No la conoces por escucharla gemir durante el sexo. Conoces a una mujer cuando te dedicas a observar sus gestos, a escuchar su filosofía, a vibrar con sus emociones. Conoces a una mujer cuando la ves llorando y procuras entender sus razones. Cuando la ves reírse y procuras entender Sus causas. Cuando a ves enojarse y procuras entender sus procesos. Conoces a una mujer cuando exploras sus ojos, te pierdes en ellos y te encuentras en su alma; navegas a besos su cuerpo y calmas su furia con inteligencia. Conoces a una mujer cuando más allá de verla desnuda; valoras su alma y sabes sus puntos intensos para mover su mundo. Para conocer verdaderamente a una mujer, se trata de observarla con el alma, con el corazón; que no haya dudas para comprenderla, aunque parezca imposible, no lo es, si lo haces con amor, dedicación y Voluntad. Porque cuando conoces bien a una mujer, “tu vida cambia” puedes llegar a sentir el amor, la pasión, la ternura y la sabiduría...
Empatía: Guía para Comprender a las Personas Empáticas y Su Capacidad Emocional para Sentir Empatía, Incluyendo Consejos para Personas Altamente Sensibles, y Cómo ser un Empático Psíquico