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Los años pasaron y su vida había quedado en buenos sentimientos y obras reconocidas ABRIL – AGOSTO

por el mundo, pero él había muerto solo.

Un día sus sobrinos luego de tan lamentable hecho, entraron a su taller, un lugar lleno
de color y un raudal de cosas, de lo cual resaltaba una vieja libreta, vieron que eran
sus inspiraciones en palabras, mientras leían cada letra plasmada vieron que algunas
hojas estaban en blanco y en la portada de él, tenía un escrito “Nunca se podrán
plasmar mentiras”, al final de la libreta había 3 hojas llenas de recomendaciones, en
las cuales decían:

El amor no se puede escribir pues debes decirlo, demostrarlo, este sentimiento no


podrás encontrarlo en cualquier sitio y sabrás que existe cuando tus pensamientos y
palabras se reflejen en hechos.

El escultor nunca se había percatado que al final de esta libreta, esta daba
recomendaciones ante las “mentiras escritas”, solo vio su vida pasar ante lo que él,
pensaba que no era realidad, sin darse cuenta que todo en el mundo es verdad y no es
necesario decirlo, más bien se debe demostrar y hacerlo realidad.

Y es así como el joven escultor dejo pasar su vida, dejando obras de sentimientos que
sabes que solo con palabras se cumplen, pero él murió esperando que una libreta le TEMA: CUENTO
dijera que hacer y qué decisión tomar, sin saber que el amor se lo demuestra cada día,
a cada hora.

F
LO QUE NUNCA SE DIJO

IN
LO QUE NUNCA SE DIJO

BIOGRAFIA DEL AUTOR Era hace una vez un joven escultor que le gustaba mostrar la belleza del mundo en sus
obras, decía que la vida era un sinfín de colores y que él podía plasmarlo en cortes y
tallados de distintas piezas en bruto, un día se le ocurrió que la mejor forma de hacerlo
era plasmando sus obras en letras y lo que escribiera lo tallaría en bellas piezas.

Es así que comenzó a llevar a todo lado una libreta, su portada estaba llena de colores
combinados, elaborada por él, sus hojas habían sido tomadas de varias en blanco las
cuales tenían una particularidad, en estas hojas no podías escribir mentiras, puesto que
si lo intentabas ellas harían que desapareciera y la tinta se consumiera entre ellas.

Un día mientras caminaba por un parque vio como una familia paseaba jugando y
riendo, mientras su pequeño hijo corría tras una hoja de árbol que por el viento había
caído y rodaba por el parque, el joven pensó que sería una hermosa interpretación del
cuidado; pero ¿Cómo reflejar la alegría en una escultura?; decidió escribir en su libreta
lo siguiente:

“Hace falta millones de gestos para interpretar la alegría, pero la de los padres hacia
los hijos es la alegría que jamás se podrá encontrar en ningún otro ambiente”.
Jaime Andrés Castañeda Sánchez es un Y para ello talló dos manos y en el centro un bebé en representación del nacimiento
estudiante de ingeniería Electromecánica. de una nueva vida y la alegría que representaba esto.

Pasaron los días y se dio cuenta que el mundo estaba lleno de sentimientos y que para
Con respecto a sus estudios ha culminado cada uno de ellos podía realizar una escultura; para la tristeza talló una persona
recostada sobre un atrio, para la ira tallo rocas de donde surgían flores; para los celos
dos ataduras, todo lo que escribía se quebraba en la libreta y todo esto tenía una obra,
la suficiencia en inglés y es conductor pero un día, el ultimo de verano el joven vio salir de una cafetería a una hermosa joven,
que lucía colores radiantes, colores que en su vida había visto, decidió dedicarle una
profesional, los dos títulos obtenido en la obra en su honor, pero ¿Qué sentimiento reflejaría? Tuvo ese pensamiento en el
transcurso de algunos días, a mediados de otoño se había dado cuenta que al igual que
Universidad de las Fuerzas Armadas Espe ella había ido todos esos días a una misma hora a esa misma cafetería, solo por verla
y saber de ella; saber que sentimiento nacía de él hacia ella.
extensión Latacunga. Muchos días pensó y reflexiono, hasta llegar a una decisión, quiso mostrar en una obra
el amor, un sentimiento que era difícil de explicar, entonces comenzó a escribir en su
libreta frases sobre ese sentimiento y vio como sus letras se escurrían como gotas de
lluvia sobre una ventana. ¿Qué acaso ese sentimiento era una mentira?, dijo; o ¿Acaso
ella no sentía eso? Él había dejado de ir a la cafetería, se había olvidado de la idea de
encontrar un sentido a lo que el sentía, pues cada vez que escribía sus letras se perdían.

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