Los derechos económicos, sociales, culturales, ambientales y colectivos son
Vistos generalmente desde dos enfoques, aparentemente incompatibles. Por un
lado, representan las necesidades básicas y fundamentales que requiere la persona humana para lograr un proyecto de vida digno; por otra parte, se les identifica como garantía y medio de protección, revisten de gran complejidad en su abordaje como derechos justiciables y exigibles, lo que los hace parecer lejanos y abstractos. En ese sentido, el principal reto es lograr que las personas en condición de mayor vulnerabilidad tengan referentes sencillos sobre cuáles son sus derechos como colectivos, cómo reconocerlos, protegerlos y cómo reclamarlos, tanto en el marco de la justicia