Dante aún no ha llegado al infierno. En este canto
se narra la forma en la que Dante, en la mitad de su vida, se halla a sí mismo perdido en una selva a la I que no recuerda cómo llegó. Allí, además, se le Selva Oscura. El pecado, el presenta su guía, Virgilio, a quien él guarda gran león y la loba. admiración y considera su maestro. Virgilio invita a Dante a que recorran juntos el infierno, el purgatorio y que, finalmente, siga su viaje por el paraíso con Beatríz.
Virgilio y Dante se encaminan hacia las puertas del
Infierno. Cabe anotar aquí que Dante le cuestiona a II su guía si realmente lo considera capaz de hacer Selva oscura. Invocación. este recorrido ya que los otros dos hombres que él Virgilio disipa los temores de conoce que han hecho esta misma travesía (San Dante. Pablo y Eneas) son, según él mismo, mucho más dignos que él. III Puertas del infierno: indiferentes, paso del Vestíbulo: Indiferentes Aqueronte y Caronte. Pecado
Debido a que no han llegado al Infierno, no hay,
propiamente, un pecado que esté siendo castigado. Sin embargo, en este primer canto aparecen tres bestias que causan gran espanto a Dante, i.e. el leopardo, el león y la loba. Estas figuras parecen tener un rol simbólico. Cada una de llas representaría un pecado: lujura, soberbia y codicia.
Análogamente al primer Canto, aquí tampoco se
narra aún un pecado en particular. Sin embargo, ante el temor de Dante por encaminarse en el viaje, Virgilio le reprocha su cobardía. Le alega, específicamente, porque el temor "al hombre muchas veces puso de espaldas al deber" (II, 45- 47). Aquí se encuentran quienes, en vida, no decidieron entre el Bien y el Mal. Dichas personas no tomaron descisiones morales de un lado o del otro razón por la cual no son admitidos en el Paraíso ni en el Infierno. Están condenadas, por ello, a pasar la eternidad en la entrada del Infierno mas nunca podrán entrar a él. Castigo
De la misma forma en la que no hay pecado en
particular que esté siendo relatado, no aparece aún un castigo en la narración. No obstante, la aparición de las tres bestias pueden representar una advertencia para Dante. Dicho de otro modo, los tres animales amenzan a Dante y se revelan en esa forma aterradora para hacerle caer en cuenta de sus pecados y hacerle, además, un llamado al arrepentimiento.
Para este punto no hay aún castigos.
Andan llorando en el vestíbulo del infierno. Son atacados por moscas y avispas mientras unos horribles gusanos consumen la sangre y las lágrimas que caen en sus pies. Personajes
Dante y Virgilio.
Dante y Virgilio. Se menciona a
Beatríz, a Santa Lucía y a una "dulce mujer" (que parece hacer referenca a la Virgen María) Dante, Virgilio y Carón o Caronte. Este último, el mitológico barquero de los infernos paganos, adquiere en la obra la forma de un demonio. Además, hay una alusión a una figura que parece ser Celestino V. Citas
"A mitad del camino de la vida/ yo me encontrabaen una selva
oscura/ con la senda derecha ya perida./ ¡Ah, pues decir cuál era es cosa dura/ esta selva salvaje, áspera y fuerte/ que en el pensar renueva la pavura!" (I, 1-6)
"Eres tú mi maestro, tú mi autor:/ eres tú solo aquel del que he
tomado/ el bello estilo que me diera honor" (I, 85-87)
"Yo comencé: 'Poeta que me guías,/ mira bien si mi fuerza es
suficiente/ antes de la gran epresa que me fías' [...]" (II, 9-12)
"Es Beatriz la que te viene a ver/ desde donde volver desea
ansiosa./ Amor me mueve y me hace responder./ Será de ti mi lengua alabanciosa/ cuando ante mi señor esté presente." (II, 69,74) «Por mí se va a la ciudad doliente/ por mí se va en el eterno dolor,/ por mí se va con la perdida gente. Fue la justicia quién movió a autor/ El divino poder se unió al creame/ con el sumo poder y el primo amor/ En edad solo puede aventajame/ lo eterno, mas eternamente duro/ Perded toda esperanzaal atravesarme» (III, 1-9)
"Oh, hijo amado,/ de todas las naciones llegan gentes/ que
murieron teniendo a Dios airado; todos pasan el río diligente,/ pues los empuja la eternal justicia/ que en ardor cambia el miedo de sus mentes." (III, 121-126) Notas
Este primer canto nos introduce al viaje que
realizará Dante junto a Virgilio a través del infierno y el purgatorio. Paulatinamente, entonces, se empieza a revelar al lector el tipo de realidad del lugar en el que se encuentra el protagonista. En esta linea, por ejemplo, el primer acercamiento al lenguaje simbólico (y a todo el sistema de alegorías) que se manejará durante toda la obra son los animales con los que se topa Dante una vez despierta en la "selva oscura".
Al comienzo del segundo canto, Dante invoca
por primea vez a las musas; esta vez, para pedirles ayuda en la tarea de narrar y recordar sus experiencias. Con esto rememora, además, la tradición clásica. De otro lado, es de destacar el papel de Beatríz no solo como motivo de su viaje sino también como razón de su valentía; es ella la razón por la que decide abandonar el temor y continuar la travesía. En este canto, Dante ve, por primera vez, a las almas castigadas. Se puede resaltar que al poner énfasis en el castigo de los indiferentes, Dante pretende resaltar que dicha actitud amoral no conduce al paraíso. Por el contrario, solo los "salva" del infierno pero no de los padecimientos. Es, pues, una actitud reprochable que merece castigo.