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negocio. A una edad más temprana que la mayoría de las personas, comprendió que TODOS
El comercio moderno es una estafa. Curiosamente, fue el
anuncios en las estaciones de metro que lo trajeron por primera vez
hogar para él. Poco sabía, como dicen los biógrafos, que él
él mismo algún día tendría un trabajo en una empresa de publicidad. Pero hay
fue más que el simple hecho de que el negocio es una estafa. Qué
se dio cuenta, y más claramente a medida que pasó el tiempo, era que el dinero ...
La adoración ha sido elevada a una religión. Quizás sea el único
religión real, la única religión que realmente SENTÍA, que nos queda.
El dinero es lo que Dios solía ser. El bien y el mal no tienen ningún significado
más tiempo excepto el fracaso y el éxito. De ahí lo profundamente
frase significativa, HACER BIEN. El decálogo se ha reducido.
a dos mandamientos Uno para los empleadores, los elegidos, el dinero.
sacerdocio, por así decirlo: "Ganarás dinero"; el otro para el
empleados - los esclavos y subordinados - 'No perderás tu trabajo'.
Fue por esta época cuando se encontró con The Ragged Trousered
Filántropos y lean sobre el carpintero muerto de hambre que empeña
todo menos se pega a su aspidistra. El aspidistra se convirtió en un
una especie de símbolo para Gordon después de eso. La aspidistra, flor de
¡Inglaterra! Debería estar en nuestro escudo de armas en lugar del león
y el unicornio No habrá revolución en Inglaterra mientras
Hay aspidistras en las ventanas.
Fue cuando tenía diecisiete años que su padre murió, dejando aproximadamente
doscientas libras Julia había estado trabajando durante algunos años.
Durante 1918 y 1919 había trabajado en una oficina del gobierno, y
después de eso ella tomó un curso de cocina y consiguió un trabajo de una manera desagradable,
pequeña tienda de té elegante cerca de la estación de metro Earl's Court. Ella
trabajó setenta y dos horas semanales y le dieron su almuerzo y té y
veinticinco chelines; fuera de esto ella contribuyó doce chelines
una semana, a menudo más, para los gastos del hogar. Obviamente lo mejor
Lo que hay que hacer, ahora que el Sr. Comstock estaba muerto, habría sido tomar
Gordon fuera de la escuela, búscalo y deja que Julia se quede con los dos.
cien libras para armar su propio teashop. Pero aqui el
intervino la locura habitual de Comstock sobre el dinero. Ni Julia ni
su madre oiría que Gordon salía de la escuela. Con lo extraño
esnobismo idealista de las clases medias, estaban dispuestos a
ir a la casa de trabajo antes de que Gordon deje la escuela antes de
edad legal de dieciocho años. Las doscientas libras, o más de
la mitad debe ser utilizada para completar la "educación" de Gordon.
Gordon les dejó hacerlo. Había declarado la guerra al dinero pero eso sí
No evitar que sea condenadamente egoísta. Por supuesto que temía
este negocio de ir a trabajar. ¿Qué chico no temería? Bolígrafo-
empujando en una oficina sucia - ¡Dios! Sus tíos y tías eran
Ya estoy hablando tristemente acerca de "lograr que Gordon se establezca en la vida".