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UNIVERSIDAD NACIONAL DE LA PATAGONIA SAN JUAN BOSCO

SISTEMA INSTITUCIONAL DE EDUCACION A DISTANCIA (SIED)


DIRECCION DE EDUCACION A DISTANCIA – SECRETARIA ACADEMICA

Material para docentes. Propuestas para la evaluación en entornos virtuales


Equipo de trabajo de la DED: Dra. Graciela Iturrioz – Prof. Fernanda Nahuelanca – Prof.
Adriana Gallegos – APU Lucas Casas – Patricia Rupallán

1. Marco institucional del Documento


Con fecha del 21 de agosto de 2019, por RESFC-2019-251-APN-
CONEAU#MECCYT, la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria
(CONEAU) ha confirmado la validación del Sistema Institucional de Educación a
Distancia (SIED) de la UNPSJB, que fuera presentado para su evaluación en el mes de
abril del año 2018 en la respectiva convocatoria. La Universidad debió presentarse a esa
instancia puesto que por RM 264/17 se establece que toda institución de nivel superior
que desee acreditar carreras en la opción pedagógica a distancia deberá validar su Sistema
Institucional. Ello requirió de un marco reglamentario que centralice y regule el
desarrollo de la opción pedagógica y que asegure la calidad de sus propuestas educativas
referido específicamente a dicha opción pedagógica.
Ese marco reglamentario aprobado por el Consejo Superior, que describe y
establece los diferentes recursos -tanto pedagógicos como tecnológicos- nos brinda hoy
algunas herramientas posibles de ser trasladadas a la experiencia que estamos
desarrollando en el contexto actual de aislamiento social, preventivo y obligatorio en todo
el país y de lo dispuesto por la Res 104/20 del Ministerio de Educación de la Nación, en
la que se establecen recomendaciones para que las universidades, institutos universitarios
y de educación superior de todas las jurisdicciones, adecuen las condiciones en que se
desarrolla la actividad académica presencial.

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Es así que la suspensión de actividades presenciales requirió la puesta en marcha
de la transformación de cursos presenciales en no presenciales así como en los aspectos
pedagógicos y metodológicos asociados con el empleo actividades que median en espacio
y tiempo la propuesta de enseñanza.

2. Encuadre normativo
En línea con lo anterior, la Universidad dictó la Ord. Cs 174, por la cual cuenta
con elementos normativos para encuadrar el desarrollo de actividades de enseñanza y
aprendizaje en entornos virtuales. Así, los art. 15, 16 y 17 admiten la posibilidad de
desarrollar actividades no presenciales mediante soportes virtuales sin que ello cambie su
carácter presencial. En particular, si la carga horaria virtual no supera el 30% de la carga
horaria total de la carrera.
Por su parte, los art. 40, 41, 42 y 43 de la mencionada Ordenanza indican que
“Respecto de la evaluación y acreditación de los estudiantes, y en consonancia con el
resguardo de la igualdad y calidad que sustenta la norma, la definición de aspectos
reglamentarios como los requisitos para acreditar el examen de una unidad curricular, no
varía respecto de la forma presencial. Y por lo cual es deseable que las consignas
evaluativas propendan hacia aprendizajes que den cuenta de la apropiación de contenidos,
basado en la producción creativa, novedosa, reflexiva y singular”. Asimismo, recomienda
la combinación de producciones escritas con intercambios orales a través de recursos
interactivos, lo que posibilita combinar actividades de tipo sincrónico con actividades de
tipo asincrónico siempre en el marco de las disponibilidades y condiciones de los
estudiantes y de los docentes. No obstante, en cualquier caso resulta expresa la necesidad
de que los profesores hagan conocer a los estudiantes el tipo de instrumentos de
evaluación y los criterios de evaluación que emplearán.

