Está en la página 1de 24

Por qué las mujeres

aman a los
PENDEJOS

ANTONIO GARCI
Contenido

Dedicatoria 9
Advertencia 11
Comentarios al libro 15

Capítulo 1:
¿Por qué las mujeres aman
a los pendejos? 17

Capítulo 2:
La cola del pavo real 23

Capítulo 3:
La teoría de los opuestos 33

Capítulo 4:
El factor P 45

Capítulo 5:
Errare humanum est 63

Capítulo “X”:
¿Eres o te haces? 93

Capítulo 6:
Porque los hombres son pendejos
y las mujeres sólo distraídas 111

Por que las mujeres_limpio.indd7 7 17/12/07 10:20:05


Antonio GArci

Capítulo 7:
El deporte del hombre 121

Capítulo 8:
Las mujeres son de viernes
y los hombres son de martes 133

Capítulo 9:
Si tienes algo déjalo libre,
si vuelve es tuyo, si no, es tan pendejo
que se perdió en el camino 157

Capítulo 10:
Qué hacer en caso de... 169

Capítulo 11:
Las citas 183

Capítulo 12:
Los laberintos del lenguaje 201

Capítulo 13:
Todo lo que los hombres
deben saber acerca de las mujeres 219

Conclusiones finales 223


Certificado 229

Por que las mujeres_limpio.indd8 8 17/12/07 10:20:05


Dedicatoria

A… A…,
… este, … mmh …
¿Cómo se llamaba? ¡Carajo!,
¡lo tengo en la punta de la lengua!
A…,
¡Chin! Bueno, se lo pongo en la próxima edición.

Por que las mujeres_limpio.indd9 9 17/12/07 10:20:05


El pendejo siempre ejercerá una poderosa atracción
sobre las mujeres… por lo menos ellas siempre lo
notarán.

Por que las mujeres_limpio.indd10 10 17/12/07 10:20:06


Advertencia
al querido lector

“El cocodrilo es una maleta


que viaja por su cuenta.”

Ramón Gómez de la Serna

Hace tiempo la señora Sherry Argov publicó un libro


que en México se conoció como: Por qué los hom-
bres aman a las cabronas, un libelo de autoayuda que
enarbola la tesis de que los hombres son unos seres
ingenuos, manipulables, dominados por sus instin-
tos más básicos, a quienes, con un poco de paciencia
se los puede amaestrar para que respondan a ciertos
estímulos y así lograr que dobleguen su voluntad a
las órdenes, necesidades y caprichos de una mujer,
algo que por supuesto es completamente… cierto.
Por eso yo digo: ¡basta! No eran necesarias tantas
páginas, ni pruebas, ni ejemplos, para algo que todos
sabemos.
El fenómeno de domesticación del hombre por
parte de la mujer se viene practicando desde ha-
ce más de un millón de años, es algo que nuestras
abuelas hicieron, nuestras madres hicieron y ahora
mismo nuestra pareja en algún lugar de la casa está
intentando con tenacidad y paciencia.
Las mujeres hacen esto desde niñas y la verdad
nos hacen un favor, pues sin este acicate nuestra es-
pecie no habría evolucionado y seguramente al día
de hoy seguiríamos siendo unos changos peludos,

Por que las mujeres_limpio.indd11 11 17/12/07 10:20:06


Antonio GArci

groseros, rústicos, lascivos y pedorros, exactamente


lo que es el hombre cuando no está bajo la influencia
civilizadora de la mujer.
Tengo que decir también que no creo en los libros
de autoayuda. Desde que leí: Cómo hacerte multi-
millonario jugando al turista, Cómo decir SÍ cuando
quieres decir NO y El arte de la guerra para amas de
casa, me volví un escéptico del género.
El único libro de autoayuda que he visto útil es
un Manual para suicidarse de la colección Hágalo us-
ted mismo, y el Curso para aprender a leer por corres-
pondencia que vendían unas academias argentinas.
(Yo lo tomé y aprendí a escribir pero no a leer, pues
ese curso se vendía aparte y ya no me alcanzó para
comprarlo.)
Aunque debo reconocer que La guía para adular
a tu jefe tiene algunos conceptos realmente prácticos
para ascender en el trabajo, y que el libro Quién se ha
robado mi seso, es la fuente de donde plagié el 90%
de este texto.
Sin embargo, éste es un libro de autoayuda (pa-
ra mí) ya que su intención es ayudarme a ganar un
poco más de dinero, aspiración legítima, aunque al
final todo lo que saque me lo quite mi vieja.
Este libro está dirigido a las mujeres que quieren
saber cómo piensa un hombre y no lo que una mujer
piensa sobre qué es lo que piensan los hombres, ade-
más, seamos honestos, a cualquier mujer le parecería
inaceptable que otra mujer le diga cómo piensa su
güey, aunque aquella tenga razón.
También está dirigido a los hombres, pues les sirve
como un manual práctico con ilustraciones y pági-

