Durante la historia de la economía de los Estados Unidos, el caso Enron ha sido el mayor

escandalo financiero, el cual alarma los mercados y economías de mundiales y Europa no

fue la excepción. Dicho escandalo tuvo lugar en el 2001 y fue tuvo un gran impacto en la
económica estadounidense que dejo de un lado escándalos y crisis económica que habían
dejado marcada la economía del país. Enron fue el primer distribuidor energético a nivel
global quien facturaba mas de 100.000 millones de dólares al año. Llegando a ser una
empresa ejemplo para todas, siendo la mejor empresa de América, no era mas que una
fachada basada en pasivos que se convertían en activos, prestamos en ingresos, deuda
maquillada y beneficios inflados. La caída de Enron se llevo por delante cinco de las
principales y mas grandes firmas auditoras por fraude.

Dicha situación presentada en EEUU puso en alerta rojo las mas grandes economías,
empujándolas a analizar la situación y tomar medidas de urgencia y control minimizando
la posibilidad de fraudes como esos que pudieran llegar a afectar la economía a tal
magnitud. La tarea para los ministros de economía de estas grandes potencias es crear
reformas legales y controles que permitan tener un mayor control sobre aquellos que
controlan, tarea que no resulta ser nada fácil.

Este caso deja mucho que pensar a los comités de auditoria, cada miembro del comité
debe de ser financieramente competente para comprender el balance y las notas de la
empresa, reconociendo las recomendaciones de cada estado respecto a las normas
contables y financieras, de este modo lograran examinar de cerca las transacciones
significativas, en especial aquellas que pueden cambiar la estimación o percepción de
utilidades.