, sugiriendo algunos de sus aspectos con la ayuda de parábolas,
declarando que está lejos o está cerca, enumerando las condiciones que permiten entrar en él
y las que, por el contrario, impiden hacerlo.
El Reino de Dios no se deja captar ni definir como un concepto. Una de las grandes pre-
guntas que se plantean es: ¿Cuándo vendrá el Reino de Dios? Jesús habla de él como de una
realidad presente, "ya aquí", y para construirlo e instaurarlo, es necesario practicar y promover
los valores: JUSTICIA, AMOR Y PAZ.
1
Que vivamos practicando la justicia, que seamos justo unos
con otros, en nuestro trato cotidiano.
Que vivamos movidos por el amor, que realmente el amor

Constructores del Reino de Dios
2 sea nuestro motor que nos impuse a salir de nosotros mismo
e ir al encuentro de los demás.
Que cultivemos nuestra paz interior y con ello que seamos

3 promotores de paz, que donde haya odio llevemos amor.
22
Lunes 6
FERIA o bien SANTA MARÍA GORETTI,

VIRGEN Y MÁRTIR, ML - VE o RO LUNES 6
DIOS, EL FIEL HASTA EL EXTREMO
E l profeta Oseas, del norte de Israel en el siglo VII a.C., cuyo nombre
significa “la salvación es Dios” o “salvación de Dios”, ofrece pers-
pectivas de futuro a un pueblo adultero, que se ha ido tras el dios Baal.
Su mensaje se centra en esa frase que se repite en el texto de hoy: “Yo te
desposaré”, y lo hace en doble dimensión, “conmigo para siempre” y “en la
fidelidad”. Como amor esponsal que es, Israel, como esposa, experimen-
tará el goce de las nupcias con el conocimiento del Señor. Es interesante
que el verbo usado para “desposar” se use también para referirse al des-
posorio con una virgen, con lo cual se indica que Dios, a pesar del adulte-
rio de Israel (simbolizado en el adulterio de la esposa de Oseas, Gomer),
olvidará todo su pecado, haciendo de él un pueblo completamente nuevo,
virgen, y pagará la dote requerida, expresado en la frase “en justicia”.
Para el Dios de la revelación siempre se puede comenzar de nuevo, así
las relaciones esponsales con Israel, como la vida restablecida de la niña
dada por muerta, en el Evangelio según san Mateo. En ambos textos, todo
depende de una palabra o acción poderosa que levanta del sueño. En el
caso de Oseas, el amor no ha muerto, basta despertarlo en el desierto con
una palabra dicha al corazón; en el caso de la niña, es la acción de Jesús
de tomarla de la mano y ponerla en pie la que le despierta de la muerte.
La fidelidad de Dios se muestra en todos sus alcances, es decir, el amor de
Dios se mantiene fiel y firme. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. SAL 47, 10-11 del pecado, nos hagas disfrutar del
Meditamos, Señor, los dones de tu gozo que no tiene fin. Por Jesucris-
amor, en medio de tu templo. Tu to, nuestro Señor.
alabanza llega hasta los confines de
la tierra como tu fama. Tu diestra PRIMERA LECTURA
está llena de justicia. Yo te desposaré conmigo para siempre.
Del libro del profeta Oseas
ORACIÓN COLECTA 2, 16. 17-18. 21-22
Señor Dios, que por medio de la hu- Esto dice el Señor: “Yo conduciré
millación de tu Hijo reconstruiste a Israel, mi esposa infiel, al desier-
el mundo derrumbado, concede a to y le hablaré al corazón. Ella me
tus fieles una santa alegría para que, responderá allá, como cuando era
a quienes rescataste de la esclavitud joven, como el día en que salió de
23
Egipto. Aquel día, palabra del Se- hablará de tus hechos portento-
ñor, ella me llamará ‘Esposo mío’, y sos, del glorioso esplendor de tu
no me volverá a decir ‘Baal mío’. grandeza. /R.
Israel, yo te desposaré conmigo • Alabarán tus maravillosos prodi-
para siempre. Nos uniremos en gios y contarán tus grandes ac-
la justicia y la rectitud, en el amor ciones; difundirán la memoria de
constante y la ternura; yo te des- tu inmensa bondad y aclamarán
posaré en la fidelidad y entonces tú tus victorias. /R.
conocerás al Señor”. • El Señor es compasivo y mise-
Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor. ricordioso, lento para enojarse
y generoso para perdonar. Bue-
SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 144 no es el Señor para con todos y
R. El Señor es compasivo y su amor se extiende a todas sus
misericordioso. creaturas. /R.
• Un día tras otro, Señor, bende-
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO
ciré tu nombre y no cesará mi CFR. 2TIM 1, 10
boca de alabarte. Muy digno de
alabanza es el Señor, por ser su
grandeza incalculable. /R. Jesucristo, nuestro salvador, ha venci-
• Cada generación a la que sigue do la muerte y ha hecho resplandecer
anunciará tus obras y proezas. Se la vida por medio del Evangelio. /R.
X
E
n aquel tiempo, mientras Jesús hablaba, se le acercó un jefe de la
sinagoga, se postró ante él y le dijo: “Señor, mi hija acaba de mo-
rir; pero ven tú a imponerle las manos y volverá a vivir”.
Jesús se levantó y lo siguió, acompañado de sus discípulos. Entonces,
una mujer que padecía flujo de sangre desde hacía doce años, se le
acercó por detrás y le tocó la orilla del manto, pues pensaba:
“Con sólo tocar su manto, me curaré”. Jesús, volviéndose, la miró y le
dijo: “Hija, ten confianza; tu fe te ha curado”. Y en aquel mismo instan-
te quedó curada la mujer.
Cuando llegó a la casa del jefe de la sinagoga, vio Jesús a los flautistas,
y el tumulto de la gente y les dijo: “Retírense de aquí. La niña no está
muerta; está dormida”. Y todos se burlaron de él. En cuanto hicieron
salir a la gente, entró Jesús, tomó a la niña de la mano y ésta se levantó.
La noticia se difundió por toda aquella región.
24
Martes 7

La oblación que te ofrecemos, Señor, Señor, que nos has colmado con
nos purifique, y nos haga participar, tantas gracias, concédenos alcan-
de día en día, de la vida del reino glo- zar los dones de la salvación y que
rioso. Por Jesucristo, nuestro Señor. nunca dejemos de alabarte. Por Je-
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN SAL 33,9
Mi Reflexión:
Prueben y vean qué bueno es el Se-
ñor; dichoso quien se acoge a él.
XIV SEMANA DEL TO

FERIA - VE MARTES 7
FIEL ES QUIEN SABE RECONOCER AL SEÑOR

E l profeta Oseas lanza una frase enigmática: “Siembran vientos y cose-
charán tempestades”. Es decir, hacen muchas cosas, que de por sí no
son malas, la monarquía no es el problema, sino no contar con Dios y su
fidelidad a la hora de nombrar reyes en los continuos golpes de estado que
se venían dando en el territorio de Samaria. La idolatría había llegado al ex-
tremo de que ya Dios no lo puede soportar más. Como consecuencia de ello
la creación se ve perturbada y no dará su fruto, Israel deberá ir al destierro.
Así como los israelitas no podían ver la acción y fidelidad de Dios, tampoco
los fariseos pueden contemplar la acción de Dios en Jesús, a quien tachan
de emisario al servicio del diablo. Jesús lamenta tanta cosecha y la gran falta
de operarios.
Las clases dirigentes confunden a sus súbditos con su idolatría, conducién-
dolos a la infidelidad y el paganismo. El pueblo, abandonado a su suerte, se
siente como ovejas sin pastor. La “abundante cosecha”, usado por Jesús en
sentido figurado, está en relación a la decisión escatológica de Dios, y tiene
que ver con la recolección que entraña la decisión de separase de aquellas
actitudes que van en contra de la venida del Reino de Dios. Una de ellas es
la escucha de la Palabra de Dios, como insiste el Señor por boca de Oseas, y
el reconocimiento de su presencia en la persona de Jesús. Son, pues, necesa-
rios obreros que se hayan encontrado con el Señor. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. SAL 47, 10-11 tierra como tu fama. Tu diestra está
Meditamos, Señor, los dones de tu llena de justicia.
amor, en medio de tu templo. Tu ala-
banza llega hasta los confines de la
25
ORACIÓN COLECTA si fueran de un extraño. Aunque

Señor Dios, que por medio de la inmolen víctimas en mi honor y
humillación de tu Hijo reconstruis- coman su carne, no me dan gusto,
te el mundo derrumbado, concede pues tengo presentes sus culpas y
a tus fieles una santa alegría para castigaré sus pecados. Por eso vol-
que, a quienes rescataste de la es- verán a la esclavitud”.
clavitud del pecado, nos hagas dis- Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.
frutar del gozo que no tiene fin. Por
nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, … SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 113
R. Nosotros confiamos en el Señor.
PRIMERA LECTURA
Siembran vientos y • Nuestro Dios está en el cielo y él
cosecharán tempestades. ha hecho todo lo que quiso. En
Del libro del profeta Oseas 8, 4-7. 11-13 cambio, los ídolos de los paganos
son oro y plata, son dioses he-
Esto dice el Señor: “Han nombrado chos por artesanos. /R.
reyes sin contar conmigo, han esco- • Tienen boca, pero no hablan;
gido príncipes sin saberlo yo. Con tienen ojos, pero no ven; tienen
su oro y su plata se han hecho ído- orejas, pero no oyen; tienen na-
los, para su perdición. Tu becerro, riz, pero no huelen. /R.
Samaria, es repulsivo y mi ira arde • Tienen manos, pero no tocan;
contra él. ¿Hasta cuándo serán in- tienen pies, pero no andan. Que
capaces de purificarse los hijos de sean como ellos quienes los hacen
Israel? Un artesano ha hecho ese
y cuantos confían en ellos. /R.
becerro, que no es Dios, por eso
• Los hijos de Israel confían en el Se-
quedará hecho trizas.
ñor: él es su auxilio y su escudo; los
Siembran vientos y cosecharán
hijos de Aarón confían en el Se-
tempestades; su trigo no dará espi-
gas, no producirá harina su grano, ñor: él es su auxilio y su escudo. /R.
y si la produce, los extranjeros se la
comerán.
Efraín ha construido multitud de R. Aleluya, aleluya.
altares, y sólo le han servido para Yo soy el buen pastor, dice el Señor;
pecar. Aunque yo les escribiera to- yo conozco a mis ovejas y ellas me
das mis leyes, las ignorarían como conocen a mí. /R.
X
E
n aquel tiempo, llevaron ante Jesús a un hombre mudo, que esta-
ba poseído por el demonio. Jesús expulsó al demonio y el mudo
26
Miércoles 8
habló. La multitud, maravillada, decía: “Nunca se había visto nada se-

mejante en Israel”. Pero los fariseos decían: “Expulsa a los demonios
por autoridad del príncipe de los demonios”.
Jesús recorría todas las ciudades y los pueblos, enseñando en las sina-
gogas, predicando el Evangelio del Reino y curando toda enfermedad
y dolencia. Al ver a las multitudes, se compadecía de ellas, porque
estaban extenuadas y desamparadas, como ovejas sin pastor. Entonces
dijo a sus discípulos: “La cosecha es mucha y los trabajadores, pocos.
Rueguen, por tanto, al dueño de la mies que envíe trabajadores a sus
campos”. // Palabra del Señor. A. Gloria a ti, Señor Jesús.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN SAL 33, 9
Mi Reflexión:
XIV SEMANA DEL TO

FERIA - VE MIÉRCOLES 8
AHORA ES TIEMPO PARA BUSCAR AL SEÑOR
E n los dos textos de hoy aparece el verbo “buscar”, con diferente orien-
tación, pero con una misma idea, hallar algo que está perdido o que
falta, o al menos cuya ubicación se desconoce. En Oseas se trata de buscar al
Señor, mientras que para Jesús se refiere a buscar las ovejas perdidas de Is-
rael. En el texto griego de Mateo el verbo es “ir”, “marchar”, es decir, ponerse
en movimiento para llevar el mensaje de Jesús, su Buena Nueva a una parte
de Israel, con lo que los apóstoles toman parte en la misión propia de Jesús.
Las ovejas perdidas de Israel, como los principales destinatarios, en Mateo,
tienen relación con la misión de Jesús, que en este evangelio se entiende
como dirigida a los judíos, herederos naturales del Reino. Luego, al final del
evangelio, se extenderá a todos. Mateo 28, 19, dice: “Vayan (mismo verbo de
10, 6) y hagan discípulos de todas las naciones”.
27
En ambos textos el buscar está en relación con los legítimos herederos de

las promesas, el pueblo de Israel. En Oseas con un pueblo que se ha olvidado
de su Dios, sus promesas, su fidelidad y sus obras de amor, su primer amor.
En Mateo se trata de buscar a los destinatarios del Reino y comunicarles su
cercanía, que Dios está de su lado. En todo caso, queda claro que ya es tiem-
po, que no se puede seguir sin rumbo fijo, multiplicando altares a dioses
que no ofrecen la salvación. La búsqueda del Señor no se puede retrasar, y
el anuncio de su cercanía no se puede posponer, es urgente (vayan y procla-
men) comunicar la Buena Noticia del Dios con nosotros. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. SAL 47, 10-11 Pero ellos dicen: “No tenemos rey”.
Meditamos, Señor, los dones de tu Pero si no temen al Señor, ¿qué po-
amor, en medio de tu templo. Tu drá hacer por ellos el rey?
alabanza llega hasta los confines de Samaria y su becerro desaparecerán
la tierra como tu fama. Tu diestra como espuma sobre el agua. Todos
está llena de justicia. los santuarios de los ídolos serán des-
truidos y sobre sus altares crecerán
ORACIÓN COLECTA
espinas y cardos, porque la idolatría
Señor Dios, que por medio de la ha sido el pecado de Israel. Entonces
humillación de tu Hijo reconstruis- gritarán a los montes: “¡Cúbrannos!”,
te el mundo derrumbado, concede y a las colinas: “¡Sepúltennos!”
a tus fieles una santa alegría para Siembren justicia y cosecharán
que, a quienes rescataste de la es-
misericordia; preparen sus tierras
clavitud del pecado, nos hagas dis-
frutar del gozo que no tiene fin. Por para la siembra, pues ya es tiempo
nuestro Señor Jesucristo. de buscar al Señor, para que venga
y llueva la salvación sobre ustedes.
PRIMERA LECTURA Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.
Ya es tiempo de buscar al Señor.
Del libro del profeta Oseas
10, 1-3. 7-8. 12 R. Recurramos al Señor y a su poder.
Israel era una viña frondosa que daba • Entonen en su honor himnos y
abundante fruto. Pero cuanto más cantos, celebren los portentos
se multiplicaban sus frutos, más se del Señor. Del nombre del Señor
multiplicaban sus altares paganos; enorgullézcanse y siéntase feliz el
cuanto más rico era el país, más ricos que lo busca. /R.
fueron sus monumentos a los ídolos. • Recurran al Señor y a su poder,
Su corazón está dividido y van a pa- y a su presencia acudan. Recuer-
gar sus culpas. El Señor derribará sus den los prodigios que él ha he-
altares y demolerá sus monumentos. cho, sus portentos y oráculos. /R.
28
Miércoles 8
• Descendientes de Abraham, su ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO MC 1, 15

servidor, estirpe de Jacob, su pre- R. Aleluya, aleluya.
dilecto, escuchen: El Señor es El Reino de Dios está cerca, dice el
nuestro Dios y gobiernan la tie- Señor; arrepiéntanse y crean en el
rra sus decretos. /R. Evangelio. /R.
X
E
n aquel tiempo, llamando Jesús a sus doce discípulos, les dio
poder para expulsar a los espíritus impuros y curar toda clase
de enfermedades y dolencias.
Estos son los nombres de los doce apóstoles: el primero de todos,
Simón, llamado Pedro, y su hermano Andrés; Santiago y su hermano
Juan, hijos del Zebedeo; Felipe y Bartolomé; Tomás y Mateo, el pu
blicano; Santiago, hijo de Alfeo, y Tadeo; Simón, el cananeo, y Judas
Iscariote, que fue el traidor.
A estos doce los envió Jesús con estas instrucciones: “No vayan a
tierra de paganos, ni entren en ciudades de samaritanos. Vayan más
bien en busca de las ovejas perdidas de la casa de Israel. Vayan y pro-
clamen por el camino que ya se acerca el Reino de los cielos”.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

La oblación que te ofrecemos, Señor, Dato curioso sobre
nos purifique, y nos haga participar,
de día en día, de la vida del reino glo-
rioso. Por Jesucristo, nuestro Señor. La situación del pueblo de Israel clama por
pastores que los oriente y Jesús, consciente de
esto, llama a los doce discípulos; los instruye
para la misión y los envía a proclamar la llegada
Prueben y vean qué bueno es el Se- del Reino de los cielos; no les oculta que ten-
ñor; dichoso quien se acoge a él. drán dificultades y rechazos, pero les asegura
que Dios cuidará siempre de ellos (Mt 9, 36–
11, 1). Este envío convierte a los discípulos en
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Apóstoles.
Señor, que nos has colmado con Los Apóstoles eran persona sencillas, pia-
tantas gracias, concédenos alcan- dosas y sinceras, que siguieron a Jesús. Los
zar los dones de la salvación y que evangelistas siempre inician la lista por Pedro,
el líder en los comienzos de la Iglesia. Se les
nunca dejemos de alabarte. Por Je- conoce como "Los Doce"; su número corres-
sucristo, nuestro Señor. ponde a las doce tribus de Israel.
29
9 JUEVES FERIA o bien SANTOS AGUSTÍN ZHAO RONG

PRESBÍTERO Y COMPAÑEROS, MÁRTIRES, ML - VE o RO
UNA VIDA QUE COMUNICA LA FE EN GRATUIDAD

¿ Qué entendemos por “dar gratis” en el texto de Mateo? Jesús lanza un im-
perativo a los discípulos: “Gratuitamente han recibido este poder; ejérzan-
lo, pues, gratuitamente”. La palabra griega usada por Mateo indica “en vano”, es
decir, en el sentido de “por nada”, o “en balde”. La frase es entonces muy fuerte,
pues lo que en vano se ha recibido, de la misma manera debe ser comunicado
a los otros. Pero, ¿qué es lo que han recibido “en vano” los discípulos? Dones
superiores, como el de proclamar la cercanía del Reino, sanar a los enfermos,
levantar a los postrados, expulsar a los demonios. El envío de los discípulos se
realiza en la total gratuidad.
El enviado es una persona que ha hecho experiencia gratuita de encuentro con
Cristo por la fe, por lo mismo, no puede más que comunicar o transmitir con
gran alegría el don de la fe que ha recibido por pura gracia divina en la Iglesia.
El papa Francisco, en Lumen fidei 14, dice: “La fe es un don gratuito de Dios
que exige la humildad y el valor de fiarse y confiarse, para poder ver el camino
luminoso del encuentro entre Dios y los hombres, la historia de la salvación”.
La salvación, que se da en medio de la historia, se manifiesta como don gratui-
to, cuando quienes la comunican expresan, en su rostro y acciones, el gozo de
haber sido iluminados y capacitados para confiarse a un proyecto divino. Ser
transmisores de la luz de la fe es lo mejor que nos puede suceder. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. SAL 47, 10-11 PRIMERA LECTURA

Meditamos, Señor, los dones de tu Mi corazón se conmueve.
amor, en medio de tu templo. Tu Del libro del profeta Oseas 11, 1-4. 8-9
alabanza llega hasta los confines de
“Cuando Israel era niño, yo lo amé,
la tierra como tu fama. Tu diestra
y de Egipto llamé a mi hijo, dice el
está llena de justicia.
Señor. Pero, mientras más lo lla-
ORACIÓN COLECTA maba, más se alejaba de mí; ofrecía
Señor Dios, que por medio de la sacrificios a los dioses falsos y que-
humillación de tu Hijo reconstruis- maba ofrendas a los ídolos.
te el mundo derrumbado, concede Yo fui quien enseñó a andar a
a tus fieles una santa alegría para Efraín, yo quien lo llevaba en bra-
que, a quienes rescataste de la es- zos; pero no comprendieron que
clavitud del pecado, nos hagas dis- yo cuidaba de ellos.
frutar del gozo que no tiene fin. Por Yo los atraía hacia mí con los lazos
nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, … del cariño, con las cadenas del amor.
30
Jueves 9
Yo fui para ellos como un padre, que manifiéstate, despierta tu poder

estrecha a su creatura y se inclina ha- y ven a salvarnos. /R.
cia ella para darle de comer. • Señor, Dios de los ejércitos, vuel-
Mi corazón se conmueve dentro de ve tus ojos, mira tu viña y visítala;
mí y se inflama toda mi compasión. protege la cepa plantada por tu
No cederé al ardor de mi cólera, no mano, el renuevo que tú mismo
volveré a destruir a Efraín, pues yo soy cultivaste. /R.
Dios y no hombre, yo soy el Santo que
vive en ti y no enemigo a la puerta”. ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO MC 1,15
Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor. R. Aleluya, aleluya.
El Reino de Dios está cerca, dice el
Señor; arrepiéntanse y crean en el
R. Ven, Señor, a salvarnos. Evangelio. /R.
• Escúchanos, pastor de Israel; tú
que estás rodeado de querubines,
X
E
n aquel tiempo, envió Jesús a los Doce con estas instrucciones:
“Vayan y proclamen por el camino que ya se acerca el Reino
de los cielos. Curen a los leprosos y demás enfermos; resuciten a los
muertos y echen fuera a los demonios. Gratuitamente han recibido
este poder; ejérzanlo, pues, gratuitamente.
No lleven con ustedes, en su cinturón, monedas de oro, de plata o de
cobre. No lleven morral para el camino ni dos túnicas ni sandalias ni
bordón, porque el trabajador tiene derecho a su sustento.
Cuando entren en una ciudad o en un pueblo, pregunten por alguien
respetable y hospédense en su casa hasta que se vayan. Al entrar, sa-
luden así: ‘Que haya paz en esta casa’. Y si aquella casa es digna, la paz
de ustedes reinará en ella; si no es digna, el saludo de paz de ustedes
no les aprovechará. Y si no los reciben o no escuchan sus palabras, al
salir de aquella casa o de aquella ciudad, sacudan el polvo de los pies.
Yo les aseguro que el día del juicio, Sodoma y Gomorra serán tratadas
con menos rigor que esa ciudad”.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS participar, de día en día, de la vida

La oblación que te ofrecemos, del reino glorioso. Por Jesucristo,
Señor, nos purifique, y nos haga nuestro Señor.
31
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN SAL 33, 9 los dones de la salvación y que nun-

Prueben y vean qué bueno es el Se- ca dejemos de alabarte. Por Jesu-
ñor; dichoso quien se acoge a él. cristo, nuestro Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN Mi Reflexión:
Señor, que nos has colmado con
tantas gracias, concédenos alcanzar
10 VIERNES XIV SEMANA DEL TO

FERIA - VE
EL ESPÍRITU PROTEGE Y CAPACITA

J esús da instrucciones a los discípulos con el envío a la misión. Él sabe
muy bien que ellos tendrán dificultades, que serán rechazados, perse-
guidos e, incluso, maltratados, por eso les habla con claridad; pero también
les indica que no deben preocuparse, pues no serán ellos los que hablarán,
sino el Espíritu del Padre. Si bien la frase de Jesús está en relación con las
persecuciones, el texto griego de Mateo habla más bien de “ser entregados”
a los tribunales. En el Nuevo Testamento el verbo se usa siempre para in-
dicar la “entrega” a la cual será sometido Jesús, ya sea con la traición por
parte de Judas en el momento de la pasión, o la entrega a Pilato por parte
del Sanedrín, o por parte de Pilato a la voluntad del pueblo y a los soldados.
La frase de Jesús sobre el auxilio del Espíritu Santo está en relación con el
ser “entregados” a manos de otros que tienen poder de dominio sobre quie-
nes caen en sus manos: tribunales, Sanedrín, Pilato, soldados. La confianza
que Él quiere infundir en sus enviados es grande, pues no han de temer a
los que ostentan el poder, ni siquiera han de preparar su defensa. Lucas deja
en evidencia esta realidad cuando escribe sobre la valentía de los apóstoles
ante las autoridades judías que los enfrentan, y como salen victoriosos y son
capaces de hacer frente a ellos con sabiduría, a la cual no pueden enfrentar
las autoridades. Ser discípulo, enviado del Señor, es ir por los caminos del
mundo con esa certeza. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. SAL 47, 10-11 ORACIÓN COLECTA

Meditamos, Señor, los dones de tu Señor Dios, que por medio de la hu-
amor, en medio de tu templo. Tu millación de tu Hijo reconstruiste
alabanza llega hasta los confines de el mundo derrumbado, concede a
la tierra como tu fama. Tu diestra tus fieles una santa alegría para que,
está llena de justicia. a quienes rescataste de la esclavitud
32
Viernes 10
del pecado, nos hagas disfrutar del un ciprés verde, y gracias a mí, tú
gozo que no tiene fin. Por nuestro das frutos.
Señor Jesucristo, tu Hijo, … Quien sea sabio, que comprenda
estas cosas y quien sea prudente,
PRIMERA LECTURA que las conozca. Los mandamien-
Nunca llamaremos ya “dios nuestro” tos del Señor son rectos y los jus-
a las obras de nuestras manos. tos los cumplen; los pecadores, en
Del libro del profeta Oseas 14, 2-10 cambio, tropiezan en ellos y caen”.
Esto dice el Señor Dios: “Israel, Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.
conviértete al Señor, Dios tuyo,
pues tu maldad te ha hecho sucum- SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 50
bir. Arrepiéntanse y acérquense al R. Abre, Señor, mis labios y te
Señor para decirle: ‘Perdona todas alabaré.
nuestras maldades, acepta nuestro • Por tu inmensa compasión y
arrepentimiento sincero, que so- misericordia, Señor, apiádate de
lemnemente te prometemos. mí y olvida mis ofensas. Lávame
Ya no nos salvará Asiria, ya no bien de todos mis delitos y puri-
confiaremos en nuestro ejército, f ícame de mis pecados. /R.
ni volveremos a llamar “dios nues- • Enséñame, Señor, la rectitud de
tro” a las obras de nuestras manos, corazón que quieres. Lávame tú,
pues sólo en ti encuentra piedad el Señor, y purif ícame y quedaré
huérfano’. más blanco que la nieve. /R.
Yo perdonaré sus infidelidades, dice • Crea en mí, Señor, un corazón
el Señor; los amaré, aunque no lo puro, un espíritu nuevo para
merezcan, porque mi cólera se ha cumplir tus mandamientos. No
apartado de ellos. Seré para Israel
me arrojes, Señor, lejos de ti ni
como rocío; mi pueblo florecerá
retires de mí tu santo espíritu. /R.
como el lirio, hundirá profunda-
• Devuélveme tu salvación, que re-
mente sus raíces, como el álamo,
y sus renuevos se propagarán; su gocija, y mantén en mí un alma
esplendor será como el del olivo y generosa. Señor, abre mis labios y
tendrá la fragancia de los cedros del cantará mi boca tu alabanza. /R.
Líbano.
Volverán a vivir bajo mi sombra,
JN 16, 13; 14, 26
cultivarán los trigales y las viñas,
que serán tan famosas como las
del Líbano. Ya nada tendrá que ver Cuando venga el Espíritu de ver-
Efraín con los ídolos. dad, él les enseñará toda la ver-
Yo te he castigado, pero yo también dad y les recordará todo cuanto
te voy a restaurar, pues soy como yo les he dicho, dice el Señor. / R.
33
X
E
n aquel tiempo, Jesús dijo a sus apóstoles: “Yo los envío como
ovejas entre lobos. Sean, pues, precavidos como las serpientes y
sencillos como las palomas.
Cuídense de la gente, porque los llevarán a los tribunales, los azo-
tarán en las sinagogas, los llevarán ante gobernadores y reyes por mi
causa; así darán testimonio de mí ante ellos y ante los paganos. Pero,
cuando los enjuicien, no se preocupen por lo que van a decir o por la
forma de decirlo, porque en ese momento se les inspirará lo que han
de decir. Pues no serán ustedes los que hablen, sino el Espíritu de su
Padre el que hablará por ustedes.
El hermano entregará a su hermano a la muerte, y el padre a su hijo;
los hijos se levantarán contra sus padres y los matarán; todos los odia-
rán a ustedes por mi causa, pero el que persevere hasta el fin, se salvará.
Cuando los persigan en una ciudad, huyan a otra. Yo les aseguro que
no alcanzarán a recorrer todas las ciudades de Israel, antes de que
venga el Hijo del Hombre”.

