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Crítica y reseñas

Mestizaje y fusión en Lima y sus


arenas
Gisela Cánepa K.1

MARTUCCELLI, Danilo. Lima y sus arenas. Poderes so- práctica por este nuevo sujeto. En esta nueva socia-
ciales y jerarquías culturales. Lima: Cauces, 2015. bilidad, el individuo híper actor, a diferencia de los
limeños de origen migrantes de la década de 1980,
En su libro Lima y sus arenas, Danilo Martuccelli estaría en la capacidad de responder a las clasifica-
plantea una serie de formulaciones conceptuales ciones sociales, raciales y culturales de las que histó-
a través de las cuales busca articular una nueva ricamente ha sido un objeto, instituyendo así nuevas
narrativa desde las ciencias sociales que sea com- formas de relacionamiento social y definición de sí
prehensiva de las intensas transformaciones so- mismo. Finalmente, para Martuccelli este nuevo
ciales y culturales que se vienen dando en Lima sujeto no sería producto de un proyecto político
en las últimas décadas, y que darían cuenta de o cultural de constitución de sujetos ciudadanos,
su especificidad. El argumento central del libro se sino resultado de las luchas que este lleva a cabo
sustenta en la constatación de dos procesos en cotidianamente en la ciudad.
curso: el primero responde a lo que el autor conci-
be como el tránsito del imaginario del mestizaje al Animada por mi propia interpretación sobre el
imaginario de la fusión; y el segundo al surgimiento, Perú de hoy, que se articula en torno a lo que de-
aunque aún incipiente, de una «cultura de las reglas» nomino el neoliberalismo como régimen cultural,
que sería resultado de lo que el autor denomina quiero poner en discusión los conceptos de imagi-
el proyecto reglamentador, el cual no estaría nario del mestizaje e imaginario de la fusión, y el del
enmarcado en un proyecto institucional, sino que individuo híper actor, que a mi parecer constituy
surgiría de la intersección entre los esfuerzos del en las debilidades conceptuales más resaltantes del
propio Estado por lograr un desempeño más eficien- proyecto interpretativo de Martucceli.
te y las demandas de la población por justicia y por el
cumplimiento de las reglas. Según el planteamiento del autor, el tránsito de un
imaginario del mestizaje a un imaginario de la fu-
Ambos procesos, a su vez, habrían dado lugar, por un sión implica el paso de un orden definido por
lado, a un individualismo idiosincrático y popular, ataduras biológicas, así como por las de la tradición,
que Martuccelli denomina «individualismo meto- en el cual el sujeto tiene poco margen de acción, a
nímico» y que encuentra expresión en un «individuo uno nuevo en el cual este logra liberarse para
que se percibe como un individuo híper actor», y afirmarse en nuevas subjetividades a través de la
por el otro, a una nueva sociabilidad, puesta en creatividad y la innovación. Este enfoque contrasta

