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Rev Chil Anest, 2011; 40: 272-282

Artículo de Revisión

ANALGESIA PERIDURAL TORÁCICA PARA CIRUGÍA


TORÁCICA Y ABDOMINAL MAYOR

ANA MARÍA ESPINOZA U.* y LUIS BRUNET L.*

Key words: Regional anesthesia, epidural analgesia, postoperative analgesia, patient controlled analgesia.

INTRODUCCIÓN ponsables de la inervación de la zona de la cual se


originan los estímulos nociceptivos. Es necesario
La analgesia epidural torácica es en la actuali- un adecuado conocimiento de las representacio-
dad uno de los métodos más utilizados por las uni- nes anatómicas metaméricas para elegir el sitio de
dades de tratamiento del dolor agudo para el mane- punción y cateterización epidural en concordancia
jo del dolor postoperatorio de la cirugía torácica y con el área quirúrgica a desaferentar (Tabla 2). Ha-
abdominal mayor. En los últimos 25 años la analge- bitualmente la punción se realiza a ciegas, guiada
sia epidural y, en especial la analgesia epidural to- por referencias anatómicas externas conocidas. Las
rácica, se ha trasformado en una técnica anestésica referencias más utilizadas debido a su fácil recono-
común, asociada a una anestesia general durante la cimiento son: la apófisis espinosa más prominen-
cirugía abierta de tórax y de abdomen superior, y en te de la región cervico-torácica C7, la espina de la
el tratamiento del dolor postoperatorio1. Ha mante- escápula que corresponde a T3 y el borde inferior
nido una gran popularidad debido a las ventajas que de la escápula a T7. Todas suelen ser más fáciles
se le atribuyen, entre las cuales las más importan- de reconocer y visualizar poniendo al paciente en
tes son la mejor calidad de la analgesia, la mayor posición sentada, en especial si se trata de pacientes
satisfacción de los pacientes, la preservación de obesos. La punción e instalación de un catéter en el
la actividad muscular normal de las extremidades espacio epidural torácico resulta técnicamente más
inferiores y la disminución de las complicaciones difícil que en la región lumbar debido a la marcada
postoperatorias2. Aun cuando los progresos de la angulación inferior o caudal de las apófisis espino-
cirugía mínimamente invasiva y el aumento del uso sas en relación a los cuerpos vertebrales, y a que el
de los bloqueos paravertebral y del plano transver- espacio interespinoso es más estrecho a nivel de las
so abdominal con la asistencia de ultrasonografía vértebras torácicas. El acceso al espacio epidural
han reducido su uso en los últimos tiempos, la anal- por la línea media obliga a puncionar en una an-
gesia epidural torácica continúa siendo una técnica gulación cefálica marcada, pasando a través de un
de gran utilidad en algunos casos seleccionados, de espacio intervertebral estrecho que dificulta la téc-
ahí la importancia de conocer la técnica, usos e in- nica. El acceso paramediano suele ser más fácil y
dicaciones (Tabla 1)3,4. permite acceder al espacio epidural con una menor
angulación, motivo por el cual es recomendado por
muchos autores.
Consideraciones Anatómicas

El objetivo de la analgesia epidural torácica se Técnica


logra administrando los anestésicos locales o las
soluciones analgésicas elegidas en el punto me- Previa monitorización y habiendo instalado
dio o central de los segmentos metaméricos res- una vía venosa, se coloca al paciente en posición

* Médico Anestesiólogo, Profesor Asociado, Departamento de Anestesiología y Reanimación, Hospital Clínico de la Universidad
de Chile.

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ANALGESIA PERIDURAL TORÁCICA PARA CIRUGÍA TORÁCICA Y ABDOMINAL MAYOR

sentada con los pies apoyados sobre un escabel y


las rodillas flectadas. Se le solicita que mantenga
la espalda recta, flexionando el cuello y la porción
superior del tórax y se le invita a relajar la
musculatura cervical y de la cintura escapular. La
punción paramediana se realiza 1 a 2 cm. por fuera
de la línea media a nivel del borde inferior de la
apófisis espinosa superior del espacio elegido, se
infiltra la piel y el tejido subcutáneo con anestésico
local y se avanza con el trocar de punción epidural
en 90° en relación al plano de la piel, paralelo a
la apófisis espinosa, hasta alcanzar la lámina de la
vértebra inferior (Figura 1).
Se mide la distancia entre la piel y la lámina y se
retira el trocar hasta la piel, volviendo a puncionar
con una inclinación de 5 a 10° hacia la línea media
y 70° a cefálico en relación a la piel, avanzando Figura 1. Relación entre borde inferior escapular y T7 (El
hasta la distancia a la cual se encontró la lámina. asterisco marca sitio de punción con técnica paramediana
Posteriormente se continúa avanzando, midiendo a nivel T6-T7.
la resistencia con una jeringa en forma secuencial,
hasta lograr la pérdida de la resistencia al ingresar
al espacio epidural que suele encontrarse entre 4 su visión, a la punta del trocar. Con el trocar en el
a 6 cm de la piel5. Si durante el avance, el trocar espacio epidural torácico se avanza el catéter hasta
chocara con estructuras óseas, debe corregirse que su extremo distal quede 5 a 6 cm dentro del
la inclinación de la punción hacia cefálico hasta espacio, luego se retira el trocar evitando que se
lograr “cabalgar” sobre el borde superior de la salga el catéter, el que debe fijarse cuidadosamente
lámina inferior e ingresar al espacio cubierto por a la piel de la espalda para evitar que se desplace o
el ligamento amarillo. El operador debe tratar de angule. Los errores en la fijación y las fallas en los
trasladar la sensibilidad de las manos, o mejor aun cuidados del catéter son causa del mayor problema