Mi Reflexión:
El Espíritu Santo es el Santificador. Que con sus siete do-

nes nos anima, consuela, fortalece, renueva e impulsa para
que demos testimonio del Padre y del Hijo. Hemos de recibir
al Espíritu de Verdad que nos conducirá a la Verdad Plena.
Él nos dirá las cosas que van a suceder, abrirá nuestro

entendimiento para que podamos comprender las Escritu-
ras. Nos mostrará el camino, más aún, nos dará la fortaleza
y el coraje necesario para caminar por ese camino que nos
ha mostrado Jesús.
34
Sábado 11
SAN BENITO, ABAD

MO - BL SÁBADO 11
PURIFICADOS PARA SER ENVIADOS
L a impureza en el Antiguo Testamento está relacionada, en el plano reli-
gioso, con la santidad de Dios, la cual tiene una connotación moral, por
lo que la pureza ritual simboliza la pureza moral. En ello enfatizan y hacen
eco los profetas.
El profeta Isaías, al ser partícipe de una visión divina, de una experiencia
trascendental, reconoce que es un hombre de labios impuros y que ha visto
con sus ojos al Señor de los ejércitos. Él reconoce su pequeñez en relación con
la magnitud inabarcable de Dios y siente que podría morir, de ahí su temor. Él
centra su atención en la impureza ética, reconoce su pecado y su pertenencia
a un pueblo pecador con el cual se solidariza. Notemos que la impureza del
profeta y del pueblo está en relación con sus “labios”, no con el corazón o la
mente, ella está en relación con la palabra que, por vocación, ha de profetizar.
Purificado por la acción de Dios, liberado de toda iniquidad y perdonados sus
pecados, Isaías se dispone a ir a un pueblo de labios impuros, respondiendo
“aquí estoy, Señor, envíame”. De igual modo, Jesús capacita a sus discípulos para
hacer frente no a los que matan el cuerpo, sino al que podría matar el alma.
El discípulo es enviado una vez que ha conocido a su Señor, a su Maestro,
para anunciar al pueblo un tiempo de gracia y de purificación. Ser personas
que se han encontrado cara a cara con el Señor es un requisito importante
para llevar y anunciar la Palabra de Dios. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA mandamientos. Por nuestro Señor

Hubo un varón de vida venerable, Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina
Benito, por gracia y por nombre, contigo en la unidad del Espíritu San-
“bendecido”, que renunció a su casa to y es Dios por los siglos de los siglos.
y a su herencia, para solamente agra-
dar a Dios, llevando una vida santa. PRIMERA LECTURA
Soy un hombre de labios
ORACIÓN COLECTA impuros, y he visto con mis ojos
al Señor de los ejércitos.
Dios nuestro, que constituiste a san
Benito, abad, como ilustre maes- Del libro del profeta Isaías 6, 1-8
tro en la escuela del servicio divino, El año de la muerte del rey Ozías,
concédenos que, sin anteponer nada vi al Señor, sentado sobre un trono
a tu amor, avancemos con un co- muy alto y magnífico. La orla de su
razón generoso en el camino de tus manto llenaba el templo. Había dos
35
serafines junto a él, con seis alas Escuché entonces la voz del Se-
cada uno: con un par se cubrían el ñor que decía: “¿A quién enviaré?
rostro; con otro, se cubrían los pies, ¿Quién irá de parte mía?” Yo le res-
y con el otro, volaban. Y se gritaban pondí: “Aquí estoy, Señor, envíame”.
el uno al otro: “Santo, santo, santo Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.
es el Señor, Dios de los ejércitos; su
gloria llena toda la tierra”. SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 92
Temblaban las puertas al clamor R. Señor, tú eres nuestro rey.
de su voz y el templo se llenaba de • Tú eres, Señor, el rey de todos los
humo. Entonces exclamé: reyes. Estás revestido de poder y
“¡Ay de mí!, estoy perdido, porque majestad. /R.
soy un hombre de labios impuros, • Tú mantienes el orbe y no vacila.
que habito en medio de un pueblo Eres eterno, y para siempre está
de labios impuros, porque he visto firme tu trono. /R.
con mis ojos al rey y Señor de los • Muy dignas de confianza son tus
ejércitos”. leyes y desde hoy y para siempre,
Después voló hacia mí uno de los Señor, la santidad adorna tu tem-
serafines. Llevaba en la mano una plo. /R.
brasa, que había tomado del altar
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO 1PE 4, 14
con unas tenazas. Con la brasa me
tocó la boca, diciéndome: R. Aleluya, aleluya.
“Mira: Esto ha tocado tus labios. Tu Dichosos ustedes, si los injurian
iniquidad ha sido quitada y tus pe- por ser cristianos, porque el Espíri-
cados están perdonados”. tu de Dios descansa en ustedes. /R.
X
E
n aquel tiempo, Jesús dijo a sus apóstoles: “El discípulo no es más que
el maestro, ni el criado más que su señor. Le basta al discípulo ser
como su maestro y al criado ser como su señor. Si al señor de la casa lo han
llamado Satanás, ¡qué no dirán de sus servidores!
No teman a los hombres. No hay nada oculto que no llegue a descubrirse;
no hay nada secreto que no llegue a saberse. Lo que les digo de noche, re-
pítanlo en pleno día, y lo que les digo al oído, pregónenlo desde las azoteas.
No tengan miedo a los que matan el cuerpo, pero no pueden matar
el alma. Teman, más bien, a quien puede arrojar al lugar de castigo el
alma y el cuerpo.
¿No es verdad que se venden dos pajarillos por una moneda? Sin
embargo, ni uno solo de ellos cae por tierra si no lo permite el Padre.
36
Domingo 12
En cuanto a ustedes, hasta los cabellos de su cabeza están contados.

Por lo tanto, no tengan miedo, porque ustedes valen mucho más que
todos los pájaros del mundo.
A quien me reconozca delante de los hombres, yo también lo reco-
noceré ante mi Padre, que está en los cielos; pero al que me niegue
delante de los hombres, yo también lo negaré ante mi Padre, que está
en los cielos”. // Palabra del Señor. A. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS familia, para darles a su tiempo la

Acepta, Señor, con bondad los dones ración de trigo.
que te presentamos en la celebración
de san Benito, abad, y haz que, a ejem- ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
plo suyo, te busquemos únicamente a Al recibir la prenda de la vida eterna,
ti, a fin de que podamos obtener en te suplicamos, Señor, que, siguiendo
tu servicio el don de la unidad y de las enseñanzas de san Benito, nos
la paz. Por Jesucristo, nuestro Señor.
dediquemos con fidelidad a tu ser-
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN CFR. LC 12, 42 vicio y amemos con ferviente cari-
Éste es el sirvo fiel y prudente, a dad a los hermanos. Por Jesucristo,
quien el Señor puso al frente de su nuestro Señor.
de Dios: «Ve, yo te envío» (Ex 3, 10), e hizo salir al

pueblo hacia la tierra de la promesa (Cfr. Ex 3, 17). A
Jeremías le dijo: «Adondequiera que yo te envíe irás»
(Jr 1, 7). Hoy, en este «id» de Jesús, están presentes los
escenarios y los desafíos siempre nuevos de la misión
evangelizadora de la Iglesia, y todos somos llamados
a esta nueva «salida» misionera. Cada cristiano y cada
comunidad discernirá cuál es el camino que el Señor le
pide, pero todos somos invitados a aceptar este llama-
do: salir de la propia comodidad y atreverse a llegar a
todas las periferias que necesitan la luz del Evangelio
(EG 20).
En la Palabra de Dios
aparece permanente- La intimidad de la Iglesia con Jesús es una intimidad
mente este dinamis- itinerante, y la comunión «esencialmente se configura
mo de «salida» que como comunión misionera».Fiel al modelo del Maestro,
Dios quiere provocar es vital que hoy la Iglesia salga a anunciar el Evangelio a
en los creyentes. todos, en todos los lugares, en todas las ocasiones, sin
Abraham aceptó el demoras, sin asco y sin miedo. La alegría del Evangelio
llamado a salir hacia es para todo el pueblo, no puede excluir a nadie. Así se
una tierra nueva (Cfr. lo anuncia el ángel a los pastores de Belén: «No temáis,
Gn 12, 1-3). Moisés porque os traigo una Buena Noticia, una gran alegría
escuchó el llamado para todo el pueblo» (Lc 2, 10), (EG 23).
37
12 XV DOMINGO DEL TO /A SALTERIO:

SEMANA III - VE
CUSTODIOS O DEPREDADORES DE LA CREACIÓN

H oy las lecturas nos permite tomar conciencia de nuestra relación
con la naturaleza, reflexionar que tanto somos colaboradores de la
creación o depredadores de la misma. También, nos permite entrar en no-
sotros mismo y reflexionar, por un lado, cómo está mi terreno-corazón y
por otro, ver si está produciendo frutos según su capacidad.
Constatamos con tristeza que el ser humano se ha convertido en un depre-
dador feroz de su entorno, de la naturaleza, de "la casa común" con le llama
el Papa Francisco en su documento "Laudato Si'". Se siente con derecho más
que con responsabilidad, solo busca sacar provecho personal y deja de lado
el mandato que recibió de Dios de ser custodio y colaborador de la creación.
Al ser creados a imagen y semejanza de Dios, por un lado, tenemos la
dignidad de hijos de Dios y por otro, la responsabilidad de custodiar la crea-
ción y colaborar en ella para que alcance su plenitud en Cristo, como nos
dice san Pablo, en la segunda lectura. Si bien, es cierto, que por ahora toda
la creación gime con dolores de parto, también es cierto que al final de los
tiempo todo será recapitulado en Cristo.
Por otro lado, en el Evangelio, vemos a Jesús que sube a la barca para
desde ahí, sentado, enseñar a la gente que acudía a Él. En una breve analogía
descubrimos que Jesús es el Maestro que enseña desde la barca que es la
Iglesia. Sin embargo, en un plano más personal, también la barca somos tú
y yo, es decir, cada persona. En este sentido, podemos decir que Jesús desea
subir a tu barca y desde ahí enseñar a su pueblo.
Por tanto, es necesario que dejes subir a Jesús en tu barca. Es necesario
vencer tu orgullo, y dejar que aflore la humildad y el amor desde tu corazón,
para que la semilla que es la Palabra de Dios no sea infecunda en ti, sino que
al contrario dé muchos frutos.
No pongas resistencia a la Palabra de Dios, pues ella tiene el poder de
purificarte, de liberarte y transformarte en una mejor persona, siempre y
cuando le des permiso. Pues Dios respeta tu libertad.
Quien vive su vida guiado e impulsado por el AMOR, se abre a la acción
purificadora de Dios, se hace receptor de la misericordia, se hace fecundo
y es capaz de sentir con el otro: su hermano necesitado en primer lugar, y
en segundo lugar "la casa común". Se convierte en verdadero custodio de la
creación y colabora para que todo sea recapituladas en Cristo. En el plano
personal se convierte en terreno fértil para la Palabra de Dios y da muchos
frutos en favor de los hermanos. P. Miguel Moreno, ssp.
38
Domingo 12
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. SAL 16, 15 • Tú coronas el año con tus bienes,
Por serte fiel, yo contemplaré tu tus senderos derraman abundan-
rostro, Señor, y al despertar, espero cia, están verdes los pastos del
saciarme de gloria. desierto, las colinas con flores
adornadas. /R.
ORACIÓN COLECTA • Los prados se visten de rebaños,
Señor Dios, que muestras la luz de de trigales los valles se engala-
tu verdad a los que andan extra- nan. Todo aclama al Señor. Todo
viados para que puedan volver al le canta. /R.
buen camino, concede a cuantos se
profesan como cristianos rechazar SEGUNDA LECTURA
lo que sea contrario al nombre que Toda la creación espera la revelación
llevan y cumplir lo que ese nombre de la gloria de los hijos de Dios.
significa. Por nuestro Señor Jesu- De la Carta del apóstol san
cristo, tu Hijo, … Pablo a los romanos 8, 18-23
PRIMERA LECTURA Hermanos: Considero que los sufri-

La lluvia hará germinar la tierra. mientos de esta vida no se pueden
comparar con la gloria que un día
Del libro del profeta Isaías 55, 10-11
se manifestará en nosotros; porque
Esto dice el Señor: “Como bajan del toda la creación espera, con seguri-
cielo la lluvia y la nieve y no vuel- dad e impaciencia, la revelación de
ven allá, sino después de empapar la esa gloria de los hijos de Dios.
tierra, de fecundarla y hacerla ger- La creación está ahora sometida
minar, a fin de que dé semilla para al desorden, no por su querer, sino
sembrar y pan para comer, así será la por voluntad de aquel que la some-
palabra que sale de mi boca: no vol- tió. Pero dándole al mismo tiem-
verá a mí sin resultado, sino que hará po esta esperanza: que también
mi voluntad y cumplirá su misión”. ella misma va a ser liberada de la
Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor. esclavitud de la corrupción, para
compartir la gloriosa libertad de los
SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 64 hijos de Dios.
R. Señor, danos siempre de tu agua. Sabemos, en efecto, que la crea-
• Señor, tú cuidas de la tierra, la ción entera gime hasta el presente
riegas y la colmas de riqueza. Las y sufre dolores de parto; y no sólo
nubes del Señor van por los cam- ella, sino también nosotros, los que
pos, rebosantes de agua, como poseemos las primicias del Espíritu,
acequias. /R. gemimos interiormente, anhelando
• Tú preparas las tierras para el tri- que se realice plenamente nuestra
go: riegas los surcos, aplanas los condición de hijos de Dios, la re-
terrenos, reblandeces el suelo con dención de nuestro cuerpo.
la lluvia, bendices los renuevos. /R. Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.
39

PALABRA de Vida
La semilla es la palabra de Dios y el "Dichosos, ustedes, porque sus ojos
sembrador es Cristo; todo aquel que ven y sus oídos oyen"
lo encuentra vivirá para siempre. /R. Mateo 13, 16
X
U
n día salió Jesús de la casa donde se hospedaba y se sentó a la
orilla del mar. Se reunió en torno suyo tanta gente, que él se
vio obligado a subir a una barca, donde se sentó, mientras la gente
permanecía en la orilla. Entonces Jesús les habló de muchas cosas en
parábolas y les dijo:
“Una vez salió un sembrador a sembrar, y al ir arrojando la semilla,
unos granos cayeron a lo largo del camino; vinieron los pájaros y se
los comieron. Otros granos cayeron en terreno pedregoso, que tenía
poca tierra; ahí germinaron pronto, porque la tierra no era gruesa;
pero cuando subió el sol, los brotes se marchitaron, y como no tenían
raíces, se secaron. Otros cayeron entre espinos, y cuando los espinos
crecieron, sofocaron las plantitas. Otros granos cayeron en tierra bue-
na y dieron fruto: unos, ciento por uno; otros, sesenta; y otros, treinta.
El que tenga oídos, que oiga.”
Después se le acercaron sus discípulos y le preguntaron: “¿Por qué les
hablas en parábolas?” Él les respondió: “A ustedes se les ha concedido
conocer los misterios del Reino de los cielos, pero a ellos no. Al que
tiene, se le dará más y nadará en la abundancia; pero al que tiene poco,
aun eso poco se le quitará. Por eso les hablo en parábolas, porque
viendo no ven y oyendo no oyen ni entienden.
En ellos se cumple aquella profecía de Isaías que dice: Oirán una y otra
vez y no entenderán; mirarán y volverán a mirar, pero no verán; porque
este pueblo ha endurecido su corazón, ha cerrado sus ojos y tapado sus
oídos, con el fin de no ver con los ojos, ni oír con los oídos, ni compren-
der con el corazón. Porque no quieren convertirse ni que yo los salve.
Pero dichosos, ustedes, porque sus ojos ven y sus oídos oyen. Yo les
aseguro que muchos profetas y muchos justos desearon ver lo que
ustedes ven y no lo vieron y oír lo que ustedes oyen y no lo oyeron.
Escuchen, pues, ustedes, lo que significa la parábola del sembrador.
A todo hombre que oye la palabra del Reino y no la entiende, le llega
el diablo y le arrebata lo sembrado en su corazón. Esto es lo que signi-
fican los granos que cayeron a lo largo del camino.
40
Domingo 12
Lo sembrado sobre terreno pedregoso significa al que oye la palabra

y la acepta inmediatamente con alegría; pero, como es inconstante, no
la deja echar raíces, y apenas le viene una tribulación o una persecu-
ción por causa de la palabra, sucumbe.
Lo sembrado entre los espinos representa a aquel que oye la palabra,
pero las preocupaciones de la vida y la seducción de las riquezas la
sofocan y queda sin fruto.
En cambio, lo sembrado en tierra buena representa a quienes oyen
la palabra, la entienden y dan fruto: unos, el ciento por uno; otros, el
sesenta; y otros, el treinta”. // Palabra del Señor. A. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN DE LOS FIELES puedan dar fruto en abundancia.

S. Hermanos, nuestra creación está Roguemos al Señor. /R.
sometida al desorden. Por eso nece- (Intenciones libres)
sitamos orar con perseverancia por S. Padre misericordioso, escucha fa-
nuestra salvación. A cada intención vorablemente estas oraciones que te
decimos: hemos dirigido con fe, y danos la fuer-
za de ser terreno fecundo para la pala-
bra de tu Hijo. Tú que vives y reinas.
L. Por el santo Padre y todos los
Obispos, para que mantengan ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
encendida en nosotros la espe- Mira, Señor, los dones de tu Iglesia su-
ranza de descubrirnos hijos de plicante, y concede que, al recibirlos,
Dios. Roguemos al Señor. /R. sirvan a tus fieles para crecer en santi-
L. Por todas las personas que se dad. Por Jesucristo, nuestro Señor.
dedican a las labores del campo, ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN CFR. SAL 83, 4-5
para que vean coronados sus es- El gorrión ha encontrado una casa, y
fuerzos con buenas cosechas y la golondrina un nido donde poner
se aprecie justamente su trabajo. sus polluelos: junto a tus altares, Se-
Roguemos al Señor. /R. ñor de los ejércitos, Rey mío y Dios
L. Por todas las personas que, su- mío. Dichosos los que viven en tu
mergidas en ambientes virtua- casa y puedan alabarte siempre.
les, pierden de vista la necesidad
de aprender a escuchar y a rela-
Alimentados con los dones que he-
cionarse con los demás. Rogue-
mos recibido, te suplicamos, Señor,
mos al Señor. /R. que, participando frecuentemen-
L. Por las familias y comunidades te de este sacramento, crezcan los
que se reúnen cada día para escu- efectos de nuestra salvación. Por
char la Palabra de Dios, para que Jesucristo, nuestro Señor.
41
13 LUNES FERIA o bien SANTA TERESA DE JESÚS DE LOS

ANDES FERNÁNDEZ SOLAR, VIRGEN, ML - VE o BL
PURIFICADOS PARA SER ESCUCHADOS POR DIOS

E l texto de Isaías es una fuerte reacción de Dios a las acciones realizadas
por la clase gobernante y el pueblo de Israel. Si leemos el texto con
detenimiento descubrimos que hay nueve acciones cultuales que el pueblo
realiza para agradar a Dios, mismas que son rechazadas tajantemente por el
Señor. El motivo del rotundo rechazo está en la expresión: “Sus manos están
llenas de sangre”. Por eso pide a continuación nueve acciones formuladas de
manera imperativa. Se trata de que aun cuando en el templo todo parece
marchar de maravilla, y las celebraciones, fiestas y solemnidades son esplén-
didas, la justicia y el derecho han desaparecido de los habitantes del pueblo.
Sólo mediante una profunda purificación será posible volver a entablar diá-
logo con Dios y lograr que todas las acciones litúrgicas le sean agradables.
Purificarse, en el campo cultual, está en relación con un despertar reve-
rente y temeroso hacia Dios. A Él no se le engaña, los cultos y ritos pueden
ser perfectos, pero la justicia y el derecho para con sus predilectos (oprimi-
dos, huérfanos y viudas) es lo que determina su aceptación, de lo contrario
Dios mira en otra dirección. Su voz se hace oír por el profeta que de forma
imperativa llama a un cambio de actitud. Y este cambio tiene que ver con
una adhesión profunda y radical a Dios, por encima, incluso, de los inte-
reses personales como la familia, para estar dispuestos al servicio de los
necesitados y la construcción del Reino. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. SAL 16, 15 PRIMERA LECTURA

Por serte fiel, yo contemplaré tu Purif íquense y aparten de mi
rostro, Señor, y al despertar, espero vista sus malas acciones.
saciarme de gloria. Del libro del profeta Isaías 1, 10-17
Oigan la palabra del Señor, príncipes
ORACIÓN COLECTA
de Sodoma; escucha la enseñanza
Señor Dios, que muestras la luz de de nuestro Dios, pueblo de Gomo-
tu verdad a los que andan extravia- rra: “¿Qué me importan a mí todos
dos para que puedan volver al buen sus sacrificios?”, dice el Señor. Estoy
camino, concede a cuantos se profe- harto de holocaustos de carneros y
san como cristianos rechazar lo que de grasa de becerros; ya no quiero
sea contrario al nombre que llevan sangre de toros, corderos y cabritos.
y cumplir lo que ese nombre signifi- ¿Quién les ha pedido que me ofrez-
ca. Por nuestro Señor Jesucristo, tu can todo eso cuando vienen al tem-
Hijo, que vive y reina contigo … plo para visitarme? Dejen ya de
42
Lunes 13
pisotear mis atrios y no me traigan • No voy a reclamarte sacrificios,

dones vacíos ni incienso abomina- dice el Señor, pues siempre están
ble. Ya no aguanto sus novilunios y ante mí tus holocaustos. Pero ya
sábados ni sus asambleas. no aceptaré becerros de tu casa
Sus solemnidades y fiestas las de- ni cabritos de tus rebaños. /R.
testo; se me han vuelto una carga • ¿Por qué citas mis preceptos y ha-
insoportable. Cuando extienden sus blas a toda hora de mi pacto, tú,
manos para orar, cierro los ojos; aunque detestas la obediencia y echas
que multipliquen sus plegarias, no los en saco roto mis mandatos? /R.
escucharé. Sus manos están llenas de • Tú haces esto, ¿y yo tengo que
sangre. Lávense y purifíquense; apar- callarme? ¿Crees acaso que yo
ten de mí sus malas acciones. Dejen soy como tú? Quien las gracias
de hacer el mal, aprendan a hacer el me da, ése me honra y yo salvaré
bien, busquen la justicia, auxilien al al que cumple mi voluntad. /R.
oprimido, defiendan los derechos del
huérfano y la causa de la viuda”. ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO MT 5, 10
SALMO RESPONSORIA DEL SALMO 49 Dichosos los perseguidos por causa
R. Dios salva al que cumple su de la justicia, porque de ellos es el
voluntad. Reino de los cielos, dice el Señor. /R.
X
E
EVANGELIO (Mt 10, 34 —11,1)
n aquel tiempo, Jesús dijo a sus apóstoles: “No piensen que he venido
a traer la paz a la tierra; no he venido a traer la paz, sino la guerra. He
venido a enfrentar al hijo con su padre, a la hija con su madre, a la nuera
con su suegra; y los enemigos de cada uno serán los de su propia familia.
El que ama a su padre o a su madre más que a mí, no es digno de mí;
el que ama a su hijo o a su hija más que a mí, no es digno de mí; y el
que no toma su cruz y me sigue, no es digno de mí.
El que salve su vida, la perderá y el que la pierda por mí, la salvará.
Quien los recibe a ustedes, me recibe a mí; y quien me recibe a mí,
recibe al que me ha enviado.
El que recibe a un profeta por ser profeta, recibirá recompensa de pro-
feta; el que recibe a un justo por ser justo, recibirá recompensa de justo.
Quien diere, aunque no sea más que un vaso de agua fría a uno de
estos pequeños, por ser discípulo mío, yo les aseguro que no perderá
su recompensa”.
43
Cuando acabó de dar instrucciones a sus doce discípulos, Jesús par-

tió de ahí para enseñar y predicar en otras ciudades.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Señor de los ejércitos, Rey mío y

Mira, Señor, los dones de tu Iglesia Dios mío. Dichosos los que viven en
suplicante, y concede que, al reci- tu casa y puedan alabarte siempre.
birlos, sirvan a tus fieles para crecer
en santidad. Por Jesucristo, nuestro ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor. Alimentados con los dones que he-

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN CFR. SAL 83, 4-5 que, participando frecuentemen-
El gorrión ha encontrado una casa, te de este sacramento, crezcan los
y la golondrina un nido donde po- efectos de nuestra salvación. Por
ner sus polluelos: junto a tus altares, Jesucristo, nuestro Señor.
14 MARTES FERIA o bien SAN FRANCISCO SOLANO

PRESBÍTERO, ML - VE o BL
ACOGER LA ACCIÓN DE DIOS EN JESÚS

H oy escuchemos el reproche de Jesús a las ciudades de Corozaín, Bet-
saida y Cafarnaúm. Según el texto griego, Jesús “reprocha” en el sen-
tido en que “injuria, lanza reproches o quejas”. Él tiene la autoridad que le
permite reprochar a estas ciudades por su dureza, incapacidad de arrepen-
timiento, ceguera para ver la acción de Dios que en Él se ha hecho presente
por medio de sus palabras y acciones. Él asegura que el juicio será más lle-
vadero incluso para ciudades que de por sí son un modelo de maldad en la
Biblia, como Sodoma. Así de seria es la palabra que Jesús expresa en forma
de reproche o injuria, y la forma como lo hace es al estilo de los grandes
profetas, con los conocidos “ayes”: “¡Ay de ti…!”.
Si miramos en el contexto de Mateo, resulta que Jesús mismo es injuriado
durante el proceso de su pasión (15, 32), tal como lo serán sus discípulos (5,
11 en las bienaventuranzas), pero se les promete una gran recompensa (di-
chosos) en el Reino de los Cielos, y son comparados a los grandes profetas.
Las palabras de Jesús son un llamado a tomar conciencia de las acciones
que Dios, por su mediación, realiza en favor de los suyos, pero es, a la vez,
un llamado a la conversión, a salir victoriosos en el juicio, con la apertura
del corazón a sus obras y palabras. El llamado que hace el profeta es preci-
samente a creer en el poder de Dios para no ir a la ruina. P.W.S.
44
Martes 14
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. SAL 16, 15 ante la cólera de Rasón, rey de Siria,
Por serte fiel, yo contemplaré tu y de Pécaj, rey de Israel. No importa
rostro, Señor, y al despertar, espero que tramen tu ruina, diciendo: Ata-
saciarme de gloria. quemos a Judá, sitiémosla, conquis-
témosla y nombremos rey de ella al
ORACIÓN COLECTA hijo de Tabel’”.
Señor Dios, que muestras la luz de Esto dice el Señor: “Eso no llegará a
tu verdad a los que andan extra- suceder. Damasco es la capital de Si-
viados para que puedan volver al ria y Rasón es el rey de Damasco; Sa-
buen camino, concede a cuantos se maria es la capital de Efraín y el hijo
profesan como cristianos rechazar de Remalías es el rey de Samaria.
lo que sea contrario al nombre que Pues bien, dentro de sesenta y cinco
llevan y cumplir lo que ese nombre años Efraín será destruido y dejará
significa. Por nuestro Señor Jesu- de ser pueblo. Y si ustedes no creen
cristo, tu Hijo, … en mí, también irán a la ruina”.
PRIMERA LECTURA
Si ustedes no creen en SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 47
mí, irán a la ruina. R. Dios es nuestro defensor.
Del libro del profeta Isaías 7, 1-9 • Grande es el Señor y muy dig-
Cuando Ajaz, hijo de Jotam, hijo no de alabanza, en la ciudad de
de Ozías, reinaba en Judá, Rasón nuestro Dios. Su monte santo,
altura hermosa, es la alegría de
rey de Siria, y Pécaj, hijo de Rema-
toda la tierra. /R.
lías y rey de Israel, fueron a Jerusa-
• El monte Sión, en el extremo
lén para atacarla, pero no lograron norte, es la ciudad del rey su-
conquistarla. premo. Entre sus baluartes ha
Cuando al heredero de David le lle- surgido Dios como una fortaleza
gó la noticia de que los sirios acam- inexpugnable. /R.
paban en Efraín, se estremeció su • Los reyes se aliaron para atacarla
corazón y el del pueblo, como se juntos; pero al verla, quedaron ate-
estremecen los árboles del bosque, rrados y huyeron despavoridos. /R.
agitados por el viento. • Allí los invadió el pánico y do-
Entonces el Señor le dijo a Isaías: lores como de parto; como un
“Sal al encuentro de Ajaz con tu viento del desierto, que destroza
hijo Sear Yasub, donde termina el las naves de Tarsis. /R.
canal de la alberca superior, jun-
to a la calzada del batanero, y dile: ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO CFR. SAL 94, 8
‘Mantente alerta, pero tranquilo. R. Aleluya, aleluya.
No le tengas miedo a ese par de ti- Hagámosle caso al Señor, que nos
zones humeantes; no te acobardes dice: “No endurezcan su corazón”. /R.
45
X
E
n aquel tiempo, Jesús se puso a reprender a las ciudades que habían
visto sus numerosos milagros, por no haberse arrepentido. Les decía:
“¡Ay de ti, Corozaín! ¡Ay de ti, Bet-saida! Porque si en Tiro y en Sidón
se hubieran realizado los milagros que se han hecho en ustedes, hace
tiempo que hubieran hecho penitencia, cubiertas de sayal y de ceniza.
Pero yo les aseguro que el día del juicio será menos riguroso para Tiro
y Sidón, que para ustedes.
Y tú, Cafarnaúm, ¿crees que serás encumbrada hasta el cielo? No. Serás
precipitada en el abismo, porque si en Sodoma se hubieran realizado los
milagros que en ti se han hecho, quizá estaría en pie hasta el día de hoy. Pero
yo te digo que será menos riguroso el día del juicio para Sodoma que para ti”.

