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Higiene, autoridad y escuela.

Diana Milstein

Cap. II ESCENARIO

En el segundo capítulo se presentan cuestiones conceptuales que ubican


espacial y temporalmente, al drama. En la primera parte se describe imágenes
de la región del Alto Valle de Río Negro y enfoca en particular a las escuelas de
chacra, a los chacareros y a los maestros. En la segunda parte, se ofrece un
panorama del Paraje Contralmirante Guerrico con una atención particular puesta
sobre el Centro de Salud y la escuela que fue escenario del drama.

Primera Parte

1. Mis primeras imágenes del alto valle

Hacia fines de los 70 se traslada de Buenos Aires, donde había vivido desde su
nacimiento hasta el momento, a vivir a un lugar del interior del país, en Alto
Valle de Río Negro, durante los cuatro primeros meses vivió en una chacra, lejos
de las sirenas, los controles antes de entrar a la casa, de la vida medio
clandestina.

En ese lugar tuvo las primeras vivencias sobre los pobladores, los modos
sociales de la chacra y el pueblo y las primeras noticias sobre las escuelas
primarias rurales.

Realiza un trabajo etnográfico .

Las primeras personas que conoció fueron los vecinos encargados de la chacra,
vivían en una vivienda de material que contaba con electricidad y gas envasado,
la estufa era a leña. La edad del matrimonio era de 70 y 50 años, y tenían
cuatro hijos y una hija. la hija era la única que había completado el secundario y
vivía en la Ciudad de Neuquén, con su esposo y su hija.
Pasaba las tardes en su casa tomando mates con sus hijitos y mirando tele.
Ellos le comentaban historias del campo y ella de la ciudad. le enseñaron a
amasar pan y pizzas, a hacer conservas, dulces, tortas fritas , clericó y relleno
de empanadas. Cerca de la chacra no había almacenes, para adquirir los
alimentos y artículos de limpieza enviaban con una lista a sus hijos a Cipolletti.

Los domingos eran días de descanso, se juntaban a almorzar y los invitaban, en


ocasiones comían ñoquis o fideos, a veces asados. los hombres jugaban al
ajedrez, o a las cartas. Las mujeres conversaban.

Conoció a los propietarios de la chacra de al lado. Ellos no tenían empleados


permanentes.

A los nietos del matrimonio encargado de la chacra, les había ido muy mal en la
escuela, y ella le dió clases de apoyo porque era maestra. mucho de lo que
contaban los niños le sorprendia porque era bastante diferente a las escuelas
que conocía.

Para estas familias era muy imprtante que sus hijos terminaran la escuela
primaria y la autoridad que tenía la palabra de las maestras.

2. Ruralidad y Urbanidad

Las palabras "chacra" y " pueblo" fueron términos que la introdujeron en las
nociones de ruralidad y urbanidad que tenían quienes eran nativos o hacía
varias décadas que vivían en Alto Valle de Río Negro. Estos términos señalaban
una distinción entre lo geográfico y social, estaban presentes como referencias
espaciales y temporales. Contenían formas de interpretar el espacio, el tiempo,
las relaciones sociales diferentes a las que ella tenía construidas.

Las chacras eran nombradas por el apellido del propietario. Con el tiempo se fue
enterando que los vecinos no se visitaban, aunque se conocían entre ellos y se
encontraban en distintos lugares.
Los hombres se encontraban en los almacenes en donde tomaban vino, cerveza
y jugaban al tejo y a las barajas. también era motivo de encuentro el canal de
riego. las mujeres conversaban cuando acompañaban a sus hijos a la escuela o
a la parada del colectivo en la ruta. También algunas familias se encontraban los
domingos en partidos de fútbol o carrera de caballos que se organizaban.

Habían templos evangélicos. No habían iglesia católicas.

Si bien la producción de las chacras eran manzana, pera, vid, casi todas tenían
otros cultivos para uso familiar y criaban animales de granjas.

La primera vez que conoció una chacra grande producía cinco variedades de
manzana, cuatro de pera, algunas variedades de uva y frutas de carozo,
variedades de ciruelas y duraznos, y para consumo familiar damascos, pelones
y cerezas.