12

Por que las mujeres_limpio.indd12 12 17/12/07 10:20:06


¿Por qué lAs mujeres AmAn A los Pendejos?

nas para colorear, a fin de que se relajen con respecto


a lo que creen que deben hacer en su relación, al final
ellas siempre se lo van a decir y no vale la pena que se
desgasten pensando en eso. (Las mujeres son capaces
de decirnos lo que esperan que hagamos por nuestra
propia iniciativa e incluso lo que debemos hacer de
manera inconsciente.)
Y finalmente debo decir que el libro está dirigido
a cualquier persona, corporación, ente o criatura que
pueda adquirirlo, ya que el despiadado mercado de
productos y servicios no reconoce sexo, edad, posi-
ción social, ni planeta de origen.
Quiero subrayar que este es un libelo de humor
que sólo pretende aumentar aún más la confusión y
el debate ocioso con respecto a las relaciones de pa-
reja (que, por otra parte es lo que hacen todos los
libros sobre el tema). No obstante, debo advertir que
por alguna extraña casualidad éste sí dice algunas
grandes verdades sobre las relaciones de pareja y so-
bre cómo son las batallas actuales en la guerra de los
sexos; por esto pido sinceramente disculpas al lector,
pues se trata de un accidente, nunca fue mi inten-
ción decir algo sensato en este libro ni mucho menos
explicarle a nadie cómo carajos puede atraer y do-
minar a su pareja. Si lo supiera sería como saber el
número del melate y, desde luego, si supiera cuál es
el número del melate no te lo diría (ni tú tampoco).
En todo caso, si de la lectura de este libro alguna
persona sacara algo valioso que le ayude a mejorar
su relación, entender a su pareja o superarse perso-
nalmente, por favor avíseme… para quitarlo en la
próxima edición.

13

Por que las mujeres_limpio.indd13 13 17/12/07 10:20:06


Antonio GArci

Como he dicho, no sé cómo orientar a nadie en


el difícil arte de la seducción, y para lograr la atrac-
ción sobre el sexo opuesto sólo puedo sugerir que las
personas hagan lo mismo que hacen los gusanos de
seda: orinar una sustancia fluorescente y venenosa
que puede ser detectada a kilómetros por su pareja, y
cuyo influjo los impulsa a atravesar febrilmente dis-
tancias épicas en proporción con su diminuto tama-
ño para poder tener una “cita”.
En la actualidad existen muchas bebidas adulte-
radas en los antros, que si se consumen de manera
constante y en las combinaciones apropiadas pueden
generar una sustancia similar al orín del gusano de
seda.
Una prima mía que vive en Tijuana hizo la prue-
ba y su marido actual es ruso.
Por otro lado, deseo subrayar que en este libro no
se utiliza jamás el término pendejo de manera peyora-
tiva, ni como una forma de descalificación o despre-
cio, o un adjetivo soez; aquí la palabra es un término
meramente técnico para describir al individuo en el
cual se manifiesta tal fenómeno. (Nosotros, pues).
Una última aclaración. Debo advertir al lector que
yo soy bien pendejo, por lo que tengo la experiencia
y la estatura moral para explicar “por qué las muje-
res aman a los pendejos”, aunque, claro, esta misma
condición hace que no tenga ni la más remota idea de
lo que estoy diciendo.
Paradojas de la vida.

14

Por que las mujeres_limpio.indd14 14 17/12/07 10:20:06


Comentarios
sobre el libro

Este libro me ayudó a encontrar al hombre de mi vida.


Martha Sahagún.

Nadie había escrito antes un libro como este sobre las


relaciones de pareja. Al leerlo me di cuenta por qué.
aniceto Medel. Editor que rechazó setenta veces
la publicación de este libro.