suplicante, y concede que, al reci- tu casa y puedan alabarte siempre.
en santidad. Por Jesucristo, nuestro ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
15 MIÉRCOLES SAN BUENAVENTURA, OBISPO

Y DOCTOR DE LA IGLESIA, MO - BL
JESÚS REVELA AL PADRE A LOS SENCILLOS

J esús insiste con frecuencia en la necesidad de orar. Los evangelistas pre-
sentan a Jesús haciendo oración. En varias ocasiones. Unas veces en la
sinagoga con el pueblo; otras en privado. Por lo general, buscaba lugares
donde reinara la soledad y el silencio. Son escasas las fórmulas de oración
que los evangelistas ponen en labios de Jesús. Mateo nos ofrece una de ellas.
46
Miércoles 15
Se trata de una oración, que es al mismo tiempo una revelación. Jesús lleva
a la oración su vida y su misión. Sorprende dando gracias por los éxitos de
su predicación entre la gente sencilla. Reconoce que no tuvo el mismo éxito
con los “sabios y entendidos”.
A estos últimos los pierde su soberbia. Creen saberlo todo, en ciencia, en re-
ligión, en economía. De Jesús no tienen nada que aprender. Más bien cuestio-
nan muchas de las propuestas que hace, para renovar la sociedad y conseguir
personas más sencillas, generosas y solidarias.
La oración de Jesús no estaba desconectada de la vida, de la realidad social
de las personas que se encontraba por los pueblos y ciudades que recorría.
Había gente “cansada”, “agobiada”. Necesitaban a alguien que se acercara a
ellos con comprensión y ternura. Esto era lo que les ofrecía Jesús: “Vengan a
mí, que soy comprensivo y humilde de corazón” (Mt 11, 28-29).
La oración contiene una profesión de fe en el Padre, que es el Creador y
Señor de todo cuanto existe en el cielo y en la tierra. Él ha reservado para los
sencillos la primicia de darles a conocer quién es el Hijo. Por su parte, Jesús
también ha dado a conocer a los sencillos quién es el Padre. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. EZ 34, 11. 23-24 experimenta mi cólera voy a man-
Buscaré a mis ovejas, dice el Señor, darte, para que lo saquees y lo des-
y les daré un pastor que las apacien- pojes y lo pisotees como el lodo de
te, y yo, el Señor, seré su Dios. las calles.
Pero Asiria no lo piensa así ni son
ORACIÓN COLECTA
éstos sus planes; su intención es
Dios todopoderoso, al celebrar la fes- arrasar y exterminar numerosas na-
tividad del obispo san Buenaventura, ciones, pues dice: ‘Con el poder de
te pedimos que nos concedas apro- mi mano lo hice y con mi sabiduría,
vechar su admirable doctrina e imi- porque soy inteligente; he borrado
tar siempre su ardiente caridad. Por las fronteras de los pueblos, he sa-
nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, … queado sus tesoros y, como un gi-
gante, he derribado a sus jefes.
PRIMERA LECTURA Como un nido al alcance de mi
¿Acaso presume el hacha frente mano alcancé la riqueza de los pue-
al que corta con ella?
blos y como se recogen los huevos
Del libro del profeta Isaías abandonados, así cogí yo toda la
10, 5-7. 13-16
tierra y no hubo quien aleteara ni
Esto dice el Señor: “¡Ay Asiria, bas- abriera el pico ni piara’”.
tón de mi ira, vara que mi furor Pero el Señor dice: “¿Acaso presu-
maneja! Contra una nación impía me el hacha frente al que corta con
voy a guiarte, contra un pueblo que ella? ¿O la sierra se tiene por más
47
grande que aquel que la maneja? Entérense, insensatos; necios,

Como si la vara pudiera mover al ¿cuándo van ustedes a entender? /R.
que la levanta y el bastón pudiera • El que plantó el oído, ¿no va a
levantar a quien no es de madera. oír? El que formó el ojo, ¿no va
Por eso, el Señor de los ejércitos a ver? El que educa a los pueblos,
hará enflaquecer a los bien alimen- ¿no va a castigar? El que instruye
tados y le prenderá fuego a su lujo, al hombre, ¿no va a saber? /R.
como se enciende la leña”. • Jamás rechazará Dios a su pueblo
Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor. ni dejará a los suyos sin amparo.
Hará justicia al justo y dará un
SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 93 porvenir al hombre honrado. /R.
R. Escucha, Señor, a tu pueblo.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO CFR. MT 11, 25
• Señor, los malvados humillan a tu
pueblo y oprimen a tu heredad;
asesinan a las viudas y a los foraste- Te doy gracias, Padre, Señor del cie-
ros y degüellan a los huérfanos. /R. lo y de la tierra, porque has revela-
• Y comentan: “El Señor no lo ve, do los misterios del Reino a la gente
el Dios de Jacob no se entera”. sencilla. /R.
X
E
n aquel tiempo, Jesús exclamó: “¡Te doy gracias, Padre, Señor del
cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios
y entendidos, y las has revelado a la gente sencilla! Gracias, Padre, por-
que así te ha parecido bien.
El Padre ha puesto todas las cosas en mis manos. Nadie conoce al
Hijo sino el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien
el Hijo se lo quiera revelar”. // Palabra del Señor. A. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS elegido y los ha destinado para que va-
Mira favorablemente, Señor, las yan y den fruto y su fruto permanezca.
ofrendas que presentamos en tu al-
tar en esta festividad de san Buena-
ventura, para que nos alcancen tu Alimentados por estos sagrados
perdón y den gloria a tu nombre. misterios, Señor, te suplicamos hu-
Por Jesucristo, nuestro Señor. mildemente que, a ejemplo de san
Buenaventura, nos esforcemos en
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN CFR. JN 15, 16 profesar lo que él creyó y en poner
No son ustedes los que me han elegi- en práctica lo que enseñó. Por Jesu-
do, dice el Señor, soy yo quien los ha cristo, nuestro Señor.
48
Jueves 16
B.V. MARÍA DEL MONTE CARMELO

FIESTA - BL JUEVES 16
ATENTOS A “HACER” LA VOLUNTAD DEL PADRE
L a madre y los hermanos de Jesús son los que “hacen” la voluntad

del Padre, dice el texto del evangelio. Pero, ¿qué significa eso en el
contexto de Mateo? “Hacer” la voluntad del Padre es hacer opción por
la propuesta salvífica y liberadora de Jesús, cumpliendo lo que Él dice o
manda. Pues, dice el texto, por el “hacer” se puede acceder al Reino (7,
21). Ahora bien, hacer la voluntad del Padre implica estar en sintonía
con su voluntad salvífica, en clara opción por los más débiles, a quienes
Dios protege (18, 14) paternalmente (6, 10). Por eso, el “hacer” su volun-
tad es algo normativo y vinculante (21, 31). En nuestro texto, debido a la
celebración mariana de hoy, este “hacer” está en relación con la misión
de María y cómo ella ha hecho vida la Palabra divina en su “sí” al servicio
de Dios y los hermanos.
El papa Benedicto XVI, hablando de María, dice que ella es “figura per-
fecta precisamente en la fe obediente” y agrega que ella “se nos presenta
como mujer enteramente disponible a la voluntad de Dios… incondicio-
nalmente dócil a la Palabra divina. Su fe obediente plasma cada instante
de su existencia según la iniciativa de Dios. Virgen a la escucha, vive en
plena sintonía con la Palabra divina” (Verbum Domini 27). Pero Jesús
va más allá y afirma que los que viven su fe como María, son su madre
y sus hermanos, mientras señalaba hacia los discípulos. Estos deben ser,
entonces, personas a la escucha de la Palabra. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA PRIMERA LECTURA

Te aclamamos, santa Madre de Regocíjate, Jerusalén, pues
Dios, porque has dado a luz al Rey, vengo a vivir en medio de ti.
que gobierna cielo y tierra por los Del libro del profeta Zacarías 2, 14-17
siglos de los siglos.
“Canta de gozo y regocíjate, Jeru-
ORACIÓN COLECTA salén, pues vengo a vivir en medio
Concédenos, Señor, la poderosa de ti, dice el Señor. Muchas nacio-
intercesión de la gloriosa Virgen nes se unirán al Señor en aquel día;
María, nuestra Señora del Carmen, ellas también serán mi pueblo y yo
para que, con la ayuda de su protec- habitaré en medio de ti y sabrás
ción, podamos llegar hasta el mon- que el Señor de los ejércitos me ha
te de la salvación, que es Cristo. Él, enviado a ti. El Señor tomará nue-
que vive y reina contigo … vamente a Judá como su propiedad
49
personal en la tierra santa y Jerusa- de generación en generación a

lén volverá a ser la ciudad elegida”. los que lo temen. /R.
¡Que todos guarden silencio ante • Ha hecho sentir el poder de su
el Señor, pues él se levanta ya de su brazo: dispersó a los de corazón
santa morada! altanero. Destronó a los potenta-
Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor. dos y exaltó a los humildes. A los
hambrientos los colmó de bienes y
SALMO RESPONSORIAL LC 1
a los ricos los despidió sin nada. /R.
R. ¡Dichosa tú, Virgen María,
porque llevaste en tu seno al Hijo
• Acordándose de su misericordia,
del eterno Padre! vino en ayuda de Israel, su siervo,
como lo había prometido a nues-
• Mi alma glorifica al Señor y mi tros padres, a Abraham y a su
espíritu se llena de júbilo en Dios,
descendencia, para siempre. /R.
mi salvador, porque puso sus ojos
en la humildad de su esclava. /R. ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO LC 11, 28
• Desde ahora me llamarán dicho-
sa todas las generaciones, porque R. Aleluya, aleluya.
ha hecho en mí grandes cosas el Dichosos los que escuchan la pala-
que todo lo puede. Santo es su bra de Dios y la ponen en práctica,
nombre. Y su misericordia llega dice el Señor. /R.
X
E
n aquel tiempo, Jesús estaba hablando a la muchedumbre, cuan-
do su madre y sus parientes se acercaron y trataban de hablar con
él. Alguien le dijo entonces a Jesús: “Oye, ahí fuera están tu madre y tus
hermanos, y quieren hablar contigo”.
Pero él respondió al que se lo decía: “¿Quién es mi madre y quiénes
son mis hermanos?” Y señalando con la mano a sus discípulos, dijo:
“Estos son mi madre y mis hermanos. Pues todo el que cumple la vo-
luntad de mi Padre, que está en los cielos, ése es mi hermano, mi her-
mana y mi madre”. // Palabra del Señor. A. Gloria a ti, Señor Jesús.
a
Suplica para Tiempos difíciles María del Monte Carmelo
Tengo mil dificultades: ayúdame. En las tentaciones: defiéndeme.

De los enemigos del alma: sálvame. En horas difíciles: consuélame.
En mis desaciertos: ilumíname. Con tu corazón maternal: ámame.
En mis dudas y penas: confórtame. Con tu inmenso poder: protégeme.
En mis enfermedades: fortaléceme. Y en tus brazos al expirar: recíbeme.
Cuando me desprecien: anímame. Virgen del Carmen, ruega por nosotros.
50
Lectio
Divina
XIV Domingo del TO /A
un destino necesario, pues un nuevo princi-

pio dirige la vida del que pertenece a Cristo:
Lectura el mismo Espíritu de Jesús, garantía de la
resurrección de los creyentes (vv. 9.11). Y
¿Qué nos dice el texto? donde está el Espíritu de Dios hay libertad
(2 Cor 3, 17). La nueva, la espléndida con-
Za 9, 9-10
dición del cristiano, que Pablo anuncia con
Este oráculo invita a la alegría y al grito orgullo (Rom 8, 1 4), es tanto don irrevo-
triunfal con los términos utilizados para cable de Dios (Cfr. 11, 29) como empeño
celebrar la realeza del Señor y la llegada cotidiano del hombre. La libertad verdade-
de la era mesiánica. Las líneas tradiciona- ra es continuamente elección y se concre-
les del mesianismo político se entremez- ta en la renuncia de sí mismo, condición
clan con elementos nuevos e inesperados. imprescindible para seguir a Cristo (Lc 9,
El rey que viene no tiene los atributos del 23-25). El Espíritu concede la luz y la fuerza
dominador victorioso y esperado: su poder para que cada uno vea y dé los pasos co-
deriva únicamente de su relación con Dios. rrespondientes por el camino de la libertad,
Él es el "justo"; es decir, quien lleva a cabo un camino que a través de la mortificación
plenamente la voluntad del Dios e imparte conduce a la vida plena (v. 13).
justicia a los pobres; el "salvador" (tal cual)
establecido por Dios. Paradójicamente, la Mt 11, 25-30
humildad es el camino de la realeza: triunfa Esta perícopa, casi idéntica a Lc 10, 21-
el rechazo de la violencia, la modestia del 22 ha sido definida como "el Magníficat de
que adopta la pacífica cabalgadura de los Jesús". El contexto, ligeramente diferente en
antiguos príncipes y extiende su dominio Mateo y Lucas por motivos redaccionales,
hasta los confines de la tierra. Las espe- destaca en ambos el marcado contraste en-
ranzas mesiánicas, insólitas y fascinantes, tre la mentalidad común y los pensamientos
requieren, por el modo de realizarse, un de Dios (Cfr. Is 55, 8ss). Jesús bendice al Se-
completo cambio de mentalidad; solicitan ñor del cielo y de la tierra llamándolo fami-
una verdadera transformación de la mente, liarmente "Padre" y alaba el conocimiento
del corazón y de las obras. que, insondable en su sencillez, no se pue-
Rm 8, 9. 11-13 de adquirir mediante el esfuerzo o trabajo
humano. Este conocimiento es puro don
Quien mediante el bautismo se une a la de Dios, revelación de Dios a los sencillos.
muerte y resurrección de Cristo (Rom 6, Sólo los "pequeños" son capaces de acoger,
3ss) es un hombre libre. La fragilidad de con naturalidad, los misterios del Reino de
nuestra naturaleza ("carne", en el lenguaje los Cielos anunciados por Jesús. Él lo subra-
paulina) nos inclina con gran facilidad has- ya con claridad: tal es el plan del Padre. En
ta someternos al pecado: Pablo expresa esta ésta afirmación, Jesús nos revela su rostro
realidad con los términos "vivir", "aminar", interior, perfilado por una adhesión inque-
"según la carne". Sin embargo, no se trata de brantable a la voluntad de Dios, de quien
Lectio Divina Pág. 1

recibe todo y al que le devuelve todo con ¿Para no murmurar contra el prójimo?
obediencia amorosa (vv. 26-27a). Esta Medita a Jesús sufriente. No hay otro ca-
obediencia inaugura una comunión per- mino", insistió el Papa, recordando que
fecta con Dios, que en el lenguaje bíblico estas virtudes son las mismas del Padre,
se expresa con el término conocimiento: "que es bueno, manso y magnánimo, que
no un conocer nocional, sino una relación nos perdona siempre", y las mismas de la
vital, en la que el Hijo puede introducirnos Virgen, nuestra Madre. No es fácil, pero
(v. 27b). Retomando la antigua invitación es posible.
de la Sabiduría (Prov 8, 5; 9, 5), llama a los
oprimidos por el peso de las tribulaciones Oración
de la vida y les ofrece un yugo diferente al
de la Ley. Acoger las enseñanzas de Jesús ¿Qué le respondo al Señor que me habla?
no significa, en efecto, cargar con un cú-
mulo de normas a observar, sino aprender
de él la sencillez y humildad de corazón, Te ruego, Señor, que derribes los anda-
que hacen más llevadera la prueba y más mios de mi ciencia humana; líbrame de la
leve la tribulación (vv. 28-30). Quien con- lógica complicada de mis razonamientos,
cuerda su corazón con el del Hijo encuen- de mi orgullosa autosuficiencia, y concé-
tra descanso y sosiego (v. 29b): el peso del deme la sencillez del niño, que descubra
Amor alza a quien lo lleva. cada mañana la novedad de todo cuan-
to sucede, cuando siempre parece igual.
Hazme pequeño y libre, Señor, que me en-
Meditación cuentre entre los dichosos que tienen ojos
para ver y oídos para oír las grandes cosas
¿Qué me dice el Señor en el texto?
que has revelado. Y entonces comprende-
ré que el nuevo orden del mundo, el orden
No es fácil para los cristianos vivir
de la justicia y de la paz, lo has depositado
según los principios y las virtudes ins-
en mis manos. Amén.
piradas por Jesús. "No es fácil —dijo el
Papa Francisco en la misa celebrada el
12 de septiembre de 2013—, pero es po- Contemplación
sible": basta con "contemplar a Jesús su-
¿Cómo hago propias las enseñanzas del texto?
friente y la humanidad sufriente" y vivir
"una vida escondida en Dios con Jesús".
"Sólo contemplando la humanidad su- ¿Cómo hago propias en mi vida las en-
friente de Jesús —repitió— podemos ha- señanzas del texto?
cernos mansos, humildes, tiernos como
Señor Jesús, tú haces mi carga ligera, te
Él. No hay otro camino". Ciertamente ten-
pido humildad para que siempre pueda
dremos que hacer el esfuerzo de «buscar
dejar, completamente en tus manos, cada
a Jesús; pensar en su pasión, en cuánto
uno de mis problemas.
sufrió; pensar en su silencio manso». Este
será nuestro esfuerzo, recalcó; después
"de lo demás se encarga Él, y hará todo lo Acción
que falta. Pero tú debes hacer esto: escon-
¿A qué me comprometo para demostrar el cambio?
der tu vida en Dios con Cristo". Así que,
para ser buenos cristianos, es necesario
contemplar siempre la humanidad de Je- Durante esta semana me propongo
sús y la humanidad sufriente. "¿Para dar identificar aquello que me cuesta ver a mi
testimonio? Medita a Jesús. ¿Para perdo- alrededor: personas, necesidades, obras.
nar? Contempla a Jesús sufriente. ¿Para no Pido la gracia de mirar lo cotidiano con
odiar al prójimo? Medita a Jesús sufriente. ojos de fe.

Lectio
Divina
XV Domingo del TO /A
es un legado del pecado, consecuencia de

la maldición que lleva consigo (Gn 3, 14-
Lectura 19); el hombre, a quien Dios le había con-
¿Qué nos dice el texto? fiado lo creado "para que lo cultivara y lo
guardara" (Gn 2, 15), ha sido arrastrado a la
Is 55, 10-11 servidumbre (v. 21). Sin embargo, la Pascua
de Cristo ensalza al hombre por encima de
La Palabra del Señor tiene una fuerza in- la antigua majestuosidad de su condición
trínseca, posee una eficacia indudable. Este originaria, lo orienta hacia una gloria futura
oráculo lo expresa con una imagen elocuen- incomparable, transforma "los padecimien-
te. El ciclo del agua contiene una finalidad. tos del momento presente" en instrumento
De él depende el ritmo de la naturaleza y de redención (v. 8), y cuando esta redención
de la vida. Es un milagro siempre nuevo y se realice, también el cosmos será transfi-
necesario. Como la lluvia y la nieve, la Pa- gurado (vv. 19-21). El tiempo presente es
labra del Señor está orientada a un fin pre- largo, un sonido de parto para toda la crea-
ciso, inevitablemente, producirá un efecto ción, pero el gemido que lo acompaña se
vital: regresar cargada de frutos de gracia. transformará en alegre melodía cuando en-
Al principio "dijo Dios: "Haya... " y así fue"; tremos "en la gloriosa libertad de los hijos
ahora, en el tiempo marcado por el peca- de Dios" (v. 21).
do, la Palabra creadora se hace redentora.
Mantiene la potencialidad infinita de susci- Mt 13, 1-23
tar conversión y vida nueva en los corazo- El capítulo13 del evangelio de Mateo re-
nes, de conceder el sustento al espíritu. Aún coge siete parábolas sobre el misterio del
más, quiere ser acogida, poder encarnarse Reino de los Cielos. Es la enseñanza que Je-
en nuestra cotidianidad. Y como la Virgen sús le ofrece a una muchedumbre innume-
de Nazaret, es necesario el consentimiento rable, a sabiendas de que pocos la acogerán.
personal. "El Verbo se hizo carne". La cuestión que le plantean los discípulos
Rm 8, 18-23 (v. 10) y la respuesta de Jesús (vv. 11-17) re-
fuerzan el sentido de esta parábola que abre
El cristiano ha sido liberado de la esclavi- la serie. A través de las imágenes de la semi-
tud del pecado y de la muerte y del yugo de lla y del terreno, la Palabra de Dios es repre-
la ley (incapaz de salvar) para vivir, como sentada como una semilla con un inmenso
hijo de Dios, guiado por el Espíritu (8,1- potencial de vida, que se desarrollará según
5.14). El sufrimiento no contradice esta la acogida que reciba. La manera de expo-
realidad, ni puede ensombrecer su esplen- ner, en parábolas, se asemeja a la cáscara
dor: se convierte en medio, en una efecti- de las semillas: salvaguarda la comprensión
va y necesaria participación en el misterio de la enseñanza de Jesús, porque «al que
pascual de Cristo (v. 17). En efecto, el dolor no tiene» el deseo sincero de comprender y

convertirse "aun aquello que tiene se le qui-
tará": escucha aparente e interés superficial
Oración
y momentáneo (vv. 10-13). Sin embargo, ¿Qué le respondo al Señor que me habla?
Dios, en su gratuidad, supera la obstinación
que endurece el corazón del hombre: el Jesús, divino Sembrador, ven y siembra el
sembrador de la parábola esparce por todas campo que somos nosotros. Prepara el te-
partes la simiente, sin cicaterías ni ardides; rreno, límpialo de espinos y piedras, rotura
el "mensaje del Reino" (v. 19) es anunciado con profundos surcos la tosca tierra, sácha-
(vv. 3ss y 14ss) y propuesto a todos. La co- la, allana los terrones y, después, atravesan-
laboración empieza con la escucha atenta, do el campo con pasos largos, con gesto
intensa y solícita de la Palabra, de modo que grandioso, solemne, desparrama a voleo la
penetre profundamente en el corazón y lo semilla con tus admirables manos. Jesús,
sane (v. 15b). Las entrañas del ser humano divino Sembrador y semilla de vida eter-
na, ven, en esta hora de gracia, siembra en
pueden estar enfermas: la insensibilidad,
nuestros corazones tu Palabra, tú mismo, y
la superficialidad, la infinidad de intereses
que germine, florezca y fructifique la Igle-
egoístas, son lugares donde la semilla no sia peregrina para los graneros del Cielo.
podrá crecer (vv. 19-22). Cuando la Palabra Amén. (P. Clemente Amorth).
sea acogida con un corazón bueno, produ-
cirá su fruto de gracia, según la correspon-
dencia de cada uno al don de Dios (v. 23). Contemplación
Meditación
Cultiva mi corazón, Señor y permite que
¿Qué me dice el Señor en el texto? tu Palabra pueda nacer, crecer y dar buena
cosecha para mí y para quienes me rodean.
Hoy Jesús comienza a introducirnos en
los misterios del Reino, a través de esta Acción
forma tan característica de presentarnos
su dinámica por medio de "parábolas". La ¿A qué me comprometo para demostrar el cambio?
semilla es la palabra proclamada, y el sem-
brador es Él mismo. Éste no busca sembrar Orar diariamente por las personas cuyos
en el mejor de los terrenos para asegurar- corazones se han cerrado a la verdad de
se la mejor de las cosechas. Él ha venido Dios y, continuar motivando a mi familia y
para que todos "tengan vida y la tenga en comunidad para que las adversidades que
abundancia". Así, las semillas arrojadas por hay en nuestra vida no ahoguen la planta
generosos puños producen el porcentaje de del Reino.
rendimiento que las posibilidades “toponí-
micas” les permite, según la profundidad de Mi Reflexión:
la fe, será la posibilidad de rendimiento en
los frutos. Aunque éstos vienen, en cierta
forma, garantizados por la potencia vital de
la Palabra-semilla, no es menor la respon-
sabilidad que cabe en la atenta audición de
la misma. Por eso, "el que tenga oídos, que
oiga". Meditemos y pidamos al Señor el an-
sia del profeta: "Cuando se presentaban tus
palabras, yo las devoraba, tus palabras eran
mi gozo y la alegría de mi corazón".

EN ESTA EDICIÓN:
1. Los hermanos de Jesús
2. Significado de la escena al pie de
la cruz
Ecos Catequéticos
3. ¿Cómo entender la palabra
hermano?
4. La Madre de Jesús
Coleccionable JUNIO 2020 Año 3 - Nº 24
Formación Interactiva de Catequista
PARA CONOCER EL EVANGELIO SEGÚN MARCOS

Dificultades e incomprensiones
Los hermanos
1 de Jesús
Si leemos con atención la traducción del Evangelio
de Marcos, nos daremos cuenta enseguida la utiliza-
ción de la palabra “hermanos” (Cfr. Mc 3, 31-35).
Debido a que el texto fue escrito en un contexto

cultural y en un idioma distinto al nuestro, ten-
Evangelista
dríamos que preguntarnos:
• ¿A qué se refiere con la palabra “hermano”?