3. La evaluación en conceptos
Evaluar es decidir el valor de algo, que se expresa en un juicio, para lo cual se
mide, se sopesa, se pondera. Es apreciar el grado de apropiación de los contenidos desde
un enfoque retrospectivo, esto es, desde que inició el proceso hasta que culminó. Lo que
supone comprender circunstancias, procesos, significados. Supone un acto de
ponderación que se construye en base a dos fuentes valiosas para la construcción de ese
juicio, que son los datos que recogemos extraídos de las diversas actuaciones del alumno
y los significados que utilizamos para explicar los datos recolectados.

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En términos de una práctica evaluativa, los datos que recogemos se refieren a las
diversas actuaciones de los alumnos frente a una consigna evaluativa, cuyo lugar es un
instrumento de evaluación. Los significados, por su parte, refieren a las valoraciones y
explicaciones que asignamos a estos datos recogidos. Esta asignación de significados
viene dada por marcos referenciales, que se expresan – para el caso de las prácticas
evaluativas – en los criterios de evaluación. Entonces, a partir de unos datos recogidos
mediante instrumentos, se nos presentan las actuaciones visibles de los alumnos, que
interpretamos desde esos criterios. Los criterios de evaluación son entonces parámetros
de referencia conceptuales que nos permiten asignar significado a los datos recogidos
referidos a los aprendizajes de los alumnos.
Desde lo expuesto, entendemos entonces a la evaluación como un proceso
formativo, ya que supone pensarla como fuente para saber cómo seguir aprendiendo, lo
que se expresa en los criterios de evaluación. Esto es que los criterios dejan entrever lo
que el docente reconoce como importante en ese contenido. Supone también que
evaluemos no solamente en una instancia formal, sino que la trasciende y reconoce
distintos momentos en el proceso de aprendizaje, durante el cual las actuaciones de los
estudiantes irán expresando claramente esos criterios, transitando cada vez hacia formas
más elaboradas. Por lo cual, el acto de evaluar no comienza y se cierra exclusivamente ni
necesariamente en una instancia de evaluación final o formal.
La evaluación formativa, así definida, supone poner en ejercicio el pensamiento
en la resolución de problemas propios de la disciplina. Por tanto promueve la generación
de consignas evaluativas que supongan la adquisición, interpretación, organización y
comunicación de la información, la reflexión, el análisis, entre otros, que no se someten
a una evaluación de tipo formal, situada en un determinado momento del proceso de
enseñanza, sino en distintos momentos del proceso de aprendizaje Este modo de concebir
la construcción de conocimientos en el aprendizaje es compatible con la evaluación no
presencial. ¿Porqué? Por varias razones; la primera es que el uso del pensamiento requiere
tiempos de reflexión graduales en el tiempo. La segunda es porque posibilita que se pueda
apelar a otros recursos disponibles. Esto es, de alguna manera, que el aprendizaje
mediante sitios virtuales inscribe la actividad escolar en sitios en internet con las
consecuencias culturales que ya sabemos que ello acarrea.
La evaluación formativa requiere que valoremos, por un lado, las instancias
intermedias también, evitando así reducir la evaluación al momento final de proceso. Y
compromete el uso contextualizado de diferentes herramientas. Para ello, es menester

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integrar en nuestros criterios de evaluación aspectos intermedios del proceso, anteriores
a la producción final.

4. La evaluación virtual en las aulas

Puede expresarse mediante diversas instancias:

- Las actividades de aprendizaje, que presentamos mediante tareas a entregar o


actividades en los foros, u otras herramientas.

Las actividades de aprendizaje: algunas de las múltiples actividades que


proponemos pueden transformarse en actividades evaluativas. ¿Qué rasgos las
definirán? Cuando representan para nosotros la expresión de saberes sustantivos para
la disciplina, cuando resultan integradoras de aprendizajes anteriores y en el momento
en que pueden desarrollarse de forma autónoma. Nos toca entonces discriminarlas de
la propuesta general de actividades de cada unidad y a ellas presentarlas con criterios
de evaluación y situadas en un momento en que se cierran temas o contenidos, de
modo tal de favorecer la integración. Así, por ejemplo, una monografía será actividad
cuando ejercita un modo de escribir y será consigna evaluativa cuando evidencia una
producción académica que integra saberes de la disciplina.