Este libro es tan electrizante, vibrante, duro y llega tan


profundo, que pensé que era un consolador.
toMáS Meló díaz. Diputado pluriorinal por el
38vo. distrito.

Definitivamente el mejor libro que se ha escrito sobre


este tema (pues nunca antes se había escrito nada al
respecto).
eloy ito. Editor de la revista Rolling Stops.

Este libro fue lo que me decidió a volverme lesbiana.


doctora iturbide. Ginecóloga cesada por deman-
das de acoso sexual en el trabajo.

Por que las mujeres_limpio.indd15 15 17/12/07 10:20:06


Antonio GArci

Es un libro tan interesante que lo leí dos veces. (La se-


gunda no lo entendí.)
zacaríaS deheSa. Becario del fonca como ejecu-
tante de timbre eléctrico para puerta.

Un libro maravilloso, fantástico, útil, ameno, inteli-


gente y necesario.
Mi MaMá.

¡Qué pendejada!
olof JuntenSen. Presidente del área técnica de la
academia sueca que organiza el Premio Nobel de
Literatura.

Una lectura indispensable en el mundo de hoy.


JoSé luiS borgueS. (Escritor que siempre manda
la misma frase cuando le piden que comente un
libro.)

16

Por que las mujeres_limpio.indd16 16 17/12/07 10:20:06


Capítulo 1
¿Por qué las mujeres
aman a los pendejos?

“Basta que uno cometa la primer pendejada; las


demás siempre serán consecuencia de esa.”

General Álvaro Obregón

El día fatal en que el Llanero Solitario


decidió modernizarse.

Siempre que un grupo de hombres ve a una hermo-


sa mujer del brazo de otro tipo dicen: “¡¿pero cómo
puede andar con ese pendejo?!”

Por que las mujeres_limpio.indd17 17 17/12/07 10:20:07


Antonio GArci

No importa el país, la cultura, época, clase social,


edad o el sexo (que se haya tenido con la hermosa
mujer)… el comentario siempre será el mismo.
Eso mismo dijeron los romanos cuando Marco
Antonio empezó a salir con Cleopatra, y eso mismo
dijeron cuando tu mamá se casó con tu papá.
Por otra parte, es igualmente cierto que se co-
menta algo similar cuando otro tipo ocupa un pues-
to jerárquicamente superior al nuestro, ya que desde
luego nosotros lo haríamos mucho mejor, o al menos
seríamos más discretos en nuestras pendejadas.
La frase es: “¡¿Pero cómo le pudieron dar ese
puesto a ese pendejo?!”
En nuestro país este caso lo ejemplifican clara-
mente todos los presidentes y los directores técnicos
de la Selección Nacional.
Pero supongamos por un momento que noso-
tros somos los que andamos con la chica del primer
ejemplo, o que somos presidentes del país, o que por
una maldición de la fifa dirigimos a la Selección
mexicana de fútbol; primero, demos gracias a Dios
de que eso no sucede ya que au-to-má-ti-ca-men-te
los pendejos seríamos nosotros.
Luego, entonces, y en segundo término, llegaría-
mos a la pregunta que ya se hacía el filósofo griego
Platón de Pozole, desde el año 650 antes de Cristo…
¿Es nuestra circunstancia la que nos hace pendejos?
¿O nosotros solitos nos hacemos pendejos?
El debate se ha mantenido durante siglos y en la
actualidad existen tres escuelas: la determinista, que
propone que el pendejo es producto de la condición
en la que se encuentre; la evolucionista, que sostiene

1

Por que las mujeres_limpio.indd18 18 17/12/07 10:20:07


¿Por qué lAs mujeres AmAn A los Pendejos?