• ¿Ellos manejaban el mismo concepto que nosotros
manejamos (cultura occidental)
• ¿Cuál es la dificultad en admitir que Jesús haya teni-
do más hermanos?
Estas preguntas, más que para discutir, se nos hacen para reflexionar so-
bre el tema. Es cierto que en el Nuevo Testamento se habla de los “herma-
nos de Jesús", algunas veces inclusive se habla de las “hermanas de Jesús”.
Son varios los textos bíblicos que hablan de

este tema, entre los cuales encontramos:
• Mt 12, 46-50 • Jn 2, 12
• Mt 13, 55-56 • Jn 7, 3-5.9
• Mc 3, 31-35 • 1 Cor 9 ,5
• Mc 6, 3 • Gal 1, 19
• Lc 8, 19-21
Ecos Catequéticos •1
De las citas bíblicas antes presentadas podemos sacar los nom-
bres de los llamados “hermanos de Jesús”: Santiago, Joset
(José), Judas y Simón (Cfr. Mc 6, 1-3); tres de estos son conside-
rados apóstoles por la Tradición Apostólica.
En este punto nos preguntamos: Teóricamente nada, sin embargo, se hace necesario
tener una serie de consideraciones de diversos ordenes
? que han conducido a la Iglesia, desde sus orígenes, a
Qué es lo que impide en efecto valorar este dato bíblico no de manera directa e inme-
considerarlos realmente diata sino de manera indirecta.
?
como hermanos de
sangre de Jesús
Antes que nada, hay datos históricos que es necesario tener presentes. En el Nuevo
Testamento la escaza información que se nos ofrece nos permiten considerar que la
mención de “hermanos” con relación a Jesús se entiende como “parientes cercanos”.
Hay un dato bien sustentado

que dice que la madre de dos de
estos supuestos hermanos de Je-
sús, se llamaba María, pero ésta
era hermana, o mejor, cuñada de
María la madre de Jesús.
Los tres afirman, que al pie de
El texto no hace distinción
la cruz y el día de la Resurrección
entre una cuñada, una tía o
en el sepulcro, estaban presentes
una prima; todas son llamadas
María, la madre de Santiago y José
“hermanas”. Esto lo entende-
mos cuando leemos algunos
pasajes conectados con la Pa- • Cfr. Mc 15, 40. 47 16, 1
sión y Resurrección de Jesús • Mt 27, 56.61; 28, 1
presentes en los sinópticos. • Lc 24, 10
Significado de la escena
2 al pie de la cruz
Es confirmado de alguna manera por el evangelista Juan

cuando dice que además de la Madre de Jesús estaba la her-
mana de su madre (en realidad es la cuñada), María de Cleofás
y María Magdalena (Cfr. Jn 19, 25).
Evangelista
Esta escena narrada por el evangelista Juan, contiene un

gran significado porque allí Jesús confía la asistencia de su ma-
dre al Discípulo y viceversa (Cfr. Jn 19, 26-27)
2• Ecos Catequéticos
Esta escena es muy clara: si
Jesús hubiese tenido más “her-
manos” ¿por qué deja a cargo
a su madre en manos de este
discípulo? En la cultura judía es
muy importante la referencia a
la figura masculina, sobre todo
de los hijos y los esposos.
Hay otras fuentes bíblicas importantes que nos Claramente afirma

hablan de los “hermanos del Señor”, sobre todo de que Santiago y Simón
Santiago y Simón que fueron los primeros obispos eran “primos” de Jesús
porque eran hijos de Ma-
de la Iglesia de Jerusalén. Una de estas fuentes, un
ría de Cleofás, este Cleo-
personaje histórico llamado Esegipo, que escribió fás era hermano de José,
alrededor de la segunda mitad del siglo II. el esposo de María.
¿Cómo entender
3 la palabra hermano?
Existe otro texto llamado el “Proto-evangelio de Santiago” muy querido por

las antiguas comunidades, considera a los “hermanos de Jesús” en realidad como
“hermanastros”, es decir, eran los hijos que José tuvo en un matrimonio prece-
dente antes de quedar viudo y casarse con María. La Iglesia Oriental, incluso hoy
en día, se basa sobre esta interpretación.
Existen otros motivos de

orden lingüísticos
que permiten
no entender de
manera directa
la expresión
"HERMANOS"
de Jesús
Antes que nada, el uso genérico y muy común utilizado en las
lenguas semíticas para indicar a los primos u otros parientes cer-
canos utilizando la palabra “hermano”; aun en muchas culturas
Evangelista
actualmente se sigue utilizando la palabra para indicar a parien-

tes cercanos o también para indicar a las personas que compar-
ten una misma fe.
Ecos Catequéticos •3
La madre
4 de Jesús
Un dato significativo es que de María se habla solo y exclusi-

vamente como la “Madre de Jesús”; muchas veces utilizando el
título de “su Madre”, además la conexión con María, la Madre de
Jesús, y los llamados “hermanos de Jesús” nunca aparece expre-
samente indicada en el Nuevo Testamento. María siempre y solo
es la Madre de Jesús.
Es claro que la cuestión de los hermanos de Jesús no
es una simple cuestión marginal, o al menos así no ha sido
considerada desde la antigüedad y ha sido (y sigue sien-
do) motivo de discusión y reflexión, porque toca un punto
fundamental de la doctrina de la Iglesia: la virginidad per-
petua de María, afirmada y declarada dogmáticamente
por el Concilio de Constantinopla II en el año 553 según la
fórmula: “María siempre virgen” que se encuentra fuer-
temente presente en la liturgia oriental y occidental.
La perpetua, es decir: antes, durante y después del parto,

virginidad de María, ayuda a entender en sentido indirec-
to la expresión “hermanos de Jesús” como primos, parien-
tes o hermanastros, según las diversas interpretaciones.
El Concilio Vaticano II afirma

en la Dei Verbum 9
“Así, pues, la Sagrada Tradición y la Sagrada Escritura están
íntimamente unidas y compenetradas."
Porque surgiendo ambas de la misma divina fuente, se funden en cierto
modo y tienden a un mismo fin (…) de donde se sigue que la Iglesia no
deriva solamente de la Sagrada Escritura su certeza acerca de todas las
verdades reveladas”.
La Iglesia en su camino de comprensión de la revelación de Dios en

Jesús, ha adquirido en cierto momento, la certeza necesaria, a partir de las
Evangelista
Escrituras y de la Tradición, para afirman la perpetua virginidad de María.

A partir de este momento, la cuestión de los hermanos de Jesús, se ilumina
con eso que la Iglesia cree.
Ecos Catequéticos (Formación Interactiva de Catequista) Realizado por Equipo San Pablo Ediciones, Venezuela
Director: P. José A. Torres, ssp • Asesor de Contenidos: Hno. Naudy Mogollón, ssp • Coordinación y corrección: Jr. Carlos Soto, ssp
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4• Ecos Catequéticos
Lectio
Divina
XVI Domingo del TO /A
El Espíritu Santo transforma cada dolor,

espera y esperanza en un lenguaje (para
Lectura nosotros misterioso, pero comprensible
¿Qué nos dice el texto? para Dios) inefable de gemidos, gemidos
que son prenda de victoria, porque Dios
Sb 12, 13. 16-19 "intercede por los creyentes según su vo-
luntad" (v. 27). Nuestra debilidad nos hace
Después de contemplar y alabar la Sabi- no sólo impotentes para obrar el bien, sino
duría en sí misma, el autor sagrado conside- hasta para comprender cuál es el bien ver-
ra su intervención en la historia y responde dadero. Y Dios viene a socorrernos justo
ahora a una pregunta implícita al contexto: en este punto. No nos sustrae de nuestra
¿por qué Dios no ha castigado a los enemi- condición; al contrario, se hace débil con
gos de Israel -egipcios y cananeos- de modo nosotros y en nosotros por medio del Espí-
drástico e inmediato? Y enseña cómo la ritu. Así, se prolonga en el tiempo, a través
Sabiduría que guía el actuar divino es más de los creyentes, el escándalo de la cruz de
sublime, magnánima y prudente que nues- Cristo: "Pues lo que en Dios parece locu-
tros criterios. El Dios creador también es la ra es más sabio que los hombres; y lo que
eterna Providencia que cuida de cada cria- en Dios parece debilidad es más fuerte que
tura: ¿quién puede enjuiciar su proceder y los hombres" (l Cor 1, 25). Esta necedad y
acusarlo de injusto (v. l3)? Posee la plenitud debilidad de Dios conducirá la historia de
de la fuerza (término clave que introduce los hombres al resultado definitivo que el
los vv. 16-18); nada teme, a diferencia de los Señor conoce y por el que el Espíritu inter-
poderosos de este mundo, ni ser abruma- cede insistentemente.
do, ni perder algo. El Señor actúa según la
justicia, la bondad y la mansedumbre, "do- Mt 13, 24-43
sificando" la fuerza a los objetivos de una
La predicación de Jesús sobre el Reino de
sabia pedagogía (vv. 17.19ss). Todos los in-
terrogantes sobre el actuar divino encuen- los Cielos trasciende las expectativas de sus
tran una misma respuesta: su amor por los contemporáneos y transparenta una imagen
hombres, la filantropía. Por amor sabe es- nueva del rostro de Dios. Contrariamente
perar nuestro arrepentimiento y nos enseña a lo esperado, el Reino de Dios no tendrá
a amar (vv. 19ss) con su misma caridad, pa- una dimensión triunfal en la historia; la
ciente y benigna (Cfr. l Cor 13, 4). victoria sobre los opositores y las fuerzas
del mal no se llevará a cabo en este mun-
do. Esto no significa que Dios, el sembra-
dor de la buena semilla, de alguna manera
Rm 8, 26-27
sea derrotado. Más bien, porque es dueño
El tiempo presente es un largo período de la situación, puede frenar la impaciencia
de parto del que nacerá la creación nueva. de sus siervos (vv. 28-30). Ciertamente, la

buena semilla comienza a crecer junto con En la historia de todo lo que tiene vida,
la cizaña; en nuestra historia, el bien siem- los comienzos de las novedades son peque-
pre estará obstaculizado por el mal. Pero ños, casi invisibles; pueden pasar inadverti-
Dios ve el tiempo desde la perspectiva de dos. Pero la semilla de la Iglesia lleva en sí
la eterna meta final (vv. 39-43); sólo con la la potencialidad infinita de Dios. Un ejem-
siega tendrá lugar el discernimiento defini- plo: desde el punto de vista de la historia
tivo. Es una lección de sabia paciencia ante del mundo, la resurrección de Jesús es poco
fariseos y zelotas de cualquier generación, llamativa, es la semilla más pequeña de la
partidarios, de distintas formas, de una pu- historia. Pero, a la vez, es la novedad más
reza religiosa y nacionalista que excluye sin grande de nuestra historia.
apelación a los "otros". Y también lo es para
nosotros, dispuestos a constituirnos rápida-
mente en jueces y verdugos. Otra enseñan-
Oración
za "contra corriente" viene de la parábola ¿Qué le respondo al Señor que me habla?
siguiente (v. 31ss); el Reino de los Cielos
no tiene la apariencia desbordante que se Señor, tú eres bueno y siembras a la luz
esperaba. Está cerca y presente (Cfr. Mc 1, del día en el campo de la Iglesia, en cada
15), pero es insignificante en su aspecto, uno de nosotros, amor, paz y alegría. Y des-
como el grano de mostaza. Sin embargo, pués, viene el enemigo durante la noche y
desde este estado incipiente germinará una esparce la cizaña: pensamientos, deseos,
exuberante realidad vital. Dios realiza cosas sentimientos hostiles y traiciones ocultas
admirables sirviéndose de instrumentos y que envuelven en tinieblas nuestro cora-
materiales humildes. Es la enseñanza geme- zón. Danos el espíritu de vigilancia y que
la que también se desprende de la parábola no nos asalte el malvado; haznos fuertes en
de la levadura (v. 33); el Reino de los Cielos la tentación y humildes en la reprensión de
es una pequeña cosa en este mundo, está nuestras caídas. Haz que no pretendamos
oculto y amasado con los acontecimientos de los otros una perfección que ni nosotros
de la historia humana, y contiene en sí una mismos tenemos; danos ojos que sepan ver,
potencialidad y un dinamismo irresistibles. además de la cizaña, la buena semilla; con-
Los "hijos del Reino" (v. 38) nunca deben cédenos un corazón que sepa amar como el
separarse del resto de la humanidad, sino tuyo, con humildad y paciencia, incansable.
fermentar desde el interior las situaciones, Amén
seguros de que nada les impedirá producir
frutos desde el amor, que subsistirá eterna-
mente (vv. 30b. 43; Cfr. 1 Cor 13, 13).
Contemplación
Meditación
Señor, permítenos comprender que el
¿Qué me dice el Señor en el texto? Reino de los cielos no se impone con poder,
sino que transforma la vida desde dentro,
Hoy, el Reino de Dios sigue viviendo el poco a poco, como la levadura en la masa.
tiempo de la siembra y de la semilla. Se
hace presente en el mundo como una semi-
lla, como algo muy pequeño. A veces, ni se
Acción
la ve, como el grano de mostaza, el más pe- ¿A qué me comprometo para demostrar el cambio?
queño de los granos. Sin embargo, contiene
en sí un árbol entero. Esta semilla es pre- Repite con frecuencia y vive hoy la Pala-
sencia del futuro; es promesa ya presente: bra: "El Señor es paciente y misericor-
así es la Iglesia. dioso" (Sal 144, 8)

Lectio
Divina
XVII Domingo del TO /A
gativas: "La humildad precede a la gloria"

(Prov 15, 33).
Lectura
Rm 8, 28-30
¿Qué nos dice el texto?
Cinco verbos recalcan el admirable pro-
1Re 3, 5-13 yecto del Altísimo: conocer, predestinar,
llamar, justificar y glorificar. El primero ex-
Dios conf ía el pueblo a un joven monar-
presa una relación de tipo existencial: ¿qué
ca que reinará como sucesor del gran rey
vínculo media entre el Creador y la criatu-
David, depositario de promesas divinas y
ra? Se trata de un «conocimiento» fundado
esperanzas mesiánicas. Hay una realidad
en una predilección de amor. El segundo le
superior que destaca como garantía: entre
asigna a Dios la primacía en la iniciativa de
el «joven» y el pueblo, ambos elegidos, el
esta elección y apunta al objetivo final, co-
único Señor es Dios. Salomón es consciente
rrelativo con el origen por su aprobación.
de ello, sabe que ha sido elevado al rango
de «siervo» de Dios al servicio del pueblo y Este «destino» manifestado a priori no re-
que éste no es de su propiedad: «Tu siervo duce la libertad humana, ya que conserva
está en medio del pueblo que te has elegi- totalmente la facultad de adherirse o no al
do» (v. 8). El pueblo es como un «primo- proyecto divino. El tercer verbo implica la
génito» entre los demás pueblos, y el joven vocación que se manifiesta en el corazón
rey un monarca estremecido ante la admi- del hombre. Dios se dirige directamente
rable grandeza del encargo. La confianza y al interior del ser humano. La libertad de
la responsabilidad del que es investido de la persona, desde dentro, agita el proceso
poder le hacen tomar conciencia de su pro- de deificación en colaboración con la gra-
pia inadecuación para el cargo. Es en este cia divina. El cuarto verbo formula con
paso, de humildad, cuando nace como rey y un término jurídico el concepto de recibir
real es su ruego frente a la ayuda que el pro- cuanto es debido pero con creces, más allá
pio Dios le ofrece, acudiendo abiertamente del derecho. Un Dios que es amor ejerce un
a su oculto azoramiento: «Pídeme lo que dominio único sobre la creación: la vida.
quieras, que yo te lo daré» (v. 5). La súpli- Referido al hombre, esto se traduce en be-
ca no versa sobre bienestar, poder o glorias nevolencia profunda: misericordia. Se entra
terrenas: larga vida, riquezas y muerte de así en el sentido pleno del quinto verbo:
los enemigos. Todo se concentra en aquello glorificar. Más que un deber del hombre,
que el hombre de por sí no puede conse- reconocer y proclamar la gloria de Dios for-
guir si Dios no se lo concede: un corazón ma parte de su llamada. La alabanza de su
sabio e inteligente, capaz de discernir con gloria es que el hombre viva para siempre
equidad y veracidad. Reinar, como aquí se como imagen de la santidad que adquirió
reconoce, es servir según estas altas prerro- desde el principio.

Mt 13, 44-52 y estimula a la compra del campo para po-
der gozar de él para siempre. Pero, al mismo
El Reino de Israel se basaba en estructuras
tiempo, alcanzar el Reino requiere buscarlo
terrenales y remitía a la señoría última de
con interés y esfuerzo, hasta el punto de
Dios, tres veces santo, inefable e invisible.
vender todo lo que uno posee: la perla que
El Reino de Dios, en cambio, radica en un
adquiere el que lo ha dado todo y ha acepta-
misterio totalmente espiritual, se revela con
do perderlo todo.
la llegada del Verbo encarnado, que declara
estar dentro de nosotros (cf Lc 17,21). Las El Reino es paz, amor, justicia y libertad.
parábolas de Matea sobre el Reino se en- Alcanzarlo es, a la vez, don de Dios y res-
tienden desde esta clave de lectura, donde ponsabilidad humana.
símbolo y analogía hacen referencia a una
verdad siempre más elocuente que la in-
tuición inmediata. Ante todo, es como "un Oración
tesoro escondido" (v. 44), pues no es una ¿Qué le respondo al Señor que me habla?
realidad visible, ni perceptible para todos.
El término tesoro, emparejado con escondi- Tú has fabricado este vaso de mi corazón;
do, ofrece la idea de un valor inapreciable. santif ícalo, pues; vacíalo de la maldad que
La segunda parábola presenta el Reino de hay en él, llénalo de tu gracia, y consérvalo
los Cielos como "un mercader que busca
lleno para que sea templo perpetuo y dig-
ricas perlas" (v. 45). Es interesante advertir
no de Ti. Dulcísimo, benignísimo, amantí-
que aquí la comparación análoga no es con
simo, carísimo, potentísimo, deseadísimo,
la perla, sino con el mercader la perla ver-
preciosísimo, amabilísimo y hermosísimo
dadera es este hombre. La tercera parábola
Señor, tu eres más dulce que la miel, más
pasa de la imagen de un sujeto singular a
blanco que la nieve, más suave que el maná,
la de una pluralidad de individuos: el Reino
más precioso que las perlas y el oro, y más
de los Cielos es como "una red que echan
amado de mi alma que todos los tesoros y
al mar y recoge toda clase de peces... selec-
honras de la tierra. Amén (San Agustín)
cionan los buenos y tiran los malos" (Cfr.
vv. 47ss). La visión tiene una fuerte marca
escatológica, y no por esto deja de ser ac- Contemplación
tual. La red simboliza una realidad inmate-
rial mediante la cual pasa al cedazo desde
el mar de la historia la carga de la humani-
dad. El Reino se manifiesta en esta realidad, El Reino de los cielos ha de ser nuestro
perceptible y recóndita, preciada y buscada, tesoro… “donde está tu tesoro allí está tu
que se realiza en el hombre, capaz de adue- corazón” (Mateo 6, 21) ¿A qué le estas dan-
ñarse de ella, una vez encontrada, y que im- do el corazón?
pregna de salvación a toda la humanidad.
Acción
Meditación ¿A qué me comprometo para demostrar el cambio?
¿Qué me dice el Señor en el texto?

Como discípulos del Señor entra a tu lu-
Hoy, Mateo pone ante nuestra conside- gar secreto… y busca en ti lo nuevo y lo vie-
ración dos parábolas sobre el Reino de los jo que tienes, define lo que debes desechar
Cielos. Jesús habla del Reino como de un te- y con lo que te debes quedar… pide al Señor
soro escondido, cuyo hallazgo causa alegría que te acompañe en este proceso.

Viernes 17

Recibe, señor, las oraciones de tu Al recibir el sacramento celestial en
pueblo, junto con las ofrendas que te la conmemoración de la santísima
presentamos, para que, por la inter- Virgen María, te pedimos, Padre
cesión de santa María, Madre de tu misericordioso, que, a imitación
Hijo, ningún buen propósito quede suya, nos concedas ponernos dig-
sin realizarse y ninguna de nuestras namente al servicio del misterio de
súplicas quede sin respuesta. nuestra redención. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN CFR. LC 11, 27
Mi Reflexión:
Dichoso el vientre de la Virgen Ma-
ría, que llevó al Hijo del eterno Padre.
XV SEMANA DEL TO
FERIA - VE VIERNES 17
DIOS VE, ESCUCHA Y SACIA A LOS SUYOS
C uando muchos se preguntan si Dios escucha la oración, Isaías nos
ofrece unas palabras que aseguran que sí, que Él escucha con fidelidad
a su ungido, el rey Ezequías, que a la edad de veinte años cae enfermo. La
oración del rey dirigida a Dios se afianza en las promesas de prosperidad y
larga vida para quienes cumplen su voluntad, pues el rey está seguro de que
ha servido al Señor con fidelidad y rectitud de corazón. Acompaña su ora-
ción con lágrimas que llegan hasta el Señor, quien responde como uno que
ha escuchado su oración y visto sus lágrimas.
El Dios que se comunica no sólo ve, sino que escucha atentamente la súpli-
ca del rey. Idea que también está presente en el texto de Mateo, donde Jesús
hace un recuento de la acción salvadora de Dios.
El Señor tiene poder sobre la vida de los seres humanos, y puede darla
o quitarla, puede amenazar y arrepentirse, puede ver y escuchar, puede
alargarla o acortarla, pero también tiene poder sobre el sábado. Todo está
a su servicio, y según como las personas lleven su vida, ya sea con actos
de misericordia o simplemente con sacrificios, pero sin la práctica de la
misericordia, se decide su suerte.
Nuestro Dios es compasivo, y valora las actitudes de arrepentimiento y
súplica que brotan del corazón humano, y es capaz de hacer retroceder al
sol y de saciar el hambre aun en el día a Él consagrado. Si Él es el Señor,
entonces todo está en sus manos y Él decide lo mejor para los suyos. P.W.S.
63
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. SAL 16, 15 libraré de la mano del rey de Asiría a ti
Por serte fiel, yo contemplaré tu y a tu ciudad, y protegeré a Jerusalén’”.
rostro, Señor, y al despertar, espero Dijo entonces Isaías: “Traigan un
saciarme de gloria. emplasto de higos y aplíquense-
lo en la llaga para que se alivie”. Y
ORACIÓN COLECTA Ezequías dijo: “¿Cuál es la señal de
Señor Dios, que muestras la luz de que podré ir al templo del Señor?”
tu verdad a los que andan extravia- Respondió Isaías: “Esta será para ti
dos para que puedan volver al buen la señal de que el Señor cumplirá las
camino, concede a cuantos se profe- cosas que te ha dicho: voy a hacer
san como cristianos rechazar lo que que la sombra retroceda los diez
sea contrario al nombre que llevan grados que ha avanzado en el reloj
y cumplir lo que ese nombre signi- de sol de Ajaz”. Y el sol retrocedió
fica. Por nuestro Señor Jesucristo, tu los diez grados que había avanzado.
Hijo, que vive y reina contigo … Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.
PRIMERA LECTURA SALMO RESPONSORIAL IS 38

He escuchado tu oración y R. Sálvame, Señor, y viviré.
he visto tus lágrimas. • Yo pensaba que a la mitad de mi
Del libro del profeta Isaías vida tendría que dirigirme hacia
38, 1-6. 21-22. 7-8 las puertas del abismo y me pri-
En aquel tiempo, el rey Ezequías varían del resto de mis años. /R.
enfermó de muerte y vino a verlo • Yo pensaba que ya no volvería a
el profeta Isaías, hijo de Amós, y le ver al Señor en la tierra de los vi-
dijo: “Esto dice el Señor: ‘Arregla to- vos, que ya no volvería a ver a los
dos tus asuntos, porque no te vas a hombres entre los habitantes del
aliviar y te vas a morir’”. mundo. /R.
Ezequías volvió la cara hacia la pa- • Levantan y enrollan mi vida
red, oró al Señor y dijo: “Acuérdate, como una tienda de pastores.
Señor, de que te he servido con fide- Como un tejedor tejía yo mi vida,
lidad y rectitud de corazón y de que y me cortaron la trama. /R.
he hecho siempre lo que a ti te agra- • A los que Dios protege viven, y en-
da”. Y lloró con abundantes lágrimas. tre ellos vivirá mi espíritu; me has
Entonces el Señor le habló a Isaías y curado, me has hecho revivir. /R.
le dijo: “Ve a decirle a Ezequías: ‘Esto
dice el Señor, Dios de tu padre, David:
He escuchado tu oración y he visto R. Aleluya, aleluya.
tus lágrimas. Voy a curarte y en tres Mis ovejas escuchan mi voz, dice
días podrás ir al templo del Señor. Voy el Señor; yo las conozco y ellas me
a darte quince años más de vida. Te siguen. /R.
64
Viernes 17
X
U
n sábado, atravesaba Jesús por los sembrados. Los discípulos, que
iban con él, tenían hambre y se pusieron a arrancar espigas y a co-
merse los granos. Cuando los fariseos los vieron, le dijeron a Jesús: “Tus
discípulos están haciendo algo que no está permitido hacer en sábado”.
Él les contestó: “¿No han leído ustedes lo que hizo David una vez que
sintieron hambre él y sus compañeros? ¿No recuerdan cómo entraron
en la casa de Dios y comieron los panes consagrados, de los cuales ni él
ni sus compañeros podían comer, sino tan sólo los sacerdotes?
¿Tampoco han leído en la ley que los sacerdotes violan el sábado por-
que ofician en el templo y no por eso cometen pecado? Pues yo digo
que aquí hay alguien más grande que el templo.
Si ustedes comprendieran el sentido de las palabras: Misericordia
quiero y no sacrificios, no condenarían a quienes no tienen ninguna
culpa. Por lo demás, el Hijo del hombre también es dueño del sábado”.

suplicante, y concede que, al reci- tu casa y pueden alabarte siempre.
en santidad. Por Jesucristo, nuestro
Misericordia quiero y no sacrificios

Mt 12, 7
En un mundo donde reina el amor a las cosas materiales, el egoísmo, y donde llegamos a escatimar el
propio amor, la misericordia como don de Dios viene a ser irreconocible en el sinsentido de nuestra vida.
Jesús nos recuerda una primicia que debe regir nuestra conducta: Misericordia quiero y no sacri-
ficios. Los sacrificios se convierten en penas que ahogan nuestra alma, resultando imposible acoger
plenamente la misericordia que nos viene de Dios; nadie puede dar de lo que no tiene. Por ello, resulta
necesario abrirnos y hacer experiencia de la misericordia, solo así podremos acoger, perdonar y amar
de verdad a nuestro prójimo, siendo misericordiosos como el Padre es misericordioso con nosotros.
65
18 SÁBADO FERIA o bien SANTA MARÍA

EN SÁBADO, ML - VE o BL
DIOS TIENE SUS PLANES CONTRA LA INJUSTICIA

E l profeta Miqueas, cuyo nombre significa “quien es como Dios”, vivió a
finales del siglo VIII a.C. Para él la fidelidad al amor de Dios se verifica
en el trato que se le dé al prójimo, en concreto a los campesinos de su tiem-
po, y por eso luchó contra el uso de la religión que encubre las injusticias
sociales. En el texto de hoy aparecen dos verbos importantes de su predica-
ción: “codiciar”, en relación con la clase poderosa de Jerusalén, y “planear”
en relación a ellos, pero sobre todo en relación con Dios. “Codiciar” signi-
fica tener más, recibir más, querer más poder o bienes materiales, como
propiedades, que es el caso de nuestro texto. Buscar un enriquecimiento
ilícito conduce a la violencia, que, en último caso, se dirige a las clases más
desprotegidas por la ley.
Pero Dios “está planeando” contra esta parte de la sociedad, esa gente, o
“gentuza” dedicada a la injusticia, si somos fieles al texto original, una serie
de calamidades que no se podrán evadir. En la nueva repartición de la tierra,
a ellos no les tocará nada en herencia, esa será la venganza del pueblo mismo.
Entonces ¿quién como Dios?, según la etimología del nombre Miqueas, que
se muestra de parte de la justicia, de los oprimidos, de los desheredados de
la tierra. Jesús se presenta como el cumplimiento de la profecía de Isaías que
habla del que hará brillar la justicia sobre las naciones. La justicia es de Dios,
pero está en nuestras manos hacerla efectiva a todos. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. SAL 16, 15 PRIMERA LECTURA

Por serte fiel, yo contemplaré tu Codician los campos y
rostro, Señor, y al despertar, espero usurpan las casas.
saciarme de gloria. Del libro del profeta Miqueas 2, 1-5
ORACIÓN COLECTA
¡Ay de aquellos que planean injus-
ticias, que traman el mal durante
Señor Dios, que muestras la luz de
la noche y al despuntar la maña-
tu verdad a los que andan extra-
viados para que puedan volver al na, lo ejecutan, porque son gente
buen camino, concede a cuantos se poderosa!
profesan como cristianos rechazar Codician los campos y los roban,
lo que sea contrario al nombre que codician las casas y las usurpan,
llevan y cumplir lo que ese nombre violando todos los derechos arrui-
significa. Por nuestro Señor Jesu- nan al hombre y lo despojan de su
cristo, tu Hijo, … herencia.
66
Sábado 18
Por eso dice el Señor: “Estoy pla- enrede en las intrigas que ha tra-
neando contra esta gente una se- mado! /R.
rie de calamidades de las que no • El malvado presume de su ambi-
podrán escapar. Entonces ya no ción y el avaro maldice al Señor.
caminarán con altivez, porque El malvado dice con insolen-
será un tiempo de desgracias. cia que no hay Dios que le pida
Aquel día, la gente se burlará de cuentas. /R.
ellos y les cantará un triste canto: • Su boca está llena de engaños y
Nos han despojado de todo y se fraudes, su lengua esconde mal-
han repartido nuestras tierras; se dad y opresión; se agazapa junto
han apoderado de nuestra heren- a la casa del inocente para matar-
cia y no hay quien nos la devuel- lo a escondidas. /R.
va”. Por eso dice el Señor: “Cuando • Pero tú, Señor, ves las penas y los
la asamblea del pueblo distribuya trabajos, tú los miras y los tomas
nuevamente las tierras, no habrá en tus manos; el pobre se enco-
parte para ellos”. mienda a ti, tú eres el socorro del
Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor. huérfano. /R.
SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 9 ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO 2CO 5, 19
R. Señor, no te olvides de los pobres. R. Aleluya, aleluya.