Tabla 1. Cirugías que se pueden beneficiar del uso de analgesia epidural torácica
Cardiovas- Tórax Abdomen Colon Nefrouroló- Ginecológica Plástica
cular superior gica
Revascu- Deformación Esofagecto- Resección de Nefrectomía Histerectomía Abdomino-
larización de Pectum y mía y Cirugía Colon abdominal plastía
Miocárdica Tórax Antireflujo radical
sin CEC
Reparación Toracotomía Gastrectomía Resección Cistectomía Exanteración Hernioplastía
Ductus y Cirugía Enteral pélvica incisional
Bariátrica
Reparación Timectomía Resección Resección Cirugía ure- Resección Plastía ma-
Coartación Hepática Abdominope- teral de tumores maria
Aórtica rineal anexiales
Reparación Mastectomía Pancreatec- Derivaciones Prostatecto-
Aneurisma tomía Digestivas mía radical
Aorta Torá- abdominal
cica
Esplenecto- Linfadenecto-
mía mía lumboa-
Colecistec- órtica
tomía y Vía
Biliar

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Figura 2. Representación esquemática del


acceso al espacio epidural por una punción
paramediana a nivel de la columna torácica.
A: el trocar de Touhy se avanza perpendicular
al plano de la piel, a través de la zona pre-
viamente anestesiada, 1 cm lateral al borde
inferior de la apófisis espinosa del espacio
intervertebral elegido. B: se avanza el trocar
hasta topar con la lámina ipsilateral de la vér-
tebra inferior, midiendo la distancia desde la
piel. C y D: se retira el trocar y se reinser-
ta, modificando la orientación de acceso en
aproximadamente 30º hacia la línea media,
hasta volver a topar con la lámina ipsilateral a
la misma profundidad anterior. E: finalmente
se retira algunos centímetros y reinserta con
una angulación cefálica hasta pasar por sobre
el borde superior de la lámina, comprobando
el acceso al espacio epidural por la pérdida
de resistencia (Imagen gentileza del Dr. Juan
Morales Santelices).

Tabla 2. Sitio de instalación del catéter epidural: sugerencia según tipo de cirugía
Tipo de Cirugía Sitio de Punción Epidural
Cardíaca y Aorta torácica C7 - T2
Torácica T2 - T6
Hepática y Gastroesofágica T4 - T8
Enterocolónica y Nefrourológica T6 - T12
Pélvica y Ginecológica T8 - T12

de la analgesia epidural continua, cual es el retiro o usar mascarilla facial, gorro, guantes y delantal
desplazamiento accidental anticipado del catéter y estériles y debe realizar un lavado de manos con
la consecuente falla en la analgesia6 (Figura 2). jabón antiséptico. La piel del paciente debe lavar-
Durante la punción e instalación del catéter de- se y prepararse con solución antiséptica previo a
ben utilizarse las medidas antisépticas habituales la punción7. En aquellos pacientes que no puedan
para un procedimiento invasivo: el operador debe mantenerse en posición sentada, estén bajo anes-