Por lo anterior, no necesariamente las consignas evaluativas se expresarán en


exámenes parciales, solamente, sino que de manera paulatina y explícita se producirá
información evaluativa sobre los aprendizajes de los estudiantes.

Alentamos la construcción de una escala de calificación al interior del


instrumento de evaluación, que proporcione indicadores explícitos de ponderación de
la producción lograda. Estas escalas deben tener equivalencia directa con los criterios
de evaluación.

Siempre que se proponen actividades de producción compartida, es


aconsejable agregar criterios de evaluación que la ponderen, por dos razones. Primero
porque es intrínseca a la producción, y segundo porque la colaboración y el trabajo
en equipo o colaborativo es un valor importante en la formación universitaria.

Un tema a atender en la evaluación virtual es la “copia”. Lion (2009) expresa


que compromete a discernir cuando un trabajo que presenta un alumno es original o

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es una copia debido a la escasa posibilidad de chequear y contrastar con fuentes
diversas. El problema sería si el criterio de evaluación fuera el valor de la información
en sí; sin embargo si los criterios de evaluación son el análisis y la producción de
conclusiones personales, es posible que nuestra vara observe otros indicadores en los
trabajos de los estudiantes.

Es muy importante entonces que en el menú general de actividades, por


ejemplo, dentro de una unidad temática, se indique visualmente cuáles de ellas serán
evaluativas y que como tales, se vean acompañadas de criterios de evaluación y de
una escala de calificación.

- Los exámenes parciales

Estas instancias:

- pueden resultar de los productos alcanzados como consecuencia de las


actividades evaluativas antes planteadas;
- pueden ser instancias particulares para las cuales se dispone la consigna en un
horario determinado y se fija una entrega en el aula virtual, para lo cual se
establece una banda horaria;
- pueden ser mediante modalidad oral, usando las herramientas y plataformas
habituales para el dictado de clases, individuales o grupales, en forma de
coloquios en los que cada estudiante expresa su respuesta a consignas
previamente dispuestas o presentadas en el momento.

5. Acerca de los instrumentos


Como antes decíamos, los instrumentos de evaluación son las consignas
evaluativas que proporcionamos a los estudiantes. Incluyen las que damos en las
actividades de aprendizaje consideradas como evaluación de proceso y aquellas
específicas para las instancias de exámenes parciales, como plantean las
reglamentaciones de las facultades.
En cualquier caso los criterios de su elaboración se apoyarán en los que
planteamos para una evaluación presencial, en tanto lo que cambia es el contexto y el
soporte, pero no los tipos de aprendizaje que pretendemos generar.
Desde una concepción de evaluación formativa se sugiere:

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- que presenten situaciones problemáticas en relación al campo de
conocimiento y que en lo posible se vinculen al quehacer profesional, en tanto
se sitúan en un contexto formativo universitario;
- que incluyan análisis de los aciertos y dificultades personales en la resolución
de las consignas evaluativas;
- que incluyan una escala de calificación que haga mas transparente a los
estudiantes la valoración de cada consigna en tanto ella se relaciona con el
lugar del dominio de ese contenido en la disciplina;
- que la escala de calificación permita agregar comentarios ampliatorios, si
fuese posible;
- que se vinculen a las actividades de aprendizaje que han resultado
“convencionales” en la asignatura, evitando el factor sorpresa;
- que supongan el uso de internet de una manera estratégica, esto es, sirviendo
para la búsqueda de información en sitios específicos que sirvan de soporte a
la resolución del problema y no de copia;
- que integren los contenidos sustantivos de la unidad temática;
- que las correcciones a los trabajos se realicen a través del campus virtual, de
modo tal de establecer claridad respecto de las trayectorias en torno a los
resultados obtenidos.
Una nota importante es reconocer el múltiple choice como herramienta válida, no
solo para situaciones de masividad y por su practicidad para corregir, sino porque cuando
las consignas suponen la integración de saberes para dar respuesta a una consigna el azar
gana menos espacios.