• ¿Por qué te quedas lejos, Señor, Dios ha reconciliado consigo al
y te escondes en el momento de mundo, por medio de Cristo, y
la angustia? La soberbia del mal- nos ha encomendado a nosotros el
vado oprime al pobre. ¡Que se mensaje de la reconciliación. /R.
X
E
n aquel tiempo, los fariseos se confabularon contra Jesús para
acabar con él. Al saberlo, Jesús se retiró de ahí. Muchos lo siguie-
ron y él curó a todos los enfermos y les mandó enérgicamente que no
lo publicaran, para que se cumplieran las palabras del profeta Isaías:
“Miren a mi siervo, a quien sostengo; a mi elegido, en quien tengo
mis complacencias. En él he puesto mi Espíritu, para que haga brillar
la justicia sobre las naciones. No gritará ni clamará, no hará oír su voz
en las plazas, no romperá la caña resquebrajada, ni apagará la mecha
que aún humea, hasta que haga triunfar la justicia sobre la tierra; y en
él pondrán todas las naciones su esperanza”.
67
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS mío y Dios mío. Dichosos los que
Mira, Señor, los dones de tu Iglesia su- viven en tu casa y puedan alabarte
plicante, y concede que, al recibirlos, siempre.
sirvan a tus fieles para crecer en santi-
dad. Por Jesucristo, nuestro Señor. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Alimentados con los dones que he-
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN CFR. SAL 83, 4-5 mos recibido, te suplicamos, Señor,
El gorrión ha encontrado una casa, que, participando frecuentemen-
y la golondrina un nido donde po- te de este sacramento, crezcan los
ner sus polluelos: junto a tus al- efectos de nuestra salvación. Por
tares, Señor de los ejércitos, Rey Jesucristo, nuestro Señor.
Fuente:
@ipaniza Bendición
para los
alimentos
Bendito seas, Señor, Dios del uni-
verso, por estos alimentos, fruto de
la tierra y del trabajo del hombre,
Fotografía que recibimos de tu generosidad y
ahora vamos a compartir agradeci-
de portada
dos. Tú que vives y reinas por los
siglos de los siglos.
Bienaventurados ustedes, cuando por O bien:
causa mía los insulten, los persigan y
Te damos gracias, Señor, por es-
les levanten toda clase de calumnias.
tos alimentos que por tu bondad
Alégrense y muéstrense contentos,
vamos a tomar. Haz que, renova-
porque será grande la recompensa
que recibirán en el cielo.Mt 5, 11-12
das nuestras fuerzas, te sirvamos
siempre con alegría.
En la fotografía de portada una
O bien:
niña demostrando con su sonrisa que
Al reconocer en esta mesa y
cuando seguimos a Jesús aún en me-
en estos alimentos la bendición
dio de las dificultades, siempre debe-
constante de tu amor y de tu pro-
mos de estar alegres, llenos de gozo
videncia, te alabamos, Señor, te
porque no estamos solos, a nuestro
bendecimos y te damos gracias, a
lado está Jesús que es nuestro Cami-
ti que vives y reinas por los siglos
no, nuestras Verdad y nuestra Vida.
de los siglos.
68
Domingo 19
SALTERIO:
SEMANA IV - VE XVI DOMINGO DEL TO /A 19
VENCER EL MAL AL «ESTILO» DE JESUCRISTO
E n la sociedad actual la condición humana parece no tener buena fama.
Basta asomarse a las redes para descubrir un pesimismo en torno a lo
humano: «cada vez que conozco más a la gente quiero más a mi perro». Son
expresiones que, aunque tal vez pueden ser calificadas como «ocurrencias
emocionales» ante alguna decepción, no dejan de ser el reflejo de una frus-
tración social que está cundiendo gracias a la manipulación de las ideologías,
que buscan la muerte de la condición humana.
En el extremo de esta confusión –sembrada con intención por las ideo-
logías– está el juicio social que le acredita dignidad humana a los animales
mientras se la niega a los propios humanos: hoy encontramos animales vi-
viendo de modo humano y a niños a quienes se les niega el derecho a la vida
o viven en condiciones inhumanas.
Aunque existen muchas obras malas en el mundo la «solución» no está en
eliminar la «especie» humana. El libro de la Sabiduría nos muestra el camino
que Dios sigue: la indulgencia y el perdón que crean las condiciones para la
conversión de modo que el justo pueda emerger: «Obrando así enseñas a tu
pueblo que el justo debe ser humano y amigo de lo humano». Los cristianos
tenemos que abrirnos a la sabiduría que viene de Dios para poder así mirar
con misericordia al pecador; detestar el pecado y abrazar al pecador.
No podemos perder la esperanza en lo humano. Al contrario, recordemos
que para ser plenamente humanos es necesario, ser más divinos, es decir,
cultivar nuestra intimidad con el Dios misericordia. «El Espíritu –de Dios–
viene en ayuda de nuestra debilidad», afirma la segunda lectura. Porque es-
tamos expuestos al mal; unas veces como víctimas y otras como victimarios,
todos tenemos experiencia del mal y del pecado, y solo el auxilio del Señor
puede ayudarnos a vencer el mal a fuerza de bien y a desarraigarlo de nuestro
ser y de nuestra tierra.
En la Iglesia y en sus comunidades también se hace presente el mal y el
pecado. Sin embargo, hoy Jesús en el Evangelio nos enseña la actitud que el
Padre toma con nosotros pecadores. Deja que crezcan juntos el trigo y la ci-
zaña, con la finalidad de darle tiempo al pecador que se arrepienta y se vuel-
va ha Él, pues Dios no quiere la muerte del pecador sino que se arrepienta y
viva. Como cristianos debemos aprender a ser pacientes con los que hacen el
mal y comprender que nuestros actos no nos definen por completo, siempre
tenemos la oportunidad de cambiar y ser mejores persona y con ello mejores
cristianos. Pidamos a Dios la gracia de poder detestar el pecado y abrazar al
pecador. P. Yorban Figueroa, Operario Diocesano
69
ANTÍFONA DE ENTRADA SAL 53, 6. 8 SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 85

El Señor es mi auxilio y el único apo- R. Tú, Señor, eres bueno y clemente.
yo en mi vida. Te ofreceré de cora- • Puesto que eres, Señor, bueno y
zón un sacrificio y daré gracias a tu clemente y todo amor con quien
nombre, Señor, porque eres bueno. tu nombre invoca, escucha mi
oración y a mi súplica da res-
ORACIÓN COLECTA puesta pronta. /R.
Sé propicio, Señor, con tus siervos • Señor, todos los pueblos vendrán
y multiplica, bondadoso, sobre ellos para adorarte y darte gloria, pues
los dones de tu gracia, para que, fer- sólo tú eres Dios, y tus obras, Se-
vorosos en la fe, la esperanza y la ca- ñor, son portentosas. /R.
ridad, perseveren siempre fieles en el • Dios entrañablemente compasi-
cumplimiento de tus mandatos. Por vo, todo amor y lealtad, lento a la
nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, … cólera, ten compasión de mí, pues
clamo a ti, Señor, a toda hora. /R.
PRIMERA LECTURA
SEGUNDA LECTURA
Al pecador le das tiempo
El Espíritu intercede por nosotros
para que se arrepienta.
con gemidos que no pueden
Del libro de la Sabiduría expresarse con palabras.
12, 13. 16-19 De la Carta del apóstol san
No hay más Dios que tú, Señor, que Pablo a los romanos 8, 26-27
cuidas de todas las cosas. No hay Hermanos: El Espíritu nos ayuda en
nadie a quien tengas que rendirle nuestra debilidad, porque nosotros
cuentas de la justicia de tus senten- no sabemos pedir lo que nos con-
cias. Tu poder es el fundamento de viene; pero el Espíritu mismo inter-
tu justicia, y por ser el Señor de to- cede por nosotros con gemidos que
dos, eres misericordioso con todos. no pueden expresarse con palabras.
Tú muestras tu fuerza a los que du- Y Dios, que conoce profundamente
dan de tu poder soberano y castigas los corazones, sabe lo que el Espíri-
a quienes, conociéndolo, te desaf ían. tu quiere decir, porque el Espíritu
Siendo tú el dueño de la fuerza, juz- ruega conforme a la voluntad de
gas con misericordia y nos gobier- Dios, por los que le pertenecen.
nas con delicadeza, porque tienes el Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.
poder y lo usas cuando quieres.
Con todo esto has enseñado a tu CFR. MT 11, 25
pueblo que el justo debe ser huma- R. Aleluya, aleluya.
no, y has llenado a tus hijos de una Te doy gracias, Padre, Señor del
dulce esperanza, ya que al pecador cielo y de la tierra, porque has re-
le das tiempo para que se arrepienta. velado los misterios del Reino a la
Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor. gente sencilla. /R.
70
Domingo 19
X
E
n aquel tiempo, Jesús propuso esta parábola a la muchedumbre:
“El Reino de los cielos se parece a un hombre que sembró buena
semilla en su campo; pero mientras los trabajadores dormían, llegó un
enemigo del dueño, sembró cizaña entre el trigo y se marchó. Cuando
crecieron las plantas y se empezaba a formar la espiga, apareció tam-
bién la cizaña.
Entonces los trabajadores fueron a decirle al amo: ‘Señor, ¿qué no
sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde, pues, salió esta ci-
zaña?’ El amo les respondió: ‘De seguro lo hizo un enemigo mío’. Ellos
le dijeron: ‘¿Quieres que vayamos a arrancarla?’ Pero él les contestó:
‘No. No sea que al arrancar la cizaña, arranquen también el trigo. De-
jen que crezcan juntos hasta el tiempo de la cosecha y, cuando llegue
la cosecha, diré a los segadores: Arranquen primero la cizaña y átenla
en gavillas para quemarla; y luego almacenen el trigo en mi granero’”.
Luego les propuso esta otra parábola: “El Reino de los cielos es se-
mejante a la semilla de mostaza que un hombre siembra en un huer-
to. Ciertamente es la más pequeña de todas las semillas, pero cuando
crece, llega a ser más grande que las hortalizas y se convierte en un ar-
busto, de manera que los pájaros vienen y hacen su nido en las ramas”.
Les dijo también otra parábola: “El Reino de los cielos se parece a un
poco de levadura que tomó una mujer y la mezcló con tres medidas de
harina, y toda la masa acabó por fermentar”.
Jesús decía a la muchedumbre todas estas cosas con parábolas, y sin
parábolas nada les decía, para que se cumpliera lo que dijo el profeta:
Abriré mi boca y les hablaré con parábolas; anunciaré lo que estaba
oculto desde la creación del mundo.
Luego despidió a la multitud y se fue a su casa. Entonces se le acer-
caron sus discípulos y le dijeron: “Explícanos la parábola de la cizaña
sembrada en el campo”.
Jesús les contestó: “El sembrador de la buena semilla es el Hijo del
hombre, el campo es el mundo, la buena semilla son los ciudadanos
del Reino, la cizaña son los partidarios del maligno, el enemigo que la
siembra es el diablo, el tiempo de la cosecha es el fin del mundo, y los
segadores son los ángeles.
Y así como recogen la cizaña y la queman en el fuego, así sucederá
al fin del mundo: el Hijo del hombre enviará a sus ángeles para que
71
arranquen de su Reino a todos los que inducen a otros al pecado y a

todos los malvados, y los arrojen en el horno encendido. Allí será el
llanto y la desesperación. Entonces los justos brillarán como el sol en
el Reino de su Padre. El que tenga oídos, que oiga”.
ORACIÓN DE LOS FIELES (Intenciones libres)

S. Hermanos, ya que el Espíritu in- S. Padre bueno, que no cesas de in-
tercede por nosotros por lo que no vitarnos a todos a levantarnos de
podemos expresar, digámosle al Pa- nuestros pecados, ven en ayuda de
dre una oración conforme a su vo- nuestra debilidad y llénanos de tu
luntad. Digamos: bondad. Tú que vives y reinas.
L. Creador del universo, que nos
hiciste a tu imagen, nos guías Dios nuestro, que con la perfección
con sabiduría y te compadeces de un único sacrificio pusiste fin a
de nuestros pecados, aleja de la diversidad de sacrificios de la an-
nuestra Iglesia toda envidia, toda tigua ley, recibe las ofrendas de tus
rivalidad, toda división. Oremos. fieles, y santif ícalas como bendijiste
L. Señor, tú muestras tu fuerza a la ofrenda de Abel, para que aque-
los que dudan; ilumina los cora- llo que cada uno te ofrece en honor
zones de quienes te buscan sin de tu gloria, sea de provecho para la
conocerte y viven conforme a tu salvación de todos. Por Jesucristo,
voluntad. Oremos. nuestro Señor.
L. Padre de todos, asiste a los go-
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN SAL 110, 4-5
bernantes y líderes de nuestro
país, y revélate a ellos como el Ha hecho maravillas memorables,
Dios compasivo, que da tiempo el Señor es piadoso y clemente; él
al arrepentimiento. Oremos. da alimento a sus fieles.
L. Señor, tú que comprendes las
fragilidades de nuestras familias,
hazles saber que tú te ocupas de Señor, muéstrate benigno con tu
ellas, especialmente de aquellas pueblo, y ya que te dignaste alimen-
divididas y frustradas. Oremos. tarlo con los misterios celestiales,
L. Señor, tú siembras cada día el hazlo pasar de su antigua condición
buen trigo en nuestros corazo- de pecado a una vida nueva. Por Je-
nes, no permitas que ningún tipo sucristo, nuestro Señor.
de cizaña divida lo que tú has
unido. Oremos
72
Lunes 20
FERIA o bien SAN APOLINAR, OBISPO Y

MÁRTIR, ML - VE o RO LUNES 20
DIOS OFRECE LA SALVACIÓN A LOS HUMILDES
M iqueas ofrece al ser humano el “saber” de lo que el Señor desea de
él, es decir, el movimiento de la voluntad que exige el saber lo que Él
espera, captar lo que hay que hacer, penetrar su voluntad para someterse a
ella. En todo esto es de suma importancia el oír o escuchar más que el ver.
Ese “saber” lo resume en tres cosas: la práctica de la justicia, el amor a la
lealtad y la humildad ante Dios. “Respetar el derecho” es una actitud propia
del poder absoluto del rey, esa es una de sus funciones y obligaciones, aun
cuando eso también se le atribuye a Dios en su actividad creadora y en sus
juicios. En el entramado del texto de hoy, Dios convoca a un juicio para
presentar sus quejas contra Israel y reclamar el respeto del derecho y de la
justicia.
El “amor a la lealtad” está en relación con la fidelidad unida al servicio,
al amor y a las normas establecidas por un pacto o juramento. En el texto
implicaría un amor a los preceptos de la alianza, que reproduce el querer
de Dios para con su pueblo y sus gobernantes. Israel no puede olvidar los
muchos beneficios de Dios para con él y por eso tiene sus exigencias para
con su pueblo. El “proceder humilde con Dios” se relaciona con una actitud
de humildad, sumisión, acatamiento y puede ir de la mano con la idea de
humillarse por necesidad. En todo caso, el Antiguo Testamento conserva la
idea de que Dios no rechaza a los que se humillan ante Él, sino que más bien
les otorga la salvación. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA SAL 53, 6. 8 PRIMERA LECTURA

El Señor es mi auxilio y el único apo- Te daré a conocer lo que
el Señor desea de ti.
yo en mi vida. Te ofreceré de cora-
zón un sacrificio y daré gracias a tu Del libro del profeta Miqueas 6, 1-4. 6-8
nombre, Señor, porque eres bueno. Escuchen lo que dice el Señor: “Le-
vántate; llama a juicio a los montes,
ORACIÓN COLECTA que las colinas escuchen tu voz. Es-
Sé propicio, Señor, con tus siervos cuchen, montes, el juicio del Señor,
y multiplica, bondadoso, sobre ellos pongan atención, cimientos de la
los dones de tu gracia, para que, fer- tierra: el Señor entabla juicio con-
vorosos en la fe, la esperanza y la ca- tra su pueblo, presenta sus quejas
ridad, perseveren siempre fieles en el contra Israel.
cumplimiento de tus mandatos. Por Pueblo mío, ¿qué mal te he causa-
nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, … do o en qué cosa te he ofendido?
73
Respóndeme. Con la ayuda de Moi- Dios quien va a juzgar y el cielo

sés, Aarón y María, yo te saqué de mismo lo declara. /R.
Egipto y te libré de la esclavitud”. • No voy a reclamarte sacrificios,
¿Qué cosa digna le ofreceré al Señor, pues siempre están ante mí tus
postrado ante el Dios del cielo? ¿Le holocaustos. Pero ya no aceptaré
ofreceré en holocausto becerros de becerros de tu casa ni cabritos de
un año? ¿Aceptará el Señor un mi- tus rebaños. /R.
llar de carneros o diez mil ríos de • ¿Por qué citas mis preceptos y ha-
aceite? ¿En expiación por mis culpas blas a toda hora de mi pacto, tú,
le ofreceré a mi primogénito, al fruto que detestas la obediencia y echas
de mis entrañas, por mi pecado? en saco roto mis mandatos? /R.
Hombre, ya te he explicado lo que es • Tú haces esto, ¿y yo tengo que ca-
bueno, lo que el Señor desea de ti: que llarme? ¿Crees acaso que yo soy
practiques la justicia y ames la lealtad como tú? Quien las gracias me
y que seas humilde con tu Dios. da, ése me honra y yo salvaré al
Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor. que cumple mi voluntad. /R.
SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 49 ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO
CFR. SAL 94, 8
R. Dios salva al que cumple su
voluntad. R. Aleluya, aleluya.
• Congreguen ante mí a los que se- Hagámosle caso al Señor, que nos
llaron sobre el altar mi alianza. Es dice: “No endurezcan su corazón”. /R.
X
E
n aquel tiempo, le dijeron a Jesús algunos escribas y fariseos: “Maes-
tro, queremos verte hacer una señal prodigiosa”. Él les respondió:
“Esta gente malvada e infiel está reclamando una señal, pero la única se-
ñal que se le dará, será la del profeta Jonás. Pues de la misma manera que
Jonás estuvo tres días y tres noches en el vientre de la ballena, así también
el Hijo del hombre estará tres días y tres noches en el seno de la tierra.
Los habitantes de Nínive se levantarán en el día del juicio contra esta
gente y la condenarán, porque ellos se convirtieron con la predicación
de Jonás, y aquí hay alguien más grande que Jonás.
La reina del sur se levantará el día del juicio contra esta gente y la con-
denará, porque ella vino de los últimos rincones de la tierra a oír la sabi-
duría de Salomón, y aquí hay alguien más grande que Salomón”.
74
Martes 21
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN SAL 110, 4-5

Dios nuestro, que con la perfección Ha hecho maravillas memorables,
de un único sacrificio pusiste fin a el Señor es piadoso y clemente; él
la diversidad de sacrificios de la anda alimento a sus fieles.
tigua ley, recibe las ofrendas de tus ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
fieles, y santif ícalas como bendijiste Señor, muéstrate benigno con tu
la ofrenda de Abel, para que aque- pueblo, y ya que te dignaste alimen-
llo que cada uno te ofrece en honor tarlo con los misterios celestiales,
de tu gloria, sea de provecho para la hazlo pasar de su antigua condición
salvación de todos. Por Jesucristo, de pecado a una vida nueva. Por Je-
nuestro Señor. sucristo, nuestro Señor.
FERIA o bien SAN LORENZO DE BRINDIS

PRESBÍTERO Y DOCTOR DE LA IGLESIA, ML - VE o BL MARTES 21
LA NUEVA FAMILIA DE JESÚS
M ateo informa de una visita que los parientes le hacen a Jesús. Entre los
parientes está también su madre. El evangelista abordará de nuevo el
tema familiar en el siguiente capítulo (Mt 13, 5-8). Se podía pensar que los
parientes formaban parte de los oyentes habituales de Jesús. El texto de Mateo,
más bien indican lo contrario: “estaban fuera” del lugar en el que Jesús hablaba.
Mateo relata simplemente el hecho, y permanece neutral. Se distancia de
Marcos, que emite un juicio negativo, al considerar que los familiares venían
para llevárselo por considerar que estaba “trastornado” (Mc 3, 21).
La palabra “hermanos” tiene una significación amplia en la tradición bíblica.
Entre los judíos, “hermano” es un ciudadano del pueblo de Israel. En el nue-
vo testamento, puede referirse a parientes, a personas de la misma raza, a los
miembros de una misma comunidad, considerada como “Iglesia de Dios”.
Mateo señala con claridad una condición para ser discípulo de Jesús y para
entrar a formar parte de la nueva familia: “cualquiera que cumpla la voluntad
de mi Padre del cielo” (Mt 12, 50). P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA SAL 53, 6. 8 ORACIÓN COLECTA

El Señor es mi auxilio y el único Sé propicio, Señor, con tus siervos
apoyo en mi vida. Te ofreceré de y multiplica, bondadoso, sobre ellos
corazón un sacrificio y daré gracias los dones de tu gracia, para que,
a tu nombre, Señor, porque eres fervorosos en la fe, la esperanza y la
bueno. caridad, perseveren siempre fieles
75
en el cumplimiento de tus manda- juraste a nuestros padres en tiempos

tos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu remotos, Señor, Dios nuestro.
Hijo, … Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.

PRIMERA LECTURA
R. Muéstranos, Señor, tu
Arrojará a lo hondo del
misericordia.
mar nuestros delitos.
Del libro del profeta Miqueas • Señor, has sido bueno con tu tie-
7, 14-15. 18-20 rra, pues cambiaste la suerte de
Jacob, perdonaste las culpas de
Señor, Dios nuestro, pastorea a tu tu pueblo y sepultaste todos sus
pueblo con tu cayado, a las ovejas pecados; reprimiste tu cólera y
de tu heredad, que permanecen frenaste el incendio de tu ira. /R.
aisladas en la maleza, en medio de • También ahora cambia nuestra
campos feraces. Pastarán en Basán suerte, Dios, salvador nuestro, y
y en Galaad, como en los días de deja ya tu rencor contra noso-
antaño, como cuando salimos de tros. ¿O es que vas a estar siem-
Egipto y nos mostrabas tus prodi- pre enojado y a prolongar tu ira
gios. ¿Qué Dios hay como tú, que de generación en generación? /R.
quitas la iniquidad y pasas por alto • ¿No vas a devolvernos la vida para
la rebeldía de los sobrevivientes de que tu pueblo se alegre contigo?
Israel? No mantendrás por siempre Muéstranos, Señor, tu misericor-
tu cólera, pues te complaces en ser dia y danos tu salvación. /R.
misericordioso.
Volverás a compadecerte de noso- ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO JN 14, 23
tros, aplastarás con tus pies nuestras R. Aleluya, aleluya.
iniquidades, arrojarás a lo hondo del El que me ama cumplirá mi palabra
mar nuestros delitos. Serás fiel con Ja- y mi Padre lo amará y haremos en
cob y compasivo con Abraham, como él nuestra morada, dice el Señor. /R.
X EVANGELIO (Mt 12, 46-50)

En aquel tiempo, Jesús estaba hablando a la muchedumbre, cuando su
madre y sus parientes se acercaron y trataban de hablar con él. Alguien
le dijo entonces a Jesús: “Oye, ahí fuera están tu madre y tus hermanos, y
quieren hablar contigo”.
Pero él respondió al que se lo decía: “¿Quién es mi madre y quiénes son
mis hermanos?” Y señalando con la mano a sus discípulos, dijo: “Estos
son mi madre y mis hermanos. Pues todo el que cumple la voluntad de mi
Padre, que está en los cielos, ése es mi hermano, mi hermana y mi madre”.
76
Miércoles 22

SANTA MARÍA, MAGDALENA

FIESTA - BL MIÉRCOLES 22
JESÚS SE INTERESA POR LOS SUYOS
L a memoria de María Magdalena, y la frase de Jesús en Juan, “Mujer,
¿por qué estás llorando? ¿A quién buscas?”, pueden darnos algunas
pautas para la comprensión de cómo trataba Él a la mujer. Como “enviado”
del Padre, su misión es ponerse al “servicio” de todos los que tengan necesi-
dades. La mujer aparece en la predicación de Jesús en algunas parábolas, Él
no teme hablar con ellas en privado, como con la samaritana junto al pozo
de Jacob. Concede la curación de enfermedades a las que se lo solicitan o lo
buscan. Se deja acompañar por un grupo de ellas para que lo atiendan a lo
largo de su camino y estén presentes en el proceso de la pasión. Serán ellas
las que anuncien y den testimonio de que la tumba está vacía y, por tanto,
de que ha resucitado, aun cuando en aquella cultura no podían ser testigos.
Por lo tanto, en la misión de Jesús no hay discriminación hacia ellas y no las
excluye de la salvación.
En relación con Magdalena, hay un interés de Jesús por su llanto y por su
búsqueda. La pregunta de Jesús resalta el modo como el resucitado se inte-
resa por su situación, y, finalmente, la llama por su nombre: “María”. Esto le
da a ella la seguridad de que, Jesús su Maestro amado, está vivo. Al escuchar
su nombre de labios de su Maestro toda su tristeza se convierte en alegría.
María Madalena, llena de gozo, se pone en camino... va al encuentro de los
apóstoles y les comparte la alegría de haber visto a Jesús resucitado y les tras-
mite el mensaje del Maestro: "Ve a decir a mis hermanos: ‘Subo a mi Padre y
su Padre, a mi Dios y su Dios’”. Como cristianos debemos hacer experiencia
del Cristo resucitado y compartirla con nuestros hermanos. P.W.S.
77
ANTÍFONA DE ENTRADA aquel que ama mi alma?’ Y apenas se

JN 20, 17
Dijo Jesús a María Magdalena: Ve a fueron, encontré al amor de mi alma”.
mis hermanos y diles: Subo a mi Pa- Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.
dre y su Padre, a mi Dios y su Dios.
ORACIÓN COLECTA
R. Señor, mi alma tiene sed de ti.
Dios nuestro, que quisiste que santa
María Magdalena fuera la primera • Señor, tú eres mi Dios, a ti te bus-
en recibir de tu Unigénito el enco; de ti sedienta está mi alma. Se-
cargo de anunciar el gozo pascual, ñor, todo mi ser te añora, como el
concédenos por su intercesión suelo reseco añora el agua. /R.
que, siguiendo su ejemplo, anun- • Para admirar tu gloria y tu poder,
ciemos a Cristo resucitado y me- anhelo contemplarte en el santua-
rezcamos contemplarlo reinando rio. Pues mejor es tu amor que la
en el cielo. Él, que vive y reina existencia; siempre, Señor, te ala-
contigo... barán mis labios. /R.
• Podré así bendecirte mientras viva
PRIMERA LECTURA y levantar en oración mis manos.
Encontré al amor de mi alma. De lo mejor se saciará mi alma; te
Del libro del Cantar de alabaré con júbilo en los labios. /R.
los Cantares 3, 1-4 • Fuiste mi auxilio y a tu sombra,
Esto dice la esposa: “En mi lecho, canté lleno de gozo. A ti se ad-
por las noches, a mi amado yo bus- hiere mi alma y tu diestra me da
caba. Lo busqué, pero fue en vano. seguro apoyo. /R.
Me levantaré. Por las plazas y ba-
rrios de la ciudad buscaré al amor
de mi alma. R. Aleluya, aleluya.
Lo busqué, pero fue en vano. Y me ¿Qué has visto de camino, María,
encontraron los guardias de la ciu- en la mañana? A mi Señor glorioso,
dad, y les dije: ‘¿Qué no vieron a la tumba abandonada /R.
X
E
EVANGELIO (Jn 20, 1-2. 11-18)
l primer día después del sábado, estando todavía oscuro, fue Ma-
ría Magdalena al sepulcro y vio removida la piedra que lo cerra-
ba. Echó a correr, llegó a la casa donde estaban Simón Pedro y el otro
discípulo, a quien Jesús amaba, y les dijo: "Se han llevado del sepulcro
al Señor y no sabemos dónde lo habrán puesto".
78
Miércoles 22
María se había quedado llorando junto al sepulcro de Jesús. Sin dejar

de llorar, se asomó al sepulcro y vio dos ángeles vestidos de blanco,
sentados en el lugar donde había estado el cuerpo de Jesús, uno en la
cabecera y el otro junto a los pies. Los ángeles le preguntaron: “¿Por
qué estás llorando, mujer?” Ella les contestó: “Porque se han llevado a
mi Señor y no sé dónde lo habrán puesto”.
Dicho esto, miró hacia atrás y vio a Jesús de pie, pero no sabía que
era Jesús. Entonces él le dijo: "Mujer, ¿por qué estás llorando? ¿A quién
buscas?" Ella, creyendo que era el jardinero, le respondió: "Señor, si tú
te lo llevaste, dime dónde lo has puesto". Jesús le dijo: "¡María!" Ella se
volvió y exclamó: “¡Rabbuní!”, que en hebreo significa ‘maestro’. Jesús
le dijo: "Déjame ya, porque todavía no he subido al Padre. Ve a decir a
mis hermanos: ‘Subo a mi Padre y su Padre, a mi Dios y su Dios’”.
María Magdalena se fue a ver a los discípulos para decirles que había
visto al Señor y para darles su mensaje”.