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tesia general o sedación profunda, o en ventilación a los 30 minutos de la dosis inicial. Generalmente
mecánica, se puede hacer la punción y cateteriza- las velocidades de infusión varían entre 3 a 10
ción epidural en decúbito lateral, accediendo por ml·h-1 y las soluciones más comúnmente usadas
vía paramediana desde la dirección del piso hacia contienen bupivacaína al 0,1% (0,0625% - 0,125%)
la línea media. El acceso por la línea media, aunque y fentanilo 2 a 4 μg·ml-1 o bien sufentanil, morfina
técnicamente es más difícil, puede realizarse tanto o hidromorfona. Se pueden utilizar también las
en posición sentada como en decúbito lateral, usan- técnicas de analgesia epidural controlada por
do una mayor angulación cefálica para el acceso al el paciente (AECP) usando para ello bombas
espacio epidural. especiales que permiten dar infusiones continuas y
bolos en demanda, o bien solo bolos epidurales en
demanda. Las dosis más comúnmente usadas en la
Dosificación AECP son bolos de 3 a 10 ml a intervalos de 30
a 60 minutos, de la misma solución administrada
Una vez posicionado el catéter en el espacio en infusión continua. La AECP permite administrar
epidural y comprobada la ausencia de sangre o analgesia en forma prolongada en el período
líquido cefalorraquídeo a través de la aspiración, se perioperatorio y se ha asociado a un alto grado
puede administrar la dosis del anestésico local o de de satisfacción por parte del paciente, junto con
la solución analgésica elegida, de acuerdo al nivel una excelente calidad de la analgesia y menor
de anestesia quirúrgica o de bloqueo analgésico incidencia de efectos no deseados que cuando se
deseado. La mantención ulterior del nivel obtenido la compara con manejo analgésico con opiodes
se logra con bolos intermitentes o por dosificación parenterales OP9.
continua. Se ha sugerido el uso de volúmenes de 0,5
-1 ml (0,7 ml) por segmento torácico a bloquear, a
diferencia de los 1-2 ml utilizados comúnmente a Control
nivel epidural lumbar, como dosis de carga inicial.
Debido a los marcados efectos hemodinámicos que Las tasas de infusión se pueden modificar en
puede producir el bloqueo de los nervios simpáticos el período postoperatorio de acuerdo a la relación
cardioaceleradores en la anestesia epidural torácica entre el nivel de bloqueo sensitivo medido y el re-
alta (AETA), es preferible fraccionar la dosis querido, a la calidad del control del dolor y a la pre-
de carga y limitarla a volúmenes no mayores a 5 sencia de efectos adversos atribuibles al bloqueo,
ml, administrados a intervalos de 5 minutos, de tales como hipotensión o inestabilidad cardiovas-
manera de permitir la observación de la respuesta cular, presencia de náusea y/o vómitos frecuentes, y
y la medición de la altura del bloqueo previo a la retención urinaria. Las infusiones epidurales en ge-
siguiente dosis. La comprobación del bloqueo neral y en especial las epidurales torácicas, requie-
sensitivo y la medición de la altura del bloqueo ren del control seriado de sus efectos analgésicos,
pueden realizarse por la técnica del “pin prick” o del nivel del bloqueo sensitivo, de la presencia de
pinchazo con una aguja roma, antes y después de la efectos adversos y de la aparición de respuestas in-
administración de una nueva dosis de anestésicos y esperadas o inexplicables. Los bloqueos sensitivos
previo a la inducción de la anestesia general en los extensos, la presencia o aparición de bloqueo motor
casos de una anestesia general-epidural. de las extremidades inferiores, y los cambios en los
Los factores determinantes de la altura y la niveles de bloqueo sin causa aparente entre otros,
duración de la anestesia epidural torácica (AET) deben hacernos sospechar de la presencia de dis-
son principalmente el sitio de inyección, la masa función o de complicaciones. Es requisito para dar
de anestésico local administrado, la concentración analgesia postoperatoria con infusiones epidurales
del anestésico local y el uso de medicamentos torácicas continuas y AECP, contar con protocolos
coadyuvantes. Los factores del paciente son menos de control, vigilancia y monitorización, dirigidos
importantes pero deben ser considerados, en por Unidades de Dolor organizadas.
especial las condiciones extremas de peso, edad,
estatura, el embarazo y la obesidad8.
Para la dosis inicial de carga se usan volúmenes Efectos fisiológicos
variables de 3 a 10 ml de bupivacaína al 0,5% y
de 5 a 15 ml al 0,25% con o sin opioides, como La AET al igual que la anestesia raquídea,
fentanilo 50 a 100 μg. Se puede iniciar una infusión produce bloqueo simpático, analgesia y bloqueo
continua de solución analgésica a través del catéter motor, pero a diferencia de la primera, la solución
después de un período de tiempo variable cercano anestésica es inyectada en el espacio epidural (EE).

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Para lograr su efecto se requiere de una masa y Efectos Cardiovasculares


