Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Oraciones Del Catolico
Oraciones Del Catolico
La Bendita Oración de la
MAGNIFICA
PALABRAS TOMADAS DE LA SANTA CARTA PASTORAL DE
ROMA
Invocación Contra la Peste
LA MAGNÍFICA
Glorifica mi alma al Señor, y mi espíritu se llena de gozo al contemplar la bondad
de Dios mi salvador.
Porque ha puesto la mira en la humilde sierva suya; y he aquí el motivo por que
me tendrán por dichosa y feliz todas las generaciones.
Pues ha hecho en mi favor cosas grandes y maravillosas el que es Todopoderoso y
su nombre infinitamente santo.
Cuya misericordia se extiende de generación en generación a todos cuantos le
temen.
Extendió el brazo de su poder, y disipó el orgullo de los soberbios, tras tormando
sus designios.
Desposeyó a los Poderosos y elevó a los humildes.
A los necesitados llenó de bienes y a los ricos los dejó sin cosa alguna.
Exaltó a Israel su siervo acordándose de él por su gran misericordia y bondad.
Así como lo había prometido a nuestros Padres, Abraham y a toda su
descendencia, por los siglos de los siglos. AMÉN.
PALABRAS DE LA SANTA
CARTA PASTORAL DE ROMA
Recomendadas por el Ilmo. Sr. Obispo de Zacatecas para decirlas al tiempo que
nos veamos en peligro, encargando a la vez encarecidamente a los fieles, que
como una sagrada reliquia las tengamos y carguemos diariamente un escapulario,
aunque no sepamos leer para que nos libremos de nuestros enemigos y no seamos
perseguidos de ninguna desgracia.
Para librarnos también de las plagas, castigos, epidemias, enfermedades que por
nuestros pecados la Justicia Divina nos amenaza, como es cólera, morbo, peste,
hambre, guerra, temblores y muertes repentinas.
Esta devoción es tan meritoria, que declara y dice su Señoría, que la casa y familia
donde se halle, serán libres y reservadas de todo contagio; será dichosa la casa y
familia donde se encuentre la Magnifica o Cántico de la Santísima Virgen que
desde el feliz momento en que entra esta sagrada reliquia a la casa, se acabarán
las discordias entre marido y mujer, entre los hermanos y parientes, entre las
malas lenguas y se retirarán los malos vecinos que vivan a nuestro lado y al mismo
tiempo se pondrán en paz nuestros enemigos y todos los corazones que estuvieren
en contra de nosotros.