1 Antropóloga, profesora principal del Departamento de Ciencias Sociales - PUCP

Revista Argumentos, Edición N° 1, Año 11, 2017. 53-55


Instituto de Estudios Peruanos
ISSN 2076-7722
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con una amplia bibliografía crítica sobre el mes- propia definición de lo chicha, la gastronomía, más
tizaje en el Perú y en América Latina, producida bien, implica un proceso de apropiación cultural y de
en las últimas tres décadas, y que está ausente en el estilización, en el que más que la adscripción iden-
libro. En esta, el mestizaje es más bien definido como titaria o la definición de contenidos lo que está
una arena de argumentación, en la cual las caracte- en juego es el control sobre sus repertorios como
rísticas fenotípicas y los repertorios culturales son recursos económicos.
intervenidos discursiva y performativamente —por
actores particulares, en contextos cultural e históri- Finalmente, la falta de una discusión sobre las com-
camente específicos— con el fin de desarrollar ar- plejas dinámicas entre cultura y mercado, así como
gumentos identitarios de forma relacional y estraté- sobre las dimensiones normativas del imaginario
gica, ya sea para afirmarse en un lugar clasificatorio o de la fusión, impide a Martuccelli reconocer que
para construir y situarse en uno distinto. En estos lo que resulta particular al nuevo contexto en el
trabajos además se han explorado ampliamente que nos encontramos no es el surgimiento de un in-
las formas en que, en tales arenas de disputa y dividuo híper actor, sino más bien el de un sujeto
negociación identitaria, las categorías de clase, que debe responder al mandato de estar siem-
raza, etnicidad y género se resignifican, a veces, pre en escena y en búsqueda de un desempeño
por ejemplo, racializando la categoría de género eficiente. Un homo performance implicado en una
y otras moralizando la categoría racial. En ese cultura del emprendimiento que da sentido a, y
sentido, encuentro problemático negar agencia y gestiona su vida en términos de eficiencia y eficacia,
capacidad de maniobra a los sujetos inmersos en así como de éxito.
el imaginario del mestizaje, para luego argumentar
que lo particular del imaginario de la fusión sería En esta misma línea de reflexión, considero
el surgimiento de un sujeto –el individuo híper ac- discutible el argumento de Martuccelli según el
tor– con gran capacidad de creación e innovación cual el surgimiento de este individuo híper ac-
cultural capaz de redefinir el orden de clasificación tor sería resultado, por un lado, de una reacción a la
social y su lugar en él. experiencia ampliamente extendida de abandono y
desconfianza del Estado, y por el otro a una suerte de
Por otro lado, Martuccelli desatiende el hecho que cualidad innata —atribuida sobre todo al migrante
la noción de fusión, a la que atribuye los calificativos provinciano— que lo define como emprendedor.
de hibridación, mezcla, o libertad creativa, necesita Así, el autor afirma enfáticamente que este híper
ser discutida en el marco de dinámicas de produc- actor no es producto de un proyecto institucional,
ción cultural que, de acuerdo a los debates actuales, sino que surge de los avatares y luchas cotidianas.
operan dentro de un régimen económico en el cual la
cultura se ha constituido —en sus usos y definicio- Es esta espontaneidad y origen, estrictamente popu-
nes— como recurso, y se gestiona según principios lar, que Martuccelli atribuye al surgimiento del nuevo
corporativos. La noción de fusión nos sitúa enton- sujeto limeño con las que discrepo y que requieren
ces en el ámbito del mercado. Así, por ejemplo, ser discutidas a partir de data empírica. Al respecto,
cuando Martuccelli discute la música chicha como considero que las indagaciones en torno a las prác-
manifestación emblemática del imaginario de la fu- ticas de consumo serían ciertamente reveladoras
sión, no distingue entre esta, surgida en la década acerca de los mecanismos, saberes y actores im-
de 1980, y los fenómenos de producción cultural plicados en la conformación del hiper-actor. Así,
actuales, como el de la gastronomía o el diseño una discusión acerca de la amplia acogida
en el contexto de una economía de consumo. Esta que han recibidoseminarios, convenciones, talleres
omisión obstruye el hecho que, mientras que la y cursos de coaching y liderazgo, los cuales cuen-
chicha como género musical se fue constituyendo en tan con una oferta adecuada a distintos sectores so-
un campo de argumentación cultural en el cual lo que cioeconómicos, sería de especial interés. Existe una
está en disputa son principalmente los términos de la literatura especializada al respecto que se vende en

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librerías y quioscos, y de forma ambulatoria en sus al surgimiento de una nueva sociabilidad destaca el
versiones piratas, así como una oferta en educación hecho de que esta no implica una transformación de
superior que apuesta por la formación de una gene- las estructuras de poder, considero que su análisis
ración de emprendedores. Este tipo de consumo de queda corto debido a que sus referencias a la evi-
servicios y productos es central en la apropiación de dencia empírica son meramente anecdóticas.
repertorios culturales, que permiten a sujetos de
distinta condición cultivarse, entrenarse y desempe- Así también, la discusión de casos empíricos per-
ñarse como emprendedores. mitiría debatir críticamente su argumento de un
proyecto reglamentador sin sustento institucio-
La posibilidad de constituirse en emprendedor, nal. Una investigación de campo rápidamente nos
ciertamente, ofrece a distintas personas y grupos remitiría a la existencia y actuación de aparatos ins-
sortear o resignificar las categorías clasificatorias titucionales —estatales y no estatales— que a través
de clase, etnicidad y raza, a las que han estado histó- de los saberes emergentes, como la gestión y el
ricamente adscritos. Pero una mirada atenta y crítica marketing, y sus expertos, operan como disposi-
a este proceso nos revela que la categoría de tivos de poder ejerciendo una fuerza normalizadora
emprendedor no reemplaza ni elimina las categorías a través de la cual el emprendedurismo como ethos
raciales, étnicas, de clase y de género, sino que esta, cultural, las lógicas corporativas como principios de
más bien, ha sido rápidamente incorporada en el sis- acción legítimos y el emprendedor como actor social
tema clasificatorio imperante. Por ejemplo, cuando permean la totalidad de la vida social y definen los
el calificativo de emprendedor es racializado o términos de lo posible. Es esta fuerza normalizadora
definido en términos de género y etnicidad, como la que define al propio Estado en su desempeño
puede observarse en la tipología por estilos de como una instancia de la gubernamentalidad neo-
vida propuesta desde el marketing o en el dis- liberal, instaurando formas de gobierno que se rigen
curso publicitario. La identificación de una nueva por las lógicas corporativas, pero también la que des-
era marcada por el imaginario de la fusión, en los plaza el ejercicio del gobierno al ámbito corporativo.
términos que Martuccelli lo plantea, exige introducir Afirmaría que más que una ausencia de institucio-
una discusión detallada de estas nuevas formas de nalidad gubernamental, habría un exceso de esta,
clasificación y marginación social, porque es preci- que se materializa en las distintas instancias de la
samente en la producción de la diferencia donde cooperación público-privada. El argumento del
los mandatos propios de un régimen neoliberal se proyecto reglamentador resulta, pues, problemático,
viven y disputan en el marco de una sociabilidad en la medida en que se sustenta en una noción exclu-
emergente. Si bien cuando Martuccelli se refiere sivamente estatal de la gubernamentalidad.

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