volumen de droga anestésica mayor que la utilizada
en la anestesia raquídea y se caracteriza por El tono vascular periférico está mediado por el
producir un boqueo más gradual, con un período sistema nervioso autónomo, cuyas fibras actúan so-
de latencia mayor, menor compromiso motor y por bre los receptores adrenérgicos α y β, por el efecto
dar la posibilidad de prolongar su efecto anestésico de las catecolaminas circulantes secretadas por la
o analgésico a través de un catéter epidural. médula adrenal (T5-L1) y también por el sistema
Los efectos dependerán del nivel de punción y renina-angiotensina-aldosterona. La magnitud de la
de la extensión del bloqueo, como también de las caída de la presión arterial dependerá del compro-
características de la solución inyectada. Una vez miso de los mecanismos antes mencionados, que
inyectada la solución en el EE, ésta no se distribuye se afectan según el número de segmentos bloquea-
en forma homogénea, si no que avanza como en dos y de la capacidad de compensación por parte
pequeños “canales paralelos” que existen a través de los segmentos no bloqueados. La vasodilatación
de nervios, grasa y duramadre10. La distribución compromete principalmente al territorio venoso ya
circunferencial alrededor de la duramadre es com- que el arterial tiende a mantener su tono autónomo
pleta y sólo se limita por la fascia del ligamento gracias a la mayor presencia de musculatura lisa
longitudinal posterior, lo que facilita la distribución vascular. La simpatectomía disminuye el retorno
hacia lateral a través de los agujeros de conjunción, venoso al corazón, por venodilatación (el 80% de
siendo probablemente el ganglio de las raíces dor- la volemia está en el lecho venoso) y redistribución
sales y el espacio en que los nervios espinales aban- de la volemia hacia el lecho esplácnico y extre-
donan el espacio subaracnoídeo y se envuelven en midades inferiores. Cuando el bloqueo torácico o
la vaina nerviosa, los principales sitios de acción de toracolumbar es extenso, la magnitud de la hipo-
los anestésicos locales a nivel epidural10,11. tensión y vasodilatación mesentérica es mayor, en
La analgesia epidural produce un bloqueo seg- cambio, bloqueos limitados a segmentos lumbares
mentario que se caracteriza por producir interrup- o a torácicos altos, mantienen el tono mesentérico y
ción de la transmisión nerviosa en los segmentos la caída de la presión es más discreta14. La caída de
más cercanos al sitio de punción, disminuyendo la presión arterial en bloqueos epidurales lumbares
la calidad del bloqueo en los segmentos espinales produce aumento del tono simpático de fibras es-
más distales, preservando la función neurológica de plácnicas no bloqueadas, estimulando la liberación
estos últimos. Al existir una congruencia entre el de catecolaminas por parte de la médula adrenal. La
espacio vertebral donde se punciona y los segmen- AE también afecta a los sistemas renina-angioten-
tos de las raíces nerviosas comprometidas durante sina y vasopresina al producir bloqueo de las fibras
el acto quirúrgico (congruencia catéter-incisión), se simpáticas preganglionares que inervan el riñón, lo
logra un mejor efecto anestésico o analgésico, con que hace que se estimule la secreción de vasopresi-
menor volumen y masa de drogas y con menor in- na para compensar la caída de presión arterial11,14.
cidencia de efectos indeseados como hipotensión, En pacientes sanos y normovolémicos se
retención urinaria, bloqueo motor, etc12. estima que la caída de la resistencia vascular
La analgesia epidural produce un bloqueo di- (RVS) sistémica alcanza sólo un 15-18% y el gasto
ferencial, que se expresa por un nivel de bloqueo cardíaco (GC) se mantiene casi inalterable. En
simpático mayor que el nivel de bloqueo sensitivo pacientes añosos se puede ver hasta un 25% de la
y motor. Durante la analgesia epidural este bloqueo caída de la RVS y de un 10% de caída del GC. Si
diferencial es menos importante que el que se pro- se obtienen niveles de bloqueo altos la frecuencia
duce por la anestesia raquídea en que la diferencia cardíaca (FC) tiende a caer por bloqueo de las fibras
entre el bloqueo simpático y sensitivo puede ser cardioaceleradoras que se originan de T1 a T415.
hasta de seis segmentos espinales. Lo anterior pro- Junto con la disminución de la presión arterial
bablemente se puede explicar por la distribución media (PAM), disminuye el flujo sanguíneo coro-
menos homogénea que se produce en el EE compa- nario. La disminución de la FC y de la tensión ven-
rado con el espacio subaracnoídeo13. Este bloqueo tricular sisto-diastólica (disminución de precarga y
diferencial está dado por la mayor susceptibilidad postcarga) explican la disminución del consumo de
de bloqueo que poseen las fibras nerviosas tipo C y oxígeno miocárdico (MVO2). La disminución de la
B, que trasmiten la información autonómica, com- actividad simpática y el bloqueo motor disminu-
parado con la menor susceptibilidad de bloqueo yen el consumo global de oxígeno, mientras que el
que poseen las fibras Aα y Aβ (motoras), que nece- gasto cardíaco se mantiene constante, lo que evita
sitan una mayor concentración de anestésico local la deuda de oxígeno. Este equilibrio “aporte/con-
para bloquearse. sumo” se pierde frente a disminuciones de la PAM

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superiores al 30% que comprometen el aporte de efecto antianginoso y antisquémico en pacientes