El chacarero y su familia tenían una casa grande de ladrillos pero ni vivía


habitualmente allí, cerca vivía el encargado y su familia en una casa más chica
también de ladrillos. La esposa del encargado limpiaba y cuidaba la casa de los
patrones.

Alejadas había construcciones alargadas que eran habitaciones con baños


externos para los trabajadores temporarios, y un depósito.

Los pobladores de las chacras calificaban como buenos o malos a los años
según el resultado de las cosechas. Estas podían ser afectadas por heladas.

Para muchos habitantes de las chacras la vida era muy sacrificada por eso
comprar una casa en la cuidad era un sueño.

Cuando ella llegó a Alto Valle ya se habían ido variaos propietarios a vivir a las
ciudades. Desde su punto de vista los niños en las chacras se "embrutecían"
porque no tenían escuela secundaria y le faltaba el contacto social que ofrecía la
ciudad.

Consideraban que no tenían comodidades, se cortaba a menudola luz y era


complicado llegar al médico.

Para otros, a pesar de las incomodidades, era mejor vivir en las chacras porque
era un lugar más tranquilo.

En las ciudades del Alto Valle el tipo de nombres de los barrios identificaba sus
características. Los barrios residenciales llevaban nombres ligados a la
naturaleza (El manzanar, Los Tilos.). Los barrios de trajadores hacen referencia
a zonas (Barrio Norte), al trabajo (Progreso, del trabajo) y los barrios
organizados por planes de viviendas, nombre vinculado a la cantidad de
viviendas o a quienes habitan, cuando fueron construidos para determinados
sindicatos, por ejemplo.

Las viviendas de los barrios residenciales llamaban la atención por la


ostentación, las veredas eran continuación del jardín o de material cuando el
barrio tenía cordón cuneta ya construído. En estos barrios vivían profesionales,
comerciantes, funcionarios políticos y chacareros y descendientes de
chacareros.

Las viviendas de los trabajadores estaban constituidas por una o dos


habitaciones, una cocina comedor y un baño. Muchas eran de ladrillos y techo
de chapa y piso de cemento alisado, alrededor del terreno eran de tierra y en
una parte cultivaban tomate, cebolla, óregano, pérejil, y otras verduras y
hortalizas. En algunos casos, tenían corrales con gallinas.

En su mayoría las casas utilizaban gas de red.


Las calles de estas ciudades eran anchas. Lejos del centro las calles estaban
poco iluminadas,casi no circulaba gente. el centro en donde estaba la plaza era
el lugar al que iba a comprar, los negocios eran parecidos a los de Buenos Aires.

3. Las escuelas de chacras: Una especie de diagnóstico.

Al año siguiente de llegar al Alto Valle se trasladaron a Cipolletti y comenzó a


trabajar como maestra en la escuela primaria del barrio. Entre 1984 y 1986
trabajó en escuelas rurales. En 1986 se incorporó como docente en la Facultad
de Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional del Comahue, y a partir
de 18988, comenzó a trabajar en investigación educativa, desarrollando los
trabajos de campo en escuelas primarias urbanas y rurales, de Cipolletti y Allen.

Ciertas experiencias que vivió como docente, al escribirlas y ponerla en "diálogo"


con registros de trabajo de campo pudo entender la tarea de las maestras en las
escuelas de chacra. Y así compuso, imágenes que intentaban reflejar puntos de
vistas similares y diferentes de la vida de las escuelas de chacra que conoció.

Una de las particularidades de las escuelas era la forma como se las nombraba.
Algunas eran referidas al lugar donde estaban y otras por el nombre de algún
director que había dejado allí su impronta.

Era muy común que muchas maestros y maestros que allí trabajaban vivieran en
la ciudad, para llegar a las escuelas de chacras recorrían entre 5 y 15 km, según
los casos. Los alumnos y alumnas vivían en zonas de chacras, recorrían 6 o
7km para llegar a sus escuelas. Durante los meses de frío los chicos iban por la
mañana cuando estaba helando, y en la época de calor recorrín el camino sin
sombra.

