Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Clonacion ONU
Clonacion ONU
***
Señor presidente:
Desde el principio pareció claro que, a pesar del título de esta cuestión de la agenda,
«Convención Internacional contra la clonación reproductiva de seres humanos», el
propósito de esta actividad ha sido de hecho hallar un marco jurídico que permitiera y
acelerara el avance de la ciencia médica en la obtención y utilización de células
estaminales, e identificar y prohibir las prácticas que fueran irrespetuosas con la
dignidad humana".
Desde un punto de vista puramente científico, el progreso terapéutico ya logrado con las
llamadas células estaminales adultas, esto es, células estaminales de la médula ósea, de
la sangre del cordón umbilical y de otros tejidos adultos, parece muy prometedora. La
clonación de embriones, por su parte, está todavía muy lejos de aportar el progreso que
sugieren sus partidarios. Todavía está por ver un éxito clínico cierto en la utilización de
células estaminales embrionales clonadas incluso en la experimentación con animales.
La labor que haría seguro experimentar de esta manera en seres humanos podría llevar
mucho tiempo, y estos obstáculos puede que nunca se superen.
Más aún, la distinción que a veces se quiere trazar entre clonación reproductiva y la
terapéutica es engañosa. Ambas implican el mismo proceso técnico de clonación y
difieren sólo en el objetivo. Las dos formas de clonación implican falta de respeto por la
dignidad del ser humano. De hecho, desde un punto de visto antropológico y ético, la
llamada clonación terapéutica, al crear embriones humanos con la intención de
destruirlos, incluso si se emprende con el objetivo de ayudar posiblemente a enfermos
en el futuro, es claramente incompatible con el respeto de la dignidad del ser humano,
porque hace de una vida humana nada más que un instrumento de otra.
Señor presidente: mi delegación quería concluir sus observaciones con dos indicaciones
finales. En primer lugar, este Comité y la Asamblea general parece ser el forum
adecuado para nuestras deliberaciones, en cuanto a que las cuestiones que giran en torno
a la clonación de embriones humanos no conocen fronteras geográficas, culturales o
temporales. Pero lo que es más importante, la materia de esta particular búsqueda
científica afecta a la naturaleza y existencia de la vida humana en sí misma. Por lo tanto
un cuerpo que es supranacional tiene el alcance adecuado para abarcar toda la amplitud
de esta cuestión. Este tema –de interés vital para la raza humana en el presente y en el
futuro— bien pertenece a este cuerpo universal.