oxígeno miocárdico16. cursando con IAM o angina inestable, ya que fa-
vorece el balance de consumo de oxígeno al dis-
minuir su consumo y redistribuir flujo hacia zonas
Efectos cardiovasculares de la anestesia epidural vulnerables. Se ha demostrado no sólo alivio del
torácica alta dolor precordial sino efectos beneficiosos sobre los
principales determinantes del consumo de oxígeno,
Los efectos cardiovasculares secundarios a disminuyendo la presión arterial sistólica, frecuen-
AETA han sido estudiados en animales y en huma- cia cardíaca y presiones de llenado de ventrículo iz-
nos y dado su importancia clínica se analizarán en quierdo, sin afectar significativamente la presión de
forma separada. El inotropismo y cronotropismo perfusión coronaria25,26,27. En modelo canino se ha
cardíaco están en gran parte controlados por las descrito una disminución de la magnitud del daño
fibras autonómicas aferentes y eferentes prove- isquémico, al reducir el tamaño de tejido infartado
nientes de los cinco primeros segmentos espinales y de la hiperemia postisquémica28.
torácicos. A nivel cardíaco se ha visto que la AETA
favorece la redistribución de flujos regionales y La AETA con opiodes y anestésicos locales se
afecta positivamente los determinantes del consu- ha asociado con disminución de la secreción de
mo de oxígeno, generando un menor daño isquémi- péptidos natriuréticos en pacientes sometidos a ci-
co14. rugía abdominal y de mayor riesgo de de isquemia
perioperatoria. Estas hormonas se liberan al produ-
- Frecuencia cardíaca: la AETA produce una pe- cirse aumento de la tensión de la pared ventricular
queña pero significativa reducción del cronotropis- y auricular y son considerados marcadores de fe-
mo en voluntarios sanos y en pacientes quirúrgicos. nómenos isquémicos miocárdicos sin necrosis del
En animales de estudio se ha visto que AETA posee miocito29.
efecto sobre el tejido éxito conductor produciendo La mayoría de los mejores índices se asocian
un aumento marcado del período refractario y del principalmente a la AETA y no a anestesia epi-
tiempo de conducción a nivel del nódulo atrio ven- dural lumbar (AEL), situación que no nos permi-
tricular y a nivel ventricular. La disminución del te extrapolar resultados. La AEL genera bloqueo
tono simpático reduce el riesgo de arritmias, lo que simpático, pero junto con vasoconstricción de los
se ha objetivado en pacientes de cirugía cardíaca, segmentos torácicos no bloqueados y sin los benefi-
aún cuando estudios controlados randomizados han cios directos sobre el corazón, lo que teóricamente
demostrado que no disminuye la incidencia de fi- no representaría mayor beneficio, salvo un mejor
brilación auricular14,17,18,19,20. control de la analgesia. La hipotensión puede ser
deletérea en ambos grupos, pero la AETA simultá-
- Función ventricular: los efectos de la disminu- neamente favorece la redistribución de flujo y va-
ción de la actividad simpática sobre la función sodilatación coronaria12,30,31.
ventricular tanto en animales como humanos, son
controversiales. Algunos trabajos han demostrado
una disminución de la contractilidad ventricular iz- Efectos pulmonares
quierda, aún en pacientes sanos y en otros trabajos
se han medido mejores índices de función miocár- En pacientes sanos, los efectos de AET de seg-
dica en la actividad contráctil segmentaria y glo- mentos bajos o la AEL casi no poseen repercusión
bal, en pacientes coronarios y también sanos7,21,22,23. clínica sobre la función respiratoria. En voluntarios
sanos y en perros bajo acción de AET se ha visto
- Flujo sanguíneo coronario: los vasos coronarios una alteración de los movimientos de la caja torá-
epicárdicos y arteriolas coronarias están amplia- cica, resultando en una disminución de la respuesta
mente inervadas por fibras simpáticas adrenérgicas. ventilatoria al aumento de dióxido de carbono, lo
El aumento de la actividad simpática genera vaso- que probablemente se explica por el bloqueo de
constricción en arterias coronarias sanas y estenó- músculos intercostales, sin embargo, el diafragma
ticas. Actualmente existe evidencia que establece es capaz de mantener una adecuada ventilación a
que AETA ya sea en animales o en humanos produ- pesar de la reducción del componente torácico. Los
ce efectos favorables. En perros se ha demostrado volúmenes y capacidades pulmonares se afectan
que AETA produce una redistribución del flujo co- según la magnitud de la extensión del bloqueo. La
ronario hacia el endocardio en corazones normales CV se compromete en un 13%, la CRF en un 6%
e infartados24. En humanos ha demostrado tener un y la CPT en un 9%. La PaO2 puede caer pero sin

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repercusión clínica32. El íleo postoperatorio es una complicación