que ser pendejo es una facultad innata en el hombre


(y no en la especie humana), pero que sólo con la
práctica se desarrolla; y la supremacista, que sostiene
que el hombre no es, pero se hace pendejo para poder
sobrevivir o escapar de sus depredadores naturales
como los recaudadores de impuestos, los acreedores
y el servicio militar.
En todo caso, la verdad es que quien llega a andar
con la mujer del primer ejemplo, o a ser presidente o
entrenador de la Selección, opina de todos los demás:
“¡pobres pendejos!”
Confesiones de ex directores técnicos, entrevistas
con ex presidentes y comentarios casuales en el bar
de la esquina de ese tipo que anda con la chica del
primer ejemplo lo confirman. Más aún, confesiones
de la chica del primer ejemplo sobre su relación con
ese mismo tipo en ese mismo bar de la esquina don-
de ella misma admite que anda con un pendejo y que
los otros hombres que opinan sobre su relación son
una bola de pendejos, no dejan lugar a más especu-
laciones. El fenómeno de la pendejez es múltiple e
inversamente proporcional al cuadrado de los que
lo perciben.
Esta es la primera Ley de López, que si bien enun-
cia con atinada puntualidad el flujo recíproco del fe-
nómeno, tiene el defecto de que aún no aclara de qué
tamaño es el cuadrado.
Pero entonces, ¿qué es lo que hace que una persona
sea percibida en su entorno social como un pendejo?
¿Su condición o su naturaleza? Ya hemos visto que la
situación puede ser accesoria y que la naturaleza hu-
mana, aunque tiende a hacer estupideces, necesita de

19

Por que las mujeres_limpio.indd19 19 17/12/07 10:20:07


Antonio GArci

una ubicación social para ser detectada plenamente.


Por lo que podemos concluir que: ¡todos los hombres
somos pendejos!, por eso es correcta la percepción
desde los dos lados, es decir: desde su circunstancia y
desde su esencia el hombre es pendejo.
Este rasgo básico en el hombre es lo que le ha dado
cohesión a nuestra especie y es la única garantía de
igualdad social que ha podido procurar para sus ciu-
dadanos el socialismo real en todos los países donde
este sistema se ha implantado.
De esta realidad se deriva la segunda Ley de Ló-
pez, que dice: Todos son unos pendejos, menos yo.
En teoría de conjuntos este enunciado debe de
verse más o menos así.

Conjunto de hombres

los demás
yo

(Ojo: Los pendejos están en el conjunto gris y los no


pendejos en el conjunto negro.)

Todos sabemos que este enunciado es completa-


mente cierto (pregúntale a cualquiera); el problema
de la segunda Ley de López es cuando alguien más
la ocupa, porque entonces el conjunto se ve de esta
manera.

20

Por que las mujeres_limpio.indd20 20 17/12/07 10:20:07


¿Por qué lAs mujeres AmAn A los Pendejos?

Conjunto de hombres

los demás
yo

Como podemos ver, el esquema queda exactamen-


te igual, sólo que en este caso uno pasa al conjunto
de “los demás”, o sea de los pendejos, circunstancia
que si bien refuerza la universalidad del fenómeno,
no deja de ser una fregadera. Por lo que se inventó la
tercera variable de Cocoletzi, la cual se describe de
esta manera.

Conjunto de hombres

yo
los
demas

(Ojo: En la variable de Cocoletzi los demás van sin


acento para enfatizar lo poco que nos importan.)

En este dibujo efectivamente uno pasa de nuevo al


conjunto de los pendejos cuando la segunda Ley de
López es empleada por otra persona, pero hay una

21

Por que las mujeres_limpio.indd21 21 17/12/07 10:20:07


Antonio GArci

presencia mucho más digna de nuestra persona en


esta otra categoría; y además, para que se comprenda
la idea no necesitamos que nos mezclen con toda esa
bola de pendejos.
Una vez que hemos demostrado que por lo menos
en algo todos los hombres somos iguales, regresemos
al asunto que nos ocupa. ¿Por qué las mujeres aman
a los pendejos?
¿Por qué la naturaleza tras millones y millones de
años de evolución prodigó en los machos de la raza
humana esta capacidad de una manera tan desarro-
llada y claramente superior como no se dio en nin-
guna otra especie?
La respuesta es: para poder atraer a las mujeres.
(Me cae.)

22

Por que las mujeres_limpio.indd22 22 17/12/07 10:20:08


Capítulo 2
La cola del pavo real

“Yo sólo sé que no sé nada.”

(Frase de Sócrates con la cual, tras admitir que era un


pendejo, pasó a la historia como uno de los
más grandes sabios de la humanidad.)

Debemos admitir que ciertos actos inexplicables y


estúpidos de nuestra conducta son producto de un instinto
especial con el que la naturaleza dotó a los hombres para
atraer a las mujeres. Explicación muy babosa, pero en
todo caso es una salida digna para justificar nuestras
acciones, pues todo lo que se hace por “amor” tiene algo de
nobleza.