- Cuestionarios en Moodle
El cuestionario nos permite diseñar y plantear preguntas tipo opción múltiple,
verdadero/falso, coincidencia, respuesta corta y respuesta numérica. Se puede permitir
que se resuelva varias veces, con las preguntas ordenadas o seleccionadas aleatoriamente
del banco de preguntas. Se puede establecer un tiempo límite. Cada intento se califica
automáticamente, con la excepción de las preguntas de tipo "ensayo", y el resultado se
guarda en el libro de calificaciones. En términos didácticos, es un instrumento adecuado
para sistematizar conocimientos en los estudiantes.
Las precisiones técnicas acerca de su elaboración se encuentran en los siguientes
enlaces:

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https://drive.google.com/file/d/1TACEOvZwjc7XyBp23sd63oGsGl-
mMPID/view?usp=sharing
https://drive.google.com/file/d/1JFtjNFxy4h2_NhiWGp7zOViAKegBDXH2/view?
usp=sharing

- Tareas en Moodle
Este instrumento permite evaluar el aprendizaje de los alumnos mediante la creación de
una tarea a realizar que luego revisará, valorará, calificará y a la que podrá dar
retroalimentación. Alternativamente, o como complemento, la tarea puede requerir que
los estudiantes escriban texto directamente en un campo utilizando el editor de texto. Una
tarea también puede ser utilizada para recordar a los estudiantes tareas del "mundo real"
que necesitan realizar y que no requieren la entrega de ningún tipo de contenido digital.

- Herramientas de escritura compartida


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Google puede prestarnos una gran cantidad de herramientas con diversas
funcionalidades. Entre ellas podemos encontrar a Google Drive, que nos permite tener un
espacio personal para poder guardar archivos tales como imágenes, videos, pdf, textos en
Word, planillas en Excel, encuestas, etc. Todo lo que se guarde en este espacio, llamado
“Mi Unidad”, podremos compartirlo con otras personas, indicando además si deseamos
que puedan editarlos o simplemente verlos.

De igual modo, nos permitirá entonces editar archivos de tipo documentos, hojas
de cálculo y presentaciones, incluso si alguien más está editando el mismo archivo.
Gracias a sus servidores veloces, la simultaneidad de edición no es problema para que se
pueda trabajar de manera fluida en el archivo. Un ejemplo de esta herramienta es el
documento compartido. Permite así la producción de ideas, la resolución de problemas,
la elaboración de ensayos o la escritura de un informe.
Dejamos aquí un enlace para su consulta sobre procedimiento técnico:
https://drive.google.com/file/d/1d92tC2K4MhV81D_EOteRDAawId0Ym2Wp/v
iew?usp=sharing

- Portafolios
Es un instrumento que sirve para guardar las producciones de los estudiantes
durante el proceso de aprendizaje. Es un claro ejemplo de una práctica de evaluación
formativa. Permite que se atienda a la progresión en el estudio y apropiación de los
contenidos.
Dejamos aquí un enlace a una opción de portafolio para desarrollar en Moodle.
https://drive.google.com/file/d/13fXbkOdAEwMLQpMncQuEj4WQG3NZWs9J/view?
usp=sharing

- La resolución de problemas en contextos de un foro o wiki


Moodle incorpora el foro y la wiki como herramientas para la producción
compartida, aunque a diferencia del documento compartido al que antes nos referíamos,
sirve para visualizar el desarrollo de la práctica argumentativa en los estudiantes así como
también la escritura.
Las precisiones técnicas acerca de la elaboración de una wiki se encuentran en el
siguiente enlace:

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https://drive.google.com/file/d/1qnwZXRlSiaRHYAP0mgp8PYB7i_yDOdWw/view?us
p=sharing

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