Acepta, Señor, los dones que te pre- María
sentamos en la conmemoración de Magdalena
santa María Magdalena, con el mis- Magdalena: torre de Dios
mo agrado con el que tu Unigénito
aceptó su homenaje de amor. Él, que La tradición y la liturgia creen, con san
Agustín, que la mujer que aparece en dis-
vive y reina por los siglos de los siglos. tintos pasajes del evangelio es, en los tres
casos, María Magdalena; La pecadora per-
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN 2COR 5, 14. 15 donada, de la que el Señor ha echado siete
demonios, y que acompañaba permanente-
El amor de Cristo nos apremia a mente a Jesús y a sus apóstoles.
que no vivamos para nosotros mis-
mos, sino sólo para él, que por no- A diferencia de sus apóstoles que huyeron
del escándalo de la cruz, María Magdalena,
sotros murió y resucitó. junto con la Madre de Jesús y el discípulo
“amado”, permanece al pie de la cruz, y con
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN gran dolor lo llora en el sepulcro.
Señor, que la santa recepción de tu No desfallece el amor ni ante el dolor
sacramento, infunda en nosotros ni ante la muerte. Por su
grado de fidelidad, el resu-
aquel amor perseverante con el citado se muestra prime-
que santa María Magdalena estuvo ramente a ella, envián-
siempre unida a Cristo, su maestro. dola a anunciar la
alegría pascual
Él, que vive y reina por los siglos de de la resurrec-
los siglos. ción.
79
23 JUEVES FERIA o bien SANTA BRÍGIDA

RELIGIOSA, ML - VE o BL
EN BUSCA DE UNA MAYOR FAMILIARIDAD CON DIOS
L os discípulos de Jesús escuchan una frase que les pone, en cierto modo
y sin pretensiones de vanagloria, por encima de los demás: “A ustedes se
les ha concedido conocer los misterios del Reino de los Cielos; pero a ellos no”.
El verbo “conocer” ha de entenderse en el sentido de comprensión de un asun-
to, entender algo tal como es, ir más allá de una simple opinión. Podríamos
comprenderlo también, dentro del contexto de Mateo, como “familiarizarse”
con algo, o dominar un asunto. Jesús lo relaciona con la profecía de Isaías, y
si lo interpretamos, Él querría decir que el conocimiento consiste en oír com-
prendiendo y mirar viendo. Más aún, ablandar el corazón, abrir los ojos y el
oído para convertirse y obtener la salvación que Dios ofrece en Jesús.
El papa Benedicto XVI retoma las ideas antes mencionadas al afirmar que
“la lectura de la Palabra de Dios nos ayuda en el camino de penitencia y con-
versión, nos permite profundizar en el sentido de la pertenencia eclesial y nos
sustenta en una familiaridad más grande con Dios. Como dice san Ambrosio,
cuando tomamos con fe las Sagradas Escrituras en nuestras manos, y las lee-
mos con la Iglesia, el hombre vuelve a pasear con Dios en el paraíso” (Verbum
Domini 87). Notemos algunas palabras claves para profundizar en el misterio
de la intimidad personal con Dios: camino de penitencia y conversión, perte-
nencia eclesial, familiaridad con Dios, pasear con Dios, abrirse a Él. P.W.S
ANTÍFONA DE ENTRADA SAL 53, 6. 8 PRIMERA LECTURA

El Señor es mi auxilio y el único Me abandonaron a mí, manantial
apoyo en mi vida. Te ofreceré de de aguas vivas, y se hicieron
cisternas agrietadas.
corazón un sacrificio y daré gracias
a tu nombre, Señor, porque eres Del libro del profeta Jeremías
2, 1-3. 7-8. 12-13
bueno.
En aquel tiempo, me habló el Señor
ORACIÓN COLECTA y me dijo: “Ve y grita a los oídos de
Sé propicio, Señor, con tus siervos Jerusalén: ‘Esto dice el Señor: Aún
y multiplica, bondadoso, sobre ellos recuerdo el cariño de tu juventud
los dones de tu gracia, para que, fer- y tu amor de novia para conmigo,
vorosos en la fe, la esperanza y la ca- cuando me seguías por el desierto,
ridad, perseveren siempre fieles en el por una tierra sin cultivo.
cumplimiento de tus mandatos. Por Israel estaba consagrado al Se-
nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, … ñor como primicia de su cosecha.
80
Jueves 23
Quien se atrevía a comer de ella, • Señor, tu misericordia es tan

cometía un delito y la desgracia caía grande como el cielo y tu fideli-
sobre él. dad, como desde la tierra hasta las
Yo los traje a ustedes a una tierra de nubes. Más grande que las mon-
jardines, para que comieran de sus tañas es tu justicia y tus sentencias
excelentes frutos. Pero llegaron y son como el océano inmenso. /R.
profanaron mi tierra, convirtieron • Señor, qué inapreciable es tu mi-
mi heredad en algo abominable. sericordia. Los seres humanos se
Los sacerdotes ya no hablan de acogen a la sombra de tus alas, se
Dios y los doctores de la ley no me nutren de lo más sabroso de tu
conocen, los pastores han profeti- casa y tú les das a beber el torren-
zado en nombre de Baal y adoran te de tus delicias. /R.
a los ídolos. • Porque tú eres, Señor, la fuente
Espántense, cielos, de ello, horro- de la vida y tu luz nos hace ver la
rícense y pásmense, —palabra del luz. Prolonga tu misericordia con
Señor—, porque dos maldades ha los que te reconocen y tu justicia
cometido mi pueblo: me abandona- con los rectos de corazón. /R.
ron a mí, manantial de aguas vivas,
y se hicieron cisternas agrietadas, CFR. MT 11, 25
que no retienen el agua’”.
Te doy gracias, Padre, Señor del
SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 35 cielo y de la tierra, porque has re-
R. Tú eres, Señor, la fuente de la velado los misterios del Reino a la
vida. gente sencilla. /R.
X
E
n aquel tiempo, se acercaron a Jesús sus discípulos y le preguntaron:
“¿Por qué les hablas en parábolas?” Él les respondió: “A ustedes se les
ha concedido conocer los misterios del Reino de los cielos; pero a ellos no.
Al que tiene se le dará más y nadará en la abundancia; pero al que tiene
poco, aun ese poco se le quitará. Por eso les hablo en parábolas, porque
viendo no ven y oyendo no oyen ni entienden.
En ellos se cumple aquella profecía de Isaías que dice: Ustedes oirán una
y otra vez y no entenderán; mirarán y volverán a mirar, pero no verán;
porque este pueblo ha endurecido su corazón, ha cerrado sus ojos y tapa-
do sus oídos, con el fin de no ver con los ojos ni oír con los oídos, ni com-
prender con el corazón. Porque no quieren convertirse ni que yo los salve.
81
Pero, dichosos ustedes, porque sus ojos ven y sus oídos oyen. Yo les
aseguro que muchos profetas y muchos justos desearon ver lo que
ustedes ven y no lo vieron y oír lo que ustedes oyen y no lo oyeron”.

24 VIERNES FERIA o bien SAN CHÁRBEL MAKHLOUF

PRESBÍTERO, ML - VE o BL
¿QUÉ TIPO DE TERRENO ERES?

H oy la Palabra de Dios nos invita a volver a Dios nuestro Padre: “Vuél-
vanse a mí hijos desobedientes, porque yo soy Dueño” Para ello es
necesario que entremos en nuestro interior y hagamos un serio examen de
conciencia para darnos cuenta en donde estamos y en que le hemos fallado
a Dios, a nuestros hermanos y a nosotros mismos.
En este sentido también nos ayuda la explicación que hace Jesús sobre
la parábola del sembrador. Pues nos invita a revisar nuestra vida, nuestro
terreno, nuestro corazón. Según esta parábola existen cuatro tipos de te-
rrenos. 1. Endurecido por las pisadas de la gente (el camino) 2. Lleno de
piedras, sin trabajar, (terreno pedregoso) 3. Descuidado lleno de maleza y
espinas (terreno con espinas) 4. El bien cuidado y cultivado continuamente
(la tierra buena).
Entremos pues en nosotros mismos y veamos cómo está ese terreno. En-
durecido por el maltrato de la gente, los sufrimientos, los problemas de la
vida. Quizá se ha convertido en terreno donde todos tiran lo que no les sir-
ve… o lo hemos dejado que se llene de maleza, de cizaña y espinas. La buena
82
Viernes 24
noticia es que no importa como esté tu terreno-corazón, sino que tomes

conciencia de su estado y te hagas ayudar por tu Creador.
Preparemos nuestro terreno para que reciba la semilla que es la Palabra
de Dios y nos ayude a purificarnos y liberarnos de las ataduras del pecado y
seamos transformados en mejores personas y con ello en mejores cristianos.
Conscientes de que, si nos dejamos guiar por el AMOR, nos convierte en
terreno fértil para la Palabra de Dios y podemos dar mucho fruto en favor
de los hermanos. P. Miguel Moreno, ssp
ANTÍFONA DE ENTRADA SAL 53, 6. 8 habrá necesidad de invocar el arca

El Señor es mi auxilio y el único de la alianza del Señor, pues ya no
apoyo en mi vida. Te ofreceré de pensarán en ella, ni se acordarán de
corazón un sacrificio y daré gracias ella, ni la echarán de menos, ni se
a tu nombre, Señor, porque eres les ocurrirá hacer otra.
bueno. En aquel tiempo, llamarán a Jerusa-
lén ‘el trono del Señor’, acudirán a
ORACIÓN COLECTA ella todos los pueblos en el nombre
Sé propicio, Señor, con tus siervos del Señor y ya no seguirán la mal-
y multiplica, bondadoso, sobre ellos dad de su corazón obstinado”.
los dones de tu gracia, para que, fer- Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.
vorosos en la fe, la esperanza y la ca-
ridad, perseveren siempre fieles en el SALMO RESPONSORIAL JEREMÍAS 31
cumplimiento de tus mandatos. Por R. El Señor es nuestro pastor.
nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, … • Escuchen, pueblos, la palabra del
Señor y anúncienla aun en las is-
PRIMERA LECTURA
las más remotas: “El que disper-
Les daré pastores según mi corazón. só a Israel lo reunirá y lo cuidará
Acudirán a Jerusalén todos los pueblos.
como el pastor a su rebaño”. /R.
Del libro del profeta Jeremías 3, 14-17
• Porque el Señor redimió a Jacob
“Vuélvanse a mí, hijos rebeldes, y lo rescató de las manos del po-
porque yo soy su dueño, dice el Se- deroso. Ellos vendrán para acla-
ñor: Iré tomando conmigo a uno de marlo al monte Sión y correrán
cada ciudad, a dos de cada familia y hacia los bienes del Señor. /R.
los traeré a Sión; les daré pastores • Entonces se alegrarán las jóve-
según mi corazón, que los apacien- nes, danzando; se sentirán felices
ten con sabiduría y prudencia. jóvenes y viejos, porque yo con-
Después, cuando ustedes se hayan vertiré su tristeza en alegría, y
multiplicado y hayan prosperado los llenaré de gozo y aliviaré sus
en el país, palabra del Señor, ya no penas. /R.
83

CFR. LC 8, 15
PALABRA de Vida
Dichosos los que cumplen la pala- "Lo sembrado en tierra buena, representa
bra del Señor con un corazón bue- a quienes oyen la palabra, la entienden y dan
no y sincero, y perseveran hasta dar fruto"
fruto. /R. Mateo13, 22
X
E
n aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Escuchen ustedes lo
que significa la parábola del sembrador. A todo hombre que oye
la palabra del Reino y no la entiende, le llega el diablo y le arrebata lo
sembrado en su corazón. Esto es lo que significan los granos que caye-
ron a lo largo del camino.
Lo sembrado sobre terreno pedregoso significa al que oye la palabra
y la acepta inmediatamente con alegría; pero, como es inconstante, no
la deja echar raíces, y apenas le viene una tribulación o una persecu-
ción por causa de la palabra, sucumbe.
Lo sembrado entre los espinos representa a aquel que oye la palabra,
pero las preocupaciones de la vida y la seducción de las riquezas, la
sofocan y queda sin fruto.
En cambio, lo sembrado en tierra buena, representa a quienes oyen
la palabra, la entienden y dan fruto; unos, el ciento por uno; otros, el
sesenta; y otros, el treinta”.

84
Sábado 25
SANTIAGO, APÓSTOL
FIESTA - RO SÁBADO 25
INMERSOS EN EL MISTERIO DEL SERVICIO
U na vez más la liturgia se vuelve fiesta apostólica. Los textos bíblicos ha-
blan, cada uno a su manera, de un camino de cruz y muerte. Pablo ase-
gura que llevamos siempre la muerte de Jesús en nuestro cuerpo. Jesús asegura
que los hijos de Zebedeo, dentro de los cuales se encuentra el apóstol Santiago,
beberán su cáliz. En ambos textos esa muerte está en relación con la impor-
tante actitud del servicio, que, para quien lo realiza, es signo de muerte, pero
se convierte en signo de vida para los destinatarios. Pablo hace la gran lista de
las diversas situaciones a las que está sometido el apóstol, mientras que Jesús
habla de un servicio que termina en dar la vida por la redención de los demás.
El anuncio del Evangelio es siempre un beneficio de los destinatarios.
Debe estar claro que seguir a Jesús no está en sintonía con la búsqueda de
puestos de honor en su Reino, de lucha por ocupar primeros lugares, sino de
servicio, de bautismo, es decir, ser sumergidos en el misterio pascual, pasar
por la muerte para acceder a la vida, gracias a Aquel que, resucitado, nos re-
sucitará también a nosotros. Los apóstoles debieron pasar por una tremenda
escuela del sufrimiento para comprender que el servicio lo es todo en la vida
del discípulo, sus aspiraciones debieron ser transformadas por la experiencia
de la cruz, pero al final han logrado su meta, seguir a Jesús por el camino de la
cruz para llegar triunfantes a la Pascua y anunciarla con fe. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. MT 4, 18. 21 PRIMERA LECTURA

Caminando Jesús por la ribera del Llevamos siempre la muerte
mar de Galilea, vio a Santiago y a de Jesús en nuestro cuerpo.
su hermano Juan, hijos de Zebedeo, Segunda Carta del apóstol san
que estaban remendando sus redes, Pablo a los corintios 4, 7-15
y los llamó. Hermanos: Llevamos este tesoro en
Se dice Gloria.
vasijas de barro, para que se vea que
esta fuerza tan extraordinaria pro-
ORACIÓN COLECTA viene de Dios y no de nosotros mis-
Dios todopoderoso y eterno, que mos. Por eso sufrimos toda clase de
consagraste las primicias de la pre- pruebas, pero no nos angustiamos.
dicación apostólica con la sangre del Nos abruman las preocupaciones,
apóstol Santiago, concede a tu Iglesia pero no nos desesperamos. Nos
quedar fortalecida por su martirio vemos perseguidos, pero no des-
y amparada siempre con su protec- amparados; derribados, pero no
ción. Por nuestro Señor Jesucristo. vencidos.
85
Llevamos siempre y por todas partes • Cuando el Señor nos hizo volver
la muerte de Jesús en nuestro cuer- del cautiverio, creíamos soñar;
po, para que en este mismo cuerpo entonces no cesaba de reír nues-
se manifieste también la vida de Je- tra boca, ni se cansaba entonces
sús. Nuestra vida es un continuo es- la lengua de cantar. /R
tar expuestos a la muerte por causa • Aun los mismos paganos con
de Jesús, para que también la vida de asombro decían: “¡Grandes cosas
Jesús se manifieste en nuestra carne ha hecho por ellos el Señor!” Y
mortal. De modo que la muerte ac- estábamos alegres, pues ha he-
túa en nosotros, y en ustedes, la vida. cho grandes cosas por su pueblo
Y como poseemos el mismo espíritu el Señor. /R
de fe que se expresa en aquel texto • Como cambian los ríos la suer-
de la Escritura: “Creo, por eso hablo”, te del desierto, cambia también
también nosotros creemos y por eso ahora nuestra suerte, Señor, y
hablamos, sabiendo que aquel que re- entre gritos de júbilo cosecha-
sucitó a Jesús nos resucitará también rán aquellos que siembran con
a nosotros con Jesús y nos colocará dolor. /R
a su lado con ustedes. Y todo esto es • Al ir, iban llorando, cargando
para bien de ustedes de manera que, la semilla; al regresar, cantando
al extenderse la gracia a más y más vendrán con sus gavillas. /R
personas, se multiplique la acción de
gracias para gloria de Dios. ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO
CFR. JN 15, 16
SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 125 Yo los he elegido del mundo, dice el
R. Entre gritos de júbilo cosecharán Señor, para que vayan y den fruto y
aquellos que siembran con dolor. su fruto permanezca. /R.
X
E
n aquel tiempo, se acercó a Jesús la madre de los hijos de Zebedeo,
junto con ellos, y se postró para hacerle una petición. Él le pregun-
tó: “¿Qué deseas?” Ella respondió: “Concédeme que estos dos hijos míos
se sienten, uno a tu derecha y el otro a tu izquierda, en tu Reino”. Pero
Jesús replicó: “No saben ustedes lo que piden. ¿Podrán beber el cáliz que
yo he de beber?” Ellos contestaron: “Sí podemos”. Y él les dijo: “Beberán
mi cáliz; pero eso de sentarse a mi derecha o a mi izquierda no me toca
a mí concederlo; es para quien mi Padre lo tiene reservado”.
Al oír aquello, los otros diez discípulos se indignaron contra los dos
hermanos. Pero Jesús los llamó y les dijo: “Ya saben que los jefes de los
86
Sábado 25
pueblos los tiranizan y que los grandes los oprimen. Que no sea así
entre ustedes. El que quiera ser grande entre ustedes, que sea el que
los sirva, y el que quiera ser primero, que sea su esclavo; así como el
Hijo del hombre no ha venido a ser servido, sino a servir y a dar la vida
por la redención de todos”. // Palabra del Señor. A. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN

Purif ícanos, Señor, con el bautismo Bebieron el cáliz del Señor y llega-
salvador de la pasión de tu Hijo, ron a ser amigos de Dios.
para que, en la fiesta de Santiago, el
primer Apóstol que participó en el ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
cáliz redentor de Cristo, podamos Por intercesión del apóstol Santiago,

ofrecerte un sacrificio agradable a en cuya festividad hemos recibido
ti. Por Jesucristo, nuestro Señor. con alegría tus santos sacramentos,
concédenos, Señor, tu protección y tu
ayuda. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Santiago
Apóstol
Santiago: Dios lo recompensará
Santiago, discípulo de Jesús, Fue el primer apóstol

era hijo de Zebedeo y de Salomé, que padeció el martirio
mujer que junto a las otras muje- bajo el poder de Herodes An-
res piadosas seguían a Jesúss en tipas, siguiendo así a Cristo en
sus catequesis apostólicas, a tra- el camino de la Cruz.
vés de pueblos y aldeas. Cuenta
el evangelista Mateo que camina-
ba Jesús a orillas del lago de Ga- Fue el evangelizador de España. El
lilea y vio a otros dos hermanos: testimonio de fe y la coherencia de
Santiago, el de Zebedeo y Juan, su vida se corresponden perfec-
su hermano, en la barca con su tamente con su palabra empe-
padre Zebedeo, remendando las ñada ente su Señor. Es por
redes y los llamó. Ellos al instante eso, que para los hombres
dejaron la barca y a su padre lo de nuestro tiempo, un inte-
siguieron (Mt 4, 21-22). resante modelo de evan-
gelizador. Su carácter
Tuvo el privilegio de estar fogoso e impetuoso,
presente, junto con su hermano decidido y generoso,
y Pedro, en tres momentos signi- le llevó a extender el
ficativos del camino a Jerusalén: mensaje evangélico,
la transfiguración de Jesús en el como debería hacer
monte Tabor (Mc 9, 2), la resu- un verdadero apóstol
rrección de la hija de Jairo (Mc de la nueva evangeliza-
5, 37) y la agonía de Jesús en el ción en nuestra sociedad
huerto de Getsemaní (Mt 26, 37). actual.
87
26 XVII DOMINGO DEL TO /A SALTERIO:

SEMANA I - VE
HALLAR EL REINO DE LOS CIELOS REQUIERE

DE BUSCADORES SABIOS Y PRUDENTES
E l ser humano siempre está en constante búsqueda, siempre experi-

menta en su interior una necesidad de creer en alguien superior a él
que le garantice seguridad, estabilidad e incluso le de identidad. Por su
parte, Dios, también está en constante movimiento y siempre toma la ini-
ciativa de salir al encuentro del hombre que lo busca con sincero corazón.
Así pues, antes de la aparición de los profetas los sueños eran el medio
de comunicación entre Dios y los hombres. Ante una misión de gran
calado, Salomón durante el sueño pide a Dios sabiduría e inteligencia
para realizarla según el juicio divino y no según su parecer. Era el sue-
ño de Salomón hacer la voluntad de Dios. Era el deseo de su corazón;
su deseo más profundo e íntimo. Por eso Salomón halló ante Dios
tanta complacencia y fue medio de bendición para su pueblo y la pos-
teridad, a pesar de que no fue un rey perfecto.
Vivir la vocación cristiana bautismal, así como los servicios y minis-
terios específicos, es una misión que implica una gran responsabili-
dad. Como Salomón, hemos sido elegidos y llamados de acuerdo al
querer de Dios para reproducir la imagen del Hijo, Jesucristo. Como
Salomón nuestro sueño, el deseo más íntimo de nuestro corazón, ha
de ser realizar la vida según la voluntad de Dios, que se ha manifestado
en su Hijo. Por tanto, como Salomón nuestra oración de petición a
Dios ha de incluir ser bendecidos con la sabiduría e inteligencia para
comprender y realizar en nuestra vida la misión cristiana como servi-
cio a la comunidad eclesial y a la sociedad.
Esta sabiduría e inteligencia viene en nuestro auxilio para compren-
der la Palabra de Dios. El Evangelio nos muestra como al encontrar un
gran tesoro, tanto uno, como otro, van y venden todo para conseguir-
lo. Vender todo es despojarnos de todo aquellos que nos estorba para
seguirle el paso a Jesús. En lo personal tiene que ver con todo aquello
que me hace ser peor personas: orgullo, soberbia, envida, prepoten-
cia... de esta forma, comenzáremos a vivir, aquí y ahora, ese reino que
Jesús predicaba, un reino de justicia, de amor y de paz.,
P. Yorban Figueroa, Operario Diocesano
88
Domingo 26
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. SAL 67, 6-7. 36 concedas sabiduría de corazón, para
Dios habita en su santuario; él nos que sepa gobernar a tu pueblo y dis-
hace habitar juntos en su casa; es la tinguir entre el bien y el mal. Pues
fuerza y el poder de su pueblo. sin ella, ¿quién será capaz de gober-
nar a este pueblo tuyo tan grande?”
ORACIÓN COLECTA Al Señor le agradó que Salomón le
Señor Dios, protector de los que en ti hubiera pedido sabiduría y le dijo:
confían, sin ti, nada es fuerte, ni san- “Por haberme pedido esto, y no una
to; multiplica sobre nosotros tu mise- larga vida, ni riquezas, ni la muer-
ricordia para que, bajo tu dirección, te de tus enemigos, sino sabiduría
de tal modo nos sirvamos ahora de para gobernar, yo te concedo lo que
los bienes pasajeros, que nuestro co- me has pedido. Te doy un corazón
razón esté puesto en los bienes eter- sabio y prudente, como no lo ha
nos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu habido antes, ni lo habrá después
Hijo, que vive y reina contigo … de ti. Te voy a conceder, además, lo
que no me has pedido: tanta gloria
PRIMERA LECTURA y riqueza, que no habrá rey que se
Por haberme pedido sabiduría. pueda comparar contigo”.
Del primer libro Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.
de los Reyes 3, 5-13
En aquellos días, el Señor se le apa-
reció al rey Salomón en sueños y le R. Yo amo, Señor, tus
mandamientos.
dijo: “Salomón, pídeme lo que quie-
ras, y yo te lo daré”. • A mí, Señor, lo que me toca es
Salomón le respondió: “Señor, tú cumplir tus preceptos. Para mí
trataste con misericordia a tu sier- valen más tus enseñanzas que mi-
vo David, mi padre, porque se por- les de monedas de oro y plata. /R.
tó contigo con lealtad, con justicia y • Señor, que tu amor me consuele,
rectitud de corazón. Más aún, tam- conforme a las promesas que me
bién ahora lo sigues tratando con has hecho. Muéstrame tu ternu-
misericordia, porque has hecho que ra y viviré, porque en tu ley he
un hijo suyo lo suceda en el trono. puesto mi contento. /R.
Sí, tú quisiste, Señor y Dios mío, que • Amo, Señor, tus mandamientos
yo, tu siervo, sucediera en el trono más que el oro purísimo; por eso
a mi padre, David. Pero yo no soy tus preceptos son mi guía y odio
más que un muchacho y no sé cómo toda mentira. /R.
actuar. Soy tu siervo y me encuen- • Tus preceptos, Señor, son admi-
tro perdido en medio de este pueblo rables, por eso yo los sigo. La ex-
tuyo, tan numeroso, que es imposi- plicación de tu palabra da luz y
ble contarlo. Por eso te pido que me entendimiento a los sencillos. /R.
89
SEGUNDA LECTURA de su propio Hijo, a fin de que él sea

Nos predestina para que el primogénito entre muchos her-
reproduzcamos en nosotros manos. A quienes predestina, los
mismos la imagen de su Hijo. llama; a quienes llama, los justifica;
De la Carta del apóstol san y a quienes justifica, los glorifica.
Pablo a los romanos 8, 28-30 Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.
Hermanos: Ya sabemos que todo con- ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO
tribuye para bien de los que aman a CFR. MT 11, 25
Dios, de aquellos que han sido llama- R. Aleluya, aleluya.
dos por él, según su designio salvador. Te doy gracias, Padre, Señor del
En efecto, a quienes conoce de an- cielo y de la tierra, porque has re-
temano, los predestina para que revelado los misterios del Reino a la
produzcan en sí mismos la imagen gente sencilla. /R.
X
E
n aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “El Reino de los cielos
se parece a un tesoro escondido en un campo. El que lo encuen-
tra lo vuelve a esconder y, lleno de alegría, va y vende cuanto tiene y
compra aquel campo.
El Reino de los cielos se parece también a un comerciante en perlas
finas que, al encontrar una perla muy valiosa, va y vende cuanto tiene
y la compra.
También se parece el Reino de los cielos a la red que los pescadores
echan en el mar y recoge toda clase de peces. Cuando se llena la red, los
pescadores la sacan a la playa y se sientan a escoger los pescados; ponen
los buenos en canastos y tiran los malos. Lo mismo sucederá al final de
los tiempos: vendrán los ángeles, separarán a los malos de los buenos y
los arrojarán al horno encendido. Allí será el llanto y la desesperación.
¿Han entendido todo esto?” Ellos le contestaron: “Sí”. Entonces él les
dijo: “Por eso, todo escriba instruido en las cosas del Reino de los cie-
los es semejante al padre de familia, que va sacando de su tesoro cosas
nuevas y cosas antiguas”. // Palabra del Señor. A. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN DE LOS FIELES L. Te pedimos, Señor, por los Pas-