En pacientes sometidos a cirugía abdominal alta bastante frecuente posterior a cirugía abdominal
o torácica habitualmente se produce una disfunción y obedece a múltiples factores (neurogénicos,
pulmonar postoperatoria con disminución de CRF, inflamatorios, farmacológicos). Existe evidencia
CV y VEF1, los que pueden demorarse hasta 14 que demuestra que la AET con anestésicos
días en recuperarse. Varios estudios han demostra- locales favorece una recuperación más precoz
do un menor impacto sobre VEF1 y CVF en grupos de la función intestinal, beneficio que es más
con AET, encontrando una disminución de un 20% evidente cuando el catéter está puesto sobre T1236.
comparado con un 50% del grupo control33. Tam- Estos beneficios se pueden explicar por la mejor
bién se ha demostrado que pacientes bajo acción de supresión del estrés quirúrgico, alivio del dolor
AET, al tener un buen control del dolor poseen una y menor necesidad de uso de opioides y bloqueo
tos más efectiva, disminuyendo el riesgo de atelec- simpático intestinal31.
tasia y neumonía, al igual que se favorece una extu- Existe cierta evidencia que sugiere un rol
bación más precoz33. protector de la anestesia epidural (AE) en relación
En pacientes con disminución de la reserva pul- con la disminución de la incidencia de dehiscencia
monar que dependen o hacen uso de su muscula- de anastomosis gastrointestinales. El aumento del
tura accesoria, existe la duda sobre los beneficios flujo esplácnico favorecería la oxigenación y flujos
de AET, ya que teóricamente al comprometerse los en áreas de anastomosis; sin embargo, trabajos
músculos interscostales y abdominales aumentaría en humanos y en animales no han demostrado
el riesgo de insuficiencia respiratoria. Sin embargo, diferencias entre AE y anestesia general37.
trabajos en obesos han demostrado que la recupera-
ción de la función ventilatoria es más rápida en pa-
cientes con AET que los pacientes manejados con Coagulación
analgesia con opiodes parenterales30,34,35.
Durante el período perioperatorio se genera un
estado de hipercoagulabilidad desencadenado por
Función gastrointestinal varios factores como el estrés quirúrgico, estasia
sanguínea y daño endotelial, lo que genera aumento
La motilidad gastrointestinal se regula por fac- de los fenómenos trombóticos arteriales y venosos.
tores nociceptivos, mediadores endógenos y por un Posterior a la cirugía se han detectado altos niveles
equilibrio entre los sistemas simpático y parasimpá- de sustancias procoagulantes, bajas concentracio-
tico, inhibiendo y estimulando respectivamente. Du- nes de inhibidores de la coagulación, inhibición de
rante la cirugía se produce un aumento de la actividad la fibrinolisis y aumento de la función plaquetaria.
simpática producto del estrés, manipulación quirúr- La anestesia neuroaxial con anestésicos locales se
gica y dolor, lo que puede producir hipoperfusión y asociaría a un aumento del flujo sanguíneo perifé-
parálisis intestinal, constituyendo un problema y una rico, a una mejor preservación de la actividad fi-
causal de morbilidad. La hipoperfusión gastrointes- brinolítica, atenuación del aumento de factores de
tinal se ha asociado a aumento de la permeabilidad coagulación, disminución en la viscosidad sanguí-
de la mucosa, endotoxemia, falla multiorgánica y au- nea y de la actividad plaquetaria38.
mento de la morbimortalidad en pacientes graves30,32.
Por otro lado, la anestesia neuroaxial per se
puede producir náuseas y vómitos casi en un 20%, Termorregulación
lo que se asocia a un estado de aumento de la
peristalsis secundario al predominio de la función Durante la AE se produce una pérdida de calor
vagal, sobretodo en bloqueos altos15 y también por por la vasodilatación secundario al bloqueo y por
la acción de opiodes. Sin embargo diversos estudios el medio ambiente más frío. Los mecanismos regu-
han demostrado que AET tiene un rol protector, ya ladores de la temperatura estarían “engañados” al
que se asocia a un aumento del flujo gastrointestinal censar aumento de la temperatura en los segmentos
en humanos. En animales se ha visto una menor bloqueados, junto con la imposibilidad de generar
acidosis e isquemia intestinal, producto de hipoxia vasocontricción compensadora en esos segemen-
mantenida. Los efectos se deberían principalmente tos. Posteriormente se desencadenan mecanismos
al bloqueo simpático de vasos mesentéricos que compensadores para generar calor, produciéndose
aumentan el flujo sanguíneo hacia las mucosas, aumento de la actividad muscular, generándose
aun en condiciones de bajas presión de perfusión calofríos y vasoconstricción en los segmentos no
sistémica30,32. bloqueados.

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Función renal talidad y de complicaciones mayores en el período


perioperatorio.
El efecto sobre la perfusión renal aún en blo- Durante varias décadas los investigadores han
queos altos es de bajo impacto, ya que el riñón po- estudiado diversas variables clínicas y de laborato-
see una gran reserva funcional. El mayor efecto se rio, encontrando resultados favorables en términos
ve asociado a la función urinaria ya que se produce de mejor calidad de la analgesia, disminución de
una atonía de la vejiga, secundaria al bloqueo de fenómenos tromboembólicos venosos, disminución
las raíces S2-S4 y también al uso de opiodes neu- de reoperación en cirugía vascular periférica, dis-
roaxiales11. minución de pérdidas sanguíneas, mayor rapidez
de la recuperación de la función pulmonar, dismi-
nución de la morbimortalidad de origen cardiovas-
Efectos endocrinos cular, disminución de los días de estadía en UTI,
disminución de complicaciones renales, disminu-
La anestesia regional y fundamentalmente el ción de la incidencia de dolor crónico, extubación y
uso de anestésicos locales por vía neuroaxial pue- deambulación precoz, disminución de la respuesta
den llegar a abolir la respuesta neuroendocrina fren- al estrés, recuperación más rápida de la función in-
te al estrés quirúrgico, lo que parece no ser posible testinal, etc30,32. Sin embargo, la calidad de la evi-
con el uso de anestesia general. El estrés quirúrgi- dencia científica no ha podido sustentar que todos
co produce cambios sobre el sistema endocrino y los beneficios atribuidos a la AE se asocien a me-
metabólico, llevando al aumento de diversas hor- jores resultados en términos de mortalidad o que
monas y sustancias como catecolaminas, cortisol, puedan ser reproducidos en los distintos grupos
glucosa, hormonas antidiurética y de crecimiento, poblacionales. Una de las principales dificultades
etc. La capacidad de la AE para abolir la respuesta que tenemos para que estos beneficios sean demos-
al estrés depende de lograr un adecuado nivel de trados, es la limitación que ofrece la interpretación
bloqueo sensitivo, que el inicio de la anestesia sea de resultados provenientes de casuísticas peque-
previo a la agresión quirúrgica y que la solución ñas asociadas a distintos protocolos de anestesia/
anestésica posea anestésicos locales. La capacidad analgesia epidural: tiempo de inicio (preoperatorio,
de la AE para bloquear toda esta respuesta es menor intraoperatorio, postoperatorio), anestesia general
que la de la anestesia raquídea probablemente por concomitantemente, duración de la analgesia, com-
la incapacidad de la primera de bloquear completa- posición de la solución administrada, nivel de cate-
mente todas las aferencias nociceptivas39. terización del espacio epidural, etc.

