Está en la página 1de 4

MIS NOTICIAS

Queremos que encuentres las noticias


que más te interesan
Sigue tus temas favoritos en un lugar exclusivo para ti.
¡ELÍGELOS!

¿Qué estábamos
esperando?
En el marco del estado de emergencia se deben
adoptar medidas compatibles con el aislamiento.
Germán Vargas Lleras
Compartir
Comentar 177
Guardar
Reportar
Portada

Por: Germán Vargas Lleras 22 de marzo 2020 , 12:58 a.m.


En medio de la natural incertidumbre y las preocupaciones
que genera la cuarentena nacional decretada el viernes en la
noche por el Presidente de la República, los colombianos
respaldamos y hemos recibido con alivio esta impostergable
decisión.
Temas relacionados
GERMÁN VARGAS LLERAS MAR 19
Vargas defiende decisión de Alcaldía de Bogotá sobre simulacro
GERMÁN VARGAS LLERAS MAR 16
La queja de Vargas Lleras por hombre que dice ser su tío
GERMÁN VARGAS LLERAS MAR 15
Más vale prevenir que luego lamentar
Con insistencia sostuve en estos días que ninguna medida,
por drástica que pareciera, debería dejar de tomarse. Pero
siento que el Gobierno Nacional estaba más preocupado por
la situación política que por aquella de la salud pública. No de
otra manera podía explicarse la demora en la toma de
decisiones que advertí inaplazables, como los aislamientos
obligatorios en centros definidos, o tardías, como el cierre
efectivo de fronteras y de las operaciones aéreas
internacionales. “Todavía no es el momento” escuché decir el
jueves a la ministra del Interior, “no hemos llegado a la
semana cuatro”. Qué despropósito. Como si nada
hubiéramos aprendido de las malas experiencias de España,
que con un sistema de salud más robusto que el nuestro vive
una situación dramática: se acabaron las camas, las
dotaciones, los respiradores y las líneas de emergencia
colapsaron. Italia, con más de 600 muertes diarias, ahora
lamenta no haber actuado oportunamente. Se equivocó
también, y mucho, la Vicepresidenta cuando afirmó que “aquí
hay mucha gente apostándole a medidas extremas que no
son necesarias”. Qué curioso que hayan sido dos mujeres,
por naturaleza llamadas a privilegiar la protección de la vida,
quienes hayan asumido esta insólita posición. Por fortuna, el
Presidente sí fue uno de los que le apostaron a tomar
medidas extremas.

Yo entiendo que tomar esta clase de medidas implica riesgos


y sacrificios. No hacerlo y no ejercer un verdadero liderazgo
generó esta semana una crisis institucional entre mandatarios
regionales y locales y el Gobierno Nacional. Crisis muy
indeseable pero en el fondo entendible ante la inacción de las
autoridades nacionales y la escasa respuesta a las más que
fundadas preocupaciones de alcaldes, gobernadores y
ciudadanos.

Públicamente respaldé el simulacro decretado por la


Alcaldesa Mayor de Bogotá para este fin de semana. Esta
experiencia debería prepararnos para aprender cómo
gestionar el territorio y sus infinitas necesidades en la ahora
decretada cuarentena. El Gobierno Nacional debió apoyar
esta iniciativa desde el principio, así como las de otros
mandatarios regionales que, con razón, decretaron el toque
de queda y no embarcarse en bravuconadas, amenazas y
autoritarismos innecesarios.

Pero el ejercicio del liderazgo que reclama la nación, y que el


viernes se recobró de alguna manera, no se iba a conseguir
pecando de prudentes sino actuando de manera contundente.

En el marco del decretado estado de emergencia económica


y social se deben adoptar de inmediato medidas compatibles
con el aislamiento obligatorio nacional. Por ejemplo, dar
mayor liquidez al mercado y a los fondos de inversión
colectiva, bajar las tasas de interés para créditos a todos los
sectores –en particular a la pequeña industria–, flexibilizar los
contratos para evitar una masacre laboral, aplazar las
contribuciones y el pago de impuestos a los pequeños
empresarios, alivio a créditos e intereses de las deudas
actuales y ampliación de plazos, entre otras. Estas decisiones
no hay que anunciarlas más. Hay que tomarlas ya.

En el frente de la salud, las cifras de potenciales contagios


son alarmantes. ¿Será cierto que en los próximos meses más
de 2 millones de colombianos podrán ser contagiados? ¿Que
550 mil tendrán una afectación severa y 187 mil pasarán por
un estado crítico? Aun con los escenarios más optimistas, las
unidades de cuidados y los equipos de respiración asistida
serán insuficientes. Si el objetivo es liberar entre 6.000 y
9.000 plazas, habrá que habilitar todas las clínicas, crear
salas de aislamiento y fortalecer el esquema de cuidados
domiciliarios dentro del modelo de medicina familiar que
tantas veces hemos propuesto.

Si bien proteger los ingresos, el empleo y la actividad


empresarial son importantes objetivos, el Gobierno por fin ha
dado muestras de tener claro que la prioridad ante esta
pandemia es la protección de la vida y no otra.

“La fatalidad de los buenos propósitos es que siempre llegan


demasiado tarde”. Wilde.

GERMÁN VARGAS LLERAS

También podría gustarte