Por que las mujeres_limpio.indd23 23 17/12/07 10:20:08


Antonio GArci

Al naturalista Charles Darwin lo desesperaba la cola


del pavo real. Después de construir toda su teoría de
la evolución, que le tomó años de viajes y estudios
conclulyó que los cambios en las especies son pro-
ducidos por la supervivencia del más apto (tautología
que es casi como decir la “fortaleza del más fuerte”).
Después de todo ese tiempo y dinero invertido por el
señor Darwin y sobre todo después de haber tenido
que pasar meses comiendo iguanas marinas en las
islas Galápagos (que es el único alimento que puede
hacer que la comida inglesa parezca comida), se cru-
zó en su camino el maldito pavo real. Especie cuya
pesada, enorme y estorbosa cola no le da ninguna
ventaja competitiva contra sus depredadores o frente
a otras especies con las que se disputa el alimento,
por el contrario, esa cola le hace la vida tan difícil
y lastimosa que Darwin llegó a pensar que lo que
le salía en el trasero a esta ave no eran plumas sino
hemorroides.
Estudiando al pavo real, Darwin se dio cuenta de
que las plumas del macho sólo sirven para atraer a
las hembras de la especie y su función es similar a la
que tienen en los humanos los autos deportivos, los
diamantes y los anuncios en las puertas que dicen:
“Baño de mujeres”. Ahora bien, ¿de qué recurso se
valían nuestros antepasados para atraer a las hem-
bras cuando no había autos deportivos ni diamantes
ni baños con anuncios en las puertas?
La respuesta es el contenido de este libro.

La observación de la cola del pavo real dio lugar a


la segunda y más revolucionaria teoría de Darwin,

24

Por que las mujeres_limpio.indd24 24 17/12/07 10:20:08


¿Por qué lAs mujeres AmAn A los Pendejos?

en la cual establece que las especies evolucionan para


complacer a las hembras.

Siete mil millones de años antes de nuestra era:


aparecen los primeros anfibios.

Es decir que el homo habilis se convirtió en homo


erectus para poder hacerle el amor más tiempo a su
pareja y después el homo erectus se convirtió en el
homo sapiens para poder inventar un pretexto con-
vincente que calmara a su pareja cuando ya no esta-
ba “erectus”.
Hoy nuestra especie se encuentra instalada en su
fase del homo sapiens-sapiens, donde el homo man-
dilón es el más alto grado de evolución de la raza
humana.

25

Por que las mujeres_limpio.indd25 25 17/12/07 10:20:08


Antonio GArci

(Sin falsa modestia, debo decir que yo soy un de-


cantado ejemplo de este rasgo evolutivo, que sin du-
da será el futuro de la humanidad.)
Esta teoría sostiene que después del homo erectus,
el homo logo y homo sexual, apareció el homo pendis,
el único de estos homínidos con capacidad de adap-
tación a la suegra; rasgo que le dio a esta criatura una
ventaja reproductiva enorme sobre los demás huma-
noides de su tiempo, haciendo que fueran sus genes
los que finalmente perduraran y forjaran al hombre
actual.

Escala evolutiva del hombre. No hay duda de que


nuestra evolución ha sido para sobrevivir. En realidad
seguimos siendo changos, sólo que nos hacemos
pendejos para que no se note.

La verdad es que la segunda teoría de Darwin sobre


la evolución por las hembras no tuvo la popularidad
ni la publicidad de la primera teoría con respecto a
la adaptación de las especies, sin embargo está claro

26

Por que las mujeres_limpio.indd26 26 17/12/07 10:20:08


¿Por qué lAs mujeres AmAn A los Pendejos?

que los hombres hubiéramos hecho lo que fuera para


conseguir una vieja, inclusive bajarnos de los árbo-
les, aprender a caminar en dos patas, orinar y defecar
en lugares apartados y limpios, y después lavarnos
las manos.
Tengo un primo que se va a casar en enero y ya
sólo le falta que su novia le enseñe a bajarse de los
árboles.

27

Por que las mujeres_limpio.indd27 27 17/12/07 10:20:09


El pendejo siempre puede llegar a ser más pendejo
cuando trata de superarse.

Por que las mujeres_limpio.indd28 28 17/12/07 10:20:09

También podría gustarte