Para los niños no era habitual ir a la ciudad. A diferencia, los maestros todos los
días iban de la ciudad a las chacras en automóvil.
Las escuelas de chacra eran construidas en terrenos de grandes dimensiones
cedido por algún chacarero, que consevaban los álamos y los canales a su
alrededor. los servicios que tenían eran agua de pozo o de cisterna, pozo ciego
en lugar de cloacas, leña y gas envasado como combustible y electricidad.

Eran escuelas con pocos alumnos, como máximo 200 y también con pocos
maestros. Esto permitía un trato bastante individualizado con los alumnos y
también con sus familias.

Los maestros conocían el nombre de casi todos los alumnos, este conocimiento
era fundamental para saber aspectos de modo de vida familiar, porque
consideraban que eso les permitía prever ciertos problemas de aprendizaje que
se derivaban de distintas tipos de carencias físicas afectivas o morales. Sabían
que muchos padres en época de cosechas llevaban a trabajar a los niños con
ellos y eso provocava la ausencia continuada en el período de inicio del año
escolar.

En cuanto a otros aspectos los maestros se preocupaban por saber si los niños
convivían con personas alcohólicas, si los adultos los golpeaban, etc.

Estas escuelas recibían alimentos para brindar desayuno, merienda y almuerzo.


y a través del Sistema Provincial de Salud, los niños recibían, aunque no de
modo sistemático, controles periódico de atención primaria.

Respecto a la alimentación, los maestros colaboraban con la preparación de la


comida y servían, y a veces comían junto a los alumnos.

Respecto a los controles de salud acompañaban a los niños al hospital,


enviaban comunicaciones sobre vacunación y colaboraban con los controles
odontológicos. Algunas de estas actividades eran utilizadas para desarrollar
enseñanzas vinculadas con el cuidado de la salud.
Entre las actividades asistenciales se encontraban llevar a los niños al
dispensario o al hospital cuando se encontraba enfermo, conseguir ropa paro los
niños que llegaban vestidos precariamente en tiempo de invierno, cambiarle el
calzado a quien llegaba con las zapatillas mojadas, darles guardapolvo a quien
no tenía. la preocupación incluía controlar que sean los niños quienes usaran
esa ropa nueva y no otro miembro de la familia. Se ocupaban de conseguir
útiles, les enseñaban a conservar y a cuidar lo que se le daba.

Esta situación de pobreza era percibida por los maestros no solo como una
cuestión material, sino como una situación que involucra aspectos sociales,
afectivos y morales.

Otras familias participaban de las actividades de cooperadora escolar, de


festejos, arreglos del edificio, etc.

Una especie de diagnóstico incluía, además de las informaciones que los


maestros iban recogiendo respecto a las familias, una evaluación de las tareas
que los niños realizaban en clase y en sus casas, del modo de participación
grupal en la escuela, del comportamiento en clase y en el recreo, en los
momentos de formación, de la manera en que hablaban, del aspecto que tenían
su ropa, su cara, sus manos y cabellos. así detectaban indicios, a partir de lo
que elaboraban una descripción abreviada de niño o niña, y determinaban la
clase de problema que tenía o podía tener.

Desde sus presupuestos, los maestros desarrollaban e interpretaban la tarea


educadora y pronosticaban la psibilidades de una educación exitosa.

Una de las acciones que se desprendían de los pronósticos eran tareas de


tendientes a la atención permanente sobre lo que sucedía en la vida de las
familias. las maestras miraban a las familias para entender mejor a los niños.
Intervenían para identificar problemas.
En algunas oprtunidades citaban a la familia, por lo general concurrían mujeres,
cuando acudía otro adulto (por ejemplo abuela) era tomado como indicio de
problemas familiares. la sola idea de una familia no constituida como la normal (
padre, madre, hijos) era tomada como una señal de alarma y un aspecto de la
explicación del problema del niño o niña.

En estas reuniones se realizaba un interrogatorio apelando a un método de


reconstrucción de la historia del problema dando por hecho que la sospeche
recaía sobre la familia. Lo que puso de manifiesto el papel similar al del juez de
instrucción, que actuaban los maestros. Se establecían acciones que realizarían
en la escuela y otras que debían realizar la familia.

Era muy común que se le solicitara a las familias una consulta con un
especialista (psicólógo, psicopedagogo o neurólogo segúnlos casos)

Esta situación provocó una cierta tensión en la relación entre las maestras y las
familias de los niños.