Efecto sobre sistema inmune Calidad de la analgesia

El acto quirúrgico, la anestesia, el dolor perio- Block et al1, realizaron un meta-análisis que
peratorio y el estrés sicológico son factores que incluyó 100 trabajos controlados randomizados que
producen depresión en la respuesta inmunológica medían eficacia de la analgesia epidural comparada
celular y humoral, la que puede prolongarse por con manejo de la analgesia con opiodes parenterales
un período variable de tiempo. Se ha medido las (OP). Los autores encontraron que los pacientes
concentraciones de interleukina (IL) 1, 2 y 6, linfo- sometidos AE tenían en forma significativa un
citos NK (natural killer) y linfocitos mitogénicos, mejor control del dolor postoperatorio en los
encontrando que los pacientes con AE presentaban distintos grupos estudiados independientemente del
mejor analgesia y que los niveles de IL 1 y 6 no sitio quirúrgico, del lugar de cateterización epidural
cambiaba en comparación con grupos que reciben y de la solución utilizada (anestésicos locales con
opioides. El grupo de AE presenta una respuesta o sin opiodes u opiodes solos). Sólo en un estudio
proinflamatoria menor, con preservación de la fun- no se encontró diferencia entre ambos grupos,
ción linfocitaria30. correspondiendo a pacientes sometidos a cirugía
torácica manejados con analgesia epidural con
opiodes sin anestésicos locales. La complicación
Impacto clínico más frecuente fue el bloqueo motor en el grupo de
AE y las náuseas y vómitos la complicación más
Dados los numerosos efectos benéficos descri- frecuente en grupo con OP. El grupo de AEL con
tos, la AE debería asociarse teóricamente a mejores opiodes presentó una incidencia mayor de prurito
resultados clínicos, como menores índices de mor- (38%) comparado el grupo OP (6%). El grupo de

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ANA MARÍA ESPINOZA U. et al.

