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Pensando en la epifanía del Señor Jesús, no he podido despegar mi pensamiento del pasaje de la

venida de los reyes magos(cita) y de la leyenda o mito del 4 rey mago y de la manera de cómo
cada uno de ellos representa los días del cursillista, tres días maravillosos donde nos encontramos
con el rey del universo, y el bendecido 4 día en ese día aprendemos a contemplar su naturaleza y
que tiene que ver con nosotros.

Con incienso confirmamos que estamos ante Dios, lo reconocemos y lo adoramos, detenidos en su
magnificencia, el entorno nos lo ratifica; en este sitio tan hermoso, cada una de las criaturas que
aquí se encuentran, los paisajes, son suyos, nosotros somos suyos y si lo dejamos gobernar en
nuestras vidas, recibiremos de Él, lo que un hijo de Dios recibe de su padre, LA GLORIA ETERNA.

Mirra, para reconocer su naturaleza humana, que nos permite sentir la cercanía a su ser humano,
sentir su dolor y unirlo al suyo, a sentirnos redimidos por su sufrimiento en la cruz, cuando
sintamos desolación, sentir su consuelo y viceversa consolarlo ante el pecado que cometen hacia
Él nuestros hermanos. La mirra nos permite acompañar por un instante más y podernos despedir,
sin embargo, ahí no acaba todo…

Oro, el oro se prueba en el crisol(cita), porque nada impuro puede ser para el Rey, por eso no nos
sintamos derrotados ante las contrariedades de la vida, como fuego serán cada uno de los
problemas, inconvenientes, tropiezos que nos da la vida, quizá lleguemos a pensar que no
podremos salir de los mismos, son los esfuerzos, los que nos enseñan a apreciar las recompensas,
aunque sean estas pequeñas, un vaso de agua bien rica, nos muestran cuanta sed teníamos, un
almuerzo bien hecho, el hambre que teníamos, una buena dieta, nos ayuda a reconocer la salud.

El cuarto día es el cuarto rey mago (… ) Podemos pasar la vida de dos formas, lamentándonos por
no haber alcanzado la caravana que llegó a ver al niño Jesús en el pesebre o continuar nuestra
búsqueda, pero no una búsqueda egoísta, sin sentido, sin aprecio de las bondades de Dios o
buscando a Jesús en el necesitado, en el sufriente, en el hermano, en el amigo, en el enemigo.

Tres días para recibir y un cuarto día para dar, de aquello que gratis hemos recibido (cita) que nos
preparará para el 5 y más importante de los días, donde vamos a contemplar la gloria de Dios
Padre en su esplendor.

Porque tuve hambre y me diste de comer, estuve desnudo y me vestiste(Cita)

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