4. Maestras y chacareros

Las imágenes que se formó de las chacras, los pueblos y las escuelas que
conocío en Alto Valle de Río Negro, hasta 1988, le ayudaron a entender los
cambios sociales y educativos que se produjeron los diez años posteriores.

En Alto valle no solo no se crearon nuevos empleos en 1991, sino que se


perdieron muchos de los existentes. los 90 muestran un cuadro de disminución
neta de la población, el deterioro del sistema educativo y de salud, de la mano
de la pobreza y ajuste fiscal. Los sectores postergados son los índigenas, los
migrantes externos e internos.

Sueldos de la administración pública pagos en dos o tres meses de atraso.


Desocupados en la zona de las chacras. Irrupción en las calles y rutas de
protestas masivas de maestros, padres de alunos y chacareros. que dió origen a
este estudio.

Esa era la situación cuando se produjo el episodio de la hepatitis en la escuela.

La percepción de los maestros sobre su propio empobrecimiento era tan clara


que una maestra se refirió de este modo " Antes luchabamos por aumento de
sueldo y ahora por seguir cobrando"

Los maestros desde fines de los ochenta comenzaron a sentir pérdida en su


salario como producto de la hiperinflación. Se sucedieron distintas formas de
huelgas. la respuesta del gobierno frente a la protesta fue el descuento de los
días de huelga y la primera rebaja salarial.

Segunda Parte

1.El Paraje Contralmirante Gerrico

Gerrico no era un típico ni un exepcional lugar rural del Alto Valle. Es la


estructura de una aldea balinesa.

Todo el terreno practicamente esta dividido en chacras, ellas le dan fisionomía al


paraje y son unos de los organizadores de la vida y de las relaciones de la
población del paraje. Además de ser unidades productivas, son lugares en las
personas trabajan y viven.

Las dos escuelas están distantes una de la otra, la N° 27 ubicada en el Oeste y


la N°68 en el Este. La mayor parte de los alumnos concurren a la escuela que
esta mas cerca de sus viviendas. En ambas escuelas se desarrollan os cursos
de catequesis de la Iglesia Católica de la ciudad de Allen.

El centro de salud, las reuniones de padres y los actos escolares, las paradas de
transporte, son puntos de encuentros de interacción, de conocimiento recíproco,
de intercambio de información sobre las novedades del Paraje.
Se trata de una población diversificada mediante un cruce de combinaciones de
clasificaciones y ejes organizadores que tienen que ver con la chacra.

La vida en las chacras es difernte para quienes son propietarios, encargado o


peones.

2. El centro de salud

La casa en la que funciona es pequeña y esta en un terreno amplio. tiene una


sala de espera con sillas y un pasillo que lleva a dos habitaciones , en una hay
una camilla y una vitrina y es utilizada como consultorio médico, en la otra
también hay una camilla y una mesa ye sutilizada por la enfermera.

Los agentes sanitarios señalan que entre ellos y las maestras hay diferencias
notables a como se acercan a los pobladores y esto, afecta el tipo de relación
que las familias mantienen con el Centro de salud y con la Escuela.

3. La Escuela 68

El edificio fue construido a principio de la década del cincuenta en un terreno


cedido por un chacarero. Esta rodeado por álamos, una parra colocada en una
glorieta al frente, conserva el aspecto de la chacra. En sus orígenes la escuela
tenía tres aulas y cuando ella concurrió tenía cinco aulas de clases. contaba con
una sala de dirección y una antesala pequeña, una sala de computación, en la
parte posterior de la cocina, un baño para varones, otro para mujeres y otro para
maestros, una cocina, un patio cubierto y en el terreno de la entrada un
escenario de cemento y el mástil. En la parte posterior había unos juegos de
plaza y una cancha de fútbol.

Luego de tres años se agregaron baños.

El edificio cuenta con mobiliario y la cocina totalmente equipada.


A la Escuela iban 185 alumnos en 1999, por la mañana trabajaban cuatro
maestras de grado y una maestra jardinera, además estaban la directora, la
secrearia y la portera. por la tarde dos maestras, un maestro, la vicedirectora y
un portero.

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