S. Hermanos, pidamos la asistencia tores de la Iglesia. Que sepan
divina para que nuestra oración sea guiar a tu pueblo con sensibili-
agradable a los ojos de Dios. Digamos: dad y firmeza, discernimiento y
Todos: Danos tu sabiduría, Señor. luz del Espíritu. Oremos. /R
90
Domingo 26
L. Imploramos tu ayuda sobre to- súplicas que te dirigimos por noso-

dos aquellos que descubren en ti tros y por todo tu pueblo. Tú que
un verdadero tesoro, para que lo vives y reinas.
conserven con diligencia y res-
ponsabilidad. Oremos. /R ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
L. Ponemos entre tus manos a quie- Recibe, Señor, los dones que por tu
nes se sienten atrapados en las generosidad te presentamos, para
redes de los vicios o en la espi- que, por el poder de tu gracia, es-
ra de la violencia, para que sean tos sagrados misterios santifiquen
librados de todas sus angustias. toda nuestra vida y nos conduzcan
Oremos. /R a la felicidad eterna. Por Jesucristo,
L. Mira misericordioso a nuestros nuestro Señor.
enfermos, sobre todo aquellos
que no tienen medicamentos, ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN SAL 102, 2
para que nuestra solidaridad y tu Bendice, alma mía, al Señor, y no te
ayuda los alienten. Oremos. /R olvides de sus beneficios.
L. Purifica el corazón y la mente de
quienes no logran perdonar, es- ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
pecialmente por aquellos a quie- Habiendo recibido, Señor, el sacra-
nes la situación política del país mento celestial, memorial perpetuo
ha dejado secuelas dramáticas. de la pasión de tu Hijo, concédenos
Oremos. /R que este don, que él mismo nos dio
(Intenciones libres) con tan inefable amor, nos aprove-
S. Padre de nuestro Señor Jesucris- che para nuestra salvación eterna.
to, que sabes todo lo que necesi- Él, que vive y reina por los siglos de
tamos, te confiamos seguros estas los siglos.
Los preceptos de la Iglesia tienen

por finalidad garantizar que los
Oír misa entera todos los domingos y fiestas de guar- fieles cumplan con lo mínimo indis-
dar. pensable en relación al espíritu de
oración, a la vida sacramental, al
Confesar los pecados mortales al menos una vez cada esfuerzo moral y al crecimiento en
año, y en peligro de muerte, y si se ha de comulgar. el amor a Dios y al prójimo.
Comulgar al menos por Pascua de Resurrección. Los mandamientos de la Iglesia

son una muestra de cariño: al dictar
Ayunar y abstenerse de comer carne cuando lo manda estas normas pretende ayudarnos a
la Santa Madre Iglesia. cumplir los 10 mandamientos de la
Ley de Dios. Estas obligaciones del
Ayudar a la Iglesia en sus necesidades. cristiano garantizan conveniente-
mente el camino de la salvación
91
27 LUNES XVII SEMANA DEL TO

FERIA - VE
UNIDOS AL SEÑOR LA VIDA TIENE SENTIDO

J eremías se dispone a realizar una acción simbólica por mandato de Dios.
En la imagen del cinturón se debe leer la actitud del pueblo de Israel
que se ha desprendido del Señor por ir tras los ídolos babilónicos que sólo
producen podredumbre e inutilidad. Dos ideas resalta el texto. Una, que el
Señor se había ceñido a Israel a la cintura (según el gesto que realiza Jere-
mías), pero que si se desprende de Él, pierde lo que anima su vida, y cae al
agua donde se pudre. Otra, que yendo tras los ídolos se ha perdido, ha desa-
parecido su forma y utilidad, no sirve para nada. La causa de todo ha sido la
desobediencia del pueblo y su conducta obstinada en busca de ídolos. El no
escuchar ha sido el motivo de la perdida de la misión.
Jesús presenta la misma idea desde otra perspectiva, algo tan pequeño como
una semilla de mostaza, puede dar abrigo a pájaros cuando cumple su misión
y no se aparta del plan de Dios. Estar unidos al Señor, como el cinturón a la
cintura, es lo que da consistencia, firmeza, identidad a la persona, así como
honor, fama y gloria a Dios. Lejos de Él y dando culto, servicio y adoración a
los ídolos se pierde el sentido, la perspectiva, la misión y ya no hay gloria que
ofrecer al Dios fiel y generoso. La Palabra nos cuestiona sobre el proceder
respecto a la vinculación con el Señor, fijarnos si estamos realmente unidos a
Él para ser transmisores de su verdad y fidelidad. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. SAL 67, 6-7. 36 PRIMERA LECTURA

Dios habita en su santuario; él nos Este pueblo será como este cinturón,
hace habitar juntos en su cada; es la que no sirve para nada.
fuerza y el poder de su pueblo. Del libro del profeta Jeremías 13, 1-11
ORACIÓN COLECTA
El Señor me dijo: “Ve a comprar un
cinturón de lino y póntelo en la cin-
Señor Dios, protector de los que en
tura, pero no lo metas en el agua”.
ti conf ían, sin ti, nada es fuerte, ni
Compré el cinturón y me lo puse en
santo; multiplica sobre nosotros tu
la cintura, según la orden del Señor.
misericordia para que, bajo tu di-
Entonces el Señor me habló por
rección, de tal modo nos sirvamos
segunda vez y me dijo: “Toma el
ahora de los bienes pasajeros, que
cinturón que compraste y que lle-
nuestro corazón esté puesto en los
vas puesto en la cintura, levántate
bienes eternos. Por nuestro Señor
Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina y vete al río Eufrates y escóndelo
contigo … ahí, en el agujero de una roca”. Fui y
92
Lunes 27
lo escondí en el Eufrates, como me SALMO RESPONSORIAL DT 32

había ordenado el Señor. R. Abandonaron a Dios, que les dio
Al cabo de mucho tiempo, me dijo la vida.
el Señor: “Levántate, vete al Eu- • Abandonaron a Dios, que los
frates y recoge el cinturón que te creó, y olvidaron al Señor, que les
mandé que escondieras ahí”. Fui al dio la vida. Lo vio el Señor, y en-
Eufrates, escarbé y recogí el cin- colerizado, rechazó a sus hijos y a
turón del sitio donde lo había es- sus hijas. /R.
condido; pero el cinturón se había • El Señor pensó: “Me les voy a
podrido: no servía para nada. esconder y voy a ver en qué aca-
Entonces el Señor me habló y me ban, porque son una generación
dijo: “Esto dice el Señor: ‘Del mismo depravada, unos hijos infieles. /R.
modo haré yo que se pudra la gran • Ellos me han dado celos con un
soberbia de Judá y de Jerusalén. Ese dios que no es Dios y me han
pueblo malvado se ha negado a obe- encolerizado con sus ídolos; yo
decerme, se porta obstinadamente, también les voy a dar celos con
ha seguido a otros dioses para ser- un pueblo que no es pueblo y los
virlos y adorarlos, y será como este voy a encolerizar con una nación
cinturón, que ya no sirve para nada. insensata”. /R.
Porque así como el cinturón va ad-
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO SANT 1, 18
herido al cuerpo, así quise llevar uni-
das a mí a la casa de Israel y a la casa R. Aleluya, aleluya.
de Judá, para que fueran mi pueblo, Por su propia voluntad el Padre nos
mi fama, mi gloria y mi honor; pero engendró por medio del Evangelio,
ellos no me escucharon’”. para que fuéramos, en cierto modo,
Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor. primicias de sus creaturas. /R.
X
E
EVANGELIO (Mt 13, 31, 35)
n aquel tiempo, Jesús propuso esta otra parábola a la muchedum-
bre: “El Reino de los cielos es semejante a la semilla de mostaza
que un hombre siembra en su huerto. Ciertamente es la más pequeña
de todas las semillas, pero cuando crece, llega a ser más grande que
las hortalizas y se convierte en un arbusto, de manera que los pájaros
vienen y hacen su nido en las ramas”.
Les dijo también otra parábola: “El Reino de los cielos se parece a un
poco de levadura que tomó una mujer y la mezcló con tres medidas de
harina, y toda la masa acabó por fermentar”.
93
Jesús decía a la muchedumbre todas estas cosas con parábolas, y sin

parábolas nada les decía, para que se cumpliera lo que dijo el profeta:
Abriré mi boca y les hablaré con parábolas; anunciaré lo que estaba
oculto desde la creación del mundo.

Recibe, Señor, los dones que por tu Habiendo recibido, Señor, el sacra-
generosidad te presentamos, para mento celestial, memorial perpetuo
que, por el poder de tu gracia, es- de la pasión de tu Hijo, concédenos
tos sagrados misterios santifiquen que este don, que él mismo nos dio
toda nuestra vida y nos conduzcan con tan inefable amor, nos aprove-
a la felicidad eterna. Por Jesucristo, che para nuestra salvación eterna.
nuestro Señor. Él, que vive y reina por los siglos de
los siglos.
Mi Reflexión:
Bendice, alma mía, al Señor, y no te
olvides de sus beneficios.
28 MARTES XVII SEMANA DEL TO

FERIA - VE
¿ERES TRIGO O CIZAÑA?

H oy Jesús nos explica la parábola del Trigo y la Cizaña. Ante esta expli-
cación no tenemos excusa, o nos comportamos como el trigo y nos
esforzamos por permanecer fieles a nuestra esencia de hijos de Dios o nos
dejamos seducir por la cizaña y contradecimos lo que somos.
Ser trigo, implica un estilo de vida propio, conforme al Evangelio, siguien-
do los pasos del Maestro que nos enseña a ser mansos y humildes de cora-
zón. Que nos enseña a sentir y sufrir con el otro. El trigo se deja triturar para
convertirse en alimento de muchos. Muere para dar vida. Así cada cristiano
está llamado a morir cada día a sí mismo y vivir en Cristo.
Por otro lado, la cizaña como Jesús nos explica son los partidarios del de-
monio. En ellos no hay lugar para Dios y mucho menos para los hermanos.
Viven en su egoísmo, y siempre buscan sus propios intereses, no les importa
pisotear o acabar con la vida del ser humano con tal de conseguir sus obje-
tivos.
94
Martes 28
Como vemos no podemos ser trigo y cizaña a la vez. O somos una cosa o
la otro, pues son dos estilos de vida totalmente opuestos. Esforcémonos por
ser coherentes con nuestro SER, y saquemos lo mejor de nosotros en cada
instante de nuestra vida.
Por último, seamos conscientes que todo lo que hacemos tiene. En este
sentido, vemos en la primera lectura como el pueblo de Israel sufre a causa
de su mala conducta, sufre como consecuencia de sus actos. Pues, es el Pue-
blo que se ha apartado de Dios, ha decidido ponerlo al margen de su vida y
con ello le vienen muchas desgracias. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. SAL 67, 6-7. 36 los sacerdotes andan errantes por el
Dios habita en su santuario; él nos país y no saben qué hacer.
hace habitar juntos en su cada; es la ¿Acaso has rechazado, Señor, a
fuerza y el poder de su pueblo. Judá? ¿O te has cansado ya de Sión?
¿Por qué nos has herido tan grave-
ORACIÓN COLECTA mente, que ya no tenemos remedio?
Señor Dios, protector de los que en Esperábamos tranquilidad y sólo
ti conf ían, sin ti, nada es fuerte, ni hay perturbación; esperábamos la
santo; multiplica sobre nosotros tu curación y sólo encontramos miedo.
misericordia para que, bajo tu di- Reconocemos, Señor, nuestras mal-
rección, de tal modo nos sirvamos dades y las culpas de nuestros pa-
ahora de los bienes pasajeros, que dres; hemos pecado contra ti. Por
nuestro corazón esté puesto en los ser tú quien eres, no nos rechaces;
bienes eternos. Por nuestro Señor no deshonres el trono de tu gloria.
Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina Acuérdate, Señor, de tu alianza con
contigo … nosotros y no la quebrantes. ¿Aca-
so los ídolos de los paganos pueden
PRIMERA LECTURA hacer llover? ¿Acaso los cielos, por
Acuérdate, Señor, de tu alianza sí solos, pueden darnos la lluvia?
con nosotros y no la quebrantes. Tú solo, Señor y Dios nuestro, ha-
Del libro del profeta Jeremías 14,17-22 ces todas estas cosas, por eso en ti
tenemos puesta nuestra esperanza.
Que mis ojos lloren sin cesar de Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.
día y de noche, porque la capital de
mi pueblo está afligida por un gran SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 78
desastre, por una herida gravísima. R. Socórrenos, Señor, y te
Si salgo al campo, encuentro gente alabaremos.
muerta por la espada; si entro en • No recuerdes, Señor, contra no-
la ciudad, hallo gente que se mue- sotros, las culpas de nuestros pa-
re de hambre. Hasta los profetas y dres. Que tu amor venga pronto
95
a socorrernos, porque estamos muerte. Y nosotros, pueblo tuyo

totalmente abatidos. /R. y ovejas de tu rebaño, te daremos
• Para que sepan quién eres, socó- gracias siempre y de generación
rrenos, Dios y salvador nuestro. en generación te alabaremos. /R.
Por el honor de tu nombre, sál-
vanos y perdona nuestros peca-
dos. /R. R. Aleluya, aleluya.
• Que lleguen hasta ti los gemidos La semilla es la palabra de Dios y el
del cautivo; con tu brazo pode- sembrador es Cristo; todo aquel que
roso salva a los condenados a lo encuentra vivirá para siempre. /R.
X
E
n aquel tiempo, Jesús despidió a la multitud y se fue a su casa.
Entonces se le acercaron sus discípulos y le dijeron: “Explícanos
la parábola de la cizaña sembrada en el campo”.
Jesús les contestó: “El sembrador de la buena semilla es el Hijo del
hombre; el campo es el mundo; la buena semilla son los ciudadanos
del Reino; la cizaña son los partidarios del demonio; el enemigo que la
siembra es el demonio; el tiempo de la cosecha es el fin del mundo, y
los segadores son los ángeles.
Y así como recogen la cizaña y la queman en el fuego, así sucederá
al fin del mundo: el Hijo del hombre enviará a sus ángeles para que
arranquen de su Reino a todos los que inducen a otros al pecado y a
todos los malvados, y los arrojen en el horno encendido. Allí será el
llanto y la desesperación. Entonces los justos brillarán como el sol en
el Reino de su Padre. El que tenga oídos, que oiga”.

toda nuestra vida y nos conduzcan con tan inefable amor, nos aproveche
a la felicidad eterna. Por Jesucristo, para nuestra salvación eterna. Él, que
nuestro Señor. vive y reina por los siglos de los siglos.
Mi Reflexión:
Bendice, alma mía, al Señor, y no te
olvides de sus beneficios.
96
Miércoles 29
SANTA MARTA
MO - BL MIÉRCOLES 29
EL SEGUIMIENTO REQUIERE PURIFICACIÓN
E l profeta Jeremías se ve obligado por Dios a renovar su vocación y mi-
nisterio profético, y experimenta esta situación como algo desgarra-
dor, como un dolor o pena que no acaba nunca. Dios le obliga a volverse a
Él para que esté a su servicio. Cada palabra de ese diálogo con Dios es ma-
ravillosa y debería dedicarse la atención necesaria, pero nos fijaremos sólo
en algunos detalles. La historia de Jeremías, el profeta de los “ayes”, es decir,
constantemente está diciendo “ay”, y en el versículo 10 comienza con un
“ay” que reclama a su madre haberlo engendrado para ser objeto de pleitos
y discordias. Al Señor le pide que no prolongue su ira contra él y le recuerda
el gozo que ha sentido siempre por sus palabras y cómo las ha acogido con
toda radicalidad, aun en la ira.
El dolor es algo que pertenece a la naturaleza de la vida, pero lo importante
es no rendirse a él y entenderlo como un proceso pedagógico de Dios, que
sirve para consolidar la experiencia de fe que desemboca en el gozo. En
efecto, Dios escucha al profeta y le reitera que puede seguir en su servicio,
el cual seguirá siendo rudo, pues lucharán contra él, pero el Señor estará a
su lado como liberador y defensor. Dios constituye al profeta en poderosa
muralla de bronce, cosa que ya le había asegurado en Jeremías 1, 18 cuando
le otorgó la vocación profética. Está muralla será invencible, indestructible,
nadie la podrá atravesar, con el Señor de su lado todos tropezarán contra
ella. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. LC 10, 38 PRIMERA LECTURA

Cuando entró Jesús en un poblado, ¿Por qué mi dolor no acaba nunca? - Si
te vuelves a mí, seguirás a mi servicio.
una mujer, llamada Marta, lo reci- Del libro del profeta
bió en su casa. Jeremías 15, 10. 16-21
ORACIÓN COLECTA ¡Ay de mí, madre mía! ¿Por qué me
engendraste para que fuera objeto de
Dios todopoderoso y eterno, cuyo pleitos y discordias en todo el país?
Hijo aceptó hospedarse en la casa A nadie debo dinero, ni me lo deben a
de santa Marta, concédenos, por su mí, y sin embargo, todos me maldicen.
intercesión, que sirviendo fielmen- Siempre que oí tus palabras, Señor,
te a Cristo en nuestros hermanos, las acepté con gusto; tus palabras
merezcamos ser recibidos por ti en eran mi gozo y la alegría de mi co-
la mansión del cielo. Por nuestro razón, porque yo defendía tu causa,
Señor Jesucristo, tu Hijo, … Señor, Dios de los ejércitos.
97
No me senté a reír con los que se • Dios mío, líbrame de mis enemi-
divertían; forzado por tu mano, me gos, protégeme de mis agresores;
sentaba aparte, porque me habías líbrame de los que hacen injus-
contagiado con tu propia ira. ¿Por ticias, sálvame de los hombres
qué mi dolor no acaba nunca y mi sanguinarios. /R.
herida se ha vuelto incurable? ¿Acaso • Mira cómo se conjuran contra mí
te has convertido para mí, Señor, en los poderosos y esperan el mo-
espejismo de aguas que no existen? mento de matarme. Sin embar-
Entonces el Señor me respondió: go, Señor, en mí no hay crimen
“Si te vuelves a mí, yo haré que ni pecado; sin culpa mía, avan-
cambies de actitud, y seguirás a mi zan contra mí para atacarme. /R.
servicio; si separas el metal precio- • En ti, Señor, tendré fijos los ojos,
so de la escoria, seguirás siendo mi porque tú eres mi fuerza y mi re-
profeta. Ellos cambiarán de actitud fugio. El Dios de mi amor vendrá
para contigo y no tú para con ellos. en mi ayuda y me hará ver la de-
Yo te convertiré frente a este pueblo rrota de mis enemigos. /R.
en una poderosa muralla de bronce: • Yo celebraré tu poder y desde la
lucharán contra ti, pero no podrán mañana me alegraré por tu bon-
contigo, porque yo estaré a tu lado dad, porque has sido mi defensa
para librarte y defenderte, dice el y mi refugio en el día de la tribu-
Señor. Te libraré de las manos de lación. /R.
los perversos, te rescataré de las
manos de los poderosos”. ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO
CFR. JN 8, 12
SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 58 Yo soy la luz del mundo, dice el Se-
R. Me alegraré, Señor, por tu ñor; el que me sigue tendrá la luz de
bondad. la vida. /R.
X
E
EVANGELIO (Jn 11, 19-27)
n aquel tiempo, muchos judíos habían ido a ver a Marta y a María
para consolarlas por la muerte de su hermano Lázaro. Apenas
oyó Marta que Jesús llegaba, salió a su encuentro; pero María se que-
dó en casa. Le dijo Marta a Jesús: “Señor, si hubieras estado aquí, no
habría muerto mi hermano. Pero aún ahora estoy segura de que Dios
te concederá cuanto le pidas”.
Jesús le dijo: “Tu hermano resucitará”. Marta respondió: “Ya sé que
resucitará en la resurrección del último día”. Jesús le dijo: “Yo soy la
98
Jueves 30
resurrección y la vida. El que cree en mí, aunque haya muerto, vivirá; y

todo aquel que está vivo y cree en mí, no morirá para siempre. ¿Crees
tú esto?” Ella le contestó: “Sí, Señor. Creo firmemente que tú eres el
Mesías, el Hijo de Dios vivo, el que tenía que venir al mundo”.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS Hijo de Dios, el que tenía que venir
Al proclamar, Señor, tu obra admi- al mundo.
rable en santa Marta, suplicamos
humildemente a tu majestad que, ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
así como te fue grato su amoroso Señor, que la santa comunión del
obsequio, así también te sea acep- Cuerpo y la Sangre de tu Unigénito,
table el desempeño de nuestro ser- nos aleje de todas las cosas pasajeras,
vicio. Por Jesucristo, nuestro Señor. para que, a ejemplo de santa Marta,
podamos crecer en la tierra en un
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN JN 11, 27 auténtico amor a ti y gozar en el cie-
Marta dijo a Jesús: Sí, Señor. Creo lo, contemplándote eternamente.
firmemente que tú eres el Mesías, el Por Jesucristo, nuestro Señor.
FERIA o bien SAN PEDRO CRISÓLOGO

OBISPO Y DOCTOR DE LA IGLESIA, ML - VE o BL JUEVES 30
NUESTRO SER ESTÁ EN LAS MANOS DE DIOS
J eremías recibe una lección por parte de Dios. El ejemplo del barro o
arcilla y el alfarero sirven, en cuanto acción simbólica, para explicar el
proceder de Dios para con su pueblo. Como el alfarero inicia una y otra
vez, si el producto final no se logra. De la misma forma, entendemos que
el proceder de Dios es paciente y decidido, pero flexible ante el camino que
recorra su pueblo, pues si Él ha tomado una decisión, pero el pueblo cambia
de parecer, también Él cambia. Sin embargo, el profeta debe anunciar que
el Señor, como un alfarero, está dando forma a una desgracia y concibiendo
un plan contra ellos. La idea es que el pueblo al saberlo se vuelva de su mal
camino, pero ellos decidirán comportarse según su terco corazón.
Detrás de esta imagen también está la idea de la paciencia del alfarero. Y
en el texto de Mateo, Jesús utiliza la imagen de la paciencia de los pescado-
res que deben separar los peces buenos de los malos. Estar en las manos de
Dios, según los textos de hoy, es estar bajo una persona llena de paciencia,
99
que observa cada detalle, que inicia una y otra vez su labor, que no se resiste
a una obra mal formada, que selecciona la buena calidad de la mala y opta
por la primera. Estar en las manos de Dios es estar en las del Padre que al
final ha decidido rehacer su imagen y semejanza, el ser humano, optando
por el envío de su Hijo obediente para adquirirse un pueblo bien dispuesto.
P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. SAL 67, 6-7. 36 Entonces el Señor me dijo: “¿Aca-
Dios habita en su santuario; él nos so no puedo hacer yo con ustedes,
hace habitar juntos en su casa; es la casa de Israel, lo mismo que hace
fuerza y el poder de su pueblo. este alfarero? Como está el barro en
las manos del alfarero, así ustedes,
ORACIÓN COLECTA casa de Israel, están en mis manos”.
Señor Dios, protector de los que en Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.
ti conf ían, sin ti, nada es fuerte, ni
santo; multiplica sobre nosotros tu
misericordia para que, bajo tu di- R. Dichoso el que espera en el Señor.
rección, de tal modo nos sirvamos • Alaba, alma mía, al Señor; alaba-
ahora de los bienes pasajeros, que ré al Señor toda mi vida; tocaré
nuestro corazón esté puesto en los y cantaré para mi Dios, mientras
bienes eternos. Por nuestro Señor yo exista. /R.
Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina • No pongas tu confianza en los
contigo … que mandan ni en el mortal, que
no puede salvarte; pues cuando
PRIMERA LECTURA mueren, se convierten en polvo y
Como está el barro en las ese mismo día se acaban sus pro-
manos del alfarero, así ustedes yectos. /R.
están en mis manos. • Dichoso aquel que es auxiliado
Del libro del profeta Jeremías 18, 1-6 por el Dios de Jacob y pone su es-
peranza en el Señor, su Dios, que
Esto es lo que el Señor me dijo: “Je- hizo el cielo y la tierra, el mar y
remías, ve a la casa del alfarero y ahí cuanto el mar encierra. /R.
te haré oír mis palabras”.
Fui, pues, a la casa del alfarero y lo ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO
hallé trabajando en su torno. Cuan- CFR. HCH 16, 14
do se le estropeaba la vasija que es- R. Aleluya, aleluya.

taba modelando, volvía a hacer otra Abre, Señor, nuestros corazones
con el mismo barro, como mejor le para que comprendamos las pala-
parecía. bras de tu Hijo. /R.
100
Jueves 30
X
E
n aquel tiempo, Jesús dijo a la multitud: “El Reino de los cielos
se parece también a la red que los pescadores echan en el mar y
recoge toda clase de peces. Cuando se llena la red, los pescadores la sa-
can a la playa y se sientan a escoger los pescados; ponen los buenos en
canastos y tiran los malos. Lo mismo sucederá al final de los tiempos:
vendrán los ángeles, separarán a los malos de los buenos y los arroja-
rán al horno encendido. Allí será el llanto y la desesperación.
¿Han entendido todo esto?” Ellos le contestaron: “Sí”. Entonces él les
dijo: “Por eso, todo escriba instruido en las cosas del Reino de los cie-
los es semejante al padre de familia, que va sacando de su tesoro cosas
nuevas y cosas antiguas”.
Y cuando acabó de decir estas parábolas, Jesús se marchó de allí.

toda nuestra vida y nos conduzcan con tan inefable amor, nos aprove-
a la felicidad eterna. Por Jesucristo, che para nuestra salvación eterna.
nuestro Señor. Él, que vive y reina por los siglos de
los siglos.
Bendice, alma mía, al Señor, y no te veneración. Este santo prelado lo convenció
olvides de sus beneficios. de que en el dominio de las propias pasiones
y en el rechazar los malos deseos reside
la verdadera grandeza, y que este es
un medio seguro para conseguir las
San Pedro bendiciones de Dios.
Crisólogo
Recomendaba mucho la comu-
Crisólogo: el que habla muy bien nión frecuente y exhortaba
a sus oyentes a conver-
Este santo ha sido uno de los oradores más tir la Sagrada Eucaris-
famosos de la Iglesia Católica. Nació en Imola tía en su alimento
(Italia) y fue formado por Cornelio obispo de esa de todas las
ciudad, por el cual conservó siempre una gran semanas.
"Los que pasaron, vivieron para nosotros; nosotros,
para los que vienen, nadie viene para sí mismo".
101
31 VIERNES SAN IGNACIO DE LOYOLA

PRESBÍTERO, MO - BL
PROFETA DE LOS TIEMPOS Y DE LA ESCUCHA

U na acción importante, ligada no sólo a la actividad profética y discipular,
sino a la misma vida, es la “escucha”. La persona que tiene la capacidad
de escuchar, es capaz de actuar de forma más serena y prudente frente a diver-
sas situaciones, y proponer soluciones. Escuchar implica el ejercicio de poner
en movimiento toda la persona, para atender al otro, comprender el mensaje
y reflexionar sobre lo escuchado, evitando juicios erróneos o apresurados. La
actividad pastoral y fundacional del beato Santiago Alberione está ligada a
esta actitud de “escucha” atenta del mensaje de Dios presente en los “signos
de los tiempos”. Como “hombre de Dios”, Alberione obedece el mandato del
Señor y pone por obra la voluntad divina de fundar una Congregación de
religiosos dispuestos a “dar a Jesucristo Maestro, Camino, Verdad y Vida, al
mundo” con los medios más rápidos y eficaces de la comunicación.
Sólo quien escucha la revelación de Dios con humildad y reverencia, puede
apropiarse de la misma y, después de asombrarse, comunicarla a los demás como
“Palabra de Dios que permanece para siempre”. El beato Alberione experimenta
esta realidad, y aunque tuvo que sufrir la incomprensión de obispos, sacerdotes
y religiosos de su tiempo, eso no fue un inconveniente para llevar adelante su
obra: la Pía Sociedad de San Pablo, que en este mes de agosto de 2014, gracias
a la permanente presencia de Dios, la protección de Jesús Maestro, de María,
Reina de los Apóstoles y del apóstol san Pablo, cumple cien años de fecunda
labor apostólica y misionera en los cinco continentes. Damos gracias a Dios por
este don tan precioso y por su abundante bendición en estos años de presencia
apostólica en la Iglesia. A la vez, pedimos a todos nuestros lectores sus oraciones
para continuar llevando adelante nuestro apostolado con fidelidad. P.W.S.
ANTÍFONA DE ENTRADA CFR. FLP 2, 10-11 en la tierra, con su auxilio y a imita-

Que al nombre de Jesús toda rodi- ción suya, merezcamos ser corona-
lla se doble, en el cielo, en la tierra, dos, con él, en el cielo. Por nuestro
en los abismos, y que toda lengua Señor Jesucristo, tu Hijo, …
proclame que Jesucristo es el Señor,
para gloria de Dios Padre. PRIMERA LECTURA
La gente se amotinó contra
ORACIÓN COLECTA Jeremías en el templo del Señor.
Dios nuestro, que suscitaste en Del libro del profeta Jeremías 26, 1-9
tu Iglesia a san Ignacio de Loyola Al principio del reinado de Joaquín,
para extender la mayor gloria de tu hijo de Josías y rey de Judá, el Señor
nombre, concédenos que, luchando le habló a Jeremías y le dijo: “Esto
102
Viernes 31
dice el Señor: ‘Ve al atrio del templo gente se amotinó contra Jeremías
y diles a todos los habitantes de Judá en el templo del Señor.
que entran en el templo para adorar Palabra de Dios. A. Te alabamos, Señor.
al Señor, todas las palabras que yo te
voy a ordenar, sin omitir ninguna. A SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 68
ver si las escuchan y se convierten R. Escúchanos, Señor, conforme a
de su mala vida, y me arrepiento del tu clemencia.
castigo que he pensado imponerles a
• Son más que mis cabellos los que
causa de sus malas acciones’.
me odian sin tener un motivo y
Diles, pues: ‘Esto dice el Señor: Si no
más fuertes que yo los que pre-
me obedecen, ni cumplen la ley que
tenden con sus calumnias acabar
he dado, ni escuchan las palabras de
conmigo. Lo que yo no robé, ¿aca-
mis siervos, los profetas, que sin cesar
so tengo yo que restituirlo? /R.
les he enviado y a quienes ustedes no
• Por ti he sufrido injurias y la ver-
han escuchado, entonces yo trataré
güenza cubre mi semblante. Ex-
a este templo como al de Siló y haré
traño soy y advenedizo, aun para
que esta ciudad sirva de escarmiento
aquellos de mi propia sangre; pues
para todos los pueblos de la tierra’”.
me devora el celo de tu casa, el odio
Los sacerdotes, los profetas y el
del que te odia, en mí recae. /R.
pueblo oyeron a Jeremías pronun-
• A ti, Señor, elevo mi plegaria, ven
ciar estas palabras en el templo del
en mi ayuda pronto; escúchame
Señor. Y cuando él terminó de decir
conforme a tu clemencia, Dios
cuanto el Señor le había mandado,
los sacerdotes y los profetas lo apre- fiel en el socorro. /R.
saron, diciéndole al pueblo: “Este ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO 1PE 1,25
hombre debe morir, porque ha pro-
fetizado en nombre del Señor que R. Aleluya, aleluya.
este templo será como el de Siló La palabra de Dios permanece para
y que esta ciudad será destruida y siempre. Y ésa es la palabra que se
quedará deshabitada”. Entonces la les ha anunciado. /R.
X
E
n aquel tiempo, Jesús llegó a su tierra y se puso a enseñar a la
gente en la sinagoga, de tal forma, que todos estaban asombra-
dos y se preguntaban: “¿De dónde ha sacado éste esa sabiduría y esos
poderes milagrosos? ¿Acaso no es éste el hijo del carpintero? ¿No se
llama María su madre y no son sus hermanos Santiago, José, Simón y
Judas? ¿Qué no viven entre nosotros todas sus hermanas? ¿De dónde,
pues, ha sacado todas estas cosas?” Y se negaban a creer en él.
103
Entonces, Jesús les dijo: “Un profeta no es despreciado más que en su

patria y en su casa”. Y no hizo muchos milagros allí por la incredulidad
de ellos. // Palabra del Señor. A. Gloria a ti, Señor Jesús.