AET con o sin opiodes presentó mayor incidencia En relación con los beneficios de la AE, con-
de hipotensión (14%) que el grupo OP (2%). Estos siderando su efecto “protector” en términos de
resultados concuerdan con otra revisión sistemática prevención de fenómenos trombóticos venosos,
que incluyó cerca de 20.000 pacientes, en que el existen trabajos randomizados y meta-análisis 47
uso de AE se asoció a un porcentaje más bajo de que han encontrado mejores resultados respecto
dolor moderado y severo que cuando se comparó de los fenómenos trombóticos cuando se compara
con administración de OP. Un 71% de los pacientes anestesia neuroaxial con anestesia general más OP,
con AE estuvo libre de dolor, comparado con un aún cuando no siempre se consigna si los diversos
54% en el grupo con PCA endovenosa40. grupos reciben terapia antitrombótica. Un meta-
Más recientemente se publicó un meta-análisis, análisis demostró una menor incidencia de trombo-
midiendo el efecto de las distintas técnicas analgé- sis venosa diagnosticada radiológicamente, pero no
sicas en relación a la calidad de la analgesia y a demostró una diminución en la incidencia de trom-
la evaluación del propio paciente, en términos de bosis clínica, en pacientes sometidos a artroplastía
satisfacción, calidad de vida y calidad de recupe- de rodilla11,42.
ración postoperatoria. Se encontró que las técnicas Dentro de los trabajos más comentados en la
regionales proveen al paciente de una mejor calidad literatura en la última década está el meta-análisis
de analgesia que los OP, pero no se tradujo en una de Rodgers y cols47, quienes hicieron una revisión
diferencia en las otras variables evaluadas por el que incluyó 9.559 pacientes provenientes de 141
paciente. El subgrupo que recibió AE mostró una trabajos, teniendo por objetivo principal medir di-
superior calidad de la analgesia comparada con la ferencias en morbimortalidad en pacientes bajo ac-
analgesia con OP, efecto más notorio cuando las ción de anestesia neuroaxial (raquídea y/o epidural)
soluciones contienen anestésicos locales el catéter (grupo I) comparado con pacientes bajo acción de
está ubicado lo más cercano a los segmentos que anestesia general (grupo II) sometidos a diferentes
cubren el área quirúrgica. En términos de efectos tipos de cirugía. La mortalidad general descrita fue
adversos la anestesia epidural se asocia a menor in- menor en un tercio en el grupo I, aún cuando no
cidencia de náusea y vómitos, pero mayor inciden- hubo diferencias entre los distintos grupos quirúr-
cia de prurito, retención urinaria y bloqueo motor31. gicos. En los pacientes sometidos a técnicas neu-
La literatura actual establece que la AE provee roaxiales el riesgo de trombosis venosa profunda
mejor calidad de analgesia cuando se compara disminuyó en un 44%, el de tromboembolismo pul-
con OP, en término de mejores puntuaciones de monar en un 55%, infarto miocárdico 33% y de de-
escalas que evalúan dolor en reposo o dinámico presión respiratoria en un 59%. Cuando se comparó
y en términos de menos efectos colaterales en anestesia raquídea con AE no se encontró diferen-
los distintos grupos quirúrgicos. La calidad de la cia en la mortalidad, pero sí cuando la analgesia se
analgesia es mejor si las soluciones infundidas prolongaba en el período postoperatorio. También
poseen anestésicos locales y si existe congruencia se describió una reducción de un 50% en la necesi-
catéter-incisión41. dad de transfusión y una reducción en el riesgo de
neumonía y falla renal.
Beattie y cols, encontraron una disminución en
Morbilidad-mortalidad la incidencia de infarto miocárdico en pacientes de
riesgo sometidos a cirugía vascular y abdominal,
Durante la década de los años ochenta y noven- bajo acción de AE por más de 24 horas, compara-
ta se publicaron trabajos que mostraron mejores do con el grupo control. La incidencia de infarto
resultados en términos de mortalidad, episodios miocárdico fue menor para el grupo con AE, sien-
coronarios y menor número de reoperaciones en do mayor la diferencia para el grupo de AET que
pacientes sometidos a cirugía vascular y en pa- para AEL. El grupo con AE tuvo una incidencia
cientes de alto riesgo, que estaban bajo acción de de 2,86% y el control de 5,25%. Cuando se hizo
AE42-45. Posteriormente se incorporó la AET a pa- el análisis por nivel de AE, los pacientes con AET
cientes sometidos a revascularización coronaria, presentaron una incidencia de 4% comparado con
demostrando una disminución de la incidencia de un 8,45% del grupo control, calculándose una dis-
infarto postoperatorio y mejoría en los índices de minución del riesgo de un 40% en este subgrupo.
función ventricular en pacientes manejados con La mortalidad fue de un 3,3% pero sin diferencia
esta técnica26,27 También al medir en forma dirigi- significativa entre los grupos. La calidad de la anal-
da resultados pulmonares se han obtenido mejores gesia presentó diferencia significativa en relación
índices y menor tasa de complicaciones en grupos al grupo control48.
bajo acción de AE46. Posteriormente Rigg y cols49, publicaron un tra-

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ANALGESIA PERIDURAL TORÁCICA PARA CIRUGÍA TORÁCICA Y ABDOMINAL MAYOR

bajo multicéntrico en 925 pacientes de alto riesgo de la analgesia pero que el impacto clínico, en tér-
sometidos a cirugía abdominal mayor, que fueron minos de mortalidad o morbilidad, aún es incierto.
aleatorizados para recibir anestesia epidural-gene- La AET y principalmente la AETA se asocian a una
ral/analgesia epidural o anestesia general/analgesia menor incidencia de complicaciones cardiovascu-
parenteral con opiodes. En este estudio, a diferen- lares y pulmonares, pero sólo en pacientes de alto
cia de lo encontrado por Yaeger y Rodgers, no se riesgo o sometidos a cirugía vascular mayor.
encontraron diferencias significativas en términos
de mortalidad a 30 días ni en morbilidad mayor,
exceptuando una menor incidencia de insuficiencia Comentario final
respiratoria en el grupo AE/AE. La calidad de la
analgesia fue mejor en grupo I, encontrándose dife- La AET es una alternativa para el manejo analgé-
rencias significativas en las puntuaciones de dolor. sico en cirugía de tórax y abdominal alto. Si bien la
Más recientemente Liu y cols50, realizaron una evidencia actual no ha podido definir el impacto so-
actualización y análisis de la evidencia disponible, bre la mortalidad y morbilidad comparada con otras
en que incluyó 18 meta-análisis, 10 revisiones sis- técnicas, la calidad de la analgesia, satisfacción y
temáticas, 8 trabajos randomizados controlados y confort de los pacientes la posicionan como una
2 trabajos observacionales. Los autores realizaron excelente alternativa. Dado que existen diferencias
un análisis de distintas técnicas analgésicas, con- anatómicas y de abordaje en relación con la AEL, se
cluyendo que la evidencia disponible no permite necesita desarrollar cierta experticia para una prácti-
reafirmar o descartar la superioridad de una técnica ca más segura. La posibilidad de prolongar la anal-
analgésica sobre otra, en términos de mortalidad y gesia a través de una técnica continua requiere de
morbilidad postoperatoria. un control por un equipo especializado, que no sólo
En suma, dada la evidencia disponible, se puede valore la calidad de la analgesia sino que también la
establecer que la AET se asocia a una mejor calidad eventual aparición de complicaciones.

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