Que te agraden, Señor Dios, las Señor, que este sacrificio de alaban-
ofrendas que te presentamos en la za, que te hemos ofrecido en acción
celebración de san Ignacio, y con- de gracias en la celebración de san
cede que estos santos misterios en Ignacio, nos lleve a alabar perpe-
los que has puesto la fuente de toda tuamente tu gloria. Por Jesucristo,
santidad, nos santifiquen en la ver- nuestro Señor.
dad. Por Jesucristo, nuestro Señor.
su grupo se dedicaron al trabajo humanita-
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN LC 12, 49 rio y a la labor de la enseñanza.
He venido a traer fuego a la tierra, La organización estructural de la Compa-
¡y cuánto desearía que ya estuviera ñía de Jesús tiene mucho que ver con la mili-
ardiendo!, dice el Señor. tar aunque toda esa impronta está orienta-
da al servicio de la difusión de la fe en Dios,
que por aquel tiempo se encontraba cierta-
San Ignacio mente en riesgo a razón de la aparición de
Martín Lutero.
de Loyola
Ignacio: hombre que nació del fuego El 31 de julio del año 1556, Loyola falle-
ce en Roma pero afortunadamente
ya había visto mucho de la
San Ignacio nació en 1491 en el castillo siembra de su apuesta,
de Loyola, en Guipúzcoa, norte de España, porque para aquel tiem-
cerca de los montes Pirineos que están en po la compañía ya ejercía
el límite con Francia. Su padre Bertrán De una notable influen-
Loyola y su madre Marina Sáenz, de familias cia en la evangeli-
muy distinguidas, tuvieron once hijos: ocho zación y conta-
varones y tres mujeres. El más joven de to- ba con miles de
dos fue Ignacio. miembros.
Ignacio tiene un temperamento vehemen- Tras su fa-

te y es ambicioso y noble. En su juventud as- llecimiento
piraba solo a gozar de la vida. A los 30 años fue beatifica-
combate contra los franceses en Pamplona, do por el Papa
como ayudante del duque de Nájera. Fue he- Paulo V, en el
rido por una bala de cañón hasta que en el año 1609 y
año 1540 el Papa aprobó la orden, Loyola y canonizado en
mayo de 1622
por el Papa
"El amor se ha de poner más en las obras que Gregorio XV.
en las palabras".
Ejercicios espirituales (1548)
104
Virgen del Carmen
La Virgen del Carmen o Nuestra Señora

del Carmen es el nombre con que se co-
noce la Advocación a la Santísima Virgen
María del Monte Carmelo, una de las ad-
vocaciones de la Virgen María. Esta ad-
vocación que celebramos cada 16 de julio
procede de los monjes Carmelitas y en es-
pecial de san Simón Stock (religioso inglés
de la Orden del Carmelo, quien nació en el
año 1165 en Aylesford, Reino Unido, y la
tradición, establece que le fue dado el esca-
pulario por la Virgen del Carmen; luego en
1247 fue elegido como el sexto general de
los carmelitas, en el capítulo llevado a cabo
en Aylesford, Kent, Inglaterra; y murió en
Burdeos, Francia en el año 1265), quien un
16 de julio de 1251 tuvo una visión de la
Virgen que le prometió concederle favores
a quien llevara el escapulario con su ima- Carmen de Boconó; hay
gen como muestra de cariño y devoción a celebraciones en Carache,
la Madre de Dios. en la parroquia Concep-
En Venezuela es una de las devociones ción, en el municipio Su-
más populares. Es importante acotar que cre, y en la Parroquia Sa-
en san Joaquín de Carabobo, la devoción bana de Mendoza.
es enorme y la celebran por todo lo alto, En Falcón, en los muni-
donde la réplica de la imagen original es cipios Colina y Píritu hay
venerada por todas las instituciones tan- eventos en su honor. En
to públicas como privadas. En Trujillo, en el Edo. Nueva Esparta, en
Boconó, está el centro de peregrinación más la isla de Margarita, hay
significativo, la Iglesia de Nuestra Señora del conmemoraciones en
105
Pampatar, La Asunción y Juan griego. En Miranda, en Petare, se engalana
la Capilla Nuestra Señora del Carmen, hoy centro de evangelización del
Barrio El Campito; y en el sector El Calvario, en el Hatillo; y es la patrona
de la parroquia de Araira. En el Zulia, en La Guajira Venezolana, es in-
teresante destacar que las étnias indígenas Añú y Wayuu la tienen como
su patrona y protectora; y poseen celebraciones en el Municipio Mara,
específicamente en Carrasquero, y en San Rafael del Mojan. En Lara, es
patrona de Barquisimeto y de la parroquia Aguada Grande, Municipio
Urdaneta. Y en Apure, en Guasdualito, es la patrona desde el 16 de julio
de 1835. Sólo por mencionar algunos de los muchos lugares donde se le
venera. Es la Patrona del Ejército de Venezuela.
Los seres humanos nos comunicamos por símbolos. Así como tenemos
banderas, escudos entre otros, las comunidades religiosas llevan su há-
bito como signo de su consagración a Dios. Los laicos no pueden llevar
hábito, pero lo que desean asociarse a los religiosos en su búsqueda de
la santidad pueden usar el escapulario. La Virgen dio a los Carmelitas
el escapulario como un hábito miniatura que todos los devotos pueden
llevar para significar su consagración a ella. Consiste en un cordón que
se lleva al cuello con dos piezas pequeñas de tela color café, una sobre el
pecho y la otra sobre la espalda. Se usa bajo la ropa, junto con el rosario
y la medalla milagrosa, el escapulario es uno de los más importantes sa-
cramentales marianos.
Decía san Alfonso Ligorio, doctor de la Iglesia: “Así como los hom-
bres se enorgullecen de que otros usen su uniforme, así Nuestra Señora
Madre María está satisfecha cuando sus servidores usan su escapulario
como prueba de que se han dedicado a su servicio, y son miembros de la
familia de la Madre de Dios”.
Un sacramental es un objeto religioso que la Iglesia haya aprobado
como signo que nos ayuda a vivir santamente y a aumentar nuestra de-
voción. Los sacramentales deben mover nuestros corazones a renunciar
a todo pecado, incluso al venial. El escapulario, al ser un sacramental,
no nos comunica gracias como hacen los sacramentos. Las gracias nos
vienen por nuestra respuesta de amor a Dios y de verdadera contrición
del pecado, lo cual el sacramental debe motivar.
106
¿CÓMO SURGE
EL ESCAPULARIO?
La palabra escapulario viene del

Latín “scapulae” que significa “hom-
bros”. Originalmente era un vestido
superpuesto que cae de los hom-
bros y lo llevaban los monjes du-
rante su trabajo. Con el tiempo se le
2
Pertenencia a
dio el sentido de ser la cruz de cada María
día que, como discípulos de Cristo
llevamos sobre nuestros hombros. Llevamos una marca que nos dis-
Para los Carmelitas particularmen- tingue como sus hijos escogidos.
te, pasó a expresar la dedicación El escapulario se convierte en el
especial a la Virgen Santísima y el símbolo de nuestra consagración a
deseo de imitar a su vida de entrega María. Consagración: “Pertenecer a
a Cristo y a los demás. María” es reconocer su misión ma-
ternal sobre nosotros y entregarnos
EL ESCAPULARIO a ella para dejarnos guiar, enseñar,
TIENE 3 SIGNIFICADOS moldear por Ella y en su corazón.
Así podemos ser usados por Ella
para la extensión del Reino de su
1
El amor y la protección
maternal de María Hijo.
El signo es una tela o manto pe-

3
El sueave yugo de
queño. Vemos como María cuando Cristo
nace Jesús lo envuelve en un man-
to. La Madre siempre trata de cobi- “Carguen con mi yugo y aprendan
jar a sus hijos. de mí, que soy tolerante y humilde
Envolver en su manto es una se- de corazón, y encontrarán descan-
ñal maternal de protección y cui- so para su vida. Porque mi yugo es
dado. Señal de que nos envuelve en suave y mi carga ligera (Mt 11, 29-
su amor maternal. Nos hace suyos. 30)”. El escapulario simboliza ese
Nos cubre de la ignominia de nues- yugo que Jesús nos invita a cargar
tra desnudes espiritual. pero que María nos ayuda a llevar.
107
SE DEBE VIVIR
LO QUE SIGNIFICA
El escapulario es un signo de nuestra identidad como católicos, vincu-

lados de íntimamente a la Virgen María con el propósito de vivir plena-
mente según nuestro bautismo. Representa nuestra decisión de seguir a
Jesús por María en el espíritu de los religiosos pero adaptado a la propia
vocación. Esto requiere que seamos pobres (un estilo de vida sencillo sin
apegos materiales), castos y obedientes por amor a Dios. En momentos
de tentación, tomamos el escapulario en nuestras manos e invocamos la
asistencia de la Madre, resueltos a ser fieles al Señor.
IMPOSICIÓN dio, tan práctico y oportuno hoy

DEL ESCAPULARIO en día.
El primer escapulario debe ser • La cultura del bienestar:

bendecido por un sacerdote e im- Jamás el hombre, en toda su his-
puesto por él mientras dice: “Reci- toria, soñó con un grado de con-
be este escapulario bendito y pide fort como el que disfruta hoy en
a la Virgen Santísima que por sus los países del primer mundo. Na-
méritos, lo lleves sin ninguna man- die duda de que esto es un gran lo-
cha de pecado y que te proteja de gro humano. Pero, por otro lado, ¿a
todo mal y te lleve a la vida eterna”. quién se le escapa, a estas alturas,
Los Retiros espirituales –en sus que no siempre satisface plena-
distintas modalidades- han sido mente al espíritu humano?
utilizados durante siglos por los
cristianos para mejorar su vida • La prisa:
espiritual. Hasta hace unos años Nunca hemos vivido mejor; pero
era fácil tener ocasión de hacer nunca hemos vivido tan agitados.
alguno. Hoy es menos frecuente. El horario de trabajo, que a veces
En estas páginas se realiza una acaba demasiado tarde: la familia,
rápida explicación de lo que son y a la que quizá dedicamos menos
para qué sirven, con el fin de que tiempo del que nos gustaría: com-
muchas más personas puedan be- promisos ineludibles; relaciones
neficiarse de este espléndido me- sociales; reuniones e imprevistos
108
CAPÍTULO SEGUNDO (1)
JESUCRISTO SIEMPRE JOVEN
22. Jesús es «joven entre los jóvenes para ser ejemplo de los jóvenes y consagrarlos al
Señor».1 Por eso el Sínodo dijo que «la juventud es una etapa original y estimulante
de la vida, que el propio Jesús vivió, santificándola».2 ¿Qué nos cuenta el Evangelio
acerca de la juventud de Jesús?
La juventud de Jesús
23. El Señor «entregó su espíritu» (Mt 27,50) en una cruz cuando tenía poco más de 30
años de edad (cf. Lc 3,23). Es importante tomar conciencia de que Jesús fue un joven.
Dio su vida en una etapa que hoy se define como la de un adulto joven. En la plenitud
de su juventud comenzó su misión pública y así «brilló una gran luz» (Mt 4,16), sobre
todo cuando dio su vida hasta el fin. Este final no era improvisado, sino que toda su
juventud fue una preciosa preparación, en cada uno de sus momentos, porque «todo
en la vida de Jesús es signo de su misterio»3 y «toda la vida de Cristo es misterio de
Redención».4
24. El Evangelio no habla de la niñez de Jesús, pero sí nos narra algunos acontecimientos
de su adolescencia y juventud. Mateo sitúa este período de la juventud del Señor
entre dos acontecimientos: el regreso de su familia a Nazaret, después del tiempo
de exilio, y su bautismo en el Jordán, donde comenzó su misión pública. Las últimas
imágenes de Jesús niño son las de un pequeño refugiado en Egipto (cf. Mt 2,14-
15) y posteriormente las de un repatriado en Nazaret (cf. Mt 2,19-23). Las primeras
imágenes de Jesús, joven adulto, son las que nos lo presentan en el gentío junto al
río Jordán, para hacerse bautizar por su primo Juan el Bautista, como uno más de su
pueblo (cf. Mt 3,13-17).
25. Este bautismo no era como el nuestro, que nos introduce en la vida de la gracia, sino
que fue una consagración antes de comenzar la gran misión de su vida. El Evangelio
dice que su bautismo fue motivo de la alegría y del beneplácito del Padre: «Tú eres
mi Hijo amado» (Lc 3,22). En seguida Jesús apareció lleno del Espíritu Santo y fue
conducido por el Espíritu al desierto. Así estaba preparado para salir a predicar y a
hacer prodigios, para liberar y sanar (cf. Lc 4,1-14). Cada joven, cuando se sienta
llamado a cumplir una misión en esta tierra, está invitado a reconocer en su interior
esas mismas palabras que le dice el Padre Dios: «Tú eres mi hijo amado».
1. S. Ireneo, Contra las herejías, II, 22,4: PG 7, 784.

2. Documento Final de la XV Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, 60. En adelante este docu-
mento se citará con la sigla DF. Se puede encontrar en: http:// www.vatican.va/roman_curia/synod/documents/
rc_synod_doc_20181027_doc-final-instrumentum-xvassemblea-giovani_sp.html
3. Catecismo de la Iglesia Católica, 515.
4. Ibíd., 517.
109
26. Entre estos relatos, encontramos uno que muestra a Jesús en plena adolescencia. Es
cuando regresó con sus padres a Nazaret, después que ellos lo perdieron y lo encontra-
ron en el Templo (cf. Lc 2,41-51). Allí dice que «les estaba sujeto» (cf. Lc 2,51), porque
no renegaba de su familia. Después, Lucas agrega que Jesús «crecía en sabiduría, edad
y gracia ante Dios y los hombres» (Lc 2,52). Es decir, estaba siendo preparado, y en ese
período iba profundizando su relación con el Padre y con los demás. San Juan Pablo II
explicaba que no crecía sólo físicamente, sino que «se dio también en Jesús un creci-
miento espiritual», porque «la plenitud de gracia en Jesús era relativa a la edad: había
siempre plenitud, pero una plenitud creciente con el crecer de la edad».5
27. Con estos datos evangélicos podemos decir que, en su etapa de joven, Jesús se fue
«formando», se fue preparando para cumplir el proyecto que el Padre tenía. Su
adolescencia y su juventud lo orientaron a esa misión suprema.
28. En la adolescencia y en la juventud, su relación con el Padre era la del Hijo amado,
atraído por el Padre, crecía ocupándose de sus cosas: «¿No sabían que debo ocuparme
de los asuntos de mi Padre?» (Lc 2,49). Sin embargo, no hay que pensar que Jesús fuera
un adolescente solitario o un joven ensimismado. Su relación con la gente era la de un
joven que compartía toda la vida de una familia bien integrada en el pueblo. Aprendió
el trabajo de su padre y luego lo reemplazó como carpintero. Por eso, en el Evangelio
una vez se le llama «el hijo del carpintero» (Mt 13,55) y otra vez sencillamente «el
carpintero» (Mc 6,3). Este detalle muestra que era un muchacho más de su pueblo, que
se relacionaba con toda normalidad. Nadie lo miraba como un joven raro o separado de
los demás. Precisamente por esta razón, cuando Jesús salió a predicar, la gente no se
explicaba de dónde sacaba esa sabiduría: «¿No es este el hijo de José?» (Lc 4,22).
29. El hecho es que «Jesús tampoco creció en una relación cerrada y absorbente con
María y con José, sino que se movía gustosamente en la familia ampliada, que incluía
a los parientes y amigos».6 Así entendemos por qué sus padres, cuando regresaban
de la peregrinación a Jerusalén, estaban tranquilos pensando que el jovencito de doce
años (cf. Lc 2,42) caminaba libremente entre la gente, aunque no lo vieran durante
un día entero: «Creyendo que estaba en la caravana, hicieron un día de camino»
(Lc 2,44). Ciertamente, pensaban que Jesús estaba allí, yendo y viniendo entre los
demás, bromeando con otros de su edad, escuchando las narraciones de los adultos
y compartiendo las alegrías y las tristezas de la caravana. El término griego utilizado
por Lucas para la caravana de peregrinos, synodía, indica precisamente esta “comu-
nidad en camino” de la que forma parte la sagrada familia. Gracias a la confianza de
sus padres, Jesús se mueve libremente y aprende a caminar con todos los demás.
Su juventud nos ilumina

30. Estos aspectos de la vida de Jesús pueden resultar inspiradores para todo joven que
crece y se prepara para realizar su misión. Esto implica madurar en la relación con el
Padre, en la conciencia de ser uno más de la familia y del pueblo, y en la apertura a
5. Catequesis (27 junio 1990), 2-3: Insegnamenti 13,1 (1990), 1680-1681.
6. Exhort. ap. postsin. Amoris laetitia (19 marzo 2016), 182: AAS 108 (2016), 384.
110
ser colmado por el Espíritu y conducido a realizar la misión que Dios encomienda,
la propia vocación. Nada de esto debería ser ignorado en la pastoral juvenil, para
no crear proyectos que aíslen a los jóvenes de la familia y del mundo, o que los
conviertan en una minoría selecta y preservada de todo contagio. Necesitamos más
bien proyectos que los fortalezcan, los acompañen y los lancen al encuentro con los
demás, al servicio generoso, a la misión.
31. Jesús no los ilumina a ustedes, jóvenes, desde lejos o desde afuera, sino desde su
propia juventud, que comparte con ustedes. Es muy importante contemplar al Jesús
joven que nos muestra los evangelios, porque Él fue verdaderamente uno de ustedes,
y en Él se pueden reconocer muchas notas de los corazones jóvenes.
Lo vemos, por ejemplo, en las siguientes características: «Jesús tenía una confianza
incondicional en el Padre, cuidó la amistad con sus discípulos, e incluso en los momentos
críticos permaneció fiel a ellos. Manifestó una profunda compasión por los más débiles,
especialmente los pobres, los enfermos, los pecadores y los excluidos. Tuvo la valentía de
enfrentarse a las autoridades religiosas y políticas de su tiempo; vivió la experiencia de
sentirse incomprendido y descartado; sintió miedo del sufrimiento y conoció la fragilidad
de la pasión; dirigió su mirada al futuro abandonándose en las manos seguras del Padre y
a la fuerza del Espíritu. En Jesús todos los jóvenes pueden reconocerse».7
32. Por otra parte, Jesús ha resucitado y nos quiere hacer partícipes de la novedad de su
resurrección. Él es la verdadera juventud de un mundo envejecido, y también es la
juventud de un universo que espera con «dolores de parto» (Rm 8,22) ser revestido
con su luz y con su vida. Cerca de Él podemos beber del verdadero manantial, que
mantiene vivos nuestros sueños, nuestros proyectos, nuestros grandes ideales, y que
nos lanza al anuncio de la vida que vale la pena. En dos detalles curiosos del evangelio
de Marcos puede advertirse el llamado a la verdadera juventud de los resucitados. Por
una parte, en la pasión del Señor aparece un joven temeroso que intentaba seguir a
Jesús pero que huyó desnudo (cf. Mc 14,51-52), un joven que no tuvo la fuerza de
arriesgarlo todo por seguir al Señor. En cambio, junto al sepulcro vacío, vemos a un
joven «vestido con una túnica blanca» (16,5) que invitaba a perder el temor y anun-
ciaba el gozo de la resurrección (cf. 16,6-7).
33. El Señor nos llama a encender estrellas en la noche de otros jóvenes, nos invita a
mirar los verdaderos astros, esos signos tan variados que Él nos da para que no nos
quedemos quietos, sino que imitemos al sembrador que miraba las estrellas para
poder arar el campo. Dios nos enciende estrellas para que sigamos caminando: «Las
estrellas brillan alegres en sus puestos de guardia, Él las llama y le responden» (Ba
3,34-35). Pero Cristo mismo es para nosotros la gran luz de esperanza y de guía en
nuestra noche, porque Él es «la estrella radiante de la mañana» (Ap 22,16).
L a juventud de la I glesia
34. Ser joven, más que una edad es un estado del corazón. De ahí que una institución tan
antigua como la Iglesia pueda renovarse y volver a ser joven en diversas etapas de
7. DF 63.
111
su larguísima historia. En realidad, en sus momentos más trágicos siente el llamado
a volver a lo esencial del primer amor. Recordando esta verdad, el Concilio Vaticano
II expresaba que «rica en un largo pasado, siempre vivo en ella y marchando hacia
la perfección humana en el tiempo y hacia los objetivos últimos de la historia y de
la vida, es la verdadera juventud del mundo». En ella es posible siempre encontrar a
Cristo «el compañero y amigo de los jóvenes».8
Una Iglesia que se deja renovar

35. Pidamos al Señor que libere a la Iglesia de los que quieren avejentarla, esclerotizarla
en el pasado, detenerla, volverla inmóvil. También pidamos que la libere de otra tenta-
ción: creer que es joven porque cede a todo lo que el mundo le ofrece, creer que
se renueva porque esconde su mensaje y se mimetiza con los demás. No. Es joven
cuando es ella misma, cuando recibe la fuerza siempre nueva de la Palabra de Dios, de
la Eucaristía, de la presencia de Cristo y de la fuerza de su Espíritu cada día. Es joven
cuando es capaz de volver una y otra vez a su fuente.
36. Es cierto que los miembros de la Iglesia no tenemos que ser “bichos raros”. Todos
tienen que sentirnos hermanos y cerca-nos, como los Apóstoles, que «gozaban de
la simpatía de todo el pueblo» (Hch 2,47; cf. 4,21.33; 5,13). Pero al mismo tiempo
tenemos que atrevernos a ser distintos, a mostrar otros sueños que este mundo no
ofrece, a testimoniar la belleza de la generosidad, del servicio, de la pureza, de la
fortaleza, del perdón, de la fidelidad a la propia vocación, de la oración, de la lucha
por la justicia y el bien común, del amor a los pobres, de la amistad social.
37. La Iglesia de Cristo siempre puede caer en la tentación de perder el entusiasmo

porque ya no escucha la llamada del Señor al riesgo de la fe, a darlo todo sin medir
los peligros, y vuelve a buscar falsas seguridades mundanas. Son precisamente los
jóvenes quienes pueden ayudarla a mantenerse joven, a no caer en la corrupción, a
no quedarse, a no enorgullecerse, a no convertirse en secta, a ser más pobre y testi-
monial, a estar cerca de los últimos y descartados, a luchar por la justicia, a dejarse
interpelar con humildad. Ellos pueden aportarle a la Iglesia la belleza de la juven-
tud cuando estimulan la capacidad «de alegrarse con lo que comienza, de darse sin
recompensa, de renovarse y de partir de nuevo para nuevas conquistas».9
38. Quienes ya no somos jóvenes, necesitamos ocasiones para tener cerca la voz y el
estímulo de ellos, y «la cercanía crea las condiciones para que la Iglesia sea un espacio
de diálogo y testimonio de fraternidad que fascine».10 Nos hace falta crear más espa-
cios donde resuene la voz de los jóvenes: «La escucha hace posible un intercambio de
dones, en un contexto de empatía […]. Al mismo tiempo, pone las condiciones para
un anuncio del Evangelio que llegue verdaderamente al corazón, de modo incisivo y
fecundo».11
8. Conc. Ecum. Vat. II, Mensaje a la humanidad: A los jóvenes (8 diciembre 1965): AAS 58 (1966), 18.
9. Ibíd.
10. DF 1.
11. Ibíd., 8.
112

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“Bienaventurados ustedes, cuando por causa mía los insulten, los

persigan y les levanten toda clase de calumnias. Alégrense y

E n el sermón de la montaña Jesucristo nos enseña el camino hacia la felicidad:

CON APROBACIÓN ECLESIÁSTICA Distribución:

Imprimatur Librerías San Pablo

S. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

1.2 ACTO PENITENCIAL

celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor, Hijo único, Jesucristo;

2.1 LECTURA(S) propia(s) del día

tre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de

3.1 PREPARACIÓN DE LAS OFRENDAS

3.2 ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS propia del día

3.3 PLEGARIA EUCARÍSTICA

siempre tu misericordia. Con esta gozosa esperanza, y unidos a los ángeles

Prefacio: II DE SANTA MARÍA VIRGEN

Prefacio: I DE LOS SANTOS

3.4 PLEGARIA EUCARÍSTICA II

y te damos gracias porque nos haces dignos de servirte en tu presencia.

En las Misas por los difuntos se puede añadir

C2 Acuérdate también de nuestros hermanos que se durmieron en la

S. Fieles a la recomendación del Salvador y siguiendo su divina enseñanza,

en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras

Según la costumbre del lugar, se dan la paz.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN propia del día

S. El Señor esté con ustedes.

XIII SEMANA DEL TO

DIOS LLAMA A LA VIDA Y LA JUSTICIA

ANTÍFONA DE ENTRADA SAL 46, 2 PRIMERA LECTURA

Yo desprecio y detesto las fiestas de • Pues todas las fieras de la selva

Entonces salió toda la gente de la ciudad al encuentro de Jesús, y al

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

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XIII SEMANA DEL TO

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ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN CFR. SAL 102, 1 El profeta es un regalo de Dios a su pue-

3 VIERNES SANTO TOMÁS, APÓSTOL

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L os textos de Amós y de Mateo anuncian buenas noticias, las situacio-

ANTÍFONA DE ENTRADA SAL 46, 2 ORACIÓN COLECTA

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PRIMERA LECTURA SALMO RESPONSORIAL DEL SALMO 84

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Hay dos razones por las que con-

1. Estrella de la mañana: Cristo es llamado el Sol de Justicia (Cfr. Lc 1, 78) o Lucero de

INSTAURAR EL REINO DE DIOS

ORACIÓN DE LOS FIELES alegría y esperanza. Roguemos al

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Que vivamos movidos por el amor, que realmente el amor

Que cultivemos nuestra paz interior y con ello que seamos

FERIA o bien SANTA MARÍA GORETTI,

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

XIV SEMANA DEL TO

FIEL ES QUIEN SABE RECONOCER AL SEÑOR

ORACIÓN COLECTA si fueran de un extraño. Aunque

habló. La multitud, maravillada, decía: “Nunca se había visto nada se-

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

XIV SEMANA DEL TO

En ambos textos el buscar está en relación con